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CONVENCIÓN MARCO DE LAS NACIONES UNIDAS SOBRE

CAMBIO CLIMÁTICO (CMNUCC)

Informe sobre los principales resultados de la COP 18

1-Introducción

Conjuntamente con el 18º Período de Sesiones de la Conferencia de las Partes,


(COP por sus siglas en inglés) tuvieron lugar en Doha, desde el 26 de noviembre
al 8 de diciembre de 2012, la 8º Conferencia de las Partes en calidad de reunión
de las Partes en el Protocolo de Kyoto, la 37º Sesión del Órgano Subsidiario de
Asesoramiento Científico y Tecnológico (SBSTA por su sigla en inglés) y la 37º
Sesión del Órgano Subsidiario de Implementación (SBI por su sigla en inglés). ,
el Grupo de Trabajo Especial sobre los nuevos compromisos de las Partes del
Anexo I, con arreglo al Protocolo de Kyoto (AWG-KP por sus siglas en inglés),
15º Sesión del Grupo de Trabajo Ad Hoc de la Convención a Largo Plazo,
(AWG-LCA por sus sigla in inglés), la Sesión del Grupo de Trabajo Ad Hoc sobre
la Plataforma de Durban (ADP por sus sigla in inglés),

La Conferencia de las Partes es el órgano supremo de la Convención, es decir,


su máxima autoridad con capacidad de decisión. La COP es una asociación de
todos los países miembros (o Partes) que se reúnen todos los años durante dos
semanas. En estas asambleas, como la última en Doha, participan varios miles
de delegados gubernamentales, observadores y periodistas.

La Conferencia de las Partes en calidad de reunión de las Partes en el Protocolo


de Kyoto se refiere a las Partes signatarias del Protocolo de Kioto. Es el órgano
supremo del Protocolo de Kioto, y entre otras actividades provee lineamientos
sobre el Mecanismo para un Desarrollo Limpio (MDL), toma decisiones sobre las
recomendaciones hechas por la Junta Ejecutiva y sobre la designación de las
Entidades Operacionales Designadas (DOEs) por la Junta Ejecutiva.

El Órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico y Tecnológico es uno de los


dos órganos subsidiarios permanente de la CMNUCC. El SBSTA asesora a la
Conferencia de las Partes sobre cuestiones relativas al clima, el medio
ambiente, la tecnología y los métodos. El OSACTT realiza también actividades
metodológicas en áreas específicas, como el sector del uso de la tierra, cambio
de uso de la tierra y silvicultura, la adaptación y la vulnerabilidad. Además el
OSACTT contribuye a establecer un vínculo entre la información científica
facilitada por fuentes especializadas, como el Panel Intergubernamental de
Cambio Climático (IPCC por sus siglas en Inglés), por un lado, y las necesidades
normativas de la COP, por el otro. Colabora estrechamente con el IPCC,
algunas veces solicitando información específica o informes del mismo, y
colabora también con otras organizaciones internacionales competentes que
comparten el objetivo común del desarrollo sostenible.

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El Órgano Subsidiario de Implementación es el otro órgano permanente y ayuda
a supervisar cómo se aplica la Convención, por ejemplo, analizando las
comunicaciones nacionales presentadas por los países miembros. Una labor
especialmente importante a este respecto, es examinar la información contenida
en los inventarios de emisión presentados por las Partes, con el fin de evaluar la
eficacia global de la Convención. El SBI examina la asistencia financiera
otorgada a las Partes no incluidas en el Anexo I para ayudarlas a aplicar los
compromisos contraídos en el marco de la Convención, y orienta a la COP para
que asesore al mecanismo financiero. El SBI asesora también a la COP sobre
cuestiones presupuestarias y administrativas.

El Grupo de Trabajo Especial sobre los nuevos compromisos de las Partes del
Anexo I, con arreglo al Protocolo de Kyoto (AWG-KP por sus siglas en inglés).
Las Partes en el Protocolo establecieron el AWG-KP en Montreal en 2005 con la
finalidad de que estudiara nuevos compromisos para los países industrializados
en virtud del Protocolo de Kyoto para después de 2012. Este Grupo rindió
cuentas de su labor a la COP de la Convención y del Protocolo en cada una de
sus sesiones y concluyó su trabajo en Doha, al acordarse el segundo período de
compromiso.

