Nombre del alumno: Jocelyne Cristal Lara Pitones 143105

La importancia de la avicultura
La avicultura, la cría y crianza de aves domésticas para la obtención de carne, huevos y otros
productos, es una actividad económica de vital importancia en el mundo actual. Esta industria
ha experimentado un crecimiento constante en las últimas décadas debido a su papel
fundamental en la seguridad alimentaria, la economía global y la sostenibilidad ambiental. En
este ensayo, exploraremos las diversas dimensiones de la importancia de la avicultura,
destacando su contribución a la alimentación, la economía y la conservación de recursos
naturales.
La avicultura desempeña un papel esencial en la alimentación mundial al proporcionar una
fuente accesible y económica de proteínas animales como lo son el huevo, carne, plumas,
harinas de pollo, etc. El consumo de carne de aves de corral ha aumentado considerablemente
en comparación con otras carnes debido a su bajo contenido de grasa, alta cantidad de
proteínas y por su puesto su accesible precio. Además, la producción de huevos es una fuente
valiosa de nutrientes, vitaminas y minerales para la dieta humana. En un mundo en constante
crecimiento demográfico, la avicultura juega un papel crucial en la lucha contra la desnutrición y
el hambre al proporcionar alimentos nutritivos y accesibles a poblaciones cada vez mayores, la
avicultura se ve como una solución eficiente y efectiva para abordar los desafíos de la creciente
demanda de alimentos en el mundo pues la producción de carne de aves de corral y huevos se
caracteriza por su alta tasa de conversión alimentaria, lo que significa que las aves pueden
convertir el alimento en proteína de manera más eficiente que otros animales de granja. Esto
resulta en una menor necesidad de recursos para obtener la misma cantidad de alimento, lo
que es fundamental en la búsqueda de sistemas alimentarios sostenibles.
Desde una perspectiva económica, la avicultura tiene un impacto significativo en la generación
de empleo y el crecimiento económico. La industria avícola crea empleos directos e indirectos
en áreas como la cría, el procesamiento, la distribución y la comercialización. Además, la
exportación de productos avícolas genera ingresos significativos para los países productores, lo
que contribuye a la estabilidad económica y al equilibrio de la balanza comercial. La avicultura
también impulsa la innovación tecnológica y el desarrollo de prácticas más eficientes, lo que a
su vez estimula la inversión en la industria agroalimentaria.
Los adelantos en los métodos de reproducción han dado lugar a aves que responden a fines
especializados y son cada vez más productivas, aunque requieren su gestión por parte de
expertos. El desarrollo y la transferencia de las tecnologías de alimentación, sacrificio y
elaboración han mejorado la inocuidad y la eficiencia, pero favorecen a las unidades de gran
escala, en detrimento de los pequeños productores. Esta evolución ha hecho que la industria
avícola y la industria de alimentos concentrados aumenten rápidamente de tamaño, que se
concentren en torno a las fuentes de insumos o los mercados finales y se integren
verticalmente. Un factor de cambio estructural ha sido el paso a la producción contractual en la
fase de cría de los pollos de engorde, lo que ha permitido a los productores de tamaño medio
acceder a una tecnología avanzada con una inversión inicial relativamente reducida. (Mendoza
Vilchis & Peña Romero, 2013)
La avicultura también desempeña un papel crucial en la sostenibilidad ambiental. A medida que
la conciencia sobre los impactos ambientales de la producción animal aumenta, la avicultura se
ha adaptado para reducir su huella ecológica. En comparación con la ganadería tradicional, la
producción avícola emite menos gases de efecto invernadero y consume menos recursos
naturales, como agua y tierra. Además, la crianza de aves puede ser más eficiente en términos
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de conversión alimentaria, lo que significa que se necesita menos alimento para producir la
misma cantidad de proteína animal en comparación con otras fuentes.
Según un informe del Instituto Latinoamericano del Huevo (2014), la avicultura es la segunda
fuente de proteína animal menos contaminante después de la pesca. Para producir 1 kg de
proteína de carne de ave sólo se producen 3,5 kg de CO2 mientras que, para producir 1 kg de
carne porcina, vacuna u ovina, se producirían 6, 43 y 51 kg de CO2 , respectivamente. También
es la segunda práctica, luego de la pesca, que consume menos agua y tierra, dos recursos de
alta demanda y cada vez menor disponibilidad. Datos de la Agencia de Protección Ambiental de
Estados Unidos indican que la agricultura y los bosques aportarían un 50% de todos los GEI
producidos; únicamente un 6,9% provendría directamente de sistemas de producción animal.
De esta proporción, a su vez, la avicultura produciría menos del 10%, sin contar lo generado por
la producción de alimentos para el sector. Se sabe que la cadena total de abastecimiento del
sector avícola representa el 80% de la demanda total de energía para su producción,
representando esto solamente un 4% del total de emisiones de GEI (CINCAP, 2017)
Sin embargo, es importante reconocer los desafíos asociados con la avicultura y abordarlos de
manera sostenible. La bioseguridad, la salud animal y la gestión de residuos son cuestiones
críticas que deben ser abordadas de manera rigurosa para prevenir brotes de enfermedades y
minimizar los impactos ambientales negativos, así como vimos en clase, la importancia del
bienestar animal ha desarrollado que dichas empresas manejen aves de piso. (Simplemente se
les garantiza una zona de pastoreo limpia, libre de suciedad o materiales extraños. Este tipo de
sistema garantiza las libertades y el bienestar animal de las aves, permitiendo su
comportamiento natural. Una de sus ventajas destacables está en una mejor percepción del
público que adquiere estos productos.
Por otro lado, requiere de poca mano de obra debido a la baja infraestructura presente en el
sistema. Sumado a esto, el costo de alimentación también se considera mejor ya que las aves
ingieren alimentos del ambiente. Sin embargo, esto debe analizarse cuidadosamente porque
este tipo de alimentación puede predisponer a la aparición de enfermedades como la
Coccidiosis o helmintos.)

En conclusión, la avicultura desempeña un papel esencial en la alimentación, la economía y la

sostenibilidad ambiental a nivel global. Su contribución a la seguridad alimentaria, la generación
de empleo y el uso eficiente de recursos la convierte en una industria invaluable en el panorama
actual. Sin embargo, es crucial abordar los desafíos asociados y promover prácticas
responsables para garantizar que la avicultura continúe siendo una fuente vital de alimentos y
recursos en el futuro.

Bibliografía
CINCAP, G. (julio de 2017). Centro de informacion nutrional de la carne de pollo.

Mendoza Vilchis, R., & Peña Romero, A. H. (junio de 2013). Zootecnia de Aves. Obtenido de universidad
autonoma del estado de mexico.