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Curso en Terapia

EMDR
Lección 4. ¿Qué es un trauma y cómo identificarlo?

Según el manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales en su


quinta edición (DSM-V) aparece implícito en la definición del Trastorno de
Estrés Post- traumático (TEPT), entendiéndose el trauma psíquico o
psicológico como un suceso que la persona ha
experimentado,presenciado o le han explicado, caracterizado por muerte o
amenazas para su integridad física o la de los demás, ante el que la
persona ha respondido con temor, desesperanza u horror intenso. En los
niños estas respuestas pueden manifestarse mediante comportamientos
desestructurados o agitados.

Etimológicamente la palabra trauma significa “herida”, se entiende como la


consecuencia emocional o efecto de ese acontecimiento en la estructura
mental de la persona. Por su parte, Laplanche y Pontalis (1996) lo definen
como “acontecimiento de la vida del sujeto caracterizado por su intensidad,
la incapacidad del sujeto de responder a él adecuadamente y el trastorno y
los efectos patógenos duraderos que provoca en la organización psíquica”
Si nos remontamos a la historia, durante la primera guerra mundial se
realizaron observaciones del estrés post traumático en los soldados,
causado por el combate; pero no sería hasta más tarde que comenzó a
considerarse como entidad psicopatológica bajo el diagnóstico de
“neurosis de guerra”, que el TETP es una respuesta tardía a la vivencia de
un suceso altamente estresante.

Por lo tanto, la terapia EMDR es efectiva y de resultados perdurables en


pacientes con Trastorno por Estrés Postraumático (TEPT) y demás
trastornos asociados al espectro del trauma (ya sea un trauma intenso o
leve).
Se pueden diferenciar dos tipos: Traumas (con T mayúscula) y traumas
(con t minúscula). Los traumas “T” es lo que tradicionalmente se define
como trauma, una sola experiencia terriblemente dolorosa y que fácilmente
hace reaccionar a la persona ante una situación similar o algún aspecto
que le recuerde la vivencia. Por ejemplo: atentados, robos, accidentes,
experiencias de una batalla, abusos sexuales o físicos.

Los traumas “t” se refieren a las situaciones perturbadoras consistentes en


el tiempo, ninguna de la experiencia en si misma fue traumática, pero sí
que fueron suficientemente repetidas como para que el efecto acumulado
sea tan impresionante como un trauma “T”.

Por ejemplo: el rechazo de los padres, la exigencia excesiva de un


profesor o el desprecio de los compañeros de clase.

La mayor parte de las dificultades actuales de los demandantes parece


estar relacionada con sucesos angustiosos sufridos en la infancia; que han
quedado bloqueados y siguen influyendo no solo en la conducta del
individuo, sino también en la gestión de situaciones traumáticas
posteriores.

En definitiva un trauma es un evento, que desde un punto de vista


psicológico, representa un problema para el paciente.
Pueden haber ocurrido de manera repentina o inesperada, donde la
persona no tiene la capacidad de manejar esta situación, alterando los
esquemas de referencia básicos por los que se guía para entender y
manejar las situaciones que le rodean, pueden originarse desde la
infancia, pueden ser: desastres naturales como terremotos, accidentes,
entre otros.

Un trauma psicológico se reconoce cuando la persona presenta los


siguientes síntomas: Insomnio, pesadillas, irritabilidad, ansiedad,
nerviosismo, miedo, confusión, sensación de culpa, vergüenza e
indiferencia emocional.

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