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DANIEL CASE 4TO 1RA

SEGUNDO TRIMESTRE

ENSAYO DE COMPRESION DEL ACERO

RESUMEN

La microestructura de los aceros TRIP contiene cierto porcentaje de


austenita retenida (fase dúctil), que se transforma progresivamente en
martensita (fase dura y resistente) al alcanzar cierto nivel de deformación
plástica. Este efecto, denominado “efecto TRIP”, más la partición de
tensiones y deformaciones entre fases, hace que los TRIP presenten alta
tasa de endurecimiento por deformación, y una buena combinación entre
resistencia y ductilidad. Para realizar una caracterización mecánica, los
ensayos de compresión permiten introducir un alto nivel de
deformación, aunque se genera una distribución no uniforme de la
deformación en la probeta por efecto de la fricción. Un acero TRIP
experimenta un aumento de dureza a medida que es deformado, tanto por el
aumento en la densidad de dislocaciones, como por la transformación de la
austenita en martensita. Es escasa la información disponible sobre el
comportamiento mecánico de aceros TRIP en compresión. El objetivo del
presente trabajo fue analizar la evolución de la austenita retenida y el
endurecimiento durante ensayos de compresión. Se obtuvieron muestras de
distintos aceros TRIP mediante tratamientos térmicos, a partir de barras de
acero al C-Mn-Si. Las probetas fueron deformadas por compresión a
distintos niveles de deformación. Para cada nivel de deformación se
cuantificó la fase austenita mediante Difracción de Rayos X sobre la
sección transversal media y se realizó un mapeo de microdureza Vickers.
Asimismo, a partir de un modelo FEM cuasi estacionario y axil-simétrico
del ensayo de compresión desarrollado por los autores, se calcularon las
deformaciones localizadas en cada punto de dicha sección. Se obtuvieron
expresiones que relacionan la dureza local con la deformación local y la
fracción de transformación de la austenita en función de la deformación
aplicada. A partir de un análisis los aspectos mencionados anteriormente se
discutió la contribución de la transformación de la austenita en el
endurecimiento general del material.
1. INTRODUCCIÓN

Los aceros avanzados de alta resistencia (Advanced High Strenght Steels, AHSS), constituyen una
familia de aceros ampliamente aplicados en la industria automotriz, cuya combinación de propiedades de
resistencia y deformabilidad permite reducir espesores, y consecuentemente reducir costos y emisiones
nocivas para el ambiente. A su vez, la alta tasa de endurecimiento por deformación que presentan estos
aceros y la alta absorción de energía ante un impacto resulta en un aumento en la seguridad de los
vehículos. [1]

Dentro de los AHSS podemos encontrar varios tipos de aceros según su microestructura, destacando los
aceros de plasticidad inducida por transformación (Transformation Induced Plasticity, TRIP). La
microestructura de los aceros TRIP consiste en partículas de austenita retenida, en un porcentaje mayor al
5%, más distintas fracciones de otros microconstituyentes como ferrita, bainita y martensita. Al ser
deformados, la austenita retenida va transformándose progresivamente en martensita, haciendo que estos
aceros presenten una buena combinación entre resistencia y ductilidad, y una alta tasa de endurecimiento
por deformación [1,2]. En los últimos años se desarrollaron los aceros TRIP-TBF, cuya microestructura
presenta una matriz de ferrita bainítica, lo que aumenta la resistencia y tenacidad respecto de los aceros
TRIP convencionales [3].

En general, los TRIP se obtienen a partir de aceros con cierto contenido de silicio o aluminio, mediante la
aplicación de un tratamiento térmico en dos etapas: austenización (total o parcial) seguida de un
tratamiento isotérmico a temperatura de transformación bainítica. Durante dicho tratamiento isotérmico se
produce ferrita bainítica, a la vez que el silicio o aluminio inhibe la precipitación de carburos,
enriqueciendo en carbono a la austenita y estabilizándola. Se obtiene así una microestructura con
austenita retenida a temperatura ambiente [4].

