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DIES DOMINI
AL EPISCOPADO, AL
CLERO Y A LOS
FIELES
SOBRE LA
SANTIFICACIÓN
DEL DOMINGO
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ÍNDICE
Introducción
CAPÍTULO I DIES DOMINI
Celebración de la obra del Creador
« Por medio de la Palabra se hizo todo » (Jn 1,3) 14
« Al principio creó Dios el cielo y la tierra » (Gn 1,1) 16
El « shabbat »: gozoso descanso del Creador 18
« Bendijo Dios el día séptimo y lo santificó » (Gn 2,3) 21
« Recordar » para « santificar » 24
Del sábado al domingo 25
CAPÍTULO II DIES CHRISTI
El día del Señor resucitado y el don del Espíritu
La Pascua semanal 28
El primer día de la semana 30
Diferencia progresiva del sábado 32
El día de la nueva creación 34
El octavo día, figura de la eternidad 35
El día de Cristo-luz 36
El día del don del Espíritu 38
El día de la fe 39
¡Un día irrenunciable! 40
CAPÍTULO III DIES ECCLESIAE
La asamblea eucarística, centro del domingo
La presencia del Resucitado 42
La asamblea eucarística 43
La Eucaristía dominical 45
El día de la Iglesia 47
Pueblo peregrino 50
Día de la esperanza 51
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La mesa de la Palabra 52
La mesa del Cuerpo de Cristo 57
Banquete pascual y encuentro fraterno 59
De la Misa a la « misión » 61
El precepto dominical 62
Celebración gozosa y animada por el canto 68
Celebración atrayente y participada 69
Otros momentos del domingo cristiano 70
Asambleas dominicales sin sacerdote 71
Transmisión por radio y televisión 73
CAPÍTULO IV DIES HOMINIS
El domingo día de alegría, descanso y solidaridad
La « alegría plena » de Cristo 75
La observancia del sábado 79
El día del descanso 83
Día de la solidaridad 89
CAPÍTULO V DIES DIERUM
El domingo esta primordial, reveladora del sentido del
tiempo
Cristo Alfa y Omega del tiempo 95
El domingo en el año litúrgico 97
CONCLUSIÓN
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Introducción
asombro que experimentaron las mujeres que
habían asistido a la crucifixión de Cristo cuando,
yendo al sepulcro « muy temprano, el primer día
después del sábado » (Mc 16,2), lo encontraron
vacío. Es una invitación a revivir, de alguna
manera, la experiencia de los dos discípulos de
Emaús, que sentían « arder su corazón »
mientras el Resucitado se les acercó y caminaba
con ellos, explicando las Escrituras y revelándose
« al partir el pan » (cf. Lc 24,32.35). Es el eco del
gozo, primero titubeante y después arrebatador,
que los Apóstoles experimentaron la tarde de
aquel mismo día, cuando fueron visitados por
Jesús resucitado y recibieron el don de su paz y
de su Espíritu (cf. Jn 20,19-23).
2. La resurrección de Jesús es el dato originario
en el que se fundamenta la fe cristiana (cf. 1 Co
15,14): una gozosa realidad, percibida
plenamente a la luz de la fe, pero históricamente
atestiguada por quienes tuvieron el privilegio de
ver al Señor resucitado; acontecimiento que no
sólo emerge de manera absolutamente singular
en la historia de los hombres, sino que está en el
centro del misterio del tiempo. En efecto, —como
recuerda, en la sugestiva liturgia de la noche de
Pascua, el rito de preparación del cirio pascual—,
de Cristo « es el tiempo y la eternidad ». Por
esto, conmemorando no sólo una vez al año, sino
cada domingo, el día de la resurrección de Cristo,
la Iglesia indica a cada generación lo que
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CAPÍTULO I
DIES DOMINI
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t i e r r a c o n t o d o c u a n t o e n e l l a h a y, y,
reconociendo a Dios como creador de todas las
cosas, de relacionarse a sí mismo y al universo
entero con Él, de modo que, con el sometimiento
de todas las cosas al hombre, sea admirable el
nombre de Dios en toda la tierra »[11].
La realidad sublime del desarrollo de la ciencia,
de la técnica, de la cultura en sus diversas
expresiones —desarrollo cada vez más rápido y
hoy incluso vertiginoso— es el fruto, en la historia
del mundo, de la misión con la que Dios confió al
hombre y a la mujer el cometido y la
responsabilidad de llenar la tierra y de someterla
mediante el trabajo, observando su Ley.
