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“UNIVERSIDAD CRISTIANA EVANGÉLICA

NUEVO MILENIO”
CAMPUS SANTA ROSA DE COPÁN

INTRODUCCIÓN AL DERECHO AL E STUDIO DEL DERECHO

SECCIÓN: 101245
INFORME:
Principales teorías acerca del Derecho Subjetivo.
Supuestos y Hechos Jurídicos.

C ATEDRÁTICO: ABOGADO RONY A LEXANDER PINEDA VALLE


ALUMNAS Y ALUMNOS :
 Vilma Oneida Romero Guevara 123450054
 Amelia Esperanza Torres Rojas 121450049
 Allan Ricardo Cruz Villeda 123450072
 Yuri Lisbeth Jiménez Pérez 123450186
 Xiana Ramos Pineda 123450079
 Allan Cordova 123450114
INDICE
I. INTRODUCCIÓN
II. OBJETIVO
III. PRINCIPALES TEORIAS ACERCA DEL DERECHO SUBJETIVO
IV. SUPUESTOS Y HECHOS JURÍDICOS
I. INTRODUCCIÓN

Según una visión tradicional, de corte iusnaturalista, los derechos subjetivos son
propiedades inherentes a la subjetividad jurídica y preexisten a las leyes políticas
que regulan su ejercicio, de tal modo que a éstas sólo les corresponde la misión
de garantizar su protección. Pero según el enfoque de las doctrinas jurídicas
positivistas, los derechos subjetivos sólo existen en tanto en cuanto han sido
reconocidos (es decir, creados) por los ordenamientos jurídicos de las
respectivas sociedades.

Todas estas teorías a continuación descritas hicieron su aporte, pero también,


cada una de ellas ha recibido críticas. Con estos fundamentos podemos decir
que el derecho subjetivo es la posibilidad, otorgada por el ordenamiento jurídico
(elemento normativo) a una persona capaz sea propia o delegada (voluntad), de
actuar (elemento interno) válidamente dentro de ciertos límites, y de exigir de los
demás (elemento externo), por medios coactivos (elemento instrumental) un
comportamiento, para la atención de sus intereses o fines (elemento teleológico).

Desde la Teoría General del Derecho se planteo una clara diferencia entre
Supuesto y Hecho Jurídico, diferenciación no admitida por algunos autores. El
Supuesto es un objeto ideal y constituye la Fuente de las Obligaciones. En
cambio, el hecho es un ente real que configura el título de ellas. Con un criterio
personal elaboro una clasificación de los hechos que tienen por virtud hacer
derivar las consecuencias de derecho, por ser el contenido de un supuesto
normativo.
II. OBJETIVOS

1) Identificar la importancia del estudio de la teoría del Derecho las


categorías que se aplican al derecho como un todo y las que integran a
sus normas jurídicas, así como las funciones que éstas desempeñan y los
criterios de su validez para poder dialogar con los grandes pensadores
contemporáneos y proseguir en la comprensión de los problemas
generales que se presentan en la práctica del derecho, sus soluciones
históricas y las que se les pueden dar actualmente a grandes rasgos.

2) Identificar las dificultades teóricas que existen para elaborar un concepto


unívoco de la palabra Derecho y argumentar críticamente las ventajas y
desventajas teóricas de diversas corrientes del pensamiento jurídico que
conceptualizan la palabra Derecho a fin de construir una concepción
propia del Derecho.
PRINCIPALES TEORÍAS ACERCA DEL DERECHO
SUBJETIVO.

TESIS DE BERNARDO

Bernardo describe al derecho subjetivo como “un poder o un señorío


de voluntad reconocido por el orden jurídico”.

Tesis de Bernardo Windscheid sobre el Derecho Subjetivo.

Los argumentos esgrimidos contra la doctrina del célebre pandectista pueden


resumirse así:

1. Casos hay en los cuales el titular de un derecho subjetivo no desea ejercitarlo.


Por ejemplo: una persona tiene el derecho de exigir el pago de una cantidad que ha
prestado, más no quiere cobrar lo que se le debe.

2. Numerosas personas jurídicas carecen de voluntad en sentido psicológico. Son


incapaces de querer y, ello no obstante, posee facultades y deberes. Es el caso de
los incapacitados, los recién nacidos, las personas morales.

3. Los derechos no desaparecen aunque el titular de los mismos ignore su


existencia y no haya, en el propio titular, un querer orientado hacia ellos.

