Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
De Woody Allen
PERSONAJES
Carol
Phyllis
Howard
Sam
Juliet
1 CAROL: (entre bas dores) ¿Phyllis? ¿Phyllis? (Phyllis entra por la derecha, totalmente
ves da. Se sienta en el extremo derecho del sofá.) ¡Phyllis! Soy Carol.
2 PHYLLIS: Ya voy.
3 CAROL: ¿Estás bien?
4 PHYLLIS: Estoy empapada. Me agarraste en la regadera. (Phyllis cruza el fondo del
escenario en dirección al bar. Se sirve una copa y se la bebe de un trago. Carol sigue
golpeando la puerta y dando mbrazos.) Voy, voy, ya estoy ves da. (Phyllis se dirige a
la puerta principal y le abre a Carol.)
5 CAROL: ¿Estás bien?
6 PHYLLIS: Sin entrar en detalles por favor.
7 CAROL: ¿Sin entrar en detalles de qué?
8 PHYLLIS: Dije que sin entrar en detalles.
1
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
2
2
ti
fl
fi
ti
fi
fi
ti
fi
ti
3
3
ti
ti
ti
4
4
ti
ti
ti
5
5
ti
ti
ti
ti
ti
ti
fí
ti
6
114 PHYLLIS.- Nunca me dijo nada, pero eso tal vez se debió a que nunca hablábamos.
115 CAROL.- ¡Phyllis, mujer!
116 PHYLLIS.- Bueno, ya sabes, hablábamos…No era sólo “pásame la sal”, aunque eso
también salía a colación de vez en cuando.
117 CAROL.- Tienes que haber mantenido conversaciones en las que te haya insinuado
algo.
118 PHYLLIS.- Por decírtelo de alguna manera: hablábamos pero los dos a la vez.
119 CAROL.- Falta de comunicación.
120 PHYLLIS.- ¡Wow, Carol, cómo sabes ir directamente al fondo de la cues ón!
121 CAROL.- Bueno, eso debería de haberte servido de señal.
122 PHYLLIS.- Y me sirvió.
123 CAROL.- Bien, ¿y qué?
124 PHYLLIS.- No sé, yo no escuchaba, sólo hablaba.
125 CAROL.- Y el sexo empezó a languidecer.
126 PHYLLIS.- ¿Cómo adivinaste?
127 CAROL.- No adiviné. Era sólo una suposición.
128 PHYLLIS.- Pues no supongas tanto. Las personas pueden dejar de comunicarse
verbalmente y aun así el sexo puede con nuar siendo feroz.
129 CAROL.- De acuerdo. Así que el sexo era estupendo.
130 PHYLLIS.- ¿Estupendo? Era mejor que estupendo: le daban náuseas.
131 CAROL.- A par r de un momento determinado, las relaciones sexuales se apagan
gradualmente, pero eso es sólo porque algo más profundo se ha apagado ya. ¿O es al
revés? El sexo se esfuma y luego todo lo demás pierde todo su brillo. La cues ón es…
que todo es e mero.
132 PHYLLIS.- ¿De veras, Carol?
133 CAROL.- Oh, yo que sé… se lo estás preguntando a la persona equivocada.
134 PHYLLIS.- No me acuerdo haber preguntado nada.
135 CAROL: Pero, ¿no te dijo a dónde se va?
136 PHYLLIS: (cambiando de ac tud) Ahora estoy empezando a reaccionar…
137 CAROL: Phyllis, has estado reaccionando…
138 PHYLLIS: No, de haber reaccionado, hubiera agarrado todos estos documentos
importantes, todo este trabajo que aún ene pendiente, y hubiera hecho esto. (Los
6
fí
ti
ti
ti
ti
ti
ti
7
rompe en pedazos.) Eso sería una reacción, pero no soy una persona rencorosa… No
soy venga va, sino generosa y madura.
139 CAROL: ¡Cálmate!
(Phyllis se dirige a la mesita y coge el male n de Sam. Lo vacía y lo arroja a la otra
punta del escenario.)
140 PHYLLIS: (a la vez que rompe en pedazos los documentos esparcidos por el suelo)
Estábamos planeando restaurar la casa que tenemos en Amaganse . Le dije: “No la
hemos tocado desde que la compramos.” Le dije: “Llamemos a los arquitectos Paul y
Cindi y que la rehagan de arriba abajo.” Él dijo: “Phyllis, quiero hablar con go”. Yo dije:
“la casa está tan bien situada en la bahía, y hemos pasado tan buenos ratos allí…” Él
dijo: “Phyllis, no sé cómo decirte esto, pero quiero terminar.” No le oía, era una de esas
conversaciones en las que nadie escucha. Yo dije: “Siempre quisimos tener ventanales
y un baño más grande.” Él dijo: “Phyllis, voy a dejarte.” Y yo dije: “Con una de esas
regaderas llenas de chorros que te rocían por todos lados”. Me agarró y dijo: “Phyllis,
ya no te quiero. Quiero una vida nueva, quiero terminar, ¿en endes?, quiero terminar.
