Hombre Imparable

Hombre Imparable
Índice
Introducción ...................................................................................................................................... 1
Lo Que Tú Y Yo… Y Todos Quieren:
Ir De A Hacia B ................................................................................................................................ 9
El Poder Que Está En Ti ........................................................................................................... 24
Primera Fuerza: Pasión ............................................................................................................31
Segunda Fuerza: Oportunidad ........................................................................................ 45
Tercera Fuerza: Decisión ...................................................................................................... 69
Cuarta Fuerza: Energía .......................................................................................................... 99
Quinta Fuerza: Recursos ...................................................................................................... 123
Sexta Fuerza: Creencias ..................................................................................................... 146
Séptima Fuerza: Acción .......................................................................................................167
Tú Puedes ........................................................................................................................................ 181
Cinco Retos Para Vivir Plenamente .......................................................................... 186

Hombre Imparable
Introducción
Muchos hombres se sienten perdedores y débiles… y no está

bien.
Y no lo está porque esos hombres pueden ser mucho más de

lo que son. No está bien, porque todo ese potencial se va por
el caño. No está bien porque se hacen daño a sí mismo, da-
ñan a sus familias, amigos, pareja… dañan al mundo.
La debilidad es miedo, miedo de afrontar la vida, miedo de ser

lo que quieren, miedo de explorar su potencial. Si dejas de huir
y te enfrentas al sufrimiento de forma voluntaria y consciente
1 HombreDisruptivo.com
Hombre Imparable
te darás cuenta que eres mucho más fuerte de lo que crees.

Porque sólo podrás conocer tus límites cuando intentas su-
perarlos.
La vida no es fácil, nunca lo ha sido, ni lo será.
La vida es tan dura como la puedes imaginar, pero tú puedes

ser más fuerte de lo que piensas.
Es como si dentro de ti habitará una bestia que persigue algo

mucho más grande, algo mucho más significativo, algo que
busca más que la simple comodidad o conformismo, algo
que hace que tu resiliencia y fuerza aumenten y sean tus re-
cursos principales para luchar contra la catástrofe y desilu-
sión de la existencia sin amargarse.
La vida es dura, pero tú puedes ser tan magníficamente duro

para no solo superar eso, sino también para mejorar.
La única forma de sobrepasar todo lo que se atraviese en tu

camino, es creciendo y siendo más grande.
Es igual a decir: “esto es terrible, pero estoy preparado para

enfrentarlo”.
Muchos hombres no son conscientes de esto. No son cons-

ciente de que están armados para enfrentar todo aquello que
Hombre Imparable
aparezca en su camino. No son conscientes que son más

fuertes que las cosas más terribles de este mundo.
Hay cosas terribles, demasiadas, pero eso sólo significa que

nosotros podemos ser mucho más fuertes.
Y no, no es optimismo ingenuo, es algo más.
Cuando eres puesto a prueba, dentro de ti se despierta esa

bestia que no deja que te rindas, que busca dar un golpe más,
que siempre buscará que ganes.
Hay una batalla en nuestro interior que busca quebrarnos.
Creer que eres una víctima en cierto modo tiene sentido, la

naturaleza te inspira, pero también conspira en tu contra. La
sociedad te condena, pero también te respalda. Tu mente
juega en tu contra, pero también te ayuda a lograr las más
grande proezas.
Sólo te convertirás en una víctima si dejas que estas fuerzas

negativas te rompan. Y lo harán si no tomas la responsabili-
dad sobre tu vida y si sigues atribuyendo tus resultados a lo
injusto que es el destino. Lo harán si sigues creyendo que los
demás tienen la culpa y tú no tienes nada de poder sobre tu
vida.
Hombre Imparable
La idea de que tus problemas deberían ser resuelto por otros,

que es injusto que sufras por culpa de los demás, es muy
atractiva. No tienes que tomar ninguna acción, no tienes que
hacer nada al respecto, tan solo quejarte lo suficiente como
para que alguien te escuche.
Lo irónico es que aquello que te quejas es el camino. El obs-

táculo es el camino. Quizá aquello de lo que te quejas sea ex-
tremadamente difícil de resolver, pero quizá tú también estés
extremadamente preparado para afrontarlo.
La abrumadora mayoría de hombres no hacen este trabajo

porque no se siente bien, porque sienten que eso no los hace
felices, porque han creído que la comodidad y placer inme-
diato es igual a felicidad.
Cuando te orientas hacia algo mucho más profundo, cuando

tomas la responsabilidad sobre la vida, sobre tu familia, in-
cluso sobre tu comunidad, encuentras un nuevo significa de
felicidad. Uno que puede ser sostenible en tu vida.
Solo podrás tomar el control de tu vida, dominar tu camino y

destruir tu debilidad cuando abraces tu bestia interior.
¿Cómo lo haces?
Hombre Imparable
Dominando las ideas y estrategias que encontrarás en este

libro. Dominando las 7 fuerzas que hacen que un hombre se
forje a sí mismo, haga, tenga y sea lo que siempre ha querido.
Hemos vivido adormecidos por mucho tiempo, con continuos

mensajes al estilo de: “no te ilusiones”, “aspira bajo y nunca
saldrás decepcionado”, “no todos pueden lograrlo”, “aférrate
a lo seguro”, “no tomes riesgos estúpidos”.
Desde pequeños se nos instruye que crecer implica muchas

enseñanzas: caminar, leer, escribir, sumar, restar y memorizar
fechas históricas; pero una de las cosas que nunca se no en-
señó de forma directa y que, paradójicamente, buscamos
toda nuestra vida es ser felices y exitosos.
¿Por qué no solo felices? ¿Por qué no solo exitosos?
Porque, el éxito y felicidad, felicidad y éxito, no son excluyen-

tes. De hecho, uno no funciona sin el otro.
Está claro que la definición de éxito se hace cada vez más

compleja. Décadas atrás el éxito podía significa tener una
casa, un trabajo bien pagado y vacaciones una vez al año.
Las cosas ahora ya no son tan simples.
Hombre Imparable
Cambios acelerados. Una globalización establecida. Exigen-

cias cada vez mayores. Factores que hacen de éste un
tiempo diferente.
Se dice que estamos en la era de la información. Pero la in-

formación por sí misma no aporta nada a tu vida, es solo a
través de la aplicación inteligente de esa información, que
ésta se vuelve valiosa. Creo que estamos pasando a la era de
la sabiduría, ya que como lo verás a lo largo de estas páginas
la sabiduría es procesar la información, simplificarla y hacerla
de rápida aplicación para aumentar tu capacidad para crear
y disfrutar tu éxito y tu felicidad.
El conocimiento total de la humanidad se duplica cada dos o

tres años y este lapso se está acortando continuamente. Con
la creciente facilidad que tenemos todos para consumir y
crear información, nos estamos ahogando en ella.
Necesitamos cada vez más respuestas simples y de inme-

diata aplicación para resolver satisfactoriamente nuestros
crecientes retos cotidianos.
Y uno de los mayores retos es cómo ser realmente exitoso y

feliz. Cómo disfrutar el logro de nuestros deseos más profun-
dos, mientras mantenemos un balance duradero entre las
cosas que realmente son importantes para nosotros.
Hombre Imparable
Cuando se habla de éxito, no basta con saber lo que se

quiere. También saber qué es lo que hay que hacer para lo-
grar un resultado determinado es necesario. Sabemos que,
para lograr mejores resultados, necesitamos ejecutar mejo-
res acciones. Acciones que nos llevarán a resultados más óp-
timos, productivos y rentables.
Sin embargo, ¿cuántas veces se mantiene la brecha entre el

saber y el hacer? ¿Cuántas veces declaras que cambiarás,
pero la acción no sigue al deseo de mejorar?
Hace falta algo más. Algo que impulse la acción eficaz y per-
mita traducir la intención en aplicación.
Necesitamos desarrollar esa habilidad que transforma de-

seos en acciones y acciones en resultados. Eso es lo que
aprenderás aquí. Esa capacidad para superar nuestras excu-
sas, limitaciones y obstáculos. Esa capacidad para ponernos
en movimiento, generar resultados y conquistar objetivos.
Sin acción no hay aprendizaje. Sin ejecución no hay transfor-

mación.
Ahora, tienes la oportunidad de utilizar este libro de dos for-

mas:
Hombre Imparable
1. Lo lees como una simple novela, algo para diver-

tirte, para entretenerte o, como hace la gran ma-
yoría, para sentirte bien por un momento,
2. Tomarlo como la guía para lograr cambios sen-
cillos pero muy poderosos en tu vida.
Así que, ¿cuánto provecho le sacarás a este libro? ¿Será tu

nuevo aliado en tu camino como hombre? ¿O sólo será uno
más de esos libros que acumulan polvo en tu biblioteca u
ocupan espacio en tu teléfono o computadora?
Espero que no, porque aquí va a descubrir un poder maravi-

lloso. Un poder que yace en ti. Un poder para lograr lo que
quieras.
Hombre Imparable
Lo que tú y yo… y todos
quieren: ir de A hacia B
La vida en muchos niveles es simple. Todos queremos ir de un

punto A hacia un punto B. De lo que tenemos a lo que quere-
mos tener. De lo que hacemos a lo que queremos hacer. De
quiénes somos a quiénes queremos ser.
 De ser fumador a no depender del cigarrillo y tener

gran vitalidad.
 De tener 10 kilos demás a verte atractivo y sentirte

bien contigo mismo.
Hombre Imparable
 De no tener una casa propia a vivir en la casa de tus

sueños.
 De estar sumergido en deudas a ser libre financiera-

mente.
 De sentirte solo a compartir la vida con quienes

amas.
 De ser empleado a ser dueño de tu propio negocio.
 De sentirte perdido y sin rumbo en la vida a caminar

por el camino elegido hacia un propósito.
Estamos constantemente en un proceso sin fin, de pasar de

un punto A hasta un punto B. Puedes llamarlo una meta, un
sueño, un objetivo o un deseo, pero siempre se trata de ir del
lugar en el que estamos a un lugar al que queremos llegar.
¿Cuáles son tus puntos B?
¿Te ha preguntado qué hay entre donde estás ahora (punto

A) y aquello que quieres ser, hacer o tener (varios puntos B)?
Al hacerte esta pregunta, comienzas a emplear una estrate-

gia básica para lograr tus metas: identificas brechas entre A
y B, y mejor aún buscas cómo cerrar esas brechas.
A ↔ brecha ↔ B
Hombre Imparable
Si lo analizas con detenimiento, las cosas son simples:
1. Primero clarificas dónde quieres llegar (punto B).
2. Segundo, identificas dónde te encuentras (punto

A).
3. Tercero, reconoces que hay trabajo por hacer, co-

nocimiento por adquirir o habilidades por afinar
(brechas entre A y B)
4. Cuarto, te pones en acción para cerrar la brecha.
Lo sé, suena tan sencillo y estúpidamente fácil, que nos pre-

guntamos: ¿por qué hay tantos hombres que no pueden lo-
grarlo? ¿Por qué se quedan atorados o atrapados en el
mismo lugar?
¿Por qué diablos siguen en el mismo lugar?
Porque no tenemos claro lo que queremos: afirmar “quiero

más dinero”, “quiero mejorar mi salud” o “quiero mejorar mi
relación de pareja”, no es claro. Es un deseo, estéril y sin ma-
yor impacto en tu vida.
No analizamos dónde nos encontramos hoy: nos tragamos

nuestros propios engaños creyendo que la situación no es
tan grave como parece.
Hombre Imparable
No hacemos un análisis honesto de nuestras brechas: cree-

mos que el éxito es cuestión de suerte, destino o una oportu-
nidad (de esas que solo aparecen una vez en tu vida).
No nos ponemos en acción: por ilógico que parezca quere-

mos lograr nuestras metas, pero no nos movemos. No move-
mos ni un dedo o lo hacemos con tan poca efectividad, que
nada sucede.
La tensión creativa: la forma en cómo

lidiamos con nuestras metas
Comparar lo que queremos ser, hacer o tener, y lo que hoy

somos, hacemos o tenemos, provoca que surjan diversas
emociones. Las más comunes: frustración e incomodidad.
Plantearnos una meta provoca que nuestra mente quiera re-

solver la situación, encontrar las posibles soluciones y cerrar
esas brechas.
Esto es algo que Robert Fritz, autor del libro The Path of Least
Resistance llama “tensión creativa”.
Cuando estableces un punto A y B, tu mente crea una tensión

por la diferencia que existe entre esas dos realidades. Se pone
a trabajar para eliminar esa frustración e incomodidad.
Hombre Imparable
Cuando los hombres sienten esta tensión, lidian con ella de

dos formas:
1. Dejan de pretender alcanzar el punto B.
O,
2. Hacen todo lo posible para alcanzar el punto

B.
Esta es la clave: tu mente va a intentar cerrar esa brecha, sí o

sí, la pregunta es: ¿cómo eliges hacerlo?
Acercando B hacia A, es decir dejando de ambicionar y redu-

ciendo el tamaño B.
O, moviendo A hacia B, es decir avanzando hacia el logro de

lo que deseas.
La tensión puede ser creativa o inhibidora, todo depende de

cuán consciente eres al elegir cómo cerrar esa brecha.
Avanzar hacia B, es pone a trabajar tu mente generando so-

luciones creativas para cerrar la brecha. Reducir B, es reducir
tus expectativas y conformarte.
Tomar la decisión de quedarte en A provoca que tu visión se

apague. Eso es bajarles nivel a tus metas y restarles altura a
tus ambiciones.
Hombre Imparable
Entonces, ¿qué estás decidiendo hoy?
3 maneras en las que nos estancamos, ¿cuál está

deteniendo tu vida?
A veces – o tal vez muchas – te encuentras en A, deseando

estar en B, pero no te mueves para lograrlo. Te quedas ato-
rado en A y, con el paso del tiempo, A se convierte en una
realidad cada vez más fuerte y sólida. Empiezas a ver B como
algo lejano, un deseo loco, algo descabellado que nunca su-
cede. Esta es la fuente de frustración de muchos hombres.
¿Por qué nos quedamos en A?
Por el miedo, el pasado o el conformismo, tres formas en las

que hemos aprendido a creer que A es más seguro, más es-
table o la mejor opción.
Miedo
¿Qué prefieres, la probabilidad de ganar o la certeza de per-

der?
Muchos hombres proclaman querer una vida diferente, hacer

grandes cambios en su vida, pero se siguen aferrando a pun-
tos A en su vida que no quieren soltar. Ya sea por seguridad,
Hombre Imparable
comodidad o por miedo a perder, siguen aferrándose a esos

puntos A.
Quieren llegar a su punto B sin soltar A, lo cual no es posible.

Es igual a tener todo listo para zarpar con tu barco, pero
nunca sueltas los amarres o recoges el ancla que mantiene
el navío atracado en el puerto.
La única manera de ganar el juego de la vida como hombre

– eso que llamamos éxito – está en poder soltar la supuesta
seguridad de lo que tienes para conseguir aquello que quie-
res.
Muchos no lo entienden (o no lo quieren entender), se man-

tienen atorados en el puerto, soñando con surfear grandes
olas, con conocer lugares maravillosos, con vivir verdadera y
libremente. Pareciera que viven solo de sueños, y nadie vive
solo de sueños.
Siempre me he puesto a pensar que los sueños son como

agua que tanto necesita nuestro cuerpo para vivir, pero los
sueños que no se cumplen son agua estancada. Se convier-
ten en un foco de infecciones, muchas de ellas mortales.
¿Cuántas metas se mantienen en tu lista de “yo quisiera…” o

“a mí me encantaría…” frenadas por tus miedos?
Hombre Imparable
Tu valentía no está en la ausencia de tus miedos. Está en tu

capacidad para darle más fuerza a tu deseo. Está en tu deseo
de lo que quieres lograr y no en tu miedo por aquello que pue-
des perder.
Tu valentía está en decidir soltar lo seguro y ponerte en mo-

vimiento, así el miedo esté presente en tu vida. Tu valentía
está en no dejarte paralizar por el miedo.
Pasado
La vida se parece mucho a conducir un automóvil. Déjame

explicártelo:
¿Qué pasaría si la próxima vez que manejes tu automóvil, pa-

sas la mayor parte del tiempo con la mirada fija en el espejo
retrovisor?
Si no llegas a chocar (en el mejor de los casos), te perderás.
Al manejar vemos hacia atrás por los espejos, pero ¿cuánto

tiempo es recomendable hacerlo? Unos instantes. Al hacerlo
obtenemos información rápida sobre que esta atrás de no-
sotros. Tomamos mejores decisiones: cuándo cambiar de
carril, cuándo estacionarnos o ver si hay alguien sospechoso
persiguiéndonos (o tal vez he visto demasiadas películas de
acción).
Hombre Imparable
Más del 90% de tu tiempo la mirada debe estar dirigida hacia

adelante. Sí, eso lo entendemos bien cuando se trata de con-
ducir, pero… ¿lo hacemos con nuestra vida?
¿Estás enfocando tu mirada más en lo que hay detrás que en

lo que verás más adelante?
Como el espejo retrovisor de tu automóvil, el pasado es algo

para mirar de vez en cuando con un objetivo específico: ob-
tener información y lecciones que te permitan tomar mejores
decisiones, vivir con mayor plenitud tu presente y construir un
futuro mejor.
Mantenernos apegados al pasado (lo que fue, lo que te hicie-

ron, lo que ocurrió, lo que no funcionó, lo que salió mal) lo
único que te aporta es nutrir tu sufrimiento, aumentar la po-
sibilidad de perder de rumbo tu camino y chocarte una y otra
vez con los mismos problemas.
¿Tienes la oportunidad de soltar algo de tu pasado?
¿Algo que te hicieron? ¿Qué sucedió? ¿Qué no pudo ser? ¿Qué

no funcionó? ¿Qué te hizo daño?
Entonces ahora es el momento. No tienes que cargar con un

equipaje tan pesado.
Hombre Imparable
El pasado está ahí, no lo puedes borrar, pero si puedes apren-

der de él. Mirar a momentos por ese espejo y darte cuenta de
cuánto has avanzado.
Nuestra mirada frecuente y recurrente al pasado nos resta

energía. Nos ayuda a justificar nuestras incapacidades y
aparentes limitaciones. Y eso, ya no es sólo ver a través del
espejo retrovisor, es justificar que si chocamos no es culpa
nuestra.
Ya lo decía, Richard Bach: “Justifica tus limitaciones y te que-

darás con ellas”.
Conformismo
La evolución ha codificado en nuestros genes una tendencia

biológica a valorar lo que es más cómodo, lo que se siente
bien… se siente tan bien que ¿para qué nos complicamos la
vida?
Esta lógica limita nuestras posibilidades, limita nuestros re-

sultados y, más importante, limita nuestro potencial.
Tu éxito está determinado por la calidad de los resultados po-

sitivos que obtienes en tu vida. Resultados como posesiones,
relaciones enriquecedoras, posiciones que alcanzas, estabi-
lidad emocional o plenitud. Si bien tu éxito lo determinas tú y
Hombre Imparable
no importa cómo lo definas, tu éxito siempre viene acompa-

ñado de resultados positivos.
Nuestros resultados, a su vez, están determinados por nues-

tras acciones. Lo que obtienes es producto de lo que haces y
de lo que dejas de hacer. Si haces lo que siempre has hecho,
seguirás obteniendo lo que hasta ahora has logrado.
Es más, lo que estás siendo, obteniendo y viviendo en este

momento es el resultado de todo lo que has venido haciendo
hasta ahora. La única forma de cambiar los resultados y tu
nivel de éxito, es cambiando lo que haces.
Lo que vienes haciendo desde hace tiempo ha pasado a ser

parte de tu zona de confort. Lo haces y obtienes un resultado.
Lo vuelves a hacer y obtienes el mismo resultado, sin un es-
fuerzo perceptible, casi sin pensarlo. De tanto hacerlo, te
acostumbras y se vuelve parte de esa seguridad que cuidas.
¿Te das cuenta de la trampa?
Si te quedas en tu comodidad, deseando mejores resultados,

pero en el fondo sin estar dispuesto a levantarte del cómodo
sillón, sin dejar tu actual situación, todo se quedará en sim-
ples deseos. Nada cambiará.
Hombre Imparable
La realización plena de tu éxito se encuentra en las posibili-

dades que existen cuando dejas tu zona de confort y entras
en la zona de crecimiento.
Zona de confort = acciones conocidas,

resultados recurrentes.
Zona de crecimiento = nuevas acciones,

resultados diferentes.
Atorarte en el conformismo implica bajar tus exigencias. Sig-

nifica conformarte con menos de lo que realmente podrías
estar disfrutando.
Jim Rohn tenía una lección muy importante con respecto a

esto. Por más que ganes 50.000 dólares al año, si tienes la ca-
pacidad de estar generando 500.000 dólares al año, en cierta
forma eres un fracasado, una especie de conformista.
Y puede que piensas: “¿Pero no todo se trata de ganar más

dinero?”.
Es verdad, no se trata de ganar dinero sólo por hacerlo. No se

trata del dinero, se trata de expandirte. Se trata de crecer
como hombre, de lo que esa meta hará por ti.
Hombre Imparable
Si estás ganando 5.000 dólares al año y estás dando lo mejor

de ti, estás dando tu máximo potencial, ¡perfecto!, pero si no
es así, aún hay mucho espacio para seguir creciendo.
Quiero que esto quede muy claro. No te estoy pidiendo que

sufras para lograr tu éxito. Creo en la capacidad que tenemos
para aprender a construir nuestro éxito y mejorar la calidad
de nuestras vidas, disfrutando el proceso, disfrutando el ca-
mino. Lo que te pido es que revises si lo que quieres alcanzar,
no está inconscientemente influenciado por quedarte en tu
zona de confort.
Por ejemplo, cuando levantas pesas y haces el esfuerzo para

lograr una repetición más, al punto que ahogas un grito por
el esfuerzo, disfrutas más al saber que estás yendo más allá
de tus límites. Disfrutas el proceso de superarte y construir el
cuerpo que deseas. Ir más allá de lo que te es cómodo puede
ser divertido, todo depende tu actitud y de cómo percibes tu
camino de crecimiento.
Esto es lo que hace la diferencia
Miedo, conformismo y pasado: tres maneras para quedarte

atorado en el puerto o en tu punto A. Tres excusas para dejar
que el tiempo pase sin adueñarte de tus posibilidades de
Hombre Imparable
éxito. Tres formas de alejarte de tu mejor versión, y confor-

marte con la versión de ti que menos te moleste.
Todos, en ocasiones, caemos presas de algunas de estas si-

tuaciones. La diferencia no está negarte a sentir miedo, no
está en dejar de mirar hacia atrás ni mucho menos en obviar
tu comodidad. La diferencia está en tu capacidad para darte
cuenta y elegir conscientemente, de manera deliberada y
enfocada, la acción. Ponerte a trabajar en ello a pesar del
miedo, del pasado o la comodidad.
Tu vida se transforma en el momento en que elevas tu cons-

ciencia sobre lo que es tu vida y lo que puede ser.
¿Cómo puedes pasar del punto A al punto B?
¿Cómo puedes cerrar esa brecha?
Es en esa brecha donde se encuentra el trabajo que necesitas

hacer como hombre dominando los 7 pilares sintetizados a lo
largo de este libro.
Las siguientes páginas tienen un propósito claro: proveerte

las ideas y estrategias más simples pero poderosas para au-
mentar tu capacidad de cerrar esa brecha de forma que no
sólo alcances B, sino que disfrutes el proceso.
Porque, ¿dónde vas a pasar el 99% del tiempo?
Hombre Imparable
En el camino, en el proceso.
No tiene ningún sentido hacer todo lo que puedas para cerrar

esa brecha, sino disfrutas del proceso. Así que prepárate que
ya empezamos esta maravillosa aventura y despertar tu po-
der como hombre para transformar tu vida.
Hombre Imparable
El Poder Que Está En Ti
Repasémoslo, tu calidad de vida depende de los resultados

que obtienes. Estos, a su vez, son consecuencia de tus accio-
nes. Por lo tanto, la capacidad para generar movimiento en
tu vida y mantenerlo en la dirección de tus objetivos es de vi-
tal trascendencia.
¿Cómo desarrollar esta capacidad?
¿Cómo aumentarla?
¿Cómo despertarla?
Hombre Imparable
¿Qué hacer cuando sientes que no eres capaz de cerrar esa

brecha entre lo que quieres alcanzar y dónde estás actual-
mente?
Es aquí donde se encuentra el poder para cambiar nuestras

vidas. Un poder que te permitirá ir desde A hasta B. Esta es la
llave que te liberará de la tendencia a quedarte paralizado
por el miedo, mantenerte atado al pasado o estancado en el
conformismo.
Este poder es tu capacidad para ponerte en acción para ce-

rrar la brecha que hay entre lo que quieres y tu realidad ac-
tual.
W. Mitchell, orador y motivador dijo una vez:
“La clave para todos los que deseamos hacer una diferencia
es actuar. Hacer algo, cualquier cosa. Esta es la llave que
abrirá la puerta a un futuro inimaginable para muchas per-
sonas. En ocasiones nos sentimos sin poder, incapaces de
hacer algo. Un solo acto, cualquier cosa que puedas pensar,
puede encender tu motor nuevamente.”
¿Cómo mejoras tu vida?
Caemos en varios mitos acerca de cómo mejorar nuestras

vidas. Buscamos dinero o fama con la esperanza de que una
Hombre Imparable
vida feliz se encuentre detrás de ellas. Buscamos una pareja

con la ilusión de que sea esa persona quien nos rescate. Bus-
camos distintas cosas sin saber muy bien por qué, sólo nos
aferramos a la idea de que lograr ese “algo” sea la respuesta
casi mágica a nuestros problemas.
No nos damos cuenta que la calidad de vida que experimen-

tamos no es más que la suma de todos los resultados que
obtienes en las distintas áreas de tu vida. Al sumar los resul-
tados que obtienes en tus finanzas, juntos con los de tus rela-
ciones, trabajo, salud y demás facetas de tu vida, defines el
grado de calidad que experimentas.
Para elevar este nivel lo que necesitas lograr es muy simple:

modifica uno o varios de los resultados que obtienes.
Mejóralos. Amplíalos. Genera nuevos resultados. Genera me-

jores resultados.
Entonces, cambiar nuestra vida se resume en una sola idea:

tu vida se transformará, solo cuando seas capaz de generar
nuevos y mejores resultados.
¿Qué pieza nos falta?
Quiero pedirte algo, no te preocupes, no es nada complicado.

