Traduccion Change Your Paradigm, Change Your Life

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CAMBIA TU
PARADIGMA,
CAMBIAR
SU VIDA
CAMBIA TU
PARADIGMA,
CAMBIAR
SU VIDA
¡Gira ese interruptor AHORA!
BOB PROCTOR
PRÓLOGO DE SANDY GALLAGHER
Publicado en 2021 por Gildan Media LLC, también
conocido como G&D Media www.GandDmedia.com
CAMBIA TU PARADIGMA, CAMBIA TU VIDA. Copyright © 2021 Instituto Proctor Gallagher, LP. Reservados
todos los derechos.
Impreso en los Estados Unidos de América. Ninguna parte de este libro puede ser utilizada, reproducida o
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Diseño de portada por Patti Knoles
Diseño de interiores por Meghan Day Healey de Story Horse, LLC
Los datos de catalogación en la publicación de la Biblioteca del Congreso están disponibles a pedido
eISBN: 9781722526214
10 9 8 7 6 5 4 3 2 1
Contenido
Prólogo de Sandy Gallagher
Capítulo uno
Tu increíble poder para cambiar
Capítulo dos
¿Estás viviendo en el paradigma de otra persona?
Capítulo tres
Desarrollar la confianza para cambiar su paradigma
Capítulo cuatro
Paradigmas y Cibernética: Configurando su Sistema de Control para Lograr su
Resultados deseados
Capítulo cinco
Cómo sus creencias afectan su paradigma
Capítulo Seis
El paradigma del rendimiento energético
Capítulo Siete
Las lecciones de la gratitud en libertad
Capítulo Ocho
Los beneficios de cambiar tu paradigma
Capítulo Nueve
Hacer de su paradigma positivo un hábito de por vida
Prólogo de
Sandy Gallagher
¿Alguna vez te has preguntado por qué el trabajo duro a menudo no es suficiente
para producir los resultados que esperabas en tu carrera? ¿Se ha sentido
desconcertado acerca de por qué, a pesar de años de establecer metas, sigue sin
alcanzar sus objetivos año tras año? ¿Tienes curiosidad por qué, cuando ocurren
circunstancias estresantes en la sociedad o en tu vida personal, te resulta difícil
controlar tu actitud y tus emociones mientras que los demás parecen permanecer
tranquilos, serenos y confiados? Los consejos tradicionales de desarrollo personal,
como pensar positivamente, visualizar lo que quiere o afirmaciones, con demasiada
frecuencia se sienten como hacer rodar una roca cuesta arriba en lugar del proceso
sin esfuerzo, emocionante y cuesta abajo que esperaba.
La respuesta a estas preguntas comunes sobre el desarrollo personal se
encuentra en un factor que pocos oradores, maestros o filósofos sobre el éxito o la
motivación abordan alguna vez. Este factor, que controla por completo su éxito o
fracaso a largo plazo, es su paradigma.
En este libro, la leyenda de la motivación y el experto en desarrollo personal,
Bob Proctor presentará un material increíble que antes solo estaba disponible para
los asistentes a sus seminarios exclusivos con entradas agotadas. Aquí obtendrás
una educación de nivel de maestría y aprenderás cómo obtener resultados de una
manera sistemática, consistente y sostenible, evitando los peores efectos de los
asesinos del éxito como el miedo al fracaso, el miedo al éxito, la procrastinación y lo
peor: el autosabotaje. .
Bob le mostrará cómo manejarlo dedicando tiempo a trabajar en su paradigma,
lo único que la gran mayoría de la gente pasa por alto, pero que es lo más importante.
¿Qué es un paradigma? Como Bob te enseñará, en su nivel más básico, un
paradigma es un programa mental situado en tu subconsciente que tiene un control
casi exclusivo sobre todo tu comportamiento habitual, y casi todo tu comportamiento
es habitual.
Los paradigmas son una multitud de hábitos que se transmiten de generación
en generación y se manifiestan de muchas maneras. Los paradigmas son la forma
en que te ves a ti mismo, al mundo y a la oportunidad. Son la forma en que aborda
el cambio y los desafíos. Una vez que te des cuenta de que todo tu comportamiento
está controlado por paradigmas, la forma en que miras el mundo entero cambiará.
Tal vez conozca a alguien que habitualmente parece enojado, molesto en
cada momento de la vida e incapaz de ver lo positivo en cualquier situación. Tal
vez conozca a alguien que ha luchado contra el peso fluctuante durante años o
décadas. Parecen estar en el buen camino por un tiempo, poniéndose saludables
y perdiendo peso, pero siempre parecen recuperarse donde estaban antes. Tal
vez conozca a alguien que parece estar atrapado en un cierto nivel de ingresos
durante años y parece que nunca puede pasar al siguiente nivel. Todos estos
resultados están controlados por paradigmas. Así como los paradigmas pueden
ser una prisión creada por uno mismo, también se pueden cambiar para brindarle
la libertad de ser exactamente la persona que desea ser.
En este libro, Bob le dará la clave para liberarse de los paradigmas limitantes
y cambiar su paradigma, esa programación mental subyacente, para transformar
sus finanzas, salud, carrera, relaciones y vida.
Bob Proctor es el maestro perfecto para llevarte en este viaje. Bob ha
estudiado la mente y el potencial humano con algunas de las mentes más brillantes
que el mundo haya conocido jamás. En 1961, comenzó a estudiar el clásico de
éxito de todos los tiempos Piense y hágase rico de Napoleon Hill, y transformó su vida.
Bob ha escuchado grabaciones de la leyenda del desarrollo personal Earl
Nightingale miles de veces. Bob también trabajó codo con codo con Earl
Nightingale y su compañía, NightingaleConant Corporation, de 1968 a 1973,
antes de partir para iniciar su propia compañía de desarrollo personal, Proctor
Gallagher Institute, con su socia y cofundadora, Sandy Gallagher. Hoy en día,
millones se han inspirado en Bob a través de la exitosa película El secreto, sus
libros, incluido su éxito de ventas del New York Times You Were Born Rich, sus
programas de entrenamiento y eventos en vivo.
Capítulo uno
Tu increíble poder para cambiar
Este va a ser un libro increíble para algunos de ustedes.
¿Por qué no dije “todos ustedes”? Porque quiero recalcar la vital importancia de tomar
una decisión para cambiar tu vida. Tú decides si vas a ser tú.
Cambiar tu paradigma requiere una decisión comprometida, porque va en la dirección
opuesta a casi todo lo que nos han enseñado. Vamos a la escuela, tomamos un libro, lo
leemos, hacemos preguntas sobre el material y luego pasamos a otro libro. La verdad es
que no podemos entender el contenido del libro de esta manera. Leer algo una vez y seguir
adelante no lo va a hacer.
Nuestro paradigma se construyó a través de la repetición —repetición constante y
espaciada— y así es como se va a cambiar. Pero esto tiene poco sentido para la mayoría
de las personas: se relacionan con la forma en que han sido y la forma en que fueron
educados en el pasado, cuando en realidad no estaban siendo educados en absoluto;
simplemente estaban reuniendo información.
Verá personas con títulos muy impresionantes de universidades prestigiosas que están
luchando por su vida. No tienen suficiente dinero; no mantienen una buena posición. Si
tienen su propia empresa, quiebran o cierran. Piensas: “Son tan inteligentes; ¿Cómo es
posible que esto suceda?”
La verdad es que no son muy inteligentes en absoluto. Han recopilado mucha
información, pero no la utilizan. Su comportamiento está controlado por sus paradigmas, no
por la información que tienen. No están haciendo lo que saben hacer. Por alguna extraña
razón, nunca lo descubren. Nunca se detienen y analizan su propio comportamiento en
relación con lo que saben.
A lo largo de los años, he descubierto que la mayoría de las personas que tienen mucho
éxito tienen una competencia inconsciente. No pueden articular por qué lo están haciendo.
Bueno. Pueden ser multimillonarios y pueden haber construido organizaciones
prestigiosas, pero no pueden transferir este conocimiento a sus hijos, porque no saben
por qué lo hacen. Dirán: “Bueno, simplemente lo hago”. La gente piensa que estos
individuos son bastante inteligentes, pero no tiene nada que ver con ser inteligente.
Tiene que ver con su paradigma, porque el paradigma nos controla en un grado enorme.
El éxito en cualquier empresa depende totalmente de lo que sucede dentro de
nuestras mentes; no tiene nada que ver con lo que está pasando afuera. A algunas
personas les va muy bien incluso frente a malas condiciones económicas. Incluso
durante la Gran Depresión, no todos estaban sin trabajo; no todo el mundo estaba
arruinado. A algunas personas les fue muy bien, ganando millones de dólares.
¿Por qué les fue muy bien? ¿Que esta pasando? ¿Por qué algunas personas
ganaron? Construyeron su éxito en sus mentes. Tiene que venir de adentro hacia
afuera, no de afuera hacia adentro. Estamos siendo controlados por nuestro mundo
exterior porque hemos sido entrenados de esa manera; hemos sido programados para
dejar que el mundo exterior nos controle.
Paradigmas y Hábitos Como
he dicho, sólo pensar positivamente no va a lograrlo; eso es una ilusión. Se necesita
un cambio de paradigma, y un paradigma es una multitud de ideas que se fijan en
nuestra mente subconsciente. Las ideas que se fijan en nuestra mente subconsciente
se conocen como hábitos. Un paradigma es una multitud de hábitos que se fijan en
nuestra mente subconsciente. Un hábito es una idea que se expresa sin ningún
pensamiento consciente; simplemente te mueves automáticamente. Conduces tu coche
principalmente por costumbre. No tienes que pensar para hacerlo, porque has sido
programado.
Si observa objetivamente su propio comportamiento durante dos o tres horas
desde el momento en que se levanta por la mañana, verá que la mayoría de sus
patrones de comportamiento no le darán el éxito que desea. Entonces tienes que
preguntarte: "¿Por qué estoy actuando de esta manera?"
Todos los días haces las mismas cosas porque estás programado para hacerlas.
Estamos programados para vivir de la manera que estamos viviendo. En primer lugar,
estamos programados genéticamente; por eso nos parecemos a nuestros parientes;
está integrado en nuestros genes al nacer. Cada uno de nosotros es la confluencia de
un acervo genético que se remonta a muchas generaciones. Nos controla; lo controla todo
estaban haciendo. El paradigma de una persona no tiene nada que ver con lo
que aprendió en la escuela. Si una persona tiene un mal paradigma, va a perder,
incluso si tiene una gran educación. Su educación no les va a ayudar.
En primer lugar, tenemos que entender cómo se forma el paradigma.
Entonces tenemos que entender cómo ha cambiado, y eso es algo que la
mayoría de la gente no entiende. No se enseña en la escuela. Hay muy pocos
seminarios que lo enseñen. Cuando me encontré con esta idea, me sorprendió,
porque aunque estaba trabajando en este campo, realmente no entendía este principio.
Competencia inconsciente Allá
por 1961, ganaba 4.000 dólares al año, debía 6.000 dólares y no veía cómo
saldría de eso. Cinco años después, ganaba más de un millón de dólares al año
y era propietario de una empresa con sucursales en Toronto, Montreal, Boston,
Cleveland, Atlanta y Londres.
Estaba siendo muy irresponsable. Yo estaba viviendo en Londres; Me mudé
allí y comencé una empresa. Iría al Playboy Club y jugaría a la ruleta. No me
importaba si perdía el dinero, porque sabía dónde estaba el dinero y cómo
conseguirlo.
Un día me detuve y pregunté: “¿Cómo sucedió esto? ¿Por qué mi vida
cambió tan dramáticamente?” No pude responder a esta pregunta. No sabía por
qué. Me criaron para creer que si vas a ganar mucho dinero, tienes que ser muy
inteligente. Sabía que no era muy inteligente, pero estaba ganando mucho
dinero. Entonces también me criaron para creer que si no vas a la escuela,
nunca tendrás un buen trabajo. Yo no había hecho esto; Fui a la escuela
secundaria durante dos meses. No tenía un buen trabajo; Yo era dueño de toda la empresa.
Fue entonces cuando comencé a verificar casi todo lo que me criaron para
creer, y descubrí que la mayor parte no era cierto. ¿Puede una persona ser
mejor que otra? No. Nadie es mejor que nadie. Sus resultados pueden ser un
poco mejores, pueden ganar más, pueden ser más productivos, pueden correr
más rápido, pero todos somos exactamente iguales. Si nos toma a todos y nos
pone en el fuego, todos seremos reducidos al mismo nivel.
Somos masa, energía y vibración: color, tamaño, género no significan nada.
Todos somos iguales. Tenemos que darnos cuenta de que todos estamos
sujetos a leyes que son exactas; ellos no cambian No fueron hechos por
hombres, así que los hombres no los van a cambiar. Nuestro éxito va a depender de nuestra
comprensión y nuestra capacidad para poner nuestras vidas en armonía con estas
leyes.
Un día tuve una experiencia eufórica y todo en mi cabeza comenzó a cambiar. No
sabía por qué estaba actuando como lo estaba haciendo. No sabía por qué estaba
ganando. No tenía educación formal, ni experiencia empresarial. Pensé: “Voy a resolver
esto. Voy a averiguar por qué tuve éxito”.
Me llevó nueve años y medio de concentración consciente y deliberada encontrar
la respuesta. Cuando lo hice, todo lo que quería hacer era trabajar en ello. Yo estaba
en mantenimiento de edificios; Comencé limpiando una oficina y terminé limpiando
muchas oficinas en varias ciudades diferentes. Dejé eso y me fui a trabajar a Nightingale
Conant Corporation. Pasé de ganar más de $1 millón al año a $18,000 al año. Cinco
años después, ganaba $33,000.
Yo estaba dispuesto a pagarles para que me dejaran trabajar allí por el material
que tenían. Pensé que Earl Nightingale y Lloyd Conant eran genios absolutos; lo que
estaban haciendo me voló la cabeza. No conocía a nadie más que estuviera haciendo
lo que ellos estaban haciendo. Quería aprender y lo hice. Los estudié como un científico.
Fue entonces cuando comencé a conectar los puntos.
Nací durante la Depresión, y cuando tenía solo seis años, el mundo entero entró
en guerra; todo estaba racionado. Viví momentos interesantes, en los que no había
más que malas noticias. A nadie le interesaba desarrollar la mente de un niño. Mi madre
estaba criando a tres, así que salir adelante era el problema principal.
En 1961, comencé a escuchar las grabaciones de Earl Nightingale en mi pequeño
tocadiscos a pilas y no podía parar. Nunca había escuchado a nadie hablar como Earl
Nightingale. Solía pensar que si Dios tuviera una voz, sería como la suya. Desde
entonces, me he encerrado en este material; Nunca he dejado de estudiarlo desde
1961 hasta hoy.
Desarrollar la conciencia Este
material debe enseñarse en las escuelas, e incluso antes. De hecho, puedes
enseñárselo a un bebé. Como pueblo, nos hemos obsesionado con el desarrollo del
intelecto e ignoramos el desarrollo de la conciencia.
Una persona puede tener doctorados en dos o tres materias y, sin embargo, desconocer
cómo ganar dinero, cómo construir un negocio o cómo desarrollarse personalmente.
La conciencia es la clave. Queremos tomar conciencia, creo, de nuestra unidad con
Dios, con inteligencia infinita. Cuanto más conscientes nos volvemos, más se refleja en
nuestros resultados. La falta de conciencia también se refleja en nuestros resultados.
Uno de los programas más famosos de Earl fue The Strangest Secret, en el que dijo
que te conviertes en lo que piensas. Cuanto más examinas esa idea, más profunda se
vuelve. He llevado esto un poco más allá al agregar que nos frenamos a nosotros mismos
a través de la forma en que elegimos nuestros pensamientos.
Tenemos que empezar por entender que solo hay una parte del universo que
podemos cambiar, y somos nosotros mismos. No podemos cambiar nada más. No
podemos cambiar las condiciones o circunstancias que nos rodean. Tenemos que
adaptarnos a lo que está pasando y seguir adelante, pero también tenemos que entender
que somos más grandes que las situaciones externas a las que nos enfrentamos.
Realmente no le doy mucho tiempo a esas cosas, porque pasan, y vendrá otra cosa.
Siempre hay algo afuera que nos controlará si se lo permitimos.
No elijo dejarlo. Estoy en control de mí.
Además, no es sólo lo que pensamos; es lo que interiorizamos, porque se puede
pensar algo sin interiorizarlo. Tienes que interiorizar estos pensamientos, tienes que
emocionarlos, o no te harán ningún bien. Si los mantiene solo en un nivel consciente,
puede estar pensando en la riqueza y vivir en la pobreza. Si no ha interiorizado los
pensamientos de riqueza, se quedará en la pobreza.
Neville Goddard, el inspirador autor y orador (que generalmente se hacía llamar
simplemente "Neville"), lo expresó muy bien: dijo que el futuro debe convertirse en
presente en la imaginación de quien ha creado sabia y conscientemente las
circunstancias. Se nos han dado facultades mentales que no se nos han dado a ninguna
otra forma de vida; todas las demás pequeñas criaturas del mundo están completamente
en casa en su entorno; se mezclan. Estamos totalmente desorientados porque se nos
han dado las facultades mentales para crear nuestro entorno, pero puedes pasar por
nuestro sistema educativo y no aprender nada acerca de estas facultades superiores.
Memoria, percepción, voluntad, razón, imaginación, intuición: estos son poderes
fenoménicos, pero ¿entendemos cómo funcionan? Como dijo el difunto autor de
bestsellers Wayne Dyer: “Cuando cambias la forma en que miras algo, lo que miras
cambia”. Si cambias tu percepción, cambias tu mundo. Tenemos una memoria perfecta;
tenemos una intuición perfecta;
todas nuestras facultades superiores son perfectas. Necesitan desarrollarse, pero ni
siquiera nos enseñan que los tenemos, así que no nos enseñan cómo usarlos. La
imaginación no es sólo algo con lo que jugar. Todo lo que vemos, el mundo que nos rodea,
fue creado primero en la imaginación y luego se convirtió en resultados físicos. El mundo
funciona por ley.
El ingeniero aeroespacial Wernher von Braun lo expresó muy bien. Cuando John
Kennedy le preguntó: "¿Qué se necesitaría para construir un cohete que llevaría a una
persona a la luna y luego la traería de vuelta a la tierra?" von Braun respondió: “La voluntad
de hacerlo”.
