Tras el descubrimiento de América se abría una nueva etapa para la historia de Castilla y para el resto de

la humanidad, siendo la exploración de los nuevos territorios el mayor afán de todos los marinos. Fue
una época en la que se comenzaron a realizar las mejoras náuticas, en las formas de medidas y en la
cartografía. En esta lección de unPROFESOR os traemos un resumen de los viajes de Cristóbal Colón pues
tras el primer viaje en 1492, el genovés pudo realizar tres viajes más por el Caribe descubriendo más
islas y ayudando en la colonización de los que serían los primeros territorios de ultramar para el reino de
Castilla.

El primer viaje: el descubrimiento de América

El 3 de agosto del año 1492 partía de Palos de la Frontera la expedición de Cristóbal Colón. Estaba
conformada por tres naves: la Santa María, la Pinta y la Niña. Antes de comenzar su viaje transatlántico,
se decidió hacer escala en las islas Canarias para aprovisionarse y para obtener los vientos alisios, los
cuales facilitarían mucho el viaje. Durante su estancia en las islas se repararon una serie de elementos de
las naves, ya que habían sufrido algunos percances.

Este primer viaje duró unas cinco semanas y puso en peligro la vida del almirante, debido a que sus
marineros, por miedo a fallecer en tierra de nadie, estuvieron al borde del amotinamiento. El 12 de
octubre de 1492, Rodrigo de Triana, divisaba tierra firme, terminando de esa manera el temor de
muchos de los marineros.

Durante este primer viaje, Colón tomó relaciones con algunas tribus de las islas del Caribe, a las que
llamó indias, pues pensaba que había llegado a dicha parte del mundo sin ser consciente que había
logrado un hito más grande, el de encontrar un nuevo continente.

La Santa María, había quedado inutilizada debido a su estado de conservación, por lo que se decidió
construir el fuerte “Navidad”, debido a que se terminó para dichas fechas, en la cual quedaron algunos
marineros, a la espera de otro barco que pudiera recogerlos. Dentro de nuestro resumen con los viajes
de Cristóbal Colón, debemos de decir que serían estos que se quedaban los que mantuvieran relaciones
con dichas tribus, aunque la sed y la codicia de los europeos, hizo que los indígenas actuaran en contra
de estos, incendiando el fuerte.

De esa manera, el 15 de enero de 1493 llegaba a Castilla la expedición, después de haber pasado una
serie de calamidades a la vuelta, como, por ejemplo, la necesidad de atracar la nave en la que iba Colón
en Portugal, lugar donde se reuniría con su monarca, desconociéndose lo que se habló en la entrevista.
Segundo viaje de Cristóbal Colón
El 25 de septiembre del año 1493 los Reyes Católicos daban beneplácito para el siguiente viaje del
genovés. Esta rapidez se piensa que vino ligada al temor de los monarcas porque su reino vecino,
Portugal, podía reclamar territorios.

No podemos decir que esta etapa sea precisamente de expedición, pues junto con Colón, viajarían
eclesiásticos y colonos deseosos de obtener mejoras en la calidad de vida. Debido a esto, estos nuevos
grupos, provocaron aún más problemas con los nativos, creando verdaderas revueltas.

Los eclesiásticos, por su parte se interesaron por las creencias de los nativos para tener una visión más
realista de los pensamientos de dichos pueblos. Por otro lado, estudiaron también las plantas y animales
domésticos que había en las islas, quedando todo bien anotado en sus libros. En el tema expedicionario
podemos destacar el descubrimiento de Puerto Rico y Jamaica.

La actitud del genovés dejó verse de nuevo haciendo imposible la colaboración entre los marineros y los
primeros colonos que habían llegado con él. De esa manera y de forma clandestina, algunos opositores a
su persona marcharon a la Península Ibérica para trasladar sus quejas a los Reyes Católicos.
Tercer viaje de Cristóbal Colon: el paraíso terrenal
En mayo de 1496, Cristóbal Colón partía de nuevo para las Indias con la intención de encontrar Cipango o
la costa de China. Es obvio que nunca encontraría dichos territorios, aunque en su cabeza solo cabía la
posibilidad de que estas tierras pertenecieran a partes desconocidas de Asia.

Siguiendo con nuestro resumen sobre los viajes de Cristóbal Colón, hablaremos de uno de los pocos
descubrimientos que se hicieron en esta época: la desembocadura del río Orinoco, lo cual hizo pensar
que estaban ante una inmensa porción de tierra, debido a la fuerza por la cual el río desembocaba en el
mar.

