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C.E.I.P. PLAYA BLANCA. PLAN LECTOR.

CONCURSO DE RELATOS DE HALLOWEEN 2017

Recopilación de los cuentos presentados al Concurso de Relatos de Halloween por

los alumnos de Quinto y Sexto de Primaria.

Octubre/ Noviembre de 2017

Coordinador: Miguel Aguerralde.


1. LA HISTORIA DE JASON,
Christian, de 5º A.

Érase una vez dos amigos llamados Thiago y Lorenzo que se llevaban muy

bien. Un día se fueron de acampada y vieron un aldea y fueron a ver que pasaba.

Thiago le preguntó a Lorenzo que dónde estaba la gente.

—¿Sabes por qué no están fuera de las casas?

—Porque hay hombres que nos quieren matar. He visto un coche no podemos

salir.

—Sí podemos porque tengo una batería, gasolina y una pistola.

—¿Por qué la llevas?

—Mejor no saberlo. Ya está arreglado de reparar, podemos irnos de aquí.

—¡Bien! Huimos de la muerte fin.

FIN
2. Wernin.
Daniel, de 5º A.

Capitulo 1: La escalera

Había una vez 5 niños llamados Daniel, Cosme, David, Loris y Aimara, que

sabían que su colegio pasaban cosas raras. Cosme decía que en la biblioteca

escuchaba muere, muérete continuamente. Loris comentaba que en el patio circular

había una niña muerta sin cara y con bata blanca. Todos pensaban que todo esto

sucedía en la escalera de la entrada del colegio. Un día los niños tuvieron la tonta

idea de entrar al colegio.

Loris: ¿Y si entramos al cole a ver lo que pasa?

Aimara: ¡Sí! Ah, Loris, te odio.

Daniel: A ver los tortolitos, eso para después.

Todos: ¡Jajajaja!

Así que todos fueron al colegio por la noche. Habían pasado 6 horas, ya

eran las 10 de la noche:

Cosme y David : ¿Cómo entramos?

Daniel: Apartar, que sois unos carabotellas y chuparrelojes.

Daniel le dio una patada a la puerta para ver si se abría y al final no pudo.

Daniel: Ayudadme, anda, bordes.

Cosme: A mí me da que los carabotellas no van a ayudar.

Daniel: Pues vale.

Aimara y Loris empezaron a ayudar y de repente Daniel y Loris vieron un

niño que hace tiempo falleció por un rayo. Se le veía rezando y se le escuchaba:

Niño: Rayos, rayos, que todos vosotros menos uno muera... Ja, es broma,

todos vais a morir.

Todos: ¿Cómo?
Cosme: buuuuuuuu

Todos: Ah, ah, ah.

Daniel: Pero tú eres tonto, pero tonto, tonto, tonto.

Cosme: No te pases.

Los niños consiguieron entrar a colegio. Con sólo entrar se veía donde el

reloj un niño muerto colgado de una cuerda. Los niños no quisieron ni mirar, se

centraron en la escalera, nadie sabia que había en aquella puerta. Había una nota

que decía.

Nota: Hola, feliz Halloween, somos los 5 niños muertos nos llamamos d, l, a,

c y d. No queremos decir quién somos y por eso hemos dicho las primeras letras

de nuestros nombres. A ver, vamos a lo que importa, no queremos que entréis a

las escaleras pero sí queremos que entréis y por eso os vamos a decir unas pistas

para que abráis la puerta. Ok, pues venga.

1. Hola, hola, tú ya sabes, tú estás ahí siempre donde hacemos divisiones.

Todos: Hum, hum...

Daniel: Ya, qué depresión.

David: Ya sé, en nuestra clase.

Los niños fueron corriendo sin parar y al llegar vieron una niebla negra y

un niño de pie y sonriendo.

Daniel: Hola, ¿quién eres?

Anónimo: Adiós, Dani.

Daniel: ¿Cómo que adiós?

Dani se fue alejando poco a poco, le fue saliendo una bola como morada.

Loris: ¿Y eso qué es?

Cosme: Es su alma.

Niño: Qué listo eres, Cosme. Sólo pudo decir una cosa: el siguiente eres tú.

Cosme: ¿Por qué?

¡Bummmmm! El niño desapareció.

¡Cata pum! Daniel se cayó al suelo. David le tomó el pulso y dijo:

David: Adiós, Dani.


Todos : ¡Noooo!

Una energía les trasmitió una nota que decía:

Nota: Adiós, Daniel. Dani volverá por un precio: tenéis que encontrarme,

estoy en la escalera, pero vais que tener hacer unas pruebas.

Todos: Sí.

Pues empecemos.

Los niños empezaron tuvieron que recorrer todo el colegio y tuvieron que

hacer 24 pruebas. Cuando quedaba una, que era en el patio, miraban alrededor y

no pasaba nada. Hasta que al llegar al centro del patio vieron a un niño.

Aimara: Dani.

Daniel fantasma: Hola, os veo y vais a morir.

Todos: Pues no.

Daniel encogió lentamente a Cosme y lo convirtió en un diminuto humano.

Después lo cogió y bummmmm lo aplastó con el pie y sólo se veía sangre y una

mini cabeza rodando.

Todos: ¡No, otro nooo!

Dani: Pues os vais a enterar.

Dani cogió a Aimara y a Loris. El castigo de Aimara fue convertirla en bruja

y desterrala al infierno pero su cuerpo se quedó en la tierra. A Loris le arrancaron

la piel y se la dieron a las personas de la selva. David salió corriendo a buscar

ayuda.

Capitulo 2 la ayuda

David salió corriendo a buscar a compañeros de clase que eran Christian,

Javier, Thiago y Sofía. Los 5 fueron al colegio y se dirigieron a la escalera, vieron a

su lado una llave con un nota que decía:

Nota: Enhorabuena, habéis ganado la llave pero su coste fue la muerte de

Daniel, Cosme, Aimara y Loris.

Todos menos David: ¿Cómo no nos lo dijiste?

David: Lo siento pero tú no sabes lo que es ver cómo mueren tus amigos. A
Daniel le quitaron el alma, Cosme fue aplastado, Loris fue arrancado la piel y se lo

dieron de comer a las personas de la selva y Aimara fue convertida en bruja y

desterrada al infierno. Tú no lo sabes, así que mejor callaos, por favor.

Todos : Lo sentimos.

David : Bueno, entremos.

Los niños entraron. Sólo se veía oscuridad y telarañas y de repente vieron

el cuerpo de Daniel, la cabeza de Cosme, el esqueleto de Loris, el cuerpo de

Aimara y de repente ¡bummm! ¡Salieron volando!

Capitulo 3 la verdad

Los niños fueron aclarando la vista, se estaba despejando el polvo y vieron

a una persona mayor, pero como no sobrevivieron nunca podremos saber quién

era.

FIN

(Recordad, niños: nunca os metáis con la muerte)


3. ESPÍRITUS EN EL COLEGIO
Aimara, de 5º A.

Un día hicieron una fiesta de noche y cuando se fueron todos los niños los

únicos que se quedaron fueron Aimara, Uxia, Nayara, Sofía, Valeria, Dani, Loris y

Cosme. Los 8 fueron caminado por todo el colegio y llegaron a las escaleras y se

encontraron con un niño muerto que estaba cantando y les dijo:

—¿Queréis jugar conmigo?

En la mano tenia un cuchillo. Todos gritaron asustados y salieron corriendo

mientras que el fantasma iba matando a más niños. Llegaron al patio y se

encontraron a otro muerto, que mató a Dani y a Sofía. Luego se encontraron con

más personas muertas. Decidieron ir a la puerta pero estaba cerrada, Valeria había

llevado el móvil pero se lo había dejado en la clase. Uxia dijo:

—¿Y si vamos a la puerta de atrás?

Todos dijeron que si y al llegar vieron a el espíritu de Dani y Sofía.

Intentaron escapabar de ellos pero en realidad les querían ayudar. Entonces Dani

le cogió la pierna a Aimara y le dijo:

—No os preocupéis, vamos a sacaros de aquí.

Más tranquilos les siguieron pero en medio del camino se encontraron con

otro muerto que les cortó la cabeza a Cosme y a Loris. Los espíritus de Loris y

Cosme se hicieron malos. Los demás decidieron seguir adelante, y gracias a Dios

Aimara, Valeria, Uxía y Nayara pudieron llegar a su casa sin un rasguño y Sofía y

Dani pudieron irse al cielo en paz.

FIN
4. LA CASA ENCANTADA.
Airán, de 5º A.

Una noche de Halloween un niño de América del sur nos contó una

historia llamada La casa encantada.

El día 31 de octubre el diablo en persona tocaba las puertas de una en

una. En las últimas 4 horas el diablo sólo tocaba a los que se portaban bien para

darles un susto terrible, hasta que tocó a una niña que no se asustó. El diablo

decidió que nunca más saldría en la noche de Halloween pero tendría que hacerlo

después de 1 año el mismo día. Sin embargo dijo que no y no lo hizo, y 42 años

después tomó una decisión: pasarle el turno a otro. Pero antes de poder hacerlo

murió.

FIN
5. EL DESIERTO ENCANTADO.
Aythamy, de 5º A.

En un desierto había unos 5 hermanos. Un día de Halloween se encontraron

una casa, entonces el hermano pequeño dijo que su madre que murió le hablaba

siempre de una casa encantada que había en el desierto donde estaban ellos pero

que sólo se levantaba de esas arenas movedizas el día de Hallowen y quien entrase

al día siguiente ya no estaría hasta el año que viene. El hermano mayor dijo que

eso era una leyenda .Entraron a dormir y al día siguiente no estaba el sol sino que

estaban en arenas movedizas. No se veía el sol pero había una nevera con comida

y bebida. Pasaron los días y se aburrían. El pequeño no paraba de decir que se lo

advirtió un montón de veces.

Un día vieron un ataúd y de repente vieron un zombi, lo mataron y venían

fantasmas, más zombis y vampiros. Eran 5 hermanos contra 50 monstruos. Y al

final cuando todo estaba perdido vieron una luz, era el sol, los vampiros

desintegraron con los fantasmas. Los zombis se escondieron y al fin salieron

después de un año.

FIN
6. EL CUMPLEAÑOS DE CARLOS.
Carlos, de 5º A.

Hace mucho tiempo había un niño que se llamaba Max. Cumplía 10 años

pero el no sabía que era Halloween. Bueno, los niños fueron al cumpleaños,

comieron, bebieron, abrieron los regalos y acabó la fiesta, pero un niño que se

mudó a Perú a vivir, Drácula, y su padre vieron que era su cumpleaños,

saludaron y fueron a decirle feliz cumpleaños disfrazados de humanos. Max les

preguntó si se querían quedar a dormir, dijeron que sí y se durmieron. Draculín

tenía que chupar la sangre y sus sesos antes de las 12.00 y 5 segundos para

chuparle todo. Max se despertó y vio que lo iban a matar, se asustó y liberó a sus

tribus. Vinieron brujas, fantasmas y esqueletos armados para matarle pero Max

tenía su monopatín. Le dio una patada y salió corriendo pero las brujas conducían

coches en vez de escobas. Eran las 11 y 09, los esqueletos armados disparando

flechas, Draculín volando con helicóptero prestado de su padre, la madre de

Draculín despertando por que era la Madre Tierra y despertó y cogió a Draculín.

Pero paso algo, eran las 12 y 09 se estaba convirtiendo en piedra. Max estaba bien,

después de recorrer con su monopatín 3 manzanas con las brujas y los esqueletos.

FIN
7. LLORIS,
Cosme, de 5º A.

En el año 1990 un joven de 15 años llamado Lloris estaba jugando al fútbol

con sus amigos llamados Pablo , Jony y Jeremy. En medio del partido los amigos

de Lloris se empezaron a aburrir y le dijeron que no querían ser sus amigos. Lloris

al recibir la noticia se fue a su casa a llorar pero mientras lloraba se dijo a si mismo

que si era mejor llorar o planear un plan maléfico contra sus examigos y paró de

llorar. Y entonces se le ocurrió contratar a un sicario vestido del payaso de It para

matarlos de un infarto a todos. Semanas después el sicario cumplió su trabajo

matándolos a todos. En el año 2075 Lloris y el sicario murieron como no hicieron

ni funeral ni nada por el estilo sus espíritus se enfadaron mucho y se dice que sus

espíritus rondan por Playa Blanca matando a todos los niños de ese pueblo. El

sicario y Lloris pueden estar debajo de tu cama intentando matarte.

FIN
8. EL PAYASO POSEÍDO,
David, de 5º A.

Érase una vez una chica llamada Andrea, el día de su cumple fue con sus

padres al circo, estaba muy emocionada porque era su primera vez en entrar en

un circo. Entraron al circo y había un payaso muy raro que le estaba mirando a

Andrea de una forma rara. Los padres querían un favor así que fueron a hablar

con el payaso y los padres dijeron:

—Hola, buenas tardes, ¿puedes ir a nuestra casa para celebrar el cumple de

mi hija?

El payaso contestó:

—Claro que si hahahaha.

—Venga, a nuestra casa a las 7:30.

Estuvieron de acuerdo. Después de unas horas el payaso estaba en la casa

de Andrea y le tocaba actuar, los chicos y chicas estaban muy emocionados pero

de repente cuando el payaso actúo a los chicos y chicas no les gustó la actuación,

así que los padres le echaron de la casa y el payaso triste se quería suicidar. Se

emborrachó y fue a lo alto de una roca muy grande y se tiró y ese mismo día en la

noche Andrea escucho un ruido raro y fue corriendo a la habitación de sus

padres, que también fueron a ver lo que pasaba. Andrea vio a un payaso poseído

y dijo que era el payaso de antes. Así que sus padres llamaron a la policía, pero

cuando llegaron el payaso poseído mató a los policías y dijo Andrea:

—No vengas a por nosotros, payaso poseído.

Y contestó el payaso:

—¡Si dices payaso poseído otra vez voy a vivir en vuestra casa para

siempre!

FIN
9. CUENTO DE HALLOWEEN
Eloy, de 5º A.

Érase una vez tres niños: Eloy, Raúl y Pablo. Fueron a hacer truco o trato,

los tres se disfrazaron uno de esqueleto, otro de zombie y otro de asaltante.

Llegaron a una casa un poco espeluznante.

—¿Oye, en serio que tenemos que entrar?—dijo Eloy

—No juzgues Eloy —le respondió Raúl.

Esperaron y esperaron y cuando entraron el dueño les noqueó.

—¿Ey, estáis bien? —pregunto Pablo.

—Sí —dijeron Raúl y Eloy.

—Bien, bien, estáis despiertos —dijo una voz.

—¿Quién eres? —preguntaron.

—¡Yo soy el Rastrillo!

Todos tenían un corte y una quemadura, cuando el Rastrillo se fue

intentaron escapar, se dieron cuenta de que era un laberinto.

—Vaya, los conejos se han escapado —dijo el Rastrillo—. Bueno no me

importa, todos han intentado salir de aquí pero como vosotros me dais pelea, os

daré una oportunidad. Adiós.

Los tres tenían esperanza de sobrevivir y después de tres largas horas

encontraron la salida, lo único malo es que tenían que robarle la llave al Rastrillo

para volver a casa. Con mucho sigilo consiguieron la llave, sólo tenían que salir.

Pero el Rastrillo les pisaba los talones.

—Tengo un plan —dijo Pablo. Cogió gasolina y con cerillas prendieron

fuego a la casa.

—Mola —dijo Eloy.

Todo estaba bien. Eloy y Raúl jugaron y leyeron, y Pablo tres cuartos de lo

mismo.

FIN
10. LA NOVIA MOMIFICADA.
Ettore y Gabriel, de 5º A. GANADORES DEL 2º PREMIO

El día veintisiete de octubre, un chico llamado Jonh, que era muy guapo y

tenía los ojos azules y el pelo rubio, que era de Italia y tenía veintidós años, estaba

caminando por la playa y de repente le pasó por al lado una chica hermosa que

tenía los ojos marrones, era de Londres, tenía el pelo castaño con mechas violetas

y tenía veintidós años. Después de hablar un rato con ella Jonh decidió

preguntarle si le daría su número y ella e contestó que sí. Le dijo que se llamaba

Juliet.

Pasaron dos meses y decidieron estar juntos. Tuvieron una relación por

tres años muy divertida: un día iban al cine, otros días iban a comer o a pasear.

Un día Juliet se encontró mal y fue al médico. Después de cinco sesiones le

diagnosticaron cáncer, se quedó en coma algunos meses y murió el mismo día que

se conocieron: el veintisiete de octubre.

El chico estaba muy deprimido. Pasaron tres días de la muerte de Juliet y a

Jonh lo llamaron pero no respondía. Luego pasaron dos días más y decidió ver

quién lo llamaba: se dio cuenta de que era la propia Juliet y se acordó entonces de

que la enterraron con el móvil.

Fue corriendo a desenterrarla y la encontró momificada con una mano rota,

sin uñas y cubierta de gusanos, y con la puerta del ataúd arañada de una manera

peculiar, decía: “Nunca me dejes atrás”.

FIN
11. EL ESPÍRITU DE HALLOWEEN.
Fátima, de 5º A.

