REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL
POLITÉCNICA DE LA FUERZAARMADA NACIONAL BOLIVARIANA
DIRECCIÓN DE POSTGRADO
NÚCLEO: CARACAS
MAESTRÍA EN GERENCIA DE MANTENIMIENTO

PRINCIPIO DE PRODUCCIÓN,
PRINCIPIO DE ESCASEZ,
LEY DE RENDIMIENTO DECRECIENTE,
EL PRINCIPIO DE LA EFICACIA DE LA ECONÓMICA,
LA MICROECONOMÍA Y SUS INDICADORES

Profesor:
Neil José Rico González

Estudiante:
Lic. Ana Fernández

Caracas, septiembre 2023

 CONTENIDO

Pág.
PRINCIPIO DE PRODUCCIÓN, PRINCIPIO DE ESCASEZ, LEY DE
RENDIMIENTO DECRECIENTE, EL PRINCIPIO DE LA EFICACIA DE LA
ECONÓMICA, LA MICROECONOMÍA Y SUS INDICADORES ........................... 4

Principio de producción ...................................................................................................... 4

Principio de escasez ........................................................................................................... 5

Ley de rendimiento decreciente ...................................................................................... 7

El principio de la eficacia de la económica .................................................................. 9

La microeconomía y sus indicadores .......................................................................... 11

Indicadores........................................................................................................................... 12

CONCLUSIÓN .................................................................................................................... 14

BIBLIOGRAFIA ..................................................................................................................... 15

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 INTRODUCCIÓN

La economía es una ciencia social que estudia cómo las sociedades

utilizan los recursos limitados para producir bienes y servicios y distribuirlos
entre los diferentes individuos. En este contexto, conceptos como el principio
de producción, el principio de escasez, la ley de rendimiento decreciente y el
principio de la eficacia económica juegan un papel crucial en nuestra
comprensión de cómo funcionan las economías.

El objetivo de esta investigación es profundizar en estos conceptos y

explorar cómo se aplican en el mundo real. Para ello, hemos llevado a cabo
un análisis documental exhaustivo, revisando una variedad de textos
económicos y revistas científicas.

En particular, la presente investigación se centra en los diferentes

conceptos comenzando por el principio de producción para culminar con la
microeconomía - el estudio de las decisiones económicas a nivel individual o
empresarial - y sus indicadores. Estos indicadores nos permiten cuantificar y
analizar el comportamiento económico, proporcionando una visión valiosa de
cómo las decisiones individuales pueden afectar a la economía en su conjunto.

Esperando que los hallazgos de esta investigación proporcionen una

mayor comprensión de estos conceptos económicos fundamentales y ayuden
a informar las decisiones económicas tanto a nivel individual como
empresarial.

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 PRINCIPIO DE PRODUCCIÓN, PRINCIPIO DE ESCASEZ, LEY DE
RENDIMIENTO DECRECIENTE, EL PRINCIPIO DE LA EFICACIA DE LA
ECONÓMICA, LA MICROECONOMÍA Y SUS INDICADORES

Principio de producción

El principio de producción es un concepto que se refiere a la capacidad

de generar bienes y servicios que satisfagan las necesidades humanas. Este
principio implica que la producción debe ser eficiente, es decir, aprovechar al
máximo los recursos disponibles, y sostenible, es decir, respetar el medio
ambiente y garantizar la viabilidad de las generaciones futuras.

Gelves y Navarro (2021), expresan que “La producción de bienes o

servicios es la actividad económica que genera un valor agregado a los
clientes o usuarios”; determinando la clasificación de la producción por
productos y las secuencias de fabricación.

La producción se puede realizar a diferentes niveles: individual, familiar,

comunitario, empresarial, nacional o global. Cada nivel tiene sus propios
objetivos, métodos y desafíos. La producción también se puede clasificar
según el tipo de actividad económica: primaria (agricultura, pesca, minería),
secundaria (industria, construcción) o terciaria (servicios). Cada sector tiene
sus propias características, ventajas y desventajas.

La producción es el proceso por el cual los seres humanos transforman

los recursos naturales en bienes y servicios que satisfacen sus necesidades y
deseos, siendo esencial para el progreso de la humanidad, ya que genera
valor, empleabilidad y creatividad. No obstante, la producción también implica
costos sociales y ambientales, como la emisión de gases contaminantes, la
sobreexplotación de los ecosistemas o la exclusión de los sectores más
vulnerables. Por lo tanto, es imprescindible encontrar un balance entre el

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principio de producción y el principio de conservación, que se basa en la
preservación y el respeto de los bienes comunes.

