COMPILACIONES ANTEJUSTINEANEAS.

En el año 527 d. de C. Justiniano asciende al solio imperial de Oriente e

inicia una reforma legislativa dirigida a reunir a concordar y a codificar el
abundante y disperso acervo jurídico existente. Para conseguir tales propósitos,
dispone la compilación del derecho en tres obras jurídicas distintas, dos de
carácter privado que son el código Gregoriano (considerado el más completo, ya
que contiene Constituciones imperiales) y el código Hermogeniano y la tercer obra
que era de carácter oficial conocida como el código Teodosiano, en las que se
reafirman las tendencias orientalistas y cristianizadoras del Derecho Posclásico.

Código Gregoriano. Era una compilación de constituciones de carácter privado,

obra del jurisconsulto “Gregorius” que fue publicada durante el gobierno del
emperador Dioclesiano a finales del siglo III d. de C. Contiene las constituciones
que se expidieron desde el emperador Séptimio Severo hasta Diocleciano, la más
antigua de las cuales data el año 196 y la última del 302 d. de C.; Esta compilación
tuvo carácter privado y es conocida como Codex Gregorianus; dicha obra se
encuentra dividida en 15 libros y estos en títulos. Dentro de cada título se
transcribían las constituciones que tratasen de la materia del título.

Código Hermogeniano. Fue una compilación de constituciones de carácter

privado realizado por el jurista Hermogenianus (que al igual que Gregorius se
supone que fue alto funcionario imperial) fue una obra de un solo libro dividido en
títulos llamado Codex Hermogenianus a la cual con posterioridad se le añadieron
nuevas constituciones. A este código se le considera apéndice del código de
Grogorius. Aunque el material tratado en los dos códigos son constituciones
imperiales, su compilación fue de carácter privado y su fin fue de ayuda a los
juristas, ya que ponía de una forma fácil, cómoda y rápida un numeroso número
de constituciones imperiales ordenadas por temas y simplificadas. El Breviario de
Alarico recoge fragmentos de ambos junto con leyes de Teodosio II y sus
sucesores posteriores a las compiladas en el Código (Novellae teodosianas y
post-teodosianas).

Código Teodosiano. Teodosio tuvo la idea de crear un trabajo legislativo y en el

año 429 d. de C. encargo a ocho juristas compilar y clasificar todas las
constituciones desde Constantino, además de reunir extractos de citas de diversos
jurisconsultos, pero la comisión no fue muy eficiente (En el 429 se intentó hacer
pero no fructificó), hasta el año 435 en que Teodosio II nombró una nueva
comisión pero de dieciséis miembros, para hacer más simple el trabajo ya que
solo debían compilar las constituciones de Constantino y de los emperadores que
le sucedieron publicando el llamado Códex Theodosianus en el 436 d. de C. que
fue la compilación más importante de constituciones imperiales por ser la primera
compilación oficial de leges promulgadas por los emperadores Teodosio II
(Oriente) y Valentiniano (Occidente) en el año 438 d. de C.

El código Teodosiano consta de 16 libros divididos en títulos, en el que

cada título se trata una determinada materia y dentro de él se reproduce íntegro y
cronológicamente la constitución. Al ser un código oficial para todo el Imperio
contribuyó a la unificación legislativa de ambas zonas (Oriente y Occidente), ya
que antes había constituciones que solo tenían vigencia en una sola zona.

En Oriente tuvo una gran vigencia y se mantuvo hasta que

Justiniano derogó el Código Teodosiano en Oriente en el año 529 d. de C. fecha
en la que publicó su Corpus Iuris Civilis en su primera edición. Ya que con el
tiempo se le fueron añadiendo en el 533 d. de C. el Digesto y las Instituciones, y
un año más tarde, una segunda versión del Código que es la que nos ha llegado.
En Occidente sobrevivió al Imperio y se recogió en gran parte en la Lex Romana
Visigothorum del 506 que sirvió para que tuviera cierta vigencia incluso en la Edad
media. Podemos destacar la edición del código de Jacobo Godefroy en 1665. En
Occidente se mantuvo vigente hasta el 554. Lo poco que se sabe del Código
Teodosiano se lo debemos al Breviario de Alarico.
Leyes Romano-bárbaras. Una vez producida la caída del Imperio Romano de
Occidente en manos de los bárbaros en el 476 d- de C. se crearon nuevos reinos
tales

como el de los ostrogodos el de los visigodos y el de los borgoñones por lo que

fue necesario codificar un nuevo Derecho. Los vencedores respetaron y
conservaron la organización judicial y legislación de los vencidos, creándose así el
sistema conocido como principio de personalidad en la aplicación del Derecho, así
las cosas, existieron leyes para ellos (Leyes bárbaras) y para los Romanos
ordenamientos tomados del propio derecho Romano (Leyes Romanas); es así
como en el año 500 se redactan, para los pueblos bárbaros que ocupan el Imperio
Romano, las leges barbarorum, y para los súbditos romanos, reglas tomadas del
Derecho Romano, llamadas leges romanae.

