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ONCECITA

Escrito por

Marco Olivares Aceituno


Javier Cárdenas Carmona

Versión 2
26/05/2022
1 INT. LIVING - TARDE

Una TAZA y un plato sobre una mesa. Un segundo plato es


puesto frente a la otra loza, seguido por otra taza. Poco a
poco vemos a MARISA (49), seria, mientras, meticulosa,
enérgica -casi mecánicamente- pone una canasta con algunas
hallullas, una caja de te, mantequilla y jamón al centro de
la mesa. Se muestra en total control de la situación. Marisa
se detiene y contempla la mesa para ver que esté todo en
orden, pero por unos segundos, su mirada se pierde. De
repente, al darse cuenta de su lapsus, se despierta en un
gesto y saca su celular del bolsillo. Lo mira un segundo y lo
guarda rápidamente, girando y alejándose del comedor.

CORTE A TITULO:
"ONCECITA”

2 INT. COCINA - TARDE

Marisa, retomando su tono enérgico-mecánico, prende la radio


ubicada en uno de los mesones de la cocina, sintoniza entre
estaciones, se detiene en una, escucha su música un segundo,
su rostro muestra su disgusto y la cambia. Se detiene en otra
emisora, suspira en disgusto y vuelve a cambiarla. Se detiene
por tercera vez, mostrando decepción, resignada, deja la
ultima estación, poniéndola a un volumen de fondo. Marisa
lava la loza, deja un par de platos al costado, empezando a
lavar unos cuchillos y cucharas, de repente se detiene, el
AGUA corre, mientras su mirada se pierde en el fluir del
liquido. El rostro de Marisa vuelve a despertar de la nada,
corta el agua y toma una canasta con ropa sucia.

CORTE A:

3 INT. PASILLO - TARDE

Marisa con rapidez pasa por el pasillo. A la vista queda una


PUERTA cerrada y en la otra pared un ESPEJO que Marisa
ignora. De la puerta, se puede apreciar una pequeña luz
proveniente desde dentro de la habitación.

4 INT. PIEZA MARISA - TARDE

Marisa, canasta en mano, se detiene y observa la habitación


desordenada. Mosqueada, resopla y deja la canasta sobre la
cama. Hace un gesto de “automotivación” y empieza a echar
ropa de la cama dentro de la canasta. Se acerca a la cabecera
y recoge una prenda. Marisa se detiene al ver un porta-
retratos en su cómoda. El rostro de Marisa lo observa con una
sonrisa resignada, pero por unos segundos, su mirada se
pierde en la foto.
2.

De la nada, vuelve a despertar, y deja el porta-retratos. Con


rapidez y energía, toma el resto de las prendas y las echa en
el canasto, saliendo de la habitación.

5 INT. PASILLO - TARDE

Marisa, canasta en mano, camina enérgicamente por el pasillo.


La luz proveniente de la puerta ahora es de mayor intensidad.
Se detiene frente al espejo, y limpia con un paño la suciedad
en el vidrio. Lo mira y empieza a perderse por un segundo,
aprieta sus labios pensante por un momento. Marisa reacciona
y sin mirar la puerta, retoma su paso.

CORTE A:

6 INT. COCINA - TARDE

Marisa retoma su tono enérgico, pero denota mas cansancio


esta vez. Mete la ropa a la lavadora, una tras otra sin
parar. Cierra la lavadora, la programa y la deja andando.
Apoyada en el estante, se pausa unos segundos, pero retoma de
inmediato enérgicamente su camino. Toma la radio y sale de la
cocina.

7 INT. LIVING - TARDE

Marisa deja la radio sobre una repisa. Vuelve a sintonizar


entre estaciones, cambiándolas rápidamente, disgustándose de
a poco. Suelta un suspiro algo mas violento y cansado. Deja
sonando al mismo volumen de fondo la ultima estación
registrada. Marisa se gira y contempla la mesa por un
momento, su mirada empieza a perderse, de la nada nuevamente
despierta y sale enérgica pero chatamente del living-comedor.

8 INT. PASILLO - TARDE

Marisa camina por el pasillo, hecha una furia enérgica. La


puerta, ahora con una luz aun mas intensa, la hace detenerse.
Esta vez la mira y muerde con fuerza su labio. Le cuesta
contenerse, casi ya no aguanta el peso de la luz. Finalmente,
sale a paso sobre enérgico.