La voluntad es una de nuestras facultades superiores. Nos permite mantener una idea
en la pantalla de nuestra mente con exclusión de todas las distracciones externas. Cuando
te enfocas en una idea, esa idea debe tomar forma. Como observó Andrew Carnegie,
cualquier idea que se mantenga en la mente, que se enfatice, que se tema o reverencie,
comenzará de inmediato a revestirse de la forma más conveniente y apropiada disponible.
Una de las primeras leyes del universo es la transmutación perpetua de la energía: las
energías siempre se mueven hacia la forma, a través de la forma y vuelven a salir de la
forma.
Energía y forma En un
día despejado, puedes mirar hacia el cielo y ver cómo se acumula una pequeña nube.
Hay energía moviéndose hacia la forma. Luego, la nube comenzará a oscurecerse y
pesarse, ¡y boom! Sale el agua. Si te quedas allí el tiempo suficiente, verás que el agua
vuelve al lugar de donde vino. La energía vuelve a su fuente de origen: eso es cierto con
nosotros y con todo lo que usamos.
Estamos viviendo con leyes. La mayoría de las personas no entienden las leyes, por
lo que no viven en armonía la mayor parte del tiempo. A medida que entendemos las leyes
y ponemos nuestra vida en armonía con ellas, las cosas comienzan a moverse en la
dirección correcta.
Ralph Waldo Emerson dijo que la ley de causa y efecto es la ley de las leyes: lo que
sacas vuelve. Si das mucho bien, vas a recibir mucho bien, porque te estás poniendo en
armonía con ello.
Cuando salió El Secreto , hizo mucho bien, pero también confundió a mucha gente.
Creen en la ley de la atracción: piénsalo y lo atraerás. Pero la mayoría de las personas que
hablan de la ley de la atracción realmente no la entienden. La ley de la atracción es una ley
secundaria. El primario
La ley es la ley de la vibración. Decreta que todo se mueva; nada descansa.
Vivimos en un océano de emociones y pensamos en una frecuencia. El pensamiento es
energía.
La frecuencia en la que estás pensando dictará lo que atraes hacia ti, porque
controlará la vibración en la que estás. No puedes atraer algo con lo que no estás en
armonía. Si una persona es pobre, no tiene dinero, nunca ha tenido dinero y piensa que
se va a hacer rica, lo único que hará es permanecer en la pobreza. Están en una
vibración de pobreza. Cuando entienden eso y lo cambian, están en un mundo diferente
y están jugando un juego diferente.
Creemos que la educación es poner información en nuestras cabezas, pero eso no
es todo. María Montessori, la famosa educadora, dijo: “Enviamos a los niños a la escuela
y pensamos que son tazas; queremos que llenen la copa. La verdad es que las copas
ya están llenas”. Todo el conocimiento, todo el poder, que alguna vez hubo o habrá es
omnipresente. Ya tienes todo el conocimiento y el poder que necesitarás. No obtienes
energía, la liberas y la liberas al deseo. Cuando tienes un deseo, tienes la energía para
hacerlo.
Nuestro ADN espiritual es perfecto. Hay perfección dentro de cada uno de nosotros,
y esa perfección busca expresarse dentro ya través de nosotros. El espíritu está siempre
para la expansión, para la expresión; siempre muestra la esencia de lo que somos como
espíritu puro y sin adulterar. Siempre quiere expresarse de una manera mayor. Por eso
queremos cosas. En realidad, no queremos llegar, queremos crecer: “Quiero correr más
rápido; Quiero saltar más alto”. El Espíritu quiere expresarse a través de nosotros.
Somos seres espirituales. Escucharás a la gente decir que están teniendo una
experiencia espiritual. Ellos no están; son espíritus teniendo una experiencia física.
La perfección dentro de nosotros está buscando expresión todo el tiempo. Por eso,
si corremos, queremos correr más rápido. Si saltamos, queremos saltar más alto. Si
vendemos, queremos vender más. No importa lo que hagamos; tenemos el deseo de
hacer más. Deberíamos entender por qué.
Insatisfacción creativa
Cuando era niño, mi abuela solía decirme: “Debes estar satisfecho con lo que tienes”.
La abuela era un ángel y no queríamos
decir que estaba equivocada, porque ¿cómo podría estar equivocada la abuela? Pero ella lo era.
Nunca debemos estar satisfechos con lo que tenemos.
La insatisfacción es un estado creativo, y al querer más, vas a hacer más, no se trata de
conseguirlo. Si crees que tener más te hará mejor, te estás engañando a ti mismo. Vas a estar
miserablemente decepcionado. Está haciendo más. Vas a traer más de ti mismo a la fiesta. Eso
es todo lo que estoy haciendo; Sólo estoy trayendo más de mí a la superficie. Quiero hacer un
mejor trabajo hoy que ayer.
La idea de jubilarse parece indicar que el objetivo en la vida es conseguir lo suficiente para
vivir para no tener que trabajar. Pero no estamos hechos para el trabajo; el trabajo está hecho
para nosotros. Obtenemos satisfacción de nuestro trabajo. Vas a trabajar por satisfacción. Ganas
dinero prestando servicio. Brinda servicio para ganar dinero.
Tenemos que arreglar algo de esto. Lo entendimos mal, porque la gente en posiciones
poderosas lo entendió mal, y nos estaban enseñando, y pensamos, ¿cómo podrían estar
equivocados?
Corporaciones y Sistemas Hasta
ahora he estado hablando de individuos, pero apliquemos esta idea a un marco más amplio,
digamos una corporación. Estos principios son muy importantes, pero no creo que las personas
en puestos clave los entiendan correctamente. Gastamos mucho dinero en sistemas, en edificios,
en cosas, pero no gastamos tanto en personas.
Tomemos un hotel como ejemplo. Cuando sacas a la gente del hotel, ya no tienes hotel;
tienes un edificio lleno de cosas. El hotel es gente. Si queremos construir un negocio, tenemos
que construir personas.
Todo el mundo tiene el potencial. Tenemos que aprender a desarrollar ese potencial. Si
quieres que una persona haga un mejor trabajo, es mejor que averigües qué es lo que quiere,
porque la única vez que realmente intentará hacerlo mejor es cuando esté trabajando para lograr
algo que realmente quiere. Tienes que querer algo para traer más de ti mismo a la fiesta.
Les decimos a los empleados: “Escucha, cometiste un error. Déjame mostrarte cómo hacer
esto bien”, pero vuelven a la forma en que han estado haciendo la tarea, porque están
programados para hacerlo de esa manera. Ese es su paradigma,
y decirles algo no va a cambiarlo. Pueden cambiar para hoy o mañana, pero
luego ¡boom! De vuelta al paradigma.
El paradigma es como un termostato: controla la temperatura del
desempeño de la persona. Si quieres cambiar la temperatura de su actuación,
tienes que cambiar el paradigma. Tienes que cambiar ese termostato, y para
hacerlo tienes que entenderlo. Tienes que empezar a educar a las personas
para que empiecen a entender quiénes son, qué son y qué les motiva.
He ido a empresas y he enseñado estos principios; los resultados han
sido astronómicos. Allá por los años setenta, ingresé a Prudential of America
y Metropolitan, dos de las compañías de seguros más grandes. Aumentamos
las ventas en cientos de millones de dólares enseñando a la gente a formar
un par de hábitos nuevos. Conseguí que la gente se comprometiera a estar
frente a un cliente potencial a las 9:00 a. m. y pedirle que comprara un seguro
por valor de $100 000. Les dijimos: “Ni siquiera tienes que venderlo; solo
pídeles que compren. Las únicas dos cosas que tienes que hacer de manera
diferente son estar frente a alguien antes de las 9:00 am y pedirle que compre
$100,000 en seguro”. Estaban vendiendo más pólizas de $100,000 en una
semana que en un año.
He ido a prisión y he visto pasar lo mismo. Cuando le muestra a una
persona por qué está obteniendo los resultados que está obteniendo y qué
tiene que hacer para cambiar esos resultados, hay muchas posibilidades de
que lo haga. Si solo estás tratando de hacer que cambien, no lo harán.
La gente no se resiste al cambio; se resisten a ser cambiados. Si decides
cambiar, cambiarás. Si decido que cambiarás y no lo hiciste, resistirás mis
esfuerzos. Tenemos que hacer que sea atractivo para la gente querer hacerlo
mejor, cambiar, ser más productivos. Para hacer eso, tenemos que entender
qué los hace funcionar. Tenemos que entender cómo funciona su mente.
Comprender cómo funciona la mente no es solo para psicólogos. Es para
todos, porque la mente es movimiento. El cuerpo es la manifestación de ese
movimiento.
Había una historia sobre Mahatma Gandhi. Alguien venía a través de una
gran multitud de personas hacia él y le entregó un papel que decía: "¿Podría
escribir un mensaje de idea profunda para que me lo lleve a casa?" Gandhi
escribió: “Yo soy mi mensaje”. Si eres el líder, tienes que operar en el nivel
vibratorio en el que esperas que el
la gente a tu alrededor operará. Tienes que estar viviendo tus objetivos para tu organización.
De la misma manera, si queremos que las personas de la organización se comprendan a sí
mismas, tenemos que comprendernos a nosotros mismos. Tenemos que estar estudiando con
ellos.
Lo que más disfruté de trabajar con Earl Nightingale fue que siempre estaba estudiando.
Estudiaba todo el tiempo, y era como Gandhi diciendo: "Yo soy el mensaje". Earl era el mensaje.
Observaría lo que estaba haciendo y lo que estudiaba. En una ocasión, tenía un porta libros
en su escritorio con un libro del autor inspirador de principios del siglo XX, Thomas Troward. Se
abrió en una página determinada.
"¿Qué tiene eso de significativo?" Yo pregunté.
"He estado estudiando eso durante tres meses".
"¿Misma página?"
"Sí. Cuando lo entienda, pasaré a la página siguiente”.
Empecé a hacer eso; Tengo todos los libros de Troward y los estudio todo el tiempo. Empecé
a hacer lo que hizo Earl. Él era el mensaje para mí. Creo que eso es lo que tenemos que hacer. Si
vamos a liderar a la gente, tenemos que hacer lo que queremos que hagan. No tiene sentido
decirle a la gente que haga algo si no lo estás haciendo tú mismo.
Comprenda su programa El paradigma
es el concepto más importante que cualquier persona puede estudiar. Controla todo en nuestras
vidas. Ahora creo que entiendo bastante bien este concepto, pero quiero entenderlo mejor, así
que sigo estudiando más. Si quieres cambiar algo, tienes que usar la repetición. Si solo te hubieran
dicho tu nombre una vez, ni siquiera sabrías cuál es. Tuvieron que llamarte por tu nombre una y
otra vez hasta que finalmente empezaste a responder.
Muchas de las ideas que controlan a la gente en este momento son absurdas, y fueron
originadas por alguien que pudo haber vivido hace unos trescientos o cuatrocientos años, pero se
han transmitido en el ADN desde entonces, y se han convertido en parte de su ADN. Esto siguió
expandiéndose durante unos 280 días después de la concepción hasta que hiciste tu debut en el
planeta. Tu mente
estaba abierto de par en par; todo lo que sucedía a tu alrededor entró directamente en tu
mente subconsciente.
La mayoría de la gente empieza detrás de la bola ocho. Eso está bien, porque puedes
cambiar eso. Tenía veintiséis años cuando empecé a cambiar; Lo he hecho bastante bien,
he ayudado a unos cuantos millones de personas a cambiar, pero todavía tengo mucho
que aprender.
He estado en eso durante mucho tiempo. He ido a prisiones, he ido a escuelas, he ido
a corporaciones. El ser humano es una expresión fascinante de la vida. Tenemos increíbles
poderes encerrados dentro de nosotros. Si vamos a cambiar, tenemos que entender lo que
está involucrado. Si vas a conducir el coche, tienes que entender para qué sirve la palanca
de cambios. Tienes que entender algo acerca de tu computadora si vas a trabajar con ella.
Hay programas en nuestra computadora, y dependemos de ellos. Si queremos programar
cambios, tenemos que hacerlo por alguien que escribe código.
Su paradigma es un programa, y está en su biocomputadora. Las personas que
escribieron el código del programa que controla tu vida no sabían nada acerca de la mente.
Estaban pasando lo que habían recibido.
Sin embargo, instalaron este programa a través de la repetición. Nos enseñaron las mismas
cosas una y otra vez: cómo usar una cuchara, cómo caminar, cómo poner un pie delante
del otro. Era repetición: repetición paciente, constante, espaciada.
Actitud: La Palabra Mágica La
actitud lo es todo. Lo bien que le irá a alguien con este material dependerá de su actitud,
que es el compuesto de sus pensamientos, sentimientos y acciones. Están unidos como
los colores de un arcoíris.
He escuchado un disco de Earl Nightingale, que es un magnífico ensayo sobre la
actitud llamado The Magic Word, una y otra vez, tal vez diez mil veces. La palabra mágica
es actitud. Al escuchar repetidamente este disco, me di cuenta de lo que es la actitud.
Entonces me di cuenta de mi propia actitud. Me di cuenta de que tenía una mala actitud
sobre quién era y qué era capaz de hacer. Tenía que ser consciente, primero, de lo que es
realmente la actitud, y luego tenía que ser consciente de cómo cambiarla. Lo cambié la
forma en que fue construido. Alguien más lo había construido a través de la repetición.
Porque lo que Earl tenía que decir sobre la actitud iba en contra de todo lo que había estado
enseñado hasta ese momento, escuchaba el mismo disco una y otra vez.
Tengo una copia de Piense y hágase rico de Napoleón Hill encuadernado en cuero
negro. He estado leyendo esta copia en particular todos los días desde 1963. Empecé a
leer este libro cuando tenía veintiséis años. Mi hermana Helen, dos años mayor que yo,
tenía una amiga llamada Pat, y Pat era lectora. Siempre tenía libros; ella siempre tenía un
libro con ella. Creo que Pat leyó todo en la biblioteca local.
Piense y hágase rico fue el primer libro que leí.
Cuando me dieron este libro por primera vez, dije: "No sé leer". Eso no era cierto.
No podía leer bien, pero podía leer tan bien como la mayoría de la gente: a un nivel de
séptimo grado.
Cuando comencé a leer este libro, mi hermana le dijo a Pat: “Bob comenzó a leer”.
Cuando vi a Pat, me preguntó: "¿Helen dijo que estás leyendo?".
"Sí."
"¿Qué estás leyendo?"
“Es un buen libro. Lo disfrutarás. Piensa y Crece Rico." Ella sonrió.
Unos meses más tarde, volví a ver a Pat. Ella preguntó: "Oye, Bob, ¿sigues leyendo?"
"Sí", dije.
"Piensa y Crece Rico."
"Caramba, estabas en eso la última vez que te vi".
“Sí”, dije, “todavía lo estoy leyendo”.
Ella me miró un poco extraña.
Unos meses más tarde, Pat me preguntó: "¿Sigues leyendo?".
"Sí."
"Piensa y Crece Rico."
Leí ese libro durante mucho tiempo. Estaba haciendo lo que se requiere para
cambiar un paradigma. Yo no sabía eso; No lo estaba haciendo deliberadamente;
Simplemente estaba fascinado con lo que estaba leyendo.
Pat pensó que era un comportamiento extraño. Leía un libro y luego pasaba a otro.
Pat tenía una buena educación, porque leyó muchos libros, pero ni siquiera se conocía a
sí misma. Ella era una persona de mantenimiento, y ella y
su marido no tenía nada. Nunca llegaron a ninguna parte. Nunca lograron nada en
sus vidas. Simplemente se las arreglaron. La forma más alta de creación de Dios, y
simplemente se las arreglaron.
Como suelo decir en mis seminarios, “Cuando lees un buen libro por segunda
vez, no ves algo en ese libro que no estaba allí antes; ves algo en ti mismo que no
estaba allí antes”. La repetición crea la conciencia.
Te daré otro ejemplo de la necesidad de la repetición. Cuando era niño, tenía
un amigo llamado Jack Gregory. Mientras estábamos dando vueltas por su casa,
yo decía: "¿Vienes?"
La madre de Jack decía: "Bob, no eres tú, eres tú".
Pensé que ella simplemente no lo sabía porque había más de uno, tenías que
ser tú. Traté de seguir diciendo youse, y ella siguió corrigiéndome.
Entonces escuchaba a alguien decir: "¿Vienes?" cuando hablaban de más de
una persona. Escucharía a alguien más decir: "¿Vienes?" en el mismo tipo de
contexto.
Intentaría corregirme. Empezaría a decir: "¿Vienes?" y yo me detenía y decía:
"¿ Vienes ?" Me sentí muy incómodo diciendo esto, pero eventualmente cambié mi
hábito de hablar.
Ahora, cada vez que escucho a alguien decir youse, inmediatamente pienso en
la Sra. Gregory. La Sra. Gregory usó la repetición para crear conciencia en mi
mente. No creo que ella supiera que estaba haciendo eso, yo ciertamente no lo
sabía, pero eso es lo que hizo.
Eso es lo que tenemos que hacer. Tenemos que crear conciencia de que lo que estamos
haciendo, nuestro comportamiento habitual, no está dando los resultados que queremos.
Tenemos que tomar conciencia de cómo cambiar nuestro comportamiento, y tenemos que
cambiarlo de la misma manera que lo hemos construido, a través de la repetición.
Leer el mismo libro; escuchar la misma grabación. Si escuchas la grabación de
Earl de The Magic Word un par de veces al día durante seis meses, te garantizo
que serás muy consciente de tu actitud, y aunque suene tan simple, cambiará tu
vida. Todavía tengo mi viejo tocadiscos y los pequeños discos de siete pulgadas
que Earl grabó a principios de los sesenta. Todavía los escucho una y otra vez,
porque sé que puedo tener una mejor actitud de la que tengo.
Capitulo dos
¿Estás viviendo en el paradigma de
otra persona?
Como dije en el capítulo anterior, muy probablemente no estés viviendo en un
paradigma que usted mismo construyó. Solo en muy raras ocasiones una persona
está viviendo con su propio paradigma. A casi todo el mundo se le ha construido
su paradigma —un padre, un tutor, otra persona— y controla toda su vida.