El Grupo de Trabajo Especial sobre la Cooperación a largo plazo en el marco de


la Convención (AWG-LCA) fue establecido en Bali en 2007 para negociar los
temas de largo plazo. Tenía el mandato de enfocarse sobre temas de mitigación,
adaptación, financiamiento, tecnología, y la visión común en acción cooperativa
a largo plazo. Este grupo informó de su labor a la COP de la Convención y el
Protocolo al final de cada una de sus sesiones que concluyeron en la COP de
Doha.

La Plataforma de Durban (ADP por sus siglas en inglés) fue establecida por las
partes en la COP 17 de Durban con el mandato de establecer un protocolo, otro
instrumento legal o un acuerdo con fuerza legal bajo la convención, aplicable a
todas las partes. El ADP deberá completar las negociaciones para el 2015 y su
resultado deberá entrar en vigencia a partir del 2020.

El funcionamiento de la Convención depende de una serie de grupos y


organismos que mantienen un animado debate. Los países pertenecientes a la
Convención son los que tienen realmente el poder, son los que toman las
decisiones en las reuniones de la Conferencia de las Partes (la mayoría de las
decisiones se alcanzan por consenso). Cada Parte en la Convención está
representada en las sesiones de los órganos de la Convención por una
delegación nacional integrada por uno o varios miembros con facultades para
negociar en nombre de su gobierno.

Los países miembros muchas veces forman alianzas para aumentar la eficiencia
y multiplicar la influencia durante las negociaciones. Los países en desarrollo

2
generalmente intervienen a través del Grupo de los 77 + China para establecer
posiciones negociadoras comunes. No obstante, debido a que el Grupo es muy
numeroso (131 integrantes) y por ende muy heterogéneo, lo hacen también en
forma individual, y a través de otros bloques existentes dentro del Grupo, como
el Grupo Africano, la Alianza de Pequeños Estados Insulares o los Países
Menos Desarrollados que se comentan a continuación.

El Grupo Africano es un Grupo regional y sub grupo dentro del G77 preocupado
especialmente porque exista especial consideración para los países africanos en
cuanto a adaptación, transferencia tecnológica y MDL

La Alianza de Pequeños Estados Insulares (AOSIS, por sus siglas en inglés) es


una coalición de cuarenta y tres países insulares de tierras bajas y pequeñas
dimensiones, en su mayoría miembros del Grupo de los 77+China, que son
particularmente vulnerables al incremento del nivel del mar. Los países de la
AOSIS están unidos por la amenaza que el cambio climático representa para su
supervivencia, y frecuentemente adoptan una postura común en las
negociaciones.

Los Países Menos Desarrollados colaboran en el sistema general de las


Naciones Unidas. Han demostrado cada vez mayor actividad en el proceso
relacionado con el cambio climático, y muchas veces adoptan posiciones
comunes para defender sus intereses, por ejemplo, con respecto a la
vulnerabilidad y adaptación al cambio climático

Grupo de Latino América y el Caribe (GRULAC) es un grupo regional integrado


por 33 países que generalmente no negocia como bloque.

El grupo ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), es un


bloque compuesto por Venezuela, Ecuador, Nicaragua, Cuba y Bolivia, que ha
insistido que los países desarrollados paguen su “deuda climática” y que se
sometan a considerables reducciones en sus emisiones. Desde Copenhague
2009, la ALBA ha desempeñado un papel de resistencia, principalmente a los
Acuerdos de Copenhague y de Cancún, a veces bloqueando las negociaciones,
pero a la vez recordándole energéticamente a los países ricos de sus
obligaciones ante el Convenio y la importancia de acatar los procedimientos de
los complejos reglamentos de las Naciones Unidas.

En 2013 surgió un nuevo bloque negociador, la Asociación Independiente de


Latinoamérica y el Caribe, integrado por seis países —Colombia,  Costa Rica,
Chile, Perú, Guatemala, y Panamá— con el apoyo de la República Dominicana.

El grupo de Integridad Ambiental es una coalición formada recientemente por


México, la República de Corea y Suiza.