¡Se acabó!” y yo dije: “De qué color podríamos pintar el cuarto de invitados”.
141 CAROL: ¿Y qué dijo él?
142 PHYLLIS: Nada. Empezó a zarandearme por el cuello y, después de unos tres
minutos de sacudidas, empecé a darme cuenta de que estaba intentando decirme algo.
143 CAROL: ¿Qué te dijo exactamente?
144 PHYLLIS: Dijo: “Estoy enamorado de otra mujer”.
(Carol tose y casi se atraganta con su bebida)
145 CAROL: ¿Te dijo por quién te dejaba?
146 PHYLLIS: ¿Por qué se te ve tan incómoda?
147 CAROL: No estoy incómoda, solo empiezo a notar los efectos de esta copa.
148 PHYLLIS: Al principio, creía que se trataba de Anne Dreyfuss.
149 CAROL: ¿Anne Dreyfuss, la decoradora?
150 PHYLLIS: A ella le gustan los mismos rollos que a él: velear, pasear en el bosque,
esquiar…
151 CAROL: Él nunca saldría con Anne Dreyfuss.
152 PHYLLIS: ¿Y tú cómo sabes?
153 CAROL: ¿Qué quieres decir con eso de que cómo lo sé? Yo también conozco a Sam.
154 PHYLLIS: No tan bien como yo.
7
ti
tí
ti
tt
ti
8
155 CAROL: No dije eso. Quiero decir que todos somos amigos desde hace años.
156 PHYLLIS: ¿Cuántos años?
157 CAROL: Cinco. Casi seis. ¿Eso qué ene que ver? No me imagino a Sam con Anne
Dreyfuss. Se queja todo el empo… con una personalidad muy irritante y, si me
permites que lo diga, no ene nalgas.
158 PHYLLIS: Pensé también que podría ser Nonny, la chica que trabaja en su bufete.
La ascendieron a socia del despacho…
159 CAROL: No conozco a Nonny, ¿Cómo es?
160 PHYLLIS: Guapa y pechugona. Una dientona, con unos colmillos prominentes muy
eró cos. Pero no es Nonny.
161 CAROL: La cues ón es que no sabes con quién se ha largado.
162 PHYLLIS: La cues ón es que lo sé.
163 CAROL: No me lo digas. No es asunto mío.
164 PHYLLIS: Claro que lo es.
165 CAROL: No lo es. Lamento que haya pasado… Me da vueltas la cabeza.
166 PHYLLIS: ¿Sabes quién es?
167 CAROL: Phyllis, por favor.
168 PHYLLIS: ¡Eres tú, puta!
169 CAROL: ¡Pura paranoia!
170 PHYLLIS: No me vengas con eso, cha ta. Te la ha estado me endo desde hace más
empo del que seguramente puedo imaginar.
171 CAROL: Estás como una cabra… ¡Contrólate!
172 PHYLLIS: De cualquier modo, vas a tener que confesarlo todo si quieres largarte
con él. Vaya regalito para Howard. Primero, el papá en la casa de la risa y, después, una
carta de ruptura de su mujercita.
173 CAROL: ¿Sabes? Estoy tan alterada que incluso me cuesta trabajo reaccionar como
es debido.
174 PHYLLIS: ¿Tuviste una aventura con Sam?
175 CAROL: No.
176 PHYLLIS: Dímelo.
177 CAROL: No.
178 PHYLLIS: Sólo quiero la verdad.
179 CAROL: No la he tenido… Eres tan cruel…
8
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
9
180 PHYLLIS: Lo averigüé, ramera. Se han estado llamando por teléfono, se ven a
escondidas, han viajado juntos…
181 CAROL: No me quedaré aquí sentada para que se me acuse.
(Se levanta, pero al notarse mareada, vuelve a sentarse.)
182 PHYLLIS: Ahora, a toro pasado, recuerdo tantos detalles evidentes: las miradas por
encima de la mesa, la vez que se perdieron durante el viaje a Normandía. Howard y yo
los estuvimos buscando durante dos horas… Y la noche que cenaste aquí y Sam bajó
con go para buscarte un taxi. Y yo aquí, sentada en la cama durante hora y media,
porque él de repente decidió acompañarte a casa dando un paseo. ¿Sabes? Ahora que
lo pienso, recuerdo que hace tres años, hace tres jodidos años, tú y Sam se quedaron
solos una semana en Nueva York, mientras Howard estaba en Los Ángeles y yo en una
convención en Filadel a. Eso fue hace tres años, ¿o se remonta aún más atrás?