Principio de escasez

Es el principio que afirma que cuando los deseos y necesidades

humanas son ilimitados, y los recursos para satisfacerlos son limitados y
escasos se debe hacer una asignación eficiente de los mismos, en tal sentido
para N. Gregory, Mankiw (2020), la “Escasez significa que la sociedad tiene
recursos limitados y, por lo tanto, no puede producir todos los bienes y
servicios que las personas desearían tener”, y según Michael Parkin (2018), la
escasez es “Nuestra incapacidad para conseguir todo lo que deseamos se
denomina escasez, la cual es universal y enfrentan todos los seres vivos”.

El concepto de escasez, tal como es visto desde la perspectiva

económica, es un complejo de dos elementos complementarios que son los
recursos económicos de usos variados y los recursos económicos con fines
múltiples con diferentes grados de importancia para el individuo; siendo estos
dos elementos indispensables para que exista el problema de la escasez como
determinante del problema económico.

El principio de escasez, puede definirse como aquel que indica que,

cuando las necesidades de las personas son ilimitadas y los recursos se
vuelven escasos, no es posible satisfacer todas las necesidades y siempre
tendremos que elegir entre varias alternativas relacionadas con la forma que
queremos gastar nuestros recursos; en otras palabras, el principio de escasez
señala que los recursos son insuficientes para producir todos los bienes y
servicios para satisfacer las necesidades de las personas.

Los precios son una forma de asignar los recursos escasos entre los
agentes económicos que los demandan. Dependiendo del tipo de sistema

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económico, los precios pueden ser establecidos por el mercado o por el
gobierno. En un sistema de economía de mercado, los precios se ajustan
según la oferta y la demanda de cada bien o servicio. Cuando la demanda
supera a la oferta, el precio sube para incentivar a los productores a aumentar
la producción y a los consumidores a reducir el consumo.

Cuando la oferta supera a la demanda, el precio baja para estimular a

los productores a disminuir la producción y a los consumidores a aumentar el
consumo. De esta manera, se alcanza un equilibrio entre la cantidad ofrecida
y demandada de cada bien o servicio. En un sistema de economía planificada,
los precios son fijados por el Estado según criterios políticos o sociales. El
Estado decide qué bienes y servicios producir, cómo distribuirlos y a qué precio
venderlos. Los precios no reflejan la escasez relativa de los recursos ni las
preferencias de los consumidores, sino que responden a los objetivos del plan
económico.

La escasez de un recurso se produce cuando la demanda supera a la

oferta, lo que provoca un aumento de los precios y una reducción de la
cantidad disponible. La escasez puede deberse a varios factores, como:

- El aumento de la demanda por cambios en las preferencias, el ingreso

o el tamaño de la población.
- La disminución o el agotamiento de las fuentes o los recursos por el uso
intensivo, la sobreexplotación o la degradación ambiental.
- La falta de sustitutos o de fuentes alternativas que puedan reemplazar
al recurso escaso o satisfacer la misma necesidad.

La escasez es un concepto relativo que depende de la valoración que

los agentes económicos hacen de los recursos disponibles. Por eso, la
escasez puede variar en el tiempo y en el espacio según las condiciones del
mercado y las expectativas futuras. La escasez implica que los recursos son

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limitados y que hay que hacer una elección entre las distintas opciones
posibles. La escasez también estimula la innovación y el desarrollo tecnológico
para encontrar soluciones a los problemas de abastecimiento.

Ley de rendimiento decreciente

La ley de rendimientos decrecientes es un concepto económico que

describe cómo la producción de un bien o servicio se ve afectada por el
aumento de un factor de producción, manteniendo las demás constantes.

Según esta ley, al incrementar la cantidad de un factor de producción,

como el trabajo o el capital, se obtiene un aumento de la producción, pero cada
vez menor. Es decir, el rendimiento marginal de ese factor disminuye a medida
que se añade más cantidad. Esto ocurre porque hay un límite a la capacidad
productiva de una empresa o una industria, y al superarlo se generan
ineficiencias o costos adicionales.

La ley de rendimientos decrecientes se atribuye al economista David

Ricardo, aunque fue formulada anteriormente por Antonio Serra. Esta ley tiene
implicaciones para la gestión empresarial y la inversión, ya que indica que no
siempre es rentable aumentar un factor de producción sin cambiar los demás.