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13Cf. A. J. Heschel, The sabbath. Its meaning for modern man, (22
ed. 1995), pp. 3-24.
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CAPÍTULO II
DIES CHRISTI
La Pascua semanal
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El día de Cristo-luz
El día de la fe
38 Cf. Conc. Ecum. Vat. II, Const. dogm. Lumen gentium, sobre la
Iglesia, 9.
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La asamblea eucarística
El día de la Iglesia
Pueblo peregrino
Día de la esperanza
38. Desde este punto de vista, si el domingo es el
día de la fe, no es menos el día de la esperanza
cristiana. En efecto, la participación en la « cena
del Señor » es anticipación del banquete
escatológico por las « bodas del Cordero » (Ap
19,9). Al celebrar el memorial de Cristo, que
resucitó y ascendió al cielo, la comunidad
cristiana está a la espera de « la gloriosa venida
55 Cf. Conc. Ecum Vat. II, Const. dogm. Lumen gentium, sobre la
Iglesia, 48-51.
56« Haec est vita nostra, ut desiderando exerceamur »: S. Agustín,
In prima Ioan. tract. 4,6: SC 75, 232.
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La mesa de la Palabra
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De la Misa a la « misión »
45. Al recibir el Pan de vida, los discípulos de
Cristo se disponen a afrontar, con la fuerza del
Resucitado y de su Espíritu, los cometidos que les
esperan en su vida ordinaria. En efecto, para el
fiel que ha comprendido el sentido de lo
realizado, la celebración eucarística no termina
sólo dentro del templo. Como los primeros
testigos de la resurrección, los cristianos
convocados cada domingo para vivir y confesar la
presencia del Resucitado están llamados a ser
94 Ibíd., 11.
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CAPÍTULO IV
DIES HOMINIS
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Día de la solidaridad
115 De Nabuthae, 10, 45: « Audis, dives, quid Dominus Deus dicat?
Et tu ad ecclesiam venis, non ut aliquid largiaris pauperi, sed ut
auferas »: CSEL 322, 492.
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CAPÍTULO V
DIES DIERUM
119 Ibíd.
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CONCLUSIÓN
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JUAN PABLO II
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CONGREGACIÓN PARA
EL CULTO DIVINO
Y LA DISCIPLINA DE
LOS SACRAMENTOS
DIRECTORIO
SOBRE LA PIEDAD
POPULAR Y LA
LITURGIA
PRINCIPIOS Y
ORIENTACIONES
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ÍNDICE
SIGLAS Y ABREVIATURAS
DECRETO
INTRODUCCIÓN
La terminología 130
Devociones 132
PARTE PRIMERA
Capítulo I
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La Antigüedad cristiana 144
Capítulo II
Capítulo III
PARTE SEGUNDA
Premisa 211
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Capítulo IV
El Domingo 213
El Nacimiento 220
El 31 de Diciembre 229
LA SEMANA SANTA
DOMINGO DE RAMOS
Las palmas y los ramos de olivo o de otros árboles 252
TRIDUO PASCUAL
JUEVES SANTO
La visita al lugar de la reserva 253
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fi
fi
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VIERNES SANTO
La procesión del Viernes Santo 254
SÁBADO SANTO
La "Hora de la Madre" 258
DOMINGO DE PASCUA
El encuentro del Resucitado con la Madre 259
EN EL TIEMPO PASCUAL
La bendición anual de las familias en sus casas 261
PENTECOSTÉS
El domingo de Pentecostés 265
EN EL TIEMPO ORDINARIO
La solemnidad de la santísima Trinidad 267
Capítulo V
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El sábado 298
El Rosario 306
Capítulo VI
Capítulo VII
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Sentido de los sufragios 361
Capítulo VIII
SANTUARIOS Y PEREGRINACIONES
El Santuario 373
La peregrinación 390
CONCLUSIÓN
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SIGLAS Y ABREVIATURAS
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DECRETO
Al afirmar el primado de la liturgia, "la cumbre a
la cual tiende la actividad de la Iglesia y, al
mismo tiempo, la fuente de donde mana toda su
fuerza" (Sacrosanctum Concilium 10), el Concilio
Ecuménico Vaticano II recuerda, todavía, que "la
participación en la Sagrada liturgia no abarca
toda la vida espiritual" (ibidem 12). Como
alimento de la vida espiritual de los fieles existen,
de hecho, también "los ejercicios piadosos del
pueblo cristiano", especialmente aquellos
recomendados por la Sede Apostólica y
practicados en las Iglesias particulares por
mandato o con la aprobación del Obispo. Al
recordar la importancia de que tales expresiones
cultuales sean conformes a las leyes y a las
normas de la Iglesia, los Padres conciliares han
trazado el ámbito de su comprensión teológica y
pastoral: "los ejercicios piadosos se organicen de
modo que vayan de acuerdo con la sagrada
liturgia, en cierto modo deriven de ella y a ella
conduzcan al pueblo, ya que la liturgia, por su
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INTRODUCCIÓN
1. En el asegurar el crecimiento y la promoción
de la Liturgia, "la cumbre a la cual tiende la
actividad de la Iglesia y, al mismo tiempo, la
fuente de donde mana toda su fuerza", esta
Congregación advierte la necesidad de que no
sean olvidadas otras formas de piedad del pueblo
cristiano y su fructuosa aportación para vivir
unidos a Cristo, en la Iglesia, según las
enseñanzas del Concilio Vaticano II.