183 CAROL: ¡No soy yo!
184 PHYLLIS: Encontré su agenda. ¡Estás por todas partes!
185 CAROL: (se levanta, grita y llora) ¿Qué quieres que haga? ¡Nos enamoramos! ¡Eres
tan cruel!
186 PHYLLIS: ¡Carajo!
187 CAROL: ¡Cruel! Nos enamoramos… nadie lo planeó… Nadie quiso hacerle daño a
nadie.
188 PHYLLIS: Lo sabía desde la noche en que nos conocimos en los Hamptons. Me dije:
“Esta es una chita; además está hecha un desastre. Apesta a problemas. Transpira
neurosis por cada poro.”
189 CAROL: Esta aventura sólo nos ha causado angus a y dolor.
190 PHYLLIS: Sin mencionar alguno que otro orgasmo esporádico.
191 CAROL: No lo ensucies de esa manera. No es lo que te imaginas.
192 PHYLLIS: Esa primera noche, cuando volvíamos en coche, me dije: “Él parece
simpá co, un poco desorientado, aunque buena persona… Pero ella es una tarada y
una carnívora.”
193 CAROL: ¡Deja de ser tan crí ca! Sabes por tu trabajo que estas cosas ocurren. Es la
naturaleza… Es como un rayo: dos personas se conocen, salta la chispa y, de repente,
surge algo con vida propia.
194 PHYLLIS: Estás describiendo a Frankenstein.
195 CAROL: Phyllis, esto es un asunto serio.
9
ti
ti
fi
fi
ti
ti
10
196 PHYLLIS: ¿Cuánto empo ha durado lo suyo? ¿Tres años? ¿Cuatro? ¿Cinco?
197 CAROL: Ni siquiera tres.
198 PHYLLIS: ¿Dos, entonces? ¿Durante dos años se han estado escondiendo por la
ciudad como perros en celo?
199 CAROL: No hemos estado escondiéndonos por la ciudad… Tenemos un
departamento.
200 PHYLLIS: ¿Un apartamento? ¿Dónde?
201 CAROL: Entre la cincuenta y la sesenta este.
202 PHYLLIS: ¿Es grande?
203 CAROL: Pequeño.
204 PHYLLIS: ¿De verdad?
205 CAROL: Tres habitaciones.
206 PHYLLIS: ¿Para qué necesitan tres habitaciones? ¿Tienen invitados?
207 CAROL: Nunca. Lo juro. Sólo es un lugar para ir, para estar solos… Para relajarnos,
para… para… hablar.
208 PHYLLIS: Para hablar… Para intercambiar ideas. Para intercambiar uidos.
209 CAROL: Phyllis, estamos enamorados. ¡Ay, Dios! Nunca me imaginé diciendo esto…
Es… todo… sí, es sensual, pero es algo más que eso. Compar mos sen mientos y
sueños.
210 PHYLLIS: ¿Por qué te dejaría yo entrar en mi vida? Desde el primer momento, supe
que serías capaz de cogerte a una serpiente si alguien le sujetaba la cabeza.
211 CAROL: Phyllis, ¿qué quieres que te diga? Dejó de amarte hace muchos años. No
sé por qué. Pero, seguro, no fue por mí. Incluso antes de decírmelo, él daba lo suyo por
terminado.
212 PHYLLIS: ¿Cómo lo hizo la primera vez?
213 CAROL: ¿Hizo qué?
214 PHYLLIS: ¿Cuándo? ¿Qué noche?
215 CAROL: ¿Qué importa eso?
216 PHYLLIS: Tú querías saber. Yo quiero respuestas.
217 CAROL: En la esta de Lou Stein.
218 PHYLLIS: ¿Y qué pasó? ¿Quién manoseó primero a quién?
219 CAROL: No fue así. Él se me acercó… Yo estaba mirando los fuegos ar ciales por
la ventana y me susurró al oído: “¿Puedes comer conmigo la semana que viene sin
10
fi
ti
ti
fl
ti
ti
fi
11
decirle una sola palabra a Phyllis?” Bueno, ya puedes imaginarte que me sorprendió un
poco.
220 PHYLLIS: Por supuesto. Seguro que empezaste a lubricar.
221 CAROL: Yo dije: “¿Para qué?”. Él dijo: “necesito que me ayudes.”
222 PHYLLIS: ¿Y dónde estaba yo mientras tenía lugar esa pendejada adolescente?
223 CAROL: Te habías llevado a un grupo de gente, contra su voluntad, a ver los fuegos
ar ciales a la azotea, a veinte grados bajo cero. Y Howard estaba en la cocina
copiando la receta de Stein para preparar baba ghanoush.
