Universidad Linda Vista

Escuela de Teología

EL IMPACTO DEL DIVORCIO EN LOS HIJOS

Trabajo presentado en cumplimiento parcial de los

requisitos de la materia de Psicología pastoral

por

Edgar Iván Sánchez de la Cruz, Andrés Elías Torres Casango, Geremías Pérez Santizo,

Ronny Barrios Roblero, Juan Pérez Vázquez y Benjamín Guzmán López

Chiapas, México

03 de octubre de 2023
 INTRODUCCIÓN

La época en la que vivimos es una generación que poco aprecio le dan al

matrimonio, al punto que existen más preferencias hacía la unión libre que al matrimonio.

Creemos que el matrimonio es una Institución Divina dada por Dios desde el Edén (Gén.

2:22-23) y es para toda la vida.

Sin embargo, los divorcios han ido en aumento en los últimos años, y esto es algo

que afecta no solo a los cónyuges sino a los que se relacionan con ellos, especialmente a los

hijos, que son los que más afectados se ven por la ruptura de su núcleo familiar.

Es por ello que en este trabajo se abordará el tema del divorcio y los efectos que

producen en los hijos y como ellos lidian con el divorcio, así como la perspectiva inocente

que ellos tienen sobre el divorcio, y los consejos teóricos y prácticos que como ministros

podemos dar.

2
 EL IMPACTO DEL DIVORCIO EN
LOS HIJOS

Estadística de divorcios (ed) 2022

Durante 2022 se registraron 166 766 divorcios: un incremento de 11.4 % con

respecto a 2021. Del total de divorcios, 9.5 % se resolvió vía administrativa y 90.5 %, vía

judicial. La tasa nacional de divorcios por cada mil habitantes de 18 años o más fue de

1.9. Las entidades que registraron las tasas más altas fueron: Campeche, con 4.8; Sinaloa,

con 3.7 y Nuevo León, con 3.6.

Las principales causas de divorcio a nivel nacional fueron: el divorcio encausado,

con 66.5 % y el mutuo consentimiento, con 31.7 por ciento. En México, la edad promedio

al divorcio para las mujeres es 40.6 y la de los hombres, de 43 años.1

Las consecuencias del divorcio en

los hijos

El Dr. José Cantón dice que “los hijos de padres separados presentan más

problemas de conducta y personales, que los que viven en hogares intactos”.2

En sus investigaciones revela que después de la separación de los padres los hijos

presentan tasas superiores de problemas externalizantes, tales como agresión,

delincuencia, consumo de drogas, comportamiento antisocial, delictiva, dependencia a

1 Instituto nacional de estadísticas y geografía. (s.f). “Estadísticas de divorcio” consultado el 27 de

septiembre 2023
https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/boletines/2023/EstDiv/Divorcios2022.pdf

2José Cantón Duarte, Cortés Arboleda, María R. Justicia Díaz, María D. “Las consecuencias del
divorcio en los hijos.” Dialnet, No. 3 (2002): 47-66. Consultado el 01 de octubre de 2023.
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2516704.

3
estatus socioeconómico, madurez aparentemente temprana, parentificación (en mujeres

ansiedad y depresión, en hombres depresión), actividades sexuales a temprana edad,

menos rendimiento académico, falta de motivación y disciplina, ansiedad, baja

autoestima, negatividad y depresión. Este último punto es preocupante porque el 30% de

los adolescentes presentan depresión. Estas reacciones no son en todos los casos, en los

varones son más la de conducta y en las mujeres las psicológicas.3

También tiene relación con la edad en la que los hijos pasan por este trauma. En

los infantes; experimentan ansiedad, miedo al abandono y autoinculpación, la superación

es a corto plazo. En niños mayores de 8 sufren ansiedad, hiperactividad, agresión física,

desobediencia y conducta desafiante, parentificación o en el peor de los casos odio hacia

una de las partes. En adolescentes, abandono de estudios, relaciones sexuales tempranas,

conducta antisocial y delictiva, consumo de drogas, la superación es a largo plazo.

