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Este documento resume una sentencia judicial que confirma la declaración de responsabilidad fiscal contra Teresa Sánchez de Díaz. La Contraloría General de la República la declaró responsable por $76 millones por su participación en dos contratos con el mismo objeto mientras actuaba como interventora, lo que constituye un detrimento patrimonial para el Estado. El tribunal ratifica esta decisión al encontrar que efectivamente se produjo un daño al erario público debido a las acciones de la demandada.
Este documento resume una sentencia judicial que confirma la declaración de responsabilidad fiscal contra Teresa Sánchez de Díaz. La Contraloría General de la República la declaró responsable por $76 millones por su participación en dos contratos con el mismo objeto mientras actuaba como interventora, lo que constituye un detrimento patrimonial para el Estado. El tribunal ratifica esta decisión al encontrar que efectivamente se produjo un daño al erario público debido a las acciones de la demandada.
Este documento resume una sentencia judicial que confirma la declaración de responsabilidad fiscal contra Teresa Sánchez de Díaz. La Contraloría General de la República la declaró responsable por $76 millones por su participación en dos contratos con el mismo objeto mientras actuaba como interventora, lo que constituye un detrimento patrimonial para el Estado. El tribunal ratifica esta decisión al encontrar que efectivamente se produjo un daño al erario público debido a las acciones de la demandada.
SECCIÓN PRIMERA Sentencia del diecisiete (17) de julio de 2008. Consejera Ponente: Martha Sofia Sanz Tobón Actor: Teresa Sánchez De Diaz Demandado: Contraloría General De La República HECHOS
La Contraloría General de la República inició contra la señora TERESA
SÁNCHEZ DE DÍAZ el proceso de responsabilidad fiscal DIJF-217, por supuestas violaciones a la Ley 80 de 1993.
Surtida la etapa fiscal, la Contraloría Delegada de Investigaciones, Juicios
Fiscales y Jurisdicción Coactiva de la Contraloría General de la República profirió el fallo 25 del 30 de junio de 2000, mediante el cual declaró responsables solidariamente a JULIÁN PALACIOS LUJÁN y TERESA SÁNCHEZ DE DÍAZ por la suma de setenta y seis millones setenta y cinco mil pesos ($76’075.000.00), por hechos relacionados con el contrato 04- 0010-0-98.
Contra el fallo antes identificado fueron interpuestos los
recursos de reposición y apelación, los cuales fueron resueltos mediante Resoluciones 209 de 12 de septiembre y 7787 del 20 de noviembre, ambas del 2000, confirmándolo. CONSIDERACIONES DE LA SALA La Sala observa que la Ley 610 entró a regir el 18 de agosto de 2000, y sobre el tránsito de legislación dispuso: “Artículo 67. Actuaciones en trámite. En los procesos de responsabilidad fiscal, que al entrar en vigencia la presente ley, se hubiere proferido auto de apertura a juicio fiscal o se encuentren en la etapa de juicio fiscal, continuarán su trámite hasta el fallo definitivo de conformidad con el procedimiento regulado en la Ley 42 de 1993. En los demás procesos, el trámite se adecuará a lo previsto en la presente ley. “En todo caso, los términos que hubieren empezado a correr y las actuaciones y diligencias que ya estuvieren en curso, se regirán por la ley vigente al tiempo de su iniciación”. ■ DAÑO PATRIMONIAL AL ESTADO: Se entiende la lesión del patrimonio público, representada en el menoscabo, disminución, perjuicio, detrimento, pérdida, uso indebido o deterioro de los bienes o recursos públicos, o a los intereses patrimoniales del Estado, producida por una gestión fiscal antieconómica, ineficaz, ineficiente, inequitativa e inoportuna; y que dicho daño podrá ocasionarse por acción u omisión de los servidores públicos o por la persona natural o jurídica de derecho privado, que en forma dolosa o culposa produzcan directamente o contribuyan al detrimento al patrimonio público.
■ A la señora Teresa Sánchez de Díaz se le declaró fiscalmente responsable por haber
actuado como interventora en dos contratos cuyo objeto fue el mismo, lo cual ella no contradice, es indudable que tal circunstancia se tradujo en detrimento patrimonial para el erario público, con pleno conocimiento de la actora, quien en su condición de interventora del primero de los contratos suscritos debió abstenerse de suscribir un segundo contrato de interventoría, cuestión que no hizo. DECISIÓN
■ CONFÍRMASE la sentencia apelada,
proferida por la Sección Primera, Subsección A del Tribunal Administrativo de Cundinamarca el 11 de noviembre de 2004.
Ley de Amparo, reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 2016: Comentada y con jurísprudencia