Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Pero puede ocurrir que un coheredero deje de poseer como coheredero y posea un
bien como propietario exclusivo. En este caso, el CCyC prevé que: “Hay prescripción
adquisitiva larga de los bienes individuales si la indivisión ha cesado de hecho porque
alguno de los copartícipes ha intervertido su título poseyéndolos como únicos propietario,
durante el lapso que establece la ley”.
PARTICIÓN PRIVADA
El art. 2369 del CCyC, exige cuatro requisitos para que proceda la partición privada:
a) Presencia de todos los copartícipes. No se refiere a que estén físicamente presentes
en el acto, sino a que tengan representación y cuidado de sus derechos.
b) Que todos ellos sean plenamente capaces; ello implica que no puede haber
menores o personas con capacidades restringidas totales o parciales, conforme art.
32 del CCyC.
c) Unanimidad.
d) Que no medie oposición de un tercero fundándose en un interés legítimo, ya que
en dicho caso, de acuerdo a lo dispuesto por el art. 2371, inc. b) del CCyC, la
partición deberá ser judicial.
Asimismo se aclara que la partición privada podrá ser parcial o total. Puede hacerse
por la forma y por el acto que por unanimidad las partes juzguen conveniente. Las partes
podrán elegir la forma. El código opta en materia de forma por la regla de la flexibilidad y
amplitud.
PARTICIÓN JUDICIAL
El art. 2371 CCyC establece que la partición debe ser judicial en las siguientes
situaciones:
a) Si hay copartícipes incapaces, con capacidad restringida o ausentes. El art. 689
del CCyC, por su parte, prohíbe a los progenitores hacer partición privada con sus
hijos menores de edad de la herencia del progenitor prefallecido, ni de la herencia
en que sean con él coherederos o colegatarios.
b) Si terceros, fundándose en un interés legítimo, se oponen a que la partición se
haga privadamente. El Código Civil y Comercial agrega este nuevo supuesto para
la partición judicial, fundándose en un interés legítimo. Se refiere tanto a los
acreedores del causante como a los de los herederos, cuando a través de una
partición extrajudicial se pretenda vulnerar sus derechos. De este modo, lo que se
busca es que tengan un mayor control sobre este proceso.
c) Si los copartícipes son plenamente capaces y no se ponen de acuerdo en hacer la
partición privadamente.
LICITACIÓN
La licitación es el derecho que tienen los coparticipes a solicitar se les adjudiquen los
bienes sucesorios, por un precio mayor que el de la tasación.
La licitación puede resultar un procedimiento beneficioso para todos; para el licitante,
porque le permite quedarse con el bien que desea y para el resto de los coherederos, porque
al aumentar la tasación de ese bien, aumentan también el valor de sus respectivos lotes.
Se trata de un derecho de preferencia de los copartícipes a que se les adjudique dentro
de su hijuela un bien de la herencia por un valor superior al del avalúo.
El art. 2372 del CCyC autoriza a cualquier copartícipe —incluyendo herederos,
copropietarios de la masa indivisa, cesionarios, acreedores, beneficiarios de legados o
cargos que pesan sobre un heredero—,a pedir la “licitación de alguno de los bienes de la
herencia para que se le adjudique dentro de su hijuela por un valor superior al del avalúo, si
los demás copartícipes no superan su oferta”.
Es decir, la licitación puede ser pedida por los herederos, cesionarios, legatarios y todo
aquel que se encuentra habilitado para pedir la partición.
El objeto de la misma es que se le adjudique a un copartícipe, que así lo desea, un bien
particular de la herencia. A tal fin, podrá ofertar por él una suma superior a la que resulte de
la tasación.
Por supuesto que los demás legitimados podrán también pujar y aquel que ofrezca la
suma mayor, recibirá el bien subastado en su hijuela, quedando modificado su avalúo.
La licitación debe pedirse antes de los treinta días de la aprobación de la tasación.
INVENTARIO. COMPOSICIÓN DE LA MASA PARTIBLE
A fin de realizar el inventario, el art. 2376 CCyC determina que la masa partible
comprende:
– Los bienes del causante que existen al tiempo de la partición.
– Los bienes que se han subrogado a ellos.
– Los acrecimientos de los bienes mencionados en los 2 puntos anteriores.
Una vez individualizados y valuados todos ellos, deberán deducirse las deudas y
finalmente a la masa partible se agregan:
– Los valores que deben ser colacionados: Es importante recalcar que debe traerse el
valor del bien que se determinará a la época de la partición, teniendo en cuenta el
estado del bien al momento de la donación. (art. 2385, párr. 2º, CCyC).
– Los bienes sujetos a reducción como consecuencia de a) donaciones inoficiosas:
son aquellas hechas a un descendiente o al cónyuge cuyo valor excede la suma de la
porción disponible más la porción legítima del donatario, aunque haya dispensa de
colación o de mejora, según art. 2386 del CCyC; b) Supuesto del descendiente
omitido en la partición por donación o nacido con posterioridad a la misma —
conforme art. 2417, CCyC—, y del descendiente que recibió un lote inferior a su
porción legítima, y no existen otros bienes para cubrirla; c) Reducción de porciones
testamentarias, de acuerdo con el art. 2452 CCyC., y d) Reducción de donaciones
del art. 2453 del CCyC.