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Tema 1
Las bases
1.2. Morfología
Se ocupa de la estructura de las palabras, sus variantes y el papel que
desempeña cada segmento en relación con los otros elementos que las
componen.
- Morfología flexiva: Se ocupa de la variación de las palabras que implica
cambios de contenido de naturaleza gramatical con consecuencia en las
relaciones sintácticas: Ellos trabajan.
- Morfología léxica: Estudia la estructura de las palabras y las pautas que
permiten construirlas o derivarlas de otras. Se divide tradicionalmente
en derivación y composición: Dormitorio (de dormir) / saca-corchos.
- Morfología sincrónica: Se proponen estructuras morfológicas que se
apartan del origen de las palabras y busca apoyo en las relaciones que
establecen intuitivamente los hablantes: Conductor como derivado de
conducir, pese a que en latín ya existía conductor.
- Morfología diacrónica: Se ciñe estrictamente a la etimología:
Agazaparse gazapo (cría de conejo).
3.2. El argumento
Los predicados no son solo verbales. También los sustantivos, los adjetivos,
los adverbios y las preposiciones pueden tener argumentos, es decir,
constituyentes exigidos por su significado léxico.
- Los argumentos introducen información exigida o pedida por el
significado de los predicados: Busco trabajo.
- Los adjuntos son modificadores no seleccionados. Son adjuntos los
adjetivos calificativos y son omisibles: El tendero me dio una manzana
con mucha amabilidad.
3.3. Valencias de los predicados
Valencia: número de argumentos que exigen los predicados
- Avalentes: Verbos sin argumentos, como los que designan fenómenos
meteorológicos: Llover.
- Monovalentes: Tienen un solo argumento: El guarda duerme.
- Bivalentes: Que exigen dos argumentos: Ana decidió no acudir a la
boda.
- Trivalentes: Con tres argumentos, El señor ministro entregó los premios
a los galardonados.
1. El nombre
1.1. Clasificación
- Según su significado, pueden ser:
Comunes/Propios: Casa/Toledo
Individuales/Colectivos: Oveja/Rebaño
Concretos/Abstractos: Rana/Igualdad
Contables/Incontables: Platos/Estrellas
- Según su forma, pueden ser:
Flexión de género
Flexión de grupo
- Por su sintaxis,
se combina con:
Artículos y otros determinativos
Desempeña una función dentro de una oración
- Solo
- Acompañado de otras palabras en un grupo nominal del que es
núcleo.
2. Número
2.1. Maneras de formar el plural
- Los sustantivos que acaban en vocal pueden formar el plural.
Añadiendo –s cuando acaban en vocal átona o en –á, -é, -ó.
Excepciones: no (noes), a (aes), o (oes), e (es), yo (yoes).
Añadiendo –s o – es cuando acaban en –í, -ú. Excepciones: menú
(menús), champú (champús).
5. El género
No existe discordancia de género en secuencias como el alma dormida o el
agua embalsada. El artículo femenino presenta la variante el, que precede a
los sustantivos que comienzan con /a/ tónica.
La terminación de los sustantivos se corresponde con su género. La mayor
parte de los sustantivos que acaban en -a son femeninos y los que terminan
en -o son masculinos. Los acabados en consonante o en otras vocales
pueden ser masculinos o femeninos.
Entre los terminados en -e forman grupo especial los que acaban en -nte,
que suelen proceder de participios latinos: amante, cantante.
Los sustantivos heterónimos utilizan radicales diferentes. Ej: toro/vaca,
caballo/yegua.
Los sustantivos ambiguos pueden usarse como masculinos o femeninos
para designar la misma entidad, generalmente inanimada. Ej: La mar/el
mar.
Los sustantivos epicenos se refieren a seres vivos de los dos sexos mediante
un único género gramatical, sea este masculino. Ej: El personaje, la víctima.
5.1. El masculino genérico
Los sustantivos de género masculino se emplean para referirse a los
individuos de ese sexo, pero también para designar a toda la especie.
En el lenguaje político y periodístico se tiende a construir series con
doble mención, que se interpretan como señal de cortesía: los alumnos
y las alumnas. La repetición es innecesaria en estos casos, porque
usando el masculino genérico es suficiente para abarcar a los individuos
de los dos sexos.
El llamado “lenguaje inclusivo” (terminaciones en -e. Ej: Les chiques)
supone alterar artificialmente el funcionamiento de la morfología de
género en español bajo la excusa de que el uso del masculino genérico
invisibiliza a la mujer.