Mi primera impresión es que esta película es un poco peculiar, y aborda algunos conceptos que cuesta bastante entender; pero según va avanzando y adentrándose en el tema, su significado se vuelve más claro y realmente te invita a reflexionar sobre algunas de las cosas que dicen estos profesionales que hablan. Y cada vez, te vas haciendo más preguntas; además está muy bien que el documental plantee y escoja a profesionales de diferentes tipos que hablen de un tema similar y de las mismas cuestiones, ya que esto te ayuda a verlo desde diferentes perspectivas que arrojan distintas ramas del conocimiento. Esta película en sí tiene mucho que ver con la metafísica, ya que principalmente trata de eso, de lanzarte preguntas muy difíciles por la amplia variedad de respuestas que tienen y todos los diferentes puntos de vista de éstas y hacerte parecer que lo que creías real, igual no lo es tanto como piensas porque no has considerado todas las opciones posibles. Para ilustrar esto recurre de manera paralela a contarnos la historia de una mujer traumada por los problemas del pasado que no puede llegar a olvidar, como son la traición, la desconfianza en sí misma, que se van plasmando en escenas muy interesantes, como la de los indios descubriendo los nuevos barcos, ya que obviamente ellos no habían visto nunca algo así y ni siquiera los vieron, porque al ver algo nuevo no te das cuenta de lo que es hasta que no lo relacionas y “te explota en la cara”; o como todas las reflexiones y preguntas que la película nos lanza sobre la forma en la que analizamos a Dios, basadas en los primeros principios de nuestras creencias, como sucede con la metafísica. Otro de los pasajes de la película que están relacionados directamente con la metafísica es el que aborda el tema de las emociones, ya que para la metafísica nosotros mismos somos responsables de lo que nos pasa y todo es producto de lo que nosotros atraemos para nuestra vida. En este sentido, el documental da un paso más y nos plantea que podemos convertirnos en adictos a nuestras emociones, tanto las positivas como las negativas, algo que probablemente muchos de nosotros no nos hemos parado nunca a pensar pero que al oírlo cobra sentido. ¿Quién no ha fingido nunca estar triste para recibir más aprecio, o ha fingido estar alegre para intentar contentar a los demás y no hacerles sentir mal para luego sentirse bien consigo mismo? Al final, las personas estamos repletas de emociones, que es lo que nos forma a cada uno, y somos seres sociales, por lo que siempre construimos nuestras emociones también con algún fin social. Quiero terminar con una frase que me llamó mucho la atención: «Al principio era el vacío, repleto de infinitas posibilidades de las que usted es una.» La vida tal como ahora la conocemos, y de la que nosotros formamos parte, es producto de mucho tiempo de diferenciación y separación partiendo de una unidad que puede ser Dios, células y átomos de hace millones de años, Big Bang… Siempre intentaremos buscar una respuesta a todo. Y aunque la encontrásemos, nunca conseguiríamos creer todos en ella. Eso es lo que nos hace tan diferentes y tan especiales, y lo que da sentido a una rama tan interesante de la filosofía como es la metafísica.
Tenemos que hablar desapego sin dolor aprende a fortalecer tus emociones y descubre el poder del desprendimiento. Libérate de aquello que no te genera bienestar y disfruta de una vida más plena
Cómo analizar a las personas: Descubra los diferentes tipos de personalidad, el lenguaje corporal, la psicología del comportamiento humano, la inteligencia emocional, la persuasión y la manipulación