RESUMEN: 1.

La magnitud del problema

En los países desarrollados en general, la accidentalidad por siniestro de tráfico ha

disminuido de forma significativa. No obstante, las previsiones de la OMS para el año 2030
sitúan los traumatismos por accidente de tráfico en el quinto lugar entre los factores que
contribuyen a la carga mundial de movilidad y traumatismos.

Además del número de muertes y traumatismos causados por el tráfico se han utilizado los
Años Potenciales de Vida Perdidos (APVP) para determinar la gravedad que supone los
siniestros de tráfico. Los APVP representan la estimación de los años que se han perdido
debido a la muerte prematura en función de una esperanza de vida predeterminada. Sin
embargo han surgido los Años de Ajustados por Discapacidad (AVAD), estos establecen la
importancia de los siniestros en función de la calidad de vida. La OMS prevé que para el
2030 los traumatismos por siniestro de tráfico supondrán la tercera razón de Años de Vida
Ajustados por Discapacidad que incluyen los años de vida “sana” perdidos por alguna
discapacidad, por mala salud o por secuelas fisicas o psicologicas tras el accidente.

Nos seguimos encontrando por tanto ante un problema de capital importancia no solo para
las sociedades actuales sino con toda probabilidad para las generaciones futuras.

Con motivo de esta preocupación global, el 31 de agosto de 2020, la Asamblea General de

las Naciones Unidas adoptó la resolución A/RES/74/299 sobre el mejoramiento de la
seguridad vial en el mundo.

La resolución se basó en la Declaración de Estocolmo en la Tercera Conferencia Ministerial

Mundial sobre Seguridad Vial en febrero de 2020. Y se establece un nuevo objetivo de
seguridad vial para los próximos 10 años.

Puntos principales

-Proclamación de una segunda década de acción para la seguridad vial 2021-2030.

-Un nuevo objetivo para reducir las muertes y lesiones en las carreteras en un 50% para
2030.

-Una petición al UNRSC, la OMS y las Comisiones Regionales de las Naciones Unidas para
preparar un plan de acción.

-Los Estados Miembros para que adopten una visión holística de la seguridad vial en el
contexto del programa completo del SDG, vinculandola a las cuestiones ambientales de
movilidad, de igualdad, de género y de planificación urbana.

-Promoción de medios de transporte de calidad, ambientalmente racionales, seguros,

accesibles y asequibles, especialmente el transporte público y no motorizado, y para
proteger y promover activamente la seguridad de los peatones y la movilidad de los
ciclistas.
Los accidentes aumentan con el tiempo como por ejemplo en 2015 en las principales
causas de muerte estaba en la posición 9 y se estima que en 2030 va a llegar en el puesto
5.

El instituto de Tráfico y Seguridad Vial investigaron cuánta gente fue afectada por la causa
de los accidentes durante el siglo XX y son: más de 35 millones de muertos, 1500 millones
de heridos y en España murieron 250.000 personas y 15 millones de heridos.

Aunque sea difícil obtener los datos estadísticos a nivel mundial, la OMS y otros
prestigiosos organismos, calculan que cada año acude 1.200.000 muertes y en tres 20 y 50
millones de traumatismos, varios millones hospitalizados durante días o meses y entre 5
millones se quedan descapacitado de por vida.

En la Unión Europea anualmente hay 35.000 muertes por accidentes y entre 1.600.000
heridos.

En el 2020, cuando empezó la panadería del COVID-19 murieron 1.370 personas y 6.681
heridos. Se considera que fue la época con menos accidentes que hubo en el mundo .
Desde el 1939 en España más específicos cuando pusieron puntos en los carnets los
accidentes estuvieron disminuyendo y son un 39% muertes por siniestro del tráfico, un 3,2%
de accidentes con víctimas, un 36% de heridos graves y los heridos leves permanecieron
igual.

Aunque sea bueno que hayan bajado lo mejor sería que haya 0 de accidentes

Los accidentes también afectan a la economía del país como las reparaciones y los
servicios como policías, ambulancias o grúas. Los cálculos son entre un 1% y el 3% de
Producto Nacional Bruto (PNB). Se calcula que en la Unión Europea los costes anuales son
160.000 millones de euros y en Estados Unidos 200.000 millones en dólares.

Los costos relacionados con accidentes de tráfico, que la sociedad sufraga de forma directa
o indirecta, abarcan diversas áreas, como gastos médicos, rehabilitación, gestión de
accidentes, traslado de heridos, gastos personales, pérdida de productividad,
compensaciones económicas y reparación de vehículos. Según la Orden INT/2223/2014, se
consideran accidentes de tráfico con víctimas aquellos que involucran al menos un vehículo
en movimiento y resultan en fallecidos y/o heridos: fallecido como la persona que muere
instantáneamente o en los treinta días siguientes al accidente, excluyendo muertes
naturales o suicidios evidentes; herido hospitalizado a quien requiere hospitalización por
más de veinticuatro horas debido al accidente, excluyendo a los que fallecen en los treinta
días siguientes; y se considera herido con atención sanitaria inferior a veinticuatro horas a
quien recibe atención médica pero no precisa hospitalización prolongada.

Un estudio de las universidades de Murcia y Sevilla revela el Valor de la Vida Estadística

(VVE) en España, que evalúa económicamente los efectos de la seguridad vial. Este valor
representa la cantidad máxima que la población está dispuesta a pagar para reducir la
mortalidad en accidentes de tráfico. Se determina que la VVE es de 1,3 millones de euros y,
considerando otros gastos como costos médicos y pérdida de productividad, la prevención
de una muerte en accidente de tráfico en España alcanza un valor de 1,4 millones de euros.

Los accidentes de tráfico afectan principalmente a grupos vulnerables de la población,

incluyendo niños, adolescentes, jóvenes y personas mayores, causando secuelas físicas y
psicosociales duraderas. En España, se estima que cada año se destinan alrededor de
10.000 millones de euros (aproximadamente 200 euros por persona) para cubrir las
consecuencias de estos accidentes. Estos incidentes tienen un impacto humano y
económico significativo en la sociedad, representando hasta un 3% del Producto Nacional
Bruto (PNB) de los países desarrollados.

Hay más muertes por accidentes de tráfico que por cáncer e infartos. Y por eso hay que
actuar sobre la propia sociedad y las personas insistiendo sobre la necesidad de atajar y
enfatizando el importante papel que todos podemos desarrollar en su previsión.