SEMANA 11

PLAN EDUCATIVO COVID-19: APRENDEMOS JUNTOS EN CASA MINEDUC 2020

EDUCACIÓN INICIAL Y EGB PREPARATORIA y ELEMENTAL

Actividad de Educación Unidad Autor/a: Fecha al aire:

lectura: Leamos Inicial y EGB
en familia Preparatoria y
Elemental

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OFF PROFE:
Hoy en nuestras actividades de lectura para estudiantes de Educación Inicial y Educación
General Básica Preparatoria y Elemental vamos a asombrarnos con una historia que nos lleva
a reflexionar que somas capaces de hacer cosas que parecen difíciles.

¿Tú, conoces todas tus capacidades?

Te invito a que te sientes unos minutos y reconozcas en qué te destacas, que habilidades
posees y que te hacen sentir bien.

Sabías que mientras realizas actividades, puedes descubrir que eres muy hábil para algo que
no sabías y que incluso pueden sorprender a los que te rodean, por esto te propongo poner
mucha atención a todo lo que haces, por más simple que parezca, esta puede llegar a ser
una habilidad sorprendente.

Por ejemplo, al colocar la basura en su lugar puedes descubrir que tienes gran puntería o
mientras lavas tu ropa descubres que puedes hacer mezclas increíbles entre el agua, el
jabón y lo que tienes cerca, en fin, todo es una oportunidad para descubrir de lo que eres
capaz.

Esto le sucedió al protagonista de la historia que nos va a contar Adrián Paenza. Periodista,
matemático y profesor argentino especializado en la divulgación matemática.
Historia de Carl Friedrich Gauss
Adrián Paenza
Una maestra de segundo grado de la escuela primaria (de nombre Buttner, aunque los datos
afirman que estaba acompañada por un asistente, Martin Bartels) estaba cansada del lío
que hacían los chicos. Para tenerlos quietos un poco, les dio el siguiente problema:
“Calculen la suma de los primeros cien números”. La idea era tenerlos callados durante un
rato. El hecho es que un niño levantó la mano casi inmediatamente, sin siquiera darle
tiempo a la maestra para que terminara de acomodarse en su silla.
— ¿Sí? —preguntó la maestra mirando al niño.
—Ya está, señorita —respondió el pequeño. El resultado es 5 050.
La maestra no podía creer lo que había escuchado, no porque la respuesta fuera falsa, que
no lo era, sino porque estaba desconcertada ante la rapidez.
— ¿Ya lo habías hecho antes? —preguntó.
—No, lo acabo de hacer.
Mientras tanto, los otros niños recién habían llegado a escribir en el papel los primeros
dígitos, y no entendían el intercambio entre su compañero y la maestra.
—Vení y contanos a todos cómo lo hiciste.
El jovencito se levantó de su asiento y, sin llevar siquiera el papel que tenía adelante, se
 acercó humildemente hasta el pizarrón y comenzó a escribir los números:
1+ 2 + 3 + 4 + 5 +… + 96 + 97+ 98 + 99 + 100
—Bien —siguió el jovencito—. Lo que hice fue sumar el primero y el último número (o sea,
el 1 y el 100). Esa suma da 101.

—Después, seguí con el segundo y el penúltimo (el 2 y el 99). Esta suma vuelve a dar 101.
—Luego, separé el tercero y el antepenúltimo (el 3 y el 98). Sumando estos dos, vuelve a dar
101.
—De esta forma, “apareando” los números así y sumándolos, se tienen 50 pares de
números cuya suma da 101. Luego, 50 veces 101 resulta en el número 5 050, que es lo que
usted quería.

Esta historia ya ha terminado, pero es hora de pensar en muchas historias parecidas, en esta
vez historias de tu propia vida.

Tú, puedes recordar momentos en los que al realizar algo, te quedaste sorprendido de lo
que eres capaz. Recordarlo te hará sentir bien y podrás volver a intentarlo para desarrollar
esa gran capacidad.

Ahora piensa en un amigo o amiga, compañero o compañera de la escuela o algún pariente

que haya realizado una hazaña similar al niño de nuestra historia y cuéntale esta para que se
inspire a cultivar su habilidad.

Puedes contarle que la historia que escuchaste de Carl Friedrich Gauss es verdadera y que
este niño descubrió su capacidad matemática en un momento al azar, tal y como lo puedes
realizar tú y las personas que te rodean.

¡Ah y recuerda que no existe edad para descubrir de lo que eres capaz, solo debes poner
atención para descubrirlas!

Luego de escribir tu historia puedes compartirla con tus amistades o familiares, y si deseas
que la conozcan muchas otras personas, puedes enviarnos tu historia al correo electrónico:
programa.yoleo@educacion.gob.ec

Recuerda, si quieres leer esta historia la encuentras en el texto escolar Matemática de

segundo grado.

CIERRE

*PRODUCCIÓN: integrar cortinillas musicales entre cada texto en casilla y en pausas durante
el cuento.