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íNDICE
Pdg.
qm.ocCIÓN EDITORIAL:
LUIS VAI.IENTE
Introducción .......................................... . 9
Cap. 8. . 1."0
modeleps de gobierno de la hacienda militar.
I
I -La investigación para este trabajo ha sido financiada gracias 'a 。セ、ウ@ del Minis-
i Ciencia e Innovación, Referencia: HAR2008-2101 y del Plan de Investiga-
! .la Universidad de Navarra;
I
11'
19
CAPfTULO 1 I
-
Q14c.¡tos- europeos poseían los suficientes recursos para que cambiarán los sistemas habituales, haciendo que la -movilización
movilizadas incluso en tiempo de paz2 • de recursos, al hilo de las mayores necesidades de la guerra, sea más
se convirtió en'la Era del infante profesional, nacional que nunca. Para ello la monarquía se vio envuelta en un tira
Mセゥ@ Ae vaya avanzando- -el siglo de la movilización y afloja para conseguir recursos, practicando métodos que dan pasos
el que los e ércitos multiplicarán sus efectivos, y la masa y la atrás y-adelante en la formación del,Estado Moderno.
capacldadjde ュ。ョエセ@ r a セイ。ョ@ ョセ・イッ@ de ィッュ「セ・ウ@ en activo primarán
sobre tod lo dernas. era entonCes cuando empIece a configurarse un
i
-1 verdadero I Estado Mi tar, en el que la guerra será el fin máximo 3 • La
l. El sistema defensivo,.-hispano_
!I
I caoacidad¡ de los EstakIos para encontrar recursos, hombres, medios y
unos a otros, haciendo que unas potencias se , Durante el siglo XVI la Monarquía, Hispánica fraguÓ! un ,sistema
segun los métodos empleados, desde el pacto defensivo bastante complejo para su época, que se ヲオョ、。ュ・エセ@ en
-gobiernos de participación, basados en la
- o,: ." Sobre estos debates fundamentalmente:,. Tilly (1992), dッセゥョァ@ (1992), En..;
roan (1997). : .
, Tallett'(1995). Para el caso inglés:' Schwoerer (1974), ,,' - 5 En el estudio -de Downing, éste solo hada referencia a eウーセ。@ cuando hablaba
970). -la república holandesa, de ahí que Thompson dedicara un artículo ,intentando
ürioortancill de la Güerra como factor en la historia:· Lynn (1991), セイエ。⦅@ a Espafia en este contexto: Thbmpson .(1998), pp. 279-p06.
y Cools (2008), pp. 371-388. セ@ :Lynn ( 1 9 9 7 ) . ' . セ@ !
7 Elliott (1992), pp. 48-71, Gil Puyol (1996), pp. 65-95. •
";,""."",,·,'",.".",.=•.••·"m.'"•.•·____'-_··,",··,·,' <•••,."_.,.,.... o ..ᄋGセBイM@ . ·'· ,. .--.. . . . . . . . --..---.----..
1
f..os primeros ejércitos peninsulares y su influencia
22 I I セ@ Antonio José Rodrlguez Hernátulez
23
, __ "_ _ _ _ _ _ _ •• セB⦅@ ..... _'''' ...''_''_'_''_ ••• ⦅Nセ@ ••.• LNセ@ ......... Lセ@ .........""......_.......,.. ,,""'I:,l"'t""'...... |セN]BnャqL[oaZGュゥju@ piGセ@ キセBiN|G\ᄀ@ ..T]セNZMBQAiᄋ^ ......セ[Nᄋ@ .....ᄋjNZG[ケセクBL|Q^@ ....\....カNLセ@ ... ,,':;''''_..,.... _ _ _ _ _
24 L :i; セ@ Antonio José Rodríguez Herndndez Los primeros ejércitos peninsulares y su influencia 25
Lセ@
セャ。@ Cos a del reino de Granada y la Alhambra13, que en El modelo defensivo en España era algo diferente del que había en
el siglo _" ; -'_ -en teor a eran más de 2.000 soldados1 4, pero que no se el resto de los territorios de la Monarquía Hispánica, ya que en Italia
incluían:' Jセ@ relaci nes de los presidios por estar pagados por otra o Portugal perduró un modelo mixto. Después de 1535 la Corona
fuente d- fiiianciació ,las rentas procedentes de -bienes confiscados a mantuvo en cada uno de sus tres dominios italianos -Sicilia, Nápo..,
los mOrls セ[@ que los nuevos pobladores pagaban 15. En este conjunto les y Milán- un ejército permanente con unos 3.000 españoles 16 •
también オセ、。「ョ@ margen las dotaciones de las ciudades de Ceuta Con esta presencia permanente de infantería -espJñola, la Monarquía
y Tánger que hasta 640 fueron pagadas con fondos portUgueses. Hispánica trataba de mantener su gobierno sobre Italia y protegía sus
territorios- de cualquier ataque enemigo, convirtiéndose estas tropas
real de los Presidios HQVSYセ@ 1640) en la clave de la organización militar defensiva de la Italia de los Aus-
Il
trias . La defensa estática seguía en manos del personal que cubría
las dotaciones de los castillos y fortificaciones -ya fuera local, profe-
sional o fueran veteranos españoles recompensados con el servicio en
guarniciones por su crecida edad-o En caso de invasión, estas guar-
niciones tenían el apoyo de un Tercio fijo de españoles -profesio-
nal y altamente cualificado-, además del apoyo de las. milicias y las
fuerzas locales de defensa, ya fuera de- nobles o ciudades f8 ., Aunque
desde el principio el modelo hispano se quiso asemejar al praqicado
en la Italia española, cimentado hasta la primera mitad del siglo XVII
en la presencia de soldados españoles profesionales, esto no siempre
ヲオセ@ posible. Los problemas fueron varios, desde las deficiencias en la
financiación, hasta la carencia de unas fortificaciones en muchos sec-
tores costerosI 9, lo que delimitó la·defensa estática a'un número muy
ャゥィセ。、ッ@ de puntos.
ヲセ|@ En conjunto los Presidios eran una amalgama de guarniciones inco-
_,ªexas y con poca relación entre sí, que realmente no podían abarcar la
- セ。@ de todo el territorio, por lo Nアセ・@
f
j siempre hubo que contar con
1 ョZゥャ」セN@ Los ウッャ、。セL@ de los ーイセウゥ、ッ@ eran ーイ、ヲ・ウセッョL@ que ・セエ。ᆳ
;1 InclU1dos en companías, pero SIn tener una orgalllzaclón supenor.
¡I セイ」「ョエ。ゥッ@ que en las posesiones europeas de la monarquía, en donde
セ・」ゥイッョ@ distintos Tercios fijos -destacados fundamentalmente en
Flandes o Portugal-, en las fronteras españolas nunca se 」イ・。セョ@
de combate fijas, sino estructl,lras mucho más reducidas que
del entr:amado d,efensivo del reino de Granada tras la
(2004).
セ。ョゥ・ウエ「I@ Vélez-Málaga, 6 de septiembre 1672. AG.S 1 . . セcャNuオᄋーッイ@ Parker (1998), p. 155. '
:(1995), pp. 97-:122. ' '!
de Guerra al Conde'-de Santiesteban. 31·de octubre f672.
del papel que el Maes.tre de Campo General escribió a don Pedro de
. Junta de la .visité\ ·de la Costa del Reino de Granada. 30 セーッャ・ウL@ 3. de febrero de 1668.-AGS,,, Estado Nápoles, -Leg. 3,291 f ;35.
J GA, Leg. RNセQU@ Gil (1995). ,
セ@
no solían! pasar de 1 compañía. Estas agrupaciones eran puramente que impedía que el sistema se desarrollase adecuadamente. De hecho,
、・ヲョウゥカ。セ@ y en po ocasiones estaban listaS para el combate o bien éste terminará reproduciénd,ose a pequeña escala, aunque durante el
entrenad.4, salvo en 1 s puntos más conflictivos y candentes, como el siglo XVII los veteranos llegados a España no serán españoles, sino de
norte de trnca o la asta granadina. Por lo tanto, a pesar de tratarse otraS nacionalidades23, ya que se necesita que los españoles, como élite
de ーイッヲ・ウセョ。ャL@ es tropas no reunían la preparación suficiente, o del ejército de la monarquía, se quedasen en Italia y Flandes.
efectivos comparables con los soldados que servían en N ápoles, Milán
o fャ。ョ、・ウセ@ lI!-ucho m .or pagados y que eran la élite de la monarquía.