Érase una noche de Halloween, un niño llamado Bili se puso su disfraz de

zombi y cuando bajó al piso de abajo su padre y su madre le dijeron que tenía que

quitarse el disfraz. Él muy confuso les preguntó por qué, ellos le contestaron que

porque tenían que visitar a su tía Edi. Muy triste se quitó el disfraz y y fueron a

casa de su tía. Cuando llegaron eran las 8 de la noche y cuando entraron sus

padres se pusieron a cocinar la cena y Bili empezó a leer unos cómics y a jugar a

unos videojuegos muy aburridos pensando que sus amigos se estarían

atiborrando de caramelos y pasándoselo muy bien. Justo entonces su tía entró en

su cuarto para echarse una siesta y mientras estaba durmiendo entró en ella un

espíritu, más bien el espíritu de Halloween y entonces empezó a hacer locuras como

intentar meterse cuchillos en ella, vomitaba sangre y quería matar a Bili. Entonces

sus padres metieron a Bili en el coche pero justo entonces a Bili se le ocurrió una

idea: les dijo a sus padres que tenían que perseguirla hasta el sótano que de lo

demás se encargaría él, y entonces llamó al reverendo. Tenía todo planificado,

había puesto cuerdas en la entrada del sótano mientras su tía se dormía, ella se

calló y la ataron. Entonces el reverendo le echó un conjuro pero nada, no

funcionó. La casa empezó a derribarse y la tía se había quedado dentro y falleció.

Pero se dice que su espíritu sigue volando y buscando su siguiente víctima.

FIN
12. EL INFIERNO DESDE LA MAÑANA.
Ilias, de 5º A.
13. NO APAGUES LA LUZ
Javier, de 5º A.

Había una vez dos niños adolescentes llamados Javi y Christian que

decidieron ir al cementerio, donde entrarían a una casa encantada. Ellos, que no

pensaron bien, entraron a la casa y desde que entraron se cerró la puerta.

—¡Qué pasa! —dijo Javi.

—¡Nos hemos quedado encerrados! —dijo Christian.

—Vale, no pasa nada —dijo asustado Javi.

—¡Vamos al piso de arriba! —dijo Christian.

—Vale —dijo Javi.

Cuando llegaron vieron a un anciano ciego.

—Hola —dijo Javi.

¡El anciano tenia un cuchillo! A Christian no le dio tiempo a correr y el

anciano le acuchilló sin piedad hasta que se murió.

FIN
14. LA TERRIBLE NOCHE DE OSCURIDAD
Kaili, de 5º A.

En una noche de oscuridad yo estaba fuera de mi casa y caminaba con

miedo. Apareció un fantasma y corrí hasta hasta el camino otra vez y llegué a una

casa encantada y un vampiro me dijo: «Bienvenida a mi casa, espero que pueda

comer tu sangre». Entonces corrí hacia un lugar para descansar y un esqueleto me

dijo «¿Por qué no descansas en mi cama de madera» y me fui a otro sitio. Pero una

bruja voló en su escoba e intentó cogerme pero no me cogió porque corrí y seguí

mi camino.

Ya en la calle apareció un hombre que se convirtió en un hombre lobo y

casi me comió pero me puse a salvo y fui a otro sitio donde una momia caminó

hacia mí y me dijo «Me voy a comer tu cerebro». Entonces todos los fantasma

vinieron: el vampiro, el fantasma, el esqueleto, la bruja, el lobo y la momia y todos

los que vinieron empezaron a comerme y ahora estoy muerta.

FIN
15. EL DIABLO.
Lorenzo y Thiago, de 5º A.

En 1985, en el pueblo de Halley, todos estaban esperando la noche de

Halloween. Faltaba solo una hora, hasta que llegó el momento de pedir las

chuches. Estábamos en la calle tocando a las puertas de las personas, hasta que

nos abrió un viejito, parecía que no tenia entusiasmo por la noche de Halloween,

primero nos miró fijamente y después con una palmada cerró la puerta y se oyó

un grito de terror, nos asustamos mucho y se lo fuimos a contar a nuestros padres.

Cuando llegamos a nuestras casas nuestros padres no estaban, nos pusimos a

llorar hasta que encontramos una linea de sangre en todas nuestras casas que

llegaba hasta un solo punto que era la casa del viejito. Tocamos a la puerta y se

abrió mágicamente, nosotros asustados entramos en la casa, estaba muy oscuro

entonces decidimos ir a la planta superior porqué había más luz. Cuando

llegamos arriba encontramos el cadáver de la madre de nuestro amigo, él se puso

a llorar y nosotros también. De repente se apagó la luz y cuando se volvió a

encender no estaba ni nuestro amigo ni el cadáver. Habíamos perdido a nuestro

amigo, y estábamos muy tristes así que quisimos contarle toda la locura a la

policía. Cuando estábamos a punto de salir la puerta se cerró bruscamente.

Estábamos encerrados en la casa y la única solución era ir a explorarla para

encontrar otra salida.

Caminando por los pasillos encontramos una ventana abierta y quisimos

salir por ahí. Cuando salimos dimos cuenta de que no había nadie en las calles

sólo un hombre con capucha, nosotros nos escondimos detrás de un banco y

cuando el hombre se quitó la capucha era el viejito comiéndose la cabeza de un

humano. Nos dimos cuenta que no era un viejito normal y corriente sino que era

el Diablo en persona. Cuando nos descubrió nos miró con ojos rojos como la

sangre y se teletransportó, cuando nos dimos la vuelta estaba detrás de nosotros.

Con un cuchillo en la mano mató a todos mis amigos clavándole el cuchillo en el

cuello, yo afortunadamente me salvé pero por mis amigos estaba muy triste.
Entonces con toda mi furia me fui otra vez a la casa para matar al Diablo. Cuando

llegué a la casa encontré al Diablo comiéndose a mi amigo sentado en una silla,

entonces cogí un cuchillo y se lo clavé en la espalda, él estaba a punto de morir

cuando me lanzó una bola de fuego en el pecho y los dos morimos pero yo me

convertí en un fantasma y desde ese día soy el vigilante del pueblo de Halley y

todos los turistas que vienen a visitar el pueblo se van asustados por leer mi

historia.

FIN
16. EL ESPÍRITU DE HALLOWEEN
Sofía y Loris, de 5ºA

En un día muy oscuro los niños se preparaban para Halloween. Una

calabaza común y corriente fue arrastrada por el viento al oscuro bosque en el que

se decía que se encontraba un espíritu que habitaba únicamente en el día de

festivo del terror. Cuenta la leyenda que asustaba a los niños, que tomó forma de

calabaza aterrando a todos los inocentes niños que anhelaban dulces. Hasta que

tuvo la idea de tomar forma de niño para asustar a los otros, se agregó a la

multitud y después de dar varios sustos a otros niños se sentó junto a uno que

estaba bastante solo.

—Hola, ¿cómo te llamas? —dijo el espíritu fingiendo ser amable.

El niño lo miro penoso y respondió.

—Diego, ¿y tú?

—Harry —dijo invitándole a dulces al niño, claramente más pequeño que

él.

La noche transcurrió y los niños se fueron conociendo poco a poco, dónde

vivían y cuál era su historia, el espíritu había revelado cómo había quedado sin

familia y ahora era huérfano, Diego amablemente lo invitó a su casa y en medio

de risas se hizo de madrugada. Harry le reveló que él no era más que un espíritu,

uno que desaparecería en cuanto se asomara el sol y aunque no fue mucho tiempo

el que compartieron siempre se iban a recordar, porque nunca se olvida un

verdadero amigo.

FIN
17. LA FAMILIA.
Manuel, de 5º A.

Hoy 31 de octubre en México se celebra una fiesta conocida como el día de

los muertos o Halloween. Fueron todos a la fiesta, sólo había una familia que no

había ido a la fiesta. Hoy Pavol, Carlos y yo entramos y sólo se oía una risa muy

fina como la de una niña. De repente se apagaron las luces, se escuchó un grito, se

encendieron de nuevo y no estaba Carlos. Fuimos a la habitación, vimos una

muñeca, se apagaron las luces otra vez y no estaba Pavol. La muñeca tampoco

estaba. Vi sólo una familia compuesta por un padre, una madre y la muñeca,

dijeron que fuera a jugar pero me fui corriendo y desde ese día siempre me

encontraba a la familia al irme a dormir.

FIN
18. HALLOWEEN.
Marwa, 5ºA.

Un día María estaba en su clase cuando unos niños entraron y empezaron

a repartir folletos y María empezó a leer en voz baja.

—Vamos a hacer una fiesta de Halloween este 31 de octubre.

Se puso muy contenta y cuando llegó a su casa le dijo a su madre:

—Mamá, tenemos una fiesta de Halloween.

Su madre le dijo:

—Vale hija, podrás ir si te llevas a tu hermano pequeño.

María le dijo.

—No, Mamá, no hay quien lo aguante.

María corrió a su cuarto y les dijo a sus amigas que ya no iba a ir.

FIN
19. EL HOMBRE DEL SACO
Nayara y Uxía, de 5º A.

El hombre del saco era un hombre que se dedicaba a vagar por las calles en

busca de los niños que se portaban mal. Un día un anciano necesitaba una cura, el

hombre del saco le dijo al anciano que necesitaba sangre de un niño bueno,

entonces fueron en busca de un niño bueno. Cuando lo encontraron le metieron

un saco en la cabeza y se lo llevaron a su guarida secreta, le colgaron por el

cuello y le hicieron un corte en la axila derecha para sacarle la sangre. Cuando le

sacaron la sangre necesaria lo cogieron y se lo llevaron hasta el bosque y lo

tiraron en medio del bosque El anciano se tomó la sangre del niño y entonces se

curó.

Más tarde la policía encontró al niño y encontraron unas huellas. Fueron

puerta por puerta mirando las huellas y encontraron la guarida secreta y al

hombre del saco y se lo llevaron.

FIN
20. UN HALLOWEEN PARA RECORDAR
Pavol, 5º A.

Un día una niña llamada Cloe había preparado un disfraz terrorífico para

Halloween. Estaba ansiosa por qué llegara Halloween pero faltaban unos días,

exactamente 5 días. Ya era un poco tarde y Cloe se fue a la cama. Al despertarse su

disfraz había desaparecido pero había un portal dimensional en su cuarto. Estaba

asustada y a la vez tenía mucha curiosidad por entrar, así que entró y vio un

mundo extraño hecho para Halloween. En el suelo había una nota que ponía:

«Si quieres tu disfraz, tres pruebas has de superar: la primera encontrar la

calabaza dorada en el valle de las calabazas».

Cloe fue al valle, había millones de calabazas. Buscó por todas partes hasta

que encontró una casa en ruinas. Entró y encontró la calabaza dorada y la cogió y

se la llevó. Cogió la nota y leyó la segunda prueba. Ponía:

«Para encontrar las castañas sagradas deberás ir al bosque de las castañas y

buscar a la bruja del bosque y resolver un acertijo».

Cloe fue al bosque y buscó a la bruja y más o menos al final del bosque

encontró la casa de la bruja. Tocó a la puerta, toc toc, la bruja abrió y le preguntó:

—¿Qué es naranja, más o menos redondo, y en Halloween tiene boca y ojos?

Cloe pensó y dijo:

—¡Una calabaza!

—Muy bien —contestó la bruja—. Toma las castañas, niña.

Cloe salió de la casa y apareció otro portal. Cloe entró y apareció en una

casa encantada. Dentro había un vampiro que le dijo:

—Bienvenida, Cloe, si mis pruebas has superado tendrás la calabaza


dorada y las castañas sagradas. Dámelas, por favor.

—Vale —dijo Cloe, y se desmalló.

Cuando despertó estaba en su casa con su disfraz y no se acordó de nada y

fue el mejor Halloween de su vida.

FIN
21. LA CASA ENCANTADA
valeria, de 5º A.

Érase una vez allá por el año 1906, una familia formada por Rosa y sus dos

hijos, Claudia y Enrique, su marido estaba en la guerra y no sabían nada de él. Se

fueron a vivir a una casa abandonada, la decoraron un poco porque ya tenía todos

sus muebles y cortinas. Ese día se dieron cuenta que todas las puertas tenían

cerrojos. Esa misma noche empezaron a escuchar unos ruidos muy raros y Rosa

llamó a su madre muy asustada y ella le dijo que esa casa era de su tatarabuela.

Rosa estaba un poco asustada porque sabía que su bisabuela estaba muy presente.

Decidió ir con sus hijos a su cuarto y encerrarse, se tranquilizó y durmió un poco.

Al día siguiente le tocaron a la puerta y era un mensajero que le traía una carta de

su marido que se estaba despidiendo de ella y de sus hijos porque ya estaba

agonizando en el hospital militar, su mujer se hundió en una gran depresión.

Después, de unos días era el día de Halloween y sus hijos querían ir a la fiesta y

ella decidió acompañarlos para despejar un poco la mente. Se pusieron manos a la

obra para encontrar algún trapo que ponerse de disfraz. En el sótano de aquella

casa había muchísimas cosas, su hija Claudia iba de mujer araña y su hijo iba de

vampiro. Salieron de casa rumbo a la fiesta, que se celebraba dos calles más abajo.

Llegaron y conocieron a muchos vecinos, niños y niñas disfrazados de lo más

terrorífico, se lo pasaron muy bien y olvidaron por un momento todo lo que

estaban viviendo. Se despidieron de todos y pusieron rumbo a su casa, pero antes

de llegar unos pasos atrás, se dieron cuenta que por una ventana asomaba una

viejecita que se les quedó mirando, los niños pidieron a su madre acercarse a la

puerta a ver si tenían suerte y esa viejecita les daba algo de chuches. Su madre lo

dudó un poco pues la anciana no le daba mucha confianza pero lograron

convencerla. Llamaron a la puerta con muchas ganas pero parecía como que la

anciana no quería abrir, llamaron más fuerte y finalmente abrió, la anciana estaba
un poco sorda, los años eran muchos. Se asustaron un poco pues parecía una

bruja, sus ropas parecían harapos y su pelo era largo y blanco, pero les dio

muchas chuches, un poco raras eso sí, pero una bolsa llena de dedos, orejas y ojos,

los niños lo agradecieron y se despidieron educadamente. Pero lo que más llamó

lo atención de Rosa, es que aquella mujer la había mirado muy raro, pero no le dio

la más mínima importancia.

Rosa esa misma noche escuchó como si estuviesen abriendo la puerta, miró

por la ventana y era la anciana que le había dado las chuches a sus niños. Ya era

demasiado tarde como para que aquella mujer estuviera merodeando por su casa.

Asustada llamó a la policía y no tardaron en llegar, les contó lo sucedido, pero

para sorpresa de Rosa nadie veía a la anciana y lo peor de todo es que en aquella

casa vecina hacía muchos años que no vivía nadie. Rosa no se lo podía creer, y

¿quién le había dado chuches a sus hijos? ¿Quién era aquella mujer? Estaba

realmente asustada. Le habían pasado tantas cosas que se creyó que todo eso era

debido al cansancio que tenía, pero era muy raro que ella y sus hijos veían a la

anciana y los demás no.

Decidió irse a dormir porque los otros días no había dormido casi nada.

Justo a la mañana siguiente la anciana llamó a la puerta y asustada Rosa no tenía

muy claro si abrirle o no, pero decidió ver lo que quería, le dijo entre dientes que

aquella casa estaba encantada y le susurró algo de muertos. Rosa se asustó tanto

que no dudó en hacer las maletas e irse a casa de su madre por unos días, estaba

aterrada. La anciana veía que pasaban los días y nadie entraba ni salía de la casa y

decidió entrar, aquella casa era toda su vida, todos sus recuerdos, lo que más le

dolía es que en aquella casa ahora estaba aquella nieta que ni siquiera se había ido

a despedir de ella en su entierro y eso la enfadaba mucho, hasta que se fueran de

allí no pararía.

Rosa volvió y se extrañó no ver a la anciana en la ventana que siempre

asomaba, cuando abrió el portalón de su casa la vio sentada en el jardín, parecía

inmóvil y se asustó y llamó de nuevo a la policía, llegaron pero allí no vieron a

nadie. Rosa no se lo podía creer, verdaderamente aquella anciana no quería que se


quedaran allí. Aterrada no dudó en coger a sus hijos e irse de allí sin mirar atrás.

Regresó a casa de su madre, y le contó todo lo sucedido y no se extrañó en

absoluto, su bisabuela no le había perdonado que no fuera a su entierro.

Decidieron hacer algo para que todo aquello se terminara y la anciana pudiese

descansar en paz. Volvieron de nuevo, pero esta vez solo Rosa y no dudó en

hablar con aquella anciana que sólo ella veía. Hablaron largo y tendido y Rosa le

explicó porque no había podido ir a despedirla, la anciana con lágrimas en los

ojos lo comprendió todo, y pudo irse y descansar en paz para siempre.

FIN
22. LOS DIOSES DE LA MUERTE
Abdrobou, de 5º B.

Érase una vez un chico llamado Carlos y sus amigos. Un día Carlos fue al

circo solo y montó en las tijeras con un niño desconocido. El niño le avisó que

bajara pero Carlos le dijo que se callara.

De pronto las tijeras empezaron a dar vueltas muy fuerte hasta que se rompieron

y salieron volando.