El Grupo de Afinidad (conocido como ‘Like-Minded Developing Countries’ o

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LMDC en Inglés) es relativamente nuevo y ha ido cambiando su configuración
en función de los temas abordados y las declaraciones que han hecho.
Participan países como China, India, Arabia Saudita y Argentina también ha
participado de algunas reuniones.  El bloque LMDC se ha pronunciado
decisivamente con respecto al principio central en estas negociaciones de
“Responsabilidades Comunes pero Diferenciadas

Otro bloque, el Sistema de Integración Centroamericano, SICA, está compuesto


por Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá
y la República Dominicana. SICA ha presionado por un mayor reconocimiento de
una de las regiones más vulnerables a los impactos del cambio climático, con
énfasis en la capitalización del nuevo Fondo Verde del Clima.

Principalmente vinculado a los temas forestales varios países de la región


participan en la Coalición de Países con Selva Tropical, que presiona por planes
de reembolso a los países en vías de desarrollo que protegen sus bosques. 

Existe otro grupo denominado Grupo de Países Altamente Vulnerables, que ha


luchado energéticamente en COP17 para ser incluido en el Programa de Acción
de Adaptación Nacional junto con los países menos desarrollados. 

El grupo BASIC, integrado por Brasil, China, India, y Sudáfrica son aliados muy
poderosos y ha desempeñado un papel fundamental en la re-orientación del
proceso en su totalidad y del Acuerdo de Copenhague del 2009.

La Unión Europea (UE), sus 27 miembros se reúnen para adoptar una posición
común. Como organización de integración económica regional, la Comunidad
Europea es Parte de la Convención y del Protocolo.

El Grupo Paraguas es una coalición de países desarrollados no pertenecientes a


la UE que se formó tras la adopción del Protocolo de Kioto. Aunque no hay
ninguna lista oficial, el grupo está integrado normalmente por Australia, Canadá,
Estados Unidos, la Federación de Rusia, Islandia, Japón, Noruega, Nueva
Zelanda y Ucrania. Estos países destacan que los países en desarrollo con
mayores niveles de emisiones deben asumir los mismos compromisos que los
países desarrollados.

Varios otros grupos colaboran también en el proceso del cambio climático, en


particular países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo
(OPEP), especialmente preocupado por la implementación de medidas de
respuesta frente al cambio climático, un grupo de países de Asia central,
Cáucaso, Albania y Moldova (CACAM) y países que son miembros de
organizaciones como la Liga de Estados Árabes y la Agencia
Intergubernamental de la Francofonía.

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2- Resultados de la COP 18

La COP 18 tuvo lugar por primera vez en un país del medio oriente y de la
misma participaron aproximadamente 90000 personas, incluyendo 4,356
representantes de países, 3,956 representantes de organismos de Naciones
Unidas, organizaciones intergubernamentales y organizaciones de la sociedad
civil, y 683 miembros de la prensa.

Secretaria ejecutiva de la CMUCC Christiana Figueres, junto al Presidente de


la COP 18/CMP 8 Abdullah bin Hamad Al-Attiyah, y la Presidente de la COP
17/CMP 7 Maite Nkoana-Mashabane. Fuente: IISD RS

Las negociaciones concluyeron 27 horas más tarde de lo programado lo que da


cuenta, nuevamente, de los puntos de vista divergentes y la diferencia de
intereses de los países sobre los distintos puntos de la agenda.
La COP 18 se enfocó mayormente en los procesos de implementación, y fue
más una COP cuyos resultados se enfocaron más en las reglas de la
negociación que en el logro de nuevos acuerdos políticos. Si bien el grupo de
decisiones logradas en Doha, conocidas como la "Puerta Climática de Doha”
permite mantener las negociaciones en el camino hacia un nuevo acuerdo
climático, también es de destacar que la falta de ambición en las acciones de
mitigación por parte de los mayores emisores hace que el objetivo de mantener
el nivel de incremento en la temperatura global en no más de 2 C sea cada vez
más difícil de lograr.

Los aspectos claves de las negociaciones fueron: finalizar las reglas para el
logro de un segundo período de compromiso del Protocolo de Kyoto, concluir
decisiones sobre transparencia, financiamiento, adaptación y bosques (REDD+) 1
1
REDD+ es el acrónimo usado para la reducción de las emisiones debidas a la
deforestación y la degradación forestal y la función de la conservación, la gestión
sostenible de los bosques y el aumento de las reservas forestales de carbono en los

5
así como acordar un plan de trabajo para negociar y lograr un nuevo acuerdo
climático internacional y legalmente vinculante para el 2015.

