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Tema 1.

La novela desde principios del siglo XX hasta 1939: tendencias


(noventayochista, novecentista), autores y obras representativos.
La transición del siglo XIX al siglo XX se caracteriza en Europa por una honda crisis espiritual,
debido a los cambios que se producen en esos años. Las ideas de Schopenhauer o Nietzsche, en
las que predominan los impulsos vitales y la intuición sobre la razón, acrecientan el pesimismo
y la desorientación vital, propios de la literatura de los primeros años del siglo XX.
Se produce un rechazo a la sociedad y al arte burgueses de finales del siglo XIX que, en el
ámbito hispánico, se añadirá a la conciencia del atraso económico, científico y cultural de sus
países con respecto a Europa y Estados Unidos. Los autores tienen un deseo de modernidad a la
vez que defienden sus raíces autóctonas. Ello dará lugar al modernismo.
A todo esto, en España, se suma la derrota en Cuba frente a Estados Unidos. Por ello, en los
primeros años del siglo XX se produce una reacción, el llamado regeneracionismo, que pretende
solucionar esos “males de la patria”. En este ambiente, una serie de autores, la denominada
generación del 98, manifiestan junto a su angustia existencial y su protesta y sus ganas de
reforma de las costumbres decadentes de la sociedad española, un deseo de europeización.
Hacia 1914, surge un nuevo grupo de escritores e intelectuales, encabezados por Ortega y
Gasset, que busca la modernización definitiva de España, a través de la formación científica y
cultural y el cultivo de un arte intelectual: el novecentismo.
En los años 20 y 30, la narrativa española seguirá dos tendencias: la novela deshumanizada
propia del novecentismo, con influencia de las vanguardias, y la novela social, propia de
actitudes más preocupadas por la situación de España.
TENDENCIAS
1. Primeros años: generación del 98
Jóvenes autores con espíritu crítico dan lugar a la llamada generación del 98. Reaccionan contra
las tendencias narrativas del siglo XIX (realismo y naturalismo), en defensa del subjetivismo.
Protestan contra las costumbres decadentes de la sociedad española.
Desde un punto de vista temático, las obras de estos autores se centran en el tema de España y
buscan su esencia a través del paisaje (Castilla), la historia, pero la de los hombres anónimos
(“la intrahistoria”); y la literatura, volviendo a autores como Berceo, Rojas, Manrique,
Cervantes y Larra. El tema existencial, es decir, la existencia: el sentido de la vida, el tiempo y
Dios también constituye un eje central de su temática.
Los escritores del 98, en cuanto al estilo, defienden la sencillez y la claridad, sin perder la fuerza
(antirretoricismo) y la precisión léxica, pero con palabras llenas de valoraciones subjetivas.
La fecha clave es el año 1902 cuando se publican: La voluntad, Azorín, Camino de perfección,
Baroja, Sonata de otoño, Valle-Inclán y Amor y pedagogía, Unamuno.
AUTORES Y OBRAS

 Miguel de Unamuno. Crea la “nivola” que renuncia a la planificación, sin


descripciones, muchos diálogos y personajes con conflictos existenciales.
En su estilo destaca la densidad de ideas, el lenguaje expresivo y la utilización de
palabras con usos renovados.

Obras: Niebla, San Manuel Bueno, mártir, La tía Tula.

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 Pío Baroja. Tiene una concepción abierta de la novela, mezcla la acción con las
digresiones. Su estilo es expresivo, pero sencillo, con descripciones impresionistas.
Obras: Camino de perfección, La busca, El árbol de la ciencia (trilogía La raza).

 José Martínez Ruiz, “Azorín”. Su estilo se caracteriza por ser de ritmo lento y lírico,
aunque claro. Las descripciones están llenas de detalles.

Obras: La voluntad, Antonio Azorín.

 Carmen de Burgos. Destaca más como periodista que como novelista. Su pensamiento
regeneracionista la liga a la generación del 98.

Obras: La misión social de la mujer.

 Ramón Mª del Valle-Inclán. Sus comienzos fueron modernistas y se caracterizaron


por un gran lirismo. Sensorialidad, decadencia y erotismo. Más tarde evolucionó hacia
el esperpento, con una perspectiva crítica y de denuncia.

Obras: Sonatas, Tirano Banderas.

2. Segunda década: novecentismo o generación del 14.


Se conoce como novecentismo o generación del 14 a los autores nacidos a finales del siglo XIX
que suceden a la generación del 98 y alcanzan su plenitud literaria en la segunda década del
siglo XX. Comparten una serie de características: son liberales en lo político, intelectuales
universitarios, son europeístas, reformistas, defensores del arte puro y minoritario (alejado de
las masas). Tienen preferencia por el ensayo como género (José Ortega y Gasset, Eugenio
D’Ors, Gregorio Marañón, Ramón Gómez de la Serna).
AUTORES Y OBRAS

 Ramón Pérez de Ayala. Es autor de novelas intelectuales (la vida, el destino, el mundo
como lucha).
Obras: A.M.D.G., Troteras y danzaderas

 Gabriel Miró. Autor de obras líricas (melancolía, sensualidad…)


Obras: Las cerezas del cementerio, El obispo leproso.

 Ramón Gómez de la Serna. Conocido por las “greguerías” (breves definiciones


basadas en la fórmula metáfora+humor). Autor de novelas experimentales.
Obras: El doctor inverosímil.

3. Hacia 1927
Autores jóvenes que culminarán su obra en el exilo. Pueden clasificarse en dos grupos:
1) Los que comienzan siguiendo las pautas de la novela deshumanizada de Ortega y
Gasset (Rosa Chacel, Memorias de Leticia Valle; Francisco Ayala, Muertes de perro; y
Max Aub, Campos).
2) Los que plantean una novela social comprometida políticamente (Ramón J. Sender,
Réquiem por un campesino español; Crónica del alba; Luisa Carnés, Tea
rooms.Mujeres obreras).

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