Dado que la austenita retenida se transforma progresivamente en martensita al aplicarse una deformación
plástica, es conveniente introducir el mayor nivel de deformación posible a fin de estudiar dicha
transformación. En este sentido, el ensayo de compresión presenta una ventaja respecto al ensayo de
tracción: en este último se produce una deformación localizada (necking), limitando la deformación total
uniforme que es posible introducir en el material. El ensayo de compresión permite introducir un mayor
nivel de deformación. La desventaja que presenta es que la dicha deformación no es uniforme en toda la
muestra. Esto se debe a la fricción entre las caras de la muestra y los platos de la máquina de ensayo, que
limita el desplazamiento del material en los extremos, produciendo un “abarrilamiento” de la probeta. En
el corte longitudinal de una muestra ensayada por compresión pueden diferenciarse tres zonas con
distintos niveles de deformación [5]: una zona de baja deformación (también denominada “cono de
fricción”) próxima a las caras de la muestra, una zona de grandes deformaciones en forma de equis, y una
zona de deformación moderada, hacia la mitad de la altura de la probeta, en la periferia de la misma
(Figura 1).

Figura 1: Identificación de diferentes zonas (según nivel de deformación) en la sección media


longitudinal de una muestra deformada por compresión.

Durante el ensayo de compresión de un acero TRIP, se produce el endurecimiento del material por dos
motivos: por deformación, debido al movimiento y acumulación de dislocaciones [6], y por la
transformación de la austenita (fase relativamente dúctil y de baja resistencia) en martensita (fase de alta
resistencia). Para que dicha transformación se produzca, la deformación aplicada debe ser mayor al 10%,
en caso contrario, la fracción de austenita que se transforma puede considerarse despreciable [7].

El objetivo de este trabajo fue estudiar la transformación de la austenita retenida y el endurecimiento del
material durante ensayos de compresión.

MARCO TEORICO

El acero es una aleación de hierro con una cantidad de carbono que puede variar entre 0,03% y 1,075% en
peso de su composición, dependiendo del grado .El acero conserva las características metálicas del hierro en
estado puro, pero la adición de carbono y de otros elementos tanto metálicos como no metálicos mejora sus
propiedades físico-químicas, sobre todo su resistencia .Existen muchos tipos de acero según los
elementos/aleantes que estén presentes.Cada tipo de acero permitirá diferentes aplicaciones y usos, lo que lo
hace un material versátil y muy difundido en la vida moderna, donde podemos encontrarlo ampliamente.
Fundamentos teóricos
En general, cuando se somete un material a un conjunto de fuerzas se produce tanto flexión, como
cizallamiento o torsión, todos estos esfuerzos conllevan la aparición de tensiones tanto de tracción como de
compresión. Aunque en ingeniería se distingue entre el esfuerzo de compresión (axial) y las tensiones de
compresión. En un prisma mecánico el esfuerzo de compresión puede ser simplemente la fuerza resultante
que actúa sobre una determinada sección transversal al eje baricéntricode dicho prisma, lo que tiene el efecto
de acortar la pieza en la dirección de eje baria céntrico. Las piezas prismáticas sometidas a un esfuerzo de
compresiónconsiderable son susceptibles de experimentar pandeo flexional, por lo que su correcto
dimensionado requiere examinar dicho tipo de no linealidad geométrica.
Ensayo de compresión
Método para determinar el comportamiento de materiales bajo cargas aplastantes .La probeta se comprime y
se registra la deformación con distintas cargas. El esfuerzo y la deformación de compresión se calculan y se
trazan como un diagrama carga-deformación, utilizado para determinar el límite elástico, el límite
proporcional, él punto de fluencia, el esfuerzo de fluencia y, en algunos materiales, la resistencia la
compresión. Se proporcionan ensayos de compresión estándar en ASTM C-773 (cerámica de gran
resistencia), ASTM E-9 (metales), ASTM E-209 (metales a elevadas temperaturas) y ASTM D-695
(plásticos).El diagrama obtenido en un ensayo de compresión presenta para los aceros, al igualque el
de tracción un periodo elástico y otro plástico
2. PROCEDIMIENTO EXPERIMENTAL

Para la obtención de aceros TRIP, se empleó como material de partida un acero con la siguiente
composición química (en %wt): 0,63 C; 0,89 Mn; 2,22 Si. Sobre varias muestras de dicho material, con
geometría cilíndrica de diámetro 16 mm y altura 20 mm, se realizaron tratamientos térmicos en dos
etapas: un calentamiento a 900°C y permanencia a dicha temperatura durante
20 minutos, seguido de un tratamiento isotérmico en baño de sales, durante 15 minutos, empleando
diferentes temperaturas: 300, 350 y 400°C, obteniendo distintos grados de aceros TRIP.