Crea el mundo que quieres
La mente subconsciente, que opera de acuerdo con su paradigma, está abierta
de par en par, y todo lo que sucede a su alrededor entra directamente en ella. La
mente subconsciente es totalmente deductiva. No tiene capacidad originaria
alguna. También es amoral. Es como la tierra, a la que realmente no le importa lo
que plantes en ella. Como dijo Earl Nightingale en El secreto más extraño, puedes
plantar maíz dulce, y a un dieciseisavo de pulgada puedes plantar belladona, un
veneno mortal. Uno crecerá en gran abundancia como el otro.
Lo mismo ocurre con la mente subconsciente. Todo lo que plantes crecerá.
Como la tierra, el subconsciente no determina lo que es bueno o malo;
simplemente lo acepta y lo hace crecer. Su mente subconsciente se expresa a
través de sus acciones.
En muchos seminarios, se sentará y escribirá cómo le gustaría vivir, dónde le
gustaría vivir, qué le gustaría hacer, cuánto le gustaría ganar y con quién le
gustaría relacionarse. Cuando haya escrito todas estas cosas en detalle, habrá
construido una imagen.
Para la mayoría de las personas, ese suele ser el final del ejercicio. Nuestra imaginación
y nuestra razón crearon esa imagen, pero es solo a través de la repetición que vas a plantar
esa idea en tu mente subconsciente. Para hacer eso, tienes que escribirlo una y otra vez.
Tres veces cada mañana, escribo nueve líneas y las grabo. Se los envío a Sandy
Gallagher, mi socio comercial. Ella hace lo mismo; ambos estamos en la misma frecuencia.
Es la forma en que queremos ver nuestro negocio y lo que queremos lograr con él.
Reforzamos esta visión a través de la repetición. Haremos esto durante un año o catorce
meses. Estamos creando el mundo en el que queremos vivir en nuestra propia empresa.
Eso es lo que hay que hacer. La escritura provoca el pensamiento, y el pensamiento
crea imágenes. Estás creando una imagen en tu conciencia con tu imaginación y la estás
pintando con palabras para crear algo hermoso.
Una vez le pregunté a un artista cómo hizo un trabajo tan hermoso. Él dijo: “Soñé mi
pintura, y luego pinto mi sueño”. Eso es esencialmente lo que estamos haciendo: estamos
soñando nuestra pintura, y luego vamos a pintar nuestro sueño. A través de la repetición de
escribir esta visión una y otra vez, la estamos plantando en la inteligencia universal a través
del subconsciente.
La inteligencia universal de la mente subconsciente funciona de manera legal, y
funciona exactamente de la misma manera para todos, ya sea que vivas en medio de África
o en medio de Chicago. Cuando grabas una idea una y otra vez en el subconsciente, esa
idea debe por ley manifestarse a través de ti. Este proceso hace que hagamos las cosas
un poco diferente, porque esa idea tiene que ser expresada.
Poco después de que saliera El secreto , estaba subiendo a un avión y un hombre se
sentó detrás de mí. Se acercó y me tocó en el hombro.
Sonreí y dije: "Bueno, ¿quién eres?"
Me dijo quién era. Era un profesional del golf e iba al torneo FedEx en Nueva York.
Acababa de ver El secreto y dijo: "Creo que puedes ayudarme".
"Probablemente podría ayudarte mucho", le dije.
Una cosa llevó a la otra, pero esencialmente le dije cómo tenía que arreglar el
ideas en su mente subconsciente para crear un nuevo paradigma.
Eso es realmente lo que estás haciendo. El paradigma es la imagen que
controla tu comportamiento y te da los resultados que deseas. No tienes que
preocuparte de dónde vienen: vendrán porque estás en armonía con ellos.
¿Quieres?
Considera esto: nada se crea ni se destruye. Toda la ciencia y la teología
enseñan eso. Todo ya está aquí, en un estado o en otro. Las personas muchas
veces tienen problemas para tomar decisiones porque no saben de dónde van
a salir los recursos para manifestarlas. Digo, el único requisito previo para tomar
una decisión es, ¿quieres? El dinero, la ayuda, la gente, nada de eso es
importante. El único prerrequisito cuando estás tomando una decisión es,
¿quieres? Lo que desea está en una frecuencia que es mucho más alta que la
que está operando. Cuando tomas una decisión y te comprometes con ella,
cambias tu mente a esa frecuencia. Tienes que quedarte allí; entonces se
convierte en parte de su nuevo paradigma. Tienes que permanecer en esa
frecuencia, porque controla tu comportamiento así como lo que atraes hacia ti.
Nuestra mente funciona de la misma manera que una radio o un teléfono.
Tienes que entrar en la frecuencia del bien que deseas.
Tenía unos quince años cuando mi familia consiguió nuestro primer teléfono. Era una línea de
partido, compartida por probablemente cincuenta personas. ¿Por qué teníamos que tener una línea de fiesta?
Porque no sabíamos que hay un número infinito de frecuencias.
Una vez que nos dimos cuenta de eso, todo el mundo podría tener un teléfono.
Hay millones de teléfonos porque hay un número infinito de frecuencias.
Su número de teléfono es una frecuencia. En la mente, tu paradigma es tu
frecuencia. La imagen en la mente subconsciente dicta la frecuencia en la que
estamos, lo que estamos haciendo y lo que nos llega.
Mientras escribo esto, hay una pandemia afuera. Es algo triste, pero no me
va a detener. Estoy trabajando con la ley, y sé que todo lo que necesito va a
ser atraído por mí. Va a llegar cuando lo necesite absolutamente, no antes,
porque así es como funciona la ley, así que debo ser paciente y hacer lo que
tengo que hacer para mantenerme en la misma frecuencia.
Imaginación decidida
Quiero más de lo que tengo, no porque quiera más dinero, sino porque quiero crecer. Quiero
volverme más consciente de mi unidad con la inteligencia infinita, con Dios. Si realmente
entendemos esto y seguimos trabajando en ello, sucederá, pero tenemos que seguir
trabajando en ello. Tenemos que pintar el cuadro del bien que deseamos y escribirlo. Cuando
has creado una imagen en tu mente consciente, la grabas en la mente subconsciente a
través de la repetición y te permites sentirla. Tiene que ser real.
Neville llamó a esto “imaginación determinada”. Pensar desde el final es el principio de
todos los milagros. No trabajas para lograrlo; vas a donde ya estás en tu mente y te
involucras emocionalmente. Entonces es sólo un período de tiempo hasta que llega a
suceder en el nivel físico. Tienes que vivir en el ahora. Lo tengo ahora: en el momento en
que lo veo en mi mente, en el segundo en que me involucro emocionalmente con él, lo tengo.
Todo el mundo va a pensar que estás un poco loco, pero está bien. Ellos pensarán eso
de todos modos. Ellos no saben; ellos ni siquiera saben que no saben.
Estás avanzando y ellos no, así que van a pensar que estás loco; van a pensar que estás
cometiendo un error. La verdad es que estás empezando a hacer las cosas de la manera
correcta, pero solo un porcentaje muy pequeño de la población lo está haciendo de la
manera correcta. Alrededor del 95 por ciento lo intenta, pero solo el 5 por ciento gana.
Una mujer en Alemania me enseñó algo que creo que supe intuitivamente pero que no
había oído decir con palabras. Ella dijo: “Todo éxito es 5 por ciento de estrategia, 95 por
ciento de mentalidad”, y así es.
Hemos sido programados, y parte de nuestra programación es vivir de afuera hacia
adentro. Nos han enseñado a vivir a través de nuestros sentidos: “¿Escucharás lo que te
estoy diciendo? ¿Mirarás lo que te estoy mostrando? Tengo dos perros pequeños en la
casa. Pueden ver, oír, oler, gustar y tocar, pero no tienen los factores intelectuales que yo
tengo: percepción, voluntad, razón, imaginación, intuición, memoria.
Metas de tipo A, B y C También
hacemos las cosas de manera equivocada. Ordeno los objetivos por ABC. Los objetivos de
tipo A están haciendo lo que ya sabemos cómo hacer. Ahora las metas no son para conseguir:
conseguir es simplemente un subproducto. Las metas son para crecer. Las metas te permiten
aprovechar este maravilloso poder que tienes encerrado dentro de ti.
Una vez le pregunté a una persona en un seminario: "¿Cuál es tu meta?"
Él dijo: “Quiero comprar un auto nuevo”.
"¿Qué tipo de coche quieres?" Yo pregunté.
"Un Pontiac".
"¿Qué conduces ahora?"
"Un Pontiac".
“Ya veo,” dije. "¿Cuántos años tiene el auto?"
"Cuatro años de edad."
"¿Cuánto tiempo lo has tenido?"
"Cuatro años."
“Lo que me estás diciendo, entonces, es que te compraste un Pontiac nuevo hace cuatro
años, ¿es así?”
"Sí."
“Entonces ese no es un buen objetivo. Durante cuatro años, has sabido cómo conseguir un
nuevo Pontiac, así que no hay ganancia ahí. Eso no significa que no deba comprar un nuevo
Pontiac, pero ese no es un buen objetivo. Durante cuatro años, ya ha sabido cómo obtener un
nuevo Pontiac. Ir a la tienda a comprar pan no es una meta, a pesar de que todavía vas a hacerlo,
pero no hay un crecimiento adjunto a eso”.
Luego está el objetivo tipo B. Una meta de tipo B es algo que una persona cree que puede
hacer: “Si esta persona me paga lo que me debe, y si esto sucede y sucede lo otro, en realidad
podría hacer esto”. Ese es el objetivo tipo B: puedes ver cómo llegar allí. Si un montón de
condiciones, circunstancias y cosas suceden de cierta manera, podrías hacerlo.
El objetivo de tipo C implica algo que no tienes idea de cómo vas a conseguir. Está apagado
en la oscuridad. Está más allá de cualquier cosa que hayas hecho antes, pero es lo que quieres.
Es la casa que quieres. Es el trabajo que quieres. Es el negocio que quieres. Es el logro que
desea. No tienes idea de cómo hacerlo. No tienes el dinero, no tienes el tiempo y no tienes los
medios para hacerlo realidad, pero lo quieres.
Ese es el único requisito previo verdadero para una meta: tienes que desearla de verdad.
Los deseos provienen de la esencia de quienes somos, la perfección que está dentro de nosotros.
Ese ADN espiritual, que es perfecto, nos está motivando, está entrando en nuestra conciencia:
“Quiero esto”.
Me senté en una casa en Maplewood Lane en Glenview, Illinois, en 1973.
Acababa de dejar de trabajar en NightingaleConant Corporation. A excepción de
mi familia, estaba solo. Tomé mi pluma y dije: “Voy a construir una empresa que
opere en todo el mundo”. No tenía ni idea de cómo iba a hacerlo. Ciertamente no
tenía suficiente dinero para llevarlo a cabo. No tenía ninguna ayuda y no tenía
ningún empleado, pero tenía una idea.
Como dijo Andrew Carnegie, cualquier idea que se mantenga en la mente y
se enfatice, ya sea temida o reverenciada, comenzará de inmediato a vestirse de
la forma más conveniente y apropiada disponible. Esto me recuerda el gran
sufrimiento de Job en la Biblia. Él dijo: “Lo que más temía ha venido sobre mí” (Job
3:25). Si tienes miedo de algo, lo vas a atraer.
En cualquier caso, no tenía idea de cómo sucedería, pero escribí: "Voy a
construir una empresa que opere en todo el mundo". Hoy operamos en ochenta y
nueve países diferentes. Construí una estación de televisión. Podemos transmitir
en todo el mundo. Cuando transmitimos un seminario, vamos a 119 países.
Esa era la imagen, y ha sucedido. Ahora tenemos unos tres mil consultores
que trabajan con nosotros. Quiero cien mil. Estoy muy lejos de mi objetivo, pero
actúo como si ya estuviera allí, porque estoy allí en mi conciencia.
Con el objetivo tipo C, vas a donde nunca has estado. Steve Jobs dijo: “No
puedes conectar los puntos mirando hacia el futuro. Solo puedes conectarlos
mirando hacia atrás”. Ves cómo llegaste a donde estás, pero no puedes ver cómo
vas a llegar a donde vas. Pero si mantienes la imagen en tu mente y te mantienes
involucrado emocionalmente, se revelará. Buscad primero este reino y su expansión
en justicia, y todas estas cosas os serán dadas. Vas a atraer todo lo que sea
necesario. Si sostienes la imagen, todo lo que necesitas vendrá a ti cuando lo
necesites, pero no antes.
Atrae lo que necesitas
Hace más de quince años, estaba dando un seminario en Vancouver, Washington.
Vino una mujer que era abogada de valores. Vino porque alguien le había dicho
que el seminario era un programa de gestión. no fue un
programa de gestión en absoluto; fue un seminario de "Ciencia para hacerse rico".
Ella se enamoró de esta información. Esta mujer tenía un doctorado en derecho; ella
estaba comprando y vendiendo bancos, haciendo públicos los bancos. Había ido a las
mejores universidades de Estados Unidos y del Reino Unido. Se había graduado como
la mejor de su clase.
Esta mujer se enamoró de lo que estábamos haciendo. Compró todo lo que
vendíamos. Unos tres años después, se convirtió en mi socia comercial. Ella es dueña
de la mitad de esta compañía. Ella es la Gallagher del Instituto Proctor Gallagher. Su
genio nos ha ayudado a crecer. Ella entiende el dinero; No. Sé cómo conseguirlo, pero
no sé cómo administrarlo correctamente.
Por eso estamos creciendo tan rápido y tan bien: porque atraje lo que necesitaba.
Tenemos un chico joven que entiende todo en el estudio que construimos. Entró desde
Manchester, Inglaterra.
Él sabe cómo hacer todo; podría operarlo en su teléfono desde Inglaterra si quisiera.
Tengo un director creativo que ha hecho todo tipo de trabajos televisivos. Tenemos uno
de los equipos de personas más fenomenales que jamás hayas visto. Todos ellos se
sintieron atraídos por lo que escribí ese día en Maplewood Lane en Glenview, Illinois,
1973.
Una vez que anoté esa meta, comencé a trabajar como si ya la hubiera alcanzado,
porque eso es lo que tienes que hacer. Neville dijo: “El futuro debe convertirse en
presente en la imaginación de aquel que sabia y conscientemente crearía las
circunstancias”.
Neville también habló de “pensar desde el final”. En otras palabras, no trabajas
hacia una meta; ya estás allí en el segundo que lo has dicho.
Pensar desde el final es una percepción intensa del mundo del deseo cumplido. Tienes
que verte con lo que quieres y actuar como si ya lo tuvieras. Construye tu paradigma
como una imagen de cómo quieres vivir tu vida. Con cada aspecto de tu vida que
quieras cambiar, ¿cómo quieres que cambie? ¿Cómo quieres que sea? Descríbalo en
detalle, y siempre tiene que estar en tiempo presente. Comience todo escribiendo:
“Estoy tan feliz y agradecido ahora que…”.
Algunas personas se preocupan por estirarse demasiado. Dicen que tu objetivo
tiene que estar anclado en al menos un poco de realidad, porque si te excedes, te
esforzarás. Pero realidad es una palabra interesante; es parte del paradigma.
Los hermanos Wright no eran realistas. Tuve la suerte de trabajar
con Sir Edmund Hillary en dos o tres ocasiones. Ya no está, Dios lo bendiga, pero
ciertamente no estaba siendo realista cuando se convirtió en el primer hombre en
escalar el Monte Everest. Mucha gente ha muerto tratando de llegar a la cima de
esa montaña.
No creo que haya ningún límite a lo que eres capaz de hacer.
No obstante, es cierto que si te estiras demasiado al principio, podrías causarte
problemas. Eso es tratar de forzar las cosas. No sabemos cuánto se tarda en
ponerse en forma para correr una maratón. No sabemos cuánto se tarda en
conseguir millones de dólares. Sólo sabemos que podemos llegar allí. El marco de
tiempo puede ser diferente para usted que para mí.
Tu nuevo paradigma es una idea, y todas las semillas tienen un período de
gestación. Para un bebé humano, son unos 280 días. En Canadá, donde vivo, son
alrededor de setenta días para una zanahoria. No sabemos qué es este período de
gestación para una semilla espiritual, que es una idea; nadie sabe cuál es el período
de gestación de una idea. Adivinas en ese momento, pero estás adivinando, y por
lo general adivinarás mal. Ahora he conocido a un par de personas que acertaron y
aterrizaron en el día exacto que habían visualizado, pero eso es inusual. Aún así,
no creo que haya ningún límite a lo que podemos hacer, porque estás trabajando
con una inteligencia infinita y con la ley por la cual sucede todo. Todo sucede por
ley, y cuando salen mal, estamos violando la ley.
Crear o desintegrar La
Biblia dice: “La paga del pecado es muerte” (Romanos 6:23). Cuando escuché eso
cuando era niño, pensé: “¡Vaya! ¿Es eso alguna vez grave?
¿Es eso cierto? Sí. Simplemente no entendía qué significaba "muerte" aquí.
Hay una ley básica de la vida que dice, crea o desintegra. Si no avanzas, retrocedes.
Cuando violas la ley, ese es el pecado. Vas hacia atrás; estás trabajando en su
contra; Estás tratando de forzar las cosas. Cuando estás trabajando con la ley,
sigues adelante. Cuando lo haces bien, todo fluye maravillosamente. Si realmente
tiene que luchar, probablemente esté yendo en contra de la ley.
En un momento estaba trabajando con una empresa multimillonaria en un
programa. Me gusta la persona involucrada, y yo le gusto a él, pero lo que
estábamos tratando de hacer era una lucha demasiado grande. Lo supe en ese momento y le dije
que pensé que deberíamos olvidarlo, porque estábamos luchando. “Creo que estamos
trabajando en contra de la ley”, dije. “Creo que hay algo mal con lo que estamos haciendo.
No sé qué es, pero creo que estarás de acuerdo conmigo. Hay una lucha, y no debería
haberla; debería ser un flujo libre”.
Cuando las cosas van bien para ti, lo estás haciendo bien; Lo estás haciendo por ley.
El autor de ciencia ficción Robert A. Heinlein observó una vez: “En ausencia de
objetivos claramente definidos, nos volvemos extrañamente leales a realizar trivialidades
diarias hasta que finalmente nos esclavizamos”. Relaciono esa cita con la situación de un
nuevo bebé. El bebé ha sido inundado con trivialidades: las conversaciones que se dan
alrededor del bebé, las cosas que se consideran importantes, preocuparse por esto,
preocuparse por eso: “¿Qué pasa si esto sucede? ¿Qué pasa si eso sucede? Todas estas
trivialidades finalmente esclavizan al bebé. Se convierte en parte del paradigma del bebé.
