Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Magistrado Sustanciador:
ANTONIO JOSÉ LIZARAZO OCAMPO
SENTENCIA
ANTECEDENTES
1. La solicitud
2. Hechos
2.1. El señor Jesús Emilio Velásquez Toro ejerce como párroco de la
capilla Nuestra Señora del Carmen-Campo Alegre, ubicada en el
municipio de Andalucía (Valle del Cauca) y como Coordinador de
la Institución Educativa Guillermo E. Martínez del municipio de
Tuluá en el mismo departamento.
3. Pretensiones
1
Cuaderno 2. Folio 1.
2
Folio 5 del Cuaderno 1.
2
El señor Velásquez Toro solicita al juez de tutela amparar su derecho a la
libertad de cultos y, como consecuencia, ordenar a la Registraduría Especial
para Asuntos Electorales de Tuluá, la revocatoria de la designación como
jurado de votación en las pasadas elecciones del 2 de octubre de 2016.
4. Pruebas
3
De acuerdo con el escrito el procedimiento es el siguiente: “(a) se envía a las empresas públicas, privadas,
establecimientos educativos, solicitud de conformar base de datos del personal de la entidad, con la disposición de estar
pendientes para cuando se asignen contraseña para acceder a la plataforma de jurados de la Registraduría Nacional del
Estado Civil. (b) Con fecha establecida las entidades por intermedio de la persona autorizada y competente para
incorporar la información requerida en la plataforma de la Registraduría Nacional del Estado Civil. (c) En Comité de
Seguimiento Electoral en pleno se hace el sorteo de los jurados, por intermedio de un software que previamente fue
alimentado por las empresas que para este caso fue el día 20 de septiembre de 2016, con el acompañamiento del
ministerio público. (d) El sistema emite la resolución de nombramiento, el formulario E-1 donde se informa la
designación como jurado, la asignación de puesto y la mesa para la prestación del servicio; así como el lugar, fecha y
hora de la capacitación para jurados.” Cuaderno 1 Folio 15.
3
compromisos sacerdotales el día domingo, esta designación se realizó en
virtud de su calidad de coordinador y docente de la Institución Educativa
Guillermo E. Martínez. Destacan que la designación como jurado de votación
le confiere la condición de funcionario público de manera transitoria, cargo
que es de forzosa aceptación. Bajo estas circunstancias, y citando la Sentencia
T-447 de 2004, la accionada no vulneró la libertad de cultos consagrada en los
artículos 53 y 54 de la Constitución Política.
4
Mediante fallo No. 176 del 29 de septiembre de 2016, el Juzgado Único de
Pequeñas Causas y Competencia Múltiple de Tuluá resolvió no conceder el
amparo del derecho fundamental a la libertad de cultos del demandante, cuya
vulneración habría sido originada por la negativa de la Registraduría
Municipal de Tuluá de relevar al Presbítero de su cargo de jurado en las
votaciones para el Plebiscito del 2 de octubre de 2016. Igualmente, resolvió
denegar la medida provisional solicitada por el accionante, consistente en la
suspensión transitoria de esta designación, al considerar que no se vulnera de
manera grave e inminente un derecho fundamental.
6.2. Impugnación
4
Cuaderno 2. Folio 32.
5
El Presbítero Jesús Emilio Velásquez Toro impugnó el fallo de tutela del 29
de septiembre de 2016, por no compartir los fundamentos que dieron lugar a la
decisión. Esta impugnación fue concedida por el juez de tutela de primera
instancia mediante auto 884 del 14 de octubre de 2016.
5
Cuaderno 3. Folio 7.
6
Cuaderno 3. Folio 7.
6
si el accionante desempeñó sus funciones en cumplimiento de su designación
como jurado de votación para las votaciones del plebiscito del 2 de octubre de
2016, en el lugar asignado. Y asimismo, en caso de que el demandante no
hubiera asistido, si fue objeto de alguna sanción por incumplimiento, de
acuerdo con las normas aplicables sobre la materia y, si la misma se hizo
efectiva.
8. Competencia
9. Legitimación activa
7
Expediente T-6171410. Cuaderno 1. Folio 15.
8
Expediente T-6171410. Cuaderno 1. Folio 15.
7
sancionado por la entidad. Por esta razón, resulta necesario precisar que en el
presente trámite de revisión operó el fenómeno procesal de la carencia actual
de objeto por imposibilidad de dar cumplimiento a la pretensión del actor.
Para ello, la Sala analizará los siguientes temas: (I) Requisitos generales de
procedencia de la acción de tutela y análisis de procedibilidad formal en el
presente caso; (II) el derecho a la libertad de cultos y sus límites frente al
deber deber ciudadano de participar como jurado de votación en los procesos
electorales, y (III) análisis constitucional del caso en concreto.
