0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
4 vistas3 páginas
El documento presenta dos casos distintos. El primer caso trata sobre la apelación de una sentencia relacionada con un caso de desaparición forzada en el que se argumenta que el delito constituye un crimen de lesa humanidad y es imprescriptible. El segundo caso trata sobre acciones de inconstitucionalidad presentadas contra una ley de tarjetas de crédito guatemalteca, argumentando que el proceso legislativo fue deficiente y que varios artículos de la ley violan principios como la razonabilidad y proporcionalidad.
El documento presenta dos casos distintos. El primer caso trata sobre la apelación de una sentencia relacionada con un caso de desaparición forzada en el que se argumenta que el delito constituye un crimen de lesa humanidad y es imprescriptible. El segundo caso trata sobre acciones de inconstitucionalidad presentadas contra una ley de tarjetas de crédito guatemalteca, argumentando que el proceso legislativo fue deficiente y que varios artículos de la ley violan principios como la razonabilidad y proporcionalidad.
El documento presenta dos casos distintos. El primer caso trata sobre la apelación de una sentencia relacionada con un caso de desaparición forzada en el que se argumenta que el delito constituye un crimen de lesa humanidad y es imprescriptible. El segundo caso trata sobre acciones de inconstitucionalidad presentadas contra una ley de tarjetas de crédito guatemalteca, argumentando que el proceso legislativo fue deficiente y que varios artículos de la ley violan principios como la razonabilidad y proporcionalidad.
EXPEDIENTE 929-2008 CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD: Guatemala, siete
de julio de dos mil nueve. En apelación y con sus antecedentes, se examina el auto de veinticinco de marzo de dos mil ocho, dictado por el Tribunal de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos contra el Ambiente del departamento de Chimaltenango, en carácter de Tribunal Constitucional, en el incidente de inconstitucionalidad de ley en caso concreto del artículo 201 Ter del Código Penal planteado por Mario Humberto Smith Ángel, como abogado defensor de Felipe Cusanero Coj. El postulante actuó con su propio patrocinio Resumen El caso la persona reiteró los argumentos vertidos en el escrito inicial de inconstitucionalidad de ley en caso concreto. Solicitó que se declare con lugar el recurso de apelación planteado, y por ende, la inconstitucionalidad del artículo 201 Ter del Código Penal y su inaplicabilidad al caso concreto. B) Hilarión López Osorio y Aura Elena Farfán, querellantes adhesivos, manifestaron que el presente caso encuadra dentro del tipo penal de Desaparición forzada. Indica la violación de los derechos humanos por lo que requiere que sea comprendido de una manera integral. Conlleva la privación arbitraria de libertad, la incomunicación de la víctima, el aislamiento, la tortura y finalmente, en la mayoría de casos, la ejecución y el ocultamiento del cadáver de la víctima, acompañado del silencio oficial, las negaciones, y la obstrucción de justicia y la incertidumbre sobre el lugar donde se encuentra la víctima. consideró que la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas establece que la práctica sistemática de este delito constituye un crimen de lesa humanidad y que la práctica de privación de la libertad a una o más personas, cualquiera que fuere su forma, cometida por agentes del Estado o por personas o grupos de personas que actúen con la autorización, el apoyo o la aquiescencia del mismo, es un delito que se estima continuado o permanente, mientras no se establezca el destino o paradero de la víctima. Y esta situación especial en la comisión de este delito se proyecta hacia el futuro y su acción continúa cometiéndose mientras tanto no se libere a la víctima, lo que lo hace imprescriptible; por lo que, en este caso, no se ha vulnerado el principio jurídico del debido proceso. Solicitó que se declare sin lugar el recurso de apelación intentado. Caso general Se tiene a la vista para dictar sentencia las acciones de Inconstitucionalidad de ley de carácter general, total y parcial de la Ley de Tarjetas de Crédito, Decreto 7- 2015 del Congreso de la República de Guatemala, promovida por Asociación Bancaria de Guatemala, por medio del Presidente del Consejo Directivo y Representante Legal, Luis Rolando Lara Grojec, quien actuó bajo el auxilio de los abogados Jorge Rolando Barrios, Carlos Fernando Rivers Sandoval y Juan Ignacio Calzada Vizcaíno; Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras CACIF Resultó en un análisis viciado y limitado por parte de las comisiones de trabajo; aunado a lo anterior, al no permitirle a la Comisión de Economía y Comercio Exterior que completara su dictamen, para que se pronunciara sobre las iniciativas de ley presentadas, se infringió el procedimiento que determina el artículo 42 de la Ley Orgánica del Organismo Legislativo, pues dicha comisión únicamente se pronunció respecto de una iniciativa, siendo, por lo tanto, incompleto. Agregaron que: la normativa cuestionada contraviene el debido proceso sustantivo por inobservancia de los principios de razonabilidad y proporcionalidad, pues en su artículo 4 restringe la posibilidad de que el tarjetahabiente pueda establecer libremente el límite hasta el cual cubrirá su crédito y el extra financiamiento, lo que no es razonable con el esquema equitativo que busca crear la norma, pues se coloca en un plano de desigualdad a las partes contratantes; aunado a ello, el artículo 6 establece un plano de desigualdad en la forma y condiciones en que se podrá dar por terminado el contrato de tarjeta de crédito; el artículo 9 establece la obligación para el emisor de reestructurar el crédito, bastando que el tarjetahabiente considere no poder hacer efectivo el pago, sin que sea necesario que acredite dicha imposibilidad, estableciendo además condiciones específicas para realizar la reestructuración, medidas que no son razonables pues, no solo no garantizan la igualdad entre los sujetos, sino que tampoco garantizan la transparencia, pues no se sustenta el motivo para que proceda la reestructuración por parte del tarjetahabiente; los artículos 10 y 22 estipulan límites con relación al porcentaje de interés que puede cobrarse a los tarjetahabientes, medidas que no son iguales para las partes; los artículos 29 y 30 otorgan facultades de fiscalización a la Superintendencia de Bancos para regular a cualquier emisor de tarjeta de crédito, indistintamente que sea parte o no de una entidad financiera, permitiendo a esa entidad el libre acceso a todas las fuentes y sistemas para verificar la información proporcionada, medidas que no son razonables, en tanto son violatorias de la autonomía del Banco de Guatemala, pues asignan atribuciones a la Superintendencia de Bancos que son propias de la Junta Monetaria.
Ley de Amparo, reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 2016: Comentada y con jurísprudencia