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ACTIVIDAD DE APRENDIZAJE

I DATOS INFORMATIVOS:
INSTITUCIÓN EDUCATIVA: N°00491 Monseñor “Martín Fulgencio Elorza legaristi”
DOCENTE :
GRADO YSECCIÓN : 3° “ ”
FECHA : 6 / 9 / 23
ÁREA : RELIGIÓN
TÍTULO : Medimos longitudes
EXPERIENCIA DE APRENDIZAJE N°05: “Vivamos el folklore de nuestro Perú”
I. PROPÓSITO DE APRENDIZAJE
COMPETENCIA CAPACIDAD DESEMPEÑO
Asume la experiencia del  Transforma su Descubre el amor de Dios
encuentro personal y entorno desde el proponiendo acciones de
comunitario con Dios en encuentro personal y misericordia corporales para
su proyecto de vida en comunitario con Dios mejorar la relació n con su
coherencia con su creencia y desde la fe que familia y la institució n
religiosa. profesa. educativa.

II. MOMENTOS DE LA SESIÓN:


Inicio

VER:
 Se inicia con la oració n.
 Los estudiantes leen la historia y responden a las siguientes interrogantes (Anexo 1)
 ¿Qué les pareció la historia?, ¿quiénes no prestaron ayuda al hombre? Un sacerdote
judío y un Levita. ¿quién le ayudó ? Un Samaritano.
 ¿Conoces personas como el samaritano? Sí, muchas.
 ¿Saben có mo se llaman estas obras buenas? Obras de Misericordia.
 El docente presenta el propósito de aprendizaje: En esta sesión los estudiantes
reconocerán las obras de misericordia corporales y la importancia de practicarlas; ayudando al
prójimo en sus necesidades.
Desarrollo

JUZGAR
 Los estudiantes leen la informació n sobre el tema (Anexo 2).
 Completan las frases con las palabras que faltan segú n el texto bíblico de Mateo.
(Anexo 3).
 Durante estas actividades el docente monitorea los avances de los estudiantes,
registrando en un instrumento de evaluació n, a la vez respondiendo a sus interrogantes.
 El docente consolida el aprendizaje de los estudiantes enfatizando que las obras de
misericordia corporales son muy importante practicarlo ya que nos llena de gozo ayudar
a nuestro pró jimo sabiendo que es al mismo Jesú s a quien ayudamos.
ACTUAR
 Observan las imá genes y escriben el nombre de la obra de misericordia corporal que
corresponde. (Anexo 4).
 Observan las imá genes y se dibujan imitando a Jesú s; luego escriben acciones de
misericordia corporal que practicará n con sus compañ eros. (Anexo 5).
Cierre

REVISAR
 Reflexionamos sobre lo aprendido: ¿Qué aprendimos hoy sobre las obras de misericordia
corporales? ¿Qué nos enseña Jesús al darnos estos mandatos? ¿Para qué nos servirá lo que
hemos aprendido? ¿Qué dificultades tuvimos al realizar esta sesión? ¿Có mo las superamos?

CELEBRAR
 Cantamos con sentimiento: Nadie te ama como yo (Anexo 6).
 Los estudiantes eligen dos obras de misericordia corporal para ponerlas en prá ctica.
Luego describen su experiencia dentro de un recuadro y adjuntan evidencias
(fotografías).
CONTENIDO DOCTRINAL
Cada hombre que necesita nuestra ayuda es nuestro pró jimo, no solo los que conocemos, los de
nuestro mismo pueblo o de nuestra misma fe, también lo es el desconocido.
Hay personas que se han desprendido de todo lo que tenían para ayudar a alguien, sin mirar su
condició n, ú nicamente con el á nimo de servir y sentir el verdadero amor de Cristo (cf. Mateo 25,35-
40).
Lo fundamental del Evangelio de Jesú s es el nuevo mandamiento del amor, amar como É l nos amó ;
ya que es fuente del amor al pró jimo, ambos son inseparables, se expresa plenamente en la
vocació n de servicio. Servir es darse a los demá s.
La Iglesia, fiel a las enseñ anzas de Jesú s, nos da los medios necesarios para concretar nuestro amor
al pró jimo,
Las obras de misericordia corporales son acciones caritativas mediante las cuales ayudamos a
nuestro pró jimo en sus necesidades corporales y son siete: Visitar a los enfermos, dar de comer al
hambriento,  dar de beber al sediento, Vestir al desnudo, visitar a los presos, enterrar a los difuntos y
dar posada al peregrino.
ANEXOS
Anexo 1

Un día, Jesú s le dice a un hombre que debe amar a su


pró jimo. El hombre le preguntó : ¿Quién es mi pró jimo? El
hombre pensaba que su pró jimo solo eran los de su raza,
religió n o sus vecinos. Entonces, Jesú s le narra una historia:
Iba un judío bajando por un camino de montañ a a Jericó ,
pero unos ladrones lo asaltaron. Le quitaron el dinero y lo
golpearon hasta casi matarlo.
Má s tarde, un sacerdote judío pasó por el camino. Vio al
hombre golpeado. ¿Qué crees que hizo? Pues, só lo cruzó al
otro lado del camino y siguió andando. Entonces otra
persona muy religiosa pasó . Era un levita. ¿Se detuvo? No, no se detuvo tampoco para ayudar al
hombre. En eso pasó un samaritano. É l curó las heridas del hombre que había sido asaltado.
Después, lo llevó a otro lugar para que pueda descansar y sanarse.
Al terminar de contar su historia, Jesú s le dijo al que le hizo la pregunta: ¿cuá l de estos tres crees
que obró como pró jimo con el que había sido golpeado? ¿El sacerdote, el levita, o el samaritano? El
hombre contestó : El samaritano. É l fue bueno con el hombre que fue golpeado.
Jesú s dijo: ‘Tienes razó n, por eso, ve y trata a otras personas de la misma manera que él lo hizo.

