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La Metafísica de Santo Tomás De Aquino

Santo Tomás cree que la metafísica es la rama más alta y significativa del
conocimiento porque pretende comprender la realidad como un todo, más allá del
ámbito de lo físico y lo observable. Según Tomás, el estudio de la metafísica se centra
en el ser mismo, en el ser en cuanto ser, y busca comprender el origen y las causas de
las cosas, llegando finalmente a la conclusión de que Dios es la causa única y última
de todo lo que es, Él inició todo y también lo terminará.

Un componente clave de la filosofía y la teología de Santo Tomás de Aquino es su


metafísica. Desarrolló desde su punto de vista, la filosofía de la realidad y de la
existencia en sus escritos, que se basó en las filosofías clásicas, en su caso se guió de
la filosofía aristotélica, que luego fue enriquecida por la influencia del pensamiento
cristiano.

Santo Tomás afirma que si bien las cosas tienen un ser que les permite existir, su
esencia es lo que las define, lo que las hace únicas y las diferencia de otras cosas. Esta
distinción entre ser y esencia es una de las ideas fundamentales y más importantes de
su metafísica. Para él, Dios es el Ser supremo, el Ser más puro y perfecto, cuya
esencia y existencia son una, las cuales no se diferencian una de la otra, su esencia es
la perfección y la simplicidad pura, y también su ser es completamente perfecto y
puramente simple.

También introduce la idea de "acto y potencia". Tomás creía que todo tiene una
naturaleza que incluye tanto su actualidad, en este caso nos referimos al acto, como
también tiene una capacidad de crecimiento, cambio o desarrollo, en este caso la
potencia. Las potencialidades presentes en todas las cosas sirven como explicación del
continuo movimiento y cambio en el mundo. Tomás de Aquino sostiene que dado que
Dios es perfecto y completo en sí mismo, Él es el Acto Puro, el cual está libre de
cualquier potencialidad, ya que siempre fue lo que es, y es lo que en los inicios fue,
sin ningún cambio, sin ninguna potencialidad.

Este Santo también habla sobre las cinco vías de la existencia de Dios, esta es otra
idea crucial en su metafísica. Estas vías son: la del movimiento, de la causa eficiente,
de contingencia, de los grados de perfección y de la finalidad. Esas son cinco formas
diferentes en las que Santo Tomás busca probar la existencia innegable de Dios. Las
diversas facetas de la existencia de algo y cómo funciona se explican por estas causas.

Siguiendo lo que dice Santo Tomás, gracias a estas cinco vías, es completamente
cierto decir que Dios es el Ser máximo, ya que el fue el primero, el fue el motor y
motivo de todo que no fue movido por nadie, también se dice que Él es la causa
eficiente primera, Él es el ser absolutamente necesario y completamente perfecto y
también se sabe que Él es el Ser Inteligente que dirige todo, a todas las cosas
naturales.

Santo Tomás de Aquino sostiene que la comprensión humana puede proporcionar una
idea de Dios y de la realidad, pero también reconoce las limitaciones de la razón
humana, ya que hasta cierto punto, Dios es incomprensible, su existencia y esencia
sobrepasa los límites del conocimiento humano. Para Tomás de Aquino, un
conocimiento pleno y completo de Dios requiere tanto la fe como la revelación divina.

En conclusión, la metafísica de Santo Tomás de Aquino es un sistema filosófico y


teológico que busca comprender la realidad en su totalidad y llegar a conocer a Dios
como fuente y causa última de todo lo que existe. Fundamentales para su perspectiva
metafísica son sus ideas de ser y esencia, acto y poder, y diversas causas. La filosofía
y la teología occidentales se han beneficiado enormemente de su filosofía metafísica,
que sigue siendo tema de discusión y estudio en la actualidad.

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