También menciona que existen dos teorías en cuanto a la relación entre hermanos

después de la separación de los padres. La teoría de la congruencia, cuando ambos son

niños la relación se vuelve negativa, con hostilidad y coerción, hasta el punto de perderse

el afecto y apoyo. Por lo contrario, la teoría de la compresión dice que cuando uno de los

dos es adolescente el apoyo es mayor y hay unidad.4

Las reacciones también son provocadas muchas veces por la mala crianza después

de la separación. Cuando la madre se queda con la custodia pueden surgir las siguientes

reacciones, conducta colérica, impulsividad, depresión, ansiedad, soledad, sensación de

estar controlados, labilidad emocional. Se les hace casi imposible a las madres poder

3 Ibíd.

4 Ibíd.

4
controlar a los hijos, sus problemas son disciplinarios. Esto sucede con las madres que

sufren depresión después de la separación y prestan menos atención a los hijos, buscando

así una manera de atención de la madre, también en este caso los hijos suelen tener poca

comunicación con el padre y llevan a ser crueles con él.

Por otro lado, están las reacciones cuando el padre se queda con la custodia los

hijos presentan conductas delictivas y mayor consumo de drogas y alcohol. Pero los

estudios revelan algo interesante, un gran número de hijos e hijas presentan menos

problemas de conducta y personales, mayor autoestima, menor depresión y ansiedad,

debido a que el padre se centra en suplir las necesidades económicas y materiales,

llenando momentáneamente el vacío emocional. Aun así, los problemas del padre con sus

hijos no son de rebeldía sino de incredulidad, tienden a perder la confianza en el padre y

tienen mayores problemas de comunicación, esto se prolonga por varios años, en cuestión

de relación con la madre, se conoce que los hijos que viven con el padre tienen mayor

interacción con la madre teniendo buena relación con ella incluso aunque se vean un par

de veces por semana. En ambos casos no son generales, son lo que sucede en la mayoría,

pero existen sus excepciones, hay hijos que actúan diferente.5

El divorcio desde una mirada

infantil

Cada individuo tiene una postura respecto al divorcio, los padres que están

involucrados tienen posturas propias, cada persona pretende mirar por su propio bien

físico, mental, espiritual, material, pero son pocas personas que analizan cuál sería el

pensamiento de un niño respecto a la separación de sus padres.

5 Ibid.

5
 Cada niño(a) tiene su propia idea, pensamiento, creencia, sentimientos respecto a

la separación de sus padres. Oriana Cifuentes y Neva Milicic comentan la siguiente

narrativa infantil cuando le preguntan a un niño que sintió cuando su padre lo abandonó:

“Sí y me dijo: Quiero que cuides a tu hermano, quiero que cuides harto a tu hermano y

que te cuides tú; y me dijo: Chao”.6

Como en el caso mencionado, los niños difícilmente tienen información completa

acerca del porqué se están separando los padres, ellos solo ven que se separan, pero no

saben las razones del porqué el papá o mamá se marcha de casa, no saben lo que está

pasando.

Otro de los casos presentados por los investigadores es cuando existen varios hijos

en una familia, y en la separación de los padres, el hijo mayor toma el papel paterno, un

adolescente de 12 años expresó lo siguiente: “no sé cómo que yo igual tengo

responsabilidades porque mi hermana no está mucho en la casa. porque tiene que hacer

unos exámenes. porque está embarazada. y mi mamá la acompaña y tiene que salir a

trabajar y yo soy el que me quedó a cargo de los más chicos. entonces yo me tengo que

preocupar de que tomen cuando no está mi mamá. de todo eso. que si van a salir que

estén por ahí cerca de la casa. y cuando llega mi mamá de trabajar ahí yo descanso un

rato”.7

6 Oriana, C & Nevá, M,” Crisis en la infancia: ¿qué piensan, sienten y dicen los niños sobre la
separación de sus padres?” Universitas Psychologica, 11(2) (2012): 475. Consultado el 2 de octubre de
2023, http://www.scielo.org.co/scielo.php?pid=S1657-92672012000200010&script=sci_arttext.