Durante セ@ siglo XVI y la primera mitad del siglo XVII, ante la falta 2. Los frimeros intentos de construir un tjército
de soldad S foguead
en la Península, la Corona debió llamar a los pentnsular: Cantabria y Cataluña (1638-1640)
Tercios" eranos queimantenía en otras panes, de ahJ que los Tercios
de Italia st! ・ューャ。イセ@ para aplacar la sublevación de las Alpujarras2°, En 1635, con la entrada en guerra con Francia, se vieron los no-
conquistai- Porrugal21 o incluso para la fracasada empresa de la Armada tables problemas que suponía el sistema defensivo hispano, y la rela-
Invencibíi
presión ;c" : Nセ。@
sゥセウュ。@
. l... I....•.. ,.Es.'.'. te será empleado en momentos en los que la
sobr los Países Bajos o Italia lo permitía. Durante la
tiva debilidad de la frontera pirenaica espafiola, defendida por apenas
un puñado de soldados profesionales encuadrados en los presidios de
、←」。セL@ ',' NセZ@ 0-164 se volvió a intentar, aunque no siempre fue po- Cataluña, Aragón, Navarra y GuipÚzcoa. Al no haber realmente un
sible, y。スセZ@ " :. mon Quía se mantenla en guerra en otras latitudes, 10 ejército, con sus estructuras, en los primeros años se acudió ,<1, la im-
provisación y a imponer a los naturales una mayor participación 'en su
defensa, sin resolverse la creación de un verdadero ejército profesional
al estilo de Milán o Flandes. El conflicto con Frflllcia sería largo y
de las Alpujarcis se hicieron llamar 2.000 infantes d.'€sastroso para las armas españolas, 、・ュッウエイ£ョセ@ muy pronto que
Nápoles y Lombardla, además de prevenir otros 500 del los viejos sistemas utilizados para la formación de ejércitos s610 servían
de Alburquerque, Gobernador de Milán. Madrid, 15 de para la autodefensa, y no para un conflicto prolongado o una invasión
Leg. 1.225. Orden al Duque de Alburquerque, 9 de
ZセG^BY。ョ@ escala. Si bien los voluntarios guipuzcoanos y navarros al mando
Mildn Leg. 1.224f. 12 J 13. Órdenes al Duque de Alcalá.
y 24 mayo de 1569. AGS, Estado Ndpoles Leg. 1.057 Marqués de Valparaíso y Almirante de Castilla consiguieron inva-
la provincia francesa de Labort en 1636, como ya habían hecho
」ッョアオゥウエセ@ la. infantería. española estaba. representada por 9 Tercios, el siglo XVI24) ocupando varias localidades y quemando San
!:ompuestos por destacamentos de los Tercios de l.ombar- de Luz, a los pocos días la mayoría se volvieron a sus casas, con lo
7 Tercios restantes bisoños creados para la -ocasión.
movilizáción de miles de hombres sirvió de pOC025 •
compañías de veteranos de Flandes, y aunque llegaron
las Azores. Antonio de Escobar, VerdruJera recopilación rk セ@ .El sitio de Fuenterrabfa de 1638 ·confirmó la debilidad del entra-
athólica Magestad del rty don Felipe nuestro selúJr hizo en la defensivo hispano en la frontera de Navarra y Guipúzcoa, poco
Valencia, 1586, pp. 3 Yss. En el ejército que' se formó para combatir de una manera regular-, y formar ejércitos de
Extremadura iban 3.174 veteranos de Sicilla, Nápoles y permanente. De hecho la liberación de la plaza, dos meses des-
a otr0 10.285 españoles la mayoría de los cuajes no teman expe--
r..... セオ]jェャL@
3
Aunque q edaría por saber la experiencia militar previa d.e los 4.210
alemanes que participaron en la operación, en lo relativo a españoles
era veterano de los Tercios de Italia. Serafín Estébanez Calde-
de Portugal, volumen 1, Madrid, 1885. Reedición en:
Obras completas,'volomen n. Madrid, 1955, pp.'7·S.
, demostró las capacidades e incapacidades del sistema hispano.
reunir un ejército para socorrer la- plaza Además, se -intentó alistar a todos los que previamente habían' sido
tiemoo, 。cセQHP@ a los viejos procedllnientos de moviliza- 'soldados, medida que no dio demasiados resultados positivos 30 • El
co ocando a las milicias y a la nobleza, siendo las motivo de traer hombres de tan dispares procedencias no era otro'que
pecialmente las de las provincias vascas y Na- la --carencia de profesionales disponibles en lugares más cercanos, por
aoercibimientos temporales- básicas para formar lo que se tuvo que recurrir a ellos. La -distancia era importante, y el
aportaciones llegaron hombres reunidos por viaje fue costoso para las arcas reales, además de que en muchos casos
de Valencia o Aragón-, nobles voluntarios, lós profesionales debieron ser sustituidos por otros -especialmente
ー。ャQ・イセ@ de hábito. La cruz de la moneda fue la poca per- :105 veteranos sacados de sus posidones en el norte de África-, pero
o formado, ante la carencia de profesionales. ren ese ,momento todo esfuerzo parecía insuficiente, por lo que se hizo
falta de soldados veteranos fue una de las ;a'cualquier preci031 , A comienzos de 1639 se proyectó el ejército que
formadas dentro del Consejo de Guerra para ¡debía haber en Cantabria para esa campaña militar estival, estimán-
ョNセjアオ・@ a la empresa de Fuenterrabía se pudieron- - rdose en 19.700 infantes. De éstos, 8.600 serían soldados profesiona-
wb.idades veteranas extranjeras y nacionales, éstos ·les españoles, la mitad de ellos soldados viejos ウ。セ、ッ@ de diferentes
concreto, dos Tercios de infantería irlandesa セ。イョゥ」ッ・ウ@ y presidios, y de la Armada, siendo lds restantes nuevos
a los puertos cantábricos procedentes del ejér- i;iIedutas. Otros 5.100 serían soldados profesionales italianos, valones e
。、・セ@ de algunas compañías de infantería sacadas de itlandeses traídos de Flandes e Italia. Los 6.000 restantes serían mili-
Reg' iento de Guardia, que junto con algunos,cen- castellanos e hijosdalgo apercibidos para la'guerra. Estas cifras
profes onales fueron despachados con prontitud desde 'can que el ejército que se pensaba formar tendría un impor-
Lataluñ , llegándose a enviar las tropas montadas en ca- componente nacional, ya que sólo el 260/0 eran soldados ,de. Otras
a elerar su venida26 • La obtención de soldados con ·.,.dencias, no ajustándose el nuevo- ejército a las pautas habituales
protesiqnales que compensaran la poca preparación de que combatían en Italia y Flandes. Además, el 300/0 de las fuer-
permanencia y disciplina, fue un problema eran profesionales y no tenían la suficiente preparación militar,
obtener esta-dase de soldados experimentados, -también muy superior a lo que ocurría en Europa32 •
ocasIOÍles se _tuvieron que traer desde muy lejos. -Para _Lra compensar la escasa preparación de los milicianos, se fue jun-
terrabía se hicieron venir varias compañías en Tercios a los veteranos con los bisoños procedentes de las
。sャウセ■ョ@ a la defensa deja Costa de Granada27 , y del ':.para que los profesionales suplieran la ineficacia de las tropas
Corufía2B y cientos ,de veteranos de los presidios del para la ocasión, pero la práctica dejo mucho que desear, ya
Tánger, Ceuta, Larache, La Mámora y Orán29:., ía cosas que no se podían compensar33 • Las milicias deseaban
casa durante el invierno, al.igual que la mayor parte de los hi-
1',' , I NMセ@
se habían, destacado voluntariamente para la operación. El
Mendoza, Sitio y socorro de Fuenterrabia, y sucesos del añi/'di セエッQゥュ。、L・ョ@ la denominada frontera de Cantabria entre 1638-
la· guarnicióh de la plaza al comienzo del sitio p. -1 oセ@ -
íormadp,pp. 150-157.-
en el transporte de las compañías de la Costa de de Ejecución, 31 de julio 1639. Relación de la gente que de diferentes
Contr}duria Mayor de Cuentas 3 a época, [en adelante eMe al ejército, Tolosa, S de julio 1639. AG5, GA; Leg. ,1.257T'1.472.
o de Guerra, 15 de enero 1639. AGS, GA, Leg. 1.255.-
-del Consejo de Guerra, 13 de agosto 1639.