Sólo piensa, por un momento, en una o dos acciones que, si
Hombre Imparable
las pusieras en práctica, comenzarías inmediatamente a ge-

nerar nuevos o mejores resultados en tu vida.
Estimulemos un poco tu pensamiento con algunos ejemplos:
 Si ejercitara más, aumentaría mi nivel de energía y

vitalidad.
 Si planificara mejor mi semana de trabajo, sería

mucho más productivo.
 Si administrara mejor mi dinero, podría tener un

mayor control sobre mis finanzas.
 …
¿Pensaste ya en tus propios ejemplos? ¡Excelente! Porque te

tengo una gran pregunta:
¿Por qué no lo estás haciendo?
¿Qué sucede cuando quieres algo (elevar tu calidad de vida,

mejorar tus relaciones, ganar más dinero, ser reconocido pro-
fesionalmente), sabes qué hacer para lograrlo (ideas que has
escuchado, estrategias que has aprendido, ideas que se te
vienen a la mente), pero aun así no lo haces?
¿Por qué?
Hombre Imparable
¿Por qué sucede esto? ¿Cuál es el verdadero problema?
Hay dos respuestas fundamentales:
1. En realidad, no deseas lograr lo que quieres (al me-

nos, no lo deseas tanto como pensabas).
2. El poder para lograr lo que quieres no está activado

en relación con esa meta.
Cuando reflexionamos sobre estas dos respuestas, no es di-

fícil encontrar soluciones.
La primera opción es simple, suelta lo que creías que desea-

bas lograr porque, en el fondo, no te entusiasma. Libérate de
la idea de “yo debería lograr esto…” y recupera esa energía
para enfocarte en aquellas cosas que sí te llenan. Aquello que
realmente está alineado con tu ser.
¿La segunda opción?
Bueno… de eso se trata este libro. Así que sigamos.
Despertando tu poder
No basta con saber qué hacer, hace falta hacerlo. Actuar y

hacerlo ahora. Sin movimiento no hay cambio. Sin cambio no
Hombre Imparable
hay resultados diferentes, no hay evolución, no hay aprendi-

zaje, ni mucho menos éxito.
Es asombrosa la cantidad de hombres que cree que su falta

de éxito es atribuible a la falta de información en sus vidas. Lo
cual es ridículo.
¿Tienes tu teléfono celular a la mano? ¿Sí? Allí tienes una de

las tantas formas de acceder a toda la información que se te
pueda imaginar, gracias a Internet.
¿Pero qué hace la mayoría de hombres?
Utiliza una de las más poderosas y accesibles herramientas

para su éxito para ver memes, ver pornografía, jugar video-
juegos o tener charlas interminables y vacías.
Y no te confundas. A mí me gusta ver una que otra vez algo

que me haga reír, pero entiendo que en la era en la que vivi-
mos usar la excusa de “falta de información” no es válida. Sé
honesto y admite que no te falta información, te falta volun-
tad.
El verdadero problema no es que ignores qué hacer, sino que

no nos ponemos en acción, así de simple.
Hombre Imparable
Recuerda la frase que mayormente se atribuye a Einstein que

dice: “La locura está en pretender obtener un resultado dife-
rente, haciendo siempre lo mismo”.
No creo que tú o yo estemos locos, pero sucede que nuestro

cerebro nos lleva a mantenernos en la zona de confort. Desde
ahí tendemos a estructurar nuestra vida en función de lo que
nos da placer y no en relación con lo que es mejor para no-
sotros.
Esto nos lleva a concluir que, para realizar los cambios nece-
sarios para lograr tus metas, elevar tu calidad de vida y al-
canzar el éxito deseado, ser el hombre que quieres ser, es pre-
ciso desarrollar al máximo las fuerzas internas que te permi-
tan aumentar tu poder como hombre. Fuerzas que están
dentro de ti, pero que, durante tu caminata en esta vida, han
ido apagándose, reprimiéndose o las has olvidado.
Es momento de reconectar con ellas.
Hombre Imparable
Primera Fuerza:
Pasión
¿Qué es la pasión?
Es la energía que surge cuando te conectas a un propósito. Es

cuando tienes respuestas poderosas ante la pregunta “¿por
qué quieres lograr algo?”.
¿Te fascinas lavar y planchar la ropa?
Pregunta tonta, lo sé, pero deja que me explique.
Hombre Imparable
Si eres como el 99% de las personas, definitivamente no. Lo

más seguro es que no sólo te aburra, sino que además evitas
hacerlo lo más posible. Sin embargo, imagínate esta situa-
ción:
Es viernes por la mañana. Tienes una cena con una mujer her-
mosa y a la que le gustas. Quieres dar la mejor impresión,
quieres verte lo más atractivo posible. Lo normal. Pero tu me-
jor ropa está sucia. Claro, siempre está la posibilidad de po-
nerla a lavar, pero eso crea otro problema, después de que
salga de la lavadora, hay que plancharla.
¿Qué sucede si no hay nadie que pueda hacer estas cosas

por ti?
¿Qué haces?
Lavas y planchas. Así de simple.
Estoy seguro que cuando tienes razones poderosas, cuando

existe una razón motivadora, haces cualquier cosa, haces lo
necesario y, en ocasiones, hasta un poco más.
No es cuestión de si puedes o no, de si sabes cómo hacerlo o

no, ponerte en acción es más una cuestión de encontrar ra-
zones poderosas para hacerlo.
Hombre Imparable
Estar motivado implica tener un motivo para tomar acción.

Una o varias razones que te impulsen a hacer lo que hace
falta para alcanzar tu meta.
Cuando hablo de motivos, me refiero a las referidas por Pas-

cal cuando decía que: “El corazón tiene sus razones que el
intelecto desconoce”.
Entonces, ¿qué te mueve?
¿Qué te apasiona? ¿Por qué quieres lograr tus metas?
Para ir desde A hasta B, es vital que logres generar múltiples

y motivadoras respuestas a estas preguntas.
Tu pasión se encuentra en tus respuestas
¿Has escrito alguna vez esas resoluciones o metas de fin de

año?
Esa típica lista de cosas al estilo de…
 “En enero comienzo a…”

 “El año que viene si voy a…”
 “El año que viene va a ser mi año por qué…”
 “Este año que comienza daré mi mejor esfuerzo
para…”.
Hombre Imparable
Es probable que cada nuevo año, tu lista se parezca a la del

año anterior, ¿cierto?
Empezamos el año con todas las ganas de hacer algo dife-

rente con nuestras vidas. Como si el año que comienza nos
diera una energía desconocida que solo somos capaces de
sentirla cuando llega el 31 de diciembre. Nos creemos capa-
ces de todo. Creemos que los próximos 365 días, serán un an-
tes y después en nuestras vidas.
Puede que este subidón de energía te impulse a hacer cosas

que no te agradan demasiado, pero que sabes te permitirán
lograr los resultados que deseas.
Llega el 1 de enero, la energía sigue a tope. 3 de enero y sigues

comprometido. 24 enero, muchas de esas metas de año
nuevo han quedado en el olvido, de nuevo.
Tal vez las hemos escrito y las leíamos diariamente, pero

ahora desconocemos dónde diablos quedó ese trozo de pa-
pel.
¿Por qué nos sucede esto?
El problema de estas metas de fin de año es que carecen de

cimientos claros. Aquello que queremos alcanzar está apo-
yado sobre una mesa de una o dos patas. Son sólo deseos,
Hombre Imparable
no metas planteadas inteligentemente y caen en uno o en los

dos siguientes errores:
1. Carecen de una descripción específica del re-

sultado a lograr. Definimos nuestras metas en
función de acciones y no de resultados. Por
ejemplo, ir al gimnasio (una acción), en vez de
enfocarte en el cuerpo y la vitalidad que vas a
conseguir (el resultado).
2. Carecen de un verdadero entusiasmo que las

respalde. No hay una pasión que libere tu ener-
gía para lograrlas. La meta en sí misma no es
garantía de alcanzarla.
Ahora bien, es necesario entender que tu vida no es para ha-

cer, es para ser. Es para lograr. Disfrutar. Son tus metas las que
le dan sentido a tu actuar.
Sin claridad sobre el resultado deseado, tu acción carece de

sentido. Y una acción sin sentido – sin el impulso de tu pasión,
sin entusiasmo y un deseo por lograr la meta – se abandona
fácilmente.
Imagina que tu meta es bajar de peso, incluso marcar tu ab-

domen y sentirte más saludable.
Hombre Imparable
¿Cómo conectas con la pasión que te impulsará a lograr esta

meta?
Cuando piensas en esta meta, a tu mente vienen dos res-

puestas del por qué quieres lograrla:
“Lograré esta meta porque el ejercicio me

ayuda a mantener mi salud. Además, sé que es
bueno para mí y con esto puedo controlar me-
jor mi peso y no enfermarme”.
O…
“Lograré esta menta porque quiero verme con

un cuerpo definido y atlético. Quiero disfrutar de
toda mi vitalidad. Quiero generar la energía que
me va a permitir lograr muchas más metas.
Sentirme orgulloso por cuidarme. Expresar el
respeto que me tengo. Porque quiero sentirme
más fuerte cada día. Y poder disfrutar al má-
ximo todas las cosas maravillosas que hay en
mi vida”.
¿Cuál respuesta tiene más fuerza?
¿En dónde sientes que hay más pasión por lograr lo que te
has propuesto?
Hombre Imparable
Tu pasión es proporcional a la cantidad de respuestas con

alta carga emocional que eres capaz de generar ante la si-
guiente pregunta:
¿Por qué quieres lograr una meta?
Es vital que generes la mayor cantidad de respuestas posi-

bles a esta pregunta. Respuestas más allá del intelecto, que
expresen y muevan tus emociones. De lo contrario, estarás
arriesgándote a despegar sin suficiente combustible y puede
que a mitad de camino se te apaguen los motores.
Cuando sucede esto, la meta que querías alcanzar pasa a ser

sólo un punto más en tu lista de metas que no lograste. Y
dudo que quieras que esto te pase.
Pasión en acción
Tu pasión es también ese llamado profundo que te conecta

con el deseo de explorar, crear, conocer, dar y ser lo mejor de
ti. Es la conexión emocional con ser el mejor hombre que pue-
des llegar a ser. Es la expresión más íntima de tu ser. Es un
llamado constante a ponerte en movimiento. Es algo que ali-
menta e incrementa ese fuego interior que te motiva.
Si no logras conectar tus metas, con aquello que te apasiona,

estarás únicamente empleando la energía inconstante del
Hombre Imparable
entusiasmo. Sólo actuarás cuando te sientas con ánimos de

hacerlo. Día que te sientas sin entusiasmo, día que no traba-
jas en tus metas, día que te arriesgas a alejarte de la visión
que quieres para tu vida.
Tus metas y tu pasión: ¿cómo se conectan?
Tus metas encienden tu energía y creatividad. Cuando sien-

tes pasión por lo que haces, no es un esfuerzo ponerte de pie
y avanzar. El impulso surge desde tu interior. La acción pasa a
ser una expresión de quien eres, no algo que tienes que hacer.
Si las metas que tienes ahora no estimulan tu pasión, quizás

sea mejor soltarlas. Es ilógico invertir energía, tiempo y enfo-
que en avanzar hacia un destino que en el fondo no te llena.
A mitad de camino abandonarás. Tal vez ni siquiera comien-
ces.
Cuando no hay pasión por aquello que intentas lograr, tienes

un terreno fértil para la postergación, pereza y cualquier otra
conducta auto-saboteadora.
La pasión también alimenta y fortalece tu fe. La fe es tu capa-

cidad de generar certeza ante el reto representado por tus
metas. Si no tienes esa fe, el miedo y la duda crecerán en ti. Y
lo harán más rápido si te has planteado una meta exigente.
Hombre Imparable
Entonces, ¿están tus metas conectadas, directa o indirecta-

mente, con lo que te apasiona en la vida?
Trae una de tus metas a tu conciencia. Piensa en ella. Imagí-

nate ya lográndola. Conéctate con las sensaciones que te
surgen en este momento.
Ahora escucha tu intuición: lo que sientes ¿mueve tu ser?, ¿te

sientes inspirado?, ¿te sientes atraído por esta visión?
Si tu respuesta – honesta e intuitiva – es “realmente no me

mueve mucho”, mejor suéltala. Quizás es momento de ajustar
o redefinir tus metas.
Enfócate en lo que te apasiona
Para experimentar pasión, es importante enfocarte en aque-

llo que te apasiona. Suena elemental, lo sé, pero ¿cuántas ve-
ces se te olvida enfocar tu mente en lo que quieres y no en lo
que no quieres?
¿Cuánto tiempo se te va, inconscientemente, dirigiendo tu

atención a situaciones, conversaciones e ideas que apagan
tu energía?
Si quieres sentir más pasión, dirige tu enfoque a lo que te apa-

siona.
Hombre Imparable
¿Cómo? A través del poder de las preguntas.
Pregúntate:
¿Qué te apasiona?
¿Qué te entusiasma en la vida?
¿Qué actividades o cosas despiertan tu pasión?
Si no tuvieras miedo y contases con todos los recursos, ¿qué

quisieras ser, hacer o tener?
¿Qué te mueve emocionalmente?
¿Qué te atrae en la vida?
¿Qué admiras en otros?
¿Qué le daría sentido a lo que haces?
¿Por qué estarías dispuesto a asumir el reto de lograr tus me-

tas?
Si ya hubieras logrado tus metas, ¿cómo te sentirías en este

momento?
Vuelve a leer estar preguntas, sólo que ahora dedica al me-

nos unos minutos para conectar con las respuestas que sur-
jan.
Hombre Imparable
Motivación por atracción
Cuando conectas con lo que quieres abres las puertas al te-

soro de tu energía y comienzas a activar lo que llamaremos
motivación por atracción.
Para tener éxito en cualquier meta que te plantees, necesitas

estar conectado con tu capacidad de motivarte a través de
la atracción.
Necesitas:
Una visión de un futuro mejor

(expresada en metas específicas)
Energía suficiente
(pasión por lograrlas)
Elementos esenciales para ejecutar la motivación por atrac-

ción.
¿Cómo haces esto?
Expresando por escrito las razones poderosas para lograr tus

metas. No importa cuál sea el área de tu vida que quieras po-
tenciar conecta con las razones que enciendan tu pasión.
Hombre Imparable
¿Quieres bajar de peso y verte mejor físicamente?
¿Quieres convertirte en un profesional reconocido?
¿Quieres que tu negocio sea exitoso?
¿Quieres mejorar tu relación de pareja?
¿Quieres alcanzar tu libertad financiera?
¡Excelente! Todas son buenas y válidas metas, pero como ya

lo hemos mencionado, la meta en por sí sola no garantiza
nada, necesitas conectar con la pasión que te impulsará a
lograrlas.
Tomemos la meta de la libertad financiera como ejemplo.
Antes de ponerte a descubrir cómo lograr esta meta, antes

de ponerte a estudiar, antes de trabajar en crear nuevas
fuentes de ingresos o buscar inversiones que multipliquen tu
dinero, identifica las razones para alcanzar esta meta:
 Me sentiré libre de presiones, liberado de la

carga mental, alegre, fluyendo, con una mente
clara.
 Tendré el control de mi futuro financiero.
 Enfocaré mi energía hacia la expresión creativa

y productiva de mi pasión.
Hombre Imparable
 Podré comprar lo que desee porque tendré el

presupuesto para ello.
 Cuidaré mi dinero, lo devolveré al mundo e in-

vertiré sabiamente.
 Aprovecharé las oportunidades antes de que se

escapen.
 Seré una referencia poderosa desde la cual ins-

piraré a otros.
 Tendré una estabilidad financiera que se tradu-

cirá en una estabilidad y tranquilidad emocional.
 Me reiré de esos momentos de mi pasado donde

no tenía dinero.
 Me sentiré fortalecido.
 Contribuiré con causas que me inspiran.
 Invertiré en mi aprendizaje y desarrollo personal,

social y profesional.
 Tomaré suficientes días libres para viajar, des-

cansar y disfrutar gracias que mis finanzas que
se expanden constantemente.
Hombre Imparable
Al encontrar razones poderosas para lograr esta meta nos

conectamos con nuestra pasión, nos sentimos vivos, nos ve-
mos impulsados a creer y crear. Tu camino se hace más sen-
cillo, no fácil, pero ahora tienes fuertes razones para lograr
que lo te has propuesto.
Por último, me encantaría que tomes en cuenta esta idea: no

tiene sentido vivir sin pasión. No tiene sentido que lo sigas ha-
ciendo. Sin pasión las metas no pueden ser alcanzadas, la
vida que quieres no puede ser creada.
Lo fantástico de todo esto es que, si tu pasión no está encen-

dida, puedes despertarla. Reconectar con ella. No está fuera,
está en ti. Puedes encender y aumentar esa llama para diri-
girla hacia la creación de un mejor futuro.
Hombre Imparable
Segunda Fuerza:
Oportunidad
“Una oportunidad como ésta solo se da una vez en la vida”.
“Si no te subes ahora, te deja el tren”.
“Agárrala que se te escapa”.
“Si no lo aprovechas ahora, mañana será muy tarde”.
¿Has escuchado éstas frases?
Hombre Imparable
Con ellas nos referimos frecuentemente a las oportunidades.

Todas ellas tienen un común denominador: presuponen que
la oportunidad está fuera de ti.
Es claro que, gracias a los avances tecnológicos y el progreso

de las economías, tenemos oportunidades que hace un par
de décadas solo imaginábamos, tan sólo mira a Internet.
El contexto histórico y la tecnología permiten la existencia, en

nuestro presente, de posibilidades que antes estaban fuera
de nuestro alcance. Lo que ayer no era una alternativa hoy si
lo es. Aquello que hoy soñamos mañana será realidad.
También hubo oportunidades de las cuales no podemos dis-

frutar, ni aprovechar hoy. Pero esas no eran ni las primeras ni
las únicas.
A donde me quiero dirigir es que las oportunidades abundan,

quienes tienen el poder para aprovecharlas, no tanto. La
oportunidad se lleva por dentro, y desde este plano es que
puedes aprovecharlas. Algo que aprenderás en este capítulo.
¿Qué significado le das a lo que te sucede?
Conectar o no con las posibilidades de crear aquello que te

has propuesto depende de los significados que le asignas a
tus circunstancias.
Hombre Imparable
¿Qué significados le estás dando a tus problemas?
¿Qué conclusiones sacas cuando se te presenta un reto?
Si te defines como víctima de las circunstancias, sin posibili-

dad de salir de tus problemas y ves tus retos como obstácu-
los en tu camino (como paredes infranqueables), buscarás
quedarte con lo que ya conoces, por más infeliz que te haga.
El poder para transformar tu vida necesita como terreno fértil

una visión más positiva, proactiva y optimista del mundo. Una
en la cual te veas como el actor principal lleno de posibilida-
des para construir un futuro mejor.
Esto nos lleva a una pregunta fundamental:
El significado que le estás dando a tus circunstancias, ¿te

abre o te cierra posibilidades?
Tu realidad está construida no sobre lo que sucede, sino so-

bre los significados que le das a lo que te sucede. Estos sig-
nificados son los que moldean nuestra identidad y las expe-
riencias que vamos a vivir por el resto de nuestras vidas. A
menos que cambies los significados sobre los cuales estás
construyendo tu vida.
Hombre Imparable
Desde la visión de víctima, las personas ven la vida como

algo que les sucede, algo sobre lo cual tiene poco o ningún
control. Si las cosas les van mal, es culpa de alguien allá
afuera: su jefe, el gobierno, sus padres, una ex, amigos, com-
pañeros de trabajo… alguien allá afuera está conspirando
para que no sean felices ni exitosos. No se ven a sí mismos
como los personajes principales en sus vidas, sino como
personajes secundarios.
Son hombres que han olvidado una gran verdad: las cosas no
te suceden a ti, suceden para ti.
Todo es cuestión de enfoque
Quien no sabe leer no es capaz de captar los múltiples men-

sajes escritos que, aun estando frente a sus ojos, son inútiles
para él.
Las oportunidades puedes estar afuera y ser posibles gracias

a la tecnología y las coyunturas históricas y económicas de
nuestro presente, pero si no sabemos “leerlas” es como si no
existieran.
En tiempos de crisis y recesión económica es cuando se han

construido las mayores fortunas, incluso de formas mucho
más rápidas.
Hombre Imparable
Es en tiempos así que ciertas personas son capaces de ob-

servar y aprovechar las oportunidades de negocio escondi-
das en las crisis, mientras que otros sólo miran desesperación
y frustración crecientes.
¿Cuál es la variable que lo cambia todo?
El individuo.
Lo que determina quién es exitoso y quién no lo es, no son las

circunstancias, es el enfoque de cada persona, la diferencia
está en dónde decide enfocar su mirada. Esto no es más que
la capacidad de observar lo que para muchos, pasa desa-
percibido.
Grábate esto: si te enfocas en algo, borras de tu consciencia

el resto de las cosas.
Quiero que hagamos un simple ejercicio:
Mira a tu alrededor, graba una imagen mental de todas las

cosas azules que encuentras en a tu alrededor. ¡Vamos hazlo!
Luego quiero que cierres los ojos y me digas rápidamente (sin

hacer trampa) ¿Cuántas cosas verdes viste?
Lo sé, hice trampa, pero algo similar pasa con tu capacidad

de enfoque. Si te concentras en los problemas, te ciegas ante
Hombre Imparable
las oportunidades. Al enfocarte en las oportunidades, co-

mienzas a ver una mayor cantidad de ellas. Es nuestro enfo-
que ante el mundo lo que determina nuestra percepción so-
bre lo que es posible.
Quizás no podamos cambiar al mundo en este momento,

pero ciertamente todos tenemos la capacidad de adueñar-
nos de nuestro enfoque y abrir los ojos ante aquello que nos
va a permitir cambiar nuestro mundo.
¿Recuerdas las frases del principio?
 “Una oportunidad como ésta solo se da una vez en la

vida”.
 “Si no te subes ahora, te deja el tren”.
 “Agárrala que se te escapa”.
 “Si no lo aprovechas ahora, mañana será muy tarde”.
En ellas se esconde otras dos suposiciones acerca de las

oportunidades: a) son escazas y b) somos el efecto, no las
causas de ellas. Lo cual está completamente errado. Me ex-
plico:
1. Poder captar las oportunidades depende de

nuestra percepción interior, depende de si somos
capaces de verlas.
Hombre Imparable
2. Nuestra percepción interior es producto de cómo

estamos empleando nuestra mente. Depende de
nuestro enfoque y del significado que le damos a
los que nos ocurre.
3. Cada ser humano posee la capacidad de adue-