Los rendimientos marginales decrecientes son un fenómeno que ocurre

cuando se incrementa la cantidad de un factor productivo (como el trabajo o el
capital) manteniendo constante la cantidad de los demás factores. Esto implica
que, a partir de cierto punto, cada unidad adicional del factor variable aporta
menos producción que la unidad anterior. En otras palabras, la productividad
marginal del factor variable disminuye a medida que se utiliza más. Esto puede
deberse a que el factor fijo se vuelve insuficiente o ineficiente para combinar
con el factor variable, o a que hay rendimientos decrecientes a escala.

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 Un ejemplo de rendimientos marginales decrecientes sería una fábrica
que produce zapatos. Si la fábrica tiene una capacidad limitada de espacio y
maquinaria, y se aumenta el número de trabajadores, al principio la producción
de zapatos aumentará, pero luego empezará a disminuir, porque habrá más
trabajadores que espacio y maquinarias disponibles. Eventualmente, si se
sigue aumentando el número de trabajadores, la producción de zapatos podría
incluso reducirse, porque habría demasiada congestión y desorden en la
fábrica.

Los rendimientos marginales decrecientes no deben confundirse con

las deseconomías de escala, que son una situación en la que, al aumentar
todos los factores productivos en la misma proporción, el costo medio por
unidad producida aumenta. Las deseconomías de escala se deben a factores
externos al proceso productivo, como problemas de coordinación, control o
gestión.

Un concepto clave en la economía es el de la ley de los rendimientos

decrecientes, que establece que a medida que se aumenta la cantidad de un
factor productivo, manteniendo el resto constantes, se obtiene una producción
adicional cada vez menor. Esta ley se suele atribuir al economista inglés David
Ricardo, que la formuló en el siglo XIX, pero ya había sido descrita por el
italiano Antonio Serra en el siglo XVII.

La ley de los rendimientos decrecientes tiene implicaciones importantes

para la gestión empresarial, ya que indica que existe un límite a partir del cual
aumentar la inversión en un determinado factor no genera más beneficios, sino
que puede incluso reducirlos. Por eso, las empresas deben buscar el punto
óptimo de combinación de los factores productivos, donde se maximiza la
rentabilidad y se minimiza el costo.

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 Para los inversores, conocer la ley de los rendimientos decrecientes les
puede ayudar a evaluar el potencial de crecimiento y rentabilidad de las
empresas, así como los riesgos asociados a una sobreinversión o una
subinversión en determinados recursos.

El principio de la eficacia de la económica

La eficacia económica es el grado en que se logran los objetivos o

metas de una actividad económica con los recursos disponibles y la tecnología
existente. La eficacia económica se diferencia de la eficiencia económica en
que esta última se refiere al uso óptimo de los recursos para minimizar los
costos y maximizar los beneficios, mientras que la primera se enfoca en el
cumplimiento de los fines propuestos. Por ejemplo, una empresa puede ser
eficiente si produce la mayor cantidad de bienes o servicios al menor costo
posible, pero puede no ser eficaz si esos bienes o servicios no satisfacen las
necesidades o preferencias de los consumidores.

La eficacia económica también implica considerar los efectos externos

o indirectos de una actividad económica, como el impacto ambiental, social o
cultural, que pueden afectar el bienestar de la sociedad en general. La eficacia
económica se puede medir a través de indicadores como el producto interno
bruto (PIB), el índice de desarrollo humano (IDH) o el índice de felicidad
nacional bruta (IFNB), que intentan captar el nivel de satisfacción o calidad de
vida de la población.

Un ejemplo de eficacia económica sería el caso de una empresa que

logra aumentar sus ventas y su participación en el mercado mediante una
estrategia de marketing innovadora, sin necesidad de incrementar sus costos
de producción o sus precios. Esto implicaría que la empresa ha sido capaz de

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generar el efecto deseado (mayores ventas y mayor cuota de mercado) con
las mismas entradas (costos y precios).

Los distintos tipos de eficiencia económica son criterios que se utilizan

para evaluar el funcionamiento de una economía o de una empresa, en
relación con el uso óptimo de los recursos escasos. Estos son algunos de los
tipos más comunes:

- Eficiencia productiva: se produce cuando una empresa produce bienes

y servicios al menor coste posible, dada la tecnología y los recursos actuales.
Esto implica que la empresa no desperdicia ni recursos ni tiempo en su
proceso productivo. Un ejemplo de eficiencia productiva sería una fábrica que
utiliza maquinaria moderna y personal cualificado para fabricar sus productos.