22 de mayo 1639. AGS, GA, Leg. 1.255 Y 1.:261.
carta
del Duque de Ciu-
de Ejecución, 3 de enero 1639. AGS,. GA, Leg.- 1 la Junta de Ejecuéión sobre la gente que ha de tener el ejército de
febrero y 30 de abril 1639. Relaciones del ej -enero 1639.-AGS, GA,_Leg. 1.255.
tiene y la que irá llegando. AGS, GA, Leg. 1.256. セ@ Ejecución, 25 de enero 1639. AG5, GA, Leg. 1.256.
.... Los primeros ejércitos peninsulares y su influencia 31
Antonio José Ro.drlguez Hernández
30
des, a d nde se en iaron la mayor parte de las tropas reclutadas en Maffi (2007), pp, 145-146.
Reláción de la gente conducida para Italia y Flandes en los años 1638 y 1639.
de la infantería que ha pasado a Italia. AG5, GA, Leg. 1.277. Relación de la
que este afio se ha embarcado, para Italia' por la Junta de Coroneles, Madrid, 2
34 Junt de Ejecuci6 .22 de junio 1639. AGS, GA. Leg. 1.256. ,,: ,- .·embre 1639. Gente que dice Pedro de Villa nueva se embarcó para Italia por
35 C del Duque e Nochera. Zaragoza. 15 de octubre 1639. AGS, GA, Leg. ><. セL、・@ la Junta d,e Corondes. AGS, GA, Leg. 1.278 y 1.272. Relación. dda gente
1.261. .,' rua para Italia por la Junta de Coroneles este afio de 1639 hasta 24 de bctu-
·:1
I
paga y so orro ... , Tolos, 4 de octubre 1634. AGS, GA. Leg. 1.261. oC'" adnd, 30 de marzo 1639. AGS, GA, Leg., 1.851. Alcalá:.Zamora y Quelpo
37 Jun de Ejecuci6 .4 de enero 1638. AGS, GA, Leg. QNRUMセ@ .. - o (1975), pp. 412-413. " ' " .
vías ュ・セ」。ョエウ@
naval de Oq
La dimensión 1 ャQjNセiBLG[I|@ y otros 9.000 que fueron en la expedición
reclutaron para co aor en GUlpuzcoa o Cataluna. Esta política tenIa La prueba de estas condiciones fueron los primeros años de la guerra
su lógicf para el gopierno de la ュッョ。イアオ■セ@ que veía más apropiado franco-española en el Principado de Cataluña. Al principio los man-
enviar セp。oャ・ウ@ fuera de la Península a combatir en Flandes y Milán) dos españoles contaron con escasas fuerzas regulares para poder rea-
en don e mejor se セッ、■。Z@ hacer frente a los franceses. Así el ejército de lizar alguna operación. En 1637, ante las repetidas instancias hechas
Flandes e encargabt con mayor efectividad de alejar el peligro trarlces nesde Madrid, y gracias a la llegada al Principado de tropas redutadas
sobre la ¡península, y,a que hasta la época del Cardenal Infante siempre eri Castilla, se formó un apresurado ejército en el que apenas había
fue fácil penetrar e* la frontera francesa y asestar duros golpes á los presencia local, de unos 12.000 infantes y 1.300 jinetes, compuesto
ヲイ。ョ」・ウセL@ llegando セ@ estar muy cerca de París, como ocurrió en 1636, mayoritariamente por bisoños, con el que se intentó tomar la plaza de
hecho ese sector fronterizo francés, a pesar de l.eucata, en el Languedoc, a la que se puso siti048 • Los franceses mo-
fortificaciones modernas; era mucho más sensible ::Vilizaron un ejército de socorro de unos 20.000 hombres compuesto
encontriba más cerca de París. Además el ejército de Flan- 'fundamentalmente· por las milicias de la región y algunós regimientos
que hacer frente a dos enemigos a la estaba r9.inarios, pero sin ninguna unidad de élite, ya que salvo U119 de los
más tropas experimentadas, los pertrechos セュゥ・ョエッウ@ el resto eran de nueva leva49 • Ambos ejércitos se enfren-
ría»y disponerse sobre un sistema militar muy
3
en una trabada batalla la tarde del 28 de septiembre que tuvo
. el que las provincias aportaban dinero46 . y se encargaban セj[オQエ。、ッ@ algo incierto, aunque esa misma nocrhe los españoles se
del aloilúnlento de las tropas durante el invierno, lo que reducía los apresuradamente, .perdiendo más homb:res que los france-
ejército y permitía que los soldados continuasen Ambos ejércitos demostraron improvisación y la misma falta de
セNa⦅@ ........... cuanao las pagas no eran regulares47 • ionalidad de sus hombres, aunque el ejército francés
ntrario, la frontera pirenaica gozaba de distin- con más apoyó local, y luchaba en su territorio, lo que des ni-
exenCIones, siendo m.ás difícil imponer en ella esas cargas balanza.
esa acción la mayor parte de las tropas castellanas, los seis
tos de la nobleza que participaron en la batalla, terminaron
Coronelles,23 de febrero y 14 de marzo 1639. AGS, GA, Leg. 1.258 a Italia, アセ・、。ョッ@ en Cataluña·un puñado de oficiales. De
: de Guerra. 30 de abril 1639. Junta Grande de Estado·y se
comienzos de 1639 había decido que en Cataluña quedara
. AGS, GA, Leg. 1.255 y 1.262. Alcalá-Zamora y Queipo - "iva con una mínima guarnición, deteqllinándose el envío
5 y ss., Saavedra Vázquez (1996), pp. 187 Y ss. 'sus tropas a Italia, sacándose incluso tropas 、・セエゥョ。ウ@ a la
paña dé 1636, por Juan Antonio Vincarc. CODOIN, tomo de sus presidios51 • No es de extrafiar que cuando el ejército
y ss. de campaña a comienzos de junio pudiera, tomar el pe-
dos frentes: Vermeir (2006), p. 143 Y ss.
cOnlíenzo de-la guerra franco-espafiola las orOlvlnclas flamencas
mamener el ejército, compensando así la menor llegada ..
'-
ialmeme desde mediados de la década de 1640: Ver· Huarte (1960), pp. 85-116.
> Parker (1991). pp. 308-312. 1.), pp. 76, 126 Y202.
Conde,.jde Gardez sobre el mantenimiento del Lovaina; 19 (1934), pp. 45-55, Zudaire Huarte (1960), Güel (2008), pp. 87-92.
Estado Flandes, Leg. 2.065. Ejecución; 2 de junio 1639. AGS, GA, Leg. 1.256.