Sobre las muestras obtenidas se realizaron ensayos de compresión [8], aplicando diferentes niveles de
deformación: 10, 20, 30, 40 y 50% (este último aplicado sólo a las muestras tratadas a 350 y 400°C). Las
caras de cada muestra en contacto con la máquina de ensayo fueron previamente rectificadas, y se empleó
lubricación para disminuir el efecto de fricción.

Se realizaron caracterizaciones microestructurales sobre la sección media longitudinal de cada una de las
muestras, antes y después de realizado el ensayo de compresión. Para ello se aplicó un revenido a 300°C
durante 2 horas, a fin de diferenciar posteriormente las fases austenita y
martensita. Se empleó un ataque químico basado en el procedimiento descrito en [9], para revelar la
estructura. Fueron caracterizadas microestructuralmente las distintas zonas de cada sección que se indican
en la Figura 2: zona de deformación baja o nula (A), zona de grandes deformaciones (B), y zona de
deformación moderada o intermedia (C).

Asimismo, se realizó una cuantificación de la austenita mediante difracción de rayos x, sobre la sección
media transversal de cada una de las muestras, empleando el método de comparación directa [10].

Figura 2: Identificación de diferentes zonas (según nivel de deformación) en la sección media

longitudinal de la muestra tratada a 350°C, deformada un 50% por compresión.

Se efectuaron mapas de microdureza Vickers [11], sobre el cuadrante superior derecho de la sección
central de cada una de las muestras (considerando la simetría). Se realizaron improntas formando una
grilla, como se muestra en la Figura 3. Se empleó una carga de 300 g.

Figura 3: Improntas de microdureza Vickers realizadas sobre la muestra tratada a 400°C y deformada
un 30%

A partir de un modelo FEM bidimensional axil-simétrico del ensayo de compresión, realizado por los
autores, sobre un octavo de la probeta y considerando un material multilineal, se calcularon los valores de
deformación equivalente de Von Mises en cada punto de la sección media longitudinal, los cuales han
sido comparados con los valores de microdureza obtenidos en el mapeo.
3. RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Microestructura de muestras sin deformación

En la Figura 4 se muestran micrografías correspondientes a los aceros TRIP obtenidos. Las


microestructuras resultaron coincidentes con aceros TRIP-TBF (aceros TRIP con matriz de ferrita bainítica).
Se observaron los diferentes microconstituyentes coloreados de la siguiente forma: ferrita bainítica (ab)
en azul, bainita (B) en marrón oscuro, martensita (M) en marrón claro y austenita retenida (RA) en
blanco, consistentes con el ataque químico empleado [9]. La austenita retenida se presentó tanto en forma
de bloque como en forma “interlath” (entre placas de ferrita bainítica). Se destaca el aumento de la
austenita retenida, y la disminución de la fase martensita, conforme al aumento de la temperatura de
tratamiento. No obstante, se observó que las microestructuras correspondientes a los aceros TRIP
obtenidos a 300 y 350°C resultaron similares en cuanto a porcentaje de RA, lo cual se confirmó
posteriormente mediante la cuantificación de dicha fase mediante difracción de rayos x. Asimismo, se
observó una mayor fracción de microconstituyentes duros y resistentes (martensita y bainita) para dichas
temperaturas de tratamiento.

a- b-

c-

Figura 4: Micrografías correspondientes a las muestras tratadas a las temperaturas: a- 300°C; b- 350°C,
c- 400°C, sin deformación plástica.

En la Figura 5 se observan los espectros de difracción de rayos x correspondientes a los aceros TRIP
obtenidos. Se observó un aumento de RA con dicha temperatura, teniendo las muestras tratadas a 300 y
350°C una fracción similar de dicha fase, y la muestra tratada a 400°C una fracción mayor, lo cual resultó
coincidente con las microestructuras observadas en la Figura 4.
Figura 5: Espectros de difracción de rayos x correspondientes a los aceros TRIP obtenidos. Se indica la
temperatura de tratamiento y el porcentaje de RA.

Ensayos de Compresión

En la Figura 6 se muestran las curvas obtenidas del ensayo de compresión de los aceros TRIP obtenidos a
las diferentes temperaturas de tratamiento y para cada porcentaje de deformación aplicado. En la Figura
6a se presenta una comparación de las curvas obtenidas para los diferentes aceros TRIP hasta la máxima
deformación (40-50%). En las Figuras 6 b, c y d, se presentan las curvas correspondientes a cada acero
TRIP con los diferentes niveles de deformación.

a- b-
c- d-

Figura 6: Curvas obtenidas experimentalmente a partir del ensayo de compresión de: a- muestras
tratadas a diferentes temperaturas, deformadas entre 40 y 50%; b, c y d: muestras tratadas a 300, 350 y
400°C respectivamente, ensayadas a distintos niveles de deformación.