Eso hace mucho daño.
Encuentra tu propósito
Tenemos que tener un propósito para nuestras vidas, una razón para levantarnos de la cama.
Cuando tienes un propósito en la vida y estás siendo guiado por él, todas estas trivialidades
rebotarán como el agua de un pato, porque no estás en armonía con nada de eso.
El futurista Joel Barker, quien escribió un libro llamado Paradigms, dijo que para dar
forma a su futuro, debe estar dispuesto y ser capaz de cambiar su paradigma. La voluntad
es muy importante, pero si no tienes un propósito, las probabilidades de que no estés
dispuesto son bastante buenas, porque al principio tienes que hacer cosas que no tienen
mucho sentido para ti. Tienes que empezar a hacer cosas que van en contra de tu paradigma.
Por ejemplo, parte de mi paradigma es estar en mi estudio a las 5:30 am y hacer mis
ejercicios de escritura. Lo último que hago es escribir diez cosas por las que estoy
agradecido, y lo hago todos los días. No es difícil para mí; sería difícil ahora si no lo hiciera,
porque ahora es parte de mi paradigma. Pero cuando empiezas a hacer estas cosas por
primera vez, no solo estás formando un nuevo hábito, estás rompiendo uno viejo, y eso no
es algo fácil de hacer. Es por eso que las personas en programas de pérdida de peso tienen
dificultades: no solo están formando nuevos
hábitos pero rompiendo los viejos. Si no tienes un fuerte sentido de propósito, probablemente
no estarás dispuesto a hacer eso.
Tienes que tener un propósito que realmente signifique algo: es la razón por la que te
levantas de la cama por la mañana. No estamos aquí solo para ganar lo suficiente para
sobrevivir. Tu propósito entonces te hace estar dispuesto a pagar el precio para hacerlo; y
sin el propósito, no harás eso.
¿Cómo decides el propósito? Eso requiere algo de disciplina en sí mismo.
Podría comenzar sentándose y preguntándose: "¿Qué es lo que realmente me encanta
hacer?" Creo que todos estamos programados para hacer algo realmente bien. Soy muy
bueno en lo que hago. No soy muy bueno en nada más, pero no quiero hacer nada más.
Solo trabajo para mejorar en lo que estoy haciendo.
Recomiendo hacer el siguiente ejercicio temprano en la mañana. Soy más creativo por
la mañana. Es por eso que los médicos operan temprano en la mañana: su mano está firme
y el paciente está más receptivo. Siéntate por la mañana y pregúntate: "¿Qué es lo que
realmente me encanta hacer?" Creo que encontrarás tu propósito allí. Es tu propósito
porque lo amas.
Puede fácilmente tomar el camino equivocado aquí. Cuando estaba hablando en un
seminario en Phoenix, un médico me dijo que estaba pensando en dejar su profesión.
"¿Porqué es eso?" Yo pregunté. “Puedes ganar suficiente dinero”.
“Hoy”, dijo, “la profesión médica está hecha un lío. Tienes que trabajar más duro y
dedicar más tiempo para ganar menos dinero”.
"Eso es probablemente cierto", le dije, "pero, en primer lugar, ¿por qué se convirtió en
médico?"
"Porque lo amo."
“Entonces será mejor que pienses en lo que estás haciendo, porque si te gusta, no
importa si te pagan o no. Estás pasando tus días haciendo lo que te gusta hacer. No vas a
trabajar para ganar dinero; vas a trabajar por satisfacción. Brinda servicio para ganar
dinero”. Le expliqué eso hasta que finalmente lo entendió.
Deseo: la clave de la habilidad
Cualquiera puede hacer lo que otros han hecho. No creo que haya ningún límite a lo que
eres capaz de hacer, pero está fuertemente ligado al deseo. Si no puedes jugar al fútbol
como Tom Brady, no querrás jugar al fútbol como
Tom Brady. Napoleón Hill dijo: “Si tienes el deseo, tendrás la capacidad de hacerlo. Si no
tienes el deseo, no tendrás la habilidad. La habilidad viene con el deseo”.
Así que podrías ser un niño o niña pobre que vive en un vecindario pobre, pero
realmente deseas tener unos cuantos millones de dólares en el banco. Podrías hacer
eso, incluso si no deseas tener el dinero de Jeff Bezos.
Si tienes el deseo, tienes la capacidad. No se pregunte cómo va a suceder, porque
no lo sabrá hasta después de que suceda. Hillary no supo cómo llegar a la cima del
monte Everest hasta que llegó allí.
Los hermanos Wright no supieron cómo poner el avión en el aire hasta después de que
lo supieron.
Se mostrará el camino, pero tienes que entrar en la frecuencia del bien que deseas.
La mayoría de las personas están en una frecuencia AM pero desearían tener música
FM. Si quieres música FM, tienes que conectarte a la frecuencia FM.
Si quieres un ejemplo de alguien que estaba viviendo el paradigma de otra persona
pero le dio la vuelta, puedes tomar mi propia vida. A los veintiséis años, tenía bajo peso,
era tímido, tenía muy baja autoestima, le debía dinero a todos los que conocía y nunca
había hecho nada importante. Me echaron de la escuela después de dos meses en la
escuela secundaria y no era una persona muy agradable. Tuve una mala actitud.
Hoy creo que soy una persona muy agradable. He ganado millones de dólares, he
ayudado a millones de personas, estoy en la cima de mi juego. No conozco a nadie que
esté haciendo lo que estoy haciendo mejor que yo. Y creo que si yo pude ir y hacerlo,
cualquiera puede hacerlo.
fuera de solitario
Durante años, iba a la Penitenciaría de Kingston, una prisión de máxima seguridad en
Canadá, una vez al mes. Hice un trato con la gente de seguridad. Dije: “Cualquiera que
quiera venir y escucharme debería poder venir”.
“Oh”, dijeron, “eso es ser ridículo”.
“No, no lo es”, dije, “si alguien quiere venir, tiene que poder venir”. Finalmente
aceptaron.
Había un tipo que había estado en régimen de aislamiento durante siete años y medio.
Le había disparado a alguien en un atraco cerca de Windsor, Ontario. El tipo no murió. Si
lo hubiera hecho, habrían ahorcado a este hombre, porque en ese momento estaban
ahorcando a personas en Canadá por asesinato. Fue condenado a veintisiete años. Había
estado en confinamiento solitario durante siete años y medio; salía solo una hora al día al
patio. El alcaide lo llamó perro rabioso. Era un tipo grande: seis pies y dos, doscientas
libras.
Cuando comencé a enseñar esta información, este hombre entraba y se sentaba en
la parte de atrás. Había traído cigarrillos, café y donas. Estaba sentado en la parte de
atrás, comiendo donas, fumando y bebiendo café, haciendo ruidos como un animal,
sentado en una mesa con las piernas balanceándose. Si dijera algo sobre la fe, se reiría y
se burlaría. Estaba llamando la atención de todos. Esto se prolongó durante unos tres
meses. Sabía que tenía que detenerlo o dejar de ir allí.
No quería dejar de ir, pero tenía miedo de este tipo. Luego, un día, cuando comenzó
a portarse mal, dejé lo que estaba haciendo y caminé muy lentamente hacia la parte de
atrás. Me paré justo frente a él y le dije: "Tienes que ser el bastardo más estúpido que he
conocido". Podías ver sus músculos tensarse, y su cara se puso roja; Pensé que me iba a
matar. Luego se echó a reír; debe haber pensado: “Este tipo está loco”. Todo esto sucedió
en segundos, milisegundos.
“Puedo ganar dinero más rápido de lo que tú puedes robarlo”, dije. “En media hora,
voy a decirle a la seguridad que abra la puerta. Voy a salir, subirme a un buen auto y
alejarme de aquí. Vas a volver a una celda por otras veinte horas. Estaba tranquilo
entonces.
Al mes siguiente, estaba sentado al frente, y si alguien movía los pies, se volvía y los
miraba fijamente; era como el oficial disciplinario en mi reunión.
Eventualmente, dejaron salir a este prisionero en una libertad condicional especial.
Había estado casado y tenía dos hijos, y mientras estuvo en prisión, su esposa tuvo una niña.
Se hizo amigo de un sacerdote, quien arregló que su esposa volviera a estar con él. No
podía salir de la ciudad de Toronto y tenía que presentarse ante la policía montada todos
los meses y ante la policía de la ciudad todas las semanas.
Este chico vino a trabajar conmigo. Aproximadamente un año después, bajé a
martillazos en el escritorio de la oficina de libertad condicional y dije: "No tienes ningún derecho".
mantener a este tipo en libertad condicional. Me voy a Inglaterra y quiero llevarlo
conmigo.
Rompieron su libertad condicional y le dieron su pasaporte, y se fue.
Nunca más me metí en problemas. Vivió una buena vida. Ya no está, pero valía
mucho dinero cuando murió. Si esto funcionó para él, puede funcionar para cualquiera.
Los aprendices heredarán la tierra
En un congreso de recursos humanos realizado en 1969 por NightingaleConant
Corporation, tuvimos al filósofo Eric Hoffer como orador. Era un gran hombre. Nunca
fue a la escuela y trabajaba como estibador, pero era un ser humano muy seguro de
sí mismo. Hoffer escribió varios libros, el más grande de los cuales fue The True
Believer. En nuestro congreso, dijo: “En tiempos de cambio, los aprendices heredarán
la tierra. Mientras que los eruditos se encuentran bellamente equipados para lidiar
con un mundo que ya no existe, los aprendices heredarán la tierra”.
Tomé eso como que las personas que están continuamente estudiando van a ser
felices, saludables y ricas. En realidad, no existe tal cosa como una persona instruida.
O estás aprendiendo o no lo estás.
Hoffer también dijo: “Para aprender, se necesita un cierto grado de confianza, ni
demasiado ni demasiado poco. Si tienes muy poca confianza, pensarás que no
puedes aprender. Si tienes demasiado, pensarás que no tienes que aprender”.
Es muy importante tener un cierto grado de confianza todo el tiempo para que
podamos seguir creciendo, expandiéndonos y aprendiendo sobre nosotros mismos,
el mundo del que formamos parte y lo que somos capaces de hacer. Hablaré de esto
en el próximo capítulo.
Capítulo tres
Desarrollar la confianza para cambiar
tu paradigma
En el último capítulo mencioné un congreso de recursos humanos que presentó
Eric Hofer. Yo estaba en la parte de atrás del salón de baile en el mismo congreso, en
el O'Hare Hyatt en 1969, cuando Bill Gove estaba hablando. Había alrededor de mil
personas en la audiencia. Se paró frente a ellos con un micrófono de mano y dijo: “Si
quiero ser libre, tengo que ser yo. No el yo que creo que tú crees que debería ser, no
el yo que creo que mi esposa piensa que debería ser, no el yo que creo que mis hijos
creen que debería ser. Si quiero ser libre, tengo que ser yo”. Agregó: “Será mejor que
sepa quién soy yo”.
Tenía a su público justo en la palma de su mano. Ahora había reunido una tonelada
de información y la había estado estudiando todos los días durante unos ocho años.
Yo estaba de pie en la esquina trasera de la habitación y pensaba: “¡Guau, es tan
bueno! ¡Si tan solo pudiera hacer eso!”
En su grabación de Magic Word , Earl Nightingale dice: “Ahora mismo aquí
llegamos a un punto bastante extraño. Tendemos a minimizar las cosas que podemos
hacer y las metas que podemos lograr, y por alguna razón igualmente extraña,
pensamos que otras personas pueden lograr cosas que nosotros no podemos”. Agregó:
"Quiero que entiendas que eso no es cierto, que tienes una gran cantidad de talento y
habilidad dentro de ti".
Si, en esa conferencia de 1969, me preguntaras: "¿Entiendes lo que dijo Earl?"
Habría dicho, “Por supuesto que lo entiendo. He estado escuchando esto directamente
durante nueve años todos los días”. Pero de repente fue como si un cohete se me
hubiera ido de la cabeza: "Eso es lo que Earl quiere decir". Estaba pensando que no
podía hacer lo que estaba haciendo Bill Gove. En ese momento tomé la decisión de
que no solo iba a hacer lo que él estaba haciendo, sino que
voy a conseguir que me enseñe. Decidí dejarle una nota a Bill Gove pidiéndole
que me enseñara a hacer lo que él estaba haciendo. Estaba listo para aprender.
La confianza proviene del conocimiento La
confianza proviene del conocimiento. Cuando la gente dice que no tiene confianza,
no es del todo cierto. Probablemente estén seguros de que pueden vestirse, atarse
los zapatos y conducir un automóvil. Confían en que pueden hacer todo tipo de
cosas. Cuando no tienen la confianza para hacer algo que realmente les gustaría
hacer, es porque no saben cómo hacerlo. Cuanto más aprenda cómo hacerlo, más
confianza tendrá.
Decidí que aprendería a hacer lo que estaba haciendo Gove, así que llegué a
conocerlo y le pagué miles de dólares en varias ocasiones para sentarme con él.
No hablo como Bill Gove en absoluto. Nunca sabría que él fue quien me enseñó a
hablar. Tenía la capacidad de hablar dentro de mí. Él no necesitaba enseñarme
eso. Me enseñó a estar tranquilo y confiado frente a un grupo de personas. Él dijo:
“Deja de preocuparte por lo que piensen de ti”. Eso es lo que realmente aprendí.
El autor Terry ColeWhittaker escribió un libro llamado Lo que pienses de mí no es
asunto mío. Esa es la forma en que está.
La tiranía de las “otras personas”
Eso me lleva a un tema relacionado: la tiranía de “lo que pensarán los demás”.
Earl Nightingale me ayudó allí. Dijo: “Si supieras lo poco que piensan los demás,
no te preocuparías por lo que están pensando”. Si la persona promedio dijera lo
que está pensando, se quedaría sin palabras. El Dr. Ken McFarland, un gran
educador de Kentucky, dijo: “El dos por ciento de la gente piensa, el tres por ciento
piensa que piensa y el noventa y cinco por ciento preferiría morir antes que pensar”.
Lo que piensas de ti mismo es muy importante. Lo que los demás piensen de
ti no es importante. Solía preocuparme mucho por lo que los demás pensaban de
mí; Ya no lo soy, porque me doy cuenta de que lo que los demás piensen de mí
realmente no tiene nada que ver con mi vida. Lo que pienso de mí lo es todo. Si
realmente trabajo en ser una buena persona y trabajo en
lograr algo, probablemente le agradaré a otras personas, pero si me preocupo por
lo que piensan los demás, no voy a lograr mucho.
Bill Gove me enseñó a relajarme frente a una audiencia. Él dijo: “Recuerda:
solo estás hablando con una persona. Podrías tener una habitación entera llena
de gente, pero solo hay una persona. Tienes que tener eso claro en tu cabeza y
estar realmente interesado en compartir algo de valor con la persona que está
escuchando”.
Si enfocas tu atención en lo que piensas de ti, todo saldrá bastante bien. Eso
es lo que he hecho, y así ha funcionado. Al momento de escribir esto, tengo
ochenta y seis años, y espero crecer por otros diez años, pero sé que en este
momento las cosas van muy bien. Me gusto; Me gusta lo que hago y cómo lo hago.
Gran parte de esta preocupación por lo que piensan los demás comienza temprano en la vida.
Cuando éramos niños pequeños, escuchábamos a nuestros padres decir: "¿Qué
pensarían los vecinos?" He llegado a esta conclusión: ojalá los vecinos sí piensen,
pero lo que piensen realmente no hace ninguna diferencia. La mayoría de las
personas se preocupan por lo que piensan los demás. No deberían serlo. Deben
preocuparse por lo que piensan de sí mismos.
Tenemos que echar un vistazo a cómo estamos viviendo. ¿Estamos eligiendo nuestro propio
camino? ¿Estamos operando sobre una imagen del tipo de vida que queremos y la ejecutamos, o
simplemente estamos tratando de salir adelante lo mejor que podemos día a día?
Tienes que saber dónde estás. Además, tienes que saber a dónde vas. La
definición de éxito de Earl Nightingale es la mejor que he escuchado: “El éxito es
la realización progresiva de un ideal digno”. Un ideal es una idea de la que te has
enamorado. Estás tomando conciencia progresivamente a medida que avanzas
hacia el bien que deseas.
El dinero: un producto necesario Puede
que no todo el mundo quiera crear riqueza, pero creo que todo el mundo debería
ponerse en una posición financiera sólida, ya que el dinero se utiliza para los
productos o servicios de otras personas. Es un bien necesario en el mundo en que
vivimos. Todo el mundo puede crear ese tipo de riqueza.
Una vez estaba volando en un avión a Kuala Lumpur desde Toronto. Son
veinticinco horas en el aire de ida, así que tuve mucho tiempo para pensar. Yo gasté
el tiempo garabateando en un bloc con una calculadora. Me quedé pensando, ¿cómo
puedo mejorar el negocio? ¿Cómo puedo crear una nueva idea? Escribí “$1,000,000”,
el número 1 seguido de seis ceros. Había ganado un millón en los años sesenta, pero
realmente no sabía lo que había hecho. Como dije antes, estaba inconscientemente
confiado.
Luego pensé en personas que conocía que habían ganado $ 1 millón. ¿Qué era
tan diferente en ellos? De repente me di cuenta de que no eran diferentes en absoluto.
Es que no tenían una sola fuente de ingresos. Si tienes un trabajo, tienes una fuente
de ingresos. No me importa lo bueno que seas en eso, y no me importa cuánto ganes
por hora, todavía tienes una sola fuente de ingresos.
La gente rica tiene muchas fuentes. Históricamente, incluso si nos remontamos a los
antiguos babilonios, todas las personas ricas tenían múltiples fuentes de ingresos.
Entonces tuve una idea. Haría un seminario para enseñar a las personas cómo
ganar $ 1 millón creando múltiples fuentes de ingresos. Lo hicimos muy bien,
enseñando cómo cualquiera puede volverse rico estableciendo múltiples fuentes de
ingresos. No tienes una fuente; los tienes de todo tipo.
No tengo ningún deseo de ser tan rico como Jeff Bezos. No tengo ningún deseo
de tener millones de dólares; Estoy contento con dos o tres millones en el banco y
estar ocupado trabajando y creando trabajo, porque me gusta regalarlo y me gusta
hacer mucho bien. Para eso creo que es la riqueza.