De esa manera, y por las ideas tan cerradas que había sobre la posibilidad de encontrar nuevas tierras, el
propio almirante afirmó que estaban ante el Paraíso Terrenal que citaba la Biblia (sin duda no podemos
negar que muchos de los paisajes de América del Sur, bien podrían asemejarse).

El fin de esta etapa vino precedido de una serie de revueltas contra el genovés, haciendo incluso que los
monarcas tomaran cartas en el asunto y enviando a Francisco de Bobadilla a tomar el control de las islas.
De esa manera, terminaron destituyendo a Cristóbal Colón que fue enviado prisionero en el año 1500 a
España, para hacer frente a las acusaciones de las que era acusado.

Vasco de Gama
Viajes

Desde muy joven se entregó de lleno a la vida marinera. Participó en varias expediciones, entre ellas a la
costa africana que lo pusieron a prueba y demostró tener gran capacidad en estas lides. (Ver artículo:
Alexander von Humboldt)

El rey D. Juan II de Portugal envió a Vasco da Gama al puerto de Setúbal, al sur de Lisboa, en 1493, para
embargar navíos franceses que estaban allí anclados, después de haber apresado una nave portuguesa
cargada con oro procedente de las costas africanas, Costa da Mina, propiedad del gobierno luso.

Esta tarea la llevó a cabo rápida y eficientemente, logrando capturar diez barcos sólo en ese puerto. El
rey francés, Carlos VII se vio obligado a devolver el barco robado, sin que faltara un solo gramo en su
cargamento.

Con este episodio, más la experiencia y la fama adquiridas, fueron suficientes para que atrajera la
atención oficial y fuese nombrado Capitán, tras realizar estudios de matemáticas y cosmografía. La
muerte del rey Juan II en 1495, originó el reinado de Manuel I de Portugal, como su heredero. Este
nuevo monarca organizó una expedición que debía ir a la India, rodeando el borde del sur del continente
de África.

En ese momento parecía claro que era posible franquear el extremo sur de África y llegar hasta el Índico,
como lo había demostrado diez años antes Bartolomé Díaz, navegante portugués, primero en doblar el
extremo sur de África. Estaba en juego el comercio de especias, ya que las rutas, en aquel momento,
eran controladas por los árabes.

Con ello se pretendía además romper el monopolio que el descubrimiento de América había
proporcionado a España. Después del descubrimiento de América realizado por Cristóbal Colón, en 1492,
se intensificaron las disputas sobre los descubrimientos marítimos entre los reinos de España y Portugal.
(Ver artículo: José Saramago)

Entre las personas que se consideraban de mejores dotes para dirigir la difícil travesía estaba Esteban da
Gama, pero debido a su imprevista muerte sus hijos asumieron «el honor y el peligro» de encabezar el
difícil viaje.

Motivos del Viaje

A principios del siglo XV, los portugueses ya venían profundizando en el conocimiento de la costa
africana. El objetivo era conseguir bordear la punta sur del continente africano, para así tener acceso a
las famosas especias de la India (pimienta negra, entre ellas) surcando una ruta marítima fiable.

La República de Venecia, situada al norte de Italia, era la que dominaba gran parte de las rutas
comerciales entre Europa y Asia, pero a raíz de la toma de Constantinopla por los Otomanos, en 1453, el
comercio se había reducido y se habían incrementado los costes.

Cuando Vasco da Gama con solo diez años, estos planes eran casi logrados: Bartolomé Díaz regresaba de
doblar el Cabo de Buena Esperanza, luego de su exploración del río do Infante (el Río Fish, en la actual
Sudáfrica) y luego de comprobar que la costa se extendía en dirección noreste, sin conocer el destino.
Portugal tenia la esperanza de usar la ruta iniciada por Díaz con la finalidad de derrotar el monopolio
sobre el comercio que se daba en el Mediterráneo.

Durante el reinado de Juan II de Portugal, quien apoyaba la teoría de que la India era accesible por barco
desde el océano Atlántico, enviaron a los exploradores portugueses, Pero da Covilha y Afonso da Pavia a
través de Barcelona, Nápoles y Rodas a Alejandría. Haciéndose pasar por mercaderes, lograron llegar a
Adén, Yemen.