224 PHYLLIS: Sí, ya me acuerdo. Tu marido acababa de apuntarse a un curso de cocina.
Todos estábamos tan orgullosos de él…
225 CAROL: Y yo le pregunté: “¿Qué clase de ayuda? ¿Con respecto a qué? Y Sam dijo:
“Se acerca el cumpleaños de Phyllis y quiero que me ayudes a escoger un regalo para
ella, pero ene que ser algo especial.”
226 PHYLLIS: Y vaya que lo fue, amiguitos, vaya si lo fue.
227 CAROL: Así que el jueves siguiente comimos en su club y estuvimos barajeando
varias posibilidades para tu regalo. Después de la comida, nos fuimos de compras…
recuerdo que estuvimos en Ti any´s y en James Robinson. Al nal, en esa diminuta
enda de an güedades que está en la primera avenida, encontramos unos
deslumbrantes aretes Art Decó… diamantes con pequeños rubíes…
228 PHYLLIS: Conozco esos aretes. Te los he visto puestos.
229 CAROL: Bueno, me quedé atónita. Los compró y, cuando salimos a la calle, me dio
la caja diciendo: “Aquí enes. Te deseo con toda mi alma:”
230 PHYLLIS: ¿Y tú que dijiste?
231 CAROL: Le dije: “¡A ver, a ver, alto ahí! Venimos a comprarle a Phyllis un regalo de
cumpleaños… Si quieres que acepte esto, tenemos por lo menos que comprarle algo a
ella.”
232 PHYLLIS: Gracias, eres una ricura. Así que tuve que conformarme con esos
horribles candelabros de plata.
233 CAROL: Costaron una fortuna.
234 PHYLLIS: Son unos candelabros de vieja solterona. Y, por supuesto, no se te ocurrió
decir: “Phyllis es tu mujer yo soy su amiga.”
235 CAROL: ¿Me dejas decirte por qué no?
11
ti
ti
fi
ti
ti
ti
ff
fi
12
12
tí
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
13
13
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
tí
fi
ti
ti
ti
ti
14
14
ti
ti
ti
ti
fi
15
15
ti
fi
ti
ti
ti
ti
ti
16
16
ti
ti
ti
tí
ti
ti
ti
ti
ti
17
17
ti
ti
ti
ti
ti
fi
ti
ti
fi
ti
ti
fi
ti
ti
fi
18
363 CAROL: Nunca has sabido lo que yo pensaba en el fondo acerca de nada.
364 HOWARD: Pero ¿de qué otra manera podía conver rse en la profesora Karin, el
ídolo en turno?
365 CAROL: No me pudiste embarazar, ¿esa es la historia que quieres contar? Porque,
en resumidas cuentas, se trata de eso.
366 HOWARD: Acudió a un especialista en fer lidad y cada dos o tres días tenía que
masturbarme dentro de un tubo de ensayo.
367 PHYLLIS: Bravo, qué buena puntería debes de tener.
368 HOWARD: Así que ella salía corriendo con el tubo en un taxi y, mientras los
espermatozoides estaban vivitos y coleando…
369 CAROL: Howard, los tuyos no coleaban. Deambulaban sin rumbo.
370 HOWARD: Resumiendo: la ciencia llevó a cabo la magia. Su sueño iba a hacerse
realidad. Pasados los nueve meses, sería como la mismísima profesora Karin, con sus
faldas Laura Ashley y sus joyas aztecas. No tendría que seguir siendo aquel poco
envidiable personaje llamado Carol.
371 PHYLLIS: Lo veo venir. Le dio miedo. Fue a un abor sta ilegal, y además borracho,
que por error le operó la cara y por eso ene la pinta que ene.
372 HOWARD: Miedo es exactamente lo que le entró, pero cuando estaba de ocho
meses. De repente, no quería ser madre.
373 CAROL: (en voz baja) No, no quería.
374 HOWARD: La realidad se impuso y se dijo a sí misma: “Oye, una cosa es dejarse
llevar por fantasías de iden dad… pero el caso es que no soy la profesora Karin y no
quiero tener un hijo.”
375 CAROL: ¿Por qué me haces esto?
376 HOWARD: En pocas palabras, dio a luz a un bebé de tres kilos y seiscientos treinta
gramos que, a pesar de estar pelón, era bastante guapo. Bueno, durante los primeros
días pude desarrollar vínculos afec vos con él, pero ella estaba empecinada en
desprenderse de él… Insis ó en darlo en adopción.
377 PHYLLIS: Y tú te desentendiste y dejaste que lo hiciera. Seguro que fuiste muy
razonable y educado.
378 HOWARD: Me acuerdo con absoluta claridad. El día en que lo entregamos pensé:
“Oye, si me era la cabeza en una de esas bolsas de plás co del super y me la amarrara
bien fuerte en el cuello, ¿no me sen ría mejor?”
