FRACCIONAMIENTO

1 ESTABILIZACIÓN (en origen)

2 DESALADO
3 PRECALENTAMIENTO (destilación flash)
4 DESTILACIÓN ATMOSFÉRICA (topping)
5 DESTILACIÓN VACÍO (vacuum unit)
6 ESTABILIZACIÓN DE NAFTAS (unidad de ligeros)
7 DESULFURACIÓN DE PRODUCTOS LIGEROS

1 ESTABILIZACIÓN
El crudo recién extraído del pozo se deja decantar con el fin de separar la mayor
parte del agua y los sólidos en suspensión (arcilla, arena, piedras, etc.), así como
los gases disueltos, para facilitar y transportarlo de forma segura bien por
oleoductos o buques petroleros.
En la refinería se almacena en depósitos de campana flotante para reducir las
pérdidas de gases disueltos y disminuir el riesgo de explosión. En estos tanques
continua el proceso de decantación del agua y otros materiales sedimentables.
DESALACIÓN y DESTILACIÓN ATMOSFÉRICA
 FRACCIONAMIENTO

2 DESALADO
Todos los crudos tienen cantidades apreciables de sales orgánicas e inorgánicas. Estas
últimas son principalmente cloruro sódico y magnésico y su concentración puede variar
entre 0,03 y 7,5 g/L, aunque lo más frecuente es entre 0,2 y 0,4 g/L. Es necesario
reducir este contenido para evitar los efectos perjudiciales que producen en forma de
incrustaciones en los cambiadores de calor y la posibilidad de generación de ácido
clorhídrico al hidrolizarse a alta temperatura.
El desalado se realiza mediante extracción con agua. En una primera etapa se provoca la
formación de una emulsión, con objeto de aumentar la superficie de contacto, y en una
segunda etapa se produce la decantación para separar ambas fases.
En esta operación se adiciona agua en una proporción entre el 4 y 8 % (según el contenido
de sales), se agregan aditivos químicos tanto para la formación de la emulsión como
para su descomposición posterior, se opera a temperaturas del orden de 120 – 150 ºC
para reducir la viscosidad de la mezcla, se trabaja a presión para evitar la vaporización
de los hidrocarburos más volátiles y del agua. El tiempo de permanencia en los
decantadores suele estar comprendido entre 40 y 60 minutos. La eficacia de la
operación es siempre superior al 90 %. Esta eficacia puede incrementarse disponiendo
de varios desaladores en serie.
DESALACIÓN y DESTILACIÓN ATMOSFÉRICA
 3 DESTILACIÓN FLASH
El crudo se calienta en el horno hasta temperaturas del orden de 350 – 370 ºC y debe
hacerse con tiempos muy cortos para evitar el craqueo de los hidrocarburos
superiores y a velocidades de circulación muy altas para mejorar el coeficiente de
transmisión de calor, evitando así el recalentamiento de los tubos en la zona de
salida. El fenómeno de cracking en los hornos de crudo es muy perjudicial ya que
produce la formación de coque, que se deposita en los tubos, reduciendo la
transmisión de calor. La presencia de vapor de agua en el crudo disminuye el
peligro de formación de costras de coque ya que reacciona con él generando
monóxido de carbono e hidrógeno.
Las condiciones de circulación del crudo a través del horno son, por tanto, de régimen
turbulento, con pérdidas de presión muy altas. A la salida del horno, el crudo
caliente se conduce a la zona flash de la columna de fraccionamiento a través de
una tubería por la que circula a alta velocidad, a costa de una fuerte pérdida de
presión. La zona flash de la columna se encuentra a una presión que viene
definida por la pérdida de carga de los vapores al atravesar los platos en su
recorrido ascendente hasta el condensador de cabeza. Normalmente, la presión
total en la zona flash de la columna es del orden de 2 a 3 kg/cm2.
 4 DESTILACIÓN ATMOSFÉRICA (topping)
El objeto de esta destilación es obtener una serie de fracciones con intervalos de ebullición bien
definidos, que corresponden a los diferentes productos comerciales. Como ya se ha señalado, el
crudo se calienta en el horno y se alimenta a la cámara de destilación flash, situada generalmente
en la parte inferior de la columna de fraccionamiento. Esta columna opera a presiones
ligeramente superiores a la atmosférica y dispone de reflujo superior, constituido por una parte de
las naftas condensadas en el condensador de cabeza (casi siempre trabajando a condensación
parcial), con unos perfiles de presiones y temperaturas decrecientes en sentido ascendente.
La columna casi siempre es de platos (habitualmente entre 30 y 50 platos) y dispone de una serie de
extracciones laterales por los que se puede “sangrar” parte del líquido presente en un
determinado plato y purificarlo en una columna exterior (también de platos) mediante arrastre con
vapor de agua (denominada stripper). El vapor de agua reduce la presión parcial de vapor de los
hidrocarburos, arrastrando consigo a los componentes más volátiles de la corriente extraída, que
se introducen en la columna de fraccionamiento por encima del plato de extracción.
En la columna de fraccionamiento de crudo existen varios reflujos intermedios, denominados
circulantes, que consisten en extracciones de líquido de diferentes platos, que se enfrían y
vuelven a introducirse en la columna algunos platos por encima de la extracción. Con ello se
logra modificar el perfil de temperatura de la columna, eliminando calor del sistema en los puntos
adecuados y, en consecuencia, reduciendo el caudal de vapor que llega al condensador de
cabeza.