Pero cualquiera, no me importa quién sea, puede volverse razonablemente rico,
y hoy es más fácil que nunca gracias a Internet. Creé una empresa llamada MSI
Connect. MSI significa múltiples fuentes de ingresos o múltiples flujos de ingresos,
donde las personas trabajan juntas, se ayudan mutuamente a establecer sus MSI,
realizan empresas conjuntas y se convierten en afiliados.
Hay muchos lugares diferentes donde la gente puede ir, pero es cuestión de
cambiar tu paradigma. Si no estás demasiado interesado en ganar dinero, deberías
interesarte, porque controla buena parte de tu vida. Si no estás interesado, es porque
tu paradigma está tratando de detenerte. Es como un policía: se queda ahí y no te
deja pasar. Tienes que pasar a ese policía. Tienes que decidir que ese paradigma ya
no te va a controlar. No digas más. Sigo adelante, sigo adelante y no voy a parar”.
¿Cuánto dinero quieres ganar? Ponte a trabajar y empieza a ganarlo.
Cuando comencé a leer Piense y hágase rico, pasé de ganar
$ 4,000 al año y debía $ 6,000, por lo que si pagué la deuda durante un año y medio,
habría alcanzado el punto de equilibrio sin nada para vivir.
En menos de un año, mis ingresos subieron a $14,500 al mes.
Alguien había dicho que había buen dinero limpiando pisos. Dije: “No estoy orgulloso.
Limpiaré los pisos. Empecé a limpiar oficinas. Terminamos limpiándolos en siete
ciudades y tres países diferentes. ¡Auge! Se fue.
Tienes que relacionarte con gente que sepa cómo ganar dinero; ellos te
enseñarán cómo. Es un tema, y hay que aprenderlo. La escuela no nos enseña a
ganar dinero. Una persona puede tener una maestría en comercio y finanzas y aun
así estar arruinado porque nunca aprendió a ganar dinero. Es posible que hayan
aprendido a conservarlo y contarlo, pero necesitan aprender a ganárselo.
Lloyd Conant y Earl Nightingale no iniciaron un negocio; iniciaron una industria.
Estaba cenando en casa de Lloyd en 1968 y le pregunté cómo empezó esta empresa.
Él dijo: “Leí un librito verde todo el fin de semana. Ya no me interesaba cómo empezó
la empresa. Quería saber qué era el libro verde. Era La ciencia de hacerse rico, de
Wallace D. Wattles, publicado por primera vez en 1910. Earl me dio una copia.
Nunca he dejado de leerlo; es fenomenal
El éxito y el ideal digno Permítanme
volver a la definición de éxito de Earl Nightingale: “la realización progresiva de un
ideal digno”. Digamos que alguien ha acumulado $5 millones y está trabajando para
obtener $10 millones. Otra persona es un estudiante en la escuela que está
obteniendo un promedio de C y D pero está trabajando para obtener un promedio de A y B.
Se están moviendo progresivamente en una dirección dada. Aunque sus caminos
son totalmente diferentes, uno tiene el mismo éxito que el otro porque ambos se
están moviendo hacia un objetivo predeterminado.
El éxito no está donde estás, sino hacia dónde vas. Es la dirección en la que te
estás moviendo, el objetivo de tu vida. La ley básica de la vida es crear o desintegrar.
Si está trabajando hacia una meta predeterminada, está creando; estás haciendo lo
que Dios quiso que hicieras. Creo que estamos aquí para hacer la obra de Dios.
Ahora dicen que Dios es el creador, entonces la obra de Dios sería la creación.
Cuando se nos dan facultades creativas, debemos ponernos manos a la obra y
empezar a crear, porque somos muy capaces de hacerlo.
Muchas personas tienen la idea de que tendrán éxito si se fijan una meta,
la escriben en una tarjeta y trabajan lo más duro posible.
No van a ir a ninguna parte. Subirán y bajarán hasta que se cansen de subir
y bajar; entonces se darán por vencidos y se nivelarán donde están, y esa es
la forma en que vivirán el resto de sus vidas. Tome los gimnasios y centros
de entrenamiento. Las personas que los poseen han ganado millones
vendiendo membresías. Saben que cuando una persona compra la membresía
de un año, puede ir por dos o tres semanas; entonces dejarán de ir.
Eso es porque la persona nunca cambió su paradigma. Quieren cambiar
su cuerpo, pero no quieren cambiar lo que controla el cuerpo. El cuerpo es el
instrumento de la mente: reflejará las operaciones de la mente, ya sean
automáticas o elegidas consciente y deliberadamente.
Si comprende las leyes y está trabajando en armonía con ellas, aún
tendrá que trabajar para alcanzar su objetivo: no será solo un paseo por el
parque, sino que será un muy buen viaje. Vas a disfrutarlo, y vas a seguir
adelante.
Pero comprenda que avanzar significa que está cambiando el paradigma.
Quieres cambiar los resultados, pero los resultados no son más que la
manifestación de tus acciones. Tus acciones son causadas por el paradigma,
no por cuánto sabes. La gente sabe cómo hacerlo mejor, pero no lo hace.
Tenemos que cambiar el paradigma si vamos a alcanzar nuestras metas.
Es un absoluto imprescindible. Nadie que no tenga alguna comprensión del
paradigma disfrutará realmente de una vida exitosa y, curiosamente, no
mucha gente entiende el paradigma. A lo largo de los años, he descubierto
que muchas personas tienen mucho éxito, pero no entienden por qué. Han
construido un paradigma muy bueno, pero no tienen la satisfacción de saber
por qué lo están haciendo bien. Lo que tienen es intransferible: no se lo
pueden dar a nadie más.
Cuando comprende los paradigmas, comprende cómo se construyen y
cómo se pueden cambiar. Entonces te vas a las carreras, porque puedes
tomar el control de tu vida. He visto suceder cosas hermosas en la vida de
las personas cuando entienden estos principios.
No importa lo que sucedió en el pasado o por dónde empiezas.
Lo que importa es a dónde vas. Cuando comencé, tenía un mal historial de
trabajo y una mala actitud, sin nada a mi favor. Pero nada de eso
importaba Como dice la Biblia, “Que los muertos entierren a los muertos”. Ese es un
buen consejo para lidiar con el pasado.
En primer lugar, debe tener en cuenta que tiene un paradigma. Yo tengo uno, tú
tienes uno, y el paradigma dicta qué tan bien lo haré hoy, mañana y en el futuro
cercano. Si quiero hacerlo mejor de lo que he estado haciendo, tendré que cambiar los
paradigmas. Estoy en un proceso educativo constante de cambiar mi propio paradigma,
mejorarlo.
El paradigma es tu forma habitual de vivir. Parte de tu paradigma es muy bueno: te
sirve, es bueno para ti, es bueno para otras personas y está creando cosas buenas en
tu vida. Así que un paradigma no es todo negativo, es tanto positivo como negativo.
Quiero convertir más de las malas ideas que tengo en buenas ideas y mis malos hábitos
en buenos hábitos, así que trabajo en eso todos los días, y probablemente lo haré
hasta que muera.
Me fui por unos tres días con un par de amigos y trabajé en mi propósito. Determiné
que mi propósito es vivir y trabajar en un entorno próspero que fomente la productividad
y el placer para poder mejorar el servicio que brindo a mi familia, mi comunidad, mi
empresa, mi nación y, en última instancia, el mundo. Es uno de servicio.
Me tomó más de tres días darme cuenta de esto. Debes dedicar tiempo a trabajar
en tu propósito. Es tu razón para levantarte de la cama y te ayudará a tomar muchas
decisiones. La gente me ofrece grandes oportunidades, con las que podría ganar mucho
dinero. No estoy remotamente interesado en algunos de ellos, porque están fuera de
propósito.
Marshall Fields dijo: “Los bienes raíces son la forma mejor y más segura de hacerse
rico”. No estoy necesariamente de acuerdo con eso. Se gana mucho dinero en bienes
raíces, pero no estoy ni remotamente interesado en bienes raíces. Eso estaría fuera de
lugar para mí.
Mi propósito es lo que estoy haciendo: vivir y trabajar en un entorno próspero que
fomente la productividad y el placer para poder mejorar el servicio que presto a mi
familia, mi empresa, mi comunidad, mi nación y, en definitiva, el mundo. Eso es lo que
hago. Lo hago todos los días, desde temprano en la mañana hasta temprano en la
noche.
Si no ha encontrado su propósito, le recomendaría reservar de diez a quince
minutos todas las mañanas. Coloque un bolígrafo y una libreta en algún lugar donde
puedes sentarte tranquilamente. Si bebe café, prepárese una taza de café, vaya a su
lugar, siéntese allí y pregúntese: "¿Qué me encanta hacer?"
Creo que todos estamos programados para hacer algo grandioso con nuestras vidas.
Se nos ha dado un enorme talento y habilidad, más allá del alcance de nuestra
imaginación. Pero si no encontramos nuestro propósito, no usaremos esta habilidad.
Podríamos terminar corriendo de una empresa exitosa a otra, sintiéndonos constantemente
frustrados, porque nunca es lo que queríamos y no obtenemos suficiente satisfacción de
ello.
Earl Nightingale dijo: “Uno no va a trabajar por dinero. Vas a trabajar por satisfacción.
Brinda servicio para ganar dinero”. Si tiene un propósito, obtendrá una gran satisfacción
de cómo pasa sus días.
Lo hago, porque todo lo que hago es a propósito.
Puede preguntarse si su propósito se crea o se descubre. Creo que se descubre.
Una vez vi a una mujer que estaba siendo entrevistada en la televisión. Había sido
bailarina en un coro en Las Vegas y dijo: “Sabía que no era lo suficientemente buena
bailarina para ser una estrella, así que renuncié. Me encantaba hornear pasteles, así que
me mudé a Francia y conseguí trabajo en algunas de las mejores pastelerías de Francia”.
Se convirtió en una de las mejores pasteleras del mundo.
En este punto, puede estar pensando: “Pero no puedo ganar dinero haciendo lo que
amo”. No importa si estás ganando dinero si amas lo que haces. Lo que importa es, ¿te
encanta?
Earl Nightingale también solía decir que las riquezas vienen en dos formas: tangibles
y lo que él llama “psíquicas”. El ingreso psíquico es la satisfacción que obtienes de la
forma en que pasas tus días. El ingreso material, por supuesto, es la cantidad de dinero
que ganas. Todo se basa en la ley de compensación, lo que Earl llamó la fórmula. Los
ingresos que gana están en relación directa con la necesidad de lo que hace, su capacidad
para hacerlo y la dificultad de reemplazarlo. Tiene que haber una tremenda necesidad por
lo que estás haciendo, por lo que te volverás muy bueno en eso y será muy difícil
reemplazarlo.
Capítulo cuatro
Paradigmas y Cibernética
Configuración de su sistema de control para lograr lo deseado
Resultados
Permítanme pasar a la relación de los paradigmas con la cibernética. Son
muy similares. La cibernética fue descubierta durante la Segunda Guerra
Mundial por Norbert Weiner y Arturo Rosenbluth, matemático y médico
respectivamente. Es la ciencia del control y la comunicación en el animal y
algunas máquinas.
La mejor forma de entender el mecanismo cibernético es con tu
termostato. Ajustarás el termostato de tu hogar para controlar la temperatura
de la casa, digamos, a setenta grados. Vivo en el norte, donde hace mucho
frío en invierno. Podrías estar sentado y de repente sentir una corriente de
aire frío alrededor de tus pies, y la casa está fría. Vas a mirar ese termostato
y la temperatura ha bajado a sesenta y seis grados, y te preguntas qué
pasa. Encuentras que alguien dejó la puerta abierta.
Un mensaje va del termostato al horno. Se enciende un fuego, se
enciende el ventilador, y sopla calor dentro de la casa hasta que el
termostato sube a setenta grados, y luego lo apaga todo.
El piloto automático del avión es un mecanismo cibernético. Cuando el
avión abandone su punto de origen, el piloto encenderá el piloto automático,
es decir, el mecanismo cibernético. Ahora podría volver y cenar contigo. No
lo hace, pero podría, porque el piloto automático está pilotando el avión. El
avión puede ser golpeado por alguna turbulencia inesperada que lo desvíe
de su rumbo. El mecanismo cibernético interviene y lo devuelve al rumbo.
Siempre es cuestión de corregir y volver a encaminar el avión. A
El cirujano plástico llamado Maxwell Maltz aplicó este concepto a la mente en un
libro que publicó en 1960 llamado PsychoCybernetics.
Un mecanismo psicológico Un
paradigma es como un mecanismo cibernético. Supongamos que una persona
tiene setenta libras de sobrepeso y quiere perder peso. Tienen que seguir una dieta.
Comienzan con la dieta y, por supuesto, la siguen. Pierden cinco libras, luego
siete, luego diez.
Luego, la persona comienza a comer la comida que se supone que no debe
comer. ¿Qué pasó? El paradigma se activó y los llevó de vuelta a su curso
habitual. Una dieta es el comienzo de escribir un nuevo paradigma, pero la gente
no lo ve de esa manera. Debido a que no saben cómo escribir un nuevo
paradigma, no entienden realmente la fuerza a la que se enfrentan cuando
intentan cambiar sus hábitos alimenticios. Nueve de cada diez fallan.
Es por eso que la gente sigue yendo y viniendo de las dietas. Cuando
comienzan a perder peso, vuelven a su curso habitual y seguirán comiendo
hasta que vuelvan a tener setenta libras de sobrepeso. El paradigma funciona
exactamente igual que el termostato o el piloto automático. Controla tus patrones
de comportamiento. Controla lo que comes, tu ejercicio o lo que sea que estés
haciendo.
Esa persona tiene que entender cómo el paradigma controla lo que come.
Es por eso que las dietas no funcionan: las personas no entienden que están
siendo controladas por este programa y su mente subconsciente.
Están tratando de luchar contra el programa sin entender lo que están luchando.
Están lidiando con un enemigo invisible, y eso es muy difícil.
Cuando las personas comienzan a comprender cómo funciona su mente,
pueden comenzar a avanzar, porque se han dado cuenta de algo sobre el enemigo.
El enemigo es el paradigma. Cuando no entienden ese hecho, sienten que están
fallando, porque no están haciendo lo que quieren hacer. Se dan a sí mismos
una orden, pero no pueden seguirla.
Comprender los paradigmas
La disciplina es una gran parte de la solución. La disciplina es la capacidad de
darte a ti mismo una orden y seguirla. Pero para que una persona tenga éxito en
disciplinarse a sí mismos, tienen que entender con qué están trabajando. Tienen que
entender qué son los paradigmas y qué están haciendo.
Si no lo hacen, están en problemas, porque están luchando contra un enemigo invisible.
El rey Salomón dijo: “Con todos tus bienes, adquiere inteligencia” (Proverbios 4:7).
La comprensión es lo opuesto a la duda y la preocupación. Comprender cómo nos
controlan los paradigmas cambia el juego por completo.
He avanzado mucho más desde que empecé a entender por qué había cambiado.
Cuando vivía en Inglaterra, me iba muy bien, pero no sabía por qué. Estaba
inconscientemente confiado. Pregunté: "¿Qué pasó?" No creía en un Dios caprichoso en
una nube que decía: "Deja que Bob tenga su turno".
Yo no creía en la suerte. Voltaire dijo: “La suerte es una palabra que inventamos para
expresar los efectos de causas desconocidas”, así que no creía que Dios me hubiera
elegido para tener suerte. Quería saber qué diablos pasó. ¿Por qué pasé de perder,
perder y perder hasta los veintiséis años y luego, de repente, tuve un éxito tremendo casi
de la noche a la mañana?
Cuando una persona entiende qué es un paradigma y cómo lo está controlando, se
pondrá a dieta y comenzará a comer adecuadamente. Van a empezar a controlar su
cuerpo, porque ven el cuerpo como un instrumento de la mente: obedece a las operaciones
de la mente. En su libro As a Man Thinketh, James Allen escribió. “El cuerpo es un
instrumento delicado y plástico, que responde rápidamente a los pensamientos que lo
impresionan, y los hábitos de pensamiento producirán sus propios efectos, buenos o
malos, sobre él”.
Si no entiendes estos principios, te será difícil tomar el control y disciplinarte, porque
ni siquiera sabes contra lo que estás peleando. Cuando entiendes lo que estás peleando,
usando una combinación de disciplina y deseo, vas a ganar.
polaridades
Extiende tu mano izquierda y extiende tu mano derecha. La mano izquierda es un lado; la
mano derecha es la otra. Hay una ley llamada la ley de la polaridad. Es la ley de los
opuestos. Todo tiene un opuesto: izquierda, derecha; caliente, frío; arriba abajo; En fuera.
Digamos que la izquierda es lo negativo: la ignorancia. En el lado derecho está el positivo:
el conocimiento. En el nivel consciente, la ignorancia es la causa de la duda y la
preocupación. Cuando internalizas estas cosas, configuras
una vibración llamada miedo. Cuando se expresa ese miedo, y debe expresarse
porque fue impreso por la mente, se expresa en el cuerpo como ansiedad. Eso es la
ansiedad: la expresión del miedo causado por la duda y la preocupación. Y la duda y
la preocupación fueron causadas por la ignorancia.
Por otro lado está la comprensión. ¿Cómo obtienes comprensión?
Sólo hay una manera: a través del estudio. Tienes que estudiar. La comprensión
conduce a la fe, que es lo opuesto al miedo. La fe se expresa en bienestar más que
en ansiedad. El bienestar se expresa como júbilo.
Ahora, entre la duda y la preocupación por un lado y la comprensión por el otro,
está . simplemente es Nada es malo o bueno, correcto o incorrecto, excepto que
nuestro pensamiento lo haga así. Todo simplemente es. Nuestro pensamiento
determina si es bueno o malo.
Creo que la gente debería estudiar. Es de vital importancia estudiar. Pero si no
tenemos un propósito y no tenemos metas, no estudiaremos; salimos de la escuela y
pensamos que hemos terminado. Desafortunadamente, la escuela realmente nunca
nos enseñó cómo estudiar o qué estudiar.
Dicho todo esto, ¿qué cosas funcionarán realmente para grabar el nuevo
paradigma en el subconsciente? Para empezar, creo que una persona tiene que
entender que el desarrollo personal no tiene una meta. Estamos acostumbrados a
estudiar algo y terminarlo. Nunca terminas de estudiar este material. Nunca te
conocerás a ti mismo tan bien como quisieras. Siempre vas a estar cambiando el
paradigma. Tus resultados están siempre en construcción.