—¿Por qué estamos volando? —dijo Carlos.

—Te avisé —respondió su amigo.

FIN
23. EL DRAGÓN HELADO
Alberto, de 5º B.

En la era medieval había un reino que se llamaba Invernalia. Los dragones

estaban extinguidos o algunos dormidos hasta que un grupo de caballeros se

encontraron uno durmiendo. Al verlo gritaron tan fuerte que despertaron al

Dragón Helado. Salieron corriendo y el dragón les siguió hasta el reino. Los

caballeros avisaron al Rey, su apodo era El Caballero Dorado. Se prepararon para

recibir el ataque del dragón. El Rey era el único que sabía derrotar al Dragón

Helado. Pero el Rey no quería derrotarlo, quería dormirlo y devolverlo al a cueva.

¿Y cómo se lo iba a llevar? Volando a lomos del dragón.

Le dijeron que era muy peligroso pero el Rey lo iba a hacer. ¿Qué pasó?

Nadie lo supo.

FIN
24. UN CUENTO DE TERROR
Andrés, de 5º B.

Era un día de Halloween, fueron de casa en casa a pedir chuches. De

repente se encontraron una casa malvada con fantasmas. Marcos dijo que no

existían, convenció a Maikel y a Yoel que entraran. Cuando entraron se cerró la

puerta, Maikel y Yoel le dijeron a Marcos:

—¿No había fantasmas?

Marcos respondió que era el viento. De repente se escuchó un golpe

“¡pum!” y Yoel se puso a llorar. Marcos y Maikel le consolaron pero luego fueron

al salón que fue donde se escuchó el golpe y cuando entraron se encontraron una

espada en el suelo. Los tres dijeron “Puf, menos mal” y Maikel cogió la espada y

se la llevó. Subieron unas escaleras, había tres habitaciones. Yoel dijo:

—Una tiene que ser una especie de sótano, otra una habitación y la otra el

baño.

Entraron a una y era el baño, un baño normal y corriente pero Marcos abrió

la cortina de la bañera y vieron sangre. Salió del baño y Maikel lo olió y le dijo.

—¡Es kétchup!

Yoel también lo olió y dijo:

—Es verdad, es kétchup.

Entonces Marcos entró despacio en el baño y dijo:

—Qué alivio…

Salieron y fueron a la otra puerta. Era una habitación, había fotos de un

chico y una chica y Maikel dijo:

—Seguro que son novios.

Marcos y Yoel lo afirmaron. En una mesita estaba el DNI del chico. Yoel lo

cogió y dijo:

—Vamos a enseñárselo a la policía.

Marcos y Maikel dijeron que sí así que salieron y vieron la otra puerta. Yoel
dijo:

—Vamos a entrar.

Era un sótano y Marcos tosió de todo el polvo que había. Yoel miró a la

izquierda y vio una motosierra y miró a los demás asombrado.

—¡Mirar!

Marcos d1ijo:

—¡Cógela!

La cogió y luego había una manta y se vio como si tuviera algo debajo.

Marcos la quitó muy despacio y vio un hacha, la cogió rápidamente, se vio un

hueso y salieron corriendo hacia abajo y cuando ya estaban abajo se vio como un

coche frenaba justo delante de la casa. Se asustaron y esperaron a que el del coche

llegara a abrir la puerta y entonces los tres atacaron pero vieron que era el padre

de Marcos. Le esquivaron pero el padre de Marcos se asustó y gritó:

—¿Qué pasa?

Marcos le dijo:

—Te lo cuento en el coche.

El padre les dijo:

—Pues subid.

En el coche le contaron todo y esta historia la guardaron para siempre.

FIN
25. MISTERIO POR LA NOCHE
Asmaa, 5º B.

En la plaza de un pueblo, los niños estaban jugando al escondite.

Varios de ellos, que estaban escondidos en una alameda a las afueras del

pueblo, vieron algo extraño que se estaba formando en el ciclo. Primero se

hacían formas en el cielo, que resaltaban en la oscura noche. Los niños

se asustaron mucho, pararon de jugar y fueron a avisar a sus padres.

También la gente mayor que estaba en el bar salio a verlo porque no

creían a sus hijos, pero al verlo se sorprendió. Al cabo de unos minutos se

formo una z, primero de color naranja y luego rojo. Las personas más

mayores empezaron a hacer comentarios de que también se había formado

antes de la Guerra Civil, pero otras personas pensaron que era un ovni que

venia a avisar de que la noche de Halloween era solo suya. Todas las

mujeres empezaron a hablar de que un día cuando se escapó un criminal

de la cárcel también se formó. Cuando toda la gente se fue a dormir se

empezaron a oír pasos, ladridos y golpes en las puertas. A la siguiente

toda la gente salió a las puertas de sus casas. Los vecinos empezaron a

preguntar que si sabían lo que eran esos ruidos y ya no estaba la z.

FIN
26. LA NIÑA A LA QUE LE PASA TODO
Daniel, de 5º B.

Érase una familia muy feliz, pero un día sus padres se separaron y dejaron

de ser felices. Un día la niña de la familia se quedó sola y le apareció Anabel, el

viernes 13 los dos padres se murieron a las 16:00 y los mató Anabel. Otro día la

niña se fue a una casa abandonada porque pensó que su casa estaba embrujada. Y

al día siguiente Anabel la encontró, entonces la niña corrió hasta el final del

pasillo, encontró una pistola y disparó a Anabel muchas veces y murió. Se fue

muy asustada, entró en su casa y estaba muy llena de sangre. Sus padres estaban

en el suelo manchados de sangre y recordó a Anabel. Tuvo ganas de matar a todos

los malos.

Al día siguiente fue a la parada del tren para ir al colegio y la parada estaba

vacía y le entraron ganas de ir al baño. Cuando entró al baño se le cerró la puerta

y se asustó, pensó que era el viento pero estaban tocando y preguntando:

—¿Dónde están mis piernas?

Y le respondió que en las vías del tren y se fue. Salió y se encontró una

chica con un tapabocas y le preguntó:

—¿Estoy guapa?

Se asustó y le dijo que sí y después le preguntó:

—¿Ahora?

Se quitó el tapabocas y le apareció con la boca cortada y le dijo que sí

asustada y la siguió en el tren hasta el colegio y cuando salió de clase salió

corriendo para su casa. Cuando llegó le cortó las piernas y le cortó la boca como a

ella y mientras se desangró la chica llamó a la ambulancia y le dijeron que la niña:

—Ya viene en camino.

FIN
27. REGENERADOR
Moisés, de 5º B.

Érase una vez un niño llamado Jared. Jared tenía un hermano gemelo,

Chuck. Un día se encontraron un jugo que parecía slimo, Chuck lo tocó y se lo

llevaron a casa. Lo metieron en un tarro, cenaron y se fueron a dormir. Por la

noche el tarro se movía solo, Chuck lo vio y llamó a Jared. Jared se despertó, lo

vio y se quedo boquiabierto. Fueron a llamar a sus padres, llamados Jared y

Carmen. Se lo dijeron, fueron a su cuarto y sólo encontraron el tarro roto. Chuck

estaba gritando, lo escucharon y le vieron la mano, estaba negro y se podía

convertir en cualquier cosa horas más tarde. Preparando el desayuno Chuck se

cortó empezó a gritar «¡Aaaaaah!» lo escuchó todo el vecindario. Fueron a mirar y

se encontraron el brazo cortado y se regeneró, entonces pensaron: «Si lo oyó todo

el vecindario, ¿por qué no vinieron?». Fueron a mirar y estaban todos muertos,

vieron el slimo, apareció y el padre fue a por la escopeta, le pegó un tiro y se

regeneró como el brazo de Chuck. Llamaron a la policía y no pudieron, llamaron

al ejército y tampoco pudieron, pero vino un francotirador con una mira infrarroja

y lo mató.

FIN
28. EL NIÑO
Airam Batista, de 5º B.

Érase un día tenebroso en ciudad Doston. El día estaba nublado, hacía frío,

nadie salía de casa. Entonces una niña quiso salir de casa. Quería ir al parque. De

repente empezó a llover, a caer truenos y haber niebla y más niebla, ya no se veía

nada. La niña no sabía llegar ni al parque ni a la casa. Cada vez la cosa era más

difícil, entonces fue a ver si podía refugiarse en algún lado. Era casi imposible

porque no se veía nada. A lo lejos vio una lucecita que se reflejaba en un cristal. La

lucecita era un bar que decían que estaba encantado, quiso ir a investigar al bar.

Cuando entró en el bar estaba todo vacio, los platos rotos, vasos etc. Había una

persona, la dueña del bar, sentada en una silla llorando del miedo. La niña

preguntó a la dueña «¿Qué te pasa?» La chica respondió a la niña «Han raptado a

mi hijo». Entonces la niña dijo «Vamos a buscarlo». La chica dijo «Va a ser inútil».

Entonces la niña se fue a buscar al hijo de la chica. Se fue a buscarlo, dio

vueltas a la manzana, buscó y buscó, pero al final no encontró nada. Entonces le

dijo a la madre del niño «No lo encontré». La madre le dijo «Ves, te lo dije».

Entonces oyeron un grito, era el niño que venía de la casa encantada. «¡Es mi

hijo!», gritó la madre del niño. Fueron a la casa , entraron y encontraron al niño

atado a una silla, muerto. La madre se desmayó y la niña llamó a la policía. Unos

días después la chica se recuperó y la niña se fue a vivir con la chica como

compañía.

FIN
29. EL SECUESTRO
Airán Lama, de 5º B.

Una vez un niño llamado Mario estaba en el patio de su casa. Era de noche

y todo estaba oscuro, y vio a un señor que le dijo:

—¿Quieres una bici?

—Sí —dijo Mario.

Y cuando no se dio cuenta lo metió en una bolsa de basura y se lo llevó a

su casa. Y dejó una nota en la puerta que decía «Si queréis a Mario traedme dentro

de una semana en mi casa en la calle Los Dolores 13.000.000$ o si no lo mataré».

Los padres de Mario vieron la nota y llamaron a la policía para enseñarles

la nota. Planearon algo para no darle el dinero. Pensaron en meter un maniquí

para engañar al secuestrador y que les devolviera a Mario. Llamaron a la policía

por si algo fallaba. Al día siguiente Mario, en casa del secuestrador, intentaba

escapar y marcharse, así que cuando se fue el secuestrador intentó coger la llave

que había ocultado debajo de la cama del secuestrador. La cogió y se escapó. Le

robó una bici para escaparse e irse a su casa. Se hizo de noche y se quedó a dormir

en un banco del parque de al lado de la casa del secuestrador. Se hizo de día y se

fue a casa de sus padres. Llegó a la casa y le dijo a sus padres que no iba a salir

nunca más.

FIN
30. LA NIÑA FANTASMA
Alba, de 5º B.

Un martes, 31 de octubre una niña llamada Katie estaba caminando por un

callejón oscuro y tenebroso. De repente vio una sombra, era una niña de pelo

largo y un vestido infinito, aquella niña se alzaba sobre el suelo. Katie asustada

rápidamente se fue hacia su casa y cuando llegó le contó lo sucedido a su madre,

que le dijo que todo era producto de su imaginación. Katie se fue hacia su cama

pensando que esa niña era un fantasma. Al día siguiente era festivo en el colegio

así que Katie se levantó y se puso a pensar lo sucedido. Katie estaba sola así que

llamó a su amiga Laura.

Laura tocó la puerta y Katie muy contenta le abrió y le dijo que pasase, le

contó lo que había sucedido. Laura extrañada le dijo:

—Mi abuela me ha contado algo parecido.

Katie muy sorprendida le dijo:

—¿Qué pasó al final?

Laura le dijo que su abuela no le había contado esa parte.

Pasado un rato fuero a cenar y a Katie se le ocurrió la idea de ir después a

aquel callejón. Katie le contó a Laura la idea y decidieron ir. Después de una larga

caminata ya estaban allí, en aquel callejón tan oscuro y tenebroso. De repente

vieron aquella niña sobre el suelo y Laura le dijo a Katie:

—Preguntale qué quiere de ti.

Katie muy segura le dijo:

—¿Qué quieres de mi?

La niña le dijo:

—Quiero unas amigas, porque al ser un fantasma nadie quiere ser mi


amiga.

Katie le dijo:

—Nosotras seremos tus amigas y vendremos todas las noches posibles.

Y así es como Katie, Laura y la niña fantasma se hicieron amigas.

FIN
31. LA NIÑA QUE SOÑABA CON VOLAR
Areli, de 5º B.

Érase una vez una niña que soñaba con volar. Ella era muy creativa pero

cuando iba al colegio se burlaban de ella. Era muy feliz, pero no podía soportar el

hecho de no poder volar. Ella era creativa, soñadora y era cariñosa, porque el cielo

le fascinaba y no tenia ninguna amiga, pero al gustarle el cielo igual que a

Matilda, se hicieron amigas. Matilda le dijo:

—A mi me encanta el cielo y creo que es precioso.

Y la niña le contesto:

—¿En serio? Pues yo creo que es maravilloso y hermoso porque hace salir

el sol y la luna y las estrellas, pero sobre todo porque sin cielo no existirían los

sueños y no se podría soplar un diente de león ni tampoco se podrían ver las tan

bellas estrellas.

Ellas eran amigas buenísimas que siempre estaban unidas. Pero las dos

tenían esperanzas de poder volar algún día. Hasta que un día se reunieron en casa

y crearon el llamado AVIÓN, con el que en la actualidad se puede volar. Pero tan

solo era una maqueta con forma de avión. Ellas lo enseñaron a sus padres, sus

padres lo enseñaron al gobierno, el gobierno lo enseñó al ejército y el ejército

admitió la idea de poder crear un avión, aunque al militante John Marrier no le

gusto la idea de poder crear un avión y rompió la maqueta de las dos niñas. Las

niñas se pusieron tristes porque el mundo no podría ver lo que crearon pero

cuando el ejército se enteró lo mandaron a la cárcel. Las niñas pensaban que no

habría esperanza pero tenían una amiga que sabia dibujar y de lo que no se

acordaron fue de que su amiga había dibujado el avión, así que fueron a su casa y

le pidieron el dibujo que había hecho. Las niñas lo enseñaron y al final se pudo

crear.

FIN
32. LOS MONSTRUOS
Bayron, de 5º B.

Érase una vez en una cueva encantada había dos vampiros, cuatro trolls y

una bruja que siempre cazaban niñas. Dos aventureros fueron a la cueva, era por

la noche y los monstruos salieron y los vieron y los aventureros corrieron y los

monstruos se los comieron, después cazaron a doce niñas en la olla grande pero

faltaban catorce niñas más.

Después era la noche que se iban hacer más fuertes que antes porque

cazaron a las catorce niñas que faltaban y las metieron en la olla y vinieron dos

personas y prendieron fuego a la cueva y murieron los monstruos. Pero había uno

que no murió y el troll hizo lo mismo. Después el troll no hizo nada pero en 5

años se volvió malo y encontró a cuatro monstruos y se llevaron a los niños a las

alcantarillas. Tenían que coger a veinticuatro niños y treinta y siete niñas . Y en

las alcantarillas había un caldero de maco por dentro y viene un cocodrilo de las

cloacas y el cocodrilo se hizo amigo de ellos y ganaron a los buenos. Y colorí

colorado este cuento de miedo se acabó.

FIN
33. EL MONSTRUO NEGRO
Fátima, de 5º B.

En el año 1998, una familia se mudó a vivir en una casa de Argentina que

estaba encantada por un Monstruo Negro. Por la noche cenaron y se querían ir a

acostarse. Cuando el perro Cobi quiso bajar, se encontró una sombra y se puso a

ladrar. Cuando sus dueños se reunieron con él no había nada. Al día siguiente

cuando estaban desayunando Juan dijo:

—Mamá, ¿podemos ir a dar una vuelta?

Y la mamá contesta:

—Sí, vale.

Cuando volvieron se encontraron la casa destrozada. La limpiaron y

cenaron y se fueron a acostarse. Cuando Alejandra quiso irse a su habitación a

cambiarse se encontró el monstruo negro y se puso a gritar. Y desde ese

momento Juan y su familia se mudaron y no volvieron jamas.

FIN
34. EL TERROR DE LA LUNA LLENA
Hugo, de 5º B.

Había una vez tres niños que se iban de acampada, estaban muy felices.

Los niños se llamaban Miguel, Carla y Marcos. A Miguel le encantaba sacar fotos

a todo y Carla y Marcos eran gemelos que les gustaba investigar. En la primera

noche Carla, Marcos y Miguel salieron al bosque a investigar. Caminaron y

encontraron huellas ¡y calzoncillos! Corrieron asustados y se cayeron al rio y les

llevó la corriente. Consiguieron salir pero Miguel se fue a sacar fotos. Fueron a

buscarle y encontraron ¡un hombre lobo! que tenía a Miguel y pilló a Marcos pero

no a Carla.

Carla bajo la montaña, se quitó un zapato, cogió el zapato por los cordones,

volvió a subir y le dijo al hombre lobo:

—¡Comeme a mí si puedes, gordinflón!

El hombre lobo furioso fue a por ella y Carla le dio un zapatazo que lo dejó

inconsciente. Entonces corrieron al campamento y llamaron a la policía.