De esta forma nacen las conocidas leyes romano-bárbaras o leges romanae

barbarorum, mismas que constituyeron una importante fuente de conocimiento del
Derecho Romano y algunas de las más reconocidas son:

 Ley de los Visigodos. Lex romana visigothorum o Breviario de Alarico,

que se sanciona en España y las Galias, sometidas a los visigodos. Es un
extracto de los códigos Gregoriano, Hermogeniano y Teodosiano, así como
de algunas Novelas posteriores y de algunos escritos de Gayo, Paulo y
Papiniano. hace referencia al conjunto de sucesos jurídicos que se
produjeron en el periodo de la historia del derecho comprendido desde el
asentamiento del pueblo visigodo en las Galias en el 418 y su posterior
emigración y ocupación de la península Ibérica en el siglo VI hasta la
invasión musulmana de esta última en el año 711 d. de C.

 Ley de los Borgoñones. Lex romana burgundionum, o Papiani repsonsa

(ley gambeta); se promulga en la Galia oriental, ocupada por los
borgoñones; fue redactada entre los años 517 y 534 d. de C., durante el
 reinado del jefe burgundio Gundobado. Esta Ley se basaba en los códigos
Gregoriano, Hermogeniano y Teodosiano, en las Sentencias de Paulo y en
las Instituciones de Gayo, y contenía los principios típicamente romanos
con preceptos del derecho Borgoñon.

 Edicto de Teodorico. Hacia el año 500 d. C. el rey Ostrogodo publicó una

conexión legal (compuesta por ciento cincuenta y cinco capítulos) dirigida
tanto para su pueblo como para los Romanos denominada Edictum
Theodorici, para regir el reino de los ostrogodos, que dominaban la
península itálica. Este Código se basaba en algunos extractos de los
códigos Gregoriano, Hermogeniano y Teodosiano, además de algunas
constituciones posteriores al emperador Teodosio y algunas sentencias de
Paulo y en un trabajo de Ulpiano titulado De oficcio proconsulis. Sin
embargo, estas obras fueron mutiladas, razón por la cual no se distingue
mucho el Derecho Romano en la obra.

EL CORPUS IURIS CIVILIS.

En un afán clasista y simplificador el emperador Justiniano, con el apoyo de

juristas de Berito y Constantinopla, ordena reunir en una de las compilaciones
fragmentos de la literatura jurídica clásica (principalmente tardía) y la denomina
“Digesta”, (530 al 533 d. de C. ), sin embargo autoriza a los redactores a alterar los
textos clásicos para adecuarlos a las necesidades de la época; esas alteraciones
fueron conocidas como interpolaciones o tribonianismos por el jurista de nombre
Triboniano, quien fue el que dirigió la compilación.

El Corpus Iuris Civilis (cuerpo de Derecho Civil) es la más importante

recopilación del derecho romano. Este código se compiló por orden del emperador
Bizantino Justiniano (527-565 d. de C.). El Corpus Iuris Civilis es una recopilación
de constituciones imperiales y jurisprudencias romanas desde el año 117 hasta el
565 d. de C. compuestas por: Las institutas, la digesta sive pandectae, el Codex
repetitae praelectionis y las novellae constitutiones.
Las Instituciones. (Institutas). Contienen una síntesis de preceptos y doctrina en
cuatro libros de reducida extensión que abordan las siguientes materias; el
primero,
de las personas; el segundo, de la división de las cosas, de la propiedad, de los
demás derechos reales y del testamento; el tercero, de la sucesión intestada y de
las obligaciones que proceden del contrato; y el cuarto, de las obligaciones ex
delicto y de las acciones, con un apéndice de publicis iudiciis. La obra es fruto del
encargo que Justiniano hizo a los juristas Triboniano, Teófilo y Doroteo para
realizar una obra de lenguaje accesible que pudiera sustituir a las Instituciones de
Gayo en las escuelas.

El Digesto. (Digesta Sive Pandectae). Es un resumen de las obras de los grandes

jurisconsultos romanos, que comenzó a regir en el 533 d. de C. Es la parte central
y más voluminosa del cuerpo del derecho del ciudadano romano; mientras se iban
realizando las recopilaciones de los iuras en el Digesto, Justiniano decidió que
para la práctica de los escolares según ya lo había expresado en la constitución
“Deo Auctore”, se redacta un tratado elemental de derecho publicado en el 533 d.
de C. así fue promulgado el 21 de noviembre de 533 d. de C. dedicada a la
juventud estudiosa y más tarde, el 30 de diciembre del mismo año, adquirió fuerza
de ley.