ñarse de dónde posa su enfoque e interpreta sus
significados.
4. Las posibilidades del enfoque y la generación de

significado son prácticamente infinitas.
5. Por ende, la generación de oportunidades está

en nuestro control y son prácticamente infinitas.
Somos creadores activos de oportunidades. No es sólo es

cuestión de salir a buscarlas, implica también ser parte activa
para crearlas.
T. Harv Eker, autor de Los Secretos De La Mente Millonaria, dice

que: “No basta con estar en el lugar adecuado, en el mo-
mento justo. Tienes que ser la persona adecuada, en el lugar
adecuado, en el momento justo”.
Recordemos: lo que ignoramos no forma parte de nuestra

realidad.
Cuando cambiamos nuestra mentalidad para percibir opor-

tunidades en donde antes sólo veíamos un campo extenso
Hombre Imparable
de problemas y dificultades, estamos ejerciendo un acto de

creación.
¿Por qué hacer esto es tan importante esto para las oportu-
nidades?
Por dos razones:
1. Para poner tu pasión en acción y alcanzar tus

metas, necesitas aprovechar todo aquello que
pueda contribuir a tu progreso.
2. Cuando eres capaz de observar una situación

como una oportunidad, tu mente se ve natural-
mente atraída a ella.
Cuando decimos: “Esto es una oportunidad”, ¿qué queremos

decir realmente?
Que la persona, evento o momento al cual nos referimos tiene

el potencial de brindarnos algo positivo. Ante esto nos vemos
atraídos, aumentando así nuestra motivación.
Tu éxito no solo depende de tu capacidad de aprovechar

aquellas oportunidades que se te presenten y estén alinea-
das con tus metas, también depende de tu capacidad para
crearlas de la nada.
Hombre Imparable
Cómo ser un creador de oportunidades
“¿Qué me brinda esto a mí?”
Al hacerte esta pregunta eres capaz de transformar un

evento inesperado en una oportunidad de aventura, creativi-
dad y crecimiento.
La calidad de tu vida es proporcional a la calidad de pregun-

tas que te haces. Cuando te haces preguntas que delibera-
damente dirigen tu enfoque para generar y aprovechar opor-
tunidades, es cuando te conviertes en un creador de oportu-
nidades.
Piensa en una situación retadora a la cual te enfrentes en este

momento, ¿cómo puede ser esto una oportunidad para ti?
Acaso te puede permitir...
¿…aprender algo nuevo?
¿…fortalecerte de alguna manera?
¿…disfrutar de algo nuevo?
¿…conectarte con otros?
¿…encontrar ayuda?
Hombre Imparable
¿…mostrarte que si es posible?
¿…dar el siguiente paso hacia tu éxito?
¿…afirmar lo que es más importante para ti?
¿…reafirmar quién eres y quién quieres ser?
¿…desarrollar tu creatividad?
¿…aceptar el presente?
¿…perdonar?
¿…desapegarte de algo o alguien?
¿…darte cuenta de cómo necesitas mucho menos de lo que

crees?
¿…sentirte lleno de vida?
¿…expandirte más allá de la zona de confort?
¿…dar lo mejor de ti?
Hacerte mejores preguntas no sólo cambia la forma en la que

encuentras respuestas, también cambia la calidad de las
respuestas que te das.
Hombre Imparable
Mientras la gran mayoría de hombres se pregunta: ¿Por qué

esto me sucede a mí? ¿Por qué me sucede ahora?
Tú estarás yendo un poco más allá preguntándote: ¿Qué me

brinda esto a mí?
Este si es un gran cambio de paradigma.
No se trata de lo que harás por la meta, se trata

de lo que la meta hará por ti
Tener una casa grande, un coche nuevo, una mejor relación

de pareja, una mejor relación con la familia, ser reconocido
profesionalmente, tener independencia financiera, una salud
inmejorable y todas aquellas metas que puedan pasarte por
la cabeza, no son el objetivo último.
No son la razón por la que debemos plantearnos metas. El ob-

jetivo es el proceso en sí, en quiénes debemos convertirnos
para lograr todas esas metas.
El valor de todo logro no es solo lo que obtienes, más impor-

tante aún es en quién te conviertes para lograrlo. Es el pro-
ceso de ser más, la razón máxima de todo hacer y tener.
El camino que necesitas recorrer para ir de A hacia B, desde

dónde te encuentras hasta tu meta, representa tremendas
Hombre Imparable
oportunidades de expansión, crecimiento y superación para

ti. Es esto lo que buscamos. No sólo conducir el automóvil de
tus sueños, sino el crecimiento y expansión por el cual has te-
nido que pasar para conducir el automóvil de tus sueños.
Más allá del logro de tus metas, ¿qué te va a dejar este pro-
ceso de ir tras ellas?
Al ponerte en acción y enfocar tu energía en la construcción

de la realidad que quieres, ¿qué posibilidades van a ocurrir en
tu vida? ¿Cómo, todo esto, te va a permitir ser más?
Seamos más claros.
Imagina que quieres obtener tu peso ideal antes del 1 de no-

viembre del siguiente año. Está claro que tendrás que empe-
zar a planificar qué actividades y hábitos necesitas desarro-
llar para lograr tu meta. Es posible que tengas que informarte,
leer y revisar varios videos para encontrar una rutina de ejer-
cicios y una dieta que vaya contigo.
Planificarás tu semana para ejercitarte y empiezas a despedir

de tu vida a todas aquellas comidas sabrosas, pero que van
en contra de tu meta.
Si lo vemos desde la superficie, simplemente estamos ha-

ciendo todo lo posible para bajar de peso y lograr el aspecto
Hombre Imparable
físico que deseas, pero trabajar en esta meta te dejará mu-

chas más cosas que sólo un “buen cuerpo”.
Este proceso para conseguir el cuerpo que deseas te deja

mucho más.
 Trabajarás en tu disciplina.
 Aumentarás tus conocimientos sobre el cuerpo hu-
mano y la salud.
 Aumentarás tus niveles de energía.
 Tendrás más confianza y seguridad en ti mismo.
 Podrás hacer muchas más actividades físicas que an-
tes no podías.
 Serás más atractivo físicamente.
 Habrás lidiado y derrotado varios de tus miedos.
 Saldrás de tu zona de confort incontables veces.
 Tu perspectiva del mundo cambiará por completo.
 Te sentirás mucho más motivado de lograr más cosas
en tu vida.
¡Vaya!... una sola meta alcanzada impacta muchas, si no es

que todas, las áreas de tu vida.
Cuando asociamos tantos beneficios, tantos resultados po-

sitivos al aprovechar esa oportunidad en forma de meta que
tenemos por delante, aumentamos su poder de atracción.
Hombre Imparable
Tu cerebro no quiere perderse de aquello que le brinda placer

y expansión. Mientras más beneficios asocies a tu visión,
mientras más la entiendas como una oportunidad que tras-
ciende incluso al logro de la meta misma, más aumentarás
tus oportunidades de lograrla.
El regalo que eres tú
Hablemos de ti. Eres una oportunidad para el mundo. A través

de ti otros pueden beneficiarse, gracias a tus acciones, tus
conocimientos, el uso de tus talentos, gracias a tu pasión.
Las oportunidades surgen ante ti cuando alimentas tu pasión

y también cuando conectas, y logras entender, la gran opor-
tunidad que eres para otros.
Estamos acostumbrados a ser grandes observadores, maes-

tros y jueces de nuestros defectos, pero nos falta entrena-
miento para saber reconocer y apreciar nuestro potencial y
talentos.
Eres mucho más de lo que crees ser. Y cada instante es una

nueva oportunidad para reconocer tu grandeza. Una nueva
oportunidad para actuar desde ella.
El mundo que queremos se construye desde la aceptación de

quienes somos.
Hombre Imparable
¿Y quiénes somos?
Seres poderosos en constante evolución.
En la humildad hay grandeza, porque es desde ella donde po-

demos vernos grandes y actuar para construir lo grandioso.
Sé humilde y reconoce la oportunidad que eres. Para ti, para

los tuyos y para el mundo.
La oportunidad para crear
Lograr tu visión implica generar cambios. Es un camino que

incluye oportunidades para transformar cosas, sanar expe-
riencias, para abrirte nuevas posibilidades.
Dentro de las muchas alternativas que esto representa, vea-

mos cinco oportunidades fundamentales:
La oportunidad para afirmar
Toda meta encierra dentro de sí la oportunidad para afirmar

quién eres y quién quieres ser. Es un proceso a través del cual
puedes definir y comunicar tu esencia.
¿Qué quieres? ¿Qué es importante para ti? ¿Cuáles son tus

valores? ¿Qué defiendes? ¿Con qué no estás de acuerdo?
Hombre Imparable
Al final del día no será lo que hiciste u obtuviste lo que te pro-

porcionará plenitud, será quién fuiste y qué diste. Esto es lo
que otros recordarán de ti cuando abandones esta vida.
La oportunidad de pedir
Nos perdemos de tantas cosas por el miedo a pedir. Sufrimos

sin necesidad, por no atrevernos o no permitirnos a buscar
ayuda. Pedir ayuda no te hace pequeño, un hombre débil, al
contrario, te engrandece.
Eres capaz de reconocer lo que te hace falta y lo que otro te

puede dar; eso no lo puede admitir cualquiera.
Pedir es inteligente. Si bien puedes intentar andar por el ca-

mino hacia tu éxito por el método del ensayo y error, la expe-
riencia y sabiduría de otros que han realizado la travesía an-
tes que tú, pueden ahorrarte años de desgaste y tiempo per-
dido.
Al pedir estamos accediendo a uno de nuestros más grandes

recursos: los otros. Y lo digo en el buen sentido. Los seres hu-
manos no son islas, estamos interconectados, por ello las
otras personas son importantes. Si nos desapegamos un
poco de nuestro ego, nos abrimos a la posibilidad de recibir.
Hombre Imparable
Se dice que uno de los factores principales de éxito en los úl-

timos años reside en la capacidad de construir redes huma-
nas. Hacer networking. Conexiones reciprocas de mutuo be-
neficio con otras personas.
El poder de una red reside en su capacidad para pedir y en-

contrar ayuda y recursos en ella. Puedes tener cientos de
amigos o miles de desconocidos, pero si no sabes pedirles
ayuda cuando lo necesitas, no pasan de ser más que un con-
junto de tarjetas de presentación, de perfiles en redes socia-
les conectados o contactos en tu correo electrónico o telé-
fono.
Para lograr la meta que te has propuesto, ¿cuáles son tus

oportunidades para pedir ayuda? ¿Quién puede contribuir a
tu éxito?
Pedir no significa que el otro u otra aceptarán. Esa es su de-

cisión. Por lo tanto, no te hagas responsable del otro preocu-
pándote por si te dirá que “si” o que “no”, o si se molestará por
tu petición. Esa es su libertad. La tuya está en pedir, con res-
peto y transparencia, aquello en donde crees que el otro
puede contribuir.
Pide… tal vez estás esperando que algo te caiga del cielo y lo
único que cae del cielo es la lluvia.
Hombre Imparable
La oportunidad para ofrecer
Es una paradoja: mientras más das, más lleno te sientes.
La plenitud que experimentas en tu vida está en tu capacidad

de dar, no de recibir.
Lo que deseas es aumentar tu capacidad para dar lo mejor

de ti: en tu familia, en tu trabajo, en tus finanzas, en tu salud,
en tu espiritualidad.
Lograr tu visión puede ser una oportunidad no sólo para lo-

grar lo que quieres, también puede serlo para dar y beneficiar
a otros en la construcción de tus metas. Cuando conectas tus
metas con un sentido de trascendencia, tu pasión aumenta.
¿A qué me refiero?
Stephen Covey en su libro Los 7 Hábitos De Las Personas Al-

tamente Efectivas, nos dice que dejar un legado es una de las
necesidades psicológicas más importantes del ser humano.
Si a esto le sumamos el principio fundamental de recibes en
función de lo que das, tenemos una gran lección aquí.
¿Quieres aumentar lo que recibes?
Aumenta el valor que entregas a otros.
Hombre Imparable
Esto funciona tanto en la economía como en las relaciones

amorosas. Mientras el 90% de hombres se preguntan qué
pueden esperar o sustraer de otros, hay una pequeña minoría
que se preguntan: “¿qué puedo dar a otros?”
Si en tu relación de pareja, por ejemplo, estás únicamente

preguntando: ¿qué debe darme ella?, ¿cuáles son sus obliga-
ciones o qué debe hacer y qué no?, estás sustraendo valor, al
punto que no quede más por sustraer. Una de las razones
principales de divorcio o rupturas.
Si eres emprendedor, tienes un negocio o quieres empezar

uno. Seguramente ya tienes claro que la gente no compra tus
productos o servicios sólo porque sí, compra valor empaque-
tado en forma de tus productos o servicios. Aumenta el valor
que provees al mundo y los clientes llegarán de forma incon-
trolable.
Lo sé, suena tan simple – tan elemental – pero te sorprendería

la enorme cantidad de hombres allá afuera que sólo buscan
oportunidades para sustraer todo el valor que puedan.
¿Crear valor?… crear es de tontos, según ellos.
La oportunidad para perdonar
Hombre Imparable
Al principio de este libro hablábamos de las diferentes formas

de quedarte estancado en un punto A. Eran tres: el miedo, el
pasado y el conformismo.
Y muchas veces nos quedamos en alguna de ellas porque no

nos damos el permiso de perdonar, soltar aquello que nos
pesa, soltar un equipaje emocional que funciona como ancla
en nuestra vida.
¿De qué sirve continuar arrastrando recuerdos, rencores y

emociones que restan valor a tu vida?
Lo que sucedió… sucedió.
Lo que fue… fue.
Lo que pasó… pasó.
Tu oportunidad más grande está en el presente. Para hacerte

cargo de ella, necesitas desprenderte del pasado. Incluso,
necesitas desprenderte del futuro…
¿Y qué hay de mis metas?, te preguntarás.
Desprenderte del futuro no significa olvidar tu visión, no signi-

fica no querer nada más en tu vida o mandar al diablo las
metas que tienes, a lo que me refiero es a desapegarte de
ellas.
Hombre Imparable
Si aprovechas el presente, si los disfrutas, si lo empleas para

avanzar en dirección hacia tus metas con confianza y segu-
ridad plena de que las lograrás, no necesitas obsesionarte o
preocuparte por lograr tus metas.
Tu pasado no tiene que ser un ancla, al contrario, debe ser un

trampolín. Un espacio desde el cual puedes aprender y me-
jorar. Hay lecciones de tu pasado que, si las aprovechas, pue-
den impulsar tu vida más allá de lo que hoy te imaginas.
Puedes tomar los últimos 5 años de tu vida, analizar qué hi-

ciste bien, qué salió como querías, qué no salió tan bien, en
qué fallaste, y utilizar estás poderosas lecciones y los siguien-
tes 5 años para transformar tu vida por completo.
¿Qué oportunidades tienes para desprenderte de esos mo-

mentos dolorosos?
¿Qué necesitas perdonar para avanzar en tu vida?
¿Qué necesitas para soltar ese equipaje que no te deja avan-

zar y ser el hombre que quieres ser?
La oportunidad de aceptar
Tu fuerza reside en tu capacidad de aceptar. Lo que fue o no

fue. Lo que es y no es. Lo que puede ser o no puede ser.
Hombre Imparable
La mayoría de hombres se niega a aceptar ciertas cosas en

sus vidas, quiénes son, cómo se ven, las cosas que han hecho,
las oportunidades que han dejado pasar. Se niegan a confe-
sarlo: no se aceptan.
Quieren ser diferentes, quieren ser otros hombres. Esta falta

de aceptación hace que su vida se vaya a pique. Verse al es-
pejo supone ver a alguien desconocido, a alguien con quién
no se identifican.
No entienden que la única forma de superarse, de ser un

hombre mejor, de ser su mejor versión, el hombre que se ama,
respeta, aprecia, valora y crece, sólo es posible a través de la
aceptación. Aceptar el punto A en el que se encuentran. Les
guste o no. Los haga felices o no.
Cuando eres honesto contigo mismo, cuando dejas de men-

tirte, de crearte cuentos, es cuando algo dentro de ti se alinea.
Ya no tienes que luchar con tu vida, ya no encuentras resis-

tencia, te rindes a una fuerza superior y encuentras un propó-
sito superior. Dejas los hábitos nocivos, las actitudes empo-
brecedoras, la negatividad tóxica. Te sientes más libre. Ya no
cargas con un gran peso en los hombros.
Usar la oportunidad que tienes ahora para aceptar, todo lo

bueno y malo, todo lo que fue y lo que no, todos los momentos
Hombre Imparable
felices y momentos dolorosos, te da el chance de vivir en un

nivel superior. Un nivel que te permite llegar a nuevos puntos
B.
De nuevo: utiliza el pasado como trampolín, no como ancla.
Acepta dónde te encuentras… y dónde quieres estar.
Acepta quién eres… y quién quiere ser.
Acepta tus debilidades… y tus fortalezas.
Acepta tus limitaciones… y tus posibilidades.
Acepta tu vulnerabilidad… y tu poder.
Acepta lo que se fue… y lo que está por venir.
Acepta lo que no sabes… y lo que puedes aprender.
Acepta tu ignorancia… y tu sabiduría.
Acepta tus problemas… y tus oportunidades.
Acepta al otro… y a ti también.
Acepta la grandeza de otros… y también la tuya.
Hombre Imparable
Aceptar quién eres, qué tienes y qué haces, no significa re-

nunciar a tu deseo de cambio. No significa apagar tu ambi-
ción. Al contrario, es en la aceptación de tu realidad actual y
de la realidad que puede ser, donde brota tu ambición.
Aceptar lo que es, tal cual, te ayuda a abrirte a nuevas opor-

tunidades. Lo que rechazas, persiste. Lo que aceptas, fluye. Lo
que fluye puede ser transformado. Lo que aceptas te cambia.
Muchos hombres darían lo que fuera por entender esto…

ahora tú ya lo sabes.
Hombre Imparable
Tercera Fuerza:
Decisión
Siempre tienes el poder para decidir. No importan las circuns-

tancias, esa capacidad nunca la pierdes. Quizás no puedas
elegir que tu entorno cambie. Así como tampoco puedes de-
cidir que otra persona cambie su conducta. Pero siempre
puedes, si empleas esta fuerza, elegir tu actitud ante lo que te
sucede.
¿Sabes cuantos años estuvo preso Nelson Mandela? ¡27 años!
Hombre Imparable
De noviembre de 1962 a 1990. Más de un cuarto de su vida fue

“robado”. Su libertad física le fue robada. Pero hay algo que
nunca pudieron robarle: su poder de decisión, elegir su acti-
tud ante lo que le sucedía.
Gracias a esta fuerza, Mandela fue capaz de salir a liderar un

pueblo e impactar el mundo promoviendo la paz. Él decidió
que su tiempo en la cárcel no iba a ser en vano. Sabía que
podía ocurrir uno de dos resultados: o moría en la cárcel o
salía libre algún día.
Como fuera, decidió aprovechar su tiempo para prepararse.

Quería asegurarse que en su país y en el mundo no se repi-
tieran las injusticias que él mismo estaba viviendo. No im-
porta cómo llegara, si a través de su muerte o cuando lo libe-
raran, sólo importaba el gran propósito que se había plan-
teado. Mandela eligió transformar su condición de preso
como una oportunidad para prepararse como líder. El resto,
como dicen, es historia.
Viktor Frankl, autor del libro El Hombre En Busca De Sentido

decía que:
“Todo puede serle quitado al hombre excepto una cosa: la

última de las libertades humanas – poder escoger nuestra
actitud ante cualquier tipo de circunstancias”.
Hombre Imparable
Esta última voluntad, como lo llama Frankl, es la que deter-

mina cómo interpretamos lo que nos ocurre.
Incluso en las circunstancias más extremas, siempre tene-

mos la capacidad de decidir, cómo procesar y qué hacer con
lo que nos ocurre. Esto determina si aprovecharemos los
eventos para lamentarnos y sentirnos como víctimas o, para
fortalecernos y manifestarnos como creadores de nuevas
realidades.
La pregunta no es si estás o no empleando esta fuerza, sino

cómo lo estás haciendo.
Lograr tus metas y vencer tus desafíos, requiere que utilices la

fuerza de la decisión para potenciarte, no para disminuirte.
Puedes estar conectado con tu pasión y despierto ante las

oportunidades, pero si no haces uso de esta fuerza, no podrás
avanzar ni modificar tus circunstancias.
Nelson Mandela, Viktor Frankl, así como incontables hombres

a lo largo de la historia de la humanidad, nos muestran cómo
lo que nos sucede no determina nuestra vida, son nuestras
decisiones al respecto lo que da forma a nuestro destino.
Te aseguro que ni tus problemas ni los míos, sumados o in-

cluso multiplicados, se acercan a las situaciones vividas por
Hombre Imparable
estos personajes históricos. Si ellos fueron capaces, tú tam-

bién. Es cuestión de elegir. Es cuestión de tomar una decisión
verdadera.
La decisión que necesitas tomar
Creemos que estamos decidiendo algo, cuando en realidad

no es así. Creemos que la expresión de un deseo implica que
hemos tomado una decisión. Una decisión verdadera se ma-
nifiesta en acción, no sólo en su simple declaración. Si no hay
acción, no hemos decidido.
Una decisión implica dos elementos adicionales:
1. Un objetivo o resultado específico a alcanzar, y