A continuación se presentan los principales resultados de los temas más


relevantes negociados en Doha:

Financiamiento

El aspecto más importante del tema de financiamiento radicaba en las señales


sobre la continuación o el incremento de los fondos para el largo plazo, período
2013-2020, que los países desarrollados podían dar a los países en desarrollo a
través del Fondo Verde para el Clima 2 (GCF, por su sigla en inglés). Esto, en
virtud de cumplir con el compromiso asumido en la COP15 en Copenhague de
movilizar conjuntamente 100 mil millones de dólares estadounidenses anuales
para 2020, para que las economías en desarrollo recorten sus emisiones. Estos
nuevos fondos serían el paso siguiente a los 30 mil millones de dólares
estadounidenses prometidos también en la COP 15 para el período 20010-2012
como financiamiento de inicio rápido (fast start finance).

Lamentablemente no se lograron grandes avances sobre cómo se movilizarían


esos recursos y no hubo un compromiso colectivo de incremento en los fondos,
dejando a muchas partes insatisfechas. Los países desarrollados sólo acordaron
otorgar colectivamente hasta el 2015 al menos el mismo monto otorgado entre el
2010-2012. La mayoría de los países adujeron dificultades económicas y
financieras por la reciente crisis, así como razones vinculadas con los procesos
políticos internos para no asumir nuevos y concretos compromisos. En este
punto cabe destacar que algunos países europeos como Dinamarca, Francia,
Alemania, Suecia y el Reino Unido, diferenciándose del resto, sí establecieron
compromisos individuales superadores.
Finalmente se decidió postergar hasta el año próximo las discusiones sobre el
plan de trabajo para el financiamiento a largo plazo.

Adicionalmente, los países comprometieron fondos para los costos operativos


del Fondo Verde para el Clima para que pueda estar operativo en 2013.
También se decidió que la ciudad de Songdo, en la República de Korea sería la
sede del GCF. Los países también acordaron en desarrollar durante 2013 las
reglas de vinculación entre la COP y el GCF de forma de permitir que la COP
guíe estratégicamente el fondo sin interferir en el trabajo diario.

La brecha entre necesidades de financiamiento y la corriente de recursos 


financieros disponibles no parece acortarse, pese a los esfuerzos por crear los
arreglos institucionales necesarios. Los avances en el Fondo Verde para el
Clima, el Comité Permanente, la articulación entre la COP y el GCF, y la

países en desarrollo.
2
Establecido en la COP 17 de Durban. Más información en
http://unfccc.int/portal_espanol/newsletter/items/6806.php

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consolidación del programa de trabajo sobre financiamiento a largo plazo,
marcan bases sólidas donde está asentado el proceso, pero la discusión de
fondo sobre las diversas fuentes de financiamiento, el equilibrio entre la
provisión de recursos públicos y la movilización de recursos privados, las
responsabilidades diferenciadas, la equidad en la asignación de recursos y la
transparencia sobre el uso de los recursos de este origen, aún no están
resueltas y serán los temas claves de discusión de las próximas sesiones.

Pérdidas y Daños

En los casos donde la mitigación y la adaptación al cambio climático no


funcionen como deberían, las personas afectadas por los impactos del cambio
climático pueden enfrentar daños a la salud, las propiedades o directamente
pérdidas de bienes y hasta de la propia vida. En este sentido, el acuerdo de
Doha incluye por primera vez, de manera formal, la instauración de un proceso
para atender las cuestiones relacionadas con las pérdidas y daños debidas al
cambio climático. Esto fue logrado gracias a la persistente presión del grupo de
los países menos desarrollados y los estados insulares.

Reunión del grupo de trabajo informal sobre pérdidas y daños. Fuente: IISD RS

A través del acuerdo alcanzado, se decide establecer arreglos institucionales,


tales como un mecanismo internacional que permita hacer frente a los daños y
las pérdidas asociadas con los impactos del cambio climático en los países en
desarrollo que son particularmente vulnerables a los efectos adversos del
cambio climático. Esos arreglos institucionales debieran estar finalizados y ser
establecidos a fines de 2013 en la COP 19.
En definitiva, se trata de la introducción de un procedimiento de compensación
por el cual los países que fueron los principales emisores aceptan compensar
los daños ocasionados. Aunque no se haya determinado la magnitud de las
contingencias y la dimensión de los pasivos, y se recomiende adoptar medidas
precautorias, la introducción de la noción de compensación, y el consecuente
apoyo financiero, tecnológico y de capacidades, aún con la cautela textual con la
que se ha concretado, constituye por cierto un cambio sustantivo en las
orientaciones de esta cuestión, pues incluye referencias a eventos extremos, así
como a los impactos de lento desarrollo.
También es importante destacar que aún no está claro cómo será financiado
este mecanismo, considerando el bajo nivel actual de fondos destinados a los