Crecimiento y malestar
Estoy en el punto en el que sé que cuando busco algo nuevo, me va a causar
incomodidad. Si me siento realmente cómodo, sé que no se está experimentando
ningún crecimiento; Estoy atascado. La diferencia es entender lo que está pasando
versus no entender. Cuando intentas cambiar un paradigma, no sabes lo que estás
haciendo. Las probabilidades de que vayas a perder son bastante buenas; el
paradigma va a ganar cada vez. Es por eso que la gente tiene problemas con las
dietas o con el ahorro de dinero o con salir adelante en el trabajo: no entienden cómo
se forma el paradigma y cómo los está controlando. Cuando entiendes, nunca dejas
de cambiar el paradigma. El potencial es la perfección. Conozco a un par de personas
que se creen perfectas.
—es bastante aburrido estar cerca—pero nadie lo es. Sin embargo, el potencial es
la perfección.
Podrá cruzar la piscina un día. Sigo hundiéndome, pero la posibilidad está ahí.
Todo es posible.
Cuando realmente entiendes ese concepto, siempre vas a pasar a una situación
incómoda, porque siempre vas a donde nunca has estado. Estás mejorando tu
situación. Tienes que saber que eso es lo que está pasando. Cuando persigo nuevas
metas, sé que va a causar cierta incomodidad, y puedes sentirte muy tentado. Podría
sentarme y descansar hasta el final de mi vida. Podría estar muy cómodo, pero
probablemente sería muy miserable, porque soy demasiado consciente de lo que
está sucediendo. Tengo que seguir creciendo.
El desarrollo personal es un proceso interminable. En realidad, el desarrollo
personal es un tema relativamente nuevo. Earl Nightingale y Lloyd Conant lo
convirtieron en un negocio y ayudaron a las personas a ser más conscientes de él.
Otras personas estaban jugando en esta área, pero Earl y Lloyd adoptaron un
enfoque muy serio y profesional. Atrajeron a mucha gente buena y construyeron una
empresa. La gente empezó a utilizar el material de la forma en que estaba destinado
a ser utilizado, y empezaron a ver que estas ideas funcionan tanto en empresas
como individualmente. Así que las empresas comenzaron a utilizar este material.
Cuando estuve en NightingaleConant, de 1968 a 1973, no se hablaba de
paradigmas. Nos referimos a ellos como condicionamiento subconsciente, pero
realmente no entendimos su profundidad o cómo se formó. Después de que Joel
Barker publicara su libro Paradigms en 1993, nos metimos de lleno en el concepto.
Earl Nightingale también habló sobre el “descontento constructivo”: siempre
estás queriendo mejorar, siempre avanzando. Es constructivo, pero al mismo tiempo
es descontento. No vas a estar cómodo, pero estás feliz porque sabes que estás
haciendo lo que quieres y vas en la dirección que quieres ir.
Piensa desde el Estado Deseado
Cuando las personas piensan en el intelecto, piensan en las funciones lógicas del
cerebro izquierdo, mientras que las cosas que impresionan al subconsciente están
más orientadas hacia el cerebro derecho: afirmar una meta con gran emoción y
visualizando creativamente ese objetivo de manera que lo imprima visualmente en la mente.
Estas prácticas ayudan a cambiar el paradigma.
Neville destacó este punto en su libro El poder de la conciencia. Habló de “pensar desde el
estado deseado”, en otras palabras, verse a sí mismo ya allí. Esa es tu imaginación; esa es la
función del lado derecho del cerebro.
Pensar desde el estado deseado es vivir creativamente. La ignorancia de esta habilidad de pensar
desde el final es esclavitud.
Las personas que están muy orientadas al lado izquierdo del cerebro, que estudiaron
derecho, ingeniería o contabilidad, a veces tienen dificultades con esta práctica, pero cuando lo
consiguen, realmente lo consiguen, porque las personas del lado izquierdo del cerebro son muy decididas.
Las personas del lado derecho del cerebro son más fluidas. Operan más a través de vibraciones
y sentimientos que a través de conceptos.
Una cosa que impide que muchas personas cambien su paradigma es la lógica. Pero eche
un vistazo a todos los grandes avances, como Hillary escalando el Monte Everest con Tenzing
Norgay. Nadie había hecho eso antes. Hillary tuvo que hacer lo que era totalmente ilógico. Lo
mismo con los hermanos Wright: era totalmente ilógico creer que algo más pesado que el aire se
iba a quedar ahí arriba. Eran totalmente ilógicos, pero lo hicieron. En cada gran avance, la gente
desafió la lógica.
La gente dice, tienes que ser realista. No, no seas realista. Cuando me estoy fijando una
meta, no quiero ser realista. Quiero ser totalmente ilógico. De vez en cuando tengo problemas
con la gente de nuestra propia empresa (aunque se están acostumbrando más a mí). Si algo es
práctico, no quiero hacerlo. Quiero hacer algo totalmente ilógico.
Para mí sentarme en mi guarida y decir: “Voy a construir una empresa que opere en todo el
mundo”, eso fue totalmente ridículo. No tenía suficiente dinero para hacer algo así. No tenía idea
de lo que iba a tener que hacer, pero sabía que lo haría.
Hillary sabía que llegaría a la cima del Everest. Fue en 1951 y fracasó. Volvió a ir en 1952 y
fracasó. Tuvo que volver en 1953. Durante tres años seguidos lo hizo. El tipo era un apicultor de
Auckland, Nueva Zelanda. La gente había muerto allí arriba. Cuando dijo: “Voy a volver otra vez”
en 1952, todos se enfadaron con él: “No tienes derecho a hacer eso. Tienes responsabilidades.
El padre de los hermanos Wright era obispo en una denominación muy conservadora y les dijo
que iban a arder en el infierno por sugerir que podían volar.
Todos los grandes avances han sido totalmente ilógicos. Si realmente
quieres vivir a la altura de tu potencial y no estás tratando de complacer a todos
y a su hermano, establece algunas metas que te asusten. Si sabes que vas allí
y estás trabajando en armonía con la ley, sabes que tiene que suceder. No
siempre sucede cuando lo deseas o cuando crees que lo necesitas. Pero sabes
que tiene que ser así, porque estás en esa frecuencia.
Cuando entras en la frecuencia del bien que deseas, tiene que convertirse
en tu nuevo hogar; se convierte en el lugar desde el que ves el mundo. Eres el
único que ha ido allí, no tu esposa, ni tus hijos, ni el vecino de al lado, ni las
personas con las que trabajas. En consecuencia, vas a ver cosas que ellos no
pueden ver.
Si realmente va a estar a la altura de su potencial, tiene que salir y apostar
realmente por usted. Estoy firmemente convencido de que tenemos el potencial
para hacer cualquier cosa que nuestra imaginación nos muestre. Como dijo
Neville: “La imaginación resuelta, pensando desde el final, es el comienzo de
todos los milagros”.
No hay tal cosa como los milagros. Todo sucede por ley. Sólo hay cosas
que suceden que no entendemos. Si aceptas la idea de los milagros o de la
suerte, o de un Dios caprichoso que bendice a unos y maldice a otros, no volarás
a ninguna parte.
Capítulo cinco
Cómo sus creencias afectan su paradigma
La mayoría de la gente piensa en las creencias como algo estático e inherente. En otra
palabras, “Esto es lo que creo, y lo creo de por vida. Es quien soy.” En el contexto político,
la gente dice: "Soy liberal o soy conservador". En cuanto a su personalidad, dirán: "Soy de
buenos modales" o "Soy una persona tipo A". “Creo que los hombres son buenos en X y
las mujeres son buenas en Y”.
Así es la mayoría de las personas, pero no es como deberían ser, porque nuestras
creencias dan forma a todo en nuestra vida. Nuestro paradigma se compone de nuestras
creencias. Desafortunadamente, muchas de las creencias con las que operamos son
absolutamente ridículas. No tienen ningún fundamento en absoluto. A la luz de la verdad,
simplemente desaparecerían. Además, no somos nosotros quienes originamos la mayoría
de estas creencias tontas.
Creencia es una palabra muy interesante. Jugó un papel importante en mi vida. Estaba
tratando de averiguar por qué estaba ganando. No pude lograr que nadie me respondiera,
que realmente me dijera por qué. Sabía que sólo había dos fuentes de referencia: la ciencia
y la teología. Me metí en las diversas religiones. Leo el Corán, la Torá, la Biblia, el Libro de
Mormón. No importaba a dónde fuera; en todas partes decía, tienes que creer. William
James en Harvard, allá por 1900, dijo: “Cree, y tu creencia creará el hecho”. Pero me
pregunté: “¿Cómo lo crees?”.
No sabía la respuesta a eso. ¿Cómo cambias tu creencia? ¿Por qué creo lo que creo?
Una cosa llevó a la otra. Esto continuó durante algunos años. No pude resolverlo y no pude
hacer que nadie respondiera.
Creencia y reevaluación
Un día estaba comiendo con Val Vanderwall, quien fue mi mentor. En una conversación
ociosa, dijo: “Nuestro sistema de creencias se basa en nuestra evaluación de algo. Y
con frecuencia, si reevaluamos una situación, nuestra creencia sobre esa situación
cambiará”.
Cuando dijo eso, fue como si me hubieran sonado campanas en la cabeza y dije:
“Espera un momento. ¿Que acabas de decir?"
Le pedí que lo repitiera: “Nuestro sistema de creencias se basa en nuestra
evaluación de algo. Y con frecuencia, si reevaluamos una situación, nuestra creencia
sobre esa situación cambiará”.
De repente me di cuenta. De repente, supe por qué y cómo había cambiado mi
vida. Sabía todo lo que estaba buscando. Con todos los discos que toqué y los libros
que leí, estaría tomando notas.
Lo que estuve haciendo todo ese tiempo fue reevaluar quién era yo, porque toda esa
información que estos oradores y autores compartían era sobre mí.
Estaban hablando de la verdad sobre mí. Estaba reevaluando quién era yo. Pasé de
pensar que no tenía nada a mi favor, que era un personaje inútil y que dejaba que mi
pasado dictara mi futuro, a decidir que eso tenía que cambiar.
Este proceso lleva tiempo. No tiene que tomar tanto tiempo como me tomó a mí,
porque tomó años aprender lo que les estoy explicando. Aunque entonces no me di
cuenta, estaba cambiando mi sistema de creencias al escuchar esas grabaciones una
y otra vez.
Es la repetición lo que altera lo que sucede dentro de ti. Es la repetición de
escuchar una idea lo que cambiará tu sistema de creencias. Cuando sigues escuchando
una grabación que te dice lo bueno que eres, y luego lo respaldas con todo tipo de
pruebas de por qué eres tan bueno, y lo escuchas una y otra vez, vas a empezar a
creerlo. .
Si le dices una mentira a una persona con la suficiente frecuencia, la creerá. Hitler
lo demostró. Dijo mentiras a la gente, pero fue tan persuasivo que le creyeron. Algunos
todavía creen que lo que estaba haciendo estaba bien. Por ridículo que sea, lo creen
porque lo escucharon muy a menudo.
Cuando sigues escuchando lo mismo una y otra vez, vas a empezar a creerlo.
Escuchamos que si no vas a la escuela, no puedes ganar. Eso no es cierto. Mucha
gente que nunca ha visto el interior de una escuela ha construido grandes
organizaciones. Nos enseñaron que si no vas a la iglesia, eres un pecador. Eso
tampoco es cierto.
¿Por qué creemos esto? Porque lo escuchamos una y otra vez cuando éramos
niños. Fue programado en nuestra mente. Como resultado de escuchar eso repetidamente
cuando éramos niños pequeños, desarrollamos esa creencia. Lo creemos desde el
momento en que nos damos cuenta de algo; es parte de nuestro sistema de creencias.
Yo personalmente he llegado a la conclusión de que tenemos que seguir reevaluando
nuestras creencias. Cada vez que crees que no puedes hacer algo debido a cualquier
condición o circunstancia, no se sostiene.
Tienes que llegar al punto en el que creas que hay algo absolutamente magnífico en ti.
Hay algo tan increíble en nosotros, y podemos estudiarlo toda nuestra vida. Como señaló
Earl Nightingale, nuestro cuerpo está cambiando a un ritmo de unos cuarenta millones
de células por segundo. Estamos en una constante evolución de cambio.
Nuestro sistema de creencias puede cambiar, y está cambiando todo el tiempo. Este
cambio debería implicar un crecimiento ascendente, una expansión y una expresión más
completa, porque somos seres espirituales y el espíritu siempre se mueve hacia la
expansión y una expresión más completa. Siempre es por el bien mayor, no solo a
veces: siempre. Cuando podamos entender eso y aferrarnos a ello, nuestras vidas
seguirán mejorando cada vez más.
Creencia consciente versus inconsciente
A veces, cuando están estableciendo un nuevo sistema de creencias, las personas
pueden perder la confianza cuando no ven los resultados que desean de inmediato.
¿Qué deben hacer las personas cuando su nueva visión de sí mismas no se refleja en
los resultados a corto plazo?
Para comprender este problema, debes darte cuenta de que aquí estás tratando con
dos niveles: un nivel consciente y un nivel subconsciente. Puedes creer algo en un nivel
consciente y no creerlo en un nivel subconsciente. Digamos que ha leído Piense y
hágase rico y cree que puede ganar más dinero, pero no lo está ganando. ¿Dónde está
el problema? La creencia está sólo en tu intelecto. Necesita ser integrado en la mente
subjetiva. Hasta que no se plante correctamente en el subconsciente, no se va a
manifestar en los resultados.
Es bastante confuso para las personas cuando saben que creen en algo, pero no
aparece en su vida. Es una cuestión de praxis, que es la integración de la creencia con
el comportamiento. Cuando dices, “Creo que puedo hacer
algo”, y no lo estás haciendo, es porque esa creencia no se ha plantado correctamente
en la mente subconsciente. A través de la repetición y la visualización adecuada, se
plantará en el subconsciente; luego comienza a manifestarse como resultados.
El autor George Leonard escribió un libro llamado Mastery. Dijo que si te quedas
con algo, estarás estancado por un tiempo. Pero te quedas con la práctica día tras día,
un día de repente darás un salto y te encontrarás en un nuevo nivel. Pero no sabes
cuándo va a llegar ese salto. Ahí es cuando das un salto cuántico.
Cuando interviene ese dominio, hay un cambio enorme en los resultados. Ocurre
tan rápido que es casi un shock. Cuando mis ingresos pasaron de $4,000 al año a
$14,500 al mes, fue un shock para todo mi sistema. Esto sucede cuando dominas algo.
Este proceso probablemente lleva un tiempo diferente con cada persona.
Creo que depende de la repetición: con qué frecuencia lo estudies y cuán profundamente
lo estudies. La repetición es la clave.
La gente va a seminarios, lee libros y escucha grabaciones, pero los resultados no
llegan, por lo que se sienten muy frustrados. No entienden que suceden todo tipo de
cosas que no pueden ver. Somos parte de un mundo invisible; de hecho, la mayor parte
es lo invisible. Nada se crea ni se destruye, y la ley de vibración decreta que todo vibra
en diferentes frecuencias. Cada frecuencia está conectada con la de arriba y la de
abajo, por lo que todo está conectado. Lo invisible y lo visible están conectados.
El espíritu se manifiesta a través de su polo opuesto. El espíritu está trabajando dentro
y a través del cuerpo físico en el que estás viviendo.
El individuo promedio no sabe nada de eso. O lo creen intelectualmente, pero no
está sucediendo, y eso genera frustración. Muy a menudo, la gente se da por vencida
cuando sólo pueden estar, como dijo Napoleón Hill, a tres pulgadas de la riqueza.
En su libro You 2, Price Pritchett escribió: “La ausencia de evidencia no es evidencia
de ausencia”. Luego agregó: "Piense en un iceberg, donde solo ve la punta de lo que
realmente está allí, pero igual de reales y fuera de la vista son fuentes invisibles listas
para marcar una gran diferencia en lo que puede lograr".
Estamos lidiando con algo que no entendemos, con algo que es absolutamente
extraño para la mente de la mayoría de las personas. La media
individuo sabe muy poco acerca de sí mismo. No aprendemos nada sobre nosotros
mismos en la escuela. Incluso si has estudiado psicología, nunca llegas realmente a la
esencia de quién eres. Todo queda en un nivel intelectual; nunca entras en la esencia
espiritual de quiénes somos, lo cual es bastante triste.
Cuando escuché por primera vez estas ideas, pensé que eran tontas. Pero el
hombre que lo explicó dijo: “Mi camino está funcionando y el tuyo no. ¿Por qué no
intentas a mi manera? Era feliz, saludable y rico. Yo era infeliz, enfermo y quebrado.
Él dijo: “Haz exactamente lo que te digo hasta que descubras que te estoy mintiendo
o que no sé de lo que estoy hablando”.
Pensé que tenía sentido, así que seguí su consejo. Inmediatamente todo empezó
a cambiar. Por supuesto, empezó a cambiar mi sistema de creencias. Wernher von
Braun, considerado por muchos como el padre del programa espacial, dijo que años
de estudio de los espectaculares misterios del cosmos lo llevaron a creer firmemente
en la existencia de Dios. Dijo que las leyes naturales de este universo son tan precisas
que no tenemos ninguna dificultad para construir naves espaciales, enviar personas a
la luna y cronometrar el alunizaje en una fracción de segundo. Dijo que estas leyes
deben haber sido establecidas por alguien.
Me gusta eso. He adoptado eso. El truco es entender las leyes lo mejor que
puedas. Entonces comenzarás a comprender cómo suceden las cosas y cómo pueden
suceder las cosas.
Superar la distracción
Como mencioné, cuando el presidente Kennedy le preguntó a von Braun qué se
necesitaría para construir un cohete para ir a la luna y regresar a salvo, él dijo: "La
voluntad de hacerlo". La voluntad es una de las facultades superiores y nos da la
capacidad de mantener una idea en la pantalla de nuestra mente con exclusión de
todas las distracciones externas.
Desafortunadamente, estamos distraídos todo el tiempo. Ves, oyes, hueles, gustas
y tocas, pero esos cinco sentidos simplemente te conectan con el mundo material
exterior. Siempre hay actividad ahí afuera, y siempre está rogando por tu atención
consciente. Con el uso adecuado de la voluntad, cierras esos cinco sentidos y pones
tu mente en perfecta armonía con la idea en la que estás enfocado. Eso es lo que
hacen los grandes golfistas. Eso es
lo que hacen los grandes atletas. Eso es lo que hacen todos los grandes vendedores. Eso es lo
que hacen todas las personas que califican como excelentes en cualquier cosa. Ellos se enfocan.