CORTE A:

9 INT. PIEZA MARISA - TARDE

Del interior del closet, Marisa saca una aspiradora. Empieza


a pasarla por el piso de la pieza. Sus movimientos son
rápidos y con ímpetu.
3.

Friega el aparato con fuerza por una de las alfombras, sin


parar, su rostro denota rabia. Es como si se desquitara con
el piso, como si este tuviera la culpa de todos sus
problemas. Empieza a alejarse de la pieza, llegando al
pasillo.

10 INT. PASILLO - TARDE

Marisa se concentra totalmente en el pasillo, sin mirar la


puerta. Refriega la alfombra del pasillo sin parar, decidida,
con rabia. Marisa intenta limpiar por debajo de la puerta,
que ahora la luz que emana es aún mas intensa, el tubo de la
aspiradora choca con la puerta. Empieza a golpearla con el
tubo del aparato una y otra vez con desesperación. Marisa
aprieta sus ojos frustrada. Respira agitada, sin abrir sus
ojos. Un pequeño sollozo se escapa de ella. De repente... su
respiración se detiene. Marisa abre los ojos. Exhala. La mano
sobre el pomo. Finalmente, abre la puerta. Silencio. Marisa
queda pasmada. La apertura de la puerta deja entrar todo el
haz de luz intenso que provenía de la habitación cerrada,
pero ahora ha quedado abierta. Marisa contempla la habitación
con nostalgia. Cubre su boca con su mano, sus ojos acumulan
lagrimas, como si su corteza se hubiera desgarrado, como si
su alma hubiera quedado expuesta. Solo se mantiene allí, como
si el mundo se hubiera detenido.

CORTE A:

11 INT. COCINA - ATARDECER

Marisa echa café de un frasco medio vacío en frasco mas


pequeño. Abre el refrigerador, saca una bolsa de manjar media
vacía y exprime fuerte la bolsa, sacando su contenido sobre
un recipiente de loza chico. Marisa exprime unas naranjas en
un saca jugo manual. Unas galletas tritón sobre un pequeño
plato. Sus movimientos ahora son lentos y suaves.

12 INT. LIVING - ATARDECER

El café, el manjar, unos vasos de jugo y el plato de galletas


se ponen suavemente en la mesa. Marisa acomoda con delicadeza
una taza con dibujos infantiles. Se toma un segundo, se aleja
un poco de la mesa, pensativa. De repente, su rostro
reacciona, como que le cayó una idea. Sobre la mesa, Marisa
acomoda con delicada ternura el porta-retratos, revelando la
foto de ella abrazada con su HIJA. Empieza a alejarse de la
mesa, y la contempla bajo la luz cálida del sol atardeciente.
Su rostro denota satisfacción, esperanza, ilusión. Una
notificación del celular la sorprende en un leve sobresalto.
Marisa saca y mira su celular. Su rostro se desconcierta.
4.

La emoción de su mirada cambia a decepción, la luz del


atardecer está a punto de apagarse, mientras la vemos junto a
la mesa con su mirada de nuevo perdida. Marisa despierta. La
expresión mecánica y enérgica regresa. Se gira, y va hacia la
radio. Sintoniza entre estaciones. Finalmente hay una que le
gusta, y por primera vez le sube el volumen. Con resignación,
Marisa empieza a juntar las cosas de la mesa, aún de pie,
echa una bolsita de té a su TAZA y una cucharada de azúcar
dejando la CUCHARA dentro. Lleva las cosas hacia la cocina.
Sus movimientos vuelven a ser rápidos y enérgicos. Nos
quedamos en la mesa. Se escucha la loza siendo guardada.
Marisa vuelve al living con un hervidor y vierte el agua en
la taza. Marisa empieza a tararear la melodía y le sube aún
más el volumen a la radio, saca la foto de la mesa y vuelve a
salir del living. Se escuchan sus pasos alejarse y como
guarda loza en la cocina. Pareciera ser que queda de nuevo
una sola taza, sin embargo, se revela que la TAZA DE SU HIJA
continua sobre la mesa. En el fondo, escuchamos el cerrar de
la PUERTA, más no su cierre total.

FIN

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