34 I I •. Antonio José Rodrlguez Herndndez Los primeros eJércitos peninsulares y su influencia 35
'1 ,e tení ya 7.500 soldados pagados en el ejército, y que sivas, a raíz de las malas condiciones de los soldados y su falta de mo-
en 「イセC@ ",:",,"Hperab aumentar la cifra hasta los 10.000, entre los que tivación después de varias semanas luchando. También las deserciones
apenas", l.la;Jcaralan ,ya que éstos no deseaban alistarse en el ejército fueron habituales en el ejército real. en los profesionales -la mayor
real, pes
セGᄀウ@ sueld s que se les ofrecían54 • pane de nueva leva-, pero sin duda fueron menos significativas. En
Para セョエイ。・ウ@ el ataque francés, esta vez sí que los naturales el recuento de septiembre, tras un breve pero duro enfrentamiento
, :.: on, y s' o 12 días después de que los franceses pusieran con los franceses, se comprobó que quedaban unqs 3.100 catalanes,
セ@ se habí reunido ya 2.500 catalanes, cifra que aumentó ;pasando a ser 800 los que quedaban movilizados en diciembre. La
con el emp055. pautas de la monarquía para esta ocasión eran de Salses se recuperó tras un duro asedió, capitulando los fran-
、ゥヲ・イョエセL@ ya que 1 s' Consejos de Estado y Guerra decidieron que el 6 de enero de 1640, aunque el coste para la ュッョ。イアセ@ fue
no se esiableciese ] convocatoria general, conscientes de los gastos セーッイエ。ョ・UWN@ Las operaciones realizadas en el principado de Cataluña
que esto! acarrearía la debilitada Hacienda Real, que debería hacerse
cargo dilcoste de imentar y socorrer estos hombres, sino que se
;€Iíllostraban de nuevo que la monarquía no podía valerse de unos
temporales, aunque no costeara la movilización, ya que la ex-
pactara セッョ@ las dife ntes universidades unas aponaciones menores en KMセjNャ|B。L@ permanencia y efectividad de la tropa eran más bien escasas. '
númer01 pero pagaq.as por varios meses 56• Mediante esta vía Cataluña el coste fue cero, éste se pagó poco después con la rebelión, en
ZoセG・コ。@
los catalanes alegaban sus constituciones y aportaciones milita-
también la enorme carga que padecían con los ,alojamientos
" M h Ju=r
cayó por traición
de su gobernador. al que los franceses
habían sOfornádo. sien o ajusticiado por ello. Carta del 23 de julio de 1639. Cartas
otro de los problemas crónicos58 •
de algunqs PP. de la co pañía de Jesús, tomo IlI, en: Memorial Histórico eウー。ッセ@
tomo xvJ Madrid. 186', p. 272.
53 Jun el?: que se vie on las canas del Conde de Sama Coloma de 25, 27 Y28 de ju- busca de nuevos modelos de movilización militar
nio, Ma' 'cL;3:de julio 639.AGS, GA, Leg. 1.255. J. Almirante (1923), pp. 158-160.
54 Jtili セ|Zェ・」オゥV@ , 14 de junio 1639. Relación del estado en que se hallan los el siglo XVI se había consolidado un sistema militar pro-
」。ウエゥャッセ@ セQLiッュ・イ。@
Lセッウ・ャョGy@ c・イ、。セ@ y la gente del ejé:cito que de presente enmarcado en Espafia por los Tercios. Sus soldados eran va-
se halla ,SI ャセpZoL@ 4 de umo 1639. Apuntam1ento sobre el pasaje de la gente que ha de cualquier origen social que pretendían ganarse la vida,
de Ír¡a |セ@ ーセ@ desde オゥセ。@ y Navarra, 18 de junio 1639. AGS, CA, Leg. 1.256.
jオョセ@ \i
TセLZᄀQX@ y 27 e Juito 1639. Carta del Conde de Santa Colorna, Virrey de
c。エャセ£@ lfigtr,eras,20 e julio 1639. Copia de la carta que el Marqués de Vlllafranca
escribió'; セJゥ、・@ de S ta Colorna, 8 de julio 1639. AGS, GA, Leg. 1.257.
(.1999), pp. 328-341, Güel (2008), pp. QVYMWセ@ Serra i Puig'"(1988),
55 Jun セTZ・eェ」オゥ@ ,26 de junio 1639. Carta del Conde de Santa Coloma, Fi-
:1 '
gueras, R、セ@ junio 16 9. Memoria de la gente que ha pasado al Pertus y Perpiñán.
AGS, GA Leg.-¡.256.
(1999), pp. 344 -370. Sobre las quejas, y la propaganda catalana, sobre
1?S (:Copas castellanas y extranjeras en Catalufia: Fraricesc Martí, Noti-
56 Co sejo de Estad y Guerra, 18 de junio 1639. AGS, GA, Leg. 1.256.
de Cataluña, Lisboa, 1641, capítulos 15 y 16.
[ZNセBGM⦅WイL_y}ゥiエPj」@ ..\ェセ[B|]GNウZMwᄀサ」ゥッキコ@ 1: l MセG]ZaBLNiョ|ャ。Aッイukオ」コ[nQ⦅I@ ____セN@ ___ .-:.. •.⦅セNMZ@ ...... _-:.. ______ セ⦅MZN@ __ • ⦅ZセBGL@ __ セZ⦅@ ____ iセl⦅@ •._____ ZNGセ@ GセaNZ@
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36 Antonio José Rodríguez Hernández
Los primeros ejércitos peninsulares y su influencia
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yoría dellos grandes se ajustaron al reclutamiento a cambio de dinero buscar otros sistemas de reclutamiento más baratos y que pudieran
efectivo,; o fundame talmente encabezamientos de rentas sobre sus es- dar resultado a largo plazo.
tados, enajenacion de tierras u otras mercedes68 • En pocos casos los Tras la fallida Unión de Armas (I626), el reino, a través de las
nobles sf hicieron go del coste directo del reclutamiento, debido a Cortes, concedió diferentes servicios voluntarios en soldados al Rey,
que en la mayor p e de los casos no podían sufragar estos gastos ante a través de varias fórmulas que van a durante el valimiento
lo ・ューセ、ッウ@ que taban69 , por lo que fue el rey quien pagó a la aris- del Conde Duque de Olivares, dentro su política de «remilitarizar
tocracia por hacer e intermediaria. Ésta solía reclutar en sus estados セウー。スOTN@ Durante el valimiento de apare€erán nuevas fór-
patrimo .ales, pero ambién en los territorios de realengo. En muchos mulas de actuación que intentarán extender todas las facetas del re-
casos corcertó el re lutamiento con otros intermediarios, asentistas y - セオエ。ュゥ・ョッ@ a las diferentes autoridades locales, ya no sólo la gestión
mercadqres de hom res que se encargaban de cumplir con el número ->Sino también su financiación. Mediante el sistema administrativo las
de hompres pedido a un precio estipulado de antemano70 • Aunque a -lÉOmpañías apenas se completaban, por lo que se debían encontrar
corto pbzo la mo . ción fue elevada, el resultado de este sistema - . vías de reclutamiento. De esta manera, sólo desde 1635-1640
fue sin duda 、・ヲゥ」セョエL@ especialmente en la calidad de los hombres a ver al menos cinco tipos diferentes de levas pedidas por
métodos aplicados por reclutado res sin escrúpulos ;de las autoridades a los diferentes municipios y,corregimientos
débiles a alistarse71 • Hacia 1640 la Junta de "dno de CastilIa75 , que al igual que sus procedimientos reclu-
encargada de este modelo reclutador había perdido - hombres de calidades muy diferentes, aunque en ァ・ョセイ。@ se
como la Junta de Ejecución72 • El sistema de las en una participación más activa de los municipios ye! resto
cッイョNセ■ᄀー・カゥャ@ durante algunos años más73 , aunque se debieron poderes locales a la hora de reclutar hombres. La primera: de
uevas levas propuestas fue.la -de los 18.000 soldados de los
, su.puesta dotación teórica que debían mantener las guar-
CoroneJJjls, 26 de marzo, 9 de abril y 3 de mayo 1635. Mercedes peninsulares y del-norte de África,., peroqbe no se cumplía;
Condelde Oropesa para levantar su coronelía. AGS, GA,
de Villanueva, Madrid, 29 de noviembre 1639. ",r",-.,,,,,,_
enunciada en 1631 pero aprobada con diferentes modifica-
el Condestable de Castilla en 1636, Madrid, 16 no- las Cortes en 1634, creándose' la denominada Junta de
Leg. 1.258 Y 1.278. Facultad al Condestable don Bernar-
para que pueda tomar a censo sobre su casa y señorío, 2 de que esta recluta para los presidios fuera algo efímera,
Histórico Nacional Sección Nobleza (Toledo) [en adelante \;:orta duración y por su rápida transformación en un grava-
274 d.I? .impronta fue especialmente importante al tratarse de una
economías aristocráticas: Yun Casalilla (2002).