4. Hay derechos cuya renuncia no produce consecuencias legales. En la legislación


mexicana, por ejemplo, son de esta clase los que la constitución y la Ley Federal del
Trabajo conceden a los obreros.

TESIS DE RODOLFO JHERING

El autor habla de que n todo derecho hay dos elementos igualmente importantes:
formal uno, substancial el otro. El iteres representa el elemento interno, la acción, el
protector del derecho subjetivo, este debe definirse con consecuencia, como un
interés jurídicamente protegido. La palabra interés no solo aplica a los intereses
susceptibles de apreciación pecuniaria, sino a los de otra índole como la
personalidad, el honor, los vínculos familiares, etc.

El hombre es el destinatario de toda facultad jurídica. Jhering da en nombre de bien


a cualquier cosa que posea utilidad para el sujeto, en esta encontramos,
indisolublemente unidas las de valor e interés; el valor es la medida de utilidad de un
bien.

Para que haya derecho no basta el elemento material, requiere además que el
interés esta jurídicamente garantizado, o que goce del bien a que se dirige, se
encuentre protegido por medio de la acción, que ende un interés puede que no
posea carácter jurídico, esto ocurre cuando la ley favorece ciertos individuos
colectividades, sin concederles la facultad de exigir el cumplimiento de lo que sus
preceptos ordenan; la norma ejerce entonces una acción que se refleja de aquellos,
mas no les otorga derecho alguno ya que no los autoriza para demandar
jurídicamente la observancia de las obligaciones que impone.

La acción es la verdadera de toque de los derechos privados si no hay sitios para


ella, el derecho civil deja de proteger los intereses y la administración toma su lugar.

CRÍTICA DE L A TEORÍ A DEL INTERÉS

La teoría de Jhering es expuesta a objeciones del mismo tipo que las esgrimidas
contra la de Windscheid la primera y más importante queda resumida en la siguiente
fase: si la nota del interés fuese esencial al derecho subjetivo, este no existiría, de
faltar aquella. El propio Jhering acepta que el legislador no reconoce ni puede
garantizar todo interés. Protección jurídica, no lo protegido o tutelado, ya que, como
arriba dijimos, el interés individual no existe indefectiblemente.

Las fallas de las tesis expuestas son, análogas a la de Windscheid. Solo se quiere
aquello en que se tiene interés; solo se tiene interés en aquello que se quiere.

“El Interés es subjetivo. Los Intereses objetivos es una ficción.”

Intereses medios, son predominantes en una determinada sociedad. Cuando se


habla de intereses medios, se acepta que el interés como realidad psicológica no se
da necesariamente en todo caso. se reconoce que la protección jurídica puede
referirse a facultades legales cuyo ejercicio, en un momento dado, y relativamente a
tal o cual sujeto, no preocupa a éste en absoluto.

TESIS DE KELSEN

Esta tesis doctoral versa sobre la filosofía moral de Hans Kelsen y su proyección
sobre su pensamiento político, y en particular sobre su justificación de la democracia
desde una ética relativista. Puesto que esta temática tiene una gran significación en
el esquema de la Teoría pura del derecho, es incomprensible el olvido al que, con
carácter general, se ha visto relegada esta pieza clave del pensamiento kelseniano,
que apenas ha llamado la atención de sus estudiosos y críticos. Si a esto se añade
que esta laguna se acusa aún más en lengua castellana, ello explica por qué
entiendo que la investigación que he desarrollado tiene gran interés y está
plenamente justificada.

Mi objetivo ha sido tratar de colmar esta importante laguna. Mi recorrido por la


filosofía moral kelseniana me ha llevado a ocuparme de tres cuestiones que
examino en los capítulos centrales del trabajo:
(i) La crítica de Kelsen a la teoría del derecho natural
(ii) El examen de su posición filosófico-moral, que adopta la forma de un
relativismo ético no cognitivista; y
(iii) Los problemas que suscita la pretensión de Kelsen de fundamentar la
democracia a partir del relativismo.