Pudo verse que las muestras tratadas a 350°C presentaron propiedades en compresión intermedias
respecto de las muestras tratadas a 300 y 400°C. También se observó una buena repetibilidad en las
muestras parcialmente deformadas (las curvas resultaron muy similares para todas las muestras tratadas a
una misma temperatura).

En la Tabla 1 se muestran los valores de la tensión al límite 0,2%, obtenidos mediante el ensayo de
compresión de los aceros TRIP. Se observó que dichos valores disminuyeron con el aumento de la
temperatura de tratamiento, en concordancia con las microestructuras observadas en la Figura 4.

Tabla 1. Valores de tensión al límite proporcional 0,2% correspondientes a los aceros TRIP obtenidos

Temp. de tratamiento [°C] Rp0,2 [MPa]


300 1443 ± 49
350 960 ± 83
400 844 ± 29

Microestructuras de muestras deformadas

En la Figura 7 se muestran las microestructuras correspondientes a las distintas zonas, descritas en la


Figura 2, de la sección media longitudinal de la muestra tratada a 350°C y deformada por compresión un
46% (Figura 7 a, b y c) y de la muestra tratada a 400°C y deformada un 50% (Figura 7 d, e y f). En las
zonas de baja deformación y deformación intermedia se observaron fracciones similares de RA y
martensita, para la muestra tratada a 350°C. Para la muestra tratada
a 400°C, fue mayor la fracción de martensita y menor la de RA en la zona de deformación intermedia,
comparada con la zona de baja deformación. Para ambas muestras se observaron menores fracciones de
RA y un aumento en la fase martensita en la zona de grandes deformaciones, respecto de las otras zonas
analizadas. Esto puede deberse a una mayor fracción de austenita transformada en martensita durante la
deformación por compresión, en dicha zona.

a- b- c-

d- e- f-

Figura 7: Micrografías correspondientes a las muestras tratadas a 350°C (a, b y c) y 400°C (d, e y f)
deformadas un 46% y 50% respectivamente, en cada una de las zonas de la sección media longitudinal:
a,d- zona de baja deformación; b,e- zona de deformación intermedia; c,d- zona de grandes
deformaciones.

En la Figura 8 se muestra el porcentaje de austenita transformada vs. la deformación plástica aplicada,


para los aceros TRIP obtenidos a 300 y 400°C. Se corroboró que para deformaciones menores al 10% se
transformó un muy bajo porcentaje austenita.

Figura 8: Porcentaje de austenita transformada vs. deformación por compresión, correspondiente a los
aceros TRIP estudiados.
Se puede observar que el acero 400 presenta una mayor estabilidad de la RA en comparación con el 300,
que para una dada deformación presenta un mayor porcentaje de transformación de RA. En todos los
casos para la máxima deformación aplicada (40-50%) se alcanza más del 90% de transformación de la
RA.

Mapas de microdureza

En la Figura 9 se muestran los mapas de microdureza Vickers correspondientes a las muestras tratadas a
300°C, con diferentes porcentajes de deformación por compresión. Se observó que, a medida que
aumentó dicha deformación, se hicieron más evidentes las zonas con diferentes niveles de dureza, las
cuales se asocian a la distribución de la deformación dentro de la probeta, de acuerdo a lo mostrado en la
Figura 2.

Figura 9: Mapas de microdureza Vickers de las muestras tratadas a 300°C, deformadas por compresión:
a) 10%; b) 20%; c) 30%.

Dado que, al aumentar la deformación global de la probeta, el efecto de la fricción se hace más relevante,
se observó que el endurecimiento por deformación es menor en aquellas zonas de baja deformación como
el cono de fricción en la zona de contacto de la probeta con el plato. De la misma manera la zona de alta
deformación presenta también un mayor nivel de dureza, lo que indica un mayor endurecimiento.