Cond($[able de Castilla. 25 de diciembre 1639. AHN, Nobleza,
. reclutas por coacción ordenadas por la Corona, que
a las distjntas ェオイゥウ、」ッョ・セ@ En 1639 se necesitaban
Martínez, Alcaudete, 28 de febrero 1639. AGS, Leg. hombres, cantidad que fue repartida entre las diferen-
castellanas, usando unos parámetros poco claros que
:estuerzo humano entre todos los municipios, no ウゥセョ、ッ@ las
perduraban tres de -las más de 16 coronelías creadas. La
エイ。ョウヲッセュ、@ en Regimiento de Guardia del Rey, que se mantuvd
.... "":
, de 1660, y las de los Marqueses de Aguilar y
1653 debido a la escasa tropa que mantenían. De esta ¡(1990), pp. 251-258.
de Tercio para la infantería española y se eliminaba] ,p. 64.
seno del ejército. Reforma del ejército de Catalufía) número de infantería: que se hallaba en los presidios y fronteras
Juan de Austria, Capitán General del ejército de de Julio de 1640. AGS, GA; Leg. 1.387-
AGS, GA. Libro 210f 168, Y 237f 147v. セQYPIL@ p. 256, Mackay (1999), pp. 46-49 Y 64.
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セイN@
y extendiéndose también por los lugares pasaba de varias semanas, y los peligros parecían ya más lejanos, las
se intentó la recluta de otros 8.042 infantes, deserciones podían empezar a ser masivasB2 •
dイッ「ャセュ。@ fue el incumplimiento' de los cupos, espe- Otro 'gran problema eran los clamores populares a la salida de los
ウセ・「イL@
79
por lo que pronto el sistema cesó • Los milicianos, ya que aunque la ideas iniciales suponían la creación de una
I car eter forzoso debieron empezar en Castilla en milicia formada por voluntarios, lo cierto es que nunca cumplió los
. plantación de esta dotación de presidios y de cupos previstos, por lo que al estallar conflictos bélicos se hizo necesario
modelos no perduraron, y en pocos casos se aumentar los cuerpos de milicias decretando sistemas de reemplazo, apa-
seguidos. Aunque la época del Conde Du- reciendo las primeras quintas83 • Ante la falta de mozqs solteros y gente
conOCIÓ como un tiempo de cambio en cuanto al eesocupada, al final también fue necesario enviar a los casados, por lo
un modelo fijo al cual recurrir para qae la. medida エイ。ウッセ「@ los núcleos familiares, quedap.do pocos sujetos
cesidadlacuclante de hombres, por lo que debieron bus- meentos de se.rvi.J.M. Hubo la posibilidad para los más pudientes de con-
. セM - ウオセエッL@ aunque la· fórmula エ・イュゥセN@ ocasionan,o más problem:as
las milicias fue uno de los puntos más impor- "-r solUCIones, ante el coste para' los partlculares y la poca permanenCIa
tantes de セ。@ política . 'tar en varios momentos de los siglos XVI y ···los suplentes85 • Si al sistema de recluta obligatorio se le sumaba la
XVI180 • Los conflictos generales motivados por la Guerra de los Treinta rmanencia prolongada de varios meses a las campañas militares. año
86
años y las ¡subsiguient rebeliones territoriales extenuaron las arcas del .-añ0 , eso producía un desgaste considerable, además de quejas 87,
rey y sus セェ←イ」ゥエッウN@ esta encrucijada, el monarca intentó que las mi-
licias cast111anas llen an el vado de los ejércitos de campaña,.y defen-
dieran la lntegridad, a no de los diferentes reinos, sino de la Corona. 1654 llegaron quejas de que los milicianos extremeños se marchaban a
Durante セ@ crisis de 1 d,écada de 1640 la Monarquía Hispánica se en- a los 8 días de haber sido enviados a la frontera. Carta del Duque de San
frentó al EOblema d la falta de soldados intentado imponer sobre sus 'Badajoz, 10 de julio 1654. AGS, 1.911.
súbditos órmulas ID ivas no profesionales de colaboración militar, octubre de 1645 se ordenó alistar en a uno de cada cinco hom-
como las .. ciasf sistema barato y fácil de sostener para defender capaces: Villalpando Martínez pp. 327-34l.
territorialess1 • Pero el método no fraguó, del Marqués de Peñalba sobre la salida de las milicias a la frontera de
.. 19 de diciembre 1667. AGS) GA J 2.161. Instrucciones sobre los quin-
bierno intentó que las milicias combatieran en . :milicia, 22 de abril 1652, AGS, GA, 234f 51v.
l1J.ilitares lejos de sus casas, defendiendo territo- para los tres gobiernos de la Frontera con Portugal, 4 de septiembre
propios hogares. El problema es que la milicia GA, Libro 250 f 192.
la defensa, que ·daba muy buenos resultados a buen ejemplo de la salida continua de las milicias son sus listados. Para
tiempo muy limitado. Si la movilización militar de Tordesillas y su partido hay listas desde 1639 a 1654: Archivo
de Valladolid, Concejil, SH- 97 exp. 7.
incluso antes de que las milicias fueran puestas a prueba y llamadas
la compañía de milicias de la villa sevillana de Estepa ・ウエ。「セ@ casi
Don Fernando de Madrid. 1639. AGS, CMe 3d motivo era que durante ese año se la había movilizado paria: acudir
debido a la insurrección del Algarbezportugués. Aunque no habla ・セᆳ
soldados con que sirve el Reino para presidios, 11 de, 'alguno, casi la mitad de los 200 hombres habían desertado debido
GA, Leg. 1.387. pudieran ser embarcados para Brasil en la aイュ。セN@ que se preparaba
formación de milicias en Castilla, desdé 1602 hasta 1 los portugueses. En las indagaciones se conden6 a uno de los
de León, 23 de julio 1644. AGS, GA, Leg. 1.387. al resto a servir obligatoriamente en los presidios africanos y
el siglo XVII: Contreras Gay (1992), pp. WsセQPTL@ (1 económicas. La ciudad suplic6 ser perdonada) ya no solo por lo que
más general para toda la monarquía: Ruiz Ibáñez, para sus paisanos, sino porque muchos se habían ausentado de
lo que se debería de sortear de nuevo entre los vecinos para reponer
...
42 Antonio José Rodríguez Hernández Los primeros ejércitos peninsulares y su influencia
.43
clamor en contra del sistema que suponía el El resultado de la salida de las milicias al frente catalán fue negativo,
gc Clalizado de los cupos. El rey, con su continuo
por lo que rápidamente se vio que el modelo no podía subsistir por sí
ャ。ュイゥᅪセーZL@ ter . ó desbaratando la milicia, 'Y ante la crítica de los
solo -al ser una pesada carga para los ciudadanos-, y no ser 10 sufi-
deserci nes yel rosario de incumplimientos por parte de cientemente encaz, de ahí su rápida transformacióp. en un impuesto.
munticipios final ente determinó la «composición» del servicio de
Con el comienzo la composición -de las milicias, la monarqula
dineroS9 , ue serviría a su vez para contratar profesionales90 ,
ut<tbía intentar obtener hombres para sus ejércitos, preferiblemente
exponente de ql).e nuevamente el soldado ciudadano perdía la profesionales. Aunque éstos fueran más caros de reclutar y mante-
profe ional o el mercenario.
ner, se esperaba que con su calidad compensaran su número, y que
ínilicias case arras comenzaron a ser movilizadas para la guerra
ke mantuvieran en el ejército, Siempre la monarquía intentó seguir
enviándos capitanes y alféreces del ejército profesional para su
fon su modelo habitual de reclutamiento, basado en el soldado pro-
fueron convocadas para socorrer Fuenterrabía y
fesional voluntario, independientemente de la nacionalidad de éste.
cah1pmas sigulientes, movilizándose al menos 8.000 milicianos del
la necesidad de crear varios ejércit0s en la península para luchar
Casril.hl durante 163992, Los años siguientes las áportaciones ]ílimero contra los franceses, y después contra catalanes y portugue-
。オュ・ョセッ@ ョッエ。「ャ・セL@ Para 1646 se esperaba poder contar en Ca-
trastocó definitivamente el sistema.· Con la intensificación. de la
rhilicianos castellanos, reajustándose las aportaciones
en la propia península se necesitaban más hombres. A las levas
"
llevaderas que los años anteriores, al pedirse la
u ..aullales de bisoños se les sumó el reclutamiento de extranjeros, y el
pero lo cierto es que la medida era incluso irreali-
de contingentes veteranos de otros territorios de la monarquía, .