18
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
19
379 PHYLLIS: Muy bien, son ustedes una pareja encantadora. Si la Academia diera un
Oscar para humanos anormales, contarían con mi voto. Y ahora voy al baño. Cuando
vuelva quiero que los dos se hayan largado.
(Phyllis sale por la izquierda)
380 HOWARD: Así que supongo que lo nuestro se acabó. Después de todos estos
años…
381 CAROL: Creo que nunca debió haber empezado.
382 HOWARD: ¿Por qué dices eso, Carol? Sin duda alguna, empezó bien. Los primeros
días fueron bastante buenos.
383 CAROL: No. Fue culpa mía. Hubiera sido mejor que te casaras con esa… ¿Cómo se
llamaba?...Ida…, Ida…
384 HOWARD: ...Rondilino…
385 CAROL: Rondilino. No debí haberte separado de ella. Pero yo quería estar con una
persona crea va. Con un escritor.
386 HOWARD: No me separaste de Ida. Te vi y fui por .
387 CAROL: Eso es lo que tú crees. La noche en que salimos decidí casarme con go, ya
estabas perdido.
388 HOWARD: Pobre Ida.
389 CAROL: Ida era una sosita. Pero mucho más adecuada para que yo. Nos hemos
defraudado demasiado.
390 HOWARD: ¿Me habías engañado antes de haberte me do con Sam?
391 CAROL: No. Bueno, sí. Una vez, con mi den sta.
392 HOWARD: Carol…
393 CAROL: ¿Sabes que me cobró una amalgama de más?
394 HOWARD: ¿Y con quién más?
395 CAROL: Con nadie más… Jay Roland.
396 HOWARD: ¿Mi colaborador?
397 CAROL: Ay, Howard, era un escritor tan malo, aunque tan sexy, con esa coleta que
tenía…
398 HOWARD: ¿Te acostaste con mi colaborador literario?
399 CAROL: Una vez. Estabas en el hospital, recibiendo tu tratamiento de
electroshocks, y los dos estábamos tan preocupados por que no sabíamos cómo
expresarlo.
19
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
20
20
fi
ti
ti
ti
fi
21
424 HOWARD: No tendrás que mirar. Primero voy a matarte a y luego me mataré yo.
425 CAROL: ¿A mí? ¡Howard, estás bromeando!
426 HOWARD: ¡Primero tú, después yo!
427 CAROL: ¡Auxilio! ¡Phyllis!
428 HOWARD: ¡Deja de ladrar!
(Amar lla la pistola)
429 CAROL: ¡Howard, no! ¡No lo hagas!
430 HOWARD: Dame una buena razón por la que tú y yo debamos seguir viviendo.
431 CAROL: Porque somos seres humanos, Howard. Falibles y a menudo estúpidos,
pero no malvados, la verdad es que no. Sólo paté cos, equivocados, desesperados…
432 HOWARD: ¡Estamos solos en el cosmos!
433 CAROL: Howard, esto no es el cosmos. ¡Esto es Central Park West!
434 HOWARD: ¡No! ¡Es inú l! ¡Quiero morir! (Howard se lleva la pistola a la cabeza y
aprieta el ga llo, pero se encasquilla. Apunta a Carol, aprieta el ga llo varias veces,
pero vuelve a encasquillarse.) ¡Puta madre! Es demasiado vieja. Demasiado vieja. Se
atora.
(Carol le quita la pistola a Howard)
435 CAROL: ¡Dame eso! ¡Estás loco! ¿Qué te pasa? ¡Estoy temblando como un an!
¡Me estoy mareando! Necesito un Valium.
(Phyllis entra ignorante de lo que ha pasado.)
436 PHYLLIS: ¿Qué es todo este escándalo? Creo haberles dicho que se largaran.
437 CAROL: (temblando) Howard quería matarme. A mí y a él. Primero yo y luego él. La
pistola de su padre. Un souvenir, pero… pero… pero se encasquilló. Apretó el ga llo,
pero se encasquilló.
(Phyllis coge la pistola y juega con ella)
438 PHYLLIS: A esta pistola no le pasa nada, Howard. Olvidaste quitarle el seguro.
439 CAROL: ¡Voy a vomitar!
(Carol sale y Phyllis se sienta con Howard en el sofá)
440 PHYLLIS: Howard, la verdad es que, a pesar de que estás sufriendo una de tus
depresiones habituales, esta vez enes razones de sobra para estar deprimido. Incluso
un reloj descompuesto da la hora correcta dos veces al día. Te han pasado cosas
deprimentes. Primero llevaste a tu querido padre a un asilo de ancianos de segunda
categoría…
21
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
fl
ti
22
22
fi
ti
ti
ti
23
458 SAM: Me agrediste. Intenté ser razonable. No estoy dispuesto a que una histérica
me fracture el cráneo.
