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TITULO
CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS
INTEGRANTES:
- Lorena Ochoa Gómez U22240992
- Valeria Fajardo Romero U22249387
- Mirella Rivera Barrueta u22314747
- Ruth Jobana Vargas Ventura u22232057
- Julio Sulca Arias U22308437
- Crisolo espinoza crisencio U22244049
DOCENTE:
García García, Asunción Yrene
- ESTRUCTURA…………………………………………………………………………………7
- FUNCIONES DE LA CORTE………………………………………………………………………9
¿EN QUÉ MOMENTO LA CORTE TIENE COMPETENCIA PARA CONOCER UN CASO SOBRE
UN ESTADO EN ESPECÍFICO?................................................................................12
CASOS EMBLEMÁTICOS…………………………………………………………………………….19
CONCLUSIONES ……………………………………………………………………………………20
INTRODUCCIÓN:
Según Ventura Robles, La CIDH es un órgano principal y autónomo de la OEA, cuyo mandato
surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, y que
actúa en representación de todos los países miembros de la OEA. Está integrada por siete
miembros independientes que se desempeñan en forma personal, que no representan a ningún
país en particular y que son elegidos por la Asamblea General. Ventura. M, (s/f).
La Corte Interamericana de Derecho Humanos fue creada en 1979 como una institución del
interpretar la Convención Americana sobre los Derechos Humanos y otros tratados de derechos
Interamericana sobre los Derechos Humanos, celebrada en San José de Costa Rica en
noviembre de 1969, donde se redactó la convención americana sobre los derechos humanos. La
CIDH es otra entidad del sistema interamericano de protección y promoción de los derechos
Estados, y tiene la autoridad para emitir sentencias vinculantes que obligan a los Estados a
Américas, y su trabajo es fundamental para garantizar que los Estados cumplan con sus
Americana sobre Derechos Humanos y otros tratados relacionados con los derechos humanos
CIDH también puede emitir medidas provisionales para proteger a las personas que se
OEA solicitar opiniones consultivas sobre cuestiones jurídicas relacionadas con los
derechos humanos en la región. Estas opiniones no son vinculantes, pero pueden ser
Humanos en la región.
Por lo tanto, podemos mencionar que la CIDH tiene una función jurisdiccional para resolver
proporcionar orientación jurídica sobre cuestiones relacionadas con los derechos humanos
Son veinte los Estados que han reconocido la competencia contenciosa de la Corte, a decir:
Argentina, Barbados, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador,
Guatemala, Haití, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República
Dominicana, Surinam y Uruguay.
• SEDE
• ESTRUCTURA:
En primer lugar, los jueces son elegidos por votación. Son candidatos propuestos por la Asamblea
General de la OEA, la votación proviene de los Estados parte, quienes participan en absoluta
confidencialidad, asimismo, son los jueces que obtengan mayor número de votos los elegidos
para tomar el cargo. En segundo lugar, seis meses antes que se culmine el cargo del antiguo
juez, el secretario general de la OEA pedirá por escrito a cada Estado presentar a sus candidatos,
contando con un plazo de noventa días. Por último, es preciso señalar que no puede conformar
la Corte dos jueces con la misma nacionalidad. Aplicando ello también al momento de resolverse
un caso que lo relacione con su Estado, puesto que si el juez fuera perteneciente al Estado parte
en el que se analiza dicho caso, este Juez será sustituido por otro juez de nacionalidad distinta
para llevar determinado caso.
Artículo 7 – Candidatos
1. Los jueces son elegidos por los Estados parte en la Convención, en la Asamblea General de
la OEA, de una lista de candidatos propuestos por esos mismos Estados.
2. Cada Estado parte puede proponer hasta tres candidatos, nacionales del Estado que los
propone o de cualquier otro Estado miembro de la OEA.
3. Cuando se proponga una terna, por lo menos uno de los candidatos debe ser nacional de un
Estado distinto del proponente.
1. Seis meses antes de la celebración del período ordinario de sesiones de la Asamblea General
de la OEA, previa a la terminación del mandato para el cual fueron elegidos los jueces de la Corte,
el secretario general de la OEA pedirá por escrito a cada Estado parte en la Convención,
presentar sus candidatos dentro de un plazo de noventa días.
2. El secretario general de la OEA preparará una lista en orden alfabético de los candidatos
presentados, y la comunicará a los Estados parte, de ser posible, por lo menos treinta días antes
del próximo período de sesiones de la Asamblea General de la OEA.