En la Figura 10a, se observa el mapa de deformaciones de la muestra tratada a 350°C, deformada un 46%.
A su vez, en la figura 10b, se observa el mapa de microdureza Vickers correspondiente a la misma
muestra.
a) b)

Figura 10: a) Mapa de deformaciones sobre la sección media longitudinal de la muestra tratada a 350°C y
deformada por compresión un 46%, obtenidas mediante la simulación del ensayo; b) Mapa de
microdureza Vickers, medida sobre la misma muestra

Ambos mapas (tanto el mapa de deformaciones como el de microdureza), respondieron a la distribución


mostrada en la Figura 2. Las zonas de menores deformaciones coincidieron con las de menor dureza y
viceversa. Los valores de microdureza, además de estar asociados con la deformación, también se
corresponden con las microestructuras observadas en la Figura 7: en las zonas donde se observó mayor
porcentaje de martensita y menor fracción de RA, dichos valores de microdureza resultaron mayores.
Asimismo, los valores de deformación localizada resultaron mayores a 30%. Esto puede explicar la
mayor presencia de martensita en todas las micrografías observadas en la Figura 7, respecto de las
muestras sin deformación aplicada (Figura 4), teniendo en cuenta que el porcentaje de deformación
necesario para que se produzca una transformación apreciable de RA es 10%. Observando el porcentaje
de RA transformada según la deformación aplicada (Figura 8), puede verse que, para 30% de
deformación, el porcentaje de RA transformada resulta menor para muestras tratadas a 400°C, esto puede
estar asociado a la mayor fracción de RA, y menor porcentaje de martensita, observados en la zona de
baja deformación de la muestra tratada a 400°C. Asimismo, a partir de 30% y hacia mayores
deformaciones, existe una mayor fracción de RA a ser transformada en dichas muestras. Esto puede
explicar la mayor diferencia en las fracciones de RA y martensita, entre las zonas de baja deformación y
deformación intermedia, para el acero tratado a 400°C, que se observa en la Figura 7.

En la Figura 11 se muestra la correlación entre los valores locales de dureza vs. Deformación para el
acero tratado a 350°C con una deformación de 46%. Puede corroborarse que, dentro de la misma sección,
al aumentar los valores locales de deformación, aumentan también los valores de microdureza Vickers.
En futuros trabajos se profundizará el análisis de estas relaciones, ya que podrían analizarse los
mecanismos de endurecimiento.
Figura 11: Microdureza medida vs. deformación obtenida mediante el modelo FEM, sobre la muestra
tratada a 350°C, deformada por compresión un 50%.

4. CONCLUSIONES
A fin de estudiar la transformación de la austenita durante ensayos de compresión uniaxial de aceros
TRIP y su efecto en el endurecimiento del material, se obtuvieron aceros TRIP de distinto grado,
mediante la realización de tratamientos térmicos a distintas temperaturas. Los aceros obtenidos fueron
deformados por compresión con distintos porcentajes de deformación en altura. Se estudió la
microestructura y fracción de austenita retenida antes y después de la deformación, y se realizaron mapas
de microdureza sobre la sección media longitudinal de las muestras ensayadas. A su vez, se calcularon los
valores de deformación equivalente de Von Mises en cada punto de dichas secciones longitudinales,
mediante un modelo FEM del ensayo de compresión.

La microestructura de los aceros obtenidos resultó compatible con la de aceros TRIP-TBF, con matriz de
ferrita bainítica. El porcentaje de austenita retenida aumentó con la temperatura de tratamiento. A su vez,
para las menores temperaturas de tratamiento se observó una mayor fracción de fases duras y resistentes
como martensita y bainita.

En las curvas obtenidas del ensayo de compresión, se observó una buena repetibilidad en el
comportamiento de las muestras tratadas a igual temperatura. La tensión al límite 0,2% disminuyó con la
temperatura de tratamiento, en concordancia con las microestructuras observadas.

En las microestructuras de las muestras deformadas, se observaron distintas fracciones de las fases según
las diferentes zonas de una misma sección media longitudinal. Se observó una escasa transformación de
la austenita para valores de deformación menores que 10%, y una mayor estabilidad de la austenita con la
deformación para la muestra tratada a la mayor temperatura (400°C). Los mapas de microdureza y
deformación tuvieron una distribución similar. A su vez, en las zonas de una misma sección donde
resultaron más altos los valores de microdureza y deformación, también se observó una mayor fracción
de la fase martensita, y
menor austenita retenida, lo que puede deberse a la transformación de austenita en martensita debida a la
deformación, lo que contribuiría a aumentar el valor de microdureza en dichas zonas.

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