8
circunstancias en que se encuentre el solicitante o, iii), cuando pese a la
existencia de mecanismos judiciales ordinarios, resulte necesaria la
intervención del juez de tutela para evitar la consumación de un perjuicio
irremediable.9
En el presente caso, si bien cabría sostener que existe una vía judicial
ordinaria -la acción de nulidad y restablecimiento del derecho-, ésta no resulta
eficaz teniendo en cuenta el objeto de la pretensión cuya protección demanda
el accionante.
9
Ver Sentencias: T-1015 de 2008 MP. Jaime Córdoba Triviño,
10
. T-262 de 1998. MP. Eduardo Cifuentes Muñoz; T-762 de 2008, T-608 de 2008, T-063 de 2009 y T-1088 de 2007.
11
Por medio de la cual se expiden algunas disposiciones en materia electoral.
12
De acuerdo con el artículo 104 del Código Electoral: “Todos los funcionarios y empleados públicos pueden ser
designados jurados de votación, con excepción de los de la Jurisdicción Contencioso Administrativo, de las primeras
autoridades civiles en el orden nacional, seccional y municipal las que tienen funciones propiamente electorales, los
miembros de las Fuerzas Armadas, los operadores del Ministerio de Comunicaciones, Telecom, Empresas de Teléfonos,
los auxiliares de los mismos y los funcionarios de la Administración Postal Nacional. Tampoco podrán ser designados los
miembros de directorios políticos ni los candidatos. Para el efecto dichos directorios enviarán la lista de sus integrantes al
respectivo Registrador.”
9
jueces contencioso administrativos, mediante la acción de nulidad y
restablecimiento del derecho -artículo 138 de la Ley 1437 de 2011 o Código
de Procedimiento Administrativo y Contencioso Administrativo-. El anterior
precepto dispone que Ҭ[t]oda persona que se crea lesionada en un derecho
subjetivo amparado en una norma jurídica, podrá pedir que se declare la
nulidad del acto administrativo particular, expreso o presunto, y se le
restablezca el derecho; también podrá solicitar que se le repare el daño.”
No obstante, la Sala considera que, de acuerdo con las características del caso,
la acción de nulidad y restablecimiento del derecho no resulta un medio
judicial eficaz para salvaguardar el derecho fundamental que el accionante
estima vulnerado, de acuerdo con las siguientes razones:
13
Ver artículos 138 y 137 de la 1437 de 2011, por medio de la cual se expide el Código de Procedimiento
Administrativo y de lo Contencioso Administrativo.
10
nombramiento, lo cual pende a su vez de la oportunidad con que las
Registradurías hubieren recibido las listas de ciudadanos aptos para la
integración de los jurados.
11
colectiva.” A este derecho lo conforman dos elementos: (i) uno interno, que
permite practicar a la persona su credo sin limitación en su fuero individual e
interno, y (ii) otro externo, por medio del cual el practicante del culto de su
elección tiene facultades para enseñar y profesar sus creencias religiosas
públicamente de manera individual o colectiva a los distintos integrantes de la
sociedad14. La Sentencia T-915 de 2011 señaló que, como consecuencia de la
protección constitucional referida, el ordenamiento jurídico colombiano
establece una prohibición de discriminación por motivos religiosos, así como
la interdicción de restricciones desproporcionadas de la libertad de cultos15.
14
Ver: T- 026 de 2005 (M.P Humberto Antonio Sierra Porto) Y T-915 de 2011. M.P. Mauricio González Cuervo.
15
Sentencia T-915 de 2011. M.P. Mauricio González Cuervo.
16
M.P José Gregorio Hernández Galindo
17
M.P. Eduardo Montealegre Lynett
18
Sentencia T-602 de 1996.
19
T-915 de 2011. M.P. Mauricio González Cuervo.
20
M.P Fabio Morón Díaz
12
derecho a la libertad de cultos (Ley 133 de 1994), la Corte Constitucional
estableció -y ha reiterado en providencias posteriores21-, que sólo pueden
establecerse límites al ejercicio de la libertad religiosa si se cumplen tres
requisitos: (i) que la presunción opere siempre en favor de la libertad en su
grado máximo, (ii) que la medida sea racional y objetivamente necesaria, y
(iii) que la restricción no sea arbitraria ni discrecional.
21
Así por ejemplo, ver: Sentencias T-376 de 1996 M.P Hernando Herrera Vergara, T-588 de 1998 M.P. Eduardo
Cifuentes Muñoz y T-800 de 2002 M.P. Jaime Araújo Rentería.
22
M. P. Eduardo Montealegre Lynett.
23
Sentencia T-447 de 2004. M.P. Eduardo Montealegre Lynett.
24
Sentencia T-447 de 2004. M.P. Eduardo Montealegre Lynett. Num. 13.