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mecanismos ya existentes, la resistencia de los países desarrollados con
respecto a este nuevo mecanismo y las posibles responsabilidades que les
pueden ser adjudicadas.

Protocolo de Kyoto

En Doha se acordaron las reglas para un segundo período de compromiso,


permitiendo que el Protocolo de Kyoto (PK) se prolongue por otros 8 años (2013-
2020). Además de la Unión Europea se sumaron Australia, Suiza y Noruega; si
bien estos países sólo contribuyen con el 15 porciento de las emisiones globales
y algunos de los que fueron parte del primer período de compromiso han
preferido abstenerse, es un paso importante para mantener el único instrumento
legalmente vinculante bajo el marco de la CMNUCCC que compromete a los
países desarrollados a reducciones de emisiones.
Este resultado es crucial no sólo en lo inmediato, para garantizar la continuidad
legal, técnica y operativa hacia el segundo período de compromiso del
Protocolo, si no para articular los esfuerzos de mitigación en el corto y mediano
plazo con el régimen climático que se iniciará en el 2020. Con este acuerdo los
países podrán comenzar a implementar este nuevo período a partir del 1 de
enero del 2013.

Respecto al nivel de ambición de los compromisos cuantitativos de limitación y


reducción de emisiones de gases de efecto invernadero para el segundo período
de compromiso, el acuerdo establece que los países del Anexo I reverán esos
compromisos -ya informados- a más tardar en el 2014, para asegurar que, por
esta vía, se haga efectivo el incremento en la ambición en materia de mitigación
considerando el 25-40 porciento de reducción de emisiones definido por el
cuarto reporte del IPCC.

Respecto a los países que no ingresaron en el segundo período de compromiso


como Japón, Canadá, Rusia y Nueva Zelanda, los negociadores acordaron en
limitar su participación en los mecanismos de flexibilidad del PK. Esto implica,
que si bien pueden participar de proyectos en el marco del Mecanismo de
Desarrollo Limpio (MDL) no podrán contabilizar las unidades de reducción
logradas a través de ellos.

Adaptación

La COP tomó dos decisiones importantes en este tema referidas al Plan


Nacional de Adaptación y al Comité de Adaptación.

En Doha se aprobaron un grupo de guías técnicas para ayudar a los países a


desarrollar Planes de Adaptación Nacional. Éstos planes son procesos de
planificación a largo plazo, flexibles que permitan construir capacidad adaptativa
y responder al cambio climático. Este enfoque marca una diferencia con el de los

8
Programas de Acción Nacionales para la Adaptación, que eran a corto plazo,
con foco en proyectos y sólo limitados a los países menos desarrollados. La
COP pidió al fondo especial del Clima del Fondo para el Medioambiente Mundial
3
(GEF por sus siglas en inglés) y a donantes bilaterales y multilaterales que
ayuden a los países fuera del grupo de los menos desarrollados para que
preparen los nuevos Planes de Adaptación Nacional.

Vinculado a la Junta Ejecutiva del Fondo de Adaptación, la COP solicitó al OSI


que presente un informe sobre el estado de los recursos financiero y las
tendencias en el flujo de los mismos. Esta solicitud surje de la preocupación de
los países, en función de la disminución de los precios en el mercado de
carbono, sobre la disponibilidad de recursos del Fondo y por ende de su futura
capacidad de acción. Cabe destacar que el mismo se sostiene principalmente a
través de un porcentaje de los ingresos que generan las transacciones de los
proyectos MDL.