Se adhieren a su tejido. No deambulan por todos lados.
Como seres humanos, compartimos el aspecto espiritual con el resto de la creación; de
hecho, el espíritu está 100 por ciento presente en todos los lugares al mismo tiempo. El espíritu
es omnipresente. Todo es espíritu. No hay nada que no sea espíritu. Se manifiesta en muchas
formas, pero siempre se manifiesta en su polo opuesto, la forma física.
Aunque compartimos espíritu con todo lo que existe, lo que nos separa del resto es que
somos conscientes de nosotros mismos. Somos conscientes de nosotros mismos. Se nos han
dado cualidades intelectuales con las que ninguna otra forma de vida, hasta donde sabemos, ha
sido bendecida: percepción, voluntad, razón, imaginación, memoria e intuición.
Cada una de estas facultades se puede desarrollar en un grado tremendo.
Se reflejan en los resultados; por sus frutos los conoceréis. Como he dicho, la mayoría de la
gente sabe muy poco acerca de estas facultades superiores. Solo se guían por lo que pueden
ver a través de sus sentidos. Si vas a dejar que el mundo físico te controle, nunca tendrás nada
más de lo que ya tienes.
Todo en nuestro mundo material está en la tercera dimensión. Quieres ir más allá de eso
hacia tus facultades superiores. Si somos creados a la imagen de Dios, entonces todo es posible.
Podemos hacer todas las cosas. No somos Dios, pero somos una expresión de Dios, y se puede
hacer un gran trabajo. Por eso Jesús dijo que cosas aún mayores son capaces de hacer (Juan
14:12). Estás tratando con un poder infinito; no hay fin a lo que puede hacer. No importa lo que
sea o lo bueno que sea, aún puede mejorar. Creo que mejor es una palabra tan hermosa.
Las emociones están en el asiento del conductor, nos hacen mover, pero el intelecto dicta
lo que entra en la mente emocional. La mente consciente razona tanto inductivamente como
deductivamente. La mente subconsciente solo razona deductivamente; en otras palabras, sólo
puede aceptar; no puede rechazar.
Tu mente consciente tiene una capacidad de razonamiento inductivo, que te permite elegir lo
que está pasando en tu mente subconsciente. Si no está utilizando esa facultad de razonamiento
inductivo, si simplemente está dormido, lo que sea que esté sucediendo a su alrededor irá
directamente a su mente subconsciente y controlará su comportamiento.
Cómo funciona la publicidad
Así es como funciona la publicidad. Deja a un lado tu factor de razonamiento
inductivo y abre tu mente subconsciente, por lo que te vuelves totalmente
deductivo y haces lo que te dicen. Puede dejar de lado el factor de razonamiento
inductivo de una persona a través de la fascinación, el acuerdo o la conmoción.
Así es como la gente se hipnotiza. La hipnosis no es más que sugestión. La
publicidad es una forma de hipnosis. Te fascinan, te sorprenden, dejan de lado
tu factor de razonamiento inductivo y ¡bang! Una imagen sale y va directo a tu
mente subconsciente. No hacen esto una vez. No venden un comercial;
venden un vuelo de comerciales. Estos se repiten una y otra vez, y el mensaje
llega directamente a la mente subconsciente. Eventualmente te encuentras
haciendo lo que ellos quieren que hagas y te preguntas por qué. Es porque la
idea ha sido plantada en tu mente.
Los anunciantes saben que si le lanzan una idea con la suficiente frecuencia cuando
se encuentra en un determinado estado mental, actuará de acuerdo con esa idea. Te
ponen en un estado de fascinación. Estás viendo una película: alguien se acerca
sigilosamente detrás de alguien. Tu corazón late con fuerza, estás al borde de la silla y,
de repente, ¡bang! Hay un hermoso auto frente a ti.
No hacen eso una vez. Lo hacen una y otra vez. Entonces te preguntas por qué estás
deambulando por la sala de exposición de automóviles.
La mente subconsciente es donde sucede todo. Es lo que nos hace pasar a la
acción. Sin embargo, la mente consciente puede dictar lo que pasa al subconsciente.
Tienes que pensar, pero la mayoría de la gente no lo hace.
Puedes darte cuenta de que no están pensando observándolos.
Respuesta versus reacción El Dr.
Viktor Frankl escribió un libro maravilloso llamado El hombre en busca de sentido. Era
un psiquiatra judío en un campo de concentración durante la Segunda Guerra Mundial y
escribió: “Independientemente del abuso intelectual o físico al que estés sujeto, nadie
puede hacerte pensar algo que no quieras pensar”. Señaló que en cada situación, hay
un espacio entre la situación y tu respuesta a ella. Ahora bien, ese espacio puede ser un
milisegundo, pero en él tienes la capacidad de elegir si vas a reaccionar o responder.
Si simplemente reacciona, ha cedido su capacidad de elegir a la circunstancia oa la
persona. Le has dado tu poder a lo que sea a lo que estás reaccionando. Si dices algo que me
molesta, entonces te he dado mi poder; He permitido que me molestes. Dejé de pensar y me
encontré con mi mente subconsciente.
Si estoy respondiendo, miro y pienso: “Me pregunto por qué dijo eso.
Pero no es cierto en absoluto. En realidad soy una persona muy agradable. No tengo que
aceptar eso”. Entonces no estás reaccionando, estás respondiendo. Eso es lo que la gente
tiene que aprender a hacer. Se lo he enseñado a los niños. Cambió sus vidas, porque estaban
reaccionando a lo que estaba pasando. Les digo, “Cuando están reaccionando, todo lo que
está fuera de ustedes está en control de ustedes; no tienes el control de ti mismo en absoluto”.
Para ser capaz de responder en lugar de reaccionar, en primer lugar, tienes que darte
cuenta de que estás reaccionando . Puedes reaccionar tan rápido. Está esa expresión: "Ella
realmente sabe cómo presionar tus botones". Para que las personas respondan, deben pensar
y deben dejar de preocuparse por lo que piensen los demás. Si alguien te dice algo ofensivo,
podrías reaccionar ante eso. Ellos se enojan, tú te enojas de vuelta; me gritas, yo te grito.
Nadie va a ganar haciendo eso.
Cuando suceda algo así, deténgase y pregúntese, ¿por qué harían eso? Por qué dirían
eso? Todo nuestro sistema está estructurado de tal manera que nos hace reaccionar.
Estamos actuando por sugerencia todo el tiempo. Con todas estas tonterías, gritos, peleas
y disturbios, la gente está reaccionando entre sí; no están pensando. Luego tratamos de
sofocarlos con más de lo mismo.
Combatir el fuego con fuego no funcionará.
Tenemos que animar a la gente a que se detenga y piense, pero no nos enseñan a pensar
en la escuela. Pensar es una materia que se puede enseñar, al igual que aprender a escribir a
máquina oa tocar el piano. Puedes ser entrenado para usar tus facultades superiores, tus
poderes de razonamiento inductivo. Puedes decidir que vas a formar el hábito de responder en
lugar de reaccionar a lo que sucede afuera, y puedes hacerlo bien.
No te voy a decir que nunca reacciono, porque lo hago. Cuando lo hago, me doy cuenta
de que lo estoy haciendo y lo detengo. No puedes ganar cuando estás reaccionando.
Resolución de problemas
en papel Utilizo un par de técnicas cuando tengo un problema. En primer
lugar, lo escribiré en un papel, lo más claro que pueda. Después de
haberlo escrito, regresaré y eliminaré tantas palabras como pueda sin
perder la idea. Lo quiero para que si te diera el papel y tú lo leyeras,
verías el problema como yo lo veo.
Cuando haya planteado el problema de esa manera, iré y me sentaré en un lugar
diferente de la mesa. En mi casa, lo pondré en la mesa del comedor. Si estoy en mi
oficina, lo pondré en el centro de mi escritorio. Luego me sentaré en otro lugar y
preguntaré: "¿Cómo vería esto Earl Nightingale?". Intentaré mentalmente entrar en la
energía de Earl. ¿Cómo percibiría esto? ¿Cómo miraría él esto?
Después de haber jugado con la pregunta de esa manera, puedo sentarme en otro
lugar y preguntar: "¿Cómo vería Napoleón Hill esto?" Entonces puedo sentarme en otro
lugar y preguntar: "¿Cómo vería esto Andrew Carnegie?" Elegiré a media docena de
personas, tal vez Edison o Henry Ford, y me concentraré mentalmente en su energía.
Muy pronto lo estoy viendo de una manera totalmente diferente.
Ya he citado a mi difunto amigo Wayne Dyer: “Cuando cambias la forma en que
miras algo, lo que miras cambiará”. Eso está cambiando tu percepción de la situación.
Ahora eso es una cosa que hacer, y funciona a las mil maravillas.
A continuación, desea trabajar de lo alto a lo bajo. Venir de lo alto a lo bajo significa
pasar del espíritu al intelecto y al reino físico.
Trabaja siempre desde el espíritu hasta lo intelectual y lo físico. Si está trabajando con
electricidad, debe trabajar desde un potencial más alto a uno más bajo. Si intenta ir en
contra de esa ley, no obtendrá ningún uso de la electricidad.
El espíritu está en el nivel del pensamiento. Vienes de adentro hacia afuera, no de
afuera hacia adentro. No miras los resultados presentes y dejas que te controlen, como
hace la mayoría de la gente. Van de afuera hacia adentro y hacia arriba desde abajo.
Se enfocan en el problema, luego oran a un Dios invisible en una nube en algún lugar
para que lo arregle.
Somos seres espirituales, por lo que podemos entrar en nuestro ser espiritual, en el
mundo del pensamiento. El pensamiento es omnipresente; también lo es el espíritu.
Cuando viajaba a la luna, el Capitán Edgar Mitchell estaba haciendo ejercicios de
transferencia de pensamiento, que luego se escribieron en una revista de psicología.
Tus pensamientos son omnipresentes. Cuando estás pensando, estás
trabajando con un poder enorme. El pensamiento es la energía más potente que
existe: hace que el rayo láser parezca pequeño. Se parte del pensamiento a la
idea a la cosa. No se trabaja de afuera hacia adentro: se trabaja de adentro hacia afuera.
He estado haciendo esto durante mucho tiempo. Funciona a las mil maravillas.
Cuando trabajas en armonía con la ley, todo fluye maravillosamente. Cuando no
lo eres, no es hermoso. Es bastante duro.
Capítulo Seis
El paradigma del rendimiento energético
Permítanme ahora hablar sobre las formas de usar esta poderosa mente nuestra para
formar un paradigma para el rendimiento de potencia.
Una de las cualidades principales es una gran actitud. Como he dicho, mi mentor Earl
Nightingale llamó actitud la palabra mágica. ¿Cómo usa una persona la mente para desarrollar una
gran actitud? ¿Qué hábitos puedes practicar a diario para reforzarlo?
Estudio continuamente. Tengo libros en mi escritorio: Te tengo 2 de Price Pritchett; ¡Preguntar!
por Mark Victor Hansen y su esposa Crystal; Tú también puedes ser próspero de Robert Russell; El
poder de la conciencia de Neville; y Piense y hágase rico de Napoleón Hill. Siempre tengo libros en
mi escritorio.
Tengo los libros de Thomas Troward en mi porta libros. Si no te gusta el material de Troward,
quizás quieras echarle un vistazo. Earl Nightingale estaba leyendo las Conferencias de Edimburgo
sobre ciencia mental de Troward cuando lo visité en 1968. Le pregunté a Earl: "¿Debería leer esto?"
Él solo me miró y dijo: "Sí". Probablemente me tomó hasta 1970 entender lo que estaba leyendo;
Había leído una página, pero no sabía lo que había leído. De todos modos, es una información
fenomenal.
Mantengo mi actitud correcta estudiando constantemente. La única manera de mejorar es a
través del estudio. No hay otra manera. Estás tratando de obtener una mayor comprensión de quién
eres y tu relación con todo en el universo.
Además, trato continuamente de mejorar lo que estamos haciendo en nuestra empresa.
Siempre estoy queriendo aumentar nuestras ventas; Quiero vender más. Estoy trabajando con el
departamento de ventas sobre ideas de venta. Siempre estoy creando nuevos programas. En este
momento estoy creando una clase magistral sobre Naciste rico, que escribí en 1984. Empecé a
estudiar en 1961, así que había estado
estudié durante veintitrés años antes de escribirlo. Sus temas son todos geniales:
“Me and Money”; “Déjate llevar, déjate Dios”; "La ley de la vibración". Han pasado
más de treinta y seis años desde que escribí ese libro, pero puedo usar los mismos
temas, porque los entiendo mucho mejor y puedo profundizar mucho más.
Además, tienes que tener objetivos. Tienes que estar subiendo el listón para ti
mismo todo el tiempo, siendo consciente de que tu actitud determinará tu éxito o
fracaso. Entonces vas a seguir yendo en la dirección correcta.
Decisión, Visualización, Disciplina He aquí
algunas reglas básicas y sencillas: si las sigues, ganas; si las violas, pierdes. Hay
tres cosas en las que una persona debe fijarse absolutamente si realmente quiere
establecer una meta más alta e ir tras ella. La primera es la decisión. El segundo
es comprender la visualización y el tercero es disciplina. Así es como mantengo mi
actitud correcta y hago que las cosas avancen en la dirección correcta para mí y
para la empresa.
He mencionado a Neville más de una vez y, como muchas otras personas en
la industria del desarrollo personal, él y sus obras me han inspirado. Una de las
cosas que cambió mi actitud de negatividad a positividad es repetir una pregunta
suya justo antes de irme a la cama: ahora que mi sueño se ha cumplido, ¿cómo
me siento?
Trabajo en diferentes preguntas, diferentes sueños, todo el tiempo, y el
sentimiento es muy importante. No es cómo lo piensas; es como te sientes
No nos convertimos en lo que pensamos, pero nos convertimos en lo que sentimos,
porque pensar está en la mente consciente, sentir está en el subconsciente: ese
es el lado universal de nuestra personalidad. Implica visualización; hay que verlo
cumplido.
Tienes que trabajar desde el final, no hasta el final. Cuando lo ha hecho bien,
está en el camino correcto; es solo cuestión de tiempo hasta que tu meta se
manifieste en forma, porque ya la has logrado en tu intelecto y en tu mente
emocional. Nadie, por supuesto, sabe cuál es el período de gestación de una idea.
Ahí es donde entra la fe.
Quiero referirme a algunos otros aspectos de un paradigma de rendimiento de
potencia. La primera idea es, asumir la responsabilidad de cómo se siente y actúa.
La energía fluye a través de nosotros y depende de nosotros dirigirla de la forma que queramos.
desear.
Podríamos pensarlo de esta manera: Somos seres espirituales. No tenemos alma; somos
alma . El espíritu espera la dirección del alma. Por eso se nos dice: “Pide y se te dará”. Tienes
que construir la imagen de adónde quieres llegar. El espíritu siempre fluye hacia ya través de
nosotros, y tenemos que dirigirlo. El alma está siempre dirigiendo la energía que fluye hacia ya
través de ella.
Depende de nosotros. Dios no decide hacia dónde vamos; nosotros tomamos esas
decisiones. Dios hace la obra, pero nosotros decidimos; Dios hace todo el trabajo a través de
nosotros. Dios, que está en cada célula de nuestro ser, opera de manera lícita y ordenada.
Toma nuestra imagen y la voltea, y ahí es cuando comienza a tomar forma.
El segundo principio es, decide lo que quieres y actúa como si lo tuvieras.
Lo que quieres ya está aquí, si no en un estado, entonces en otro. La mayoría de la gente no
entiende eso. No entienden que nada se crea ni se destruye; todo ya está aquí. Es por eso que
Wernher von Braun le dijo al presidente Kennedy que todo lo que se requería para llevar a un
hombre a la luna era la voluntad de hacerlo. Las formas y medios para lograr nuestros objetivos
ya están aquí. Solo tenemos que ponernos en contacto con ellos. Cuando tomas una decisión,
el único requisito previo es, ¿la quieres?
Operando en frecuencias Está
operando en frecuencias. Visualiza una serie de líneas frente a ti, como en un bloc rayado.
Cada línea representa un nivel de vibración, o una frecuencia.
Si coloca una R en una línea hacia la parte inferior del bloc y dice: "Esa R representa los
resultados", ahí es donde se encuentra ahora. Ahora suba en la plataforma, hacia la parte
superior, y sobre el lado derecho, coloque una estrella. Está en una línea más alta, en una
frecuencia más alta. Eso es lo que quieres. Tienes que moverte tú y tu conciencia a esa línea, a
esa frecuencia, o nunca alcanzarás tu meta. Tienes que actuar como la persona en la que
quieres convertirte. Tienes que entrar en esa frecuencia y vivir allí.
Esa es la única forma en que obtendrá el resultado deseado. La mayoría de las personas
solo sueñan con sus metas; nunca los alcanzan. Tienes que actuar como la persona en la que
quieres convertirte. Tienes que serlo . Es por eso
Goethe, el filósofo alemán, dijo: “Antes de que puedas hacer algo, primero debes
ser algo”.
Su Guión de Poder de Vida
Una técnica que he discutido en mis seminarios es escribir un guión de poder de
vida en tiempo presente y grabarlo con su propia voz. Escribes cómo quieres
vivir, todo lo que quieres, con tanto detalle como puedas.
Siempre está en tiempo presente, y siempre estás agradecido por ello: "Estoy tan
feliz y agradecido ahora que..." Tienes que llevar tu mente a ese lugar, y tienes
que vivir allí, lo cual no es una cosa fácil de hacer. Describes lo que estás
pensando, lo que estás haciendo, cómo estás viviendo; ese es tu guión de vida.
Tus amigos en el trabajo, tu vecino de al lado, tu cuñado te van a decir:
"¿Quién te crees que eres?" No nos gusta eso, así que no vamos allí; tenemos
que superar lo que piensan. Si no te ves ya allí, habla como tal, camina como tal
y actúa como tal, nunca vas a estar allí.