FIN
35. LA NIÑA ASUSTADA
Linda, de 5º B.

En 1986 una niña llamada Sara se fue a pedir chuches, porque era el día de

Halloween. Cuando llamó a la puerta de una casa, de repente se abrió sola y la

niña dijo:

—¿Hay alguien aquí?

Una vocecita terrorífica contestó:

—¡Sí, estoy aquí! ¡Ven niña, ven! ¡Tengo muchas chuches para ti!

Entonces la niña entró, pero tenía mucho miedo. Cuando vio a la viejecita

en la cocina se asustó más, la viejecita era una bruja, su casa estaba llena de

calaveras. Tenia muchos niños allí, todos encadenados y que pedían ayuda. Sara

no sabía que hacer, quería escaparse de aquella casa embrujada, pero cuando lo

intentó, una mano salió del suelo y la agarró fuerte. Sara empezó a llorar y a

gritar.

—¡Deja que me vaya! ¡No quiero chuches, no quiero nada, sólo quiero a

mis padres!

Era demasiado tarde.

—¡Sí, mi niña, como todos los demás que están aquí!

En el medio de la cocina había una enorme olla hirviendo y la viejecita dijo:

—¡Sólo me faltan 4 cabezas de niños, 3 piernas de niñas, 5 orejas, 2 lenguas,

3 manos y mi receta ya estará lista!

Y cuando la viejecita fue a liberar al primer niño, sin querer los liberó a

todos. Los niños fueron corriendo hacía ella, la cogieron por los brazos y por las

piernas y la tiraron a la olla. Luego salieron corriendo a sus casas y dijeron que

nunca volverían a pedir chuches el día de Halloween.

FIN
36. LAS SOMBRAS
Lydia, de 5º B.

Érase una vez dos niñas llamadas Magarita y Amapola. Margarita salió a la

calle, pasó mucho tiempo desde las 16 30 hasta las 20 00. Iba a ir a su casa cuando

una sombra cobró vida. Margarita salió corriendo. Su hermana Amapola la fue a

recoger y cuando Margarita llegó a casa vio que Amapola no estaba, porque

seguía perdida. Su hermana Margarita seguía buscándola. Un día Margarita,

como siempre, en su intento de encontrar a Amapola, se encontró con la sombra,

esta vez eran dos. Magarita asustada quiso huir, pero pensó en preguntarle que si

sabía algo de su hermana. Las sombras comenzaron a reírse diabólicamente,

Margarita estaba aterrorizada. Una de ellas le pidió que se acercara, Margarita

reconoció la voz, era la voz de su hermana Amapola. Confiada, Margarita

comenzó a acercarse, cuando de repente la otra sombra se abalanzó y la envolvió

en una misteriosa oscuridad. Margarita encontró a Amapola, pero, eso sí, fueron

convertidas en sombras misteriosas para siempre que intentaban atrapar a todas

las niñas que pasearan a solas por las calles de noche.

¡¡¡Cuidado con las sombras!!!

FIN
37. LA NIÑA QUE LLORA SANGRE
Mabelín, de 5º B.

Esta es la historia de una guapa niña que se llamaba Clara, tenía su cabello

rojo y largo hasta el culo. Sus padres la amaban mucho pero nunca podía salir de

casa. Cuando la niña se entristecía y lloraba mucho, cuando lloraba sus lágrimas

eran de color rojo (es decir, de color sangre). Durante la noche se despertaba e iba

a pedir caramelos en las casas. La veían llorando sangre. Y la gente se asustaba

mucho y llevaba un cuchillo en la mano para matar a la gente que no le daba

cuches. A la niña le gustaban las historias de miedo, de acción, de Halloween. Un

día la niña estaba en casa feliz cuando tocaron la puerta, ¡eran ladrones! La niña

fue corriendo a su habitación para escapar de ellos pero la cogieron antes de

tiempo, le taparon la boca para que no gritara, también le amarraron las manos y

piernas.

La llevaron a una casa secreta bajo tierra. La niña preguntó:

—¿Queréis dinero? Mi padre tiene mucho dinero.

Y los ladrones contestaron:

—¿Cuánto tienen tus padres?

Y la niña contestó:

—¡Tienen 900.000.000 de euros!

Entonces los ladrones llamaron a los padres de la niña, Susana y Daniel, y

les dijeron:

—Si no nos dais 900.000.000 de euros mataremos a su hija.

Los padres contestaron:

—No tenemos tanto dinero.

Al escuchar que los padres no iban a pagar el rescate la niña empezó a


llorar sangre. A uno de los ladrones le dio un infarto y el otro salio corriendo de

allí. Y la niña se prometió que si alguien secuestrase a alguien de su barrio lo

acuchillaría hasta la muerte.

FIN
38. UN HALLOWEEN TERRORÍFICO
Melisa, de 5º B.

Una noche de Halloween, una niña llamada Amelia salió a pedir chuches a

las puertas de las casas. Fue a buscar a sus dos amigar, Melisa y Ana Laura, y

tocaron varias casas. Las madres de Melisa y Ana Laura las llamaron para que

fuesen a cenar y tuvieron que dejar a Amelia sola. Amelia quiso seguir tocando

más casas pero cuando fue al centro de la Plaza donde ella vivía vio sombras

cruzando muy cerca de ella y se empezó a asustar muchísimo. Cuando empezó a

asomarse para ver mejor, vio personas disfrazadas de payasos asesinos y cuando

empezó a correr le empezaron a tirar huevos. Cuando salió de la plaza se

encontró a Melisa y Ana Laura y ellas le preguntaron porque estaba tan asustada

y ella se lo explicó. Melisa y Ana Laura le dijeron que les había pasado lo mismo a

ellas y acompañaron a Amelia a su casa para que se bañara y se arreglara y

pudieran salir y seguir tocando en las casas para pedir chuches todas juntas.

¡Se lo pasaron genial¡

FIN
39. HISTORIA DE TRES AMIGAS
Nahia, de 5º B.

Érase una vez que tres amigas fueron a un parque y luego a comer al

castillo de su amiga Mangle, que era la princesa. Pero al entrar, Leia se fue

corriendo al baño. Sus amigas se preocuparon y pensaron que era por su poder ya

que todas tenían un poder: Mangle era un hada, Nahire era una elfa y Leia era

una bruja. Un rato después Nahire fue a mirar y volvió corriendo muy asustada

Mangle le preguntó que le pasaba pero no tuvo respuesta. Entonces Mangle fue

pero no volvió. Nahire salió corriendo del castillo y empezó a gritar por el pueblo

decía así:

—¡Auxilio, mi amiga ha desaparecido, no la encuentro está en el castillo!

Se creyeron que estaba loca y la metieron en un manicomio. Unos días

después la chica salió y fue al sitio más oscuro que encontró, se cambió y fue

corriendo al castillo. Entró y la puerta se cerró haciendo un horrible ruido.

¡ESTABA ENCERRADA! No había nadie, intentó abrir la puerta pero no había

manera, estaba cerrada con llave.

¡DE REPENTE VIO ALGO¡ y le preguntó:

—¿Quién eres? —le dijo —Soy Mangle, la princesa.

Se asustó y se sorprendió, se acercó para abrazarla pero no era ella, era un

vampiro. Leia se acercó y convirtió a Nahire en fantasma y las sacó y ese pueblo

se convirtió en su pueblo y todas las personas se convirtieron en sus súbditos.

FIN
40. LA NIEBLA
Naim, de 5º B.

Érase una vez una clase que estaba castigada sin recreo y de repente todo el

mundo empezó a gritar, se escuchaba como se empujaban los niños. La clase que

estaba castigada se asomó y vieron cómo se acercaban una inmensa niebla. A

algunos niños ya les alcanzaba la niebla. Y cuando salían de la niebla salían

infectados, verdes, salían locos, algunos salían sin cráneo, algunos sin mano y

hasta sin piernas, empezaron alguno a pelearse con los infectados.

Y al matar a los infectados explotaban y mataban a los niños. Algunos

niños intentaban escapar pero no se podía, sólo había un escapatoria: matar a los

locos, pero era muy difícil. Volvieron a las clases, algunas clases murieron

mientras mataban a los niños pero algunas seguían en pie o iban muriendo cada

vez más y la niebla iba a más, pero la clase que estaba castigada seguía luchando .

Entonces a uno se le vino a la cabeza: atraer a un loco y lo matarlo al lado de la

puerta para que explotara la puerta y es lo que hicieron y cuando salieron vieron

un autobús, se montaron todos, la profesora arrancó el autobús y fueron a la

ciudad. Pero ya había llegado la niebla, estaba infectando a todo el mundo. Se

dieron la vuelta y fueron a un pueblo de camino se encontraron a un loco todos

estaban en tensión pero la profesora dio un movimiento brusco con el autobús el

loco empezó a correr detrás del autobús pero el autobús lo dejo atrás. Cuando

llegaron al pueblo había supervivientes y se montaron en el autobús

aterrorizados.

Fueron a una montaña, cuando subieron se encontraron una base militar al

entrar vieron que estaban los militares vivos y en ese instante los militares le

ayudaron y les curaron.

FIN
41. ADRIÁN Y LA CALABAZA
Salek, de 5º B.

—¡Hola, Adrián! —dijo la madre de Adrián.

—¿Qué traes ahí? —preguntó Adrián con incertidumbre, y empezó a

rebuscar en la cesta .

—¿Qué haces Adrián!

—¡Hala una calabaza! ¡Qué grande! —exclamó Adrián con gran asombro.

Y de repente le salieron unos ojos en la calabaza.

—¡Ahhhhh! —gritó Adrián.

—¿Qué ha pasado? —contestó la madre de Adrián— Ha sido la calabaza

—¿Qué te va a hacer una calabaza? —dijo la madre de Adrián.

Llegó la noche y Adrián se despertó para ir al baño y vio a la calabaza

yendo a la habitación de sus padres y antes de que se diese cuenta la calabaza,

Adrián tiró la calabaza por el balcón y sonó un ¡Plaf! Y se levantaron sus padres

¿Qué ha pasado?

—¿Porque sigues despierto? —dijeron sus padres.

—No sé— dijo Adrián.

FIN
42. LOS NIÑOS EN EL BOSQUE
sOFÍA, de 5º B.

Una vez unos niños fueron al bosque pero no dijeron a nadie que iban.

Tenían miedo y se perdieron muy fácilmente. Una semana después los

padres dijeron:

—¿Dónde están los niños?

Fueron a buscarlos pero estaban tan adentro en el bosque que no podían

encontrarlos, pero el perro fue corriendo detrás de los niños y encontraron su

casa. El perro quería quedarse para siempre y el padre dijo que sí.

Pero el siguiente día que fueron a una acampada y se llevaron al perro se

les escapó. Los niños y los padres del vecindario fueron a buscarlo al bosque

pero el perro se había ido a un castillo. Cuando lo encontraron decidieron volver a

casa.

FIN
43. LA NIÑA MALDITA
Yoel, de 5º B.

Un día había cuatro niños que se llamaban Juan ,Esteban , Paulo y Ana.

Estaban jugando a fútbol. Esteban tiro la pelota y entró en una casa. Juan que era

muy atrevido fue a por ella.

Dijo Paulo:

—Vámonos de aquí…

Contestó Juan:

—No, quédate aquí.

Dijo Paulo:

—Vale..

Ana dijo:

—Mirar aquí.

Entraron en la cocina y vieron la pelota llena de sangre. Se escuchó un

ruido extraño en la parte de arriba.

Juan dijo:

—Vamos a subir.

Paulo:

—Nosotros no vamos a subir.

Y dijo Juan:

—Vale, pero quedaos aquí.


—Vale —dicen todos.

Juan subió las escaleras y gritó. Había visto a una niña, que se llamaba

Verónica, y la niña le clavó el cuchillo, después bajo las escaleras y mató a Paulo ,

Ana y Esteban. Juan que seguía vivo arrastrándose y sangrando mucho avisó a la

policía.

Les dijo:

—En la casa abandonada mataron a mis amigos.

Una niña, cuando dijo eso se murió. La policía de toda la ciudad fue a la

casa y al entrar vieron a Paulo, Ana y Esteban muertos. Subieron las escaleras y

vieron a la niña. ¡No le afectaban las balas!

FIN
44. RAFAEL
Heimdahl, de 5º C.

—La leyenda dice que las noches de Halloween, todos los espíritus salen y

poseen a las cosas más cotidianas. Yo me llamo Rafael y tengo 8 años y soy muy

fan de las historias de Halloween. Hoy mis padres tienen turno de noche… ¡Y

estoy solo! Menos mal que tengo un caza espíritus. Pero me aburro un motón,

llamaré a Marcos.

Rafa llamó a Marcos para que éste fuera a casa de nuestro pequeño amigo.

Cuando llegó se empezaron escuchar ruidos extraños, Rafa fue corriendo a su

armario y cogió su caza espíritus y se dio un paseo en busca de sucesos

paranormales. Marcos escuchó ah Rafa pegar un grito espantoso, entonces decidió

ir a ver qué pasaba

—¿¡CÓMO PUEDE SER QUE TE ASUSTES CON UN RATÓN?! Ni que fuera la

Niña del pozo.

—Y entonces… ¡¿Qué es eso?!

—¡¡¡¡¡LA NIÑA DEL POZOOOOOOOOOOOOOO!!!!! Querido Rafa, te diré una

cosa… ¡Corre!

Los dos niños muertos de miedo decidieron salir de la casa y ponerse a correr.

—Oye Rafa a lo mejor ya no nos persigue.

Los dos miraron para atrás y no la veían. De pronto alguien les tocó la espalda.

—¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!

—Rafa no es ella, es Natalia disfrazada de la niña del pozo.


—¿Quién es ella?

—¿A quién te refieres?

—A la niña de allí, Dios, me encanta el disfraz que lleva.

¡¡Correddddddddddddddd!! —dijo Marcos

—¡¡¡NIÑOS SOLO QUIERO JUGAR!!! —exclamó la Niña del Pozo.

—Chicos, hoy hemos corrido mucho, menos Natalia ¡Y estoy harto! Súper caza

espíritus… Ups me lo dejé en casa

—¡¡¿¿QUEEEEEEEE??!! —exclamaron Marcos y Natalia a la vez.

—Supongo que nos toca correr o enfrentarnos a ella.

—Muy bien, Rafa, sobre todo por somos críos.

Los 3 niños estaban aterrorizados. De repente todas las decoraciones y

chuches de Halloween desaparecieron al igual que los disfraces cobraron vida.

—No, no y ¡NOOO! La noche de Halloween es algo más que una fiesta, es una

experiencia un recuerdo y tú no nos lo quitarás, solo eres una representación de

nuestros miedos no creo en tú no eres real solo eres una fantasía, o mejor dicho

una pesadilla.

—Eso, eso.

—¡¡No creemos en ti!!

FIN
45. EL LIBRO DE HALLOWEEN
Brian, de 5º D.

Había una vez en Halloween unos niños que se encontraron para ir a pedir

chuches y dijo uno: «Yo voy a conseguir más que tú» y el otro le contestó «No, no,

no, tú estás loco». Entonces salieron a Halloween y había mucha gente disfrazada y

no se dieron cuenta de que IT los seguía. Entonces empezaron a pedir chuches y

truco trato. Al día siguiente no aparecieron en su casa y las madres salieron a

buscarles pero no los encontraron, fueron a la policía y la policía no estaba. Había

muchos secretos y era IT. La policía lo encontró cogiendo a un niño y le pegaron

un tiro en la cabeza.

FIN
46. Noche de Halloween
Lola, de 5º D.

Hace mucho una noche de Halloween cuatro niños estaban pidiendo

caramelos, después se encontraron a un niño pero no sabían que estaba poseído

por el diablo, poco después tocaron en la casa maldita, entraron y vieron cabezas,

cuchillos llenos de sangre, e incluso vieron la sombra de Chuki. Los niños

empezaron a correr pero Chuki cogió a uno de ellos y le sobornó con que si no

viene va a matar a matar entonces los niños se fueron a sobarlo y cogió y lo mató.

FIN
47. EN HALLOWEEN
Erika, de 5º D.

Érase una vez un niño llamado Enol y su amiga Claudia. Una noche oscura

con luna llena, Enol y Claudia se fueron con sus amigos a un cementerio, justo

ese día era Halloween. De repente apareció una bruja malvada que hechizó a sus

amigos. Claudia y Enol corrieron a ponerse a salvo de sus amigos, llamaron a la

puerta de sus vecinos y ellos también estaban hechizados, !estaba todo el pueblo

hechizado¡ Claudia y Enol fueron corriendo a una choza que conocían y ahí se

pudieron poner a salvo, unos cuantos minutos, cuando llegaron todas las

personas del pueblo y sus amigos, empezaron a aporrear la puerta y Claudia y

Enol salieron corriendo, pero la gente del pueblo los alcanzaron y se comieron sus

sesos rompiéndoles la cabeza, pero también se comían entre ellos, osea que no

quedo ninguno. Estaba todo el pueblo lleno de sangre y cuerpos muertos.

FIN
48. TODO OCURRIÓ EN HALLOWEEN
Emily, de 5º D.

