Según Centers for Disease Control (2023), las ETS, también conocidas como

infecciones de transmisión sexual, se propagan de una persona a otra mediante el

contacto sexual. Entre las ETS más comunes se encuentran la clamidia, la
gonorrea, el herpes genital, la infección por el virus del papiloma humano (VPH), la
sífilis y la infección por el VIH.

Asi mismo, es importante destacar que muchas de estas enfermedades

pueden permanecer asintomáticas durante un período prolongado, sin embargo,
aún pueden causar daño y propagarse durante las relaciones sexuales. Por otro
lado, entre las enfermedades sexuales más relevantes son genes patógenos entre
bacterias, virus, hongos y parásitos, donde al mismo tiempo pueden acontecer
co-infecciones diversas , manteniendo la transmisión únicamente por relaciones
sexuales (CDC, 2013).

Por otro lado, La Clínica Universidad de Navarra [CUN] (s/f), nos dice que, las
ETS son infecciones que se pueden contraer a través del sexo sin protección.
Pueden ser causadas por gérmenes como bacterias o virus y a menudo no
muestran síntomas al principio. Para protegerte, es importante usar condones y
practicar sexo seguro. Hacerse pruebas regulares para detectar ETS es esencial, ya
que puede ayudar a prevenir la propagación de estas infecciones. La educación
sobre las ETS es clave para mantener una vida sexual saludable.

La promiscuidad sexual implica tener múltiples parejas sexuales en un corto

período, sin compromisos a largo plazo. Aunque es una elección personal, aumenta
el riesgo de ETS si no se practica el sexo seguro. Es fundamental usar protección,
como condones, para reducir ese riesgo y mantener una salud sexual adecuada. La
promiscuidad sexual puede variar entre personas, y es crucial respetar las
elecciones sexuales individuales, siempre que sean seguras y consensuadas
(Martínez, J. C., & Pimentel, M. G., 2015)
 Así mismo, el sexo seguro es una práctica fundamental para proteger tu salud
sexual y la de tu pareja. Implica tomar medidas para prevenir las ETS y reducir el
riesgo de embarazos no deseados. La principal estrategia para practicar sexo
seguro es el uso de condones, tanto masculinos como femeninos, durante las
relaciones sexuales. Los condones actúan como una barrera efectiva contra muchas
ETS y son una forma confiable de prevenir la transmisión de infecciones
(Medlineplus, 2022).

La Organización Mundial de la Salud [OMS] (2023), afirma que, la prevención

de las ETS es crucial. Usa condones de manera constante y correcta durante el
sexo. Limita el número de parejas sexuales y elige con cuidado. Realiza pruebas
regulares de ETS si eres sexualmente activo. La educación y la comunicación
abierta con tu pareja son esenciales. La prevención es una responsabilidad hacia tu
salud y la de tu pareja. El sexo seguro y la conciencia son clave para evitar ETS.