2. El compromiso hasta alcanzarlo.
En el cuento Alicia En El País De Las Maravillas de Lewis Carroll,

hay una escena en donde la joven Alicia viene por un camino
que súbitamente termina en una “T”.
De pronto ella se encuentra en un dilema: decidir si ir a la iz-

quierda o tomar el camino en la dirección contraria. En ese
preciso instante aparece el Gato Sonriente. Alicia aprovecha
y le pregunta: ¿Qué camino debo tomar?
Hombre Imparable
El gato responde con otra pregunta: Eso depende… ¿a dónde

quieres llegar?
La verdad, es que no importa. – responde Alicia con sinceri-

dad.
El gato le responde con gran sabiduría: Entonces tampoco

importa cuál camino elijas.
Decir que quieres ganar más dinero, bajar unos kilos extra, te-
ner un mejor empleo, empezar tu propio negocio, mejorar tu
relación de pareja o cualquiera que sea tu deseo de mejorar,
no es tomar una decisión verdadera. Es sólo imaginar posibi-
lidades, que en la mayoría de los casos no se harán realidad.
La peor decisión que puedes tomar
La peor decisión es la que se asume desde el miedo. Cuando

decidimos y actuamos desde el miedo nuestro enfoque está
concentrado en lo que no queremos, en lo que nos asusta.
La decisión que se toma desde el miedo tiene como centro lo

que estamos resistiendo, no lo que realmente deseamos.
Nuestra vida se basa en huir y evitar, en vez de asumir y cons-
truir.
Hombre Imparable
¿Qué es lo que quieres crear? ¿Qué es lo que quieres experi-

mentar? ¿Qué es lo que quieres disfrutar?
Es desde el espacio que nos brindan estas preguntas que nos

conviene decidir. Es desde este espacio que podemos apro-
vechar la fuerza de la decisión.
Entendiendo el compromiso
Un componente fundamental para tomar una decisión ver-

dadera es el compromiso. Mientras no estés comprometido
con la decisión que tomes, todo se queda en palabras vacías.
Palabras bonitas, pero vacías.
Hay dos tipos de compromiso:
1. SI, a lo que quieres.
2. NO, a todo aquello que te aleja de lo que

quieres.
No basta con tener conciencia de aquello que deseas y que

te permite acercarte a tus metas. Es necesario conocer aque-
llo que te aleja del camino.
Hombre Imparable
Una decisión implica escoger entre dos o más caminos posi-

bles. O tomas el camino de la izquierda o tomas el de la de-
recha, incluso puedes tomar el camino del medio. Pero no
puedes ir por todos al mismo tiempo.
Si escoges el camino que te llevará hacia tu meta, debes

también estar dispuesto a apartarte de cualquier otra posi-
bilidad que te desvíe del camino que has decidido seguir. Eso
es compromiso.
Si quieres bajar de peso, por ejemplo, no sólo es importante

que decidas cambiar tu régimen alimenticio para incluir co-
midas nutritivas y sanas. También es vital decirle “no” a los
postres, golosinas y otros excesos que atenten contra tu ob-
jetivo.
Otro ejemplo: si deseas sostener una relación de pareja sus-

tentada en la confianza, debes decirle “no” al engaño.
Uno más: si deseas ser alguien más sociable y conectar con

las personas, debes decirle “no” a quedarte en casa todo el
día o sentarte solo en la mesa del fondo, la más escondida,
cuando vayas a una fiesta o reunión social.
Qué aceptas y qué rechazas, tenerlos muy claro es necesario

para lograr tus metas y una vida mejor.
Hombre Imparable
En esencia, toda decisión tiene un precio. Cuando decides ir

tras una meta, estás comprometiéndote con el precio que
vas a pagar. Un precio que se manifestará mientras recorras
ese camino. Un precio del cual debes ser consciente.
En ocasiones decidimos seguir un camino sin tener claro qué

queremos lograr. Y sin tener claro a qué vamos a renunciar.
No tenemos idea de todo el esfuerzo, energía, tiempo y demás
recursos, que debemos emplear. Esto provoca que nos sabo-
teemos.
¿Estás dispuesto a pagar el precio que implica ir tras la reali-

zación de tus metas?
Esta es una pregunta clave. Si respondes negativamente o

con duda, es mejor reevaluar tus metas. Si respondes afirma-
tiva y certeramente, no te mientes creyendo que el camino
será fácil o que no tendrás retos y problemas. Al contrario,
eres consciente de lo que tendrás que hacer, de lo que en-
frentarás, y aun así quieres hacerlo.
Entonces, ¿a qué le va a decir que “si”? ¿A qué le vas a decir

que “no”?
El único que puede responder esto eres tú. Y seguramente lo

harás en función de las metas que quieres alcanzar, de la vida
que deseas vivir, del hombre que quieres ser.
Hombre Imparable
Definir tus “síes” y tus “nos” te ayuda a enfocarte en una sola

posibilidad: lograr tu meta. Así como los rayos del sol, con-
centrados por una lupa sobre un punto pueden encender lo
que tocan, tu energía enfocada en aquello que decides lograr
te permite alcanzarlo.
Ten en cuenta que la fuerza de la decisión no es ajena a tu

vida. Has ejercido este poder más de una vez. Piénsalo. Re-
cuerda. Trae a tu memoria una situación en la cual hayas to-
mado una decisión de esas que – en un instante – transfor-
maron tu mundo.
Decidir una carrera profesional que estudiar. Decidir la mujer

con la que te ibas a casar. Decidir cambiar de empleo. Decidir
dejar la comida llena de carbohidratos.
Has tomado muchas decisiones a lo largo de tu vida, y éstas

fueron las que han moldeado tu vida hasta ahora, y lo segui-
rán haciendo en el futuro.
Tony Robbins dice: “Es en tus momentos de decisión cuando

le das forma a tu destino”.
Cuatro tipos de decisiones que transformarán tu

vida
Hombre Imparable
Aumentar, reducir, comenzar y eliminar, son cuatro tipos de

decisiones fundamentales para empezar a transformar tu
vida. Es, sin dudas, lo que más te ayudará a entender cómo
puedes aprovechar al máximo la fuerza de la decisión.
AUMENTAR lo que te funciona
En tu vida hay ideas y acciones que tienen un efecto positivo

en tu vida. Cosas de gran valor que contribuyen a aquello que
quieres lograr. Ideas y acciones que te funcionan. Si te enfo-
carás más en ellas podrías acelerar el logro de tus metas.
Potencia, mejora, afina lo que ahora haces bien y te funciona

de maravilla y, no sólo mejorarás los resultados que estás ob-
teniendo, también lograrás disfrutar mucho más del camino.
¿Qué puedes aumentar?
¿Qué puedes hacer más?
¿Qué es importante como para dedicarle más tiempo y ener-

gía?
¿En dónde necesitas enfocarte ahora?
REDUCE lo que dispersa tu energía
Hombre Imparable
Existen pensamientos y actividades que tienen poco impacto

en tu éxito. Contribuyen poco o nada en tu avance. Incluso,
pueden llegar a obstaculizarlo. Y aquí está lo más liberador
de todo: no estás obligado a hacer más de esas actividades.
Tu tiempo es finito. Si lo empleas en una cosa, no puedes em-

plearlo para otra.
Por ejemplo, si ves un promedio de tres horas de televisión al

día, estás dedicando 21 horas a la semana (más de dos jor-
nadas y media de trabajo) a una actividad, que más allá de
divertirte, contribuye muy poco al logro de tus metas. Son 21
horas que podrías utilizar en ponerte a trabajar en una de
esas metas que tienes en tu lista y que espera pacientemente
a que le prestes atención.
Para lograr tus metas se hace necesario que reduzcas el

tiempo, energía y enfoque que se te van en actividades trivia-
les. De esta forma liberas tiempo para dedicarlo a aquello que
contribuye directamente con tus objetivos.
Déjame decirte dos verdades que a la mayoría de hombres

les cuesta aceptar:
1. No tenemos tiempo para todo. En serio, no te-

nemos tiempo para todo, pero si tenemos
tiempo para lo importante.
Hombre Imparable
2. No puedes tener todo en tu vida. No puedes

pretender ser alguien saludable y a la vez co-
mer todo lo que se te antoje. Así como no pue-
des ser un emprendedor exitoso y a la vez estar
todo el día viendo series, películas y jugando vi-
deojuegos.
Así que, ¿qué te hace falta reducir?
¿A qué necesitas “reducirle la intensidad” para abrir espacio

a lo que si te agrega valor y es esencial para tus metas?
COMIENZA con lo que necesitas hacer
Nuevos pensamientos. Nuevas ideas. Nuevas acciones. Nue-

vos resultados. Hay algo que aún no conoces, o conoces, pero
no has probado y necesitas hacerlo ¡ya mismo!
Para cerrar la brecha entre tu punto A y tu punto B, encontra-

rás actividades que son indispensables, si no las haces, si las
postergas, si las ignoras o no les das la importancia que re-
quieren, no serás capaz de cerrar esa brecha.
Si quieres aumentar tu prosperidad financiera, necesitas co-

menzar a ahorrar e invertir y educarte financieramente.
Si buscas rebajar de peso de manera definitiva, debes iniciar

un programa de ejercicio.
Hombre Imparable
Si estás a la búsqueda de pareja, hace falta que salgas a la

calle y lugares donde puedes conocer más gente.
Si tu meta es aumentar tu cartera de clientes, el marketing

inteligente y activo no es una opción, son necesarios.
Todas son acciones que están a tu alcance, sólo hace falta

que decidas comenzar a hacerlas.
Para resumir, ¿qué necesitas introducir en tu vida para lograr

lo que quieres?
¿Qué hace falta comenzar?
¿Qué consejos y estrategias, que ya conoces, pero no has lle-

vado a la acción, puedes realizar hoy mismo?
ELIMINA lo que le resta valor a tu vida
Hay cosas que no contribuyen a tu vida, sólo la dificultan. Tie-

nes hábitos, patrones de pensamientos y actitudes que posi-
blemente necesitas erradicar por completo. Cosas que te
desvían del camino elegido y debes corregirlos.
Muchas de aquellas cosas que restan valor a tu vida pueden

parecerte una forma de relajarte, desconectarte, disfrutar,
pero de igual forma lo llegan a ser las drogas, el alcohol y la
pornografía y no por eso debes consumirlas constantemente.
Hombre Imparable
Está bien, vayamos con un ejemplo no tan extremo: ver pro-

gramas de televisión basura.
Pueden considerar que es entretenimiento nada más –

inocente y llano entretenimiento –, pero consumir este tipo de
contenido te afecta más de lo puedes imaginar.
Y te digo esto, porque el nivel de conciencia y la calidad de

vida que tiene un hombre se deben al nivel de información
que maneja. Mientras tu mente sea bombardea con basura,
provenga esta de la televisión, de internet o de los chismes
con los compañeros de trabajo, no puede existir un terreno
fértil para ideas potenciadoras y transformadoras.
¿Qué puedes dejar de hacer que sabes, en el fondo, contri-

buye poco a tu vida?
¿Qué cosas o actividades puedes eliminar de tu rutina diaria

y te va permitir avanzar una vez que lo dejes?
¿A qué sigues aferrándote, aun sabiendo, que no te hace

bien?
¿Qué te resta, te quita o consume tu energía?
Siete poderosas decisiones que puedes tomar

hoy
Hombre Imparable
Hay muchas cosas que no puedes controlar: la actitud de los

demás, cómo piensan, el clima con el que empiezas el día, si
habrá tráfico o no. Pero también hay cosas sobre las que tie-
nes un control absoluto. Nadie tiene poder ni decisión sobre
ellas, mi favorita es: nuestra actitud.
Decidir adueñarte tu actitud, la voluntad ultima como lo lla-

maba Viktor Frankl, es sin dudas una de las mejores decisio-
nes que vas a tomar por el resto de tu vida, si la tomas hoy.
Una decisión que lo cambia todo.
¿Cómo te adueñas de tu actitud?
Aquí tienes siete simples, pero poderosas decisiones que

puedes asumir para tomar control sobre tus respuestas ante
lo que te sucede y decidir cómo las percibes y mejor aún,
cómo actúas frente a ellas.
En vez de evadir… decide asumir
Toma todo lo que te afecta en la vida ahora mismo, haz una

especie de lista mental, ¿qué cosas de esa lista tienen que ver
contigo?
Cuando las cosas no son como las quisiéramos es muy fácil

apuntar hacia afuera y buscar un culpable. El reto — y la
Hombre Imparable
esencia de la madurez — está en asumir lo que es tuyo: la

forma en la que tú has contribuido a lo que hoy te sucede y la
oportunidad que tienes para cambiar las cosas.
Si evades tu responsabilidad, niegas tu fuerza y tu capacidad

para aprender. Cuando asumes lo que te corresponde tomas
consciencia sobre lo que puedes aprender y mejorar.
En vez de resistir… decide aceptar
Acepta lo no puedes cambiar. Por más que nos esforcemos,

gritemos, rabiemos o lloremos, hay ciertas circunstancias que
no podemos cambiar. Al menos no tan rápido como quisié-
ramos.
Tu infelicidad, estrés, ansiedad y frustración aumentan

cuando te resistes a lo que te sucede. Y peor aún, cuando lo
niegas. Al hacerlo le das poder a aquello que estás resis-
tiendo. Aceptar te ayuda recuperar tu poder personal y sen-
tirte mejor.
¿Esto quiere decir que aceptes todo lo malo en tu vida?
De cierta forma. Pero ten mucho cuidado, aceptar no es igual

a no hacer nada al respecto. No me refiero a quedarte con lo
que aceptas y nunca mover ni un dedo creyendo que esa es
y será tu realidad por el resto de tu vida.
Hombre Imparable
Aceptar, es ser honesto contigo mismo. Mientras te sigas en-

gañando que no tienes sobrepeso, no harás nada para me-
jorar tu salud y cuerpo. Mientras te sigas mintiendo sobre tus
problemas financieros, siempre te encontrarás en número ro-
jos, con mucho mes antes del siguiente pago.
Que quede claro: no te estoy sugiriendo que te resignes. Eso

es ser mediocre. Puedes aceptar las circunstancias actuales,
por el simple de hecho de que en este momento son eso: cir-
cunstancias actuales, circunstancias que puedes decidir
cambiar.
Aceptar la posibilidad de comenzar de nuevo, esta vez con

más fuerza y compromiso, es darte cuenta de tu punto A. Es
darte cuenta de las decisiones buenas y malas que has to-
mado y que te han llevado a dónde estás ahora. Sobre todo,
es darte cuenta que tienes el poder de decidir mejor en este
instante para crear un futuro diferente.
En este instante en tu vida: ¿qué puedes aceptar?
¿Qué puedes dejar de resistir o negar y simplemente soltarlo?
En vez de resignarte… decide aprovechar
Hombre Imparable
Así como es importante aceptar lo que está sucediendo,

también es fundamental aceptar tus posibilidades para ac-
tuar. Esto marca la diferencia entre la resignación y la ambi-
ción. La primera te dice: esto es lo que hay… confórmate con
ello. Mientras que la segunda te dice: esto es lo que hay… pero
puedes mejorarlo.
Aprovechar lo que hay ahora en tu vida implica un cambio de

paradigma tremendo. Dejas el papel de víctima y asumes el
papel de creador. La vida ya no es algo que te sucede, es algo
en lo que tienes un papel protagónico.
También implica un cambio de enfoque. Decides enfocarte

en lo que puedes hacer, en lo que sí puedes controlar, en
aquello sobre lo que sí puedes impactar. Y dejas de obsesio-
narte por todo aquello que está fuera de tu alcance o control.
¿Qué oportunidades puedes aprovechar?
¿Sobre qué puedes ahora tomar el control y responsabilidad,

y al hacerlo ver cómo tu vida toma un nuevo rumbo?
Cuando identificas tus oportunidades y decides actuar para

aprovecharlas, te alejas de la ansiedad producida por la sen-
sación de estar fuera de control.
Hombre Imparable
En vez de sentirte el efecto te conviertes en la causa. Así que

ponte en movimiento y decide aprovechar lo que te sucede
en lugar de resignarte o lamentarte.
En vez de dudar… decide creer
Siempre decides, o creer en aquello que contribuye a tu éxito,

aquello que está para hacerte más fuerte, creer en aquello
que es lo mejor para ti, para tu vida y tus metas; o creer en
todas aquellas cosas que alimentan tus dudas, miedos y
aparentes limitaciones.
Siempre decides.
El miedo y la fe son fuerzas muy similares. Ambos alimentan

de aquello que nos ves, que solo está en tu mente, que puede
ocurrir. La diferencia es que una te empuja a vivir una vida
llena de limitaciones y frustración, mientras que la otra te
ayuda a explotar tu máximo potencial y construir la vida que
quieres.
De nuevo: siempre decides a cuál fuerza entregarte.
Cuando alguien dice que tiene muchos problemas que es in-

capaz de superar, está diciendo algo muy sutil: “Soy más pe-
queño que mis problemas”. Dentro de sí, afirma la idea (una
y otra vez) que no puede, que es débil y que sus problemas
Hombre Imparable
son una especie de gigantes con los cuales nunca podrá ba-
tallar. Lo único que le queda a ese hombre es resignarse a vi-
vir de esa forma. Refugiarse en la idea de que algunos nacen
con buena estrella, mientras que otros nacen estrellados.
Quizás estás decidiendo hacerle caso más a tus miedos que

a tu potencial. Quizás estás decidiendo ver más los proble-
mas que las oportunidades. Quizá estás decidiendo ver lo que
puedes perder, en lugar de todo lo que puedes ganar.
¿Estás eligiendo creer que tus problemas son más grandes

que tú?
O, ¿estás eligiendo creer que eres más grande que ellos?
¿Estás decidiendo ser el efecto de tus circunstancias actua-

les?
O, ¿declaras que tienes el control para elegir adueñarte de tu

capacidad para salir adelante?
En vez de maldecir… decide agradecer
¿De cuantas cosas podrás estar agradecido hoy en tu vida?
Muchos responden de forma automática: “Nada”. Están tan

cerrado ante las posibilidades. Tan ciegos ante todo lo bueno
Hombre Imparable
que han logrado. En sus mentes, son logros son pequeñeces.

Olvidan una gran verdad: la gratitud es muy poderosa.
Y si es así de poderosa, ¿por qué no lo consideramos como

una fuerza más para transformar tu vida?
¿Por qué no darle su propio capitulo?
Porque considero que el poder de la gratitud solo puedes ex-

perimentarse cuando decides usarla en tu vida. Cuando de-
cides cambiar tu enfoque de aquello sobre lo cual maldices y
declaras que no quieres más en tu vida, a aquello que sí pue-
des agradecer, que es maravilloso en tu vida, de lo cual pue-
des sentirte bendecido y muy feliz.
La gratitud representa un cambio de paradigma tremendo.

Tu mentalidad cambia cuando te das cuenta de todo lo ma-
ravilloso que es tu vida.
Es posible que no estés viviendo en una casa de cientos de

miles de dólares, pero tienes un techo sobre tu cabeza.
Es posible que no tengas el físico de Thor en las películas de

Marvel, pero tienes un cuerpo sano que puedes utilizar libre-
mente.
Hombre Imparable
Es posible que no estés ganando millones de dólares cada

año, pero tienes un sustento que te permite vivir cómoda-
mente.
Practicar la gratitud no es conformarte con lo que tienes, no

deseando tener y lograr más, es agradecer lo que tienes sin
perder de vista que siempre hay espacio para mejorar.
Ser agradecido es un excelente antídoto ante las sensaciones

de desesperanza ya que te permiten conectarte con la abun-
dancia y magia de tu vida. Agradecer te permite enfocarte en
lo que tienes, para continuar atrayendo más de ello, en lugar
de enfocarte en aquello que te hace falta y seguir atrayendo
carencia.
En la gratitud, los miedos desaparecen, se desvanecen, ya

que te das cuenta que has recibido y tienes más de lo que
creías.
Conéctate con ella y no olvides los miles de regalos que has

disfrutado en forma de experiencias, amistades, aprendiza-
jes, momentos únicos, oportunidades y amores.
Te dejo con una pregunta: ¿qué podrías agradecerle a la vida

en este momento?
En vez de solo desear… decide comprometerte
Hombre Imparable
La única forma de obtener resultados diferentes es haciendo

cosas distintas. Eso lo tenemos claro. Así que: ¿qué vas a
cambiar para lograr sentirte y verte mejor?
Tus hábitos cotidianos pueden reforzar tu energía y debilitar

todas esas emociones de bajo nivel de energía. En este sen-
tido, algunos cambios simples pueden hacer una gran dife-
rencia.
Por ejemplo, qué tal si eliges leer menos la prensa diaria y evi-
tar el maratón de noticieros nocturnos en televisión justo an-
tes de acostarte. Te apuesto algo: el mundo no va a cambiar
porque tú dejes de ver, escuchar o leer noticias, pero tu salud
mental si puede beneficiarse enormemente de una ade-
cuada desinfoxicación de contenido.
Algunos ven el compromiso como algo arcaico. Con tantas

oportunidades, con tantos nuevos productos, con tantas ex-
periencias por disfrutar, comprometerte con una cosa la
sienten como si se cortaran las alas.
La cultura del consumismo es muy buena para propiciar que

deseemos más, más y más. Bajo esa bandera, se halla implí-
cita la idea de que más siempre es mejor. Pero más, no siem-
pre es mejor. Lo cierto es lo contrario: somos más felices con
menos.
Hombre Imparable
Cuando nos sobrecargan con oportunidades y opciones, su-

frimos lo que los psicólogos llaman la paradoja de la elección.
Cuantas más opciones nos den, menos satisfechos nos sen-
tiremos con lo que escojamos, porque somos conscientes de
todas las otras alternativas de las que nos estamos privando.
Creemos que el compromiso doblega nuestra libertad, que
atarnos a una cosa nos limita.
Algo sucede cuando te comprometes, ya sea con una meta,

con una persona, con un propósito. En el compromiso hay una
libertad y una liberación. El compromiso te brinda libertad
porque ya no estás distraído por lo que no tiene importancia
o por lo que es frívolo. El compromiso te da libertad porque
perfecciona tu atención, tu perspectiva. Las dirige hacia lo
que hace más sano y feliz de manera eficiente.
El compromiso logra que tu toma de decisiones sea más fácil

y elimina cualquier temor de estarte perdiendo algo mejor.
Sabiendo que lo que ya tienes es suficientemente bueno,
¿para qué te desgastarías en perseguir más y más y más?
El compromiso te permite centrarte con atención en un pu-

ñado de metas sumamente importantes y lograr un mayor
grado de éxito de lo que conseguirías persiguiendo todo en
todo momento.
Hombre Imparable
¿Con qué simples cambios te comprometes para lograr lo

que necesitas para sentirte mejor?
En vez de preocuparte… decide ocuparte
El antídoto para tus preocupaciones es, y siempre será, el

ocuparte. Ponerte en acción. Moverte hacia lo que quieres.
Hay situaciones que definitivamente escapan de nuestro

control. Hagamos lo que hagamos no podemos hacer nada
o muy poco para cambiarlas. No podemos influir sobre ellas.
Entonces, ¿qué objeto tiene preocuparse por aquello que es-
capa de ti?
¿Algo te preocupa?
¿Está en ti hacer algo al respecto?
Si es así, ponte en acción. De lo contrario, acepta que eso es-

capa de tu círculo de influencia y decide soltarlo para hacerte
cargo de las oportunidades que si puedes aprovechar.
Quizás no puedas cambiar tus circunstancias en este mo-

mento, pero si puedes elegir una actitud que te permita
aceptar las cosas como son sin obsesionarte por cambiarlas,
más bien, aprovecharlas, creer que pueden ser diferente,
Hombre Imparable
agradecer lo que tienes, comprometerte a lograr lo que quie-

res y ponerte en acción.
Entonces…
¿Qué vas a aceptar?
¿Qué vas a aprovechar?
¿En qué vas a creer?
¿Qué vas a agradecer?
¿Con qué te va a comprometer?
¿De qué si te vas a ocupar?
Decide rápido
Puedes tener metas claras. Puedes experimentar pasión. In-

cluso identificar oportunidades. Pero si no decides, no pasas
a la acción. La decisión es el eje de tu propósito y la acción es
la que te llevará a concretar resultados positivos en tu vida.
Para muchos hombres ser alguien decidido no siempre re-

presenta algo sencillo de hacer. Solo decidiendo es que eres
capaz de fortalecer esta capacidad, es como un músculo que
debes ejercitar continuamente.
Hombre Imparable
Un hombre que está dominando su camino y alcanzando sus

metas y éxito, hace estas dos cosas:
 Decide rápidamente.
 Una vez tomada la decisión, actúa con ve-

locidad de acuerdo a ella.
Aquellos hombres perdidos y que luchan constantemente

con la vida, hacen todo lo contrario, están en donde no quie-
ren estar y viven vidas algo infelices:
 Son lentos para decidir.
 Una vez que toman una decisión, rápida-

mente la cuestionan y la cambian por otra.
La decisión lleva a la acción. La acción a resultados. Los resul-

tados a metas, y en caso de no alcanzarlas a un aprendizaje
para intentarlo una vez más.
Si tu decisión no fue la acertada, puedes aprender de ella.

Esto te permite tomar mejores decisiones en el futuro, las
cuales conllevarán a mejores acciones y mejores resultados.
No decidir detiene el proceso de aprendizaje y creación. Éste

es el peor riesgo que no tendrías por qué correr. No decidir es
Hombre Imparable
quedarse en la encrucijada y no elegir un camino. Quedarte

a un lado de la vereda viendo cómo otros pasan.
¿Cuántas buenas lecciones que hoy has interiorizado provie-

nen de tus fracasos?
¿Cuánto de lo que hoy es parte de tu valor como hombre se

ha formado por los aprendizajes producto de malas decisio-
nes?
¿Cuánto de tu camino se ha creado al corregir malas deci-

siones?
No temas decidir. Teme quedarte en el mismo lugar. Hay una

extraordinaria fuerza en la decisión. Una fuerza que pone en
movimiento cosas que muchas veces escapan de nuestra
comprensión.
Johann Wolfgang von Goethe lo plasmaba en un poema que

cuando lo leí por primera vez, me encantó:
Hasta que nos comprometemos hay vacilación,

la posibilidad de retroceder, inefectividad.
En lo concerniente a todos los actos de iniciativa

(y creación) hay una verdad elemental cuya ig-
norancia mata incontables ideas y esplendidos
Hombre Imparable
planes: que en el momento en que nos compro-

metemos definitivamente, la Providencia da el
paso también. Todo tipo de cosas ocurren para
ayudarnos que de otra manera nunca hubieran
ocurrido.
Una corriente de eventos surgidos de la decisión

genera a nuestro favor toda clase de incidentes y
encuentros imprevistos y asistencia material que
ningún hombre podría haber soñado jamás que
vendría en su ayuda.
Aquello que puedas hacer o sueñas que puedes

hacer, comiénzalo.
La audacia tiene genio, poder y magia.
Me quedo con las dos últimas oraciones.
En realidad, no puedes “no decidir”. Siempre está decidiendo

algo. Incluso al decidir “no decidir”, has realizado una elec-
ción. Aun cuando decidas no moverte, has escogido.
No es cuestión de decidir o no. Siempre lo haces. La cuestión

es si estás tomando la decisión que te permitirá construir tu
visión de futuro. Acercarte más a tu propósito.
Hombre Imparable
Aquella elección que refleje quién eres realmente en este mo-

mento y quién deseas ser en el próximo.
Hombre Imparable
Cuarta Fuerza:
Energía
Todo logro requiere de energía. Todo resultado es producto

de su aplicación. Sin energía no hay movimiento. Sin despla-
zamiento no hay progreso. No hay pasión. No hay oportuni-
dad. No hay decisión. Si no tienes la energía para ponerte en
acción, no hay transformación.
Ya hemos establecido que para llegar al punto B que te has

propuesto debes salir de tu zona de confort. Algo relativa-
mente fácil de hacer cuando estás lleno de energía. Difícil
cuando sientes su ausencia. He ahí el reto.
Hombre Imparable
Tus mejores talentos e ideas surgen cuando tienes la energía

al máximo. Tu entusiasmo se incrementa, así como aumenta
el coraje necesario para asumir tus retos. La energía te per-
mite ver nuevas posibilidades, nuevas opciones, nuevas
ideas. Te atreves a soñar más. Te crees y sientes más pode-
roso. Y todo esto es clave para lograr tu éxito.
Sin energía – o con baja energía – tu sensación de inercia au-

menta. Tus miedos parecen aumentar de tamaño. Tus dudas
te hablan más fuerte. Y entre avanzar hacia tu objetivo o que-
darte en la comodidad, gana la segunda.
Todo requiere energía
Hay hombres que naturalmente expresan mayores niveles de

energía que otros. Al hablar de alta energía, pensamos en
quienes tienen elevados niveles de entusiasmo e incluso ma-
nifestaciones de hiperactividad. Sin embargo, por alta ener-
gía me refiero a la máxima expresión e intensidad de aquello
que estás experimentando en un momento dado. Si es entu-
siasmo, lo expresas con intensidad, pero si es paz, también la
experimentas a plenitud.
Hombre Imparable
No es sólo gritar entusiasmado y movernos de un lado a otro

de la habitación cuando hablamos de alta energía. Es a la in-
tensidad con la cual vives tu ser. Con la cual experimentas
esta realidad y todo lo que hay en ella.
Hay amor de alto y bajo nivel de energía. Hay entusiasmo de

alto y bajo nivel de energía. Hay paz, serenidad, determina-
ción, fe, alegría, gratitud de alto y bajo nivel de energía.
Cuando un monje tibetano está meditando, en él hay una al-

tísima energía que está concentrada en ese momento. Exter-
namente puede parecer sereno y estático, pero internamente
se produce una conexión con altos niveles de energía vital.
La energía siempre está ahí. Si no la tuvieras, no estarías vivo.