(i) Me he aproximado a la crítica de Kelsen al derecho natural desde dos


puntos de vista. Primero, tratando de reconstruir su caracterización de la
teoría iusnaturalista, tanto estructuralmente –considerando las diferencias
que la teoría atribuye al derecho natural frente al derecho positivo y la
forma como ambos sistemas se relacionan entre sí– como
funcionalmente, atendiendo a las funciones políticas –de orientación, bien
conservadora, bien revolucionaria– que ha cumplido históricamente. Y en
segundo lugar, organizando y explicando los argumentos que Kelsen
esgrime contra esa teoría. El examen indica que en ambos casos Kelsen
incurre en simplificaciones injustificadas, que en mi opinión se explican
por una tendencia a minimizar el hecho de que se está dirigiendo contra
una tradición que cuenta con más de dos mil años de antigüedad, y de la
que participan corrientes muy diversas. Esto hace que a menudo su
caracterización del derecho natural parezca una construcción ad hoc
elaborada con el objetivo de facilitarse la crítica.

(ii) La concepción filosófico-moral de Kelsen se caracteriza por un relativismo


metaético que, sin necesidad de negar que exista una justicia “absoluta”,
rechaza que se pueda conocer su contenido. Esta visión es propia de una
concepción ética no descriptivista, que niega valor cognitivo a los juicios
morales. Además, Kelsen caracteriza el relativismo como una
Weltanschauung o concepción del mundo que se opone a una
Weltanschauung que él denomina “absolutista”, según la cual hay una
justicia absoluta que es accesible al conocimiento humano. Inspirándose
en Dilthey, sostiene que existe cierta afinidad entre las convicciones ético-
políticas y las concepciones filosóficas, e incluso ciertos talantes y
actitudes psíquicas. En particular, la Weltanschauung absolutista estaría
conectada a una concepción epistemológica de carácter metafísico y a
una tendencia política que da sustento a la autocracia, mientras que la
concepción del mundo relativista se asociaría a una epistemología crítica
y se declara políticamente a favor de la democracia. La concepción de la
justicia de Kelsen presenta también una dimensión crítica. Su rechazo de
la metafísica le lleva a criticar ciertos principios o “normas” de justicia que
pretenden determinar el contenido de lo justo. Aunque también examina
críticamente los intentos de alcanzar ese objetivo por vías racionales,
pone el énfasis en los principios metafísicos, y en particular en la
concepción platónica de la justicia. A su juicio la investigación de Platón
sobre la justicia, que desemboca en un intento de desentrañar la idea del
bien, pretendía una justificación pseudo-mística y religiosa del gobierno
del “Rey filósofo”. Con ello Kelsen presenta a Platón como adalid de una
política autoritaria y como un enemigo de la democracia.
(iii) La fundamentación de la democracia desde el relativismo es una cuestión
de teoría política que sin embargo sirve de cierre a la filosofía moral de
Kelsen. He tratado de examinar si esa fundamentación es coherente con
su meta ética relativista.

Para ello he empezado caracterizando su concepción de la democracia, que grosso


modo se puede adjetivar como sigue:

1. Es una democracia “formal” o “procedimental”, pues se contempla como un


método para la producción del orden jurídico que consiste en aplicar en la
legislación un procedimiento de decisión por mayoría.
2. Es una democracia representativa, que se sustenta sobre el parlamento
como órgano representativo y los partidos políticos como cauce de la
representación.
3. Es una democracia deliberativa, que concibe el compromiso democrático
como motor del avance de la técnica legislativa.
4. Es una democracia liberal, aunque el liberalismo kelseniano se circunscribe al
ámbito político y no al económico.
5. Aunque Kelsen desarrolló por separado una teoría de la democracia y una
teoría de la constitución, su concepto de democracia presenta rasgos
característicos de una democracia constitucional.

Kelsen cree poder justificar coherentemente la democracia desde el relativismo. El


problema de esta fundamentación es que desde una metaética –tanto da si es
relativista o no– no se puede justificar una posición moral o un sistema político, pues
la única vía de fundamentación es apelando a valores sustantivos. En realidad un
relativismo coherente permite justificar tanto la democracia como la dictadura, por lo
que, llevado al límite, tiene consecuencias que pueden derivar en la autoanulación
de la democracia. La paradoja del relativismo kelseniano es que, aunque parece
que permite justificarlo todo, en realidad es incapaz de justificar nada de forma
plausible.

Crítica A La Tesis De Kelsen

Consiste en la identificación de las nociones de derecho objetivo y derecho


subjetivo. Sostener que el subjetivo es el mismo objetivo en determinada relación
con un sujeto, equivale a confundir las nociones de norma y facultad.

