BELLADONA ATROPA

La Belladona es una planta de la familia de las solanáceas. En

Italia las mujeres utilizaban la Atropa belladona para dilatar
sus pupilas. De ahí le viene el nombre de “bella dama”.

La Belladona es un medicamento muy importante en

homeopatía. Se utiliza en todas las afecciones agudas
repentinas y dolorosas.

También se utiliza en niños cuando tienen fiebre. Los

síntomas aparecen de forma recurrente o repetida y
desaparecen súbitamente.

La fiebre de Belladona se instaura rápido y luego es oscilante,

con sudores y alterna periodos pequeños de abatimiento con
periodos de delirio. El paciente tiene sequedad en las
mucosas, congestión o calor en el rostro, dolores pulsátiles
y/o con calambres.

Los calambres, como todo en Belladona, se inician y terminan

bruscamente. Empeora con la luz intensa, con el ruido, con el
tacto y el movimiento.

Se suele prescribir después del Aconitum, cuando aparece la

fiebre y la sudoración. Se asocia a otras solanáceas para el
tratamiento de delirio y miedos nocturnos.

En este caso, combina bien con el beleño (hierba de las

brujas) o la Datura stramonium (hierba del diablo). Las tres
son venenosas.

¿Cómo se presenta Belladona en la homeopatía?

Es un medicamento muy efectivo en síndromes inflamatorios
y febriles.
La fiebre en Belladona es de instauración rápida, oscilante. El
rostro durante la fiebre está rojo, irradia calor y hay sudor.

Es un medicamento que corresponde a la tetrada:

tumor: edema sensible al tacto y de brusca aparición.
rubor: enrojecimiento brillante, intenso, que puede llegar al
rojo oscuro
dolor: pulsátil
calor: ardiente

¿Cuándo está indicada Belladona?

La daremos cuando aparezca una patología de forma
repentina y violenta como, por ejemplo:
todas las fiebres agudas, da igual el origen, virus, bacterias,
enfermedades eruptivas infantiles, etc.
todos los factores de inflamación aguda y de congestión.

Comparaciones y asociaciones
Es un medicamento muy importante en homeopatía. Se
utiliza mucho en afecciones pediátricas. Se puede dar para
tratar fiebre, quemaduras, trastornos del sueño. Pero existen
algunos medicamentos que tienen una toxicología muy
similar a la Belladona. Hay que saber en qué momento
hacemos el tratamiento o con sus similares.
Ejemplos:
En la fiebre aguda
Aconitum: se da en una fiebre aguda congestiva, la persona
no suda, pero está muy agitada.
Belladona: se instaura rápidamente y es oscilante. El rostro
durante la fiebre está rojo, irradia calor y hay sudor.
Gelsemium sempervirens: se da en fiebre brusca, muy alta,
fuerte postración y abatimiento, dolor de cabeza, pesadez,
rigidez en la nuca, ausencia de sed.
En quemaduras de primer grado o insolación
Apis: se da cuando hay un edema rosado con dolores
intensos que mejoran con el frío.

Trastornos del sueño

La Belladonna en este caso se suele asociar con Hyosciamus
15 CH y Stramonium 15 CH, en caso que exista delirio,
miedos nocturnos. Mejor dejar la decisión en manos del
homeópata.

Indicaciones de la Belladona
Se puede prescribir en todas las “´-itis“. Amigdalitis, otitis,
conjuntivitis, faringitis.
También en convulsiones febriles, sarampión, escarlatina,
quemaduras cutáneas, migrañas, espasmos de los músculos
lisos.
Siempre que los síntomas se instauren y se presenten de la
forma en que hemos descrito anteriormente.