3. Cuando se trate de vacantes en la Corte, así como en casos de muerte o incapacidad
permanente de un candidato, los plazos anteriores se reducirán prudencialmente, a juicio del
secretario general de la OEA.
Artículo 9 – Votación
1. La elección de los jueces se realiza en votación secreta y por mayoría absoluta de los
Estados parte en la Convención, de entre los candidatos a que se refiere el artículo 7 del
presente Estatuto.
2. Entre los candidatos que obtengan la citada mayoría absoluta, se tendrán por electos los
que reciban mayor número de votos. Si secretario generar varias votaciones, se eliminarán
sucesivamente los candidatos que obtengan menor número de votos, conforme lo
determinen los Estados parte.
La Convención Interamericana indica que la Corte IDH tiene tres funciones principales las cuales
son: Función contenciosa, función consultiva y función de dictar medidas provisiones.
• FUNCIÓN CONTENCIOSA. – En esta función la Corte IDH examina los casos relativos a
una violación de los derechos humanos de parte de un Estado que haya a) Ratificado la
Convención Americana. b) Aceptado la competencia de la Corte. Además, en este
procedimiento se incluye un análisis que contiene si la corte es competente frente a este
caso en específico, si se cumplieron con los requisitos de admisibilidad, si existe una
violación de la Convención Americana y por último si en caso hubiese dicha violación se
ordena reparaciones. Las reparaciones son integrales, pues incluyen desde modificar una
legislación, hasta garantías de no repetición, medidas de satisfacción, como, por ejemplo:
Ordenar a un Estado a disculparse con las víctimas, de igual manera ordenan pagar
indemnizaciones por los daños materiales e inmateriales sufridos por las víctimas. Una vez
que esto sucede la corte se encarga de supervisar el cumplimiento de la sentencia
otorgada.
Artículo 28.
2. Si el peticionario desea que su identidad sea mantenida en reserva frente al Estado, y las
razones respectivas;
4. Una relación del hecho o situación denunciada, con especificación del lugar y fecha de las
violaciones alegadas;
5. De ser posible, el nombre de la víctima, así como de cualquier autoridad pública que haya
tomado conocimiento del hecho o situación denunciada;
6. La indicación del Estado que el peticionario considera responsable, por acción o por omisión,
de la violación de alguno de los derechos humanos consagrados en la Convención Americana
sobre Derechos Humanos y otros instrumentos aplicables, aunque no se haga una referencia
específica al/os artículo(s) presuntamente violado(s);
¿EN QUÉ MOMENTO LA CORTE TIENE COMPETENCIA PARA CONOCER UN CASO SOBRE
UN ESTADO EN ESPECÍFICO?
La Corte IDH infiere de su competencia siempre y cuando este implique un Estado parte que
haya reconocido su competencia contenciosa y siempre y cuando determinado caso implique o
contenga violación o vulneración de los derechos humanos estipulados en la Convención
Americana o contenido en otros Tratados Internacionales en los que también incluyan afección a
los derechos humanos.
En el año 2015 el promedio total que duro un caso en específico fue de un año con diez meses
y 2 semanas. Este lapso contiene desde el momento en el que se somete el caso ante a la corte
hasta la resolución de las reparaciones contenidas en la sentencia y emitidas por la Corte IDH. A
continuación, se brindará un esquema en el cual se detalla todo el procedimiento al que se
somete un caso, señalando cada paso a cumplir en específico.
Las labores de la Corte son estrictamente judiciales y se atañen a la competencia que le otorga
la Convención Americana, en atención a sus tres funciones, contenciosa, cautelar y consultiva.
Por lo que esta no podría, por ejemplo, conocer la situación general de derechos humanos de un
Estado o realizar visitas in loco, como aquellas de competencia de la Comisión. Sin embargo,
conforme lo dispuesto en el artículo 58 del Reglamento de la Corte, esta puede requerir “en
cualquier estado de la causa” la realización de diligencias probatorias en el marco de la
tramitación de un caso contencioso. Utilizando esta facultad, la Corte ha realizado visitas in situ
en los territorios de los Estados en el marco de la tramitación de casos concretos. (S/f)
El defensor interamericano puede ser una persona o un grupo de personas que son designadas
de oficio por parte del tribunal, para poder ayudar a las víctimas que no cuentan con un asesor
legal.