- Eficiencia asignativa, también denominada eficiencia de Pareto, se

produce cuando los recursos se asignan a su uso más valioso, de modo que
nadie puede salir ganando sin que otro salga perdiendo. Esto implica que la
economía alcanza un punto óptimo en el que no hay posibilidad de mejorar el
bienestar de unos sin empeorar el de otros. Un ejemplo de eficiencia asignativa
sería un mercado en el que la oferta y la demanda determinan el precio y la
cantidad de cada bien o servicio.

- Eficiencia dinámica se produce cuando una empresa es capaz de

mejorar su eficiencia productiva a lo largo del tiempo mediante la innovación y
el aprendizaje. Esto implica que la empresa invierte en investigación y
desarrollo, en formación de sus trabajadores y en adaptarse a los cambios del
mercado. Un ejemplo de eficiencia dinámica sería una empresa tecnológica
que lanza nuevos productos y servicios cada año.

- Eficiencia estática se da cuando una empresa produce bienes y

servicios al menor coste posible, dada la tecnología y los recursos actuales,
sin ninguna mejora a lo largo del tiempo. Esto implica que la empresa no

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invierte ni innova, sino que se conforma con mantener su nivel de producción
actual. Un ejemplo de eficiencia estática sería una empresa tradicional que no
cambia sus métodos ni sus productos.

- Eficiencia social se produce cuando los beneficios de la actividad

económica son mayores que sus costes para la sociedad en su conjunto. Esto
implica que la economía tiene en cuenta no solo los beneficios privados sino
también los costes externos o las externalidades, que son los efectos positivos
o negativos que una actividad genera sobre terceros. Un ejemplo de eficiencia
social sería una política pública que reduce la contaminación o mejora la
educación.

- Eficiencia X se refiere a la capacidad de una empresa de utilizar sus

recursos de la mejor manera posible para producir el máximo rendimiento a
partir de un nivel dado de insumos. Es más probable que esto ocurra cuando
una empresa opera en un mercado altamente competitivo en el que los
directivos están motivados para producir todo lo que puedan. Sin embargo,
cuando un mercado es menos competitivo, como en un monopolio u oligopolio,
existe el riesgo de perder eficiencia X, debido a la falta de motivación de los
directivos. Un ejemplo de eficiencia X sería una empresa que reduce sus
costes operativos o mejora su calidad sin aumentar sus precios.

La microeconomía y sus indicadores

La microeconomía surge como una disciplina independiente a finales

del siglo XIX, con el desarrollo de la teoría marginalista y la escuela neoclásica.
Estas corrientes introdujeron el concepto de utilidad marginal, que explica
cómo el valor de un bien o servicio depende de la satisfacción que proporciona
al consumidor. Asimismo, la microeconomía asume que los agentes
económicos actúan de forma racional, buscando maximizar sus beneficios o

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su utilidad, y que los mercados son perfectamente competitivos, es decir, que
hay muchos compradores y vendedores, que hay información completa y libre
entrada y salida.

La microeconomía utiliza herramientas matemáticas y gráficas para

modelar el comportamiento de los agentes económicos y para analizar los
efectos de las políticas públicas sobre el bienestar social. Algunos de los temas
que aborda la microeconomía son: la teoría del consumidor, la teoría de la
producción, la teoría de los costes, la estructura de mercado, la teoría de los
juegos, la economía del bienestar, la economía ambiental o la economía
laboral.

De tal manera que esta disciplina que estudia cómo los agentes
económicos más pequeños, como las familias, los trabajadores, las empresas
y los consumidores, toman decisiones sobre sus recursos escasos y cómo
estas decisiones afectan al mercado. La microeconomía se basa en el análisis
de la oferta y la demanda de bienes y servicios, los ingresos, los precios, la
elasticidad, el equilibrio y la competencia, busca entender y predecir el
comportamiento de estos agentes económicos y cómo se relacionan entre sí.

En resumen, la microeconomía es una rama de la economía que se

ocupa de estudiar el comportamiento y las decisiones de los agentes
económicos individuales, como los consumidores, las empresas, los
trabajadores o los inversores. La microeconomía se basa en el análisis de la
oferta y la demanda de los bienes y servicios, y de cómo se determinan los
precios y las cantidades en los mercados.

Indicadores

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 Para evaluar el desempeño y la situación de los agentes económicos
individuales, se utilizan una serie de indicadores microeconómicos que
permiten medir aspectos como la rentabilidad, el costo, la productividad, la
liquidez y el endeudamiento de una empresa o sector específico. Estos
indicadores son herramientas fundamentales para la comprensión de la
economía a nivel micro, ya que proporcionan información detallada y relevante
para la toma de decisiones financieras, empresariales y de política económica.