La COP también aprobó el plan de trabajo de 3 años del Comité de Adaptación 4,


establecido como parte del Marco de Adaptación de Cancún con el fin de
promover la ejecución coherente de medidas de adaptación reforzadas en el
marco de la Convención lo que representa un esfuerzo importante para
promover la coherencia entre las distintas líneas sobre adaptación que se
encuentran negociando bajo la convención. El comité también busca generar
sinergias entre las CMNUCC y las actividades de adaptación que realizan otras
organizaciones por fuera de la Convención y también proveerá apoyo técnico a
los Países.

Tecnología

Dentro de la temática de tecnología los derechos de propiedad intelectual fueron


una vez más el punto crítico de disputa en Doha. Este tema es liderado por India
por parte de los países en desarrollo, quien argumenta que es imposible un
desarrollo bajo en carbono sin un acceso a la tecnología requerida a bajo costo.
Una vez más este tema no logró acordarse ni fue incluido en el texto final de la
COP lo que destaca la relevancia que este tema tiene para los países
desarrollados. El debate seguramente seguirá durante el 2013 bajo la
Plataforma de Durban.

Además de este tema el foco principal estuvo puesto en generar nuevas


instrucciones a los dos órganos que preparan el Mecanismo de Tecnología 5
establecido en Cancún en 2010. El Comité Ejecutivo de Tecnología -brazo

3
Para más información sobre este fondo especial visitar:
http://www.thegef.org/gef/sites/thegef.org/files/publication/SCCF%20SPANISH.pdf
4
Para más informacións orbe el Comité de Adaptación visitar:
http://unfccc.int/adaptation/cancun_adaptation_framework/adaptation_committee/items/
6053.php

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político del Mecanismo- y el Centro de Tecnología del Clima y la Red - brazo
operativo del Mecanismo – son los encargados de mejorar la transferencia de
tecnología baja en carbono a los países en desarrollo. El resultado en Doha
estuvo enfocado en clarificar el trabajo de éstos dos órganos, el vínculo entre
ellos, así como su relación con otros órganos de la CMNUCCC como el Comité
de Adaptación o el Fondo Verde del Clima. En este sentido y respecto al Centro
de Tecnología del Clima, se eligió al Programa de Naciones Unidas para el
Desarrollo (UNEP por sus siglas en inglés) para ser la sede del mismo por un
plazo de 5 años y se adoptó un memorando de entendimiento entre la COP y el
UNEP por este tema. Si bien se están logrando avances en la estructura del
mecanismo, aún es incierto si éste podrá impulsar la transferencia de tecnología
a la escala necesaria.

Mitigación

Países desarrollados
La discusión sobre aspectos de mitigación para los países desarrollados giró
sobre los compromisos de reducción de emisiones, con la insistencia de los
países en desarrollo para que incrementaran sus ambiciones de reducción. La
COP instó a los países desarrollados a incrementar sus objetivos de reducción
de emisiones con la visión de reducir las emisiones conjuntas a niveles que sean
consistentes con los valores expresados en el cuarto informe del IPCC.
También se decidió establecer un programa de trabajo bajo el SBSTA que
finalizará en 2014 para clarificar las metas de reducción especialmente con foco
en identificar elementos comunes para medir el progreso así como para
asegurar la comparabilidad entre los países desarrollados teniendo en cuenta
sus circunstancias nacionales.

Países en desarrollo- NAMAs


En lo que concierne a las acciones de mitigación apropiadas a cada país
(NAMAs, por su sigla en inglés), también desarrollado bajo el AWG-LCA, se
decidió establecer un programa de trabajo bajo el OSI para promover el
entendimiento de la diversidad de esas acciones de mitigación.

Ese programa de trabajo tiene el objeto de facilitar la preparación y ejecución de


las acciones de mitigación, incluyendo aspectos técnicos (por ejemplo, el
análisis de supuestos y metodologías, gases y sectores cubiertos, los resultados
en materia de mitigación), cuestiones de provisión de recursos para el desarrollo
de las NAMAs, y el alcance del mecanismo de conciliación entre las acciones de
mitigación y los recursos de soporte disponibles (financiamiento, tecnología,
capacidades) en el marco del registro creado a tal efecto. El programa de trabajo
se iniciará en 2013 y finalizará en el 2014 en la COP 20.
5
Para más información sobre el Mecanismo de Tecnología visitar:
http://unfccc.int/ttclear/jsp/TechnologyMechanism.jsp

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También estableció la posibilidad de desarrollar, a pedido de los países en
desarrollo interesados, talleres regionales y preparar materiales técnicos para
generar capacidades en la preparación, presentación e implementación de los
NAMAs.