No es cuestión de si tienes o no energía. Es un asunto del
grado de intensidad con la que la produces y utilizas.
Cuando experimentas cosas en tu vida, emociones, momen-

tos o acciones desde una baja energía, todas estas experien-
cias pasan rápidamente sin mayor impacto. Cuando las ex-
perimentas desde un alto nivel de energía, se fortalecen y
perduran.
Cuando pierdes a un ser querido, conoces por primera vez a

tu pareja, tienes un hijo, te gradúas, consigues tu primer em-
Hombre Imparable
pleo, te despiden por primera vez, empiezas a vivir solo, te ca-

sas, te ascienden, inicias tu propio negocio, consigues tu pri-
mer cliente, experimentas altos niveles de energía y por ello,
esas experiencias perduran en tu mente y cuerpo por mucho
tiempo.
¿Cómo puedes aumentar la energía de aquello que quieres

experimentar?
Hay cuatro fuentes que alimentan tu energía. Fuentes que

lastimosamente muchos hombres descuidan, o dan impor-
tancia a una o dos, pero no a todas.
Las cuatro fuentes de energía
Espíritu, mente, emociones y cuerpo. No hay un orden especí-

fico. Ninguna es más importante que otra, al contrario, todas
funcionan de forma sinérgica. Desde ellas surge tu energía. A
través de ellas se te escapa.
Espíritu
Es tu conexión espiritual. Se refiere a cuán alineado estás con

tu propósito de vida, con aquello que realmente te apasiona.
Aumentar tu energía a través del espíritu es conectarte con la
fe a una fuerza o ser superior. Gracias a la fe, hay hombres
Hombre Imparable
comunes y corrientes que se han atrevido a superar retos ex-

traordinarios. Sin ella, todo parece un caos de incertidumbre
paralizante. La fe aumenta tu capacidad para avanzar y pa-
sar desde A hasta B.
Tu espíritu se expresa en tus talentos. En aquellas actividades

que te son naturales y fáciles de expresar. Cuando estás ha-
ciendo lo que te apasiona y empleas tus talentos, el tiempo
fluye y pasa rápidamente. Tu creatividad surge en su máxima
expresión y tu energía se mantiene.
Otra poderosa manera de encender la energía proveniente

de tu espíritu es conectarte con un propósito de trascenden-
cia. Tony Robbins, en su modelo de las 6 necesidades huma-
nas, postula que existen dos necesidades psicologías vitales
para una vida plena: crecimiento y contribución.
Cuando tus acciones están conectadas con tu misión de

contribuir con una causa en la que crees, tu energía y capa-
cidad para dar lo mejor de ti se incrementa significativa-
mente.
Puede que no te identifiques particularmente con la palabra

contribuir. La asociamos a la caridad y donar dinero a orga-
nizaciones benéficas, pero estas son más que un par de tan-
tas expresiones del contribuir.
Hombre Imparable
Cuando te estableces como un ejemplo para tus hijos o her-

mano menor, estás contribuyendo a su vida. Cuando te esta-
bleces como un profesional o empresario ético y que aporta
mucho más de lo que le pagan, estás contribuyendo a la vida
de tus clientes. Cuando te planteas metas y empiezas a cam-
biar tu vida inspirando a otros que es posible lograrlo, estás
contribuyendo a la vida de otros. Estás dejando un legado.
Recuerda: tú eres un regalo para el mundo. Todos lo somos.

Sea tu mundo del tamaño de tu familia, empresa, clientes,
amigos, ciudad, país o el mismísimo planeta, eres un regalo y
no puedes más que darte a los demás
Comienza a creer en el regalo que eres. Comienza a explorar,

al menos en tu mente, las posibilidades de crear una vida
dando – desde tu pasión y entusiasmo – lo mejor de ti. Te
aseguro que tu energía y vitalidad serán otras.
Mente
La calidad de tus pensamientos tiene un impacto inmediato

sobre tu nivel de energía. En este sentido, podemos hablar de
dos tipos de pensamientos: empobrecedores y potenciado-
res.
Hombre Imparable
Los pensamientos empobrecedores reducen tu nivel de ener-

gía y apagan tus recursos y pasión. Un “no puedo” inmedia-
tamente te cierra puertas mentales. Un “no puedo” se tradu-
cen en una disminución de tu capacidad de actuar y generar
resultados positivos.
Los pensamientos potenciadores, por el contrario, son aque-

llos pensamientos que abren posibilidades y aumentan tu
capacidad para aprovechar tus recursos internos y externos.
Obviamente, aquí es donde debes enfocar tus pensamientos.
Puedes tener un gran talento para hablar en público (¡un gran

recurso interno!), pero si piensas en todas las razones por las
cuales no puedes hacerlo o por las cuales todo va a salir mal,
estarás desperdiciando ese potencial.
Si te concentras en las razones por la cuales sí puedes, en

cómo esto está conectado con tu pasión o en las oportuni-
dades que puedes aprovechar al atreverte a hablar en pú-
blico, tu energía aumentará. Es así de sencillo.
Lo mismo ocurre con tu enfoque.
¿En dónde estás concentrando tu atención?
¿Acaso en aquellas cosas que están fuera de tu control y de

las cuales no te queda más que preocuparte?
Hombre Imparable
O, ¿te estás enfocando en aquello que puedes controlar?,

¿sobre lo cual puedes influir para avanzar hacia tus metas?
¿Te estás enfocando en los problemas o en las soluciones?
Cuida tus pensamientos. Cuida tu enfoque. Son fuentes o dre-

najes de tu energía.
Lo genial es que los pensamientos (algo que está bajo tu con-

trol una vez que los haces conscientes) pueden cambiarse
instantáneamente. Si te encuentras con un pensamiento em-
pobrecedor lo puedes sustituir declarando un pensamiento
potenciador.
Jack Black, autor del libro Mindstore, enseña una simple, pero
efectiva estrategia:
Cada vez que te encuentres pensando algo empobrecedor o

negativo, ejecuta el equivalente mental a presionar la tecla
“borrar” de tu computadora. Di mentalmente: “borrar ese
pensamiento” e inmediatamente sustitúyelo por uno poten-
ciador.
Cuando descubras que tu energía se está yendo en pensar

cosas que no te agradan, sobre las que no tienes control, que
están fuera de tu influencia, rápidamente puedes usar varias
Hombre Imparable
preguntas poderosas para adueñarte de tu energía y reenfo-

car tus pensamientos dónde si quieres.
Las siguientes preguntas te ayudarán a reconectar con tu po-

der y energía:
¿Qué está bajo mi control?
¿Sobre qué puedo influir?
¿Cuál es el mejor uso de mi energía en este

momento?
¿Dónde quiero realmente poner mi atención?
¿Cuáles pueden ser las soluciones?
Emociones
E-moción. Energía-moción. Energía en movimiento.
Tus emociones son energía en pleno movimiento a través de

tu cuerpo. Al momento de tomar acción y materializar resul-
tados en el mundo físico, requerimos de cierta energía. Y hay
emociones con más nivel de energía que otras y que pode-
mos utilizar para alcanzar nuestras metas.
La pasión es una emoción de alto nivel de energía. La ira tam-

bién lo es. Si bien la ira o la frustración, a veces, pueden ser
Hombre Imparable
fuentes de la energía que necesitamos para avanzar, se corre

el peligro de emplear ese combustible para destruir en lugar
de construir.
Hagamos una pequeña analogía. La energía nuclear no es ni

mala ni buena. Simplemente es energía. Puede emplearse
para destruir una ciudad (o el planeta entero) o para darle
electricidad y mejorar la calidad de vida de millones de per-
sonas. Es una cuestión de ética.
Lo ideal es cultivar emociones de alto nivel de energía que a

su vez sean de naturaleza constructiva. Los celos, la rabia, la
venganza, el odio nunca llevan a una buena vida. Son emo-
ciones muy poderosas pero su energía busca destruir más
que crear.
El amor, pasión, determinación, entusiasmo y otras emocio-

nes potenciadoras nos permiten construir un camino de éxito
sostenible. Emociones como la depresión, la tristeza y el
miedo nos restan energía.
Aduéñate de tus emociones a través de tu mente y tu cuerpo.

Así podrás amplificar la energía que necesitas para transfor-
mar tus sueños en realidades.
Las emociones son contagiosas. En gran medida, la calidad

de tus emociones se ve impactada, para bien o para mal, por
Hombre Imparable
los estados emocionales de aquellas personas que frecuen-

tas. Muchas veces se habla de que somos el promedio de las
cinco personas con las que más nos juntamos. Ganas en pro-
medio lo que estás cinco personas ganan. Tienes aspiracio-
nes, expectativas, metas y una actitud muy similar (prome-
dio) a estas cinco personas. A nivel emocional, las cosas fun-
cionan muy parecidas.
Al juntarte con personas de energía positiva, te conectas a

una gran fuente de poder. Júntate con personas negativas,
pesimistas o llamadas “tóxicas” y en poco tiempo te empe-
zarás a parecer a ellos. Obviamente esto reduce tu energía.
¿Cómo es la energía de quienes te rodean, de aquellas per-

sonas a quienes frecuentas?
Si deseas elevar tu energía, busca nutrirte de otros que estén

a tu nivel energético o uno superior. No caigas en la tentación
de – por mantenerte en la zona de confort – pasar mucho
tiempo con personas de baja energía. Al contrario, emplea la
fuerza positiva de otros para encender tu propio poder.
Cuerpo
Quiero compartirte una analogía que te ayudará a entender

mejor cómo producimos, amplificamos, limitamos o reduci-
mos la energía a través de nuestro cuerpo.
Hombre Imparable
Tu cuerpo puede servir como amplificador o como resisten-

cia. Tu fisiología puede ser un instrumento para promover la
elevación de tu energía, o puede ser más bien un inhibidor, un
elemento que desacelera la energía.
Antes tus metas, pasión, oportunidades y decisiones, tu ener-

gía puede comenzar a surgir, pero si tu cuerpo (dadas tus
condiciones físicas) no permite que esa energía fluya y se
manifieste, puede más bien sabotear y bloquear tu capaci-
dad para ponerte en acción y generar resultados.
Así que, ¿qué es tu cuerpo en este momento: un amplificador

o una resistencia?
El cuerpo es conductor de tu energía. Puede ser un semicon-

ductor o un superconductor. El primero se refiere a cuando
deja pasar tu corriente emocional con cierta resistencia. Dis-
minuyendo su intensidad en el tiempo. Un superconductor
deja pasar tu energía sin resistencia y le permite manifes-
tarse con toda su expresión y fuerza.
La superconductividad de tu cuerpo está determinada por

tres factores principales: tu bioquímica, tu corporalidad y tu
estructura.
La base biológica de tu energía reside en tus células. Especí-

ficamente en tus mitocondrias, esas microscópicas plantas
Hombre Imparable
de energía que transforman la glucosa en trifosfato de ade-

nosina o ATP (por sus siglas en inglés). La calidad de tu ener-
gía depende de la calidad de tus células. La energía es vida,
por ende, la calidad de tu vida está también sometida a la
calidad de tus células.
¿Qué determina la calidad de tus células?
El “terreno” en donde se encuentran.
Tus células se encuentran inmersas, dentro de tu cuerpo, en

un mar bioquímico de nutrientes y elementos orgánicos. Si
este mar está contaminado, tus células se debilitan, tu ener-
gía disminuye y tu vida se ve afectada. No necesariamente
en el corto plazo, pero si en el largo plazo. La mayoría de en-
fermedades aparecen cuando tu cuerpo empieza a enveje-
cer.
Este terreno bioquímico se nutre de aquello que ingresas a tu

cuerpo a través de tu estómago, tus pulmones y, en ocasio-
nes (como con las drogas inyectadas), por tu torrente san-
guíneo.
¿Quieres cuidar y elevar tu energía y vitalidad?
Hombre Imparable
Entonces es fundamental mejorar la calidad de aquello que

ingieres. Es necesario, mejor dicho, es vital tomar decisiones
sobre qué ingresa a tu cuerpo y qué no.
Es sorprendente como a veces tenemos muchísimo más cui-

dado en no ponerle el aceite equivocado al motor de nuestro
automóvil, que en nutrirnos con alimentos y bebidas enrique-
cedoras para nuestro bienestar.
El cuerpo es una herramienta fundamental para tu éxito. En él

vives. A través de él puedes experimentar placer y satisfac-
ción. Desde tu cuerpo ejecutas acciones, logras resultados y
eres capaz de disfrutar tus triunfos.
Si hay un común denominador a todo ser humano vivo en

este planeta es el siguiente: existes en un cuerpo.
¿No es acaso lógico que sea importante cuidar de él?
No es mi intención desarrollar en este libro los temas de nu-

trición y ejercicio físico. Mi misión es contribuir a elevar tu con-
ciencia sobre aquellas cosas que potencian tu éxito, te ayu-
dan a convertirte en un hombre mejor y hacen posible que
vivas la vida que quieres.
Hombre Imparable
Tu cuerpo es una pieza esencial para el logro de cualquier

sueño que poseas. No puedes crearlo sin él. Mucho menos
disfrutarlo.
Todo aquello que impacta tu cuerpo impacta tu vida. La ali-

mentación, el ejercicio y el descanso son tres elementos clave
para construirte y forjarte. Te invito a que explores, leas, estu-
dies, experimentes y apliques aquellas prácticas que te per-
mitan vivir, crear y elevar la salud y vitalidad que mereces.
Cuídalo. Nútrelo. Fortalécelo. Transfórmalo en tu aliado para

el éxito. Haz de tu cuerpo un superconductor de tu energía, un
amplificador de tu potencial.
Una fórmula que lo cambia todo
Quiero que analicemos juntos una fórmula que pondrá en

perspectiva muchas de las acciones y resultados que has ve-
nido alcanzando en tu vida.
Es la fórmula del poder personal:
PLM = (C + H + E) E
El Poder para Lograr tus Metas (PLM) está definido por la

suma de C más H más E, elevada por un factor de E.
C es tu grado de conocimiento en relación a un tema o área.
Hombre Imparable
H es tu nivel de habilidades con respecto a un área o situa-

ción. Con la diferencia del conocimiento, H representa el nivel
de experiencia que has ido adquiriendo, qué tanto has afi-
nado esas habilidades en la práctica.
E es tu nivel de energía (espiritual, mental, emocional y física)

en un momento dado.
Cuando te encuentras en un estado de baja energía no te

provoca crear, hacer, jugar, compartir, aprender ni avanzar.
Quieres lo contrario: no hacer nada. Cualquier actividad re-
presenta una gran carga. Un peso que, si puedes, lo dejas
para después.
La capacidad para ponerte en acción es exponencialmente

proporcional a tu nivel de energía. Si estás “apagado”, ten-
drás poca capacidad de movimiento. Si estás “encendido”,
tendrás mucha más fuerza para hacer lo que haga falta para
avanzar.
La determinación que tengas para actuar, es independiente

de tu nivel de tus Conocimientos (C) o tus Habilidades (H). Es
el grado de Energía (E) que experimentas lo que determina si
te pones en acción o, una vez más, dejas las cosas para des-
pués y te mantienes en la misma zona de confort.
Hombre Imparable
Puedes saber mucho, puedes tener bastante experiencia,

pero si no tienes la energía para ponerlas en acción, será
poco lo que puedas lograr. Con la suficiente energía, fácil-
mente podrás actuar para acercarte cada vez más a lo que
quieres.
Conoce a Gustavo
Gustavo, como muchos, es un excelente profesional con am-

plia experiencia en su campo: ventas. Ha leído prácticamente
todos los libros sobre su área y ha asistido a cuanto taller o
seminario ha podido. Posee un gran conocimiento y sus años
de experiencia, fácilmente lo catalogarían como uno de los
mejores vendedores.
Su nivel de Conocimientos (C) y Habilidades (H) podríamos

evaluarlo como un 10, en una escala del 0 al 10. Es uno de los
que más sabe.
Hoy, Gustavo debe dar una presentación de ventas ante un

nuevo y valioso cliente. A esto le sumamos la presión de que
su futuro financiero y el de su empresa pueden variar enor-
memente según el resultado de esa presentación. No es algo
nuevo para él. Como ya lo dijimos, tiene el conocimiento y la
experiencia para lidiar con este tipo de retos.
Hombre Imparable
En un día normal, Gustavo se sentiría sereno gracias a su ex-

periencia y dominio sostenido por años y años de trabajo.
Pero hoy, no sé siente bien.
No importa la razón: un dolor estomacal, una noche de poco

sueño, o incluso sentir que su vida no tiene mayor propósito.
Quizá, simplemente ha comenzado a dudar si ya estará de-
masiado viejo para estos trotes. El hecho es que la Energía (E)
de Gustavo este día, en la escala del 0 al 10, está en un pre-
cario 3.
Gustavo tiene claro qué quiere lograr: cerrar al cliente. Lo que

significará un contrato jugoso. Uno que no sólo le represen-
tará buen dinero ahora, sino ganancias recurrentes en el fu-
turo. Pero su nivel de Poder para Lograr sus Metas está muy
lejos de ser suficiente.
Apliquemos la formula a la situación de nuestro querido Gus-

tavo:
PLM = (10 + 10 + 2) 2
Lo que nos da como resultado:
PLM = 484
Parece un buen resultado: 484.
Hombre Imparable
Pero quiero que conozcas el siguiente caso.
Conoce a Gabriel
Es joven. Soñador. Recién graduado. Con poca experiencia la-

boral.
El grado de sus Conocimientos (C) en relación a las ventas,

está en un simple 2/10. Su grado de Habilidades (H) tampoco
varía mucho, si bien este no es su primer empleo, sólo llega a
un aceptable 4/10.
Pero Gabriel tiene algo que lo distingue del resto de sus com-
pañeros de trabajo: posee una gran Energía. Tiene pasión por
lo que hace, un entusiasmo altamente contagioso y una sed
de crecer y desarrollarse. Quiere asumir reto. Quiere probarse
a sí mismo. Para él, cada desafío es una oportunidad para
fortalecerse y demostrar de lo que es capaz.
Como ya lo imaginarás, su autoestima es alta. Confía en sí

mismo y es de esos hombres que fácilmente catalogarías de
asertivo. Sabe lo que quiere y está comprometido con su
éxito. Su nivel de Energía (E), no es difícil de adivinar, está
arriba, en un poderoso 10 de nuestra escala.
Hoy tiene el mayor reto al cual se haya enfrentado. Dar una

presentación de ventas a un crucial y algo exigente cliente.
Hombre Imparable
Todos los “expertos” de su empresa están ocupados y no hay

nadie más que pueda atenderlo. No hacerlo es un lujo que la
empresa no puede darse en este momento. Y Gabriel, con
gran temor por parte de su supervisor, es asignado para la
presentación.
Siente un vacío en el estómago. Está por hacer algo que

nunca antes hizo. Además, de su éxito o no depende la eva-
luación que realizarán sus jefes.
Sin embargo, su alto nivel de energía le permite conectarse

con los episodios de su pasado que le ayudaron a sobrepasar
diversos retos.
Veamos cómo funciona la fórmula con nuestro entusiasta y

novato Gabriel:
PLM = (2 + 4 + 10) 10
Su resultado sería:
PLM = 1 099 511 627 776
¡Wow! Creo que tú y yo estaremos de acuerdo en algo: los 484

de Gustavo lucen muy insignificantes.
Hombre Imparable
La clave para nuestra energía
Obviamente ésta no es una fórmula científicamente desarro-

llada. Es una metáfora. Una manera de mostrarte el siguiente
principio:
Nuestra energía es mucho más importante y

causa más impacto en nuestras vidas, que
nuestros conocimientos o habilidades.
Potenciar nuestra energía nos permite acceder a recursos in-

ternos que, si bien no se comparan con los conocimientos y
las habilidades que podamos recoger a lo largo de nuestra
vida, puede ayudarnos a subsanarlos.
Pasión, oportunidad y decisión (fuerzas ya hemos aprendido)

sin la energía para concentrarnos, aprovechar y actuar
proactivamente, no causan gran impacto.
Puede que quieras hacer algo, algo que puede vienes pen-
sando por mucho tiempo. Lo has retrasado. Has dudado. Pero,
un día tomas acción, ¿qué hizo la diferencia?
Tu energía.
Hombre Imparable
La diferencia entre saber qué hacer y realmente hacerlo está

en tu capacidad para elevar, mantener y aumentar tu ener-
gía.
La gran pregunta es: ¿necesitas esperar a que tu energía se

eleve mágicamente o empiezas proactivamente a producirla
y potenciarla?
Es decir, una alternativa es esperar a que algo suceda en tu

vida y dispare en ti las reacciones que te pondrán en movi-
miento. Cosa que hacen muchos hombres, esperan a que
algo los saque de su letargo y pereza.
¿Será que esperas sufrir un infarto para recién trabajar en tu

salud?
¿Será que esperas el rompimiento de tu relación de pareja

para recién mejorar la comunicación?
¿Será que esperas encontrarte sin empleo para recién ha-

certe cargo de tu situación financiera?
Son ejemplos extremos, lo sé. Espero que esto no sea parte de

tu vida, pero eso no depende de mis buenos deseos, depende
de tus acciones proactivas.
Hombre Imparable
Nada cambiará hasta que eleves tu energía y te pongas en

movimiento hacia el destino deseado. Puedes esperar que
algo ocurra y rogar por tener la capacidad de lidiar con ello…
O puedes aprender a generar esos cambios de forma proac-

tiva. Dicen que la mejor época para reparar el techo de una
casa es cuando el clima es soleado.
Tu menú de actividades energizantes
La creatividad, el enfoque, la imaginación, la disciplina, son

recursos que escasean en tu vida por falta de energía. Sólo
piensas en el enorme esfuerzo que tendrás que hacer, en lo
pesada o difícil que se ve esa tarea.
Por esto te recomiendo que elabores tu propio menú de acti-

vidades energizantes: un inventario de todas aquellas activi-
dades que puedes realizar en un momento dado para re-
energizarte.
Desde ideas sencillas como lavarte la cara con agua fría

hasta actividades más complejas como ir a un parque o ha-
cer el amor.
Para experimentar energía necesitas invertir energía. Elabora

tu lista tomando en cuenta el siguiente principio:
Hombre Imparable
Mientras más energía inviertas de manera inteligente, más

energía experimentarás.
¿Qué actividades puedes realizar para llenarte de vitalidad?
Identifica al menos 5 alternativas para elevar tu energía. Ase-

gúrate de que la gran mayoría estén bajo tu control. Es decir,
que hacerlas dependa solo de tu decisión. Por ejemplo, tomar
una siesta de 20 minutos puede ser una buena actividad que
recargue tu energía. Salir a una fiesta con tu mejor amigo, no
lo es tanto, puede que tu mejor amigo no siempre esté dispo-
nible, incluso que no haya fiesta a la cual ir.
Asegúrate de tener esta lista en un sitio en el cual la puedas

consultar con facilidad. Puede ser en tu agenda, tu teléfono o
pegada en la pantalla de tu computadora.
Cuando sientas la necesidad de “recargar tus baterías”, ob-

