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Capitulo 18
Madera
La madera es uno de los pocos materiales compuestos que no es fabricado
por el hombre. Durante mucho tiempo su uso fué intensivo en las actividades
de construcción, especialmente de vivienda, y aun hoy en día su empleo
continua teniendo gran importancia como material de soporte temporal (V.gr
Formaletas), como elemento formante ()Techos) o como material estético
(Enchapadas etc). El peso de la madera natural que se procesa anualmente es
aproximadamente igual a toda la producción de los metales, cementos y plás-
ticos (Ref. 1.3).
Antiguamente se empleaba la madera en su estado natural (madera callosa),
Pero la moderna tecnología ha logrado obtener nuevos productos de madera
mediante el uso de láminas encaladas o láminas de productos empleando
virutas o desechos de madera, lo que ha aumentado de manera grande su
rendimiento y versatilidad.
En la madera, la alta resistencia y la elevada elasticidad se combinan con una
pequeña masa volumétrica y, por eso, con una baja conductividad térmica.
La madera soporta bien el frío, no se disuelve en el agua ni solventes orgánicos,
capaces de disolver polímeros sintéticos. Es bien conocida la facilidad con
que se labra la madera, la comodidad para unir elementos de madera con
cola, ensambladuras, clavos, etc. Sin embargo, la madera y tienen una serie
de particularidades que deben considerarse durante la elaboración, almace-
namiento y explotación de los materiales de madera.
a calidad de la madera depende de la especie del árbol, las condiciones de
su crecimiento y la presencia de tales o cuales defectos (grietas, nudos, etc.).
Por eso las propiedades mecánicas y otras características de la madera oscilan
dentro de límites muy amplios. Además, la resistencia mecánica varía mucho
al cambiar la humedad, con la particularidad de que la humectación va
acompañada del hinchamiento, mientras que el secado con lleva a la
contracción considerable de la madera. La contracción irregular provoca el
pandeo y agrietamiento de los tablones y otros materiales de madera. La
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estructura fibrosa anisotrópica de la madera predetermina que sus propiedades
mecánicas, termotécnicas y demás resultan desiguales en diferentes direcciones,
lo que deberá tomarse en consideración al proyectar estructuras de madera.
Las desventajas más notorios de la madera consisten en su combustibilidad
y facilidad de putrefacción que tiene bajo la influencia de ataque de hongos.
Las estructuras de madera fabricadas por encolado de elementos finos con
colas poliméricas resistentes al agua reducen la contracción, impide el
abarquillamiento de la madera. Para luchar contra la putrefación se recurre a
la impregnación de la madera con antisépticos; para elevar la resistencia al
fuego se emplea productos ininflamables.
ESTRUCTURAS DE LA MADERA
18.1 Estructura de la madera
1. Macroestructura de la madera:
Llámese madera el tejido leñoso de fibras liberado de la corteza que contie-
ne al tronco del árbol. Este último está constituido por células que tienen
diferentes destino en el árbol en crecimiento y, por lo tanto, distinta forma y
tamaño.
La macroestructura del tronco (aparente a simple vista) puede examinarse
recurriendo a los tres cortes principales: transversal (o de tope) y dos longitudinales,
el radial (que pasa a través del eje del tronco) y el tangencial (fig N°18.1).
Figura 18.1. Estructura de la madera
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La microestructura de la madera es la que puede observarse por medio de
un microscopio.
Las células de la madera se clasifican en dependencia de las funciones que
desempeñan. El tejido mecánico, o de apoyo, de la madera es la parte que
tiene las máxima resistencias mecánicas y a la putrefación. En la madera de
especies coníferas el tejido de apoyo lo constituye las traqueidas de madera
de verano. En las coníferas un 90-95% del volumen total lo componen las
traqueidas (fig. N 18.1°). El tejido de apoyo en los troncos de los frondosos
está constituido por células fusiformes de paredes gruesas llamadas “fibras
de madera”.
Las células de conducción son los vasos en los frondosos y las traqueidas
en las coníferas. Los vasos son en sí tubitos de paredes finas, dispuestos unos
encima de otros, con un diámetro de 0.04-0.3 mm y una longitud próxima a
100 mm y más. La mayoría de las traqueidas, que se comunican entre sí por
medio de orificios microscópicos, mostrados en la fig N°18.4. Por consi-
guiente, las traqueidas de las coníferas desempeñan el papel del tejido de
apoyo y de conducción.
Los radios medulares se ven en el corte transversal del tronco de roble,
arce, haya y algunos otros árboles frondosos en forma de franjas estrechas
radiales. En el corte tangencial del tronco los radios medulares se presentan
en forma de rayas oscuras. En las coníferas son muy estrechos y se pueden
ver sólo al emplear un microscopio. En un árbol en crecimiento, los radios
medulares sirve a fin de transportar las substancias nutritivas y conservar su
reserva para el invierno. Con relación al volumen de toda la madera, las coní-
feras contienen 5-10% y los árboles frondosos, 10-35% de radios medulares.