Era una noche oscura, todos se preparaban para este día, todas las casas

estaban llenas de viscosidades asquerosas y daban muuucho miedo , un grupo de

niños se fue a comprar sus disfraces terroríficos. Esos niños se llamaban: Enrique ,

Andrea , Iria , Aythamy , Loren y Emily .

Ya comprado sus disfraces, se fueron a un pueblo muyyyy lejano, donde se

encontraron con la abuela de Iria , lo que no sabían de ella era que ella era ¡una

bruja comeniños! Como a los niños les encantaban las chuches, se fueron a pedir

por ahí. La abuela tan inteligente, se hizo pasar por alguien que regalara chuches

y cuando fueron a pedir a ella los soborno con que se fueran a su casa para darle

mas chuches. Los niños aceptaron y la bruja los raptó . Los metió en jaulas y, 3

horas después los padres y unos zombies y fantasmas fueron a buscarlos a la casa

de la abuela comeniños y los raptaron a ellos también. Al menos ¡quedaba un

vampiro porque se hizo invisible! Lo que pasaba era que el vampiro era muy

vergonzoso y miedoso, pero cuando creía que estaba solo, llegó el esposo de la

bruja, que se había ido de viaje y dijo «Me necesita, come niños por mi culpa». De

repente le dio un golpetazo a la puerta y se besó con la bruja pero los padres

estaban en un sitio que nadie sabia ¡estaban en la azotea! Pero como los niños

sabían volar, los rescataron y cuando volvieron a casa y cuando fueron al cole,

bailaron y contaron su historia, aunque les tomaron por locos. Pero eso es un

secreto .

FIN.
49. EL TERROR
Margarita, de 5º D.

ÉRase una vez un niño de 4 añitos llamado Luis que iba a hacer su primer

Halloween. Como era pequeño y no podía ver pelis de miedo, no sabia qué era el

terror.

Luis fue a pedir las golosinas con su hermano mayor Guillermo y yendo de

camino Luis le dijo que no sabia qué era el terror, así que su hermano le dijo

—Puede que hoy lo descubras.

Guille y Luis fueron a la primera casa de la calle y Guille le explicó a Luis

que cuando tocas la puerta y sale el señor o la señora le dices «¿truco o trato?» y él

le respondió de acuerdo. Los dos dijeron a la vez «¿truco o trato?» y Luis se

sorprendió porque le dio muchas golosinas, y fueron de casa en casa y

consiguieron muchas golosinas. Y casi eran las diez en punto, faltaban 10 minutos

e iban a su ultima casa. Tocaron y dijeron «¿truco o trato?» y les abrió un chico de

la misma edad de Guille que les invitó a que entraran para que escogieran que

golosinas querían. El chico cerró la puerta y los llevó a una habitación oscura y la

cerró con llave. Los chicos se asustaron mucho y de repente se encendieron unas

velas y escucharon sonidos que venían detrás de ellos y giraron la cabeza y eran

una persona sin rostro y un vampiro. Entonces empezaron a correr súper

asustados.

Guille piso una baldosa del suelo y se cayeron los dos deslizados como con

un tobogán ,los llevaron a un sótano y vieron un ascensor y no dudaron en irse

hacia él y volvieron hacia arriba. Cuando ya subieron el chico y Guille se rieron.

Resultó que él y Guille eran amigos. Entonces Guille le dijo a Luis:


—Eso es el terror.

Luis se puso a llorar, se fue a su casa corriendo y contó todo lo que había

pasado. Entonces la madre castigó a Guille sin golosinas, y Luis tuvo más

golosinas y vivieron felices y comieron golosinas.

FIN
50. HALLOWEEN
Noa, de 5º D.

Esta es la historia de un niño llamado Lucas. Le gustaba investigar cosas

distintas, cosas de otro mundo. Y un día con sus amigos fue a ver a su abuela

Manolita, ella le contó que a veinte kilómetros de allí había una gasolinera

abandonada. Entonces se fueron. Por la ventana de la gasolinera vieron telarañas,

moscas e incluso huesos. Entraron y escucharon ruidos muy extraños y

descubrieron que tres fantasmas estaban haciendo una fiesta de Halloween. Era

una fiesta increíble, y desde entonces en la noche de Halloween se hacen fiestas

como esa.

FIN
51. ¿CÓMO SE CREÓ HALLOWEEN?
Xiomara, de 5º D.

Érase una vez un pueblo pequeño, una familia pequeña con tres hijos: el

mayor, el mediano y el pequeño.

Un día el alcalde del pueblo decidió hacer una pequeña fiesta, todo el

mundo se tenia que disfrazar pero …. los hermanos no querían disfrazarse. Todo

iba bien pero la bruja del pueblo se enteró de que no le habían invitado. La bruja

se puso furiosa e hizo un hechizo:

¡Abra cadabra... pun!

De repente en un segundo el alcalde era un gusano, los niños dejaron de

ser niños y era un caos. Los hermanos se asustaron y entonces fueron a la cueva y

hablaron con la bruja. La bruja les perdonó pero les dijo que cada año todo el

mundo tenia que disfrazarse. Lo aceptaron y vivieron felices y comieron

calabazas.

FIN
52. EL LIBRO DE HALLOWEEN
Ana Laura, de 6º A.

El día de Halloween llegará dentro de poco y todos nos estamos

preparando para salir a pedir caramelos o mucho mejor ir a lugares que den

mucho miedo. Somos siete amigos que vamos a estar juntos ese día y pasaremos

toda la noche por la calle.

Hemos estado preparando los disfraces y decidimos disfrazarnos algunos

de payasos y otros de vampiros. Primero pedimos caramelos y luego fuimos al

cementerio, porque nos habían contado que allí se podían ver fantasmas o

cualquier tontería de esas. Pero cuando llegamos al cementerio estaba cerrado,

entonces teníamos que atravesar la valla, uno de nosotros no quería entrar porque

era muy miedica y se fue a seguir pidiendo caramelos o a su casa a pasar el resto

de la noche con su familia, mientras que nosotros seguíamos adelante.

Como Eduardo se fue, pensamos que era mejor dejarlo a un lado y no

entrar, pero algunos seguían insistiendo.

—Deja a Eduardo tranquilo, que no sabe lo que se está perdiendo.

Dijo Tatiana impaciente.

—Vamos a entrar

Ya estábamos dentro, al pasar un rato empezamos a escuchar voces

terroríficas y a ver sombras a lo lejos, eran fantasmas pero ellos no lo sabían,

Tatiana, como era la más valiente y no creía en los fantasmas, les dijo a los otros

que no era nada si no que empezaban a ver y escuchar cosas raras por el sueño.

Cada vez se acercaban más a la sombra y escuchaban las voces mucho más,

se seguían acercando a la oscuridad y de repente se escuchó un grito. No era de

ninguno de nosotros y nos quedamos muy asustados porque no sabíamos de


quien era.

—Creo que podría ser de algún fantasma.

—Seguro que era mejor que me fuera con Eduardo, él tenía razón.

Dijo Kevin asustado y a la vez furioso.

—Pero cómo podéis creer en los fantasmas, ¿de verdad creéis en ellos?

Dijo Tatiana segura de sí misma.

Ninguno de ellos sabía que el fantasma iba detrás.

Pablo y Sara cayeron en un agujero, como Marcos iba hablando con ellos

dos, miró para atrás y vio que no estaban, entonces le preguntó a los otros que

donde estaban y miraron todos para el suelo y vieron como una especie de

ventana, Tamara sabía lo que era porque había oído hablar de ese símbolo y les

explico que significaba agujero o vacío, lo que le había pasado a Pablo y a Sara era

que se habían caído por ahí y Tatiana como siempre pensando que eso era una

tontería.

Al estar un buen rato más ahí Tamara empezó a asustarse porque estaban

buscando a Pablo y a Sara y no les encontraban, se quedaron pensando un

momento y encontraron la solución.

—El cementerio está embrujado.

Gritaron todos juntos y asustados.

Entonces salieron pitando de allí y Pablo y Sara se quedaron atrapados en

un portal maligno.

CONTINUARÁ…
53. EL REGRESO
Hugo, de 6º A.

Hace mucho tiempo los monstruos y los humanos vivían juntos en España.

Un día la persona más importante y poderosa “el Rey” dijo: “¡Los monstruos

deben ser desterrados porque por la noche atacan a los súbditos¡”. Esto lo hizo

para hacer creer a las personas que los monstruos debían ser desterrados pero la

realidad es que cuando era pequeño un monstruo le atacó y le traumatizó así que

juró que cuando fuera rey expulsaría a todos los monstruos.

La orden fue seguida y la guardia real buscó a los monstruos que se habían

escondido para no ser desterrados. Al poco tiempo todos los monstruos estaban

ya desterrados y las personas se quedaron muy triste porque los monstruos les

hacían la vida más fácil.

Años después los monstruos volvieron porque no aguantaban más vivir

desterrados alejados de sus antiguos hogares. Se refugiaron entre las sombras y

cuando tenían hambre se comían a algunas animales, pero lo que de verdad

hacían era crear una civilización en las sombras e idear un plan para acabar con el

Rey.

Meses después ya tenían todo organizado así que pusieron el plan en

marcha. Un día que el Rey estaba tranquilamente tomando un relajante baño, lo

cogieron por la espalda por sorpresa y se lo llevaron a las cloacas donde lo

torturaron y por último le vistieron, le llevaron a su discurso semanal y mientras

hablaba le absorbieron la sangre como vampiros y desde ese día vivió como un

monstruo odiado por las personas el resto de la eternidad en la oscuridad.

Desde ese momento todo el mundo tuvo miedo de los monstruos. Pero

ellos vivieron felices en las sombras.

FIN
54. LA PROFESORA DE FRANCÉS, 2.
Íker, de 6º A.

Era una fría noche de otoño cercana a Hallowen, y yo paseaba como todas

las noches por el cementerio desde que mi profesora vampira había muerto por

mi culpa la noche del pasado Hallowen, y de repente la tierra empezó a moverse,

y cuando menos me lo esperaba la tapa de un ataúd se abrió y una especie de

persona salió de él. Por unos instantes no podía ver nada, pero sí que podía oír lo

que decía aquella persona o lo que fuera. Su voz me resultaba familiar, pero en

esos instantes solo pensaba en que no podía ver. Cuando me calmé un poco, y

recuperé algo de visión pude reconocer aquella voz medio francesa medio

vampira, era ella, pensé, era Silvia, mi profesora de francés, mi delito.

Al recuperar la vista del todo pude verla con su piel seca, su pelo su túnica

y su capa negra de cuello rojo.

Pasaron unos instantes, y ninguno de los dos decía nada ya que los dos

estábamos confusos o eso creo. Segundos más tarde ella dijo:

—Te chuparé la sangre.

Yo no le escuché con mucha atención ya que todavía estaba pasmado. Al

final le dije:

—Silvia, eres tú.

Creo que ella no entendía bien la pregunta ya que no me respondió,

entonces le repetí. Esa vez si la entendió y dijo:

—No, soy la condesa Silvia, ¿quién osa hablarme?

Yo no sabía que responder asique solo le dije mi nombre:

—Soy yo Alexis, era un alumno tuyo, me recuerdas.

No se lo pensó mucho ya que me respondió rápido:

—Cómo no iba a recordarte, si no fuera por ti nadie sabría esto y no me


hubieran metido en una cama de vampiro o como lo llaméis los humanos, y por

eso con más razón te chuparé la sangre.

De repente saltó encima de mí y yo para salvar mi vida y ayudarla dije:

—Espera te puedo ayudar con tu venganza.

Ella se paró y dijo:

—A qué te refieres con mi venganza.

—Quiero decir que si no quieres vengarte de todas las personas que te

hicieron esto además de mí.

—Sí. ¿Pero como me vas a ayudar tú, no eres un vampiro?

—Bueno pues había pensado en que si llamaras a algunos vampiros mas

podríais tenderle la trampa.

No parecía que no le gustase la idea hasta que dijo:

—Pero como les tenderemos la trampa.

Entonces pensé, estoy muerto pero de repente se me ocurrió una idea y se

la conté:

—¿Qué pasaría si montara otra fiesta como el año pasado con la misma

gente, así tu y los demás vampiros les tenderíais allí la trampa?

—Buena idea, entonces lo haremos así gracias.

—No me las des, te la debía.

Entonces monté la fiesta y conseguí que viniera toda la gente.

Llegó la noche y el plan salió a la perfección aunque no del todo, porque

me mordieron y me convertí en un vampiro, y esa noche entendí que con los

vampiros no se negocia.

FIN
55. MISTERIO POR LA NOCHE
Rayan, de 6º A.

La noche de Halloween, cuando eran las doce, en la plaza de un pueblo los

niños estaban jugando al escondite. Varios de ellos que estaban escondidos en

una alameda a las afueras del pueblo, vieron algo extraño que estaba formado en

el cielo. Primero se hacían formas en el cielo, que resaltaban en la oscura noche.

Los niños se asustaron mucho, pararon de jugar y fueron a avisar a sus padres .

También la gente mayor que estaba en el bar salió a verlo por qué no creían a sus

hijos pero al verlo se sorprendieron. Al cabo de unos minutos se formó una z,

primero naranja y luego roja las personas más mayores empezaron a hacer

comentarios de que también se había formado antes de la guerra civil pero otras

personas pensaban que era un ovni que venía a avisar de que la noche de

Halloween era solo suya. Todas las mujeres salieron a la puerta de sus casas. Las

mujeres empezaron a hablar de que un día cuando se escapó un criminal de la

cárcel también se formó. Cuando toda la gente se fue a dormir se empezaron a oir

pasos, ladridos y golpes en las puertas. A la mañana siguiente toda la gente salió a

las puertas de sus casas. Los vecinos empezaron a preguntar que si sabían que

eran esos ruidos, y ya estaba la z.


56. YA LLEGÓ HALLOWEEN
Isael, de 6º A.

Érase una vez un niño llamado Pablo que tenía muchas ganas de que fuera

Hallowen. Cuando pasaron 9 meses por fin ya era Hallowen y se fue corriendo a

preparar su casa para cuando vengan sus amigos a recogerlo para ir una casa

encantada y a pedir chuches.

Cuando vinieron a recogerlo primero se fueron a pedir chuches y después

a la casa encantada. Después de varias horas pidiendo chuches por fin se fueron a

la casa encantada. Cuando llegaron se encontraron muchas cosas raras como:

lagartos sin cabeza y un montón de telarañas. Cuando entraron se quedaron con

la boca abierta por que había un montón de bichos muy raros y un montón de

cámaras por todos lados. Fueron recorriendo la casa cuando de repente ponía en

una puerta NO PASAR los chicos se asombraron porque estaba escrito con sangre

y cuando un chico abrió la puerta había un hombre muerto y un payaso asesino

vigilando con todas las cámaras que estaban allí colgados. El hombre rápidamente

cogió su hacha y los intentó matar a todos pero se fueron antes de que cogiera su

hacha. Fueron corriendo a esconderse pero no les dejó y cundo ya le llevaban un

poco de distancia vieron de lejos una piedra enorme que les podría esconder a

todos. Cuando se escondieron el payaso les estaba buscando pero no los

encontraba y cuando pasó junto a la piedra todos lo cogieron del cuello y lo

dejaron dormido y fueron corriendo a por el coche. Cuando les dejó a cada uno en

su casa hablaron por wasaap y dijeron que nunca más iban a ir a ese sitio.

FIN
57. LA FRÍA NOCHE DE HALLOWEEN
Annuar, de 6º A.

Unos adolescentes estaban esperando al día siguiente para la fiesta de

Halloween, eran 5 chicos. Dos de ellos decidieron pasar por la casa encantada,

entraron tocaron el timbre y se abrió la puerta. Un chico decía que tenía miedo

pero el otro decía ¡SOY UN VALIENTE! Entonces entraron. Empezaron a escuchar

un ruido y a ver sombras, subieron al piso de arriba.

De repente vieron una cosa que se movía. Salieron corriendo derechos

hacia la puerta, pero se cerró y se quedaron atrapados para siempre y no hubo

rastro de ellos nunca más. No se acercaba nadie a esa casa, ni el del periódico. El

detective JARI TOMSON hizo pruebas a la casa planta por planta hasta llegar a la

azotea y encontró algo raro debajo de un manto. Puso la mano para levantar el

manto y vio los 2 cadáveres y se asustó, pero aguantó y salió con los dos

cadáveres. Los investigó y había huellas. Eran de JEEF COLDON, el mayor

criminal de las vegas en 1972, que había muerto en 1992. La pregunta que se

hizo el detective JARI es que si el criminal murió en 1992 ¿cómo mató a los dos

chicos en 2009? Gracias a todo eso el detective se hizo famoso.

FIN
58. LA CASA EMBRUJADA
Miriam M. y Danna, de 6º A.

En una noche muy nublada de Halloween, un grupo de amigos pasaron

delante de una casa muy tenebrosa. Tocaron la puerta y de repente se abrió sola,

no tenía luz. Cuando empezaron a escuchar unos ruidos tenebrosos empezaron a

caminar dentro de la casa Y se separaron para investigarla. Uno de ellos estaba

caminando cerca de unas ventanas y entonces algo lo empujo y se cayó por la

ventana. Los demás chicos escucharon un ruido de romperse un cristal, salieron

corriendo a ver de dónde procedía el ruido y cuando llegaron vieron la ventana

rota y se asomaron a ver qué fue lo que lo ocasionó que el cristal se rompiera. Al

ver a su amigo en el suelo se asustaron y salieron corriendo .