25
Sentencia T-915 de 2011. M.P. Mauricio González Cuervo.
13
En la mencionada Sentencia T-447 de 2004, por ejemplo, el hecho de que la
designación para desempeñarse como jurado de votación en un día
considerado sagrado para los miembros de la Iglesia Adventista, fuera
transitoria, resultó importante para concluir que la obligación de participar
como jurado de votación no constituía una restricción excesiva. Igualmente, la
transitoriedad de la medida constituyó una de las consideraciones tenidas en
cuenta en las Sentencias T-075 de 1995 y T-877 de 1999 para concluir que la
obligación de los Testigos de Jehová de concurrir a los actos cívicos previstos
por un Colegio, no resultaba contraria a la Constitución26.
26
Sentencia T-915 de 2011. M.P. Mauricio González Cuervo. Esta Sentencia considera que el carácter definitivo de una
restricción a la autonomía de una persona exige un análisis constitucional más cuidadoso en tanto deben ser ofrecidas
razones constitucionalmente muy poderosas para justificar la restricción al paso que la justificación de una medida que
interviene temporalmente puede no ser tan exigente.
27
M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz. En esta providencia, la Corte debió decidir si la negativa de la Registraduría Nacional
del Estado Civil de aceptar la renuncia de las personas designadas como jurados de votación en un municipio de
Putumayo, justificada en las amenazas de un grupo insurgente contra su vida e integridad si se llevaban a cabo las
elecciones, vulneraba los derechos fundamentales de los accionantes. Al respecto, la mayoría de los integrantes del Alto
Tribunal encontró que tal decisión de la Administración no quebrantaba ninguna garantía iusfundamental. En este fallo,
salvaron su voto cuatro (4) de los nueve magistrados.
14
mismo, la función electoral que mediante ellos se ejerce, sólo son posibles si
existe una organización electoral que los organice, que recepcione los votos
depositados por los ciudadanos en las urnas y que los escrute -una vez
concluida la jornada de votación-. Se trata de una condición de existencia de la
democracia, pues esta deja de ser tal si no se desarrollan procesos electorales
mediante los cuales los ciudadanos ejerzan la función electoral, entendida, en
los términos del artículo 3 de la Constitución, como una expresión de
soberanía del pueblo de la cual emana el poder público.
15
derechos que de ella se derivan relacionados con la conformación, ejercicio y
control del poder político. Explica igualmente que, en algunos casos de
colisión con otros derechos, la ley dé prelación a la necesidad de garantizar la
realización de la jornada electoral, como ocurre, por ejemplo, con las
restricciones en materia de propaganda electoral (artículo 10 de la Ley 163 de
1994), de encuestas (artículo 30 de la Ley 130 de 1994), de información sobre
resultados electorales, de circulación vehicular, llegando incluso al cierre de
pasos terrestres y fluviales fronterizos, conforme a las disposiciones que
adopta el Gobierno para la preservación del orden público y otras que
efectivamente adoptó mediante Decreto 1391 de 2016 por medio del cual
convocó el plebiscito.
Con base en las listas enviadas por las entidades públicas y privadas, los
Registradores Municipales y Distritales, mediante resolución, designarán tres
(3) jurados principales y tres (3) suplentes para cada mesa. En relación con la
función que deben realizar, resulta pertinente tener en cuenta que de
conformidad con el Código Electoral, las votaciones comenzarán a las ocho
(8) de la mañana y se cerrarán a las cuatro (4) de la tarde (artículo 111), que
los jurados deberán estar presentes en la mesa en la que hubieren sido
16
designados, a las siete y media (7 y 1/2) de la mañana del día de la votación, y
procederán a su instalación (artículo 112), que a los jurados corresponde
realizar el escrutinio de mesa inmediatamente después de cerrada la votación
(artículo 134), y que después de terminado el escrutinio de la respectiva mesa
de votación, pero en todo caso antes de las once de la noche (11 p.m.) del día
de la votación, las actas y documentos que sirvieron para la misma serán
entregados por el Presidente del Jurado, bajo recibo, con indicación del día y
la hora de entrega, así: en las cabeceras municipales, a los Registradores del
Estado Civil o a los delegados de estos, y en los corregimientos, inspecciones
de policía y sectores rurales, a los respectivos delegados del Registrador del
Estado Civil (artículo 144).
Finalmente, el artículo 105 del Código Electoral establece que “el cargo de
jurado es de forzosa aceptación”, de modo que “las personas que sin justa
causa no concurran a desempeñar las funciones de jurado de votación o las
abandonen, se harán acreedoras a la destitución del cargo que desempeñen,
si fueren empleados oficiales; y si no lo fueren, a una multa de cinco mil
pesos (5.000.oo), mediante resolución dictada por el Registrador del Estado
Civil”.