serva tu lista y decide poner una de tus alternativas energi-
zantes en práctica.
Hombre Imparable
Quinta Fuerza:
Recursos
¿Es posible lograr lo que quieres con lo que tienes?
¿Puedes lograr tus metas desde donde te encuentras?
Estas preguntas te llevan a evaluar la posibilidad de tus me-

tas según tus recursos, conocimientos y habilidades actuales.
Por definición, cualquier meta que te plantees implica un reto
y una inversión de los recursos con los que cuentas ahora.
Hombre Imparable
Tu capacidad de lograr tus metas está directamente relacio-

nada a tus posibilidades de vencer los retos que se te presen-
ten. Para superar estos desafíos, necesitas recursos. Recursos
internos y externos. Elementos que permitirán hacer viable el
camino. Elementos que funcionarán como “palanca” para al-
canzar dichas metas.
Mientras más grandes sean las metas, más recursos necesi-

tas. Puede haber pasión. Puedes hacer conciencia de oportu-
nidades. Puedes estar totalmente decidido y comprometido.
Puedes tener un alto nivel de energía diaria. Pero si no cuentas
con los recursos indispensables, la meta no es posible.
La idea es lograr lo que quieres con lo que tienes. No se trata

de decepcionarte por una meta que luce imposible, por el
contrario, se trata de ser inteligente en la planificación y al-
cance de esa meta.
¿Cuántas veces has abandonado sueños o metas porque en

el momento parecían imposibles de alcanzar?
¿Por qué juzgaste, a priori, que estaban fueran de tu alcance?
A momentos parece que desde nos encontramos y quiénes

creemos ser, nuestras metas son solo sueños locos fuera del
alcance de nuestras manos.
Hombre Imparable
Pero… ¿era posible que Nelson Mandela, desde su diminuta

celda en la cual habitó por 27 años, llegara a ser un gran líder
que cambió su país e impactó en el mundo?
¿Era “realista” para Gandhi lograr liberar a su pueblo debili-

tado de uno de los más grandes imperios de la historia, a tra-
vés de la no violencia?
Obviamente ellos creyeron que sí se podía.
La posibilidad no es un rasgo de las metas. Es un juicio que

agrega quién se las plantee. Es una opinión que emites
cuando comparas lo que haces con lo que quieres. Es una
manifestación de las creencias que tienes acerca de lo qué si
es posible y de lo qué no.
Lo que para alguien luce como un sueño prácticamente inal-

canzable, para otro, aún en las mismas circunstancias y con
los mismos recursos, puede ser una meta totalmente realiza-
ble.
Recuerda esto: una meta siempre es alcanzable.
Puede que no desde dónde te encuentras y con lo que cuen-

tas, actualmente. Si éste es tu caso, quizá tu primera meta
deba ser generar los recursos necesarios que luego harán de
tu meta algo en vías de ser alcanzado.
Hombre Imparable
Adueñarte de tu vida requiere ejercitar la fe para observar lo

imposible como una oportunidad. Requiere emplear tu po-
tencial creativo para generar aquellos recursos que te permi-
tan hacer posible lo que hoy pueda parecerte inalcanzable.
Aprende a optimizar y expandir tus recursos ex-

ternos
No eres una isla. Todos estamos conectados. Todo aquello

que quieres lograr, requiere de otros y de la utilización de de-
terminados recursos.
Ya lo hemos establecido: sin recursos suficientes tus metas se

hacen inviables.
Estos recursos externos pueden ser variados: humanos, finan-

cieros, materiales o intangibles. Son ellos los que determinan
en gran parte tu capacidad de alcanzar una meta. Sobre
todo, estos recursos definen el tiempo en el cual tu meta es
alcanzable.
Es verdad que toda meta tiene un proceso natural de desa-

rrollo en un tiempo determinado, pero puedes llegar a acele-
rarlo si logras expandir los recursos con los que cuentas.
Esto dependerá de tu capacidad para administrar inteligen-

temente tus recursos actuales. Puedes tener a tu disposición
Hombre Imparable
grandes recursos, pero si no los sabes aprovechar ni optimi-

zar su uso, de poco sirven.
No sé trata únicamente de cuántos recursos tienes a tu dis-

posición ahora, se trata de cuánto provecho eres capaz de
sacar de ellos.
Muchos ni siquiera se animan a trabajar en sus metas porque

se “tragan” la idea de que no tienen lo necesario, siempre les
falta algo o con lo que cuentan no es suficiente.
Te lo recuerdo, no hay una meta imposible, sólo inviable en el

momento. Puedes empezar tu camino, con lo que tienes
ahora. Tal vez comiences en un 0, tal vez en un 2, quizás como
muchos en un -5, pero el punto es que comiences. Con lo que
tienes ahora. Ya más adelante encontrarás mejores recursos,
pero la aparente falta de ellos – en este momento – no puede
detenerte.
Optimizando tu recurso más importante
Antes de ir a la búsqueda de nuevos recursos, debes ocuparte

en la optimización de los recursos con los que cuentas ahora.
¿Qué es la optimización?
Hombre Imparable
Es la capacidad de aumentar el rendimiento de un recurso. Es

lograr producir más con menos.
Ese “menos” puedes ser interpretado de diversas formas. Me-

nos tiempo. Menos dinero. Menos equipos. Menos conoci-
mientos o menos capital humano.
Todo puede ser optimizado. Con lo que cuentas ahora puede

ser optimizado de forma que produzcas más y mejores resul-
tados. Esta idea puede parecerte una gran generalización,
pero vale la pena vivir con esta creencia.
La búsqueda por la optimización por lograr más con menos,

da pie a la innovación. Innovas cuando logras hacer lo que
venias haciendo de una nueva manera, una que te produce
mejores resultados. Una forma de innovar y optimizar es em-
plear el principio del apalancamiento.
Arquímedes dijo: “Dadme una palanca lo suficientemente

fuerte y un punto de apoyo… y moveré la tierra entera”.
El principio es muy sencillo y poderoso.
Y una de las fuentes de mayor apalancamiento son las rela-

ciones que construyes a lo largo de tu vida.
Tu red de contactos determina tu riqueza futura, tanto en lo

emocional como en lo financiero. Existen 7 formas principales
Hombre Imparable
de aprovechar este capital al apalancarte en otras personas

para acelerar el logro de tus metas. Estas son:
1. Ideas
Apaláncate en las ideas de otros. Es decir, incorpora en tu

pensamiento ideas generadas por otras personas. Tan sólo
mira este libro, muchas de las ideas que te he presentado a
lo largo de estas páginas son de autoría propia. Todas las he
recogido, aprendido e interiorizado de varios maestros, auto-
res y expertos en diversos campos. Y sé que ellos a su vez lo
han aprendido de otros.
Esa es la forma en la que el ser humano ha transmitido su

conocimiento, sus ideas y todo ello lo ha empujado a evolu-
cionar. Sé dice que no hay nada nuevo bajo el sol. Y siempre
habrá algo nuevo que aprender y alguien nuevo a quién es-
cuchar.
Una idea puede cambiar tu vida. Una idea puede dar naci-
miento a un proyecto o puede transformar la forma cómo ves
las cosas. Las ideas transforman el mundo cuando caen en
terreno fértil de la mente de aquellos que pueden hacerlas
realidad. Todo lo que ves y disfrutas hoy, alguna vez fue tan
solo una idea en la mente de alguien.
Hombre Imparable
Una idea puede provenir de una conversación casual, de un

artículo que leas, de un video que miraste por casualidad, de
un libro que llevaba años en tu librero, pero que un día te
llamo la atención, incluso una idea puede venir de tu compe-
tidor. Mientras más expuesto estés a ideas frescas, más posi-
bilidades tendrás de encontrar una que marque la diferencia
en tu vida.
Mientras más grande sea tu red de contactos y personas con

quienes interactúes y con quienes te asocies, mayor cantidad
de ideas podrás escuchar. A veces las ideas aparecen
cuando le cuentas a un amigo o a tu hermano sobre un reto
actual o el deseo de un futuro mejor.
Pero ten cuidado, las ideas no son un poder en sí mismas. De-

penden de ti cultivarlas y transformarlas en resultados pal-
pables. Nuestras ideas nacen muertas y es nuestro trabajo
infundirles vida a través de nuestra acción.
¿Cuál es la próxima idea que puede ayudarte a aumentar tu

calidad de vida, a resolver ese problema que te aqueja desde
hace tiempo, a superar ese reto?
¿Estás atento?
¿Estás en la búsqueda de nuevas ideas?
Hombre Imparable
2. Sabiduría
No solo requieres ideas, también necesitas sabiduría. Cono-

cimiento práctico que te permita lograr lo que quieres de la
mejor manera y en el menor tiempo posible.
Otros ya han transitado el camino que tú quieres transitar.

Otros ya han llegado. Otros ya lo han logrado. Si sigues los
pasos de quienes han caminado, se han tropezado y levan-
tado antes que tú, puedes ahorrarte sufrimiento, dolor y mu-
cho pero mucho tiempo. Como dice Jim Rohn: “El éxito deja
huellas”. Tu trabajo es seguirlas.
Lo que otro ha aprendido en décadas de ensayo y error, mu-

chas veces lo encuentras condensado en un libro que puedes
leer en apenas unos días o incluso en horas.
Es por esto que una de las mejores inversiones de nuestro

tiempo es el estudiar, a través de libros, biografías, entrevistas
y simples conversaciones, el éxito o fracaso de otros.
Una excelente fuente de ideas y sabiduría es emplear lo que

Napoleon Hill en su famoso libro Piense Y Hágase Rico deno-
mina como el principio de Mastermind Group o Grupo de
Mentes Maestras.
Hombre Imparable
Se refiere a formar un equipo de personas que se reúnan con

cierta frecuencia con el propósito de apoyarse mutuamente.
Una reunión donde comparten soluciones y generan ideas
poderosas para la situación por la que está pasando cada
integrante.
Otra estrategia eficaz y poderosa, que es empleada cada vez

más por profesional, empresarios, deportistas y personas
comprometidas con su éxito, es entrar en un proceso de
Coaching Personalizado.
Una práctica cada vez más común donde una persona con-
tinuamente te ofrece ideas, perspectivas, reflexiones, pregun-
tas, sabiduría y retos diseñados para optimizar tu desem-
peño, tu velocidad de aprendizaje y tu capacidad para lograr
lo que quieres.
3. Talentos y habilidades
En este caso me refiero a los talentos y habilidades de otros.

En vez de tratar de esforzarte por mejorar tus debilidades, una
mejor inversión de tu tiempo y energía es concentrarte en
aquello que haces extraordinariamente bien y además dis-
frutas hacerlo. Déjales el resto a otras personas.
Hombre Imparable
Puede que delegar no sea tu fuerte, pero sin dudas es nece-

sario. Es una de las claves que emplean los hombres alta-
mente exitosos. Delegan todo aquello que no esté directa-
mente relacionado con lo que hacen mejor que nadie.
Esta es una poderosa fuente de apalancamiento. A veces no

la aprovechamos porque puede parecernos “caro” el pagarle
a alguien para que haga algo que tú mismo puedes hacer.
Pero el que puedas hacerlo, no significa que debas hacerlo.
¿Cómo saber qué delegar y qué no?
Te contestaría con otra pregunta (para estimular un poco tu

capacidad de reflexionar):
¿Cuánto cuesta tu tiempo y cuál es el mejor uso de él?
El mejor uso de tu tiempo está en aquellas cosas que disfru-

tas, que haces mejor que nadie y te brindan el mayor retorno
financiero y emocional.
La decisión es muy sencilla: si hay otras personas que pueda

hacer el trabajo por menos dinero de lo que cuesta tu tiempo
¡delega!
4. Relaciones y contactos
¿Has escuchado sobre la teoría de los 6 grados?
Hombre Imparable
Es la idea de que te encuentras, como máximo, a seis perso-

nas de distancia de cualquier otra persona en el mundo.
Sólo por ponerte un ejemplo: si quieres hablar con el presi-

dente de tu país, seguramente conoces a alguien que a su
vez conoce a otra persona – y así por cuatro individuos más
– que te puede poner en contacto con el presidente.
Mientras más grande sea tu red de contactos, más cerca es-

tarás de cualquier otra persona en el mundo a la cual quieras
o necesites contactar. De allí la importancia de expandir esa
red. De hecho, puede ser una de las mejores inversiones que
hagas.
En una entrevista, le preguntaron a John D. Rockefeller que era

lo más importante para su éxito. Su respuesta fue contun-
dente: “Quítenme todo, yo me quedo con mi experiencia y mi
lista de contactos y en poco tiempo vuelvo a construir mi for-
tuna”.
Este es el poder de una red. Se expande exponencialmente

cuando te apalancas en las redes de tus contactos. Si cono-
ces a 100 personas y cada una de ellas, a su vez, tiene con-
tactos con un promedio de 100 más, tienes el potencial de lle-
gar a 10 000 individuos.
Así que te dejo con estas preguntas:
Hombre Imparable
¿Qué puedes hacer para expandir tu red?
¿En quién puedes apalancarte para contactar a personas

claves en el logro de tus metas?
5. Dinero
La idea es sencilla: genera valor para otros y estos correspon-

derán a ese valor con dinero. Esta es una de las ideas más
poderosas que puedes aprender a tener éxito financiero.
El dinero necesario para desarrollar tus proyectos no siempre

tiene que venir de ti ni tampoco de una institución bancaria.
Puede provenir de otras personas a quienes logres convencer
éticamente con una buena idea y un buen plan sobre cómo
llevarlo a cabo. La clave está en el valor que puedas ofrecer.
Mientras más valor les brindes a otros, más valor y recursos
estarán dispuestos ellos a poner a tu disposición.
¿De qué sirve un sueño o meta si no tienes los recursos finan-

cieros para concretarlo?
Puedes ser práctico, como cediendo una parte de las ganan-

cias (y hasta en ocasiones parte del control) para hacer reali-
dad tu proyecto. En ocasiones, es preferible tener el 10% de
algo que el 100% de nada.
Hombre Imparable
Si bien hay muchas maneras de negociar acuerdos en donde

otros coloquen el capital financiero requerido para tus pro-
yectos, la base es la siguiente:
Si tienes la manera de ofrecerles valor a

otros a través de una idea sensata y de
gran potencial, tienes la posibilidad de apa-
lancarte en el dinero de otras personas.
Sobre todo, cuando las personas con dinero tienen cada vez
más dinero y más necesidad de ponerlo a producir de mane-
ras innovadoras, atractivas y productivas.
Si tienes la idea y estás dispuesto a entablar una relación be-

neficiosa para ambas partes, las puertas financieras pueden
abrirse ante ti.
6. Reputación
Cuando alguien está posicionado en un mercado como au-

toridad o experto, su palabra vale oro. Puede que en este mo-
mento seas un desconocido en el medio en el cual quieras
desarrollarte, pero si puedes obtener el patrocinio o la reco-
mendación de una persona reconocida, tienes una gran
parte de la batalla ganada.
Hombre Imparable
Las palabras, cuando vienen de personas exitosas y respeta-

bles, tienen peso. Lo que ellos dicen se escucha. Lo que ellos
recomiendan se explora. Lo que ellos avalan se compra. Es
como una certificación muy valiosa.
Si lo haces de manera inteligente, puedes apalancarte sobre

la reputación positiva de otros como si fueran portaaviones.
Utilizas esa plataforma como despegue de tu propio posicio-
namiento.
Una de las principales razones por las cuales las personas o

empresas se abstienen de aprovechar una oferta, así tenga
un gran interés por ella, es la duda sobre la veracidad de los
resultados que promete un producto o servicio. Puede existir
interés, pero falta certeza. La percepción de riesgo al equivo-
carse adquiriendo un producto servicio los detiene de com-
prar.
Una persona de gran reputación puede proveer a tus clientes

de la certeza necesaria al certificar el valor de lo que ofreces.
Esto puede impulsar a tus prospectos a adquirir tus produc-
tos, servicios o ideas.
Así que piensa: ¿qué autoridad puede ayudarte a apalan-

carte?
7. Materiales
Hombre Imparable
Hay quienes cuentan con recursos materiales que no tienes,

pero que son necesarios para tu progreso. Sea un espacio de
oficina, una computadora, un automóvil o cualquier otro ele-
mento material. Hay quienes pueden apoyarte permitiéndote
usar sus recursos.
En algunos casos puede que tengas la necesidad de pagar u

ofrecer algo a cambio por el uso de estos recursos. En otros
casos, son amigos o familiares que estarán gustosos de ayu-
darte en la construcción de tu éxito.
Aprende a conectar con tus recursos internos
Las fuerzas que hemos visto hasta ahora son recursos inter-
nos: pasión, oportunidad, decisión y energía. Son fuentes que,
al usarlas, aumentan tu capacidad para asumir tus retos. De
allí la importancia que le hemos dada a cada una.
Quiero que ahora exploremos tres recursos internos adicio-

nales, quizá los más determinantes de todos a la hora de res-
ponder si puedes o no lograr una meta. Me refiero a tus talen-
tos, emociones y… el tercero te lo digo después.
Talentos
Hombre Imparable
En el libro Ahora, Descubra sus Fortalezas, Marcus Bu-

ckingham y Donald O. Clifton proponen un revolucionario pro-
grama que muestra cómo desarrollar las fortalezas y talentos
de las personas, basado en las investigaciones desarrolladas
por la empresa Gallup con más de 2 millones de personas.
La propuesta de Buckingham y Clifton rompe con muchos de

los paradigmas hasta ahora presentes en la forma en cómo
se desarrolla el capital humano.
Una de las premisas básicas de los autores es que una forta-

leza depende de un talento subyacente. Es decir, sin talento
no hay fortaleza, pero esto nos deja con algunas preguntas:
¿qué es un talento?, ¿qué es una fortaleza?
Según Buckingham y Clifton:
“El talento es cualquier patrón recurrente de

pensamiento, sentimiento o comportamiento que
se pueda aplicar productivamente”.
En otras palabras: es cualquier tendencia natural que poseas,

que se manifieste en un patrón recurrente de pensamientos,
sentimientos o acciones, el cual puede ser aprovechado.
Hombre Imparable
Por ejemplo, si tienes la facilidad innata de hacer amigos, esto

es un talento. También lo es la capacidad de pintar, tocar al-
gún instrumento, diseñar, construir o incluso generar ideas
creativas, hay talento allí.
Para los autores, una fortaleza es lo que te permite un desem-

peño casi perfecto en una actividad. Para lograr este tipo de
desempeño se requiere de talento, de conocimiento y habili-
dades. El conocimiento y habilidades pueden ser aprendidos.
Sin embargo, el talento, dentro de la tesis presentada en el
libro, no lo es.
Posees talentos únicos que esperan ser transformados en

fortalezas. Y la mejor inversión de tu tiempo y energía está en
el desarrollo de los mismos.
¿Qué hacer con tus debilidades?
Según los autores, necesitas hacerte cargo de aquellas que

representen obstáculos para tu éxito, pero por más que te es-
fuerces, nunca llegarás a transformar una debilidad en forta-
leza. Podrás mejorar tu desempeño en aquellas cosas que no
sean naturales para ti, pero no lograrás la excelencia. Tu
oportunidad para dar lo mejor de ti, se encuentra en tus for-
talezas y en la base proporcionada por tus talentos.
Hombre Imparable
Según la organización Gallup, trabajar en las debilidades te

permite pasar de -10 a 0. Desarrollar tus fortalezas es lo que
te lleva al éxito. Hace posible elevar tu desempeño de 0 a 10.
Además, quiero que tengas en cuenta lo siguiente: concen-

trarte en tus debilidades disminuye tu autoestima. Nunca se-
rás el mejor en ello. Enfocarte en lo que no tienes, en quién no
eres, llega a ser muy frustrante. Lo que te hace especial y va-
lioso no son tus debilidades, son tus talentos.
Al concentrarte en tus talentos y buscar transformarlos en

fortalezas, te conviertes en un ser más productivo y feliz, te
llenas de energía.
Se trata de conectarte con lo especial que hay en ti, no con lo

que te hace falta. Por esto tus talentos son uno de tus princi-
pales recursos internos. Súmale conocimientos y nuevas ha-
bilidades a tus talentos y serás el mejor.
Emociones
Ya hablamos de que las emociones no son iguales. Algunas

son de alto nivel de energía y te impulsa a la acción y otras te
restan poder. La hemos llamado potenciadoras cuando au-
mentan tu capacidad de tomar acción y empobrecedoras
cuando disminuyen tu capacidad para lograr lo que deseas.
Hombre Imparable
Como ya lo habrás adivinado, es vital diseñar emociones po-

tenciadoras y aumentar la frecuencia con la cual las experi-
mentas.
¿Te imaginas sintiendo cada día esos estados emocionales

que te llenan de poder?
Y una mejor pregunta es: ¿cuáles emociones conectan con tu

poder personal?
Aunque no es una regla, aquí hay una lista de 7 emociones

que te ayudan a potenciarte y son vitales cuando debes que
enfrentarte a algún reto.
Determinación. Una emoción producto de tus decisiones y

de tu compromiso por ver lo que deseas hecho realidad. Te
permite persistir y llegar hasta el final. A través de la determi-
nación das lo mejor de mí. Te empujas a caminar el kilómetro
extra.
Ser fuente. Me refiero a una sensación de saber que eres el

origen de lo que ocurre, contrario a sentirte víctima. Saber que
en ti está el poder para transformar todo en una oportunidad.
Darle un significado potenciador a lo que te sucede y actuar
para aprovecharlo. Te ayuda a reconocer que tienes el poder
para transformar ti vida, si aprovechas el ahora. Eres tú quien
decide y, por ende, decides el resultado que quieres obtener.
Hombre Imparable
Fe. Es el estado de confianza. Es entender que no importa lo

que te suceda, todo va a salir bien. Es confiar en ti, en tus ta-
lentos y en tus habilidades. Confiar en que va a ocurrir el me-
jor escenario posible. Cuando sientes esta emoción tus dudas
se diluyen y tu esperanza se fortalece.
Coraje. Te ayuda a ir más allá de tus miedos. Es entender que

debes actuar a pesar de sentir miedo. A pesar de las dudas.
A pesar de las aparentes limitaciones. Es comprender que los
miedos pueden ser transformados en oportunidades de cre-
cimiento y descubrimiento, que te conducen a una versión
superior a la que eres ahora.
Gratitud. Agradecer te ayuda a conectar con la abundancia

que rodea mi vida. Es comprender lo afortunado que eres, por
estar aquí y ahora. Reafirma tu existencia y tu propósito.
Agradecer te permite abrirte a las oportunidades, a enfo-
carme en lo que sí quieres y dejar atrás esa mentalidad de
escasez y limitaciones. Comprendes que tu vida es un regalo
y la tratas como tal.
Curiosidad. Sientes que hay mucho por aprender, experi-

mentar y vivir. Y no quieres perderte todo el gran viaje que
puede ser tu vida. Siempre puedes aprender algo nuevo.
Siempre habrá alguien interesante a quien escuchar. Siempre
habrá algo nuevo por descubrir.
Hombre Imparable
Paciencia. Puede que te cueste mucho aplicarla a tu vida.

muchos hombres no entienden que ser impaciente es igual a
no confiar en ti ni en las decisiones que tomas. Ser impaciente
es ser alguien inseguro que busca afirmar sus acciones con
resultados inmediatos. Ser paciente es comprender que la
vida tiene tiempos justos y que tu parte en todo esto es hacer
lo mejor que puedas hacer. Es aprender a confiar en ti y en la
vida.
¿Qué otras emociones potenciadoras añadirías?
Es sencillo diseñarlas, sólo reflexiona en las siguientes pre-

guntas:
¿Cuáles emociones te ayudarían a superar

cualquier reto?
¿Cuáles emociones te permitirían conec-

tarte con tu fuerza masculina y amplificarla?
Si prácticas estas emociones diariamente, tu fuerza aumen-

tará significativamente. Por ejemplo, cada mañana puedes
conectarte con la gratitud. En cuanto te despiertes, antes de
levantarte de la cama, por unos minutos cierra los ojos y co-
mienzo a agradecer por todas las personas, experiencias y
cosas que hay en tu vida.
Hombre Imparable
Al aplicar esta o cualquier otra estrategia que puedas pensar

para ti, puedes fortalecer tus “músculos emocionales”. Así
como quien va al gimnasio para levantar pesas y endurecer
sus bíceps, puedes crear tus propias rutinas para desarrollar
al máximo tu fe, certeza, sensación de paz, amor, asombro,
entusiasmo o cualquier emoción que sea importante para ti.
Y… ¿qué pasó con el tercer recurso interno?
Este último recurso es tan esencial y poderoso para tu éxito

que no me parecía justo comprimirlo como un punto más en
este capítulo.
Además, no solo es un gran recurso interno, sino una fuerza

en sí misma. Algo que puede expandir o limitar tu poder para
lograr lo que quieres. Por ello, lo exploraremos a mayor pro-
fundidad en el siguiente capítulo.
Hombre Imparable
Sexta Fuerza:
Creencias
Completa las siguientes frases con lo primero que surja en tu

mente:
Las personas son…
La vida es…
El dinero es…
Los que tienen mucho dinero son…
Hombre Imparable
Los judíos (cristianos, budistas, musulmanes, etc.)

son…
Las relaciones de pareja son…
Yo no soy bueno para…
Yo soy bueno para…
Lo que me sucede es que…
Lo que me impide avanzar es…
No importa cómo hayas completado las frases, lo más seguro

es que reflejan tus creencias. Pero me estoy adelantando a
mí mismo. Vayamos por partes.
¿Qué es una creencia?
Es una sensación de certeza acerca del significado de algo.
Esta definición nos ayuda a diferenciar un mero pensamiento

de una creencia. Una creencia es algo que sientes que ES así.
En ti existe una certeza asociada a esa idea. Te sientes seguro
de su significado. Es más, en tu vida esa creencia se com-
prueba una y otra vez.
Una cosa es decir en tono de juego que la vida es dura. Otra

muy diferente, es si esa creencia vive dentro de ti junto a una
Hombre Imparable
sensación de que realmente la vida es dura. La primera, es

simple pensamiento, no tiene consecuencias trascendentes.
La segunda tiene el poder de determinar tu vida.
Como decía Henry Ford: “Si crees que puedes o crees que no
puedes, estás en lo cierto”.
Volviendo al ejercicio anterior. Completar esas frases puede

ayudarte a hacer consciente las creencias que tienes en re-
lación a esos temas.
Si ante la frase “el dinero es…” tu respuesta fue “…peligroso”,

esto puede explicar por qué tu situación financiera no es de
las mejores.
Si ante la frase “Las relaciones de pareja son…” tu respuesta

fue “…un dolor de cabeza”, que no te sorprenda que tu rela-
ción actual (o la falta de una) sea un gran peso para ti.
Creas lo que piensas, no lo que quieres. No son tus deseos los

que en última instancia determinan tu vida. Es aquello que, en
lo profundo de tu ser, piensas y crees cierto.
¿Qué determinan tus creencias?
¿Es posible… o no lo es?
¿Es beneficioso… o dañino?
Hombre Imparable
¿Es temporal… o eterno?
¿Es demasiado… o puedes con esto?
¿Te ayuda… o te dificulta?
¿Es una oportunidad… o un obstáculo?
¿Es una bendición… o un castigo?
Son tus creencias las que te brindan las respuestas. Por esto,
considero que no es importante, sino vital adueñarte de tus
creencias y asegurar que las mismas estén alineadas con tus
metas. Es vital que sean pilares y no grietas en tu éxito.
¿Qué es posible para ti?
Tus creencias definen los límites de lo que es posible para ti.