vecindad experimentada en todos los lugares ante la
aumentar así el componente profesional. Pero toda la monarquía
'danos93 , Durante la mayor parte de la década de
en guerra, por 10 que el transvase de hombres de otros ejérci-
de la de 22.000 soldados, en gran medida huyendo a municipios más pequeños, repartiendo la carga e intentado poder
cromweliana98 • Pero la persistencia de estos expatriados captar más hombres. Los corregidores y autoridades municipales,
ante la imposibilidad de reunir voluntarios, debieron hacer frente a
los cupos alistando forzosamente a distintos sectores sociales como los
セ。ァ「オョ、ッウ@ I01
y ociOSOS , forasteros y jornaleros que estaban de paso,
セ・ャゥョ」オエウ@ o a cualquiera que no trastocara el orden de la comu-
hidad.! por lo que esta práctica significó en muchos casos «purgar la
tg'epublica» de gente innecesaria102 • De ahí se entiende las pocas tensio-
'·&tes' generadas por esta clase de reclutamientos, y los pocos disturbios
.; motines asociados directamente a ellos. Casi todos los generados
u'-Jcalmente tendrán que ver no con el reclutamiento de soldados, sino
el de los milicianos, que solían implicar la salida de un mayor
de hombres, la mayoría con cargas familiares, o fundamental-
con la presión fiscap03, el aumento de por el alojamiento
セGᄋBッ。ウャPTL@ o la falta de subsistencias 105 • Este cambio dentro"'del re-
iento hacia métodos de coacción, ante la escasez de voluntarios,
aportaba más soldados, la calidad de los mismos no fue tan
fraguándose el cambio con respecto al soldado noble y gentil-
del siglo XVII06, modificándose la percepciqn de los soldados.
visión se hizo cada vez más peyorativa, al con\rertirse el servicio
más en una carga que en una posibilidad de ascenso social,
lo que tuvo mucho que ver la formación de los primeros ejér-
la Península.
'coacción, unida a la falta de pagas, multiplicó las deserciones
.to de Cataluña, por lo que casi cada año había formar
ejército porque los reclutas no se quedaban. junio de
セ・j[ェ←イ」ゥエッ@ de campaña era muy reducido.! de hecho, tras ajustar
ltia:€i0nes de las guarniciones, solamente se podían movilizar para
emprenJ cualquier fcción hasta 1.660 jinetes, 1.000 desmontados y fraccionaban, cobrando los militares entre la mitad y una cuarta parte
2.880 inffItes para ヲセZュ。イ@ escuadrón. Si bien estas cantidades son de llo
de su sue1do . Las cantidades percibidas eran remitidas en mano di-
soldados aptos y efecfvos, estamos ante un ejército profesional, pero rectamente a los soldados, evitando así los intermediarios y que los
escaso y poco homogéneo, formado por una amalgama de fuerzas. oficiales pudieran quedarse con parte, estableciéndose un vínculo más
Más del . 0% de la Jo tería era de origen extranjero, sobre todo estrecho entre el Rey y sus soldados, evitándose así también que los
。ャ・ュョウセ@ ゥエセ。ョッウI@ alones e irlandeses, aunque la mayor parte de €apitanes cobraran por plazas inexistentes 111 •
オョゥ、セ@ ZLjᄀセエ。「ョ@ entes de personal 107• A lo largo del verano el ,,-' El gran problema de los ejércitos que combatían en suelo peninsular
ejército MjセN@ ; LAセオュ・ョ@ ar, ァセ。」ゥウ@ a ャセ@ llegada de SZXセP@ nuevos solda- era la financiación, por lo que- durante la década de 1660 se ensayará un
dos desq;: セ」ゥャ。L@ C nducldos graCIas a los repartIrnlentos 10B) pero el -nuevo sistema, que a la larga destacará por ser un medio medianamente
ーイッ「ャ・セス@ セL。@ sie o la poca persistencia de los soldados ante la セ」。コ@ para paliar el problema. Este medio era el de los Tercios Provin-
carencii!: d fondos. -áales, concepto que ante la falta de estudios concretos no siempre ha
セ@ Aセ@ ウセイ@ セ@ -"';.,10 bien entendido entre 108- historiadores. La idea surgió por primera
ヲGZセ@ セᄀ@ -hacia 1637, cuando con ese nombre se ゥョエ・。イッセ@ sacar de las·mili-
4. La h"fís,quedat una solución para mantener a los de Castilla cinco Tercios que se denominarían ᆱーゥッカョ」。iセウᄏ@ y ten-
$oldiulós: la セョ@ de los Tércio$ Provinciales 1.211 plazas 'Cada uno, lo cual ascendería a alrededor de laS' dos
partes de los alistados en las milicias1l2• A pesar de la efímera
セ@ pr9blema más important; que afe;tab.a al ejército era la falta ia de estas unidades; la medida será retomada en sucesivos mo-
de dinero, por lo qu aunque SI que habla dinero para reclutar -lo durante la década de 1640, algo que venía al hilo de la crisis del
cobrado セッ」。ャュ・ョエ@ través de la composición de milicias-, pocas lutamienco centralizado, pretendiéndose con ello que las provincias
veces los soldados co raban sus pagas una vez destinados en la fron- un papel más activo en el reclutamiento y en la defensa penin-
tera. eウエセャ@ era un mal difícil de solucionar, pero que todos los ejércitos 'Con ello la .monarquía intentaba delegar la movilización militar
padecían. A comienz s de 1658 el ejército de Extremadura estaba en provincias.y regiones, que a,cambio de distintas contraprestacio-
un estad miserable, a que la tropa había cobrado 3 pagas enteras en セエ・ョ、イ■。@ la obligación de mantener sus Tercios en activo con un
16 meses por lo アセ@ los soldados debían subsistir gracias al pan de mínimo de hombres, teniéndolos,que reclutar y alojar todos los
munició ,109. Los ejér itos recibían dinero, pero cuando éste no era su- La idea era original y positiva, pero en vez de intentar crear
ficiente solía emple :se en pagar la provisión de todo tipo de géneros permanentes compuestas por profesionales, se acudió a las mi-
y ュオョゥ」セZ・ウL@ del p ,los forrajes y caballos, la artillería, las fortifica- 'intentado acercarse a la idea del soldado ciudadano. Mediante
ciones, Jqs}}i9spitales ... y en última instancia, si había suficiente, en parecido durante la década de 1650 se fueron organizando
cJJmi ente a las tropas. Pese a todo, 10 normal es que
-c-
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_...... NGZッ[AャエセBML⦅@
..::. BGZv⦅yONL^lセM ...........,,,,,....-...... ,, ".... . . >'<'_"""\... \'1' ..... セABZGN|IキO@ ....-.j ..FGᄀ\ゥセャョュAエcm@ w_セBGFNャZエ|ゥ[c。@
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セ@
セ@
48 Antonio José Rodríguez Herndndez Los primeros ejércitos peninsulares y su influencia
49
se constituyeron en un servicio que durante los prime- en Extremadura. Tampoco se cuidó de que los soldados que luchaban
egiones debieron aprobar anualmente, negociando en ellos fueran naturales de ese territorio concreto -aunque durante
セLZイ■@ ,con los distintos セ・イゥエッウ@ y 」ゥオ、セN@ La génesis de este los primeros años·se- intentó realizar el イ・」ャオエ。ュゥセョッ@ en los reinos y
cambíQ [セエ。「@ en el memonal entregado en Juho de 1663 por don provincias que les daban nombre-, ni tampoco ウセ@ permitió a las pro-
! 'los Ríos, por aquel entonces Presidente de la Chancillería - vincias nombrar a los mandos. La medida quedó likitada a un cambio
de Gralriada. I
En s memorial, de los Ríos intentaba erradicar los ma- :" formal en el nombre dejas unidades, y sobre .todo al desarrollo de una
les del! ejército, si ndo uno de los más importantes la deserción. La fórmula paralela para financiar_ estos Tercios y pagar mejor. a los solda-
poca permanencia de los soldados se debía a múltiples motivos que セM⦅N@ A partir de ese año se pactó con diferentes ámbitos que a 'cambio
debían: cambiar, ytque el fin principal era que los nuevos soldados ),-.1 1 fin de los reclutamientos obligatorios- y la salida de las milicias, se
persev1raran en su oncio, sin que se perpetuase la picaresca de alistarse :!3jllstarían a entregar el dinero que se daba para la composición de las
continfamente y Í cobrar hasta ir al frente, para luego desertar, o iil!ismas, a modo de servicio, pCJ:ra formar cinco Tercios, que llevarían
que ャッセ@ fugitivos s c,:mvirtieran en un grupo de vagabundos sin patria • nombre Burgos-Valladolid; T.oledo, Madrid, Sevilla.-y Córdoba,
ni ocupación que epresentasen un problema social más al no poder
'este último debía tener la mitad de los efectivos'al ウセイ@ -medio
r
volver sus casas セッイ@ miedo a ser apresados. Las levas obligatorias de- 17. Al año siguiente se formó otro TerCio, el de Portugal, gracias
bían afbar, al igual que debía errarucarse la salida de milicianos, poco
・ョエイセァ。、ッ@ por los po¡rtugueses residentes en Castilla, aunque
eFeccivfs y que o4sionaban muchos gastos y problemas a las comu- la falta' de peculio ,muy- .pronto se debió incluir las aportaciones
ョゥ、。セN@ Se debía intentar que la profesión militar fuera nuevamente 'composición de las milicias de Segovia l18 .
respetada y un sírrlbolo de honor, intentado reunir para ello soldados
-estas unidades se esperaba asegurar un pie fijo ,de :españoles
profesi i nales y de .dad lB.