459 HOWARD: Has mantenido relaciones con mi mujer durante dos años.
460 SAM: Con go sí quiero hablar, Howard. Y voy a empezar con una disculpa.
461 PHYLLIS: Y eso lo arregla todo, ¿no?
462 SAM: Dije que no quiero saber nada de . Vine a recoger mis papeles.
463 HOWARD: Sam, me es di cil aceptar tus disculpas. Yo creía que éramos amigos.
464 SAM: (enfadado con Phyllis, mientras recoge los documentos del suelo) Tengo unos
casos bastante complicados. Mira lo que hiciste…
465 PHYLLIS: Con que has estado cogiendo con todas mis amigas…
466 SAM: Estos dos úl mos años no han sido fáciles para mi, Phyllis. En el trabajo no
me ha ido bien. ¿Por qué hiciste trizas todo esto?
467 PHYLLIS: Dije que has estado cogiendo con todas mis amigas.
468 SAM: Yo no he estado cogiendo con todas tus amigas.
469 PHYLLIS: ¡Men roso! Lo sé. ¡Lo sé todo!
470 SAM: Si lo sabes todo, no necesitas que te cuente nada. Quita tus pies de esos
documentos. Quítalos. (Forcejea) ¡Quítalos!
471 PHYLLIS: ¡Pendejo!
472 SAM: Te di la oportunidad de aclarar las cosas, me abrí con go ¿y para qué?
473 PHYLLIS: Con aba en . ¿Cómo podía saber yo que en el fondo te sen as tan
insa sfecho? Deberías haber sido honesto, en vez de dejar que tu insa sfacción se
enquistara y acabaras acostándote con mis amigas.
474 HOWARD: (Incorporándose agresivo) Estoy furioso con go, Sam. Me conver ste
en un cornudo.
475 SAM: (lo empuja hacia abajo) Siéntate, Howard. Hablaremos después. Ya te dije
que lo siento.
476 PHYLLIS: Sé que te acostaste con Edith y con Helene. Y con Polly, ¿qué?
477 SAM: Estás mal de la azotea. Me alegro muchísimo de que esto se haya acabado.
478 PHYLLIS: Todavía no se acaba, ricura.
479 SAM: En cuanto ponga esto en orden, será historia.
480 HOWARD: Sabe lo de la morena del 21, la del equito y labios carnosos.
481 SAM: Howard, siento lo mío con Carol. Sinceramente, nunca pensé que lo
descubrirías.
23
ti
ti
fi
ti
ti
ti
fí
ti
fl
ti
ti
ti
tí
ti
24
482 HOWARD: Phyllis, ¿qué clase de mujer eres para que todas esas amigas
aparentemente ín mas te traicionen de tan buena gana?
483 PHYLLIS: (paralizada por la pregunta, recupera el aplomo) Howard, necesitas
tratamiento de electroshocks. ¿Por qué no te mojas los dedos y los metes en el
enchufe?
(Sam se sirve una copa)
484 HOWARD: Es una castradora. Pero has hecho algunas cosas horribles, Sam.
485 SAM: No he hecho nada de nada.
486 HOWARD: ¿Y qué hay de aquella morena del 21?
487 SAM: Howard, ¿por qué no te tomas un descansito?
(Entra Carol sorprendida de ver a Sam)
488 CAROL: ¡Sam!
489 SAM: Hola, Carol.
490 CAROL: Phyllis y Howard lo saben todo. Que nochecita.
491 HOWARD: Es como cuando se exprime un barro y revienta toda la pus.
492 CAROL: Sam, ¿nos vamos? Necesito una hora para hacer las maletas.
493 SAM: ¿Ir adónde?
494 CAROL: A nuestro apartamento, a Amaganse , o si pre eres, derecho a Londres.
Ya no me importa nada.
495 SAM: No en endo. ¿Adónde vamos?
496 CAROL: Fuera de aquí. Mira, está claro que todos necesitamos empezar de nuevo,
no sólo Sam y yo, sino también Howard y Phyllis. Tratemos de interpretar esta noche
como un comienzo. Ya sé. Para mí es fácil decirlo, porque Sam y yo nos tenemos el uno
al otro, pero podemos ser civilizados y ayudarnos a superar esto.
497 SAM: A ver, espérame. Nosotros no vamos a ninguna parte.
498 CAROL: Bueno, mencionaste Londres. Quiero decir que irse signi ca exactamente
no quedarnos aquí.