28
Por medio de la cual se expiden algunas disposiciones en materia electoral.
17
entre principales y suplentes, el cumplimiento de la función, alternándose
entre sí durante la jornada electoral que comienza a las siete y media (7 y 1/2)
de la mañana del día de la votación y termina, a más tardar, a las once de la
noche (11 p.m.) del mismo día; y finalmente, iv) La participación como jurado
de votación persigue, en síntesis, la realización del principio democrático.
29
Ver: Corte Constitucional SU-540 de 2007, Sentencia T-612 de 2009.
30
Sentencia T-585 de 2010.
18
Como se desprende del anterior recuento, se configura la carencia actual de
objeto por imposibilidad de atender las pretensiones de la acción de tutela
debido a que, de una parte, la jornada electoral se realizó el 2 de octubre de
2016 -trece (13) días calendario después de que la Registraduría rechazó la
solicitud de revocatoria de la designación- y, de la otra, el accionante acudió al
cumplimiento de su designación como jurado en la precitada jornada electoral
del plebiscito debido a que el juez de primera instancia decidió no tutelar el
derecho invocado, razón por la que no existe en la actualidad el objeto jurídico
cuya reclamación se persigue mediante la presente acción de tutela.
19
Ahora bien, de acuerdo a la información suministrada a esta Sala de Revisión
por la Registradora Especial de Tuluá en escrito del 25 de agosto de 2017, el
Presbítero “desempeñó sus funciones”31 en la jornada de votación del 2 de
octubre de 2017. Sin embargo, en este escrito la Registradora no especifica si
el Sacerdote estuvo presente durante toda la jornada de votación y, en ese
sentido, no certifica si el accionante apeló a la alternancia de funciones entre
jurados de votación principales y suplentes que permite el artículo 5 de la Ley
163 de 1994. En esa medida, no le consta a la Sala de Revisión que el
sacerdote no hubiera oficiado ninguna de las eucaristías previstas para ese día
domingo, de modo que no es posible constatar que, en efecto, se hubiera
impedido la celebración de los ritos eucarísticos durante ese día.
31
Expediente T-6171410. Cuaderno 1. Folio 15.
32
Ver Sentencia T-152 de 2017.M.P. Alejandro Linares Cantillo y T-575 de 2
20
(iv) El principio de razón suficiente aplicable. Este criterio incluye dos
etapas: (a) si el medio elegido es necesario para llegar al fin,
precisando si no existe otro medio alternativo que no implique
afectar en tal grado el derecho a la libertad religiosa, y (b) si la
afectación es desproporcionada.
(iv) En contraste con los anteriores criterios, la Sala encuentra que el criterio
de “razón suficiente”, no se encuentra acreditado en el presente caso. Lo
anterior por cuanto: (a) la integración de los jurados de votación se realiza
mediante un procedimiento preclusivo, como todas las etapas del proceso
electoral, el cual debe adelantarse dentro de precisos términos fijados por el
legislador, y (b) la afectación a la libertad de cultos no es desproporcionada,
como se explicará a continuación.
33
Dentro del expediente obra la copia del carnet sacerdotal del accionante.
34
Ver Catecismo de la Iglesia Católica, numerales 1322 -1419.
21
De acuerdo con el artículo 5 de la Ley 163 de 1994, el procedimiento para esta
designación es el siguiente: (i) se envía a las empresas públicas, privadas y
establecimientos educativos, solicitud de listas del personal de la entidad; (ii)
la Registraduría incorpora los listados en la plataforma de la entidad; (iii) en
sesión del Comité de Seguimiento Electoral en pleno se hace el sorteo de los
jurados, por intermedio de un software que previamente ha sido alimentado
con los listados de diversas entidades públicas y privadas, con el
acompañamiento del Ministerio Público; (iv) El registrador competente emite
la resolución de nombramiento, asignación de puesto y mesa para la
prestación del servicio. Adicionalmente, se les informa el lugar, fecha y hora
de la correspondiente capacitación.
35
Cuaderno 2. Folio 5.
22
parte de la entidad accionada al negar la solicitud de relevo del cargo de
jurado de votación que efectuara el demandante el 19 de septiembre de 2016.
La demandada se limitó a dar aplicación a los artículos 104, 105 y 108 del
Decreto 2241 de 1986 y, en ese sentido, le manifestó que no era posible
exonerarlo de la designación por cuanto no se configuraba ninguna de las
causales contempladas en el artículo 108 del Decreto 2241 de 1986.
23
Competencia Múltiple de Tuluá, que negó el amparo constitucional
interpuesto.
DECISIÓN
RESUELVE
Comuníquese y cúmplase,
24
ROCÍO LOAIZA MILIAN
Secretaria General (e.)
25