Anexo 2

OBRAS DE MISERICORDIA
Son los medios que nos da la iglesia para concretar nuestro amor al prójimo. Estas obras son
acciones de caridad que los hombres practican para ayudar a los hermanos en sus miserias y
necesidades.
OBRAS DE MISERICORDIA CORPORALES
Son las acciones que nos permiten ayudar al prójimo en sus necesidades físicas y son siete:
(1) Visitar a los enfermos: Consiste en brindar una atenció n ú nica, con amor de familia a aquellas
personas que, muchas veces no tienen de quién apoyarse y que incluso, algunas de ellas, han
perdido la esperanza de vivir. ¡Qué mejor alivio que saber que Cristo actú a por medio de nosotros!
(2) Dar de comer al hambriento y (3) Dar de beber al sediento: Este son de los servicios que má s
se necesitan; pues son muchas las personas que mendigan, tienen hambre y sed.
4) Dar posada al peregrino: En la antigü edad, el dar posada a los viajeros, por lo complicado y
arriesgado de las travesías, era un asunto de vida o muerte.
Hoy en día, no se vive aquello, pero podríamos hospedar en nuestra casa a alguien que se encuentre
en una verdadera necesidad, lo cual nos permitiría obrar con misericordia y acogida.
5) Vestir al desnudo: Muchos tenemos camisetas, zapatos, pantalones que no utilizamos, ya sea
porque ya no nos quedan o porque no le damos uso. Todo ello podríamos donarlo a quien lo
necesite.
6) Visitar a los presos: Hablar con ellos y brindarles ayuda, tanto material, como la má s
importante, espiritual.
7) Enterrar a los difuntos: Al enterrar a nuestros muertos demostramos el amor má s allá de la
muerte a las personas que en nuestra vida fueron valiosos para nosotros.

“Porque tuve hambre y me dieron de comer; tuve sed y me dieron de beber, era un extrañ o, y me
hospedaron; estaba desnudo, y me vistieron; enfermo y me visitaron; en cá rcel y fueron a
visitarme”.
Entonces le responderá n los justos: “Señ or, ¿cuá ndo te vimos hambriento y te alimentamos;
sediento y te dimos de beber? ¿Cuá ndo fuiste un extrañ o y te hospedamos, o estuviste desnudo y te
vestimos? ¿Cuá ndo te vimos enfermo o en la cá rcel y fuimos a verte?”. Y el rey les responderá : “Les
aseguro que cuando lo hicieron con uno de ellos mis hermanos má s pequeñ os, conmigo lo hicieron”
(Mateo 25,35-40).

Anexo 3
Completan las frases con las palabras que faltan segú n el texto bíblico de Mateo.

Tuve hambre y me dieron Tuve sed y me dieron de Era extraño y me


de comer. beber. hospedaron.

Estaba desnudo y me Enfermo y me visitaron. En la cárcel y fueron a


vistieron verme.

Anexo 4
Observan las imá genes y escriben el nombre de
la obra de misericordia corporal que
corresponde.

Visitar a los presos


Dar posada al peregrino Visitar a los enfermos

OBRAS DE MISERICORDIA
CORPORAL

Vestir al desnudo

Dar de comer al
hambriento

Dar de beber al sediento


Enterrar a los muertos

Anexo 5
Observan las imá genes y se dibujan imitando a Jesú s.

Escriben acciones de misericordia corporales que practicará n con sus compañ eros en el
aula.

Anexo 6
NADIE TE AMA
Cuá nto he esperado este momento,
cuá nto he esperado que estuvieras así,
cuá nto he esperado que me hablaras,
cuá nto he esperado que vinieras a mí.

Yo sé bien lo qué has vivido,


y sé también por qué has llorado,
yo sé bien lo que has sufrido,
pues de tu lado nunca me he ido

Pues nadie te ama como yo (2v)


Mira la cruz
esa es mi más grande prueba.
Nadie te ama como yo
Pues nadie te ama como yo (2v)
Mira la cruz, fue por ti, fue porque
te amo.
Nadie te ama como yo.

Yo sé bien lo que me dices,


aunque a veces no me hables.
Sé bien lo que en ti sientes,
aunque nunca lo compartes.
Aunque a veces no me hablas.
Sé bien lo que en ti sientes,
Aunque nunca lo compartas.

Yo a tu lado he caminado,
junto a ti yo siempre he ido,
y aú n a veces te he cargado,
Yo he sido tu mejor amigo.

Pues nadie te ama…

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