El derecho subjetivo es una posibilidad de acción de acuerdo con un precepto o, en


otras palabras, una autorización concedida a una persona. La regla normativa es, en
cambio, el fundamento de tal facultad.

Es falsa la afirmación de que cuando una facultad jurídica no se encuentra


garantizada por la acción, no es derecho subjetivo. Es incorrecto decir que el
derecho a la prestación y el de pedir a la aplicación del acto coactivo no son
facultades distintas, sino un mismo derecho en dos relaciones diferentes. Tanto la
ley como la doctrina reconocen la existencia de derechos subjetivos que no es
posible ejercitar coactivamente. Los civilistas distinguen dos especies de
obligaciones: civiles y naturales. Cuando las primeras no son cumplidas, puede el
acreedor exigir su observancia por medio de la acción; la inobservancia de las
segundas no faculta al acreedor para exigir judicialmente el cumplimiento.

Civiles el titular del derecho correlativo posee además de la Facultad de reclamar la


prestación en el de las naturales coma tiene únicamente el derecho a determinada
prestación. Obligación natural podemos citar, en nuestro derecho, la de pagar una
deuda contraída en juegos no prohibido, cuando el monto de la misma excede de la
vigésima parte de la fortuna del pernicioso.

Ejemplo de obligación natural lo encontramos en el caso en que prescribe la acción


para cobrar una suma si el derecho de acción o el derecho a la prestación fuesen
una sola facultad en dos relaciones diferentes, al desaparecer el primero,
desaparecería el segundo. Por otra parte, hay casos en que la acción existe sin que
exista el derecho material.

La actio es un derecho autónomo relativamente al otro. Los derechos reales


simples reflejos de un deber general de respeto o, como dicen los autores al criticar
la distinción entre derechos a la propia conducta y sobre la conducta ajena, el jefe
de la escuela proponía estamos de acuerdo con el famoso jurista en que libertad y
propiedad son facultades correlativas de un deber impuesto a todas las personas;
mas no creemos que constituyan una duplicación superflua del concepto del deber
ni, menos aún, que no sean auténticos derechos. La tesis debería de rechazarse,
porque un derecho no puede nunca ser copia, trasunto o reproducción de
obligaciones. No aplica Kelsen a los derechos de crédito, verbigracia, el
razonamiento que esgrime al sostener que la libertad y la propiedad no son
derechos. Pues el de crédito es correlativo de una obligación, aun cuando esta sea
general, especial. Derechos personales, estos son también reflejos de ciertas
obligaciones. Pero ello no quiere decir que no existan, ni que sean duplicación inútil
del deber correspondiente. Mi derecho a exigir una cosa que he comprado es
correlativo del deber del vendedor de entregármela y, sin embargo, no podemos
declarar que aquella facultad duplique de manera superflua la obligación del
vendedor. Lo único que podemos decir tratándose de los derechos de crédito, como
de cualquier otros, es que el derecho subjetivo es correlativo de un deber, general o
especial, de una de varias o de todas las personas.

TEORÍ A ECLÉTICA

Propuesta por Planiol y Ripert, tiene como objetivo estudiar los derechos reales
aplicando una fusión entre la teoría clásica y la teoría personalista (teoría monista).
Describe que “el derecho real es un poder jurídico que una persona ejerce sobre un
bien determinado de manera directa e inmediata, para aprovecharlo total o
parcialmente; dicho poder es oponible a un sujeto indeterminado que tiene la
obligación de abstenerse de perturbar al primero en el ejercicio de su derecho”. La
teoría ecléctica se analiza en dos partes: la teoría clásica y la teoría personalista
(teoría monista).
En la parte correspondiente a la teoría clásica se encuentran los tres elementos
fundamentales: sujeto titular, un poder jurídico y el bien. Tiene como base el poder
del titular del derecho real sobre un bien, es decir, la relación inmediata. Muñoz
Rocha, al analizar la teoría ecléctica, menciona que los derechos reales tienen como
manifestación “la correspondiente al poder jurídico que el titular del derecho real
ejerce sobre un bien determinado que el derecho positivo le reconoce, para poder
realizar actos jurídicos tendentes al aprovechamiento total o parcial del objeto
sometido a su poder”. Eso permite destacar el reconocimiento de los derechos
reales por parte del derecho positivo, lo cual refleja que las fuentes de los derechos
reales son solamente las hipótesis normativas señaladas por la ley.