Después de la renovación conciliar, la situación de
la piedad popular cristiana se presenta variada,
según los países y las tradiciones locales. Se
aprecian diversos modos de presentarse, a veces
en contraste, como: abandono manifiesto y
rápido de formas de piedad heredadas del
pasado, dejando vacíos no siempre colmados;
aferrarse a modos imperfectos o equivocados de
devoción, que alejan de la genuina revelación
bíblica y chocan con la economía sacramental;
críticas injustificadas a la piedad del pueblo
sencillo, en nombre de una presunta "pureza" de
la fe; exigencia de salvaguardar la riqueza de la
piedad popular, expresión del sentir profundo y
maduro de los creyentes en un determinado lugar
y tiempo; necesidad de purificar de los equívocos
y de los peligros de sincretismo; renovada
vitalidad de la religiosidad popular como
resistencia y reacción a una cultura tecnológica-
pragmática y al utilitarismo económico; caída de
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Naturaleza y estructura
Los destinatarios
La terminología
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Ejercicio de piedad
Devociones
Piedad popular
9. El término "piedad popular", designa aquí las
diversas manifestaciones cultuales, de carácter
privado o comunitario, que en el ámbito de la fe
cristiana se expresan principalmente, no con los
modos de la sagrada Liturgia, sino con las formas
peculiares derivadas del genio de un pueblo o de
una etnia y de su cultura.
La piedad popular, considerada justamente como
un "verdadero tesoro del pueblo de Dios",
"manifiesta una sed de Dios que sólo los sencillos
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Religiosidad popular
1 0 . L a r e al i d a d i n d i c ad a c o n l a p al ab ra
"religiosidad popular", se refiere a una
experiencia universal: en el corazón de toda
persona, como en la cultura de todo pueblo y en
sus manifestaciones colectivas, está siempre
presente una dimensión religiosa. Todo pueblo, de
hecho, tiende a expresar su visión total de la
trascendencia y su concepción de la naturaleza,
de la sociedad y de la historia, a través de
mediaciones cultuales, en una síntesis
característica, de gran significado humano y
espiritual.
La religiosidad popular no tiene relación,
necesariamente, con la revelación cristiana. Pero
en muchas regiones, expresándose en una
sociedad impregnada de diversas formas de
elementos cristianos, da lugar a una especie de
"catolicismo popular", en el cual coexisten, más o
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Algunos principios
El primado de la Liturgia
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Valoraciones y renovación
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Los gestos
El canto y la música
Las imágenes
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Los lugares
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Los tiempos
Responsabilidad y competencia
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PARTE PRIMERA
LÍNEAS EMERGENTES DE LA HISTORIA,
DEL MAGISTERIO, DE LA TEOLOGÍA
Capítulo I
La Antigüedad cristiana
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La Edad Media
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Página 156
La Época Moderna
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l o s e j e r c i c i o s d e p i e d a d t ra í d o s p o r l o s
evangelizadores, sino que crea otros, con la
impronta de la cultura local.
La Época contemporánea
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Página 171
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Página 173
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La importancia de la formación
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Capítulo II
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Página 192
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Capítulo III
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Página 202
Página 203
Página 204
Página 205
Página 207
Página 209
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PARTE SEGUNDA
ORIENTACIONES PARA ARMONIZAR LA
PIEDAD POPULAR Y LA LITURGIA
Premisa
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Capítulo IV
El Domingo
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En el tiempo de Adviento
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La Corona de Adviento
La Novena de Navidad
El Nacimiento
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1 0 5 . L a p i e d a d p o p u l a r, a c a u s a d e s u
comprensión intuitiva del misterio cristiano,
puede contribuir eficazmente a salvaguardar
algunos de los valores del Adviento, amenazados
por la costumbre de convertir la preparación a la
Navidad en una "operación comercial", llena de
propuestas vacías, procedentes de una sociedad
consumista.