De aquello a lo que te atreves. De aquello que aceptas. De lo
que es realmente importante.
Puedes tener todos los recursos externos (relaciones, dinero,

materiales, etc.), pero de nada te servirán si no tienes las
creencias que te permitan emplearlos.
Lo mismo sucede con tus recursos internos. Estos son prácti-

camente infinitos, cada día más y más investigaciones nos
Hombre Imparable
dan luces sobre el gran poder de nuestro cerebro. Del gran

potencial que yace dormido y que no sabemos cómo utilizar.
Son tus creencias las que determinan cuánto de ese poten-

cial desarrollas en tu vida.
Creencias potenciadoras vs. empobrecedoras
¿Crees que puedes… o que no puedes?
¿Crees que tienes lo que se necesita… o te crees menos?
¿Crees que eres suficiente… o que no lo eres?
Al igual que las emociones, podemos hablar sobre dos tipos

de creencias: potenciadoras y empobrecedoras. Las poten-
ciadoras son aquellas que sacan lo mejor de ti. Las empobre-
cedoras apagan tu potencial y motivación.
Imagina que eres una fuente de luz, como un sol en miniatura,

encerrado en una gran esfera. Esta esfera, que funciona
como recipiente de tu luz, son tus creencias. Es el conjunto to-
tal de lo que crees sobre la vida, sobre las personas, cosas,
situaciones y más importante: es todo lo que crees sobre ti
mismo.
Cuando nacemos esta esfera es transparente. Eres capaz de

ver a través de ella. La luz que eres, es capaz de atravesarla
Hombre Imparable
sin dificultades. A medida que crecemos las paredes de esta

esfera se van tornándose de un color blanco opaco. Deja ver
algo de luz en su interior, pero no permite que se proyecte de-
masiado en el exterior. Al menos, no con la intensidad que an-
tes lo hacía.
Sin embargo, en algunas zonas también se puede apreciar

que algunas áreas de la esfera han pasado a ser negras.
Otras mantienen el aspecto transparente. Obviamente, las
áreas negras bloquean la luz, las transparentes permiten la
máxima proyección a toda intensidad.
Las creencias empobrecedoras son esas manchas negras en

tu esfera. Las creencias potenciadoras son esas zonas trans-
parentes.
El resto de la esfera, esas áreas opacas, es en donde no hay

creencias muy arraigadas acerca de tu potencial. Ni te restan
ni te potencian.
Hay personas cuya esfera es más negra que transparente.

Pueden ser un sol brillante. Sin embargo, sus creencias em-
pobrecedoras impiden que brillen con toda intensidad.
La buena noticia es que las zonas negras pueden transfor-

marse en transparentes y las blancas pueden pulirse para
también dar paso a tu luz. Las creencias se pueden cambiar.
Hombre Imparable
Todos nacemos como hojas en blanco. A cada paso, a cada

experiencia, a cada aprendizaje le damos forma a nuestra
identidad. Encontramos una definición de quiénes somos.
Al principio, cada experiencia era nueva y las experimentabas

en toda su plenitud. Ver un gato o un perro podrían ser even-
tos magníficos. Probar por primera vez el helado era algo má-
gico. Tener tu primera pesadilla, algo terrorífico.
Luego, fuiste asignándole significados a las cosas que te su-

cedían o que no sucedían: “esto es…”, “las cosas son…”, “la vida
es…”, “yo soy…”. Estas conclusiones fueron formando tus
creencias, como una especie de atajos mentales que te ayu-
dan a procesar las experiencias y tomar decisiones con ma-
yor rapidez.
Una vez instalada una creencia como “los perros son peligro-
sos” (luego de que uno de ellos te mordiera), esta te ayudaba
a protegerte en futuros encuentros con los perros.
O una creencia como “el dinero corrompe a las personas”

(después de que un amigo o familiar tuyo te ha estafado o
engañado), hace que tomes más precauciones sobre a quié-
nes les prestas tu dinero.
Hombre Imparable
Algunas de nuestras creencias (quizás una del tipo “yo no

sirvo para…”) fueron manchando la pared de tu esfera, oscu-
reciéndola. Otras creencias permitieron que tu potencial sur-
giera ante el mundo a través de esas áreas transparentes.
Hoy puedes examinar tu esfera, tu sistema de creencias. Pue-

des hacer consciente aquellas áreas en las cuales las man-
chas negras te impiden desarrollarte, para luego remover la
“pintura” y obtener la transparencia que quieres.
Profecías auto-cumplidas
Una vez instalada una creencia en tu mente subconsciente,

ésta tiende a aferrarse con cada vez mayor fuerza. Además,
que funciona como filtros de la realidad. Mejor dicho, definen
lo que es “realidad” para ti.
Continuando con la imagen de tu esfera de creencias: es

desde dentro de ella que observas al mundo. Si mantienes la
creencia “el dinero es malo”, está mancha en la pared de tu
esfera, te impedirá ver todo lo bueno beneficioso que puedes
ser el dinero para tu vida.
Ves el mundo por el filtro de tus creencias. A través de ese

filtro lo sientes. Lo experimentas. Respondes ante él. Solo per-
cibes como real aquello que está alineado con tus creencias,
Hombre Imparable
lo demás queda fuera. Simplificándolo, las creencias definen

nuestra realidad de la siguiente forma:
Resultados Creencias
Acciones Pensamientos
Sentimientos
Cómo te ves a ti mismo, a los demás y al mundo en general,

alimenta tus emociones y determina tus acciones, todo ello
te lleva a los resultados que estás obteniendo hoy, los cuales
refuerzan tus creencias.
Si crees que es posible, sientes coraje y te atreves, todo esto

te genera un resultado. Si lo ves como una amenaza, sientes
miedo y te alejas, también obtendrás un resultado. El punto
es:
¿Qué resultado estás generando? ¿Uno que te acerca o te

aleja de lo que quieres?
Hombre Imparable
Los resultados que obtienes refuerzan la creencia – potencia-

dora o empobrecedora – que comenzó el proceso. Tu poten-
cial puede ser prácticamente infinito, pero son tus creencias
las que determinan cuánto de ese potencial desarrollas a tu
favor.
Si tus creencias sobre ti son pequeñas, ¿cómo serán tus ac-

ciones?
Pequeñas.
Te atreves a poco porque tus creencias empobrecedoras así

lo dictan y al ser pequeñas, tus expectativas también lo son.
Reduces tus esfuerzos porque sientes que lograrás poco. Ac-
ciones pequeñas generan resultados pequeños.
Estos resultados refuerzan tus creencias empobrecedoras:

“yo sabía que esto iba a pasar”, “es evidente que yo no sirvo
para nada y menos para…”.
Esto disminuye cada vez más tus expectativas. Aumenta tus

pensamientos y sentimientos de incapacidad. Te atreves a
menos cada vez. Actúas de forma débil, o de plano, no actúas.
Esto afirma los pensamientos de que vales poco, no puedes,

no sirves para esto, no es posible. Tus creencias empobrece-
doras se han fortalecido, lástima que no podamos decir lo
Hombre Imparable
mismo de ti. Y repites el ciclo, una y otra y otra y una vez más.
Este ciclo puede continuar contrayéndose hasta paralizarte.
Por fortuna, el ciclo también funciona expansivamente.
Si decides creer y soñar en grande, te atreverás a ejecutar

acciones grandes.
¿Cómo serán tus resultados?
Grandes.
Los resultados grandes conllevan grandes logros y aprendi-

zaje. Con la actitud correcta, pasan a reforzar positivamente
tus creencias. Ahora sabes que puedes. Te dices: “¡Sí! Yo sabía
que si podía.”
Ahora, con la retroalimentación positiva de tus resultados, tus

creencias, se verán fortalecidas. Habrás cambiado todo, tus
pensamientos, sentimientos, tus acciones y, sobre todo, tus
resultados. Todo ello vuelve, una y otra vez, a reforzar esas
creencias potenciadoras.
Si deseas lograr más, tiene que ser capaz de creer en grande.

Solo así te atreverás a tomar más acciones. Solo esto te lle-
vara a mejores resultados.
El efecto Pigmalión y la profecía hecha realidad
Hombre Imparable
En la inmensa mayoría de los casos, el éxito y el fracaso son

el resultado de una profecía hecha realidad. Este fenómeno,
conocido también como efecto Pigmalión, nos muestra como
los resultados que obtenemos están determinados por nues-
tras propias expectativas.
De acuerdo a la mitología griega, el rey Pigmalión se enamoró

de una estatua de mujer que él mismo había modelado. Tan
profundo era su amor por la estatua que la diosa Afrodita de-
cidió darle vida para que Pigmalión pudiera casarse con ella.
Esta es la esencia de la profecía hecha realidad: todo aquello
que esperemos que suceda, tiende a suceder.
El doctor Robert Rosenthal (descubridor del efecto Pigmalión)

cuenta que un joven investigador, encargado de evaluar las
pruebas de admisión de los nuevos estudiantes, decidió ha-
cer algo novedoso al comienzo del año escolar.
A algunos profesores se les informó que iban a estar a cargo

de un grupo de estudiantes brillantes. Los resultados de las
pruebas de admisión de estos estudiantes así lo demostra-
ban. Tenían una capacidad intelectual por encima de la me-
dia.
A los demás profesores se les dijo que iban a estar a cargo de

un grupo de estudiantes no tan bueno. Las pruebas habían
Hombre Imparable
mostrado que tenía algunas deficiencias y su desempeño era

normal, e incluso un poco por debajo de la media.
El año escolar acabó. Los resultados y el desempeño de los

estudiantes brillantes confirmaban lo que las pruebas inicia-
les habían descubierto. Calificaciones altas. Mayor creativi-
dad. Desempeño sobresaliente. Incluso algunos de ellos fue-
ron catalogados como superdotados.
¿Qué pasó con el grupo promedio?
Como era de esperarse habían tenido un rendimiento pro-

medio. Sus calificaciones no eran nada del otro mundo. Y
como ya lo habían predicho, algunos tuvieron deficiencias en
su aprendizaje.
Al finalizar el año, el joven investigador convocó a todos los

profesores. Les informó que los dos grupos iniciales de estu-
diantes habían sido escogidos al azar. No había estudiantes
brillantes ni con deficiencias. Todos lograron resultados simi-
lares en sus pruebas de admisión. La única diferencia entre
ellos era la etiqueta que el evaluador les había asignado.
Los encargados de estudiar los resultados de esta investiga-

ción solo pudieron concluir que la causa de tan asombrosa
diferencia en los resultados y desempeño era la expectativa
creada por los profesores.
Hombre Imparable
Quienes creyeron estar a cargo de estudiantes brillantes,

asumieron que debían ser capaces de dar más de lo que se
esperaba, y por ello les exigieron mucho más. Obviamente los
estudiantes respondieron a esa exigencia, era lo que se es-
peraba de ellos. Mientras que los profesores que creyeron es-
tar a cargo de un grupo promedio decidieron no exigirles de-
masiado. Tenían deficiencias, solo podían rendir lo normal.
El doctor Rosenthal explica que este no es más que otro ejem-

plo de cómo el efecto Pigmalión puede sabotear nuestro
éxito. Si esperamos que sucedan grandes cosas en nuestra
vida, actuaremos de acuerdo con esas expectativas. Por otra
parte, si esperamos muy poco de nosotros mismos o de los
demás, generalmente nuestras expectativas no serán de-
fraudadas.
Seguramente ya lo has adivinado. El poder de las creencias

reside en que éstas nos empujarán por una ruta específica en
la vida. Cree que puedes y tu vida será un reflejo de ello. Cree
que no puedes y tu vida será un monumento a esa creencia.
¿Recuerdas la frase que se le atribuye a Einstein?
“La locura está en pretender lograr resulta-

dos diferentes, haciendo siempre lo mismo”.
Yo la complementaria con lo siguiente:
Hombre Imparable
La locura está en pretender hacer y lograr cosas diferentes,

sin dejar atrás tus creencias empobrecedoras.
Si quieres lograr resultados diferentes, necesitas creencias

que potencien tu capacidad de tomar mejores decisiones y
nuevas acciones.
El poder de tus creencias
Tus creencias dan forma a tu vida y definen quién eres. Ellas

te dan el permiso de creer en lo que te apasiona o te niega la
posibilidad de disfrutarlo. A través de ellas identificas oportu-
nidades y las aprovechas. A través de ellas dejas pasar opor-
tunidades por falta de visión y coraje. Según tus creencias de-
cides avanzar o te dejas paralizar por el miedo.
Quiero compartir contigo 7 creencias que poco a poco pue-

des ir sumando a tu ser. Las cuales pueden definir quien eres,
lo que haces, lo que obtienes y lo que puedes lograr.
1. Soy creador de mi propia realidad y

como tal, tengo el poder de cambiarla
Esta es una de las creencias más poderosas que puedes

adoptar en tu caminar. Quizá no tengas el poder de cambiar
algunas de las circunstancias que te rodean, pero definitiva-
mente tienes la capacidad de elegir el significado que les
Hombre Imparable
otorgas. Al elegir un significado potenciador a lo que te su-

cede, decides hacerte cargo y cambiar tu realidad. Las cosas
no te suceden a ti, suceden para ti.
¿Qué sería tu vida si interiorizarás esta creencia en tu mente?
¿Qué cambiaría? ¿Cómo cambiarías?
Quizás no puedas cambiar lo externo. Pero es lo interno –

cómo percibes lo que te sucede – lo que en ultimas define lo
que vives.
2. Todo lo que sucede es por una razón

y ésta me sirve para avanzar
Podemos no entender lo que sucede, pero esto no impide te-

ner fe.
A W. Clement Stone, quien llegara a ser una de las personas

más adineradas de Estados Unidos y dueño de una de las
empresas aseguradoras más poderosas de ese país, se le
conocía como un paranoico a la inversa.
¿Qué es un paranoico?
Hombre Imparable
Una persona que ve amenazas por todos lados. Uno a la in-

versa, es una persona que ve oportunidades en todas las ex-
periencias y que supone que todo el universo confabula para
su éxito.
Cuando surgía un problema, W. Clement Stone inmediata-

mente decía: Esto es bueno.
¿Cómo que bueno? – le preguntaban sus colaboradores sin

entender – ¿Acaso no te das cuenta del tamaño de problema
que esto representa?
W. Clement Stone solo decía: Aún no sé cómo es bueno, solo

sé que lo es. Ahora hay que averiguar cómo es que esto nos
sirve.
Se trata de tener fe, aun cuando la razón no sea evidente para

otros. De alguna manera, todo lo que te sucede contribuye a
tu evolución. Es como esos eventos que experimentaste al-
guna vez, no los entendiste al principio, los rechazaste, pero
cuando miras hacia atrás surge la gratitud. Esos eventos
aparentemente duros en su momento, te han ayudado a
moldear quién eres ahora.
Sí todo lo que te sucede en este momento es por alguna ra-

zón, la cual extrañamente te brinda la mejor oportunidad
Hombre Imparable
para crecer y evolucionar, por qué no confiar en que las cosas

que te suceden son para tu bien.
3. El miedo no es más que una señal

para estar alerta
El miedo no está allí para amargarte la vida. El miedo te está

indicando el camino que te ofrece la mayor oportunidad de
crecimiento, desarrollo y fortalecimiento.
Es en territorio del miedo y fuera de la zona de confort donde

yacen las mayores oportunidades. Cuando quieres alcanzar
una meta es el miedo lo que te indica el camino a seguir,
aquello que temes representa tu éxito.
Si vieras al miedo como tu aliado, como una señal que marca

tu camino de mayor evolución, ¿a qué te atreverías?
4. Soy un regalo para el mundo
Todas las personas que a lo largo de la historia de la huma-

nidad han dejado un legado tenían esta creencia muy in-
teriorizada.
Yo soy un regalo para el mundo. Así como tú. Todos lo somos.

Cada persona en este planeta posee una combinación única
Hombre Imparable
de pasiones, talentos e ideas. Nada ni nadie puede replicar

exactamente el hombre que eres.
Nuestra civilización evolucionará en la medida que cada vez

más personas se vean a sí mismas como un regalo y hagan
del darse a otros, parte esencial de su misión en la vida.
5. Mi poder está en el presente
El pasado es un recuerdo y el futuro una visión. El pasado no

tiene por qué repetirse. El futuro no tiene que ser igual. Puedes
cambiar.
¿Cuándo? Ahora.
Es este el momento. No antes. No después.
Tu historia no tiene por qué determinar tu futuro. Es parte de

quién eres, pero puedes elegir otro camino. El momento de
construir el futuro es ahora. Es ahora cuando puedes cambiar
tu dirección para llegar a otro destino.
Es tu presente el que te brinda la libertad para elegir, mejorar,

perdonar, crear, agradecer, disfrutar o para amar.
¡Carpe diem! ¡Aprovecha el día!
Hombre Imparable
Aduéñate de este momento que es completa y únicamente

tuyo.
6. Lo importante no es dónde me encuentro,

sino hacia dónde me dirijo
Tus acciones y decisiones pasadas son los responsables de

dónde te encuentras ahora. Sin embargo, el destino al cual
llegarás de aquí a 1, 3, 5, 10 o 20 años dependerá más de la
dirección en la cual te mantengas de ahora en adelante.
No hace falta dar un giro de 180 grados para transformar tu

destino. Un cambio en tu dirección de pocos grados, a me-
dida que pasa el tiempo, te lleva a un destino totalmente di-
ferente.
Hoy te encuentras en un punto A. Si sigues tal y como vas, vas

a llegar a un punto que puedes ser el que quieras o no. Si no
es el destino que deseas, con tan solo hacer un ligero cambio
en tu dirección (incorporando un nuevo hábito, integrando
nuevas creencias, tomando nuevas acciones, asumiendo
nuevos compromisos) llegarás a un destino totalmente dife-
rente. Tarde o temprano llegarás. La pregunta es: ¿a dónde?
El momento de evaluar, redefinir y cambiar tu dirección es

¡ahora! Y el poder para hacer esto está en ti.
Hombre Imparable
7. Mi entusiasmo impulsa mi poder para

crear
Entheos, la palabra griega de la cual surge etimológicamente

“entusiasmo”, quiere decir “en Dios”.
Aquello que te entusiasma – te apasiona – es la vibración

misma de la creación suprema. El entusiasmo es una posibi-
lidad de crear. Donde hay entusiasmo, hay posibilidad. Si
sientes entusiasmo por algo, significa que de alguna manera
puede hacerse realidad.
Dedica tu vida a seguir el sendero del entusiasmo. Pregúntate

constantemente: ¿estoy construyendo lo que más me entu-
siasma? Si no es así, quizá es hora de hacer un cambio de
dirección.
Seguir el camino que más te entusiasma no significa que

nunca harás cosas aburridas o con las que sientas algo de
resistencia. Seguir este camino apunta a una visión, a un pro-
pósito. Y a veces para seguirlo, necesitamos ejecutar accio-
nes que nos atraen poco. Lo mágico sucede cuando nuestras
acciones diarias están alineadas a un propósito mayor. Esto
nos hace sentir más vivos.
Hombre Imparable
Séptima Fuerza:
Acción
Un arquero quiso cazar la Luna.
Noche tras noche, sin descanso, lanzó sus flechas hacia el

astro.
Los vecinos comenzaron a burlarse de él. Inmutable, siguió

lanzado sus flechas.
Nunca cazó la Luna, pero se convirtió en el mejor arquero del

mundo.
Hombre Imparable
Este corto cuento de Alejandro Jodorowsky, demuestra en

gran parte lo que veremos en este capítulo.
Pasión. Oportunidad. Decisión. Energía. Recursos. Creencias.

Todas se concentran con un solo propósito: acercarte a tus
metas hasta hacerlas realidad, se manifiestan en la acción.
Es a través de tus acciones que eres capaz de transformar tu

vida y lograr tus metas. Y en este capítulo aprenderás a tomar
acción masiva e inteligente.
La paradoja del fracaso-éxito
Un día, cuando Pablo Picasso ya era un hombre mayor, sen-

tado a la mesa de un café en España, dibujaba algo en una
servilleta usada. Muy despreocupado, se dedicaba a bosque-
jar lo que le viniera en gana en ese momento.
Una mujer sentada cerca de él, lo observaba con admiración.