Los indicadores microeconómicos se pueden clasificar en cuatro tipos

principales:

- Indicadores de rentabilidad: Estos indicadores miden la capacidad de

una empresa para generar ganancias a partir de sus ingresos y sus costos.
Algunos ejemplos son el margen de beneficio, que es la relación entre el
beneficio neto y las ventas; el retorno sobre la inversión (ROI), que es la
relación entre el beneficio neto y el capital invertido; y la tasa de rentabilidad,
que es la relación entre el beneficio neto y el valor contable de los activos.

- Indicadores de costo: Estos indicadores miden los costos asociados

con la producción o el suministro de bienes y servicios. Algunos ejemplos son
el costo unitario de producción, que es el costo total dividido por el número de
unidades producidas; el costo de los materiales, que es el valor de los insumos
utilizados en la producción; y la tasa de inflación, que es el aumento porcentual
del nivel general de precios.

- Indicadores de productividad: Estos indicadores miden la eficiencia de

una empresa en la producción de bienes y servicios. Algunos ejemplos son la
productividad laboral, que es el valor agregado dividido por el número de horas
trabajadas; la producción por hora, que es el número de unidades producidas
dividido por el número de horas trabajadas; y la tasa de rotación de inventario,

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que es el número de veces que se vende y se repone el inventario en un
período determinado.

- Indicadores de liquidez: Estos indicadores miden la capacidad de una

empresa para cumplir con sus obligaciones financieras a corto plazo. Algunos
ejemplos son la relación de liquidez, que es la relación entre los activos
corrientes y los pasivos corrientes; la relación de cobertura de intereses, que
es la relación entre el beneficio operativo y los gastos financieros; y la relación
de cobertura de deuda, que es la relación entre el flujo de caja operativo y el
servicio de la deuda.

Los indicadores microeconómicos se pueden obtener a partir de los

estados financieros de las empresas, como el balance general, el estado de
resultados y el estado de flujo de efectivo. Estos estados reflejan la situación
patrimonial, financiera y económica de una empresa en un período
determinado. Los indicadores microeconómicos también se pueden obtener a
partir de fuentes externas, como las estadísticas oficiales, los informes
sectoriales o las bases de datos especializadas.

Los indicadores microeconómicos son útiles para analizar la viabilidad,

la competitividad y el crecimiento potencial.

CONCLUSIÓN

En conclusión, los conceptos de principio de producción, principio de

escasez, ley de rendimiento decreciente, principio de la eficacia económica y
la microeconomía y sus indicadores son fundamentales para entender el

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funcionamiento de los agentes económicos y los mercados. El principio de
producción es un concepto fundamental en economía que establece que los
bienes y servicios que consumimos y utilizamos a diario son el resultado de la
combinación de varios recursos o factores productivos. Estos factores
productivos incluyen el trabajo (la mano de obra humana), el capital (como las
máquinas y las herramientas), la tierra (incluyendo todos los recursos
naturales) y el espíritu empresarial. Cada uno de estos factores contribuye a
la producción de bienes y servicios en diferentes formas y grados.

Por otro lado, el principio de escasez nos recuerda que, aunque

nuestras necesidades y deseos pueden ser ilimitados, los recursos que
tenemos para satisfacerlos son limitados. Esto significa que siempre hay un
costo de oportunidad asociado con cualquier decisión que tomemos sobre
cómo utilizar nuestros recursos. El costo de oportunidad es lo que sacrificamos
cuando elegimos una opción sobre otra.

El principio de la eficacia económica se refiere a la asignación óptima

de los recursos escasos para maximizar el bienestar social, mientras quela
microeconomía es la rama de la economía que estudia el comportamiento y
las decisiones de los agentes individuales, como consumidores, productores y
mercados; por último están los indicadores microeconómicos que son
variables que miden el desempeño y la situación de estos agentes, como la
demanda, la oferta, el precio, el ingreso, el costo, el beneficio, la elasticidad,
etc.

BIBLIOGRAFIA

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Gelves Alarcón, Ó. M., & Navarro Romero, E. C. (2021). Principios de la
Gestión de la Producción: Una Revisión Teórica y Aplicada de los
Conceptos.

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N. Gregory Mankiw (2020). Macroeconomía versión para América Latina

Ramírez et al(2018)“Economía Principio Generales” primera edición.Ediciones

de la U.

Parking (2018),“Economía”, Pearson Hispanoamérica

Samuel P.A Nordhaus WD (2010),“Economía con Aplicación a Latinoamérica”.

McGraw Hill Interamericana

pág. 16