7Cifuentes & Milicic,” Crisis en la infancia: ¿qué piensan, sienten y dicen los niños sobre la
separación de sus padres?”, 477.

6
 El caso anterior nos enseña que, en muchos casos, los hijos toman papeles que no

les corresponden, sin embargo, por ser mayores, tienen que asumirlos, y no desarrollan su

adolescencia y juventud como deberían.

Los casos anteriores son ejemplos generales, sin embargo, no todos los hijos ven

de la misma manera el divorcio de sus padres.

Existen tres etapas de los hijos en que afecta de forma muy distinta. Por ejemplo,

en la etapa de preescolar (3-6 años). Beatriz Morgado afirma que los niños sienten o

piensan “sentido de auto culpabilización, miedo al abandono, altas expectativas de

reconciliación”.8 Como son los más pequeños y conocen poco sobre el tema, piensan que

por culpa de ellos está pasando el divorcio, y por lo tanto la tendencia de ellos es tener la

esperanza en la reconciliación.

La siguiente etapa es la de educación primaria (6-12 años), ellos perciben de

forma diferente acerca de la separación de sus padres “visión del divorcio más compleja y

psicológica: lazos afectivos, legales, custodia, apoyo, comprensión. Escasas expectativas

de reconciliación, son conscientes de las consecuencias del divorcio, no se sienten

culpables por el divorcio, conciben el divorcio como una decisión de adultos”.9

Finalmente, la etapa adolescente (12-16 años) en esta etapa los adolescentes ya

saben lo que implica un divorcio, son visuales y auditivos, es difícil engañarlos, ven la

separación de sus padres desde una perspectiva diferente “no suelen culpar a nadie por el

divorcio, sentimientos de mayor madurez, concepción más clara del divorcio”.10

8 Morgado Camacho,” El divorcio desde una mirada de los niños. Una revisión teórica”, Familia:
Revista de Ciencias y Orientación Familiar, 26, (2003): 53, consultado el 2 de octubre de 2023,
https://idus.us.es/bitstream/handle/11441/67251/el_divorcio_desde_una_mirada.pdf?sequence=1.

9 Camacho,” El divorcio desde una mirada de los niños. Una revisión teórica”, 55.

10 Ibíd., 57

7
 El Pastor como consejero ante una
situación de divorcio

Cuando alguien se acerca al Pastor buscando dirección en medio de una situación

de divorcio, este debería tener en cuenta algunas cosas que serán de mucho beneficio al

manejar la situación, empezando por tener presente que, aunque son situaciones que

comúnmente pueden llegar hasta la oficina de Pastor, cada situación es particular y tiene

sus propios retos al tratarlas. El Pastor debe ser neutral al manejar la situación. Debe

inspirar confianza total especialmente en un caso como este.

Los cambios que se producen como resultado del divorcio son causas de

sentimientos de fracaso por parte de los dos, marido y mujer, pero desequilibran a todos

los afectados, especialmente a los hijos.11

Uno de los principales consejos que el pastor debe dar es: Evitar usar a los hijos

como mensajeros y evitar usarlos como amortiguadores. Desafortunadamente el Pastor

descubrirá que, en algunos matrimonios, uno de los cónyuges utiliza al hijo como medio

de manipulación. A veces una pareja decide permanecer junta hasta que los niños sean

suficientemente grandes para salir de la casa y después separarse.

Los matrimonios que permanecen juntos “por el bien de los niños” no

necesariamente están ayudando a los hijos. Las parejas necesitan buscar solucionar sus

dificultades sin involucrar a los hijos en ese conflicto.12

11Norman Wright, Como aconsejar en tiempos de crisis, ayuda para situaciones de crisis y
tensión. (Barcelona, España: CLIE), 1990. 312.

12 James E. Giles, El ministerio del pastor consejero. 6a ed. (El Paso, TX: Casa Bautista de
Publicaciones, 2006),14.

8
 Los pastores pueden ayudar a sus aconsejados a darse cuenta de que los

matrimonios que utilizan a sus niños para aliarse a favor de o en contra de su cónyuge

están contribuyendo a la ansiedad y la inestabilidad de sus hijos.

