El Pianista y la Poderosa Fuerza de la Pasión

Alumna: Angie Lisbeth Rivera Pérez

La música, un arte atemporal capaz de tocar las fibras más íntimas del ser humano, se
despliega majestuosa en la sala de conciertos. La expectación es palpable; el pianista,
uno de los mejores del mundo, es el protagonista de la noche. La ovación estalla cuando
él aparece en el escenario, y con las primeras notas de la Polonesa de Chopin, la magia
se desencadena.
La pasión, ese sentimiento intenso y desbordante que impulsa a crear y a entregarse por
completo a una causa, se hace presente en cada acorde interpretado por el pianista. A
medida que avanza en su ejecución magistral, su transformación es evidente. Su rostro
refleja una profunda concentración, como si cada nota emanara del mismísimo centro de
su alma. El público es cautivado por su entrega y talento, y la pasión que desprende se
contagia en la sala.
La música fluye como un río desbocado, y el pianista se entrega sin reservas. El sudor
en su frente y su cabellera danzan en sincronía con el ritmo de la música, como si su
cuerpo fuera un instrumento más que se fusiona con el piano. En la parte culminante de
su concierto, la emoción es tangible en cada rincón de la sala. Los asistentes están
paralizados, sumergidos en un éxtasis compartido.
El aplauso final es ensordecedor, y el artista debe regresar al escenario en múltiples
ocasiones para recibir el tributo de sus admiradores. En el camerino, una distinguida
dama se acerca a él para expresar su admiración. Le confiesa que daría la mitad de su
vida por ejecutar un concierto como el que acaban de presenciar. Sin embargo, el
pianista humildemente le revela que ya ha alcanzado esa hazaña.
La admiradora está desconcertada, pero anhela conocer el secreto detrás de la fuerza y
el poder transmitidos en su interpretación. El pianista respondió: De mi pasión por lo
que hago. Ella es la fuerza impulsora que me permite realizar todo plenamente. Nunca
puedo tocar una pieza si no la siento primero, y cuando logro despertar mi musa mágica
interior, que es la pasión, sé que estoy tocando porque la siento en el alma.
El diálogo entre la dama y el pianista se convierte en una reflexión poderosa sobre el
papel de la pasión en nuestras vidas. Él sostiene que nada grande se puede lograr sin la
presencia de esta fuerza interior. La pasión es un motor que impulsa a los seres humanos
a crear magníficas obras de arte, a emprender proyectos audaces y a alimentar la
creatividad. Es una fuente inagotable de energía, arraigada en lo más profundo de cada
individuo.
La importancia de la pasión va más allá del escenario de un concierto. Es una fuerza que
puede transformar nuestras vidas cotidianas. Si logramos reconocer y abrazar la pasión
que habita en nuestro interior, podemos brillar y marcar la diferencia en todos los
aspectos de nuestra existencia. No necesitamos tenerlo todo para alcanzar la grandeza;
la pasión es la herramienta que nos permite superar obstáculos y alcanzar nuestros
sueños.
El pianista nos invita a reflexionar sobre nuestras aspiraciones. ¿Nos encontramos en el
grupo de quienes desean lograr grandes cosas, o en el grupo de quienes dan más de
media vida para hacer realidad sus sueños? La pasión no depende del estado de ánimo,
sino de la decisión de ser mejores cada día, independientemente de las circunstancias.
En conclusión, el pianista nos enseña que la pasión es el combustible que enciende la
llama de la excelencia. Es un ingrediente esencial para lograr la plenitud en cualquier
aspecto de nuestras vidas. Así como él convierte cada nota en una expresión del alma,
nosotros podemos convertir cada acción en una obra maestra impulsados por la pasión.
Atrevámonos a despertar esa musa mágica dentro de nosotros y alcancemos nuestras
metas con el poder de la pasión. Solo así podremos brillar y marcar la diferencia en el
mundo que nos rodea.
REFLEXION:
Hay personas que quisieran dar media vida para lograr lo que otros han
conseguido y también, existen aquellas personas que dieron más de media vida
para alcanzar sus sueños en la vida…
*¿A cuál de los dos perteneces tú?…
Pertenezco al primer grupo porque siento que me pude esforzar mas , aprovechar mi
tiempo al máximo para leer libros de economía , matricularme a otros cursos
relacionados a mi carrera, aprender otros idiomas.
*¿Cuál es tu sueño o meta más próxima?  ¿Que harás para alcanzarlo?
Mi meta es conseguir un trabajo en una empresa para poder ganar experiencia y ganar
mi propio dinero para apoyar a mi familia.
Para alcanzar mi meta debo desarrollar habilidades y competencias relevantes para el
campo de la economía, como el análisis de datos, el dominio de software especializado
y la capacidad de comunicar eficazmente ideas complejas.
Aprovechar las oportunidades académicas y extracurriculares para enriquecer mi
currículum. Participar en proyectos de investigación, voluntariados, prácticas
profesionales, y actividades relacionadas con la economía. Estas experiencias te
ayudarán a destacar entre otros candidatos y demostrarán tu compromiso con la
disciplina.
El pianista respondió: De mi pasión por lo que hago. Ella es la fuerza
impulsora que me permite realizar todo plenamente. Nunca puedo
tocar una pieza si no la siento primero, y cuando logro despertar mi
musa mágica interior, que es la pasión, sé que estoy tocando porque
la siento en el alma.

Algunas personas están dispuestas a dedicar la mitad de sus vidas a

realizar los logros de los demás, y otras están dispuestas a dedicar
más de la mitad de sus vidas a realizar sus propios sueños de vida.