Algo tiró a uno de ellos de los pies y lo arrastró por todo el suelo hasta

llegar a un armario en el cual había muchas cosas diabólicas, llegaron a la puerta

y no se podía abrir. Comenzaron a correr hacía las habitaciones todos juntos para

no volver a pasar lo que pasó y cuando llegaron a la habitación vieron dos

gemelas las cuales le decían: “¡Ven a jugar con nosotras!” Los niños salieron

corriendo de esa habitación .

Se toparon con otra habitación la cual comenzó a encenderse y a apagarse,

entonces se giraron y justamente había un cristal. Cuando se vieron en el espejo

vieron un diablo que se asomaba por la puerta. A medida que la luz se apagaba el

diablo se iba acercando más, más y más, y llegó un momento en el que llegó a

tocar a uno de ellos el hombro. Salieron corriendo, ese diablo cogió al niño que le

tocaba el hombro , los demás salieron corriendo de una forma muy nerviosa.

Quedó solamente uno que dejaron sobrevivir hasta que llegó el día en el

que no podían hacer nada más .

FIN
59. LA CASA FANTASMA
Maikel, de 6º A.

Había una vez en Halloween unos niños que se encontraron para ir a pedir

chuches y dijo uno:

—Había una vez, un niño que vivía en una casa encantada en la que su

madre estaba viendo la televisión.

Pero de repente, él niño se despertó de la siesta y oyó un grito en el salón.

Era su madre que la habían encerrado y ahogada en la sábana del cuarto de su

marido. Él niño ahogado en lágrimas se mató y su espíritu vaga por la casa donde

su madre fue ahogada. Pasaron unos dos años, pero él niño seguía paseando en la

casa para que alguien entrase y hacerle lo mismo que le pasó a la madre el 1 de

noviembre, el día de los muertos, donde los niños pedían chuches y regalos para

la fiesta de Halloween. A las siete, cuando empezaba la fiesta, unos doce niños

aproximadamente, entraron y pidieron chuches pero al ver que no había nadie,

salieron a otras casas y por la noche volvieron para quedarse a dormir la

madrugada e irse a las seis de la mañana. Después de haber conseguido tantas

golosinas, fueron a dormir a la casa abandonada. Al ver él niño a esos chicos, fue a

asustarlos y ahogarlos en la sábana que estaba en el sótano, donde había muchos

ruidos extraños. El niño muerto bajó y vio a su madre viva comiendo ratas y

cucarachas podridas. Y se arrepintió de haberse apuñalado a sí mismo. Los niños

bajaron al sótano y los encontraron, dijeron que podían ayudarles con un ritual

en el que si está el muerto revive y se reencarna en su anterior recuerdo de su

mente tan pequeña y descerebrada que tenía el niño. Al día siguiente, hicieron el

ritual y el niño se reencarnó en su pasado, su madre contenta fue feliz y adopto a

los doce niños.

FIN
60. LA NOCHE DE HALLOWEEN
David y Osama, de 6º A.

Había una vez una panda de niños que le gustaba disfrazarse de payaso

asesino. En su barrio había una casa abandonada y aquella noche se reunían

todos los niños a para tirar huevos. Al siguiente día se fueron a asustar a los niños

pequeños y de repente se encontraron a un borracho disfrazado de payaso y

salieron corriendo a su casa.

Mientras tanto el borracho golpeó la puerta fuertemente 1,2,3 y luego se

fue, los niños llamaron a la policía y la policía no encontró ni rastro de aquel

payaso, los niños asustados se calmaron y fueron en busca del payaso. Estaban en

la calle y no encontraron al payaso así que al final se rindieron. Al día siguiente

quedaron en la plaza de Playa Honda pero no asistieron 2 niños. Fueron corriendo

a la policía y vieron que esos 2 niños estaban desparecidos y empezaron a creer

que fue el payaso. Después fueron a su casa y cogieron unas escopetas, pistolas y

cuchillos, que las tenían guardadas en el desván, salieron de la casa y fueron a la

casa encantada donde supuestamente estaría el payaso. Al llegar encontraron

rastros y fueron a investigar. La casa daba con las cloacas y allí encontraron al

niño con una nota que ponía: “No os molestéis en buscar al otro niño, no lo

encontrareis”.

Entonces encontraron al payaso con el niño y empezaron a dispararle. Al

final el payaso murió y se fueron a su casa sanos y a salvo. Entonces llegaron sus

padre y les contaron lo que pasó.

FIN
61. AQUELLA NOCHE DE HALLOWEEN
Inés, de 6º A.

Había una vez tres niños llamados Andrés,Alberto y Lucía. Salieron en la

terrorífica noche de Halloween a pedir caramelos. Andrés se disfrazó de payaso

asesino, Alberto de zombie y Lucía de muñeca diabólica.

Fueron por las casas pidiendo dulces hasta que se dieron cuenta de que

uno tenía mala pinta. Alberto decía que no le tenía miedo a nada,a si que Lucía le

dijo que lo oliera y lo probara, Alberto lo probó y dijo que sabía raro. Pasó un rato

y llamaron a otra casa, entonces en ese momento Andrés vio algo raro dentro y

rápidamente cuando el hombre cerró la puerta Andrés les dijo a Alberto y a Lucía:

—¿Habéis visto lo mismo que yo?.

Lucía contestó:

—Yo no he visto nada. ¿Y tú Alberto?

—Vi como una mancha de sangre en la pared.

Andrés añadió:

—Eso mismo vi yo.

—¡Vamos a investigar! —dijo Alberto, el más valiente.

—¡Sí, sí, vamos! —exclamó Lucía.

Fueron por la parte de la terraza, cuando de repente...

—¡Un perro! —gritaron todos.

Cuando se asomaron parecía que no había nadie en la casa entonces


dijeron en baja voz:

—¿Hay alguien ahí? —no contestó nadie y entonces entraron a la casa.

Estaba todo tirado y muy sucio, apenas se veían las escaleras del polvo que

tenían. Entonces oyeron una voz que decía:

—¡Ayuda, ayuda!.

Todos se sorprendieron y decidieron subir a la habitación de arriba.

Alberto como era el más valiente iba el primero, Lucía iba en el medio y Andrés el

último porque era el más miedoso. Cuando llegaron a la habitación se

escondieron por si los veían. Se escuchaban más ruidos en aquella habitación.

Alberto dijo:

—No seáis gallinas, vamos a entrar ahí y descubrir qué hay para después

llamar a la policía.

Lucía y Andrés le dijeron a Alberto que estaba loco, pero ya era demasiado

tarde. Alberto ya había abierto la puerta y no se creía lo que estaba viendo... Era

una fábrica de golosinas, los gritos que se oían eran del hombre que las estaba

fabricando que se le había metido el perro en la máquina y se le había derramado

todo. Y la mancha de la pared era zumo de frambuesas. Entonces el hombre

llamado José se asustó y les peguntó qué hacían allí. Andrés le dijo que habían

escuchado unos gritos y entraron para ver que pasaba. José les dijo que estaba

agradecido porque quisieran ver qué le pasaba pero a la vez enfadado porque

entraron sin permiso. Todos se disculparon y además se hicieron amigos.

Cuando llegaron a casa se lo contaron a sus padres, y se fueron a dormir

soñando que tenían un amigo más en el que confiar.

FIN
62. UN DÍA DE HALLOWEEN
Laura, de 6º A.

Érase una vez dos hermanos, llamados Patricia y Álvaro, que todos los

años decoraban su casa con telas de araña, esqueletos, brujas, etc. Daban

golosinas a todos los niños que decían truco o trato en la puerta de su escalofriante

casa, y también se hacían sus propios disfraces. Por supuesto este año igual.

El disfraz de Álvaro era de policía zombi, lo único que necesitó para

hacerlo fue un chaleco, gomaeva gris y un poco de maquillaje. Y el disfraz de su

hermana era una sorpresa, su hermano estaba desesperado por saber de qué se

iba a disfrazar Patricia.

Su hermana decidió contárselo porque, si no, no le dejaba ni respirar.

—Me voy a disfrazar de animadora zombi —dijo Patricia.

—¿Y cómo lo piensas hacer? —le preguntó su hermanito.

—Pues de esta manera…

Mientras le explicaba cómo hacerlo, la madre estaba haciendo unas

deliciosas galletitas para sus hijos y amigos que habían invitado a su casa. Y así

pasaron la noche de Halloween Patricia y el pequeño Álvaro.

FIN
63. YA LLEGÓ HALLOWEEN
Saad, de 6º A.

Un día llego Halloween, había unos niños llamados Saad , Yassine e Íker

eran unos niños buenísimos, sacaban muy buenas notas y se portaban bien. Sus

madres estaban orgullosos. Con ellos jugaban unos niños que se portan súper

bien como ellos pero Íker, Saad y Yassine se mudaron de casa entonces ya no

podían estar con los otros niños que eran muy buenos y había otros niños y

Yassine , Íker y Saad le dijeron

—¡Hola, ¿podemos jugar con vosotros?

Ellos dijeron que sí y les preguntaron cómo se llamaban.

—Osama, Isael y Maikel.

Siguieron jugando así todos los días. Todo seguía igual pero un día dijo

Osama:

—¿Por qué no vamos a comprar al supermercado papas de cocinar y

huevos, nos subimos a un tejado y se los tiramos a la gente?

En ese momento sólo estaban Osama, Maikel e Isael, y cuando vinieron los

demás les dijeron:

—Cierren los ojos que tenemos una sorpresa para vosotros.

Ellos estaban muy emocionados porque pensaron que era algo muy chulo,

pero cuando vieron que empezaban a tirar huevos y papas se asustaron. Pero

cada día iban con ellos así cada día empezaron a tirar huevos etc.

Llegó Halloween otra vez y Osama dijo:


—¿Por qué no entramos a una casa abandonada?

Lo hicieron y empezaron a pintar las paredes con grafiti. De pronto un

fantasma cerró la puerta muy fuerte, intentaron escapar por todos los lados pero

no pudieron. Osama decía:

—Los fantasmas no existen.

Luego se fue solo y los chicos se asustaron y fueron a buscarlo. Estaba

muerto y su espíritu les llamaba. Se asustaron mucho y cuando se dieron la vuelta

el espíritu de Osama les corto la cabeza.

FIN
64. UNA NOCHE ENCANTADA
Ximena, de 6º A.

Os voy a contar una historia muy espeluznante.

Una noche de Halloween un niño llamado Juan fue a pedir dulces con sus

amigos, Andrés, Ariana, José, Claudia y Kevin por todo el vecindario. Ellos tenían

hecho un mapa para ir por todas las casas. Cuando ya habían pasado por todas las

casas contaron los dulces que tenían, vieron que cada uno tenía solo 10 caramelos,

a Ariana se le ocurrió ir a la casa de los González a pedir caramelos porque ellos

eran ricos y seguro habían comprado para el truco trato y si con suerte se cansaron

de estar abriendo y cerrando la puerta podrían haber dejado un bol de los

caramelos afuera y ellos podan arrasar con todo. Pero lo que no pensaron fue que

tenían que cruzar el “bosque encantado”, por ahí nadie pasaba porque decían que

por las noches aparecían fantasmas.

Armados de valor se propusieron pasar. Cuando cruzaron vieron la casa de

los González muy alegres. Fueron hasta allí, no tuvieron suerte porque tuvieron

que tocar la puerta, cuando les abrió les dijo la señora.

—Pasen y sean bienvenidos.

Pasaron tranquilamente, pero la señora les había puesto una trampilla, se

cayeron y la trampilla se cerró y se quedaron atrapados, para salir tenían que

acertar unas preguntas, acertaron todas las preguntas, pero Andrés falló una y la

habitación se empezó a encoger. Claudia encontró una salida y todos se escaparon

sin que la señora se diera cuenta. Corrieron hasta sus casas y prometieron no

volver a la casa de los González.

FIN
65. CUENTO DE HALLOWEEN
Aday, de 6º A.

Había una vez una familia muy rara llamada la familia Frankie. Tal familia

le decía a todo el mundo que existía una casa encantada pero como todos los de

ese barrio eran muy asustadizos, no se atrevían a entrar. Hasta que un día la

familia Frankie se atrevió a entrar en la supuesta casa encantada. Cuando

consiguieron entrar empezaron a oír ruidos. Se quedaron quietos en ese sitio y

minutos después se abrió una puerta sin ninguna razón, dejando escuchar unos

ruidos de esos que nunca se te borran de la cabeza. Lentamente, fueron

caminando hacia la puerta. Al entrar, la puerta se cerró de golpe. Entonces

apareció un hombre con un cuchillo y les dijo:

—!Os vais u os mato!

Entonces toda la familia se puso a correr buscando la salida. No podían

pararse pues el extraño hombre estaba corriendo detrás de ellos. Consiguieron

llegar a la puerta pero justo entonces una mujer mayor con una blusa manchada

de sangre les impedía escapar. La anciana empezó a reírse y dijo:

—Gerald, querido, no espantes a nuestros invitados. Te tengo dicho que

con la comida no se juega.

Justo en ese momento la pequeña de la familia Frankie fue tirada al suelo y

arrastrada pasillo abajo. Todos aterrados empezaron a correr buscando una salida.

Fue entonces cuando encontraron una puerta abierta que daba a la calle y sin

dudarlo salieron corriendo de allí. Nunca mas se volvió a hablar de aquello tan

malo que vieron en esa casa, siguieron con sus vidas normales. Eso si, Lina, la

pequeña de la familia jamás volvió a ser encontrada. Cuentan que todos los días

31 de Octubre se escuchan sus gritos en aquella casa tan misteriosa.

FIN
66. LA PEOR NOTICIA
Miriam y Alexia, de 6º A.

Érase una vez una niña llamada Anabel, de pelo y ojos negros y la mirada

de asesina. Tenía un hermano llamado Zayn con pelo rojizo, pecas y ojos negros.

Una noche cenaban los hermanos y sus padres. Les dieron una noticia en la que

los padres tenían que mudarse a otro país por motivos de trabajo, en el que no

iban a volver nunca, y los niños se tenían que quedar en un orfanato hasta que los

adoptara una familia. Ellos no podían creérselo y cada uno se fue a su cama.

Llegó el día en el que se tenía que separar la familia, todo eran llantos y

caras tristes. Cogieron la furgoneta y llevaron a los niños al orfanato. Los padres

se fueron y los niños sufriendo, pasando el peor día de sus vidas. Mientras los

padres estaban en la gloria porque no querían a sus hijos y en realidad la noticia

la habían escrito ellos.

Los niños se fueron haciendo mayores con esa mentira en la cabeza. Allí en

el orfanato, estaban en su cuarto los dos y vino la cuidadora dándoles una noticia

que era que una familia les iba a adoptar . Ellos no estaban ni felices ni tristes,

porque aunque hayan pasado muchos años no se podían olvidar de sus padres,

que no les quedó otro remedio que irse con esa familia. Pensaban que la familia

que les había tocado sería buena pero en cambio fue todo lo contrario: los

maltrataban, casi ni les daban de comer, y hacían el trabajo de sus padres. Al cabo

de los años sus padres adoptivos fallecieron y todo el mundo pensaba que los

culpables de la muerte fueron Anabel y Zayn.

Al final, los hermanos estuvieron año tras año huyendo de la policía para

no entrar a la prisión por culpa de la muerte de sus padres adoptivos.

FIN
67. EL VECINO ASESINO
Amelia, de 6º A.

Os voy a contar una historia que os va a dejar impresionados.

Trata de una niña que un día se fue a un bosque que había detrás de su

casa porque oía voces que la llamaban. Era un vecino que se había quedado

atascado en una piedra. Ella mientras que pensaba en lo que podía hacer , el

hombre se quitó la piedra rápidamente y aprovechó y la empujó hacia un pozo

que había al lado de ellos, la niña se dio la vuelta y al final se cayó él. La niña

impresionada se acercó al pozo para ver cómo estaba el hombre: había muerto.

La niña se fue corriendo a su casa a ver la tele, hasta que sintió que las paredes

retumbaban y que la televisión se ponía en blanco y negro y se cortaba la imagen

así que decidió irse pero se dio cuenta de que estaba allí el hombre del pozo. La

niña gritando ¡SOCORRO SOCORRO¡ se fue de la casa, pero el espíritu del

hombre la perseguía a todos lados, hasta que cogió a la niña y la mató.

La familia de la niña se volvió loca e intentaban buscar el cuerpo de la

fallecida, pero en la búsqueda no encontraron el esqueleto sino a ella escondida

entre unos matorrales, viva y asustada. La niña le prometió a sus padres que iba a

ir a por el hombre que intento matarla. Ella salió con su bici hacia el bosque pero

no lo encontró así que se fue al parque a ver si estaba, pero tampoco hubo suerte.

Le faltaba un lugar: el cementerio. Fue rápido hacia allí y lo encontró, se escondió

y empezó a llamar al espíritu, que se volvió loco buscando ver quién lo llamaba,

hasta que la niña lo capturó y lo enterró en una tumba para que no saliera. La niña

se lo dijo a sus padres y todo volvió a la normalidad. Pero no pensaras que el

espíritu se quedo tranquilo ¿verdad? Ja,ja,ja,ja...