Respecto a la facultad de aprovechamiento que tiene el titular de un derecho real,


existen ocasiones en que se desea transmitir su titularidad de forma total o parcial,
para lo cual es necesario utilizar los actos jurídicos al caso concreto en cuestión.
Atendiendo a lo respectivo sobre la teoría monista, específicamente a la teoría
personalista, argumenta la existencia de una relación jurídica cuando señala que el
poder del titular del derecho real es oponible a un sujeto indeterminado. El sujeto
pasivo inmediato es determinado.

Por otra parte, es detectable la prestación al mencionar que el sujeto indeterminado


tiene el deber de abstenerse de perturbar al titular en el ejercicio de su derecho.
Para el derecho real de propiedad es correcta dicha aseveración, ya que el sujeto
pasivo es la colectividad y tiene una prestación de no hacer o abstención. Se señala
que es importante considerar “la relación jurídica entre el titular del derecho real o
sujeto activo y los terceros (sujetos pasivos) en general, para que se abstengan de
perturbarlo en el ejercicio y goce de su derecho”. Pero debemos hacer una
excepción para los derechos que tienen su origen en la desmembración de la
propiedad, porque en ellos existen prestaciones de dar, hacer y no hacer.

SUPUESTOS Y HECHOS JURÍDICOS

LOS SUPUESTOS es la hipótesis de cuya realización dependen las consecuencias


establecidas por la norma.

HECHO JURÍDICO es el acontecimiento natural o humano, voluntario o involuntario


que sea puesto por una disposición legal.

Los hechos jurídicos se clasifican en:

a) Hechos jurídicos sin la participación del hombre, Como los fenómenos


naturales, los cuales producen consecuencias de Derecho; por ejemplo, una
inundación que trae consecuencias jurídicas como son daño en los bienes
inmuebles
b) Hechos jurídicos con la participación del hombre: Son los hechos biológicos
relacionados con el ser humano que originan consecuencias de derecho,
como el nacimiento, la vida o la muerte.
c) Los hechos jurídicos realizados con la acción del hombre son:

1. VOLUNTARIOS

• Pueden ser lícitos e ilícitos.

Un ejemplo de un hecho jurídico derivado del hombre y que es lícito, se observa


cuando una persona cumple la mayoría de edad, lo cual tiene como consecuencia
jurídica, la adquisición de su capacidad de ejercicio, esto es, ahora podrá cumplir
con sus obligaciones y ejercer sus derechos por sí misma.

2. INVOLUNTARIOS

• Producen consecuencias de Derecho.

Un ejemplo de acontecimiento derivado del hombre de tipo involuntario y que


produce consecuencias de derecho, pero sin intención de producirlas, se presenta
cuando una persona conduce un vehículo con exceso de velocidad y tiene una falla
mecánica que le impide controlar el vehículo, como consecuencia de ello, atropella a
unas personas provocándoles lesiones. En este caso no existió la voluntad de
lesionar a esas personas, por lo tanto, es un acto involuntario que produce
consecuencias de derecho, pero también carente de intención de producirlas.

ACTOS JURÍDICOS

Se clasifican en:

a) Unilaterales (contratos), bilaterales (convenios), esta clasificación obedece a


que proceden de la declaración de la voluntad de una, de dos o más partes.
b) Mortis causa, producen efectos después de que muere el actor; por ejemplo,
un testamento.
c) Intervivos, producen los efectos durante la vida de quien los realiza; por
ejemplo, un delito.
d) Solemnes, requieren de una forma especial para que la ley les reconozca
validez; por ejemplo, el matrimonio.
e) No solemnes, no requieren de una forma preestablecida o especial; por
ejemplo, el concubinato.
f) Lícitos, son los que al efectuarse o que al realizar la conducta no lesionan
ninguna norma jurídica; por ejemplo, cumplir con el pago de la tenencia
vehicular.
g) Ilícitos, son los que violan una norma jurídica; por ejemplo, no cumplir con la
entrega de un bien inmueble que vendimos.
Para la existencia del acto jurídico se requiere:

I. Consentimiento, implica la voluntad de una o varias personas para realizar


el acto jurídico.
II. Objeto, debe ser física y jurídicamente posible. Se debe distinguir entre
objeto directo y objeto indirecto. El primero consiste en crear, transmitir,
modificar o extinguir derechos u obligaciones.

