Está en la página 1de 3

Lavado de Dinero o Blanqueo de Capitales.

Más
allá de la Norma, La ética.
Como es bien sabido, el Lavado de Dinero o Blanqueo de Capitales es una actividad
criminal que golpea la economía de una región y trastoca los indicadores económicos.

Las operaciones con recursos de procedencia ilícita solo produce ganancias a sus
perpetradores que retiran el dinero producto de sus crímenes cuando logran su
cometido dejando desbastadas y sumidas en la pobreza a la comunidad, y como si
fuera poco generan más delitos como la Extorsión, Secuestro y Sicariato, todo esto
bajo una estructura criminal que nada le envidia a cualquier empresa legalmente
constituida.

Es por ello que los crímenes económicos no respetan estrato o condición social, no
tienen barreras y sus perpetradores no tienen escrúpulos ni límites para despojar a la
sociedad de su dignidad e introducir maliciosamente las ganancias de sus actividades;
es así como la Corrupción, Fraude, Narcotráfico, Secuestro y Desplazamiento, entre
otros son titulares de las primeras planas de los periódicos y demás medios de
comunicación; donde políticos de alto turmequé, empresarios de las más altas
alcurnias de la sociedad, empresas nacionales y extranjeras y personas creativas sin
ética han sido protagonistas de los descalabros financieros más grandes del país
resumiendo todo en Lavado de Activos.

En el contexto cotidiano se concluye que el Lavado de Capitales es todo incremento


patrimonial sin un origen legalmente reconocido o lícitamente explicable; es por esto
que no se debe satanizar al Narcotráfico y Terrorismo como únicas fuentes de
recursos ilícitos, y desconocer que existen otros delitos precedentes contemplados
en el Código Penal que a diario se cometen en grandes corporaciones, en partidos
políticos o en los contratos con la Nación.

En vista de que el delito no discrimina tipo de sociedad, área, o contraparte; las


medidas de prevención deben ser diseñadas al mismo nivel, por lo tanto éstas deben
ser incluyentes, impartidas por igual en toda la sociedad y de obligatorio
cumplimiento.

Sin embargo los pequeños y medianos empresarios y comerciantes que son los más
vulnerables y afectados en este tipo de eventos fueron desafortunadamente
excluidos de la obligatoriedad de implementar un esquema de prevención de lavado
de activos.

La lucha contra los delitos económicos debe ser férrea en todas las áreas de cualquier
organización y debe estar contemplada en la planeación estratégica de las mismas, de
modo que cualquier empleado, cliente, proveedor y tercero en general se adhiera a la
filosofía de cero tolerancia frente al Fraude, Corrupción, y demás manifestaciones
delincuenciales en la empresa y por fuera de ella. Así las cosas la implementación de
un modelo de gestión de prevención en lavado de activos debe constituirse como uno
de los activos más preciados de la corporación y no como un gasto o pérdida de
dinero y tiempo.

El modelo de prevención debe obedecer a la gestión de protección de la compañía


frente a los diversos riesgos que en un posible caso de lavado de dinero se puedan
generar; es por ello, que el modelo debe estar enmarcado en la normativa nacional y
con los estándares internacionales determinados por la ONU y GAFI; por lo tanto el
modelo es un diseño individual que envuelve todas las operaciones de la empresa,
contrapartes, canales de ventas y regiones geográficas de sus operaciones
comerciales.

Dicho modelo debe estar alineado con el Código de ética y Gobierno Corporativo de
cada empresa e impartido a cada uno de los empleados, miembros de Junta Directiva
y Accionistas. El modelo de prevención de lavado de activos, más que cumplir con una
determinación del Gobierno debe ser Filosofía Empresarial.

Es importante destacar que todas las empresas, sin importar su tamaño, deben
adoptar medidas anti lavado como esquemas de prevención; todo ello con el fin de
tener mayor cobertura de protección. Es penoso ver y escuchar como muchos
empresarios consideran que los delitos precedentes del Lavado de activos han sido y
serán delitos de paisaje que se han incorporado en nuestra cultura y diario vivir, por
lo tanto tener un esquema de prevención de lavado es considerado un desgaste en
toda la extensión de la palabra.

Señores Sujetos Obligados, Accionistas, Socios, Miembros de Junta Directivas,


Representantes Legales, Revisores Fiscales, Contadores y Consultores; la protección
frente a los delitos económicos no es una opción, es una obligación moral y ética que
tenemos cada ciudadano y que se imparte desde el inicio de nuestra educación en
casa. Las medidas de prevención de Lavado de Activos y sus delitos fuentes se
constituyen en el mecanismo de protección de nuestra moral y dignidad ante la
siniestra maquinaria delincuencial mundial.

Marta Deise Cadavid Acevedo

Profesional en el área contable con Especialización en Gerencia Financiera y Master


en Economía Financiera, Certificada en AML (Anti-Money Laundering) by FIBA –FIU
(Florida International Bankers Association and Florida International University) en la
prevención e investigación de los delitos contra el patrimonio económico tales como
lavado de activos, fraude, narcotráfico, terrorismo, corrupción y trata de personas;
con 20 años de experiencia en el sector contable y financiero

También podría gustarte