FIN
68. MI PRIMER HALLOWEEN
Héctor Alejandro, de 6º A.

Hoy es la gran noche esperada por todos mis amiguitos , hace semanas

que estamos preparando los disfraces ,es mi primera noche de Halloweenen este

país y estoy muy entusiasmado, a pesar de que Carlitos el niño que vive al lado

de mi casa ha estado contando historias raras sobre la casa grande que esta al final

de la calle. Casi nunca pasó por enfrente, me atemorizan sus historias, y la señora

que vive en ella nunca sale, solo vemos su sombra a través de las cortinas y

Carlitos con su imaginación solo nos reta a todos a llegar a su puerta y yo no se si

iré, bueno si todos me acompañan. Llegada la noche salimos en grupo y con

nuestras calabazas listas para recibir golosinas y Carlitos de primero siempre

tocando de puerta en puerta, pero al estar finalizando la calle paró, no quiso

seguir, dijo que su calabaza estaba llena, se justificó pero todos sabíamos que tenía

miedo, sólo había alardeado y ahora no quería llegar. Regresó corriendo, todos

nos quedamos parados y sin pensarlo di un paso, me dirigí a la puerta tocándola

muy fuerte. Tenía miedo pero no quería quedar de cobarde como Carlitos. La

puerta se abrió y vimos colgando grandes telarañas, arañas con ojos brillantes,

sonó un ruido extraño cuando comencé a temblar. Mis caramelos se salieron de la

calabaza, se regaron por todo el suelo, mis amigos salieron gritando a tal

velocidad que sus golosinas salieron volando. Yo no podía moverme, sólo sentía

mis dientes chocando unos con otros. Estaba a punto de desmayarme cuando se

presentó delante de mí una señora encantadora con voz amable, llamó a sus

niñas, dos gemelas rubias y lindas que me deslumbraron. Traían sus calabazas

llenas de dulces y caramelos, nos reímos tanto de mis cobardes amigos y los tres

juntos pasamos una noche inolvidable. Nunca olvidaré mi primer Halloween en

este país.

FIN
69. EL PAYASO ASESINO
Brahian, de 6º B.

Era unos días antes de Halloween, un grupo de amigos de 6ºB iban a

disfrazarse de payasos asesinos para asustar a las personas en la carretera, tocar

en las casas y perseguirlas. Hoy es Halloween y todos los niños se van a reunir en

un cementerio abandonado. Ellos no sabían que allí se habían matado dos

payasos que terminaron de hacer su espectáculo. Todo ocurrió cuando iban al

cementerio para tomarse unas cervezas. Se emborracharon, se pelearon y se

empezaron a tirar botellazos. Uno murió, otro se quedó en el cementerio. Dice la

leyenda que él que va ahí no vuelve. Los niños, esa noche, fueron al cementerio y

empezaron a oír botellazos. De repente, a un niño le rozó un cristal. El niño dijo:

—¡Aaahhhh, vámonos de aquí! ¡Hay alguien!

Cuando salieron del cementerio vieron a una persona de color rojo

amarillo con un pelo muy revoltoso. Vieron que tenía una botella en mano. Los

niños empezaron a correr. El payaso les estaba alcanzando pero uno de los niños

cogió una piedra afilada y se la tiró. El payaso la esquivó y cogió al niño. Él,

llorando le dijo:

—No me mates, por favor.

El payaso no le hizo caso. Los otros niños oyeron los gritos de su amigo.

Después, el grupo de niños se paró porque ya no oían nada. Esperaron unos cinco

minutos y uno dijo:

—¿Qué es eso?

Otro dijo lo mismo. El payaso y el niño les habían rodeado por completo.

Los niños no se movieron, se quedaron mirando. El payaso se puso al lado de

ellos. El niño y el payaso les dijeron:

—Buu... ¿qué tal chicos?

Estaba todo planeado. Era el padre de uno de los niños que les quería dar
un buen susto porque el año anterior les habían gastado una broma. De repente,

todos ven un payaso asesino con un cuchillo en la mano lleno de sangre. El padre

asustado cogió una botella y se la lanzó pero no le dio. Los niños corrieron y el

padre también. Uno se tropezó. El payaso les alcanzó y los mató a todos. Dice la

leyenda que si vas al cementerio, ellos te estarán esperando con las manos

abiertas.

FIN
70. LA NIÑA DIABÓLICA
John Sebastián, de 6º B.
Érase una vez una niña en un patio jugando con sus muñecas. La niña era

muy noble. Pensamos que iba a ser grande, una persona importante en la vida. La

niña le dijo a su madre que iba a ser una princesa. Su madre, Carlota, le

respondió:

—Claro que sí, hija.

La madre era pobre. Salía un día a la calle con la niña, cuando ésta le

preguntó:

—Mamá, ¿me puedes comprar un pastel?

La madre le dijo que otro día. Un señor la escuchó y le compró el pastel

que la niña quería. El señor salió corriendo y le regaló el pastel a la niña. La

mamá, claramente, le dijo que no y mil veces no. El señor se lo dio al final. La

mamá y la niña se fueron para la casa. La mamá le partió el pastel y la niña vio

que el pastel tenía hormigas. En realidad era veneno que afectaba la salud de la

niña. La niña se volvió diabólica. Ella tenía un cuchillo en la mano, fue a la

habitación de la madre. Carlota le dijo que dejara el cuchillo. La niña se lanza a la

cama de la mamá y le dijo que la iba a matar. Le enterró el cuchillo. La cara de la

niña tenía sangre de la mamá. Se le quedaron los ojos abiertos y la niña se fue de

la casa. En la entrada se encontró un globo que decía que fuese a la cocina. La

niña fue a la cocina y se encontró a un señor sentado que la miraba. Él le dijo que

iba a sufrir mucho. La mamá estaba en la cama mientras un perro le chupaba la

sangre. La niña no sabía qué hacer y le dijo que era un señor malo. La niña estaba

hechizada, de día sería una niña normal y por la noche sería una niña muy mala.

La niña corrió a casa de su tía. Ésta la miró y le preguntó que por qué tenía

sangre en el cuchillo. La niña se cortó la cabeza y la tía puso cara de no puede ser.

A la tía, la metieron en la cárcel porque supuestamente había matado a su sobrina.

El señor que compró el pastel aún sigue vivo.

FIN
71. UNA HISTORIA ATERRADORA
Daniela, de 6º B.

Jake se acababa de mudar con su familia a Lanzarote. Todo le iba bien hasta

una noche en concreto, la noche de Halloween. Jake llevaba planificando la fiesta

unas dos semanas, tendría muchos invitados y esperaba ansioso a que el día

llegara. Cuando llegó el día, estaba junto a su mejor amigo, Cristian, ultimando

los detalles. Jake planeaba gastarles una gran broma a todos, mientras que

Cristian estaba en desacuerdo. Jake y Cristian discutieron y se retaron en la fiesta

a ver que disfraz daba más miedo. Llegó la noche, faltaban unos minutos para que

empezara la fiesta en su casa. De repente, sonó el teléfono. Jake respondió

pensando que se trataría de un invitado. Era la madre de Cristian diciendo que su

hijo había muerto arrollado por un camión. Jake no se lo podía creer, su mejor

amigo había muerto. Entonces, canceló la fiesta y rápidamente intentó contactar

con el espíritu de su amigo. Buscó a sus hermanos para jugar al juego ``la ouija´´

ya que se necesitaban 3 personas. Jake le indicó a sus hermanos lo que tenían que

hacer. De repente, de un vaso de cristal empezó a salir un líquido negro y el vaso

estalló. De la pared, salió un espectro que recordaba a Cristian aunque con

aspecto deforme. El espectro tomó a su hermana pequeña en brazos y Jake, trató

de arrebatársela pero era tarde, había muerto. Después de eso, el espectro cogió a

su hermano por el cuello fuertemente. Jake llamó a la policía pero tardaban en

llegar y él estaba solo ante el peligro. Jake, trató de esconderse hasta que llegara la

ayuda pero el espectro lo encontró y empezó a ahorcarlo. Cuando llegó la policía,

todos estaban muertos. Uno de los policías vio algo que no olvidaría jamás, la

imagen de una criatura deforme descendiendo entre las sombras.

FIN
72. MI RELATO DE HALLOWEEN
Emily, de 6º B.

Eran las 3:33 AM y noté una energía, una presencia mala a mis
espaldas. De pronto escuché que se cerraba la puerta de mi cuarto despacio y
al final ¡PUM! Una malvada presencia. Era un tipo de energía que no sabía
como tratar. Me acordé que tenía una vela blanca en mi cajón.
Decidí encenderla y hacer un ritual para espíritus buenos diciendo:
—Presencias malas fuera y las buenas dentro, si estás ahí, manifiéstate

golpeando mi mesa, y las presencias malas abran mi puerta y...


Sentí como una sombra abría mi puerta diciéndome:
—Ven conmigo, yo te cuidaré.

Yo fui intrigada. De repente, me mareé y caí golpeando mi cabeza


fuertemente. Desperté en el hospital y una doctora, que me sonrío
malvadamente, me dijo:
—Tranquila, te pondrás bien, inyectándome una aguja.

La aguja llevaba veneno. Por suerte me curé y sobreviví. Pedí mi


informe de alta, en él ponía el nombre de una enfermera. El nombre era muy
extraño. Fui a recepción a ver si esa enfermera seguía allí y me dijeron:
—Lo sentimos, pero ella nunca ha trabajado aquí.

Le mostré el papel y... había cambiado el nombre, incluso la imagen.


Me di cuenta de que era algo raro. Al final, por suerte, todo fue bien y no me
pasó nada más aunque aún me sigue doliendo el cuello.

FIN
73. JUGUEMOS A UN JUEGO
Hatim, de 6º B.

Esa noche de Halloween, fuimos Yeray, Marco, Paqui y yo a por chuches.

De repente, nos dio un desmayo y nos despertamos en la ciudad, sin nadie

delante de nosotros. Alguien nos dijo que jugásemos a un juego, nos decía que

tendríamos que pasar por varias pruebas para salvar a la ciudad y que si

fallábamos en una moriríamos. La primera prueba era pasar por unos obstáculos

de la muerte. Pasamos todos. Cada vez que pasábamos una prueba nos daban una

parte de nuestro disfraz, que supuestamente eran mágicos. El disfraz que me tocó

era de payaso asesino. A Yeray le tocó el de payaso asesino con martillo, a Marco,

otro payaso asesino con metralleta y a Paqui, el de la chica del aro. Todos fuimos a

la segunda prueba. Debíamos decidir si matar a un bebe o a un cachorro.

Matamos al cachorro y acertamos. Todos nos pusimos a llorar por el pobre

cachorro. La tercera prueba, era matar a una niña. De repente, empezó a llorar

sangre todos los lados. Flipamos. Sus ojos se volvieron todo negro y comenzó a

flotar y a girar la cabeza y dijo:

—Juguemos a un juego.

De un balazo la maté y dije:

—Una menos.

Seguimos el camino hacia la cuarta prueba. Apareció IT agarrado de un

niño. Nos empezó a mirar y nos dijo:

—Todos flotan.

Detrás de él apareció Ismael, un amigo, y lo mató de un disparo. Le

contamos lo ocurrido y decidimos armarnos de valor. Todos conseguimos un

arma, de arma secreta, teníamos un bazoca. Fuimos a la penúltima prueba.

Consistía en invocar a Chucky. Lo invocamos y si lo matábamos nos daba su

cuchillo. Lo matamos. Llegamos, por fin, a la última prueba. Debíamos matar a


Saw. Ismael le tiró el bazoca pero era falso. El Saw nos echó un gas que nos dejó

inconscientes. Aparecimos en una cárcel y de repente recordamos. Maté a todos

y...todo había sido un sueño y celebramos la mejor fiesta de Halloween de

nuestras vidas.

FIN
74. HALLOWEEN
Jesús, de 6º B.

El día de Halloween se celebra cada año. Ese día es terrorífico, nos tenemos

que disfrazar de algo que dé mucho miedo como de zombi, de vampiro... y todos

los niños se disfrazan. Hace tiempo, hubo un niño al que le gustaba mucho esa

fiesta. Se llamaba Yeray y estaba esperando que llegara la mañana del día

siguiente, que era cuando se celebraba la fiesta de Halloween pero justo antes de

que llegara ese día, se murió. Pasó mucho, mucho tiempo y de nuevo llegó esa

festividad. Todos los niños estaban disfrazados y preparados para salir.

Yeray, se levantó de la tumba...era un zombi y quería asustar a la gente.

Nadie se creía que fuera un zombi de verdad y no se asustaban, hasta que

alguien llamado Hatim, intentó quitarle la máscara. Él se asustó, no podía. Se lo

dijo a todo el mundo y no le hicieron caso. Hatim, se estaba perdiendo la fiesta,

intentaba averiguar si era un zombi o no. Pensó que si que era un zombi

necesitaba una cura. Hatim, encontró la cura, lo buscó y le curó. Yeray, volvió a

vivir y celebraron la fiesta juntos.

FIN
75. HISTORIA IMPOSIBLE
Jimena, de 6º B.

Aquella fría y oscura noche, Marta se fue a pedir dulces por las casas con

su hermano pequeño Jorge, su amigo Lucas y su perrita Luna. Después de un

tiempo, se empezaron a aburrir y decidieron atravesar un pequeño bosque. Tras

haberlo pasado, vieron una gran torre negra y se acercaron a echar un vistazo. De

repente, unas puertas se abrieron y decidieron entrar. Justo delante suya,

aparecieron dos esqueletos enormes que empezaron a correr detrás de ellos. Jorge,

se cayó y al tocarle los esqueletos desapareció. Lo mismo pasó con Luna y por

último con Lucas. Cuando Marta vio que sólo quedaban los esqueletos, se detuvo

y dejó que la tocaran. Se despertó en su habitación, resultó ser solo una pesadilla.

Aquel día se lo pasaron muy bien e hicieron una fiesta de Halloween en su casa.

Marta hizo galletas, bebidas, aperitivos con formas de arañas, telarañas, ojos,

monstruos... Ella se disfrazó de bruja, Lucas de vampiro, Jorge de araña y Luna de

perrita. Y esa noche, se llenaron con todas las chuches y chocolatinas que habían

pedido por la urbanización. Nunca olvidará aquella pesadilla, tampoco se lo dirá

a nadie.

FIN
76. MI CUENTO DE HALLOWEEN
Luis, de 6º B.

Existió una vez, en los años 80, una pizzería llamada Fazberz Family

Dinner. En esa pizzería hubo un incidente involuntario que provocó otro

incidende voluntario. Un niño llamado Kenny, tenía mucho miedo de los

endoesqueletos que hacían animación en la pizzería. Los endoesqueletos eran

esqueletos robóticos que se movían solos. A esos endoesqueletos les pusieron

trajes de metal para que parecieran animales. Uno de ellos era un oso llamado,

Fazbeard y otro, un conejo llamado, Spintrag. Los hermanos de Kenny lo

asustaban con máscaras de los endoesqueletos, también llamados animatrónicos.

Un día, llevaron a Kenny al lado de Fazbeard para asustarle. Decidieron

meter a Kenny en la dentadura de Fazbeard y sacarlo rápidamente para asustarlo.

Pero, en ese momento, Fazbeard sufrió un fallo y mordió a Kenny. Ésto lo dejó en

coma. Entonces, un guarda de seguridad de la pizzería se enojó tanto que se

disfrazó de Fazbeard y atrajo a los hermanos de Kenny al cuarto de partes y

servicios, sacó un cuchillo y...¡los mató!

FIN
77. UN MIEDO TERRIBLE
Lucía, de 6º B.

Un día Paqui, Roberto, Marco, Rubén, Nayara y Nicole fuimos a una casa

encantada, misteriosa y terrible. Era la casa de una bruja muerta. La bruja, se

llamaba Petria, era muy raro ese nombre. Nació el mismo de día que se celebra

Halloween. Todos los niños le tenían miedo porque no tenía pelo, ni dientes, era

súper fea al igual que su casa que era vieja,con paredes verdes, llenas de moho,

platos llenos de polvo...

Esa noche, encontramos una puerta nueva. En ella, había una calavera de

metal roja y negra. De pronto, escuchamos una risa malvada:

—¡Ahhajahjahajjah!

Salimos corriendo. Al día siguiente volvimos, pero de día. Esa puerta, ya

no estaba. Era demasiado raro pero entonces, encontramos una especie de portal.

No estaba claro si era de verdad o de mentira. Nos asustamos y se rompió delante

nuestra:

—¡Pum!

Se empezó a ver un rostro, la nariz de la bruja era muy grande, con una

verruga de color negra y pelos. Salió completamente del portal roto con una

escoba marrón muy sucia. Llevaba escrito en ella la palabra Halloween. Estaba

llena de moho, parecía un poco rota y la llevaba en su mano. De repente, la bruja

dijo:

—Os voy a pillar en cuánto pueda, aunque esté coja, iré con mi cochecito

volador encantado .
Al coche, solo le faltaba un ala para volar y estaba un poco roto. Eso lo dijo

para asustarnos y nos dio mucho miedo. Al día siguiente, fuimos a ver si estaba

otra vez. Estaba durmiendo y entramos a escondidas. Investigamos y vimos que

había mucha suciedad, demasiada suciedad, tanto que nos daban arcadas.