El Digesto, es una de las cuatro colecciones en las que se contiene el

Derecho Romano justinianeo, es una compilación de la jurisprudencia contenida
en las obras de los principales jurisconsultos romanos, con predominio de textos
procedentes de Paulo y Ulpiano; consta de 50 libros divididos en títulos que se
inician con una rúbrica; cada fragmento que se inserta en los mismos viene
identificado por el nombre del autor y la obra de donde se tomó. El 15 de
diciembre del 530 Justiniano ordenó su redacción y encargo a Triboniano que
seleccionara unos colaboradores que juzgara con la capacidad necesaria para
acometer la abrumadora tarea de compilar con carácter oficial los precedentes
jurisprudenciales que integraban el ius, pero que no estaban recogidos en leges y
para darle un carácter unitario se procedió también a ordenar y eliminar las
repeticiones, y resolver los aspectos contradictorios de la ley existente e incluso
variar el tenor literal de todos los documentos, si hacía falta para lograrlo y el 16
de diciembre del 533 se publicó bajo el gobierno del emperador del Imperio
romano de Oriente Justiniano I (482-565).

El Digesto está integrado por 50 libros siendo la parte más voluminosa del
Corpus y para servir a fines didácticos Justiniano ordenó su división en 7 partes
que son:

 Del libro 1 al 4: Principios generales sobre el derecho y la jurisdicción.

 Del libro 5 al 11: Doctrina general sobre las acciones de protección judicial
de la propiedad y de los demás derechos reales.
 Del libro 12 al 19: De rebus, obligaciones y contratos.
 Del libro 20 al 27: Umbilicus, obligaciones y familia.
 Del libro 28 al 36: De testamentis et codicilis, herencia, legados y
fideicomisos.
 Del libro 37 al 44: Herencia pretoriana y materias referentes a derechos
reales, posesión y obligaciones.
 Del libro 45 al 50: Stipulatio, derecho penal, apellation

El nuevo Código (Codex repetitae praelectionis). Es un concentrado de

constituciones imperiales desde la época de Adriano hasta Justiniano, entró en
vigor el 29 de diciembre de 534 y se divide en 12 libros que contienen las leyes de
los emperadores anteriores a Justiniano (que ya habían sido compiladas bajo su
mandato en el 529), así como las leyes que él mismo promulgó hasta la
publicación de este volumen.

El 13 de febrero del año 528 Justiniano dictó una constitución denominada

“Haec quae necesrio”, por ser estas las palabras iniciales de su texto, en la cual
designó una comisión a la que encomendó la tarea de proceder a la recopilación
de las leyes, o constituciones imperiales vigentes en la época, que habrían de
tomar de los códigos Gregoriano, Hermogeniano y Teodosiano, agregándole las
constituciones posteriores del mismo Teodosio II y las llamadas novelas post-
teodosianas; meses después la comisión presentó su proyecto al emperador quién
el 7 de abril del año 529 publicó una constitución conocida como el “Novus
Iustiniano Codex” , mismo que entró en vigor el 16 de abril de ese mismo año.

Posteriormente el emperador Justiniano deja sin efectos al antiguo código

(Novus Iustiniano Codex del año 529), al que más tarde se le da el nombre de
“Codex vetus” y en el año 534 ordena la redacción de una nueva recopilación,
aprobada con el título de “Codex repetitae praelectionis” conocido como el “Nuevo
Código”.

Las Novelas. (Novellae constitutiones ). La actividad legislativa de Justiniano

no concluyo con la sanción del código, el Digesto y las instituciones, es decir,
después de publicadas estas colecciones legales la actividad juridica de Justiniano
se prolongó treinta años más dictándose multitud de constituciones y decretos que
son conocidas con el nombre de Novellae constitutiones.

Así las cosas, a partir del año 535 d. de C. las novellae leges se
promulgaron en un código definitivo y se clasificaron de la siguiente manera:

o Epitome Iuliani. Es una colección de 124 novelas que se

encuentran en orden cronológico y escritas en latín, estas se le
atribuyen a un profesor de Constantinopla, llamado Juliano, se cree
que fue compuesta en tiempos de Justiniano, aproximadamente en
el año 555 y transmitida en manuscritos en el siglo VII.

o Las Autenticas. (Authenticum). Esta es una colección de 134

novelas, que fueron publicadas entre los años 535 y 556, estas están
ordenadas cronológicamente hasta el No. 124. Su traducción al latín
 no se realizó de manera fiel, y su nombre proviene por haberse
otorgado autenticidad por los juristas de Bolonia, tras tenerlas por
falsas, se hicieron aproximadamente en el siglo XI.

o Colección Anónima. Es una colección de 168 novelas que

originalmente se redactaron en griego y fueron llevadas a cabo bajo
Tiberio II. En su mayoría pertenecen a Justiniano, otras a Justiniano
II y Tiberio II.