Desde allí, Paiva se dirigió a Etiopía y murió de peste, no tuvo oportunidad de realizar ningún informe;
Covilhã se fue a Ormuz y luego a la India, después volvió por la costa oriental de África, confirmando que
la ruta a la India era factible. Él sí logró hacer un informe y lo hizo llegar a través de emisarios. Covilha
nunca más volvió a Portugal.
Ruta de Vasco da Gama
Vasco da Gama partió del puerto Santa María de Belem, en Lisboa, al frente de 200 hombres (iban
marineros, soldados, religiosos) y 4 barcos, San Gabriel, el Berrío, San Miguel y el San Rafael, el sábado 8
de julio de 1497. La expedición debía bordear la costa africana, doblar en el Cabo de las Tormentas
(llamado después Cabo de la Esperanza) y buscar la ruta hacia India.

Zarparon al igual que Bartolomé Díaz, quien en una carabela se dirigió a San Jorge de la Mina, haciendo
el mismo recorrido que anteriores navegantes. Navegaron hacia el sur, adentrándose en el Océano
Atlántico, pasando por las Islas Canarias desde Cabo Verde, bordeando las costas del continente, hasta
llegar a la costa actual de Sierra Leona.

Aquí, Vasco da Gama, cambió la ruta habitual, girando hacia mar adentro, hacia al este, por el Golfo de
Guinea y llegar al sur de África, variando la ruta que habían utilizado los anteriores exploradores y
dejando las naves a merced de los vientos, sin realizar maniobras extraordinarias.

En el barco, llevaba gran cantidad de objetos, presentes, artesanías y muchas cosas más, que le servían
de trueque cuando viajaba. Conociendo la zona que iban a visitar, en África, llevaba suficientes cuencas
de vidrio, de cobre, campanas, telas, anillos, tejidos de algodón a rayas, azúcar y aceite de oliva.
Trueques
Como era costumbre en las expediciones, también llevaban cartas del rey D. Manuel I para ser
entregadas en todos los reinos que visitaran. Igualmente llevaban padróes o padrones, que eran
monolitos de piedra con una cruz, que tenía grabadas las armas portuguesas y una inscripción. Estos
eran utilizados por los navegantes portugueses para marcar territorio en los sitios que iban visitando y
descubriendo.

En noviembre llegaron a Cabo de las Tormentas, llamado así por Bartolomé Díaz, en alusión a las aguas
agitadas, donde convergen los océanos Atlántico e Índico, rebautizado por Juan II con el nombre de Cabo
de Esperanza.

Continuaron navegando con rumbo norte, bordeando la costa oriental de África. La expedición hizo
escala en la desembocadura del río Quelimane, luego navegaron hacia el puerto de Mozambique. Màs
de la mitad de la tripulación estaba enferma de escorbuto

Al llegar al Puerto de Mozambique, Vasco da Gama, con mucha agilidad, decidió hacerse pasar por
musulmán, les brindó un agasajo y banquete a bordo de su barco. Los árabes tenían el monopolio del
comercio en la zona. El Sultán de Mozambique cayó en la trampa y los recibió de manera atenta y les
ofreció guías para que pudieran continuar su viaje a la India.

Pronto fueron descubiertos por el sultán y debieron marcharse, lanzando cañonazos a la ciudad, para
desembarcar muy cerca de ahí para aprovisionarse, a la fuerza, de vituallas, que ya eran muy escasas. El
buque de transporte de suministros se había quedado abandonado al atravesar el cabo de las Tormentas
o Buena Esperanza.

Atravesaron momentos difíciles, los guías árabes no eran de fiar, pero aun así, la expedición llegó a
Mombasa, allí fueron bien recibidos por el jeque del lugar, quien les tenía preparada una trampa.
Consiguieron rechazar el ataque y huyeron con sus tres barcos.

En su próxima parada, la ciudad de Malindi, los atendieron en buena forma y les facilitaron un guía muy
experto en la ruta que estaban siguiendo, más ayuda y provisiones para continuar el viaje a la India.

En el camino, los portugueses tuvieron contacto con una nave hindú, que los hizo convencerse de que
estaban cerca de su objetivo. En menos de un mes, Aben Macbid, el guía árabe, los condujo a las costas
de la India. Por primera vez, Europa entabla contacto con India. Fue todo un suceso històrico.

Por más de tres meses de navegación, habían recorrido más de 6 mil kilómetros por mar abierto. Fue el
viaje más largo que se conozca de esa fecha.