6.

Don de Piedad
Este don es sinónimo de “auténtico Espíritu
religioso”, ya que promueve en nosotros la Capilla La Milagrosa
apertura total a la voluntad de Dios. Hace Tema N° 14
crecer nuestra relación con el Padre y nos
lleva a vivir como auténticos hijos suyos, por
lo que nos permite actuar como Jesucristo,
dando la vida si es preciso, alegrándonos
DONES Y FRUTOS
con quien está en la alegría, llorando con
quien llora, corrigiendo a quien está en el
error, consolando al afligido y socorriendo a
DEL ESPÍRITU
quien está en la necesidad. La piedad no es
más ni menos que poner a Dios en el centro
de tu vida.
I. MOTIVACIÓN

6. Don de Temor a Dios

Ser temeroso de Dios, no es tenerle
miedo. Es más bien todo lo contrario, es
conocer que Él es el sumo bien y que
fuera de Él y de su voluntad sólo se
encuentra tristeza y perdición. Quien
tiene este don pone la voluntad de Dios
por encima de todo, hace lo posible para
vivir de acuerdo con los mandamientos
de Dios y se abandona con humildad,
respeto y confianza en sus manos.

III. ¿A QUÉ ME COMPROMETO?


II. CONOCIENDO EL TEMA
Los dones son regalos de Dios que nos disponen a seguir los
impulsos del Espíritu Santo, nos hace sensibles a la voluntad
buena, agradable y perfecta de Dios (Rm. 12, 2).
El Espíritu reparte los dones como quiere (1 Co. 12, 11), por
tanto, hay diferentes dones espirituales, pero el Espíritu es
el mismo (1Co. 12, 4). De esta manera, nosotros tenemos
carismas diferentes según el don que hemos recibido. (Rm.
12, 5)
1. Don de la Sabiduría
El don de sabiduría o «espíritu de
discernimiento» nos concede
distinguir lo que viene de Dios de lo
que no, con el fin de cumplir su
voluntad. El Espíritu nos inspira
caridad y nos concede una visión plena
de Dios. Hace que ya no obremos por
ser admirados o por que nos
agradezcan o estimen, sino solamente
para que Dios quede contento.
2. Don del Entendimiento
Este don nos concede un
conocimiento más profundo de los
misterios de Dios, nos permite
estructurar su palabra y entender las
verdades que nos revela a través de
nuestra historia personal. Nos ayuda a
ver lo que Dios nos quiere decir o
mostrar.
3. Don de Consejo
Se trata de escuchar la voz de Dios para
transmitirla y aplicarla. Nos ayuda a
orientar nuestra vida y la de nuestros
prójimos; con la ayuda del Espíritu
sabremos tomar una decisión, elegir el
buen camino, escoger lo que más nos
conviene; inspira lo que debemos hacer
y cómo se debe hacer, y lo que se debe
decir y cómo se debe decir.
4. Don de Fortaleza
Nos ayuda a superar las dificultades y
tentaciones del día a día. Hace firme la fe
y no deja atemorizar al cristiano ante las
amenazas del maligno y sus
persecuciones. Concede una confianza
plena en Dios nuestro Padre.
5. Don de Ciencia
Va más allá de la capacidad del hombre de
conocer su realidad. La ciencia que procede
del Espíritu Santo es más perfecta y no se
limita al conocimiento humano: es un don
especial que nos permite captar, a través de
la creación, la grandeza y el amor de Dios y
su relación profunda con toda criatura.
Permite la contemplación de Dios en la
belleza de la naturaleza y en la grandiosidad
del cosmos, y nos hace descubrir que todas
las cosas nos hablan de él y de su amor.
LOS 7 DONES DEL ESPÍRITU SANTO
1. Sabiduría: Para entender lo que favorece o perjudica el proyecto de Dios.
2. Entendimiento: Nos ilumina para aceptar las verdades reveladas.
3. Consejo: Nos ayuda a discernir los caminos y las opciones.
4. Ciencia: Nos hace ver la belleza de la creación.
5. Piedad: Permite actuar como Jesús siguiendo la voluntad de Dios.
6. Fortaleza: Nos vuelve valientes para enfrentar las dificultades de la vida
cristiana.
7. Temor de Dios: Nos mantiene sumisos y respetuosos a la voluntad de Dios.