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Universidad Nacional de Tucumán

Escuela Universitaria de Enfermería

SUBSANAR DESIGUALDADES
EN UNA GENERACIÓN

Nombre y Apellido: Lucia Micaela Burgos


Universidad Nacional de Tucumán
Escuela Universitaria de Enfermería

SUBSANAR DESIGUALDADES EN UNA GENERACIÓN


La justicia social afecta el modo de la gente, la probabilidad de enfermar y el riego de
morir prematuramente. De este modo, la esperanza de vida de una niña que nace hoy
puede ser de 80 años, si nace en determinados países, o 45 años, si nace en otros.
Estas desigualdades e inequidad sanitaria son resultado de las situaciones donde la
población vive, crece, trabaja, envejece y de los sistemas que usan para combatir
enfermedades.
En pro de la justicia social, la OMS puso en marcha en 2005 la Comisión sobre
determinantes sociales de la salud para recabar datos científicos para posibles
medidas e intervenciones en favor de la equidad sanitaria, promoviendo un
movimiento internacional para ello.
Determinantes sociales de la salud y equidad sanitaria
Creada con la finalidad de recabar pruebas sobre posibles medidas e intervenciones
que fomenten y promuevan equidad sanitaria, centrando su labor en países con todo
tipo de niveles de ingresos y desarrollo.
Según la Comisión, la distribución desigual (mundial y nacional) de poder, ingresos,
bienes y servicios, y por ende las injusticias que afectan las condiciones de vida, no
integran un fenómeno natural sino que son resultado de una nefasta combinación de
políticas y programas sociales deficientes, arreglos económicos injustos y mala gestión
política.
Nuevo enfoque del desarrollo
La labor de la Comisión incorpora un nuevo enfoque, considera que las actuaciones
sobre los determinantes sociales de salud deben contar con la participación de todos
los poderes públicos , sociedad civil, comunidades locales, sectores empresariales,
foros y organismos internacionales. No dejar que las políticas y programas engloben
solo el sector sanitario, sino a todos los sectores claves de la sociedad.
Subsanar desigualdades en una generación
Las recomendaciones para lograrlo son: mejorar las condiciones de vida, luchar contra
la distribución desigual y medir la magnitud de los problemas.
1. Mejorar las condiciones de vida, a través de:
- Abordar los primeros años de vida. Mediante medias, programas y
servicios educativos que incluyan principios para el desarrollo físico,
socio emocional, lingüístico-cognitivo. Estos determinarán las
oportunidades en la vida de la persona y su posibilidad de gozar de
buena salud, ya que afecta la adquisición de competencias, educación,
oportunidades laborales, etc..
- Entornos salubres. A través de inversiones para que las comunidades
y barrios cuenten con servicios básicos. Las malas condiciones de vida
inciden sobre su salud, favoreciendo transmisión de enfermedades,
desnutrición, traumatismos por accidentes, desastres ecológicos.
- Trabajo digno. Aplicar prácticas justas de trabajo, para lograr el empleo
seguro, bien remunerado, la posibilidad de trabajo todo el año y un
equilibrio justo entre vida laboral y privada.
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- Protección social. A través de aplicar políticas y sistemas de
protección, asegurando de incluir principalmente a las personas en
situación de precariedad laboral. Esta redistribución del sistema de
protección influirá sobre niveles de pobreza y la forma en que el
mercado permite a la población ganarse la vida.
- Atención universal de salud. Creación de sistemas sanitarios de
calidad con cobertura, centrados en APS, fortaleciendo al personal
sanitario y desarrollar sus capacidades para actuar sobre los
determinantes sociales de la salud.
2. Luchar contra la distribución desigual, a través de:
- Equidad de políticas, sistemas y programas. Mediante
responsabilizar al gobierno de las acciones en pro de la salud y la
equidad sanitaria, logrando la coherencia de acción de programas y
políticas. Es decir, las políticas deben complementarse, no
contradecirse.
- Financiación equitativa. A través de fortalecer, incrementar y distribuir
los recursos y financiación pública. Fundamentales para intervenir sobre
los determinantes sociales de salud.
- Responsabilidad del mercado. Los mercados contribuyen a mejorar la
situación sanitaria a través de nuevas tecnologías, bienes, servicios y
mejorando el nivel de vida. Sin embargo, genera situaciones
perjudiciales: desigualdades económicas, agotamiento de recursos,
contaminación ambiental, condiciones laborales insalubres. Para ello, el
sector público debe ser quien regule los bienes sociales, reglamentar
los productos y actividades y controlar periódicamente todo ello, no ser
regulado por la ley de mercado.
- Equidad de género. Combatiendo los prejuicios sexistas de las
estructuras sociales y las leyes. Así también, formular y aplicar políticas
para eliminar las disparidades en la educación y adquisición de
competencias e invertir en programas de salud sexual y reproductiva.
- Gobernanza global eficaz. A través de principalmente, convertir la
equidad sanitaria en el objetivo para el desarrollo mundial y tomando la
acción sobre los determinantes sociales como el principio rector de
todos los programas de desarrollo y toma de decisiones.
3. Medir la magnitud del problema:
- Seguimiento, investigación y formación. Mejorar las infraestructuras
para un mejor seguimiento, investigación y formación con la finalidad de
obtener datos para entender la magnitud de las problemáticas, evaluar
las interpretaciones y dar un seguimiento a los progresos. No contar
con datos básicos (morbimortalidad, natalidad) dificulta aplicar medidas
para mejorar la equidad sanitaria.

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