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La pared de una célula (según Robertt) consta de varias capas que se distinguen
por su composición y espesor (fig N°18.5). La vacuola 1 queda limitada por
una capa inferior muy fina 2, las fibras primarias (fibrillas) de celulosa se
disponen dentro de ella aproximadamente a lo largo del eje de la célula. La
segunda capa 3 es bastante más gruesa que la interior y se compone de
múltiples haces de fibrillas de celulosa situados en espiral. En el espacio
entre fibrillas hay un poco de lignina. En la capa media 4 las fibrillas de
celulosa está ubicadas más o menos regularmente, cubriendo con las espiras
la capa anterior. En el espacio interfibrilla se halla la lignina. La capa siguiente
5 está constituida por fibrillas entrelazadas de celulosa. El elemento intercelular
6 no contiene celulosa. Es de un espesor submicroscópico, y al reproducir la
célula se forma primero como una pared divisoria, entre las células nuevas
surgidas, compuesta por protopectina junto con lignina.
PROPIEDADES DE LA MADERA.
18.3 Propiedades físicas de la madera:
La densidad de la madera varía insignificantemente, dado que la madera de
todos los árboles se compone por lo común de una misma materia, la celulosa.
Por eso la densidad media de la madera puede adoptarse igual a 1.54 g/cm3.
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La masa volumétrica de la madera de diferentes especies, e incluso de una
misma especie, oscila dentro de amplios límites, ya que la estructura y la
porosidad de un árbol en crecimiento depende del terreno, clima y otras
condiciones naturales. La madera puede ser muy ligera, t= 450 kg/m3 (cedro,
pinabete); ligera, t=610-750 kg/m3 (pino, abeto, temblón); con masa
volumétrica media, t=610-750 kg/m3 (alerce, roble, abedul); pesada, t>910
kg/m3 (boj, cornejo). A medida que aumenta la humedad crece la masa
volumétrica de la madera. La madera recién cortada es mucho más pesada
que la seca al aire, que tiene una humedad de 15% (Tabla N°18.1).
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La humedad de equilibrio depende de la temperatura y la humedad relativa
del aire circundante. Para determinar la humedad equilibrada puede aprove-
charse el nomograma, el cual a lo largo del eje de abscisas vienen trazada la
temperatura del aire desde -20 hasta +100°C; en el eje de las ordenadas, la
humedad relativa del aire de 0 a 100%. Cada una de las rectas inclinadas
representa el lugar geométrico de puntos correspondientes a una misma
humedad equilibrada de la madera.
La humedad equilibrada de la madera secada bajo techo a temperatura
ambiente constituye un 8-12%, por esos hasta esa humedad se secan las tablas
de parqué, la madera que sirve para artículos de ebanistería, etc. La maderas
secada al aire libre durante largo tiempo tiene una humedad de 15-18%.
Los índices de las propiedades (masa volumétrica, resistencia mecánica)
obtenidos al ensayas la madera con diferente humedad, para poder compa-
rarlos, se reduce a la humedad estándar igual al 12%. En caso de necesidad,
las características mecánicas de la madera (por ejemplo, el límite de resistencia)
se recalcula con respecto al 15% de humedad.
Contracción, hinchamiento y pandeo. Las oscilaciones de la humedad en
las fibras de madera condicionan el cambio de las dimensiones y forma de la
tablas, vigas y otros artículos de madera. Al humectar la madera seca hasta
alcanzar ésta el límite de higroscopicidad, las paredes de sus células se
engruesan, hinchan, lo que conduce al aumento de las dimensiones y el
volumen de los artículos de madera. Como se infiere de la fig N°18.6, la
humedad libre que rellena las cavidades de las células, con se refleja sobre
las dimensiones de la madera. La contracción (merma) de la madera tiene
lugar al eliminar el agua de constitución que se encuentra en las paredes
celulares, es decir, si la humedad de la madera llega a ser menor que el límite
de higroscopicidad, la contracción alcanza el máximo valor cuando se
desprenda por completo la humedad contenida en las paredes celulares.
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A consecuencia de la heterogeneidad de la estructura, la madera se seca en
diferentes direcciones de manera irregular (fig N°18.7) a lo largo del eje del
tronco (a lo largo de las fibras) la máxima contracción lineal es relativamente
pequeña: alrededor del 0.1% (ó 1 mm por 1m), en la tangencial: 6-12% (6-12
cm por 1m).
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Donde a y b son las dimensiones de la sección transversal de la probeta
para la humedad inicial dad, mm; ao y bo, ídem, en estado absolutamente seco.
El grado de contracción de la madera se caracteriza por el coeficiente de la
masa volumétrica km y se calcula para 1% de humedad, con una precisión de
hasta el 0.01% según la siguiente fórmula:
km=Mvmáx/30
Es esta fórmula el valor medio del límite de higroscopía de la madera de
diferentes especies se ha adoptado igual al 30%.
La contracción y el hinchamiento de la madera son propiedades negativas
que provocan el combado y agrietamiento de los materiales de madera.