Enfoques de mercado y no mercado

También en discusión bajo el AWG-LCA la COP reconoció que los países


pueden desarrollar e implementar varios enfoques para mitigación incluyendo
mecanismos de mercado y de no-mercado, éste último impulsado fuertemente
por Bolivia, los cuales deben cumplir con estándares apropiados. También
solicitó al SBSTA que conduzca dos programas de trabajo sobre los enfoques no
basados en mercado y las modalidades y procedimientos para el nuevo
mecanismos de mercado definido en Durban.

Bosques

Vinculado al sector forestal los dos temas principales abordados fueron REDD+ 1
y uso del suelo, cambio de uso del suelo y silvicultura (USCUSS) bajo el MDL.

En el marco de REDD+ se trabajaron en el SBSTA los aspectos metodológico y


en el AWG-LCA en clarificar como el financiamiento estaría disponible para los
países que establecieran actividades REDD+. Respecto a los aspectos
metodológicos se esperaba avanzar sobre la definición de modalidades para
sistemas nacionales de monitoreo de bosques y modalidades para la medición,
reporte y verificación, donde los países deberán desarrollar bases de datos,
capacidades locales y la infraestructura necesarias para la recopilación de datos
de estudios de campo, y teledetección. También se esperaba poder analizar los
temas relacionados a las causas de la deforestación y degradación de bosques,
cuestión estrechamente vinculada con el avance de la frontera agropecuaria.
Otro tema que se esperaba avanzar era la definición sobre el plazo y frecuencia
de la presentación del resumen con información relacionada a las salvaguardas
ambientales y sociales por parte de los países en desarrollo y la necesidad de
mayor orientación al respecto. Este es un punto crítico para los países en
desarrollo, ya que tiene directa relación con el fortalecimiento de la gobernanza,
lo cual está particularmente vinculado a los marcos legales que permitan
resolver los aspectos sobre tenencia de la tierra de las comunidades locales, el
fortalecimiento institucional y la distribución de beneficios (monetarios y no
monetarios); así como enfatizar la necesidad que las actividades REDD+
mantengan los bienes y servicios ambientales distintos del carbono que también
proveen los bosques.

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Grupo informal sobre aspectos metodológicos de REDD+ bajo el SBSTA en proceso
de redacción. Fuente: IISD RS

Adicionalmente, trabajar sobre las orientaciones para la evaluación técnica de


las propuestas de niveles de referencia de las emisiones forestales y/o niveles
de referencia forestal, con el fin de informar a la COP sobre los avances
logrados en la materia. La determinación de los niveles de referencia de las
emisiones forestales y los niveles de referencia forestal es un tema clave; dado
que ellos determinarán cuál será la línea de base que se utilice para recibir los
beneficios financieros.

En función del tiempo disponible y los temas priorizados en sesiones anteriores


sólo se trabajó sobre modalidades para sistemas nacionales de monitoreo de
bosques y modalidades para la medición, reporte y verificación (MRV) quedando
para el próximo año el resto de los temas.
Si bien durante los primeros días se realizaron avances sobre estos temas, al
abordar los aspectos vinculados a la verificación, Noruega impulsó la opción de
que fuera realizada a través de un proceso internacional independiente con un
equipo de expertos. Ante esta propuesta, Brasil y otros países en desarrollo no
estuvieron de acuerdo, considerando que se pretenden compromisos muy
fuertes cuando aún no hay compromisos claros de financiamiento por parte de
los países desarrollados los que condicionarían los compromisos relativos a la
verificación.
Finalmente, ante la falta de acuerdo en el plenario de cierre se decidió que el
tema se continuaría discutiendo en la próxima reunión del SBSTA, en junio de
2013 en Bonn, Alemania.

