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El impacto del paquete de medidas

compensatorias de la devaluación en el
peso relativo del gasto, depende de la
reacción de los precios en estos meses.

28 de agosto de 2023

Instituto Argentino de Análisis Fiscal


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ISSN 2250-7329

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El ministerio de economía nacional anunció en el día de ayer un paquete de medidas tendientes
a compensar los efectos de la reciente devaluación del peso en los ingresos de la población más
afectada. Este paquete consiste en un bono de $37.000 en septiembre, octubre y noviembre
para aquellos jubilados que cobren el haber mínimo, un bono de $30.000 en septiembre y
octubre a trabajadores estatales y privados, refuerzo de $10.000 en septiembre y octubre a
beneficiarios del Potenciar de Trabajo, refuerzo a beneficiarios de la Tarjeta Alimentar y créditos
a tasa subsidiada para monotributistas y para la compra de fertilizantes en las zonas más
afectadas por la sequía.
Según fuentes oficiales, el costo directo de este paquete rondaría los $700.000 millones, es decir
0,4% del PIB. Dado esto, no es correcto concluir que este es un gasto extra y que directamente
implica un mayor déficit en términos del PIB.
Para poder evaluar esa posibilidad se requiere comparar los siguientes escenarios: el gasto en
términos del PIB en el escenario sin medidas y el gasto en términos del PIB en el escenario con
medidas.
En el escenario sin medidas se trabaja con el supuesto de que el gasto primario proyectado para
el segundo semestre mantiene las variaciones reales del primer semestre. El gasto del segundo
semestre, medido en términos del PIB, es de 12%. El gasto anual es de 19,8% del PIB. La inflación
punta a punta es del 140% anual en el mes de diciembre.
Si luego de la reciente devaluación del peso, la inflación mantuviera la proyección que traía
antes, se produciría un aumento del gasto de 0,3% en términos del PIB en el segundo semestre,
imputando únicamente el gasto incremental correspondiente. Es decir que pasaría desde 12%
del PIB al 12,3% del PIB. Y el anual sería de 20,1% del PIB. En este caso el gobierno debería
financiar genuinamente este incremento, para evitar un incumplimiento con la meta de déficit.
Si luego de la reciente devaluación del peso, la inflación subiera hasta un 154% anual, el gasto
en términos del PIB sería del 12% en el segundo semestre, no registrándose cambios respecto
al escenario sin medidas. Esta situación significa que el gasto nominal crece igual que el PIB
nominal, compensando de alguna manera a los receptores. No obstante, al aumentar el valor
anual nominal del PIB, el gasto efectuado en el primer semestre disminuye su tamaño relativo,
con lo cual, el gasto primario anual en este escenario sería del 19,7%, en lugar del 19,8% del PIB
del escenario sin medidas.

Cuadro 1
Impacto fiscal del paquete de medidas del 27/08 en el gasto primario 2023
Gasto proyectado Gasto anual Inflación
Casos 2do semestre proyectado anual
En % del PIB En % del PIB proyectada
Gasto primario proyectado sin paquete de medidas del 27/08 12,0% 19,8% 140%
Gasto primario proyectado con paquete de medidas del 27/08 12,3% 20,1% 140%
Gasto primario proyectado con paquete de medidas del 27/08 con aumento de
12,0% 19,7% 154%
inflación

Fuente: IARAF.

Como conclusión se tiene que no es directa la afirmación de que el paquete de medidas implica
un mayor gasto anual en términos del PIB y por ende un mayor déficit primario. Depende del
traslado a precios de la reciente devaluación, siendo lo más probable que el gasto del segundo
semestre se mantenga con igual relación que antes de las medidas.

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