499 SAM: Carol, creo que entendiste mal.
500 CAROL: ¿Qué?
501 SAM: Conocí a alguien y estoy enamorado.
502 CAROL: ¿Qué quieres decir?
503 SAM: Que conocí a una mujer y estoy enamorado de ella.
504 CAROL: No en endo. Tú estás enamorado de mí.
24
ti
ti
ti
tt
fi
fi
25
505 SAM: No. Tuvimos una aventura, pero nunca estuvimos enamorados.
506 CAROL: Yo lo estoy.
507 SAM: Ah, pero yo no, nunca. ¿Creías que iba a dejar a Phyllis por ?
508 CAROL: Sam…
509 PHYLLIS: A veces Dios se aparece de improviso.
510 SAM: Carol, he sido más claro que el agua en ese punto. Al menos creí serlo.
511 CAROL: (tambaleándose) Las piernas, las piernas me emblan. La sala me da
vueltas.
512 HOWARD: Aplícate unas sales. (Riéndose) Ja, ja, ja…
513 PHYLLIS: (A Carol) Cariño, ¿qué pensabas?
514 CAROL: Sam, Sam, todas aquellas tardes… Hablábamos…
515 SAM: Pero eso fue todo. Lo nuestro era sólo una aventura.
516 CAROL: Fue una aventura al principio.
517 SAM: Y nunca dejó de serlo.
518 CAROL: Claro que sí.
519 SAM: Claro que no.
520 HOWARD: (diver do con el cariz que toma la situación) Qué diver do.
521 CAROL: Pero todo lo que hablamos acerca del futuro… Y de Londres…
522 SAM: Era hablar por hablar. Nunca hubo un plan de verdad.
523 CAROL: Sí lo hubo.
524 SAM: No pudo haberlo. Nunca tuvimos ese po de relación.
525 CAROL: Claro que la tuvimos.
526 SAM: Nunca estuvimos enamorados. Por lo menos yo.
527 CAROL: Me dijiste que sí.
528 SAM: Claro que no. Te lo imaginaste.
529 CAROL: “Me tengo que divorciar. Me estoy as xiando. Ahogando. El empo que
paso con go es lo único que me man ene vivo.”
530 SAM: Hay que entenderlo en el contexto del sexo ilícito. Te expuse las reglas
básicas desde el primer día.
531 CAROL: Sí, pero parecía… parecía que cambiaba, que la relación iba haciéndose
más profunda. Me preguntaste si podría ser feliz en Londres.
532 SAM: Carol, estás dándole una importancia que no tuvo.
533 CAROL: (entendiéndolo todo) Cabrón. Me u lizaste.
25
ti
ti
ti
ti
ti
fi
ti
ti
ti
ti
26
26
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
fi
ti
ti
ti
ti
27
27
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
28
581 HOWARD: (poniendo música) Se pone como loco… ¡Es musculoso, pero no
coordina!
582 SAM: Lo que tú digas, Howard…
583 CAROL: Sam, ya tenía todo planeado. Ibas a dejar a Phyllis.
584 HOWARD: Y la ha dejado, Carol. ¿No pones atención?
585 CAROL: ¡Ya cállate, maniaco psicó co!
586 HOWARD: Todo el mundo está tan deprimido…
(Sube el volumen de la música)
587 CAROL: ¡Apaga eso!
588 HOWARD: ¿Qué?
589 CAROL: ¡Apaga eso! ¡Apágalo! ¡Ya basta!
(Sam apaga la música)
590 HOWARD: ¿Qué mosca les ha picado? ¿Creen que están en un funeral?
591 SAM: Howard, cálmate.
592 HOWARD: Todo el mundo se volvió loco… Quizás es porque enen hambre.
¿Preparo algo rápido?
593 CAROL: ¡Idiota!
594 HOWARD: ¿Qué?
595 CAROL: ¡Idiota! ¡Pendejo!
596 HOWARD: ¡Baba ghanoush! ¡Es perfecto!
(Howard sale por la derecha en dirección a la cocina)
597 CAROL: Sam, yo te quería, te quería de verdad. Todavía te quiero.
598 SAM: Nunca quise darte esperanzas. Traté de ser cuidadoso en ese aspecto. No fue
mi intención hacerle daño a nadie.
(Suena el mbre de la puerta. Carol, que es la que está más cerca, la abre. Entra una
jovencita muy guapa y sexy llamada Juliet Powell.)
599 JULIET: (A Sam) Estaba esperando abajo y me preocupé. Como antes casi te rompe
la cabeza y, no bajabas…
600 PHYLLIS: No. No. No.
601 CAROL: ¿Es ésta?
602 JULIET: Dudé si subir o no, pero como dijiste cinco minutos…
603 SAM: Es ésta, digo, ella, Juliet Powell. Las presento: Carol… Phyllis. Bueno, la
doctora Riggs no necesita presentación.
28
ti
ti
ti
29
29
ti
ti
ti
ti
ti
ti
fi
ti
30
30
ti
ti
ti
ti
ti
ti
31
llamabas, cancelaba citas, inventaba men ras, hacía malabarismos con mi agenda para
complacerte y jamás te pedí nada a cambio. ¿Cómo pudiste darle a entender que yo
era una tarántula?