W\Y"".,,-rcito, con una-dotación permanente y segura de,soldados que
セ@ ケェャZセュッ@ est ban las cosas lo, cierto es que la materia era difícil,
profesionales, sin los inconvenientes de las continuas levas y
auIt9;'$ Z⦅ャセL@ de las laves era_poder ーセ@ puntualmente a los soldados, - de las m·ilicias. Habría menos españoles, pero' éstos serían
algo q G\ヲZ|idセ@ o m os se pudQ consegUIr. La propuesta de Lope de los
selecto, voluntario y de mayor calidad, siempre efectivos y
Rios -g イLセ@ ny.eva 14, y preveía la formación de distintos Tercios que
セオjN。ャ・ウ@ De hecho la estructura de los Tercios era diferente, ya
ウ・イ■セG@ ZB。[pセ・ョゥ、ッウ@ _y.reclutados todos los años por las provincias, de
[SU misma formación se advenía la entrada -de un contingente
entrés セ@ ⦅[セ。エオイQ・ウ@ La propuesta dio el marco teórico ll 5, aunque éste
-ya que éstos estaban, compuestos por -el cpadro de oficiales
se tran foJmó • _ final no se formaron nuevos Tercios, sino que se
1l6
ternos, unas 87 plazas, y además por Xセo@ soldados y 150
cambi de nombr a distintas unidades ya formadas y que combatían
J9, dándose así, una mayor veteranía a la unidad. El gasto
セウオー・エ。、ッ@ para el mantenimiento de t@do el Tercio por un
I su reclutamiento y vestuario, era de 121.292 escudos
Copia del Me orial de Don Lope de Ríos, 31 de julio 1663, incluido en la
ll3
Consult! del Consejo e Guerra del 24 de agosto 1663. AGS, GA, Leg. 2.029.
. 114 J nra del Cons jo de -Guerra sobre la forma de ajustar la dotación de los
Tercios pañol es por einos y provincias, 14 de septiembre 1663. AGS, GA, Leg.
2.029. __ セ@ ___ a Don Francisco de Fdoaga, Presidente de la Chancillería de Va-
octubre. AGS, GA, Leg. 2.046.
E te marco teó ico ha hecho creer que los Tercios Provinciales estaban com-
115
wuJvIarqués de Trocifal conforme a la creación de un nuevo Tercio Pro-
puestos or miliciano o .que en ellos hubiera una mayor presencia regional, cuando
efe,octubre 1664. Negociaciones con la Sargentía Mayor de Segovia, 13
la evolu ión de los ac ntecÍmientos realmente no fue así. Contreras Gay HRPS。AIセ@ -AGS, GA, Libro 281 !-54 y 211.
(2003b)
116 nsultas del <j:onsejo de Guerra, 20 y 24 de agosto 1663. Carta de que- han perdido su puesto por haberse suprimido su antigua uni-
Juan de ¡Austria, 25 agpsto de 1663. AGS, GA, Leg. 2.029. sirviendo como soldados, recibiendo además de la paga como
セ・ョッNウ@ la mirad de su sueldo anterior.
¡
50
. Antonio José Rodríguez Hernández los primeros ejércitos peninsulares y su influencia
51
de velló.Q.120. Teruen10 en cuenta que en 1663 se preveía un gasto de Tercios, dos de 1.000 hombres en Nápoles, otros dos con esa misma
8.401.7' 2 escudos e vellón para el ejército de Extremadura, aunque tantidad en Sicilia y Milán, yel último de 500 en Cerdefía, unidades
no todoIse cobraba, esto suponía que cerca de un 10% de los fondos fijas que no sólo se debían reclutar, sino también financiar por esos
totales np ー。ウ「ョセイ@ las consignaciones generales enviadas a la paga- brismos reinos, pero nada se consiguió 124•
duría 、セ・ェ←イ」ゥエッQRN@ ti:., Los cuatro Tercios Provinciales creados en 1663 se van a constituir
Al al no se tó de un método de regionalización de 'la guerra o '1Wmo la columna venebral de la defensa' peninsular durante todo el
、セ@ desee trali.zar el ヲ」ャオエ。ュゥ・ョッセ@ sino セ@ ra:
bien de. un sistema más セ←^■ヲゥョ。、ッ@ de Carlos II, ya que serán los Úóicos cuerpos profesionales que
clOnal p r pagar a セ@ tropas. Las comurudades terrnmaron pagando casI セイュ。ョ・」£@ en activo durante todo el periodo, gracias a la gestión eI1
lo mismp> pero aho sus contribuciones eran destinadas directamente a 125
pagas • A lo largo de la contienda que pretendía recuperar Cata-
pagar セ@ Tercio que as.representaba, sacando éstas distintos beneficios de LNセ@ (1640-1659) se crearon multitud de Tercios, pero ninguno de ellos
ello, aunhue el recluduniento y la formación de los oficiales quedó en ma- Gpciセオイ。£@ en el Principado durante el reinado de Carlos n. Los contin-
determinó que no se mantuviera ninguna adscrip-
veteranos de infantería sobre los que debió articularse su defensa
. y la región que lo mantenía, ni los oficiales ni
el último tercio del siglo XVII serán estos Tercios,., qll:e tras el
clutabap. en ella, lo que en cierta manera garantizó el éxito y
la contienda portuguesa terminarán acantonados en los lugares
lS udidades militares, ya que las oligarquías locales no pu-
lJeliQ:rosos, ya partir de la década de 1670 se enviaran a combatÁr a
el dinero para los sueldos de las tropas estos
Esta reforma militar va a ser ya que proporcionaba
general de la monarquía, sino que se enviaba
t:Henfnsula un pequeño cuerpo sobre el que articular su
セ
。ァ、ッイ・ウ@ de estas unidades' para que éstos se en-
Este quedó mejor asistido) siendo eqterarnep.te profesional y
cargaraq. 」ゥェNイセ。ュ・@ te de acudir a las necesidades de los soIdados 122•
por voluntarios alistados pór los capitanes siguiendo la fór-
lio territorio quedó al margen de los Tercios Pro-
ltJttadicional. Al centralizarse el nombramiento de los oficiales por
nnal de la contienda luso-española se pudo reor-
o de guerra, éste no quedó en manos de las élites regionales,
udendo la carga económica de la composición LセNAァオイ@ una mayor profesionalizaci6n de los mandos.