La piedad popular percibe que no se puede
celebrar el Nacimiento de Señor si no es en un
clima de sobriedad y de sencillez alegre, y con
una actitud de solidaridad para con los pobres y
marginados; la espera del nacimiento del
Salvador la hace sensible al valor de la vida y al
deber de respetarla y protegerla desde su
concepción; intuye también que no se puede
celebrar con coherencia el nacimiento del que
"salvará a su pueblo de sus pecados" (Mt 1,21)
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En el tiempo de Navidad
La Noche de Navidad
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El 31 de Diciembre
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Página 233
Página 234
Página 235
En el tiempo de Cuaresma
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Página 242
Página 244
El "Vía Crucis"
Página 245
Página 246
Página 247
Página 248
El "Vía Matris"
DOMINGO DE RAMOS
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JUEVES SANTO
Página 253
VIERNES SANTO
Página 254
SÁBADO SANTO
La "Hora de la Madre"
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DOMINGO DE PASCUA
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EN EL TIEMPO PASCUAL
El "Vía lucis"
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La novena de Pentecostés
PENTECOSTÉS
El domingo de Pentecostés
EN EL TIEMPO ORDINARIO
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La adoración eucarística
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Página 289
Página 291
Página 293
Capítulo V
Algunos principios
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La celebración de la fiesta
El sábado
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Página 299
Página 302
El "Ángelus Domini"
El "Regina caeli"
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El Rosario
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Página 309
La consagración-entrega a María
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El himno "Akathistos"
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Capítulo VI
Algunos principios
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San José
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El día de la fiesta
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En la celebración de la Eucaristía
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Las procesiones
245. En la procesión, expresión cultual de
carácter universal y de múltiples valores
religiosos y sociales, la relación entre Liturgia y
piedad popular adquiere un particular relieve. La
Iglesia, inspirándose en los modelos bíblicos (cfr.
Ex 14,8-31; 2 Sam 6,12-19; 1 Cor 15,25-16,3),
ha establecido algunas procesiones litúrgicas, que
presentan una variada tipología:
- algunas evocan acontecimientos salvíficos
referidos al mismo Cristo; entre estas, la
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Capítulo VII
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Re s p e c t o a e s t a c u e s t i ó n , l a l e g i s l a c i ó n
eclesiástica dispone que: "A los que hayan
elegido la cremación de su cadáver se les puede
conceder el rito de las exequias cristianas, a no
ser que su elección haya estado motivada por
razones contrarias a la doctrina cristiana".
Respecto a esta opción, se debe exhortar a los
fieles a no conservar en su casa las cenizas de los
familiares, sino a darles la sepultura
acostumbrada, hasta que Dios haga resurgir de la
tierra a aquellos que reposan allí y el mar
restituya a sus muertos (cfr. Ap 20,13).
Otros sufragios
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Capítulo VIII
SANTUARIOS Y PEREGRINACIONES
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El Santuario
Algunos principios
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Reconocimiento canónico
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Valor ejemplar
La celebración de la Penitencia
La celebración de la Eucaristía
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La peregrinación
Peregrinaciones bíblicas
280. En la Biblia destacan, por su simbolismo
religioso, las peregrinaciones de los patriarcas
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La peregrinación cristiana
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Espiritualidad de la peregrinación
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Desarrollo de la peregrinación
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CONCLUSIÓN
288. Este Directorio, en las dos partes que lo
componen, presenta muchas indicaciones,
propuestas y orientaciones, para ayudar y educar,
en armonía con la Liturgia, a la variada realidad
de la piedad y religiosidad popular.
Al hacer referencia a tradiciones y circunstancias
distintas, como ejercicios de piedad, devociones
de diversa índole y naturaleza, el Directorio
quiere ofrecer los presupuestos fundamentales,
recordar las directrices y presentar sugerencias
para una acción pastoral fecunda.
Corresponde a los Obispos, con ayuda de sus
colaboradores más directos, en especial los
rectores de santuarios, establecer normas y dar
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CARTA APOSTÓLICA
DESIDERIO
DESIDERAVI
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INDICE
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Desiderio desideravi hoc Pascha manducare
vobiscum, antequam patiar (Lc 22, 15)
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Ars celebrandi
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16Cfr. Institutio Generalis Missalis Romani, nn. 45; 51; 54-56; 66;
71; 78; 84; 88; 271.
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FRANCISCO
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