644 SAM: Yo no soy responsable de los sueños que ella tenga con go.
645 CAROL: ¿Te das cuenta de la clase de hombre con el que vas a casarte?
646 JULIET: Bueno, en realidad eso de casarnos es más una idea de Sam que mía. Yo
me conformo con dejar que las cosas sigan su curso.
647 SAM: No, yo quiero el compromiso, lo necesito. No puedo con nuar así. Por
primera vez quiero algo estable. Tengo que dar un sen do a mi vida. Juliet, tú eres todo
lo que siempre he soñado.
648 CAROL: ¿Una anoréxica de veinte años?
649 SAM: Vein uno, y además editora de cine.
650 PHYLLIS: Hace seis meses, era incapaz de mirar a un hombre a los ojos sin que le
saliera herpes.
651 SAM: Miren, sé lo que están pensando, pero esto es amor de verdad. A pesar de lo
que ustedes dos digan, mi vida de donjuán terminó. La promiscuidad no es la solución.
¿Creen que alguien puede alcanzar la plenitud con un adulterio vacío, barato y
estúpido?
652 CAROL: Gracias, Sam. Para mí también fue algo muy valioso.
653 SAM: (a Juliet) Lo que trato de decir es que te encontré y que quiero que lo
nuestro sea para siempre.
654 PHYLLIS: ¿Qué pasará cuando ella tenga mi edad? Ya no tendrás dientes y estarás
tragando papilla en un asilo público.
655 CAROL: Sé que no soy joven ni guapa, pero esto ya es demasiado. Es más de lo que
puedo soportar.
656 HOWARD: (saliendo a escena) He decidido hacer ravioli. Es lo único que hay.
657 CAROL: Mi vida es un desastre.
658 HOWARD: Es una pena que no haya pesto. Pero puedo preparar una salsa de
crema. Y haré unas ensaladitas con anchoas y vinagre balsámico. ¿Quién es ésta?
659 JULIET: (estrechándole la mano) Soy Juliet Powell.
660 HOWARD: Yo soy Howard.
661 JULIET: ¿Ven? Hace seis meses ni siquiera me podría haber presentado a mí
misma.
31
ti
ti
ti
ti
ti
32
32
ti
ti
ti
ti
fi
ti
fi
33
33
ti
ti
ti
fí
ti
ti
tí
ti
ti
34
702 SAM: Esto es increíble. Lo que empezó como una moles a de nada ha ido
convir éndose en una catástrofe. Juliet, yo te amo. Nos juramos que sería para
siempre, así que vámonos.
703 HOWARD: No tan rápido, Sam. Juliet y yo tenemos muchas posibilidades.
704 SAM: Está como una cabra. Emocionalmente es un tarado. Dentro de diez minutos
tendremos que rescatarlo del marco de la ventana.
705 HOWARD: Piensa lo de California. Lo único que tengo que decir es “sí” a un gran
contrato con la MGM.
706 JULIET: ¿No dijiste Paramount?
707 HOWARD: (hablando muy rápido) Tengo una gran idea para una película, y cuando
logras un éxito en taquilla, te presionan con un contrato para tres películas. Tengo
algunas ideas muy buenas… Una de ellas me gustaría dirigirla. Siempre han mostrado
cierto interés en mí como director, pero he dicho que no. Aún podría reconsiderar el
asunto con la condición de que me lleguen al precio… Tú podrías encargarte de la
edición… Mandaré un mail a mi agente inmobiliario en Beverly Hills y alquilaremos una
casa… Es una tontería comprar una al principio: nunca sabes cuánto empo vas a
quedarte. Desde luego, ene que ser espaciosa. Tal vez en Bel Air… me encantaría que
tuviera una alberca olímpica. Para los niños sería diver do. En realidad, creo que leí
que George Clooney iba a vender su casa. George es un gran amigo mío. No es que nos
veamos mucho, pero lo conocí en un mi n polí co. (Mira el reloj) Podría llamarlo
ahora… Veamos, allí son tres horas menos…
708 SAM: (harto ya agarra a Juliet) Ven, nos largamos de aquí.
709 HOWARD: (deteniéndolo) Oye, no tan rápido.
710 SAM: Quítate de en medio Howard.
711 HOWARD: No, Sam. No siempre vas a salirte con la tuya.
712 SAM: Dije que nos vamos.
713 JULIET: Está bien, pero espérate tan to. Me estoy angus ando.
714 SAM: No espero. Lo discu mos en el coche.
715 HOWARD: Deja que Juliet haga lo que quiera.
716 SAM: Howard…
717 HOWARD: Te lo digo en serio, Sam. No permi ré que esta chica sea obligada a
nada. Me propongo pasar el resto de mi vida con ella.
718 SAM: ¡Te dije que te quites de en medio!
34
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
35
35
ti
36
FIN
36