Después de un rato, Picasso terminó de beber su café, arrugó
la servilleta y se disponía a desecharla en su camino hacia la
salida.
La mujer lo detuvo.
Hombre Imparable
Espere – dijo -, ¿puedo conservar la servilleta en la que usted

estaba dibujando? Le pagaré por ella.
Claro – respondió Picasso -. Son 20 000 pesetas.
La cabeza de la dama dio un latigazo hacia atrás como si el

pintor le hubiera lanzado un ladrillo.
¡¿Qué?! Le llevo como dos minutos dibujar eso.
No, señora – contestó Picasso -, me llevó casi 60 años dibujar

eso.
Dicho esto, introdujo la servilleta en su bolsillo y se alejó del

café.
A lo largo de este libro hemos tocado varias veces la impor-

tancia de tus habilidades, talentos y conocimientos, el mejo-
rarlos se basa en miles de pequeños fracasos y la magnitud
de tu éxito se sustenta en el número de veces que fracasaste
en algo.
Piensa en un niño pequeño. Cuando intenta aprender a ca-

minar caerá y se lastimará cientos de veces, pero en ningún
momento se detendrá a pensar: “Supongo que caminar no
es lo mío. No soy bueno en esto”.
Hombre Imparable
Evitar el fracaso es algo que aprendemos más tarde en la

vida. Mucho de esto proviene de nuestros sistemas educati-
vos que juzgan con rigor en base al desempeño. Castiga a
quienes nos les va bien, premia a quien memoriza. Otra parte
de ese aprendizaje surge de padres déspotas o sobreprotec-
tores o críticos. No permiten a sus hijos equivocarse lo sufi-
ciente, en lugar de ello, los castigan por algo nuevo que hicie-
ron o algo que ellos no aprueban. Finalmente tenemos los
medios de comunicación, que nos exponen a historias de
éxito espectaculares, pero nunca muestran el trabajo, horas,
problemas y retos que atravesó esa persona para lograr su
éxito.
En algún punto, nos encontramos en un lugar donde nos da

miedo el fracaso, donde instintivamente lo evitamos y nos
quedamos solo con lo que está enfrente de nosotros. Nos
quedamos solo con lo que creemos que somos buenos.
Esto nos confina. Nos sofoca. Solo podemos ser verdadera-

mente exitosos en algo en lo que estamos dispuestos a fra-
casar. Sino lo estamos, entonces tampoco estamos dispues-
tos a tener éxito.
La acción como fuente de motivación
Hombre Imparable
La acción no solo es efecto de la motivación, también es

causa de ella. Muchos de nosotros solo nos comprometemos
con la acción si sentimos cierto nivel de motivación. Y senti-
mos motivación cuando sentimos una inspiración emocional.
Asumimos que la acción solo se puede desencadenar de la

siguiente forma:
Inspiración → Motivación → Acción
Si quieres lograr algo, pero no te sientes motivado o inspirado,

asumes que no hay nada que puedas hacer. Sientes que
hace falta un gran evento emocional en tu vida para generar
la suficiente motivación para levantarte del sillón y hacer
algo. Nos han dicho que sin motivación no hay acción, pero
¿esto es realmente cierto?
La motivación no es un ciclo de tres partes (inspiración, mo-

tivación, acción), en realidad es un ciclo infinito:
Inspiración Motivación
Acción
Hombre Imparable
De este modo, tus acciones crean más inspiración y motivan

tus acciones futuras. Si te hace falta la motivación para con-
seguir un cambio importante en tu vida, haz algo, lo que sea,
y aprovecha la inspiración a esa acción como una manera
de empezar a motivarte.
Tim Ferris, autor del libro La Semana Laboral De 4 Horas y

creador del podcast The Tim Ferris Show, cuenta que una vez
escuchó hablar de un novelista que había escrito más de 70
novelas. Alguien le preguntó a este hombre de letras cómo
podía escribir de forma tan consistente y permanecer inspi-
rado y motivado. Él señalo: “Doscientas malas palabras al día;
así es como lo consigo”. La idea era que, si se forzaba a escri-
bir 200 palabras diarias, con frecuencia el acto de escribir lo
inspiraba. Sin darse cuenta esta simple acción lo ayudaba a
obtener cientos de frases en una página.
Cuando la inspiración se percibe como una recompensa más

que como un prerrequisito para actuar, nos impulsa hacia
adelante. A menudo, todo lo que se requiere para conseguir
que la bola de nieve comience a rodar, es una pequeña ac-
ción. Una acción para inspirar la motivación de seguir ade-
lante.
Hombre Imparable
Tú puedes convertirte en tu propia fuente de inspiración. Tú

puedes convertirte en tu propia fuente de motivación.
¿Cómo lo sé?
Porque hay muchas acciones que están a tu alcance.
Escoge las mejores acciones
Antes de decidir qué vas a comenzar a hacer, es importante

que evalúes la eficacia de tus acciones. No todas las acciones
son iguales. Las acciones que tomes deben tener un objetivo
subyacente: acercarte cada vez más a tus metas mientras
disfrutas del proceso.
Hay acciones que aportan poco a tu éxito y otras que tienen

un gran impacto. Aquí nos encontramos con lo que se deno-
mina como el principio de Pareto, llamado así por Vilfredo Pa-
reto, economista italiano del siglo XIX. Es un axioma funda-
mental para tu éxito: el 80% de los resultados proviene del 20%
de las acciones. Esto implica que el 80% restante de las ac-
ciones tan solo contribuye en un 20% al logro de lo que quie-
res.
Con esto en mente: ¿cuál es el mejor uso de tu tiempo AHORA?
Hombre Imparable
Obviamente dedicarte a aquellas acciones que te permitan

acercarte a tus metas. Deja por fuera todo aquello que te
aleje tus metas o tenga poco impacto en ellas.
¿Quieres acelerar el logro de tus metas?
Aplica el principio de Pareto de forma inteligente. Las accio-

nes producen resultados. Si esos resultados están alineados
y te acercan a tus metas, entonces tus acciones han sido efi-
caces.
Hay quienes aseguran que la clave del éxito está en tomar

acción. A mí, me parece una fórmula algo incompleta. Puedes
ejecutar 100 acciones que apenas te permitan avanzar un
20% hacia tu meta, o, puedes definir y actuar sobre aquellas
20 acciones que garanticen el 80% del logro.
Puedes hacer mucho y avanzar poco. Puedes hacer poco y

avanzar mucho, ¿qué prefieres?
En lo personal, prefiero aprender a producir cada vez más con

cada vez menos esfuerzo.
Tres preguntas para la acción
Lo que necesitas es actuar, ahora y de forma inteligente. Para

esto, te ofrezco las siguientes preguntas:
Hombre Imparable
¿Cuál es la mejor manera de lograrlo?
Puede haber infinitas maneras de lograr tus metas, pero solo

algunas – el 20% más efectivo – se acercan al mejor uso de
tu energía, tiempo y enfoque.
Si de 10 posibles caminos hay uno o dos que te permiten llegar

a tu destino más rápido y con menos cansancio, ¿no sería lo
más inteligente buscar, antes que nada, esos caminos?
Uno de esos caminos, sin dudas, será tomar el atajo de bus-

car una persona que ya haya logrado el resultado que estás
buscando. Una persona que ha alcanzado la metas que tú
quieres alcanzar. Ya lo hablamos en el capítulo de Recursos.
Apaláncate de la sabiduría de otros.
¿Quieres bajar de peso, iniciar un negocio, lograr la libertad

financiera, escribir un libro, aprender a jugar tenis?
Otros lo han logrado. Otros poseen la sabiduría. Otros poseen

la experiencia, que les permite distinguir cuál o cuáles son los
mejores caminos y errores a evitar.
En Programación Neurolingüística esto se conoce como Mo-

delaje. Busca a alguien que ya logró que tú quieras. Ahora du-
plica o modela, cómo ha logrado su éxito.
Hombre Imparable
No siempre tenemos la fortuna de conocer en persona al mo-

delo que necesitamos. Sin embargo, una excelente manera
de poder acceder a estos modelos de éxito es a través de li-
bros, biografías, audiolibros, talleres, conferencias y semina-
rios.
Muchos libros son la síntesis de años de ensayo y error de sus

autores. Representan sabiduría empaquetada y lista para
usar. En pocas horas, puedes absorber esta información y
ahorrarte años de camino.
¿Cuál es la próxima acción física?
Hay diferencia entre tener en tu plan de acción como: ir al

gimnasio; y tener claro en tu mente cuál es la próxima acción
física como: cambiarme y ponerme la ropa para hacer ejer-
cicio. La primera provoca resistencia. La segunda promueve
la acción.
Ir al gimnasio es en realidad una acción compleja compuesta

por varias acciones simples. Tales como cambiarte de ropa,
preparar el bolso con la ropa para después del ejercicio, no
comer antes, salir temprano de la casa o del trabajo, encen-
der el carro, manejar hasta el sitio, etc. Todas a la vez pueden
darte la sensación de que ir al gimnasio es muy complicado.
Hombre Imparable
Tu resistencia brota y haces lo más sencillo: quedarte en la

cama.
Sin embargo, hacerte la pregunta: ok, quiero ir al gimnasio,

¿cuál es la próxima acción física? Te lleva a enfocarte en un
acto simple, rápido y poco amenazante. Puedes decidir com-
prometerte con la próxima acción física. Ésta puede ser tan
simple como cambiarte, realizar una llamada, escribir unas
notas en la computadora, revisar un sitio web, ver un video o
hacerle una pregunta a alguien en particular.
La primera ley de la física de Newton postula lo siguiente: a

menos que le sea aplicada fuerza, un objeto en reposo ten-
derá a permanecer en reposo y un objeto en movimiento
tenderá a mantenerse en movimiento. Si no está dentro de
tus hábitos, ir al gimnasio o ahorrar el 10% de tus ingresos o
leer o escribir o conversar con un desconocido o cualquier
otra acción, tu tendencia será permanecer como estás.
Al pensar y actuar sobre la respuesta a ¿cuál es la próxima

acción física?, aprenderás a identificar acciones simples con
las cuales ponerte en movimiento y romper la inercia. Una vez
en marcha, comenzarás a sorprenderte a ti mismo al darte
cuenta que es más fácil continuar el proceso.
Hombre Imparable
Dicen que el primer paso es la mitad del camino. Y te digo

esto, porque me pasó muchas veces mientras escribía este
libro. En mi planificación diaria tenia escrito: “avanzar con la
escritura del libro”. Visualizar este libro terminado era algo
que me motivaba, pero mi resistencia a hacerlo podía más. Y
esto era más evidente cuando me ponía frente a la compu-
tadora y las palabras no fluían.
El problema era que no me enfocaba en la próxima acción

física sino en la idea de terminar el libro, lo cual me hacía sen-
tir abrumado y querer postergar. De hecho, lo había poster-
gado por meses antes de ponerme serio en este proyecto.
En ocasiones, fue necesario llevar la pregunta a su mínima

expresión. Por ejemplo, ¿cuál es la próxima acción física? Y me
respondía: abrir el documento del libro en Word.
Luego, ¿cuál es la siguiente acción física?
Irme al final del documento y parar en donde voy a continuar

escribiendo.
¿Y la siguiente acción física?
Escribir un párrafo.
De pronto generaba momentum (que no es otra cosa que

inercia positiva) y ya no podía parar. Seguía escribiendo y un
Hombre Imparable
rato después me daba cuenta que le había escrito durante 1

o 2 horas enteras.
La fuerza de la acción está en lograr esa capacidad de po-

nerte en marcha. No importa el tamaño de la acción, importa
más entrar en ruedo. Esto lo logras cuando ejecutas la pró-
xima acción eficaz. Rompes con la inercia, generas momen-
tum. Te acercas a tu meta.
Ponerte en movimiento hacia tus metas con una acción sim-

ple es como lanzar una pequeña pierda sobre el agua. Ésta,
inmediatamente, comienza a generar ondas que se esparcen
para producir cambios.
Ponte en movimiento. Ponte en acción. Lo peor que puedes

hacer con tus metas es quedarte parado. Ahora es el mo-
mento. ¡Ya!
¿Cuál es el mejor uso de mi tiempo ahora?
¿Inviertes o gastas tu tiempo?
¿Cuál es la diferencia?
Para mí, la respuesta es una sola: invertirlo en aquello que te

permita acercarte a la vida que realmente deseas vivir, es lo
mejor que puedo hacer con mi tiempo.
Hombre Imparable
Pero, ¿qué hacer cuando estás estancado uno de esos “mo-

mentos muertos”?
Si estás metido en tu automóvil en un tráfico horrible, esto de

por sí impone limitaciones sobre lo que puedes hacer con tu
tiempo. Pero incluso estando en el tráfico puedes pregun-
tarte: ¿cuál es el mejor uso de mi tiempo AHORA?
Quizá sea refrescar tus metas. Detallar esa idea para el nuevo
producto que te ha estado dando vueltas en tu cabeza. Escu-
char un podcast o un audiolibro de desarrollo personal. Lla-
mar por celular a un gran amigo o amiga con la cual no tienes
tiempo de hablar
No importa las limitaciones circunstanciales del momento o

situación en la cual te encuentras, siempre hay alternativas
de acción. ¿Cuál es la mejor?
Tu tiempo es tu vida. La calidad de tu vida se define por cómo

inviertes tu tiempo. ¿Cuál es el mejor uso de tu tiempo ahora?
Tú tienes la respuesta. ¡Actúa sobre ella! ¡Ahora!... y siempre.
Hombre Imparable
10
Tú Puedes
Maxwell Maltz, autor del libro Psicocibernética, decía:
“En este instante late dentro de ti el poder para hacer cosas

que jamás has soñado como posibles. Este poder está a tu
disposición tan pronto como cambies tus creencias”.
¿Qué pasa cuando a pesar de todo lo leído, aún crees que no

puedes cambiar tu vida, transformarla y ser tu mejor versión?
Hombre Imparable
En serio, ¿qué pasa cuando no puedes hacer cambios en tu

vida? ¿Cuándo ya lo has intentado todo? ¿Cuándo tienes tan-
tas responsabilidades (matrimonio, hijos, hipoteca, empleo,
deudas) y te sientes incapaz de tomar riesgos?
¿Qué haces?
¿Qué puedes hacer?
Lo más importante no es en donde te encuentras, sino cuál es

tu dirección. Puede que no tengamos la capacidad de cam-
biar rápidamente en donde nos encontramos, pero siempre
podemos modificar nuestra dirección.
Es sencillo, nuestra dirección es determinada, en primera ins-

tancia, por nuestros pensamientos. Lo que pensamos pre-
cede a nuestros sentimientos. Nuestros sentimientos dan pie
a nuestras acciones. Y éstas a nuestros resultados. Cambia
tus pensamientos y poco a poco comenzarás a obtener nue-
vos resultados.
Esto es algo que siempre podemos hacer. Elige nuevos pen-

samientos. Con este simple hecho, tienes el poder para iniciar
el cambio que quieres ver en tu vida.
Quiero contarte una metáfora:
Hombre Imparable
Los grandes buques como, por ejemplo, un trasatlántico, tie-

nen un timón enorme. El barco es tan pesado y su superficie
tan grande, que es imposible girar el timón directamente. La
resistencia del agua hace más difícil la labor. ¿Cómo es que
un barco de ese tamaño lograr virar?
La solución está en una especie de “mini-timón” dentro del

mismo timón. Se la conoce como trimtab. Es una pequeña su-
perficie en comparación al timón del barco, que ayuda a gi-
rarlo. Es el timón del timón.
Cuando el navégate del barco comienza a rotar el volante del

timón para dar un giro, se inicia el movimiento del trimtab.
Éste va logrando que el gran timón se desplace ante la resis-
tencia del agua y los cientos de toneladas del buque.
La esencia de esta metáfora es la siguiente:
Si no puedes hacer grandes cambios en este momento,

¿cuáles son las pequeñas transformaciones si están en tu po-
der? ¿Cuáles son los pequeños cambios que te pueden per-
mitir cambiar el rumbo hacia el destino deseado?
Una cosa queda clara: dirigir tu vida hacia la visión que

deseas requiere gran energía. Pero al igual que mover todo
un buque de cientos de toneladas, todo comienza por un pe-
queño cambio.
Hombre Imparable
No te concentres en tus “yo no puedo”, todos los tenemos. Es

en nuestros “yo puedo”, por pequeños que sean, en donde
está nuestro poder para redirigir nuestras vidas.
Conéctate con tus “yo puedo”
Haz el siguiente ejercicio para experimentar el poder que in-

cluso la simple variación del lenguaje puede ejercer sobre ti:
Repite mentalmente (o en voz alta, si así lo prefieres) la si-

guiente frase, completándola con lo primero que te surja: “Yo
no puedo…”
“Yo no puedo ser feliz”.
“Yo no puedo ganar más dinero”.
“Yo no puedo bajar de peso”.
“Yo no puedo conseguir pareja”.
Hazlo varias veces. Cada vez, culminando la frase con otras

de tus aparentes limitaciones.
Ahora, ¡salta!, ¡pega un grito!, ¡haz lo que sea para libarte de

esta energía!
Hombre Imparable
Imagino que ya sabes lo que sigue: repite mentalmente la

frase “yo puedo…”. Completándola con las ideas que te surjan
donde las posibilidades y oportunidades sí están bajo tu con-
trol.
“Yo puedo empezar a hacer ejercicio”.
“Yo puedo salir más de casa y conocer interesantes lugares”.
“Yo puedo convertirme en el mejor trabajador de mi em-

presa”
“Yo puedo dar lo mejor de mí en mi negocio”
¿Cambió tu sensación de poder? ¡Apuesto a que sí!
Tu enfoque determina tu poder. ¿En qué te enfocas? ¿En lo

que no puedes o en lo que si puedes?
Conéctate con tus “yo puedo” y estarás alimentando tu ca-

pacidad para lograr lo que quieres.
Hombre Imparable
11
Cinco Retos Para Vivir

Plenamente
Al final, ¿para qué te sirvió leer este libro?
Conocer estas fuerzas… ¿Para qué…?
La respuesta es simple, pero poderosa: para vivir plenamente.
La pasión te hace vibrar y te impulsa a ser y dar más de ti, lo

mejor que puedas.
Enfocarte en la oportunidad te lleva a encontrar nuevos ca-

minos de evolución.
Hombre Imparable
Tomar decisiones te ayuda a utilizar el mayor regalo de todos:

tu capacidad para construir tu destino.
Tu energía alimenta tu vida y te proporciona el combustible

para actuar y disfrutar.
Tus recursos internos y externos, hacen viable la transforma-

ción de tus sueños en metas alcanzables.
Tus creencias ayudan a diseñar la vida que quieres, sabiendo

que el cambio que buscas empieza en tu interior.
La acción es la que hace que la magia ocurra. Funciona como

puente entre tu realidad actual y la realidad que quieres.
Estas son las fuerzas que todo hombre necesita para adue-
ñarse de tu vida y el mayor reto de todos es alinearlos en fun-
ción de quién eres ahora y quién quieres llegar a ser. Es el reto
de desarrollarte y crecer a plenitud, de dar lo mejor de ti y en-
tregar al mundo el regalo que eres.
Pasión, oportunidad, decisión, energía, recursos, creencias y

acción… fuerzas enfocadas para crear un mejor hombre, una
mejor vida, una mejor familia, un mejor país, un mejor mundo.
Esta es la expresión máxima de la vida.
Hombre Imparable
Ante de terminar, quiero hacerte una invitación muy especial.

Quiero que juntos asumamos cinco retos que nos ayudarán
a vivir plenamente.
¿Te atreves?
Si has llegado hasta aquí es obvio que sí. Entonces, déjame

presentártelos:
Comprométete
El éxito solo es posible desde dentro. Sucede cuando decides

recorrer el camino. No puedes construir tu éxito a distancia.
Tiene que ser de dentro hacia fuera.
Toda meta, sea consolidar una familia sana y feliz, construir

un negocio o superar una adicción, requiere energía. Energía
que solo está disponible cuando decides comprometerte.
A través del compromiso es cuando eres capaz de ver los ver-

daderos resultados de tus esfuerzos. Comprométete con tus
metas, con tu éxito, con aquello que te hace feliz. Y dile “no” a
todo aquello que te aleja de ellos.
Expándete
Hombre Imparable
Tu plenitud se encuentra fuera de tu zona de confort. Si sigues

haciendo lo que siempre has hecho, seguirás obteniendo lo
que hasta ahora has obtenido. ¿Lo recuerdas?
Sal de tu zona de confort. Expándete. La única forma en que

un músculo crece es forzándolo más allá de su capacidad
actual. Así se genera fuerza. Así se crece.
Expándete para amar, para dar, para disfrutar, para crear,

para creer, para construir. En definitiva, expándete para ser
más.
Libérate
En ti hay dos grandes fuerzas: aquello que te impulsa a crecer

y aquello que te limita.
Miedos, creencias obsoletas, prejuicios, heridas del pasado,

significados empobrecedores, emociones que te desgastan.
Nada de esto te sirve para avanzar, a menos que los aprove-
ches para sanar y fortalecerte. De otra forma, no te sirven.
La vida es demasiado corta para desperdiciarla en todo

aquello que te limita. Decide, hoy, liberarte de aquello que te
frena. Libérate del lastre. Libérate del pasado. Libérate de los
miedos.
Hombre Imparable
No tienen que desaparecer. Son parte de tu experiencia de

vida. Sólo tienes que soltarlos. Atrévete a vivir sin ellos… por-
que eres más que tus miedos, tu pasado y tus aparentes li-
mitaciones.
Entrégate
Asume el reto de ser y dar lo mejor de ti. La mayor plenitud y

trascendencia se logran cuando das el regalo que eres al
mundo.
Atreverte a entregarte a la vida y a otros, no significa perder,

no significa dejar de tener tu espacio y libertad. Es simple-
mente dar tu regalo: inspirar a otros. Lograr que otros – gra-
cias a ti – descubran su propia grandeza interna.
Atrévete a entregarte a tu pasión. Estas aquí para eso. Si no

fuera así no sentirías ese fuego interno, que añora crecer.
¿No estás seguro de cuál es tu pasión en la vida? Entonces

entrégate al proceso de definirla.
Ríndete
Hazlo varias veces… en serio, ríndete.
No al fracaso… si al éxito.
Hombre Imparable
No a la desesperación… si a la esperanza.
No a la incertidumbre… si a la certeza.
No a la negatividad… si al pensar en grande.
No al miedo… si al actuar.
Ríndete a tu grandeza.
Hombre Imparable
El Camino Para Ser El Hombre Que Quieres

Ser, Dominar Tu Camino Y Potenciar Tu
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Lo Que Tú Y Yo… Y Todos Quieren:

El Poder Que Está En Ti ........................................................................................................... 24

Primera Fuerza: Pasión ............................................................................................................31

Segunda Fuerza: Oportunidad ........................................................................................ 45

Tercera Fuerza: Decisión ...................................................................................................... 69

Cuarta Fuerza: Energía .......................................................................................................... 99

Quinta Fuerza: Recursos ...................................................................................................... 123

Sexta Fuerza: Creencias ..................................................................................................... 146

Séptima Fuerza: Acción .......................................................................................................167

Tú Puedes ........................................................................................................................................ 181

Cinco Retos Para Vivir Plenamente .......................................................................... 186

Muchos hombres se sienten perdedores y débiles… y no está

Y no lo está porque esos hombres pueden ser mucho más de

La debilidad es miedo, miedo de afrontar la vida, miedo de ser

te darás cuenta que eres mucho más fuerte de lo que crees.

La vida no es fácil, nunca lo ha sido, ni lo será.

La vida es tan dura como la puedes imaginar, pero tú puedes

Es como si dentro de ti habitará una bestia que persigue algo

La vida es dura, pero tú puedes ser tan magníficamente duro

La única forma de sobrepasar todo lo que se atraviese en tu

Es igual a decir: “esto es terrible, pero estoy preparado para

Muchos hombres no son conscientes de esto. No son cons-

aparezca en su camino. No son conscientes que son más

Hay cosas terribles, demasiadas, pero eso sólo significa que

Y no, no es optimismo ingenuo, es algo más.

Cuando eres puesto a prueba, dentro de ti se despierta esa

Hay una batalla en nuestro interior que busca quebrarnos.

Creer que eres una víctima en cierto modo tiene sentido, la

Sólo te convertirás en una víctima si dejas que estas fuerzas

La idea de que tus problemas deberían ser resuelto por otros,

Lo irónico es que aquello que te quejas es el camino. El obs-

La abrumadora mayoría de hombres no hacen este trabajo

Cuando te orientas hacia algo mucho más profundo, cuando

Solo podrás tomar el control de tu vida, dominar tu camino y

Dominando las ideas y estrategias que encontrarás en este

Hemos vivido adormecidos por mucho tiempo, con continuos

Desde pequeños se nos instruye que crecer implica muchas

¿Por qué no solo felices? ¿Por qué no solo exitosos?

Porque, el éxito y felicidad, felicidad y éxito, no son excluyen-

Está claro que la definición de éxito se hace cada vez más

Cambios acelerados. Una globalización establecida. Exigen-

Se dice que estamos en la era de la información. Pero la in-

El conocimiento total de la humanidad se duplica cada dos o

Necesitamos cada vez más respuestas simples y de inme-

Y uno de los mayores retos es cómo ser realmente exitoso y

Cuando se habla de éxito, no basta con saber lo que se

Sin embargo, ¿cuántas veces se mantiene la brecha entre el

Necesitamos desarrollar esa habilidad que transforma de-

Sin acción no hay aprendizaje. Sin ejecución no hay transfor-

Ahora, tienes la oportunidad de utilizar este libro de dos for-

1. Lo lees como una simple novela, algo para diver-

Así que, ¿cuánto provecho le sacarás a este libro? ¿Será tu

Espero que no, porque aquí va a descubrir un poder maravi-

Lo que tú y yo… y todos

La vida en muchos niveles es simple. Todos queremos ir de un

 De ser fumador a no depender del cigarrillo y tener

 De tener 10 kilos demás a verte atractivo y sentirte

 De no tener una casa propia a vivir en la casa de tus

 De estar sumergido en deudas a ser libre financiera-

 De sentirte solo a compartir la vida con quienes

 De ser empleado a ser dueño de tu propio negocio.

 De sentirte perdido y sin rumbo en la vida a caminar