Bajo el AWG-LCA, las discusiones se centraron en la propuesta de crear un


Comité que centralizara todos los aspectos vinculados con la implementación de
REDD+, desde capacitaciones hasta financiamiento. Esta propuesta, realizada
por Papua Nueva Guinea, fue rechazada por muchos países que consideraban
que establecer una nueva estructura llevaría demasiado tiempo, esfuerzo y
dinero, además de no tener en claro aún cuáles serían sus funciones. Colombia

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propuso establecer un programa de trabajo para considerar los aspectos de
financiamiento.
Finalmente la decisión adoptada por la COP incluyó comenzar a trabajar en el
2013 en un Programa de Trabajo sobre financiamiento basado en resultados
que finalizaría en la COP 19 y que incluirá dos Talleres donde se analizarán los
temas sobre la implementación de las actividades REDD+.
También solicitó al OSACT 38 que considere cómo serán desarrollados los
enfoques no basados en mercados como el enfoque conjunto de mitigación y
adaptación propuesto por Bolivia. También deberán iniciar trabajos sobre los
aspectos metodológicos sobre los beneficios distintos del carbono que resulten
de las actividades de REDD+.
Solicitó al OSI que inicie, en su próxima sesión, un proceso para abordar las
necesidades de mejorar la coordinación del apoyo a las actividades de REDD+
donde considere los arreglos institucionales existentes o la posibilidad de
establecer nuevas alternativas de gobierno y presentar sus recomendaciones a
la COP 19.

En lo concerniente al USCUSS, estos temas se trabajaron en un grupo de


contacto con base a las propuestas realizadas por Australia y Uruguay. La
propuesta de Uruguay solicitaba la inclusión de actividades como agricultura,
manejo de pasturas y manejo forestal sostenible para el segundo período de
compromisos del PK.
Varios países destacaron la dificultad de incorporar nuevos temas bajo el MDL
principalmente por el desafío que implican los temas de permanencia,
adicionalidad y fugas para las actividades propuestas.
Finalmente se decidió continuar las discusiones y análisis en la próxima reunión
en el 2013 con base en nuevas presentaciones de los países donde se aborden
más detalladamente los temas propuestos.

Agricultura

El tema de agricultura fue negociado en el SBSTA en varias reuniones del grupo


de contacto, sin haberse podido llegar a un acuerdo a nivel técnico antes del
plenario de cierre del SBSTA.

El G77 y China, grupo donde negocia Argentina, presentó una propuesta de


texto acordada, basada fundamentalmente en que el trabajo en el SBSTA debe
basarse en la adaptación de la agricultura a los efectos adversos del cambio
climático, dada la relación del sector con la seguridad alimentaria y el desarrollo
económico y social de los países en desarrollo. Asimismo, en la propuesta del
G77 y China se incluyó una mención al principio de responsabilidades comunes
pero diferenciadas. La posición totalmente opuesta de la Unión Europea y
Gambia dificultaron ampliamente las negociaciones.

También se intentó unir las tres propuestas de texto que se encontraban sobre la
mesa (del G77 y China –con eje en la adaptación-; la UE –con foco en la

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mitigación-; y Nueva Zelanda –con centro en la agricultura y cambio climático de
manera general-) objetivo que tampoco pudo lograrse.

Al igual que en el tema de REDD+ al no haber consenso a nivel técnico para


enviar el tema de agricultura al nivel ministerial, se decidió continuar con las
discusiones sobre este tema en la próxima sesión del SBSTA en el primer
semestre de 2013.

3-Conclusiones
El principal objetivo de Doha, si bien no tan visible pero igualmente importante,
fue ordenar la diversidad de procesos que se desplegaban en simultáneo y
definir una trama articulada de vías de negociación. En este sentido en la COP
18 se lograron ordenar las actividades en lo concerniente a la construcción de
acuerdos para un nuevo protocolo bajo la Plataforma de Durban y se dieron por
concluidas las tareas bajo AWG-LCA en el que se habían concentrado una
enorme diversidad de asuntos- haciendo notar que esa decisión constituye el
resultado acordado correspondiente a la Decisión sobre el Plan de Acción de
Bali. Finalmente, también debe computarse en esta ordenación la resolución de
las cuestiones relativas a la continuidad del Protocolo de Kioto lo que también
dio un fin a las tareas bajo el AWG-PK.  

Vista de la reunión plenaria. Fuente: IISD RS

Más allá de los logros antes comentados, contar a partir del 2013 con una sola
vía de negociación libera una gran cantidad de tiempo y recursos para los
países, así como para el Secretariado de la CMUNCC. Esto permitirá enfocar las
discusiones y podría llevar a un progreso más rápido hacia los resultados

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esperados y lograr un nuevo, ambicioso y efectivo acuerdo global que pueda
iniciarse en el 2020.

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