El combado de los artículos de madera (fig N° ) se debe a los siguientes
fenómenos:1. La diferencia de contracción de la madera en las direcciones
tangenciales y radial; 2. La inuniformidad del secado. La irregularidad de la
contracción y el combado provocan la aparición de tensiones internas en la
madera y el agrietamiento de las materiales aserrados y en rollos. Las tablas
anchas se deforman más que las estrechas, por eso para el suelo de tiras y los
artículos de ebanistería se emplean tablones de 10-12 cm de ancho.
Con el fin de impedir al abarquillamiento y agrietamiento de los artículos
de madera, ésta se utiliza con la humedad equilibrada, correspondiente a las
condiciones de explotación. Por ejemplo, para los artículos de ebanistería la
humedad no debe exceder de un 8-10%, mientras que para las estructuras
exteriores, 15-18%. Para proteger la madera contra la siguiente humectación,
ésta se cubre con pinturas, lacas o esmaltes.
En la madera en rollos y aserrada, las grietas debidas a la contracción se
forma en primer lugar en los extremos. Para disminuir el agrietamiento, los
extremos de los troncos, vigas, tablones se cubren con una mezcla de cal, sal
y otros compuestos. El brillo de la madera depende de la densidad y el
grado de elaboración. Para proporcionarle brillo la madera se somete al puli-
do y sobre ella se aplican lacas. La madera pierde el brillo cuando se pudre.
El olor de la madera depende del contenido en esta de sustancias resinosas,
etéreas y tánicas. Por ejemplo, la madera del alerce y del pino huele a agua-
rrás.
La conductividad térmica de la madera seca es insignificante; para el pino
de través a las fibras es igual a 0.17; a lo largo de las mismas, 0.34 W/(m°C).
La conductividad térmica de la madera depende de su porosidad, humedad y
dirección del flujo de calor. Las propiedades calorífugas de la madera se
utilizan ampliamente en la construcción.
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La electroconductividad de la madera depende de su humedad. La resis-
tencia eléctrica de la madera seca es como promedio de 75*107W.cm, la de la
húmeda es decenas de veces inferior.
Las propiedades mecánicas de la madera se determinan sometiéndolas a
ensayos de probetas pequeñas de madera pura (exentas de defectos visibles).
La cantidad mínima de probetas para realizar el ensayo se calcula conforme
a fórmulas que consideran el coeficiente de variación de la propiedad exami-
nada.
Los índices de las propiedades de la madera deben recalcularse al 12% de
humedad (en caso de necesidad, al 15% de humedad). Como se desprende
de la fig N°18.8, la resistencia de la madera decrece a medida que su humedad
aumenta en el sector comprendido entre el 8 y el 20% la resistencia disminuye
de modo directamente proporcional al incremento de humedad:
R12=Rw[1+a(W-12)]
Siendo Rw el límite de resistencia de la probeta con humedad W en el
momento de ensayo; R12, ídem, para el 12% de humedad; a, el coeficiente
que considera la disminución de la resistencia de la madera al aumentar su
humedad en 1%.
Una vez que la madera alcanza el límite de higroscopicidad (30%), el ulterior
aumento de la humedad no influye sobre la resistencia. Por eso el límite de
resistencia de una probeta, cuya humedad sea igual o supere el límite de
higroscopidad, se reduce al 12% de humedad según la fórmula:
R12= Rw*k2
donde k2 es el coeficiente de conversión para la especie dada del árbol.
La resistencia mecánica de la madera se caracteriza por los límites de resis-
tencia a la compresión, tracción, flexión estática y al cizallamiento. Además,
puede determinarse el límite convencional de resistencia al aplastamiento lo-
cal y el límite de resistencia al corte transversal a las fibras.
En la fig N°18.7 vienen representados los esquemas de los principales
ensayos para la madera.
La determinación de las propiedades mecánicas de la madera esta regida
por las siguientes normas de ICONTEC:
Por lo tanto, la madera en cuanto a su resistencia específica rivaliza con los
materiales modernos para construcción. Sin embargo, aprovechar la alta re-
sistencia de la madera no es cosa fácil, ya que los nudos, grietas y otros
defectos reducen fuertemente sus propiedades mecánicas. En este sentido
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ofrece posibilidades el empleo de la madera en estructuras encoladas.
La resistencia de la madera a la flexión estática es muy alta: supera aproxi-
madamente 1.8 veces la correspondiente a la compresión a lo largo de las
fibras y constituye alrededor del 70% de la resistencia a la tracción. Por eso la
madera (vigas, tableros) con más frecuencia trabaja a la flexión.
Además, la madera tiene la ventaja de ser resistente a la concentración de
tensiones por tener superficies divisorias internas entre las fibras.
Acero de alta
resistencia 2000 7.53 255
Plástico de
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La dureza al impacto Hw1 (J/cm²) se calcula de acuerdo con la fórmula:
H w i=4 *m *g *h /(π*d †)