Este proceso implica la deliberación de los jueces en el período de sesiones en el que se haya
previsto la emisión de la Sentencia. El proceso de deliberación puede durar varios días durante
un período de sesiones e incluso, debido a su complejidad, puede ser suspendido y reiniciado en
un próximo período de sesiones. En esta etapa se da lectura al proyecto de sentencia,
previamente revisado por los Jueces, y se genera el espacio para el debate respecto a los puntos
controvertidos, es decir, se consideran de manera amplia y vigorosa las diferentes decisiones
jurídicas involucradas. Asimismo, se realiza un estudio minucioso sobre la prueba aportada en el
expediente del caso y los argumentos de las partes en todas las etapas del procedimiento. Si los
Jueces solicitan el cambio o modificación de algún aspecto del proyecto, se trabaja
inmediatamente en una nueva propuesta que se somete a consideración y votación de los
Jueces. Así, en el marco de dicha deliberación se van discutiendo y aprobando los diferentes
párrafos del proyecto hasta llegar a los puntos resolutivos de la sentencia que son objeto de
votación final por parte de los Jueces de la Corte. En algunos casos los Jueces presentan votos
disidentes o concurrentes al sentido de la Sentencia, los cuales constituirán parte de esta. El
resultado de dicha deliberación es la sentencia definitiva e inapelable del caso. ABC DE LA
CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. (s/f).
los fallos del tribunal son definitivos e inapelables. Por ende, no son susceptibles.
EL CONTROL DE CONVENCIONALIDAD
El control de Convencionalidad es la forma en que los Estados resolverán en cuanto a sus
obligaciones de respeto y garantía de los derechos humanos, al respecto la Corte IDH (2018):
Es una institución que se utiliza para aplicar el derecho internacional, en este caso el Derecho
Internacional de los Derechos Humanos, y específicamente la Convención Americana y sus
fuentes, incluyendo la jurisprudencia de este Tribunal. Así, en varias sentencias, la Corte ha
establecido que es consciente de que las autoridades internas están sujetas al imperio de la ley
y, por ello, están obligadas a aplicar las disposiciones vigentes en el ordenamiento jurídico. Pero
cuando un Estado es Parte en un tratado internacional como la Convención Americana, todos
sus órganos, incluidos sus jueces y demás órganos vinculados a la administración de justicia en
todos los niveles, también están sometidos al tratado, lo cual les obliga a velar para que los
efectos de las disposiciones de la Convención no se vean mermados por la aplicación de normas
contrarias a su objeto y fin, de modo que decisiones judiciales o administrativas no hagan ilusorio
el cumplimiento total o parcial de las obligaciones internacionales. Es decir, todas las autoridades
estatales, están en la obligación de ejercer ex officio un “control de convencionalidad” entre las
normas internas y la Convención Americana, en el marco de sus respectivas competencias y de
las regulaciones procesales correspondientes. En esta tarea, deben tener en cuenta no
solamente el tratado, sino también la interpretación que del mismo ha hecho la Corte
Interamericana, intérprete última de la Convención Americana. (pp. 20-21)
Esto indica que los estados deben legislar, y crear normas para lograr que se puedan cumplir lo
ordenado con la Corte, esto consistiría en la expulsión de normas contrarias a lo estipulado, a
partir de los casos que son sometidos a la Corte.
• Convención Americana sobre Derechos Humanos, “Pacto de San José de Costa Rica”, 1969;
• Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura, 1985;
• Protocolo Adicional a la Convención Americana en materia de Derechos Económicos, Sociales y
Culturales, “Protocolo de San Salvador”, 1988;
• Protocolo a la Convención Americana sobre Derechos Humanos Relativo a la Abolición de la
Pena de Muerte, 1990;
• Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer,
“Convención de Belém do Pará”, 1994;
• Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, 1994;
• Convención Interamericana para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra
las Personas con Discapacidad, 1999.
• Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, 1948.