El segundo, es decir, el objeto indirecto recae en la cosa que el obligado debe dar o
el hecho que debe hacer o no hacer.

III. Solemnidad en los casos que así lo disponga la ley, es la forma señalada por
la ley para expresar la voluntad para que el acto exista. No a todos los actos
jurídicos se les exige este elemento, pero sí existen algunos como el
matrimonio o el testamento, en los que la voluntad debe expresarse como lo
indica la ley para que el acto exista.

Para que el acto jurídico sea válido se requiere:

A. Capacidad, se divide en capacidad de goce y de ejercicio, la primera es la


aptitud para ser titular de derechos y obligaciones; la segunda, la aptitud
para ejercer por sí mismo los derechos y obligaciones conferidas en la ley.
La capacidad de ejercicio se adquiere a los 18 años de edad, por lo tanto,
sólo las personas capaces pueden celebrar actos jurídicos, es decir, se
requiere ser mayor de edad y no estar en estado de interdicción.
B. Ausencia de vicios en el consentimiento, requiere que dicha voluntad no se
encuentre viciada. Hay vicios en la voluntad cuando ésta se manifiesta por
violencia, error, dolo, mala fe o lesión.
C. Que el objeto, motivo o fin sea lícito, debe ser física y jurídicamente posible.
Se debe distinguir entre objeto directo y objeto indirecto. El primero consiste
en crear, transmitir, modificar o extinguir derechos u obligaciones. El
segundo, es decir, el objeto indirecto recae en la cosa que el obligado debe
dar o el hecho que debe hacer o no hacer.
D. Solemnidad, es la forma señalada por la ley para expresar la voluntad para
que el acto exista. No a todos los actos jurídicos se les exige este elemento

Inexistencia:

Es inexistente el acto jurídico cuando no contiene una declaración de voluntad, por


falta de objeto que pueda ser materia de él, o de la solemnidad requerida por la ley.
No producirá efecto legal alguno, ni es susceptible de valer por confirmación, ni por
prescripción. Puede invocarse por todo interesado.

Cuando faltan los elementos de existencia (consentimiento, el objeto y la


solemnidad) el acto jurídico es inexistente para el Derecho, lo que equivale a la
nada jurídica. No es susceptible de hacerlo valer por confirmación, ni por
prescripción; su inexistencia puede invocarse por todo interesado.
Nulidad:

Existe nulidad del acto jurídico cuando, a pesar de que se haya celebrado
observando todos sus elementos de existencia, presenta algún vicio de origen en
algunos de esos elementos, lo que le priva de validez aunque haya nacido a la vida
jurídica. La nulidad se traduce en una sanción que la propia ley establece como
consecuencia del abuso de las personas de crear actos jurídicos que la contrarían,
impidiéndoles la posibilidad de generar las consecuencias de Derecho deseadas o
destruir las nacidas. La ilicitud en los actos jurídicos, en ocasiones, será sancionada
con una nulidad relativa o absoluta, según lo disponga la ley en cada caso.

La nulidad se divide en dos:

1) Nulidad absoluta, por regla general, no impide que el acto produzca


provisionalmente sus efectos, los cuales serán destruidos retroactivamente cuando
se pronuncie por el juez la nulidad.

Cuasicontrato, delito y cuasidelito

Cuasicontrato: es el hecho de una persona permitido por la ley, que la obliga hacia
otra, u obliga a otra hacia ella, sin que entre ambas exista ningún convenio. Por
ejemplo, la gestión que una persona hace de los negocios de un ausente, sin que
éste le haya dado tal encargo, es también un cuasicontrato que obliga a la primera a
rendir cuentas, y al ausente a indemnizar al gestor por los desembolsos realizados
con motivo de la gestión.

En los cuasicontratos no hay consentimiento para que se produzca la obligación


como sucede en los contratos, sino que es la ley o la equidad natural las que la
crean; por ejemplo, la gestión de negocios.

Cuasidelito: es el acto dañoso realizado sin intención de producir un mal, pero del
que se deriva una responsabilidad civil para el autor del delito, el Código Penal los
llama delitos no intencionados o de imprudencia.

Delito: es un acto u omisión sancionada por las leyes penales.

Los delitos y los cuasidelitos difieren de los cuasicontratos en que éstos son
permitidos por las leyes, mientras que el hecho constitutivo del delito o cuasidelito es
condenable.

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