¿Como ministrar a las personas en

una situación de divorcio?

Se debe recordar que los principios generales del aconsejar también se aplican en

este caso. Pero es importante mostrar sensibilidad y comprensión a los sentimientos del

divorciado. Es importante también explicar el divorcio a la luz de las escrituras y la

postura de la Iglesia.

Se debe pensar que el afectado puede incluso vacilar en venir a pedir ayuda

debido a su preocupación sobre las ideas y enseñanzas de la Iglesia respecto al divorcio,

es vital despejar todas estas dudas con la persona aconsejada ya que muchos tienen

prejuicios. El pastor debe ser sincero y no dar falsas esperanzas, debe entender su papel

como consejero, debe entender la magnitud de la situación.

Es importante que el Pastor tenga algunas nociones legales sobre los

procedimientos de divorcio en su país y esté en contacto con abogados cristianos

honrados y competentes a los cuales enviar a sus pacientes. Es prudente que él Pastor no

intente responder preguntas de carácter legal si no se tiene conocimientos profundos

sobre el tema. Es vital que el Pastor sepa cuál es su papel en la situación.13

¿Qué consejos se puede dar a padres que están preocupados por el efecto de su

divorcio sobre el niño?

13Giles, El ministerio del Pastor consejero, 222.

9
 ● Escuchar, alentar, tranquilizar, dar confianza y estar disponible para el niño;

● No preocuparse por sus propios sentimientos más que por los sentimientos
del niño.
● Tener suficiente paciencia.

● Un ambiente estable para el niño. Por ejemplo, vivir en el mismo lugar, la

misma casa.
● Asegurarle al niño que no es la causa del divorcio.

Como Pastor, ¿De qué forma aconsejar a un niño cuyos padres se están divorciando? Haz

que exponga su idea, de por qué se están divorciando sus padres, teniendo en cuenta que

a esta edad el niño puede pensar que el divorcio de sus padres es por su causa. Y no es

fácil convencerlo de lo contrario. Ayúdele a ver otras posibilidades de forma práctica.

Cómo ayudar a los hijos superar el duelo

por el divorcio

Se le llama duelo al conjunto de estados emocionales y comportamientos que se

suscitan cuando perdemos algo. La muerte de un ser querido, la ruptura de una relación,

una quiebra económica, la pérdida de la salud, de un objeto preciado, etc., nos conducirán

a un duelo, el cual va siempre unido a las pérdidas de todo tipo; en el caso que nos ocupa,

al divorcio. Los padres pasan por su propio duelo, y de igual manera los hijos.14

14 Martha Alicia Chávez, Mamá, te quiero; papá, te quiero: Consejos para padres divorciados
(Barcelona: Grijalbo, 2013), 9.

10
Invítalos a escribir una o varias cartas

Para que expresen todo lo que sienten; explícales que no tienen que mostrarlas a

nadie, a menos que así lo decidan, ya que son sólo para ayudarlos a sacar -libremente y

sin riesgos- su enojo y sus sentimientos.

Después, tomando todas las precauciones, juntos pongan la o las cartas en un

recipiente adecuado y quémenlas. Una vez convertidas en cenizas las depositarán en la

tierra de alguna planta o árbol.

Organiza en algún lugar de tu casa lo que

yo llamo "el rincón del enojo".

Esto puede ser literalmente un espacio pequeño o hasta una habitación completa,

de acuerdo con las dimensiones de tu hogar. Ahí pondrás una o varias de las siguientes

cosas, según se acomode a tú situación: cojines, una toalla vieja, alguna perilla de box

con sus respectivos guantes y cosas por el estilo.

CONCLUSIÓN

Se concluye que el divorcio afecta en muchas maneras a los hijos, no solo en su

estado emocional, sino también en su desarrollo cognitivo, en general. Sus reacciones son

de acuerdo a su edad, algunos pueden superarlo mejor, pero a otros es algo que les afecta

por muchos años, hasta el punto de crear un patrón de comportamiento en ellos. La mejor

manera de abordarlo es con apoyo emocional, psicológico y espiritual, poniendo a Cristo

como el centro de las vidas.

11