Curso.

Entre la biografía histórica y la cultural: Metodologías para el estudio de las

personas y las cosas del pasado- presente.
Impartido por: El Colegio Mexiquense
Asistente: María Elizabeth Pérez Chavarin
Alumna de la Maestría en Ciencias Sociales por la Universidad de Guadalajara
Las prácticas culturales de Roque de los Santos: El proceso inquisitorial de un molinero del
siglo XVIII.

El presente ensayo se deriva de un trabajo de investigación para obtener el grado de maestra en

Ciencias Sociales por la Universidad de Guadalajara, el cual consiste en un estudio de caso sobre un
proceso inquisitorial aplicado a un indígena llamado Roque de los Santos en la ciudad de Zacatecas,
durante los años de 1729 a 1733; fue encontrado en el Archivo Histórico de la Arquidiócesis de
Guadalajara. En dicho juicio se aprecian prácticas culturales que, aunque estaban prohibidas por las
autoridades virreinales, lo cierto es que un contexto como el zacatecano, en el que convergían
diferentes grupos sociales como españoles, indios y castas, el intercambio cultural era común; por lo
tanto acciones que realizó Roque de los Santos sobre una mujer mestiza enferma de lo que pareciera
gota, tales como sahumerios, bailes rituales, elaboración de un altar a San Cayetano, San Silvestre y
la virgen de la Soledad, fumar marihuana, consumir peyote, realizar masajes untando ungüento a
base de “pirul”, resultan prácticas, hasta cierto punto toleradas, sin embargo prohibidas en la
medida que pudiesen transgredir el orden y las autoridades.

Las autoridades que intervinieron en el caso de Roque de los Santos fueron la comisaría de
la Inquisición de Zacatecas y la Real Audiencia de Guadalajara, las cuales realizaron una
investigación exhaustiva basada en las declaraciones de los testigos, así como del propio De los
Santos y su “asistente” Manuela Rivero, alias “La Lucera”. En el expediente se aprecia un gran
detalle en la forma de indagar respecto a lo ocurrido, de manera que se pretende ahondar en los
hechos concretos que permitan definir a Roque de los Santos como un hechicero. Las prácticas
culturales en las que se busca profundizar se relacionan con la declaración que el médico de la
ciudad, Diego de Gama realizó, puesto que auscultó previamente a la enferma María Ignacia de la
Trinidad y determinó que padecía gota; no obstante, el tratamiento no funcionó, por lo que el esposo
de la mujer mandó llamar a Roque de los Santos dada la fama de curandero que lo precedía.

Una vez auscultada y tratada por Roque de los Santos, la enferma, María Ignacia de la
Trinidad, presentó mejorías en síntomas como dolor de extremidades, cadera y piernas; Roque de
los Santos realizó un “diagnóstico” en el que determinó que la causa de los malestares se derivaba
de que habían “embrujado” a María Ignacia, por lo que procedió a realizar rituales para ahuyentar a
los responsables. En este sentido, la declaración del médico de la ciudad, Diego de Gama se inclina
a denunciar a Roque como hechicero y brujo, dado que las mejorías que presentó la enferma
únicamente pudieron realizarse por lo que él denomina “obra del demonio”, de manera que a partir
de ese testimonio, el comisario inquisitorial decidió investigar más a fondo el caso, indagando a
profundidad en cada una de las declaraciones, además de que deseó ahondar en el pasado de Roque,
quién es, dónde vive, dónde está su familia, si ha realizado curaciones previas, dónde y cómo.

Prácticas culturales y la biografía histórica

De acuerdo con lo aprendido durante las presentaciones de las Doctoras Milada Bazant y María
Teresa Jarquín, la biografía y la ciencia histórica comprenden metodologías afines que permiten
estudiar y reconstruir el pasado desde un plano micro y macrosocial, al más puro estilo de la
promesa que Wright Mills (2003) asegura en su libro La imaginación sociológica, en la que el
individuo comprende la dialéctica entre su biografía y la relación estructural. No obstante, los
científicos sociales, entre ellos los historiadores, tiene una gran responsabilidad en la reflexividad,
en la simbiosis de estas dos realidades que parecieran estar separadas abruptamente, por ello, es
vital que se cuestionen, analicen y trabajen nuevas metodologías enfocadas en el análisis social, que
considere la reincorporación de los planos macro, meso y micro, impulsando la investigación
interdisciplinaria.

Los trabajos presentados referente a la biografía de Clemente Antonio Neve y de Juan

Jaramillo mediante fuentes físicas tales como cartas, documentación oficial, objetos, documentos
que se refieren a ellos, escritos y en el caso de Jaramillo, un escudo de armas, permiten reconstruir,
a base de huellas e indicios (Ginzburg, 2011) la realidad social, cultural y personal que vivieron
cada uno. En este sentido, la metodología empleada por cada una de las autoras de las ponencias se
encamina al método biográfico como parte esencial de la investigación histórica, en la que
interviene un exhaustivo análisis de fuentes, las cuales no siempre están completas, sino que deben
reconstruirse aún si faltase una pieza del rompecabezas, lo cual podría llevar a recopilar nuevas
pistas y por ende nuevos resultados, es un trabajo apasionante, minucioso y complejo.