Por eso la imaginación es una magnífica herramienta. La imaginación no es
algo con lo que jueguen los niños; es algo que todas las personas sabias usan
para crear el bien, en el nivel de la mente, para empezar. Nos llevamos a donde
queremos estar y nos vemos ya allí. Caminamos como si estuviéramos allí,
hablamos como si estuviéramos allí y actuamos como si estuviéramos allí, porque
en nuestra mente estamos allí .
Eso es la oración. La oración es el movimiento que se produce entre el espíritu
y la forma, con ya través de nosotros. Todas las oraciones son contestadas. La
mayoría de la gente piensa que orar es ponerse de rodillas y hablar. Eso no es
orar; eso es hacer ruido en tus rodillas. Un ministro me dijo una vez: “Orar es lo
que la mayoría de la gente hace entre oraciones”. Si piensas en eso, te darás
cuenta de lo preciso que fue. La oración es cuando entras mentalmente en lo que
deseas en espíritu; te metes en el espíritu de la misma. Entonces lo dejas pasar
a todo tu ser; ahí es cuando comienza a tomar forma. Ahora es solo cuestión de
tiempo hasta que tu sueño se manifieste en forma física, y otras personas podrán
ver lo que has estado viendo durante bastante tiempo.
Earl Nightingale dijo: “Este gran sueño, la cosa dinámica que surge invisible
para todo el mundo, excepto para la persona que lo sostiene, es responsable
por cada gran avance de la humanidad.” Esa es una de mis citas favoritas.
Otro aspecto valioso de escribir y grabar un guión de vida poderosa es que
muchos de nosotros estamos acostumbrados a tener la cháchara y el diálogo interno
del miedo en nuestras mentes. Está tratando de llevarnos de regreso al viejo
paradigma, ensayando nuestros miedos dentro de nuestras cabezas y escuchando
esto como nuestra voz. Si escribes este guión de vida de poder en tiempo presente
con tu propia voz y te escuchas a ti mismo hablar de esta realidad una y otra vez,
vuelve a escribir esa voz interior hacia lo que quieres. Es poderoso, porque confías en
tu propia voz. Tiene que entrar en tu mente subconsciente.
Eso es lo que hacen todos los grandes actores. Si realmente quiere profundizar
en este concepto, obtenga el libro de Stella Adler The Art of Acting. Stella Adler fue
una gran maestra de actuación de método. Marlon Brando fue su alumno y fue el
primer alumno de método de actuación en alcanzar el estrellato. Escribió el prólogo de
ese libro. En realidad, Stella Adler nunca escribió un libro. Tenía lecciones, y cuando
falleció, un hombre llamado Howard Kissel las tomó y las puso en un libro, El arte de
actuar. Es magnífico.
Como dijo William James: “Actúa como la persona en la que quieres convertirte”.
Yul Brynner, tengo entendido, interpretó el papel del rey de Siam en El rey y yo en el
escenario tres mil veces. Cada vez, era como si lo estuviera haciendo por primera vez.
Entendió cómo meterse en el papel.
Cuando George C. Scott estaba filmando la película Patton, se parecía tanto al
general Patton que asustó a algunos de los amigos de Patton que estaban en el set.
George C. Scott fue un gran actor. Todos los grandes actores viven sus partes. Eso
es lo que tenemos que hacer. Tenemos que escribir el guión y vivir el papel. Así es
como toma forma.
Su socio responsable Otra idea
importante en el paradigma del desempeño del poder es conseguir un socio
responsable. Decimos que vamos a hacer cosas, y cuando decimos eso, probablemente
lo creamos. Pero la vida se interpone con frecuencia en el camino, y nosotros no.
Incluso cuando las personas dicen que están comprometidas con un curso de acción,
todavía no lo llevan a cabo.
Cuando hace un compromiso irrevocable y tiene un socio responsable, es
responsable ante esa persona. Elija un socio responsable a quien respete y a quien
quiera respetar
tú. Dices: “Esto haré”, y te hacen responsable de eso. No querrás decepcionarlos. No querrás
quedar mal a sus ojos. Las probabilidades de que lo hagas han aumentado sustancialmente.
Ya he discutido los métodos de rendición de cuentas utilizados por Sandy Gallagher y
por mí. Todas las mañanas escribo mis oraciones tres veces, luego las grabo y luego las
envío en un mensaje de texto. No quiero que piense que no estoy haciendo eso, porque
quiero que me respete, y sé que ella quiere que yo la respete. Usamos este enfoque con
varios proyectos en los que estamos involucrados; simplemente somos socios fenomenales.
Sandy es muy buena en lo que yo no soy bueno, y yo soy muy bueno en lo que ella no
es buena. Hace poco hablábamos de una persona en particular en nuestra empresa y dije:
"Esa persona no sabe en qué no es buena y eso le está causando un problema".
Tienes que ser consciente de lo que no se te da bien. Está bien no ser bueno en eso.
Como he señalado, no tienes que ser bueno en todo.
Hay algunas cosas en las que sé que nunca seré bueno; Ni siquiera quiero intentarlo. Tengo
a alguien más haciendo esas cosas. En cambio, tomo lo que hago y trabajo para mejorar
cada día. Mejora lo que se te da bien, gestiona lo que no se te da bien y sé responsable ante
alguien. Asegúrate de que cuando dices que vas a hacer algo, se va a hacer.
Siente la visión
El siguiente punto es mantener la visión y sentirla de forma natural. A través del
condicionamiento regular de sus pensamientos y guiones sobre sus objetivos, lo que una vez
se siente antinatural eventualmente se vuelve natural.
Podrías relacionar esto con conducir un automóvil. Cuando empecé, no pensé que
alguna vez aprendería a conducir. Mi madre me estaba enseñando; ella me gritó, y yo le grité
de vuelta. Ella decía: “No me grites; ¡Soy tu madre! Al mismo tiempo, estaba tratando de
averiguar cómo cambiar de marcha, soltar el embrague y pisar el freno en el momento
adecuado. Se sintió muy incómodo y aterrador, pero luego ni siquiera estás pensando en
conducir: lo estás haciendo todo en un nivel subconsciente. Al hacer repetidamente aquello
con lo que te sientes incómodo, eventualmente comenzarás a sentirte cómodo con ello.
Digamos que hay una idea X en su mente subconsciente y una idea Y en su mente
consciente. X es la programación, el paradigma. La idea Y es la
idea nueva: digamos, renuncie a su trabajo y comience su propio negocio. Intenta
involucrarse emocionalmente con la idea Y, pero la X rápidamente la descartará.
Te hará sentir muy incómodo con la idea de renunciar a tu trabajo y comenzar tu
propio negocio. Hipoteque su negocio, hipoteque su casa, tome todos sus
ahorros: una idea aterradora. Pero si sigues jugando con esa idea Y y te
involucras emocionalmente con ella, muy pronto la idea Y se convierte en una
idea X y te sientes cómodo con ella.
Eso es lo que debemos hacer. Debemos seguir involucrándonos
emocionalmente en la idea que causa incomodidad, y muy pronto se volverá
bastante cómoda. Ahí es cuando lo convertimos en parte del paradigma.
La comodidad no es un buen lugar para estar. Si te sientes realmente
cómodo con todo en tu vida, estás atascado, vas de lado; no estás creciendo en
absoluto. Tienes que estar haciendo algo que cause una cantidad respetable de
incomodidad y seguir haciéndolo hasta que te sientas cómodo con ello.
Cuando lo esté, establezca otro objetivo que cause molestias. Esa incomodidad
indica que estás creciendo; vas a donde nunca has estado.
Establecer un nuevo estándar
También es necesario establecer un nuevo estándar. Esto es parte del concepto de autoestima.
Siempre trato de emular a las personas que realmente admiro. Quiero entender
este material tan bien como lo entendió Earl Nightingale. Quiero entenderlo tan
bien como lo entendió Thomas Troward, así como lo entendió Neville. Elijo
personas que son gigantes en esta industria e intento emularlos.
No quiero copiar a esta gente. En su ensayo “Autosuficiencia”,
Emerson dijo algo brillante: “Hay un momento en la educación de todo hombre
en el que llega a la convicción de que la envidia es ignorancia; la imitación es
suicidio; que debe tomarse a sí mismo, para bien o para mal, como su porción.”
Envidiar a otra persona es mirarla y decir: “No soy consciente de que tengo
el poder en mí que ellos tienen. Usan ese poder para lograr los resultados que
están obteniendo. No sé si tengo eso, así que los envidiaré. Ojalá tuviera sus
resultados; Desearía estar haciendo lo que ellos estaban haciendo”. Eso es la
envidia: ignorancia. Y “la imitación es suicidio”. No hay forma de que puedas ser
como los demás.
Hay un hermoso poema de James T. Moore que lo puse en el libro Born Rich :
Uno y solo tú Cada
brizna de hierba, y cada copo de
nieve, es solo un poco diferente ...
No hay dos iguales, ya sabes.
Desde algo pequeño, como granos de arena, Hasta
cada estrella gigantesca Todos fueron hechos con
ESTO en mente: ¡Ser exactamente lo que son!
¡Qué insensatez, pues, imitar, qué
inútil fingir!
Ya que cada uno de nosotros proviene de una
MENTE Cuyas ideas nunca terminan.
Solo habrá UNO de MÍ Para mostrar lo
que puedo hacer— Y tú también
deberías sentirte muy orgulloso, Solo hay UNO
de TÍ.
Ahí es donde todo comienza
contigo, un maravilloso ser
humano ilimitado.
Autodisciplina El
siguiente punto es desarrollar la autodisciplina. No es que no seas disciplinado; es que nunca
has puesto una prioridad lo suficientemente alta en volverte disciplinado. Date una orden para
hacer lo que vas a decir.
Creo que todo el mundo es disciplinado. Algunas personas son disciplinadas con
respecto a las cosas equivocadas; lo hacen independientemente. Los adictos son disciplinados.
Convirtieron su deseo en adicción. Veo la disciplina como la capacidad de darnos una orden
y luego seguirla: “Esto haré”. Si solo hiciera eso, obtendría resultados mucho mejores.
La disciplina es una orden que te das a ti mismo y que va a mejorar todo lo que haces.
Hace poco le envié un mensaje de texto a una señora. ella había comenzado
escuchando una grabación que había hecho para ella; ella lo usó por un tiempo y se
detuvo, luego comenzó a usarlo de nuevo. Me enteré, así que le envié un mensaje de
texto diciendo: “¡Felicidades! Entiendo que estás usando la grabación de nuevo.
La disciplina que desarrollarás al escuchar esto todos los días durante los próximos
treinta o sesenta días tendrá un impacto en todas las demás áreas de tu vida”.
Utilice la autosugestión
Otra técnica valiosa es utilizar la autosugestión en su práctica diaria.
La autosugestión es una sugerencia de ti mismo para ti mismo. Es una idea que se
origina en la mente consciente y se entrega a la mente subconsciente.
Estamos involucrados en la autosugestión todo el tiempo: cada pensamiento que pensamos y con
el que nos involucramos emocionalmente es una sugerencia.
Es como la autohipnosis. Cuando alguien más te está dando una sugestión
hipnótica, viene de algún otro lugar. Quieres seguir repitiendo el mismo concepto una y
otra vez.
Earl Nightingale una vez hizo una grabación llamada Eso es bueno, describiendo
una situación con su amigo W. Clement Stone. W. Clement Stone comenzó con nada.
Al final de su vida, era uno de los hombres más ricos del mundo. Stone había adquirido
el hábito de decir: "Eso es bueno". No importaba lo que pasara; él diría: "Eso es bueno".
Si buscas el bien en todo, encontrarás el bien en todo, porque en todo hay bien.
Mi querido amigo Michael Beckwith compartió una vez una idea que me encanta. Él
dijo que cuando sucede algo, hay un enfoque de tres pasos: 1. Míralo y
di: "Es lo que es"; aceptarlo O te va a controlar, o tú lo vas a controlar. (Aquí está su
dicotomía reaccionarresponder nuevamente).
2. Cosechar lo bueno. Hay algo bueno en todo. Cuanto más busques, más encontrarás.
3. Perdona todo lo demás. Perdona, déjalo ir, abandónalo por completo.
Eliminar la procrastinación
El siguiente principio es eliminar la procrastinación y acelerar hacia sus metas. Creo
que solo hay una manera de manejar esto. Todo tiene un opuesto. Lo opuesto a la
procrastinación es la decisión. Cuando la gente viene a
y me dicen que tienen un problema con la procrastinación, les digo que busquen
a alguien y que ustedes dos se comprometan a leer todos los días durante
sesenta días el capítulo sobre decisiones en Piense y hágase rico . Es el capítulo
más largo del libro, y es increíble.
Cuando lea este capítulo, los dos no tienen que estar en la misma ciudad o
en el mismo lugar. Pueden llamarse por teléfono. Uno de ustedes comienza a
leer, lee unas pocas líneas y dice: "Pase". Las otras personas lo recogen allí,
comienzan a leer unas pocas líneas y dicen: "Pasa". Ambos tienen que estar
leyendo mientras la otra persona lee, o no sabrán dónde continuar.
Si haces eso durante sesenta días, eliminarás la procrastinación, que es
simplemente una cuestión de no tomar una decisión.
Capítulo Siete
Las lecciones de la gratitud en libertad
La gratitud es un concepto magnífico. Es gracioso que debería ser un capítulo.
siete de este libro, porque en la primera página del capítulo siete de La ciencia de
hacerse rico, Wallace Wattles señala que “todo el proceso de ajuste mental y
expiación se puede resumir en una palabra, gratitud”.
Un ejercicio de escritura
Siempre que estés perturbado, siempre que algo te moleste, siéntate en algún
lugar tranquilo. Tome un bolígrafo y un bloc y pregúntese: "¿Por qué tengo que
estar agradecido?" No trates esto simplemente como un ejercicio intelectual, en el
que anotas algunas cosas. ¿Por qué estás agradecido? Escríbelo todo.
Sandy Gallagher y yo estábamos en un seminario en Phoenix. Me iba de la
ciudad porque estaba terminando la parte que estaba haciendo. Sandy dijo que
tenía un par de desafíos personales; ¿podría sentarme y hablar con ella sobre ellos?
Dije: “Claro. Vamos; vamos a cruzar la calle”, donde había una vieja cafetería.
En la cafetería saqué una servilleta de un soporte. Y le dije: “Como primer
paso, quiero que escribas diez cosas por las que estás agradecido. Luego piensa
en tres personas que te están molestando y envíales amor. Número tres: relájese
totalmente durante cinco minutos, medite y pida buena energía para el resto del
día”.
Llamé a Gina, que ha trabajado conmigo durante más de treinta años, es una
asistente increíble, y le dije: "Gina, ¿podrías hacer un bloc e imprimirlo en Kinko's?"
En una hora, ella regresó. El bloc tenía "Gratitud" en la parte superior, "Sandy
Gallagher" en la parte inferior y el
números del uno al diez en el costado para que ella escriba diez cosas por las que
estar agradecida. Luego dijo: “Envía amor a tres personas que te molestan”.
El siguiente: “Relájese durante cinco minutos y pida orientación para el día.
Gina consiguió tres toallas sanitarias para ella. Sandy se iba a Hawái al día
siguiente con su madre y su hermana, así que tomó una libreta para cada una. La
primera mañana, su madre y su hermana pensaron que estaba loca. Entonces
empezaron a hacer esta práctica para divertirla y se enamoraron de la idea.
Empezaron a hacerlo todas las mañanas. Probablemente todavía lo estén haciendo.
La gratitud es la actitud que te conecta con tu fuente de suministro.
Envía amor a las personas que te molestan cuando probablemente te gustaría que
tuvieran un accidente automovilístico. Después de todo, si alguien me ha lastimado y
le estoy enviando malos pensamientos, ¿quién está en la mala vibración? Tiene que
venir a mí ya través de mí. El truco es controlar el flujo. La energía fluye hacia ya
través de ti. Tienes que enviar amor a esas personas que te están molestando: eso
te pone en una vibración amorosa. El beneficio para ti es enorme. Amar a todos.
Luego relájese totalmente y pida orientación para el día. Hago eso todas las
mañanas.
Algunas de las historias que Sandy cuenta sobre esa experiencia, tanto desde la
perspectiva empresarial como personal, son alucinantes. Cambió su vida.
En un caso, estaba pasando por un momento difícil con algunas personas: iba a ir a
juicio. Ella imaginó que todo este asunto saldría perfectamente, y dio gracias y envió
amor a estas personas. En menos de una semana, ese problema, con el que había
estado luchando durante un par de meses, se resolvió.
Esta es una de las ideas más beneficiosas que tendrás. Comprométete a hacer
este ejercicio de gratitud antes de irte a la cama. El sentimiento de gratitud es una
vibración increíble y te conecta con tu fuente de suministro.
Ponte en una frecuencia de amor Cuando te
pones en una frecuencia de amor, el amor es todo lo que puedes atraer.
Solo puedes atraer lo que resuena contigo. Todo es resonancia de inducción. Estás
tratando con electrónica: tu cuerpo es un instrumento electrónico, es una masa de
moléculas a una velocidad de vibración muy alta.
Hacer esta práctica te pone en una vibración increíble y comienzas a atraer
cosas buenas a tu vida. Suceden cosas que nunca supiste que sucederían. Tu
percepción cambiará y no tendrás malos sentimientos hacia nadie. Dejas de
reaccionar. Cuando comience a pedir orientación, se sorprenderá de lo rápido y
hermoso que es cuando llega, y vendrá todo el tiempo. Puede detenerse para
hacer esto en cualquier momento del día: si está un poco preocupado, simplemente
deténgase, quédese callado y pida orientación. Siempre vendrá. Pide y recibirás.
Además, puedes llevar un diario de gratitud. Un diario de gratitud es invaluable.
Creo que la mañana es un buen momento para establecer una actitud de gratitud.
Establece el hábito de escribir diez cosas por las que estás agradecido, envía
amor a cualquiera que te esté molestando y pide orientación para el día.
Es posible que desee utilizar esta práctica a lo largo del día. Si surge un
problema, regístrelo en un diario. No uses este diario de gratitud para notas
ordinarias; úsalo para lo que está diseñado. Cuando estés un poco preocupado, te
sientas abrumado o sientas que seguramente reaccionarás a lo que sucede en el
día, saca el diario de gratitud.
Como dijo Wallace Wattles, la gratitud es “el proceso completo de ajuste
mental”. Si tienes un problema, necesitas un ajuste mental, porque todos los
problemas se originan en tu mente. Un mentor me dijo una vez: “Eres el único
problema