Cosecha

amarilla
CAPITULO IV
Buen vivir
y vivir
bien las formas de vida que integran el
bienestar humano de forma holística
consideran la salud y el bienestar en
todas las dimensiones de la vida
humana, y promueven prácticas y
comportamientos que fomentan el
equilibrio y la armonía en la vida
 Se comprende como lo que

NECESIDADES
necesitamos para poder
sobrevivir y ser funcionales en
nuestro ambiente.

Forma mediante la cual por

medio de la historia y la cultura

SATISFACTORES hacemos conscientes de

nuestras necesidades para la
subsistencia.

Cosas u objetos que toman

valor dada nuestra cultura, nos
BIENES ayudan a potenciar nuestros
satisfactores.
 La colectividad se refiere a la unión de personas que
comparten intereses, objetivos y valores comunes, y
que trabajan juntas para alcanzarlos. Esta
colaboración permite que se compartan recursos y
conocimientos, se optimice el trabajo y se generen
soluciones más efectivas y sostenibles.

la interdependencia se refiere a la relación mutua

y constante entre los individuos y grupos que
conforman una comunidad, reconociendo que las
acciones de uno tienen impacto en los demás y
que la cooperación es esencial para el bienestar
de todos. La interdependencia fomenta la
solidaridad, la empatía y la ayuda mutua,
generando una cultura de apoyo y respeto mutuo.
La convivencia con los demás seres
humanos es un principio
fundamental en la construcción de
una sociedad justa y equitativa. Esto
implica la capacidad de vivir en
comunidad, respetando las
diferencias y buscando siempre el
bien común. La tolerancia, el
respeto, la empatía y la solidaridad
son valores necesarios para lograr
una convivencia armoniosa entre los
seres humanos.
para convivir en armonía con la
naturaleza, es necesario
comprender la interdependencia
entre los seres humanos y los
ecosistemas naturales. Los
humanos dependen de la
naturaleza para su subsistencia,
pero también tienen un impacto
significativo en los ecosistemas a
través de la extracción de
recursos y la contaminación del
medio ambiente.
El talento humano es importante no solo para el desarrollo
personal, sino también para el desarrollo de la comunidad.
Cuando las personas desarrollan sus talentos y habilidades,
pueden contribuir al bienestar de la comunidad a través de la
creación de empleo, la innovación, la creatividad y la
generación de soluciones a los desafíos sociales y económicos.