Se refiere al proceso de considerar ciertas acciones que causan daños al
medio ambiente como delitos penales. Esto implica que las personas o entidades responsables de dichos daños pueden ser procesadas y sancionadas penalmente por sus acciones. La criminalización por daños ambientales está constituida por aquellas consecuencias jurídicas que recaen sobre las personas naturales y jurídicas por la infracción de las normas o disposiciones legales en materia ambiental; una vez consumada la agresión ambiental. Asimismo, el instrumento normativo es la Ley Penal del Ambiente, que tiene por objeto tipificar como delitos, aquellos hechos que violen las disposiciones relativas a la conservación, defensa y mejoramiento del ambiente y establece las sanciones penales correspondientes. Igualmente, determina las medidas precautelativas de restitución y de reparación a que haya lugar, logrando la criminalización y persecución de muchas de las actividades lesivas contra el medio ambiente.
La importancia de la criminalización de los daños ambientales
Radica en la necesidad de proteger el medio ambiente y los recursos naturales, así como en responsabilizar a aquellos que causan daños significativos a la naturaleza. Además, al considerar estos actos como delitos, se busca disuadir a otras personas o entidades de cometer acciones similares en el futuro. Cumple un importante papel de control y garantía de los individuos y a la vez que impulsa la eficacia del soporte administrativo, en tanto ofrece una interrelación de actuación futura correctora de comportamientos de la Administración Pública que no responden adecuadamente a las funciones que se les encomienda. En Venezuela la mayor parte de los hechos punibles recaen sobre el medio ambiente, y se establece para ello tipos de penalidades diferentes para dar protección a las actividades contaminantes, tanto las realizadas con dolo como las imprudentes. Características Algunas características de la criminalización de los daños ambientales incluyen la imposición de sanciones penales, como prisión o multas, también otras accesorias como la clausura de establecimientos contaminantes o la inhabilitación de los responsables de los daños; la promoción de una mayor conciencia sobre la importancia de proteger el medio ambiente; y la creación de un marco legal que fomente la responsabilidad ambiental.