DERECHOS PROTEGIDOS
En Artavia con Costa Rica (caso fertilización in vitro), uno de los reparos se basa
en que los jueces que la integraron tenían ideas preconcebidas y conocidas pro
aborto, tal como lo sostiene el profesor Álvaro Paul Díaz respecto de la jueza
Macaulay y el juez García Sayán. Sin embargo, la cuestión es más compleja. Los
jueces no son seres que pudieran actuar como si vivieran encapsulados de la
sociedad en que viven, no son sujetos crio preservados que salen de su condición
impoluta e ingresan a un mundo paralelo cuando deben adjudicar. Quienes tienen el
rol de jueces, al igual que cualquier ciudadano o ciudadana, traen consigo sus
experiencias vitales, su socialización, educación, creencias y valores, por lo cual es
difícil sostener que no tengan ideas preconcebidas cuando interpretan el derecho y
el mundo que los rodea. Esas ideas preconcebidas están presentes cuando
consideran que toda forma de tecnología anticonceptiva violenta principios, valores
o derechos que se plasman en la carta fundamental; o cuando sus creencias se
basan en estereotipos sobre el rol de las mujeres en la sociedad, el fin del matrimonio
o el reconocimiento que se le debe otorgar a las personas cuya sexualidad no es la
hegemónica; o si las amenazas de muerte en el contexto de violencia íntima son
normales y esperables. Todo ello responde a ideas preconcebidas. Asimismo, en el
caso de extradición en contra de Augusto Pinochet, en que el representante del
general invocó un peligro real de sesgo o una aprehensión que ello pudiera ocurrir
debido a que el voto decisivo correspondió a Lord Hoffman de la House of Lords,
quien estaba vinculado con Amnistía Internacional, organización que actuó como
interviniente en el caso. Producto de la mera percepción de parcialidad o posibilidad
de esta, se anuló el primer juicio y se ordenó un juicio de nuevo.
CASOS EMBLEMÁTICOS
Casos emblemáticos hace referencia a aquellos casos legales que han sido de gran
relevancia y han dejado un hito o precedente en la historia de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos. Algunos ejemplos son los siguientes:
• Azul Rojas Marín vs. Perú: En enero del 2008, Azul Rojas, una mujer
transgénero, fue detenida, golpeada, torturada, secuestrada y violada por
efectivos policiales. Luego de una serie de juicios donde no le dieron la justicia
que merecía, Azul fue a CIDH en busca de un fallo imparcial, es así como el 3
de noviembre de 2022, por primera vez en la historia peruana, el estado
peruano pidió perdón por infringir los derechos que fueron vulnerados hacia
Azul Rojas; lo cual es un precedente e hito en Perú.
• Caso Martínez Coronado vs. Guatemala: Este caso relata “con una serie de
violaciones al debido proceso cometida en el marco del proceso penal contra
la víctima por el delito de asesinato, el cual culminó con la imposición de la
pena de muerte por medio de inyección letal. La Comisión concluyó que la
utilización del elemento de peligrosidad para sustentar la responsabilidad penal
incumplió con el principio de legalidad, ya que dicha figura incorpora
predicciones y especulaciones y constituye una expresión del derecho penal
de autor incompatible con la Convención Americana. Por otra parte, la
Comisión concluyó que la defensa común de la víctima y su co-procesado violó
el derecho a contar con los medios adecuados para la preparación de la
defensa y el derecho a ser asistido por un defensor proporcionado por el
Estado. Finalmente, la Comisión declaró la violación al derecho a la vida en
virtud de que se aplicó la pena de muerte, pese a las dos violaciones al debido
proceso indicadas con anterioridad. La Comisión solicita a la Corte que
concluya y declare la responsabilidad internacional del Estado de Guatemala
por la violación de los derechos a la vida, garantías judiciales, principio de
legalidad y protección judicial establecidos en los artículos 4.1, 4.2, 8.1, 8.2 c),
e), 9 y 25.1 de la Convención Americana en relación con las obligaciones
establecidas en los artículos 1.1 y 2 del mismo instrumento en perjuicio de
Manuel Martínez Coronado”. La Corte dio como fallo que la responsabilidad del
Estado por infringir el principio de legalidad y del derecho a las garantías
judiciales. En mayo del 2022, la CIDH ordenó el archivo del caso tras haber
sido cumplido.
CONCLUSIONES:
Becerra, L. C. (2013). Los desafíos para Chile de la decisión Artavia Murillo contra Costa
Rica de
la Corte IDH (caso fertilización in vitro): Algunos comentarios. Anuario de derecho
público. https://derecho.udp.cl/wp-content/uploads/2016/08/017_Casas.pdf
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http://hrlibrary.umn.edu/research/colombia/ABC%20Corte%20IDH.pdf
https://www.oas.org/es/cidh/docs/folleto/CIDHFolleto_esp.pdf
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