Nosotros la limpiamos y le compramos cuadros bonitos para las fotos que

encontramos de su infancia, la decoramos y nos fuimos. Al día siguiente,

volvimos a la casa. La bruja se levantó y nos preguntó:

—Chicos, ¿ustedes fueron quienes me limpiaron la casa?

Yo le respondí:

—Sí señora.

Ella añadió:

—Qué educada eres, niña.

Yo le pregunté que si quería ser nuestra amiga. Nos hicimos amigos y

fuimos súper amiguitos. Todos los años, celebramos Halloween con la bruja

muerta y siempre quedábamos para ir a caminar juntas.

FIN
78. EL SECRETO DE HALLOWEEN
Luis Germán, de 6º B.

Hola, soy Luis Germán y estoy en el colegio. Hoy es veinticinco de octubre,

no falta casi nada para Halloween. En el colegio estamos preparando todo para

celebrar ese día pero como siempre, hay deberes, y muchos, y hay un examen.

Llegué a mi casa, comí e hice los deberes. Acabé tarde, sobre las ocho de la noche

y me fui a dormir. Al día siguiente tenía vómitos y vino Álex para jugar a la play 4

Pro. Vomité mientras jugaba pero me lo pasé bien, comimos, descansamos e

hicimos la digestión. Luego nos metimos en la piscina. Estuvimos una o dos

horas. Luego, salimos al parque y por la noche y encontramos un payaso.

Estábamos Santi, Nico , Álex , Álex el pequeño, Arena, Irene, Aday, Mara, Narcisa,

Pablito y yo. Teníamos armas que le habíamos quitado al tío de Santi. Yo tenía una

ametralladora pesada.

(INCOMPLETO)
79. EL 31 DE OCTUBRE
Marco, de 6º B.

Pedro era un niño al que le daba miedo la oscuridad. Se acercaba el día


de Halloween y Pedro, esa noche, lo pasaba muy mal. Pasaba toda la noche
con la luz encendida. A su hermano, en cambio, le encantaba Halloween.
Siempre se disfrazaba de muerto viviente y salía a pedir caramelos. Ese año,
consiguió convencer a Pedro para que saliera, con él y sus amigos, a pedir
caramelos por el barrio. Todos iban con unos disfraces muy originales. Pedro
tenía mucho miedo porque todos llevaban la cara tapada o muy bien pintada.
Estaba tan asustado que no conseguía reconocer a nadie. Pasaron por varias
casas pidiendo caramelos y al llegar a una casa muy grande, tocaron el
timbre. La puerta se abrió sola. No salía nadie y Pedro no quería entrar.
Estaba todo muy oscuro. El grupo de niños entró y en ese momento, la puerta
se cerró sola. Pedro no paraba de temblar de miedo. Sólo habían unas velas
encendidas y se dieron cuenta de que había un ataúd en una esquina. Pedro
intentaba salir de allí y sin darse cuenta se vio enredado en unas telas de
araña. Entonces, se puso a gritar. De repente, oyeron pasos en el piso de
arriba. Todos estaban muy asustados. Luego los pasos los oían bajando las
escaleras. Los niños no conseguían abrir la puerta y como había poca luz no
podían ver bien lo que bajaba por las escaleras. Por fin, consiguieron abrir la
puerta y salieron corriendo. Entonces oyeron al dueño de la casa detrás de
ellos llamándoles para darles caramelos. El hombre estaba disfrazado de
zombi para asustar a los niños porque a él le encantaba ese día desde que era
pequeño.

FIN
80. HALLOWEEN
Nayara, de 6º B.

Había una vez un niño emocionado por el día de Halloween. Él


siempre contaba cuánto faltaba para ese día. Solo faltaban 10 días. Por fin,
llegó ese día y él se disfrazó de la niña del exorcista. Él, era el único vestido
así y todos se burlaban porque estaba vestido de niña. Ese día, a las doce de
la noche, se fue al cementerio y se convirtió en el personaje que se había
disfrazado y asustó a todos los niños que se reían de él. Ese de día, muchos
niños murieron de miedo. El niño iba por todas las casas, hasta los padres de
los niños estaban muertos de miedo. Llegó a la casa de sus padres y el niño se
puso muy agresivo. Los padres intentaron llevarlo al cementerio y
contrataron a una señora que sabía como quitar las maldiciones. La señora no
pudo hacerlo porque la maldición era muy fuerte. El niño tenía mucha rabia
por dentro. Llamaron a una adivina para hablara con su espíritu. Este le dijo
que él quería que le hicieran una fiesta de Hallowen con los que le insultaron
y que en la fiesta le pidieran perdón. También pidió que fueran todos
disfrazados de la niña exorcista. Prepararon esa fiesta, fueron todos como él
deseaba y se le pasó la rabia. Por fin, todos fueron felices y comieron
perdices.

FIN
81. COBRAN VIDA
Paqui, de 6º B.

Era la noche de Halloween y habían 4 niños y 4 niñas disfrazados. Se

llamaban Yeray, Brahian, Marco, Hatim, Lucía, Nayara, Jimena y Paqui.Yeray, iba

disfrazado de Pennywise, Brahian, de Jackson, Marco, de Freddy Krueger, Hatim,

de mago, Lucía, de conejita diabólica, Nayara, de brujita, Jimena, de la niña del

exorcista y Paqui, de la muñeca Anabel. Se reunieron todos para ir a pedir

chuches y fueron a la casa de un Señor llamado Jesús. Éste les advirtió:

—No vayan al bosque silencioso, ahí es donde han muerto los malos de las

películas de Halloween.

Ellos, intrigados, fueron al bosque pero no se atrevían a entrar. Hatim dijo:

—Entremos, no pasará nada.

Todos, aterrorizados, decidieron entrar. Sin querer, Nayara se tropezó y

pulsó un botón que revivía a los malos de las películas. Todos dijeron:

—BOOOOOOOOOOO...somos libres.

Luego, Hatim, el mago, tiró una bola de fuego y otra de aire. Todos

murieron menos uno, el mago, Harry Potter. Lucharon y lucharon hasta que la

muñeca Anabel, Paqui, le miró fijamente y lo derrotó. Después de ese gran susto

ya no volvieron más a ese lugar.

FIN
82. VIERNES 13
Hugo, de 6º B. GANADOR DEL PRIMER PREMIO
Hola, me llamo Geremi, tengo veintisiete años y os voy a contar mi historia.

Todo comenzó hace quince años, cuando tenía trece. Me encantaban las películas

de terror hasta que algo lo cambió todo. Eran las diez de la noche y llovía a

cántaros. Yo veía, en mi vieja tele, la película Viernes 13. Estaba sentado en el

suelo, con las luces apagadas viendo la película. Las películas de terror nunca me

dieron miedo. Acabó a la una de la madrugada. Al día siguiente llegué al colegio

y me dijeron mis amigos:

—Geremi, ¡¡¡hoy es viernes 13!!!

Me asusté mucho cuando me lo dijeron. Cuando llegué a casa, comí y corrí

a mi habitación para protegerme de Jason Voorhees. Yo sabía que no existía pero

pensé que podía basarse en hechos reales y me asusté. Con tanta preocupación,

me dormí tarde y tuve un sueño raro. Pensé que era real. Estaba en mi habitación,

todo estaba igual. Bajé a cenar. Me senté en la silla y mi madre puso una olla

tapada. Le pregunté :

—¿Qué hay para comer mamá?

Entonce, mi madre abrió la olla y dentro había dos brazos y dos piernas. Mi

madre cogió un brazo por la mano y se lo comió como si fuera un muslo de pollo.

Mi padre, igual, pero con la pierna. Corrí hacia mi habitación y cerré la puerta con

llave. La bloqueé también mi con una estantería y cogí otra para bloquear la

ventana. Cuando me di la vuelta, vi la figura por la que me asusté desde el

principio, Jason. Llevaba una careta de hockey blanca con tres líneas rojas, una

chaqueta marrón podrida, destrozada y agujereada y un pantalón vaquero ancho

y roto. Su machete largo y afilado, lleno de sangre, se levantó. Él se acercó y justó

cuando me iba a dar con el machete... me despertó mi madre. Me alegré mucho

de verla . Colorín colorado este cuento se ha acabado....o no.

FIN
83. LA CASA ENCANTADA
Yeray, de 6º B.

Un 31 de octubre, fuimos unos amigos, Hatim, Ismael, Marco, y yo, a una

casa encantada del pueblo. Al llegar a una casa, la puerta se abrió sola. Todos nos

asustamos pero entramos. Habían muchas habitaciones encantadas. Hatim entró

en una donde había un muerto. Ismael tuvo mala suerte, le tocó una bruja que le

obligó a ponerse una venda. Debía tocar ojos de mentira y de verdad. Tocó uno de

verdad y era un asco, parecía moco. Eso solo era el principio, aún faltaban Marco

y yo. A Marco le tocó comer gusanos y cucarachas. Marco no se los quiso comer

así que la bruja lo envió a un hoyo con zombis que le querían devorar. Hatim,

Ismael y yo fuimos a rescatar a Marco. Hatim cayó en una trampa. Tenía que

comer unos calcetines usados. Se los comió pero vomitó encima de Ismael.

Yeray les gritó:

—Vamos a por Marco, que va a morir.

Fuimos a por él, pero la bruja quería que pasáramos por encima de ella.

Así que Hatim, Ismael y yo tuvimos que pasar por otra prueba, comer orugas. Lo

hicimos, fuimos a por Marco y lo salvamos justo a tiempo. Nos fuimos todos

corriendo a casa sin mirar atrás.

FIN
84. EL CUENTO TERRORÍFICO DE HALLOWEEN
Judith, de 6º B.

Érase una vez, dos niños llamados Jesús y Juan Pablo. Estaban caminando

y se encontraron con una calavera.

(INCOMPLETO)
85. LA LUZ
Uxía, de 6º B.

Una noche, estaba yo sola en el colegio y se apagaron todas las luces. Se

oían voces. Yo estaba tiritando. También se oían pasos. Empecé a pensar si había

alguien más pero no.

(INCOMPLETO)
86. REX Y EL HALLOWEEN
Yerove, de 6º C.

Érase una vez un tiranosaurio rex que siempre iba con su skate por la calle,

que siempre lleva la misma ropa y vivía en un almacén. El día 31 de octubre, se

chocó con un payaso que le dijo:

—¿Estás bien?

El tiranosaurio rex le contestó:

—¿Por qué vas disfrazado de payaso?

—Porque es Halloween esta noche. ¿Te quieres venir?

El tiranosaurio rex contestó:

—Sí quiero, muchas gracias.

El payaso le dijo:

—A partir de ahora te voy a llamar Rex. Oye Rex, ¿quieres que vayamos de

compras a por tu disfraz de Halloween? Iremos al cementerio porque hay una

leyenda que dice el 31 de octubre a las 11:05 de la noche en el cementerio Santilla

saldrán todos los zombies y comerán a los humanos. Eran las 10:45 de la noche,

Rex y el payaso estaban sentados en un banco en frente del cementerio Santilla.

Pasaron 20 minutos y ya eran las 11:05, empezaron temblores en el suelo y

empezaron a salir los zombies. Seguían, no paraban de salir, era un apocalipsis

zombies. Rex y el payaso corrieron a una tienda de armas y empezaron a disparar

¡pam pam! Pero las pistolas no podían matarlos. Entonces Rex se quitó el disfraz y

como es un tiranosaurio rex se empezó a comer uno a uno. Mientras el payaso

cerraba la trampilla. Al final el payaso cerró la trampilla y Rex se comió a los

zombies y al final no van a ir más al cementerio Santilla. Entonces se fueron a


pedir caramelos a las casas y consiguieron una gran montaña de chuches y les

dieron a los niños que no pudieron coger ninguna chuche. Los amigos fueron

felices y comieron caramelos.

FIN
87. EL SUSPIRO
Sin nombre, de 6º C.

Érase una vez en un lugar muy, muy, pero muy lejano, una chica llamada

Sam. Ella era muy feliz. Un día salió de casa con sus amigas y se la pasaron genial.

¡Hasta conoció a un chico! Bueno, que nos salimos del tema. Como iba contando,

la noche fue estupenda. Sam, al estar ebria, se dio un fuerte golpe en la cabeza y

se quedó inconsciente toda la noche. Se despertó y literalmente no podía moverse,

le dolían todas y cada una de las partes del cuerpo. Cuando por fin pudo

levantarse del suelo miró a su alrededor y sólo veía árboles. Por la noche no pudo

dormir al sentir que alguien le susurraba al oído, pero no le hizo caso. Al

despertarse a las 3:15 a.m sintió que algo le tocaba suavemente el cuello,

erizándole la piel, se asustó, y del susto salió corriendo. Encontró una carretera

vieja y abandonada, por la cual pasaba un viejo y amigable campesino que la llevó

a su casa. Nunca más volvería a tomar tanto.

FIN
88. MI CUENTO DEL COLE
Sin nombre, de 6º C.

Érase una vez en un bosque unos niños que se llamaban Diego y Carla.

Eran novios y querían ir a un cementerio porque eran góticos y cuando fueron se

encontraron a un fantasma que se llamaba Javier.

Al cabo de tres días resucitó. Pero había fantasmas, brujas y arañas.

Cuando se dieron cuenta ya los estaban devorando. Después de unos años sus

hijos, que se llamaban Sebastián y Mariana, vivían aterrorizados. En sus casas

escuchaban ruidos, voces y olía a quemado. Una noche se encontraron a su abuela

arrasando la pared y cuando huyeron al bosque había fantasmas caminando por

esa parte. Y Sebastián dijo «¿Quée hacemos?» y contestó Mariana «No sé, piensa

tú algo». Entonces Sebastián dijo «Vamos a la casa de mi padre, que tiene armas

para fantasmas». Fueron, las cogieron, fueron otra vez y los mataron.

FIN
89. EL DÍA LLUVIOSO
Mariana, de 6º C.

Había una vez una niña llamada Nicole y su mejor amiga Angie. Un día

Nicole le escribió a Angie.

Nicole: Ey, hola, ¿estás ahí?

Horas después….

Angie: Perdón es que tuve que salir de casa porque se quemó.

Nicole: ¿Cómo? ¿Qué pasó? No lo entiendo.

Angie: Sí. Así pasó: fui al supermercado con mi mamá, y toda mi familia. Y al

regresar a casa entré normal y de repente sonó algo pi pi pi. Explotó la casa y se

empezó a caer rápidamente. No sabíamos qué hacer.

Nicole: No. Tiene que ser broma, y ¿en dónde dormirás y todo?

Angie: No lo sé. Estoy muy triste, mi hermano recién nacido lo aplastó. Él murió.

Recuerdo todos los momentos lindos.

Nicole: Vente rápido a mi casa. Vivirás acá, trae a tu familia. Acá no les pasara

nada, estarán bien.

Angie: Bueno, me podrías dar la dirección.

Nicole: La dirección es Noruega, dirección calle 23 número 65 puerta 3.

Angie: Ya voy para allá espérame en la puerta.

Horas después:

Nicole: ¿En dónde estás? Ya está lloviendo muy fuerte, hay tormentas muy

grandes. Es mejor que estés por acá YA.

Angie: Perdón es que me perdí y no encuentro el lugar.

Nicole: ¿En dónde estás, quieres que salga a buscarte?

Angie: Si, por favor, estoy en un puente muy largo, al lado hay un rio y al otro

lado árboles.

Nicole: Ay, no, estás en el lugar de las brujas. Siéntate, cierra los ojos y tápate los
oídos y no hagas ningún movimiento brusco, quédate ahí hasta que llegue YO.

Horas después Nicole llegó y tocó a Angie en el hombro. Pero Angie la tiró

al rio. Nicole estaba muy lastimada, no sabía que le pasaba a Angie. Entonces

Angie también se tiró al rio para morder a Nicole y MATARLA. Angie tenía el

pelo echado para adelante y llena de Sangre. Nicole ya había muerto y Angie se

clavó un cuchillo en el cuello llegando a la muerte.

FIN
91. LA NOCHE DE HALLOWEEN
Gunn, de 6º D.

Era una noche de Halloween, Una chica que se llamaba Lisa estaba llegando

a su casa, después de un largo día. Eran las doce de la noche, la calle estaba vacía.

Hacia frio, ya que era invierno, entonces encontró una casa abandonada en frente

de un cementerio. La casa era grande, pero no vivía nadie. De repente escucho

“¡Ayuda!” desde una habitación y se asustó. Entró en la habitación a ver quién era

y vio una chica colgada en el techo. “¡Suicidio!”, gritó Lisa. Bajó las escaleras para

pedir ayuda pero la puerta no se abría. Cuando giró la cabeza vio a la chica.

—¡Estás viva! ¿Pero tú no estabas muerta? —le dijo Lisa.

—Sí, pero ahora te toca a ti.

Y Lisa gritó:

—¡Ayuda!

Pero nadie vino a ayudarla. Después,de 10 días encontraron un cuerpo sin

ojos en un bosque y era Lisa.

FIN

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