QLNBGセ@ -Y'fext ndiendo la manutención de los Tercios Provincia-
geogr a castellana. Aunque también se intentó implantar
el sistelf:a 'en Can .as, Navarra, la Corona de Aragón' o Italia, las me-
-Motlerno·y movilizaeión militar; el caso de Castilla
didas セ@ tuvieron éxito esperado. La propuesta no dejaba de ser un
servido voluntario, de ahí que la negociación fuera básica para ello, ,y
""U\)U uLdón del Estado Moderno fue un proceso largo y com-
que los einos y pr incias pudieran negarse ,a concederlo, como hicie-
comienza en el siglo XVI y que culminará en el siglo XVIII.
ron, 'Ya ue en ellas noexistíanJórmulas parecidas a la ,composición de
ici que había n Castilla123 • En Italia se esperaban formar cinco
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Antonio José Rodríguez Hernández Los primeros ejércitos peninsulares y su influencia 53
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rontinuo quebradero de cabeza de cualquier gobierno de la Edad Mo-
セMBG[ッ\@ la gran etapa bisagra es el siglo XVII. Aunque
derna, ya que todo Estado necesita ante todo soldados para hacer la
Moderno fue una evolución constante hacia el
guerra. En los primeros momentos en vez de aplicar la coac-
del rey y la centralizacién, no parece que este
ef@n intensiva, optó por la extensión peticiones a losámbit(i)s tra-
los países, y posiblemente la evolución
diriionales que habían aportado tropas en el Medievo. En las décadas
セ
cィッウ@ han teorizado sobre la guerra y la formación
セョエイ。ャ・ウ@ del siglo XVII las necesidades se tradujeron en toda
eウエ。NTアᄀ\セャQッ、・@ o" siendo uno de los primeros Max Weber, que serie de peticiones a nobles, el clero y fUndamentalmente a las
trecho vínculo entre la construcción del Estado
y territorios para conseguir más dinero y hqmbres. Esta cola-
-ctiv dad de los grandes ejércitos; la cual reforzó las es-
na fue gratuita. Así se dieron atribuciones qe carácter militar
a inistración central126 • Para Charles Tilly la guerra
mediadores locales de las ciudades;10s cuales empezaron. a 。」セオイ@
de los Estados, que se forman por la acción
127 redutadores directos a cambio de aumentar su poder sobre.la
adquirir medios para la guerra • El contra-
131. Las elites fueron recompensadas en las provincias)' €Íu.:.
, estas エ・oセャ@ que ven la guerra como el elemento significativo con ascensos políticos y premios honoríficos en gratificación a
el セウオイァゥュ・ョエ@ de muchos estados son: las surgidas para el caso róbación de nuevos servicios económicos y reclutadores l32 •
・ウー。ッセ@ siendo o de los primeros que las postularon el profesor el plano militar esta política salía algo cara, ya que los reinos,
tィッュセZNウョQRGL@ que poléroicamenre defiende la reoIla contraria, afir- y ciudades reclamaban el nombramiento de sus propios ofi-
mando! que la gue ra agotó a España y fue la causa directa de que través de las patentes en blanco, lo que a veces resquebrajaba el
tuviera ¡que recurrir a otrOS medios para continuar con la guerra. Una !!Obierno del ejército, al darse el mando de compañías a sujet0s
eウp。セᄀ@ en la que sd establece una refeudalizadón Y en la que los pode- セョM」ゥ。@ militar, pero que eran hijos de regidores o diputados.
res lo es y las ditb de municipios, provincias y reinos se hacen con
perdía la capacidad de nombrar a sus oficiales; además de
nue;as. arcelas 、・セッイL@ al, convertirse en los intermediarios entre los no siempre daba los resultados esperados ante la mala
129
terntorfos y la roo arquía , . :" los redutados133• El sistema era solo un recurso a corto plazo
EviU-entemente la construcción del, Estado Moderno no se pro';'
que durante el siglo XVII se fue convirtiendo en perió-
i la misma ljIlanera en toda Europa, y sin duda el caso español
momento de apuro militar, lo: que fue limitando sus re-
la Monarquía Hispánica se consolidó durante
las peticiones ajas provincias.vascas,.Asturias olas Cuatro
potencia mundial, y la primera que 'consoli
1111uderno, teniendo el primer ejército ー・イュ。ョエセ@
serán cada' vez .más esporádicas a partir"ue mediados de
las cosas fueron cambiando ante su 。ァッエュゥ・ョセ@ 1670, y aunque vuelvan a aparecer momentáneamente a
30. Una faceta que focaliza muy bien lo ocurrid
de los Nueve Afios, el sistema no continuara,' Uegán-
otro tipo de contribuciones mucho más ッ「ャゥァ。セアイウ@
セッウ@ modelos y métodos de movilización mili
... .L ....... :"'"to y el mantenimiento de los ejércitos fue
las Cuarro V1IIás de Costa, que.'aunque respetaban lis
セヲ・ョウゥカ。G@ de "las zonas costeras, ゥューッョ、イセB@ y generaliza-
Mamientos. obligatorios en. estos territorios1t'34• .Las ciudades
1). .351-.361.
tantO, no tUVO necesariamente un efecto 」・ョエイ。ャゥコセ@
t.·murciano: Muñoz Rodríguez (2003a);pp. 969-993, (2003b).
oosible"lque impidiera el desarrollo del Estado tanto corno lo tomadas a los soldados de Écija. Málaga, 29 de marzo 1692.
。ァッエセュゥ・ョL@ y la disminución de la rentabilidad, pese al. セエョ£、・コ@ (2007d), en capítulo VI.
:'
ュ・セイャエ@
debleron anular 11
extendi? イ・」ャオセ。ュゥョエッ@
ordenes ante el agotamIento de los pueblos1 51 . Esta
obligatorio por territorios. que antes
セエ。」ゥョ@ de la guerra. To.do esto hace que durante el siglo XVII
odamos observar avances y retrocesos en la formación ·del
4Moderno, los cuales van desdeJa coerción generalizada hasta el
hablan mantenld ampho grado de autonomía y autogestlón, como
la negociación, entre la administración directa, y los asien-
aウエオイゥセ@ o las Cu tro Villas de Costa. El motivo era la _necesidad, ya
......セ@ \セウエッ@ avances y retrocesos dependerán. de la evolución de la
1
y de las necesidades momentáneas, siendo 10 más im-
146 セョエイ・@ ェオョセ@
y jWio de 1648 se pidieron 2.870 soldados a 29 ゥオイウ、」ッセ@ supervivencia de la monarquía a cualquier precio. En este
castellJas diferentes ara acudir al socorro de Tortosa, solapándose Já-,"C-omparación con Francia se hace sumamente"interesante.
ciones sin llegar a omprender toda la geografía castdlana. En 1676 se ーゥ、・エ「Nセ@ que tras los intentos fallidos de Olivares por imponer
6.1 oセ@ ombres, pata atalufia: Italia, repartidos en Gセッャ@ 8 ェオセゥウ」ッョ・@ 「。ウエイゥセ@ [Pparticipación militar, España se viera obligada a to.mar la
amplIas) efectuandose una política más cabal y centrahzada: PetlClOnes para el
rro de Tortosa, junio julio de 1649. AGS, GA, Libro 209 f. 21 Y ss. Orden Real"
セP」ゥ。、ョ@ pata obtener más recursos, ante el miedo a n-ue-
de ヲ・「イセッ@ 1676. Pla ta para las levas universales, 2 de enero 1676. AGS, GA, 'como las surgidas durante la década de 1640 debido
2.369 vi 2.3.67 . militares. Solo. en la fase final del siglo XVII los
blecimiento de las milicias, 22 、セ@ セ。イコッ@ 1692. AGS, harán que la coacción aumente gracias al. mayor
ejerCIdo por los representantes del rey en los territorios,
.o de Guerra, 26 de noviembre 1694. Carta del Goh
las élites locales. En cambio, la Francia de Luis XIV
28 de noviembre 1693. AGS, GA, Leg. 2.949. y 2
realizp.ción de los listados, Burgos, 8 de agosto 1693. Archivo opuesto y unidireccional, con escasos retrocesos, im-
Sección Conceji4 Leg. 109. . mol53 y nuevas cargas sobre la, población, usando
el reclutamiento del 2% de las vecindades, Madrid,
Leg.2.967. , I
:1
padrones efectuados: AGS, GA, Leg. 2.934. (2007). -!
de Bustamame, Madrid 23 de febrero 1697. AGS, .
la movilización militar, los franceses tuvieron los mismos pro-
icッイ・セゥ、@ de Jaén, 14 de marzo 1697. AGS, GA, Leg.
primeros ejércitos para luchar contra España, pero con el
- $US
58
.. Antbnío José Rodrlguez Hernández los primeros ejércitos peninsulares y su influencia
59
la poH,:
eセL@
"" ....,"
Hセッ@
ti.,
.., m . ャセ@
;i.Aijército, ara controlar rebeliones y para asegurarse que
accedí a-las nuevas demandas 154•
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