El interés que suscitó el curso para mi trabajo de investigación sobre el caso de Roque de
los Santos tiene que ver con el método biográfico a través de las indagaciones de la Inquisición y las
prácticas culturales como elementos inmateriales que permiten entender una sociedad y modos de
vida determinados, en este caso, el de un indígena zacatecano del siglo XVIII. El proceso
inquisitorial está completo y es minucioso en los detalles de la vida de Roque de los Santos, por lo
que la aplicación de una metodología basada en el estudio de caso y la biografía pueden adecuarse
en una investigación de tipo histórica.

En la tesis que se está redactando en la maestría en Ciencias Sociales de la Universidad de

Guadalajara se trabaja desde la perspectiva sociopolítica, no obstante, una mirada metodológica
desde la microhistoria y la biografía, así como el análisis de larga duración de la estructura virreinal,
permiten entender el mundo de Roque de los Santos su vida y sus acciones. De tal suerte, se
propone hacer énfasis en el método indiciario propuesto por el historiador Carlo Ginzburg (1999) el
cual permite realizar una revisión histórica respecto a la propensión del ser humano a realizar
conjeturas, la cual data de la época de los primeros cazadores, hasta establecer una línea de
comparación entre los métodos empleados por el pintor Giovanni Morelli, Sigmund Freud y por
Sherlock Holmes a finales del siglo XIX, (método: Morelli-Freud-Holmes). De Morelli, destaca
Ginzburg la capacidad de identificar una obra falsa de una verdadera mediante la observación de
rasgos pictóricos que pasaban desapercibidos por especialistas en arte que buscaban encuadrar los
estilos artísticos sin tomar en cuenta los detalles como el diseño de las orejas, las aureolas de los
santos, color y forma de las uñas, entre otros. Del método freudiano se menciona el modelo de
sintomatología médica, el cual permite diagnosticar enfermedades inaccesibles a la observación
directa por medio de síntomas superficiales, a veces irrelevantes al ojo profano. Finalmente, del
método policiaco de Holmes, destaca la capacidad de observar rarezas o anomalías hasta en lo
evidente, de no dejar escapar ningún detalle de la escena del crimen, ya que pudiera resultar crucial
(Ginzburg, 1999).

El trabajo del investigador social y en el caso de Ginzburg, del historiador, se equipara al

método Morelli-Freud-Holmes, porque realiza un rastreo de signos culturalmente condicionados,
los cuales no son evidentes en la inmediatez del presente, sino que requiere una indagación del
pasado sea cuales fueren las fuentes: documentales, hemerográficas, sonoras, digitales o físicas
(ropa, accesorios, objetos). Implica remontarse a datos aparentemente secundarios a una realidad
compleja no experimentada de forma directa. Por ello se necesita realizar operaciones mentales con
rapidez, aunado a técnicas de análisis, comparaciones, clasificaciones, catalogaciones, evaluaciones,
entre otros. Por ello deduce que el conocimiento histórico es indirecto, indiciario y conjetural
(Ginzburg, 1999).

Conclusiones

El quehacer de los historiadores se basa en la búsqueda de indicios que los agentes del pasado han
dejado; cuando se trabaja un estudio de caso se puede decir que se sigue una trayectoria biográfica,
que en el caso de Roque de los Santos se detalla en el proceso inquisitorial, no obstante, las
prácticas culturales que ejerció para auscultar a una mujer enferma, permiten entender una
cosmovisión de un indígena que estableció relaciones con los diferentes grupos sociales; además
refleja la forma de desenvolverse en un contextos social y político determinado y proporciona pistas
interesantes que permiten profundizar en una investigación más a fondo de la ciudad de Zacatecas
en el siglo XVIII.

Las ponencias que se presentaron en el curso fueron enriquecedoras para impulsar el trabajo
interdisciplinario en investigaciones históricas, más aún, apertura la posibilidad de incorporar
metodologías sobre biografía a nivel individual y colectivo, así como de un patrimonio material e
inmaterial. En el proceso inquisitorial de Roque de los Santos se puede apreciar una trayectoria
biográfica que se puede seguir a partir de un estudio de caso y entender como patrimonio cultural
inmaterial, las prácticas curativas que ejerció sobre María Ignacia de la Trinidad y que responden a
un legado prehispánico familiar y social.

Bibliografía

Ginzburg, C. (1999). Indicios. Raíces de un paradigma indiciario. En Mitos, emblemas, indicios.

Morfología e Historia. Gedisa, Barcelona, pp. 138-175.

Ginzburg, C. (2011). El queso y los gusanos. El cosmos según un molinero del siglo XVI.
Península-Océano.

Mills, C. (2003). La promesa. La imaginación sociológica. México. FCE. Pp. 23- 43.

Datos de documento de archivo:

Yparraguirre, J. (1729-1733). Fondo: Inquisición 1646-1789. [Papel- 5 cajas]. Serie Provisorato.

(Caja 1, Exp. 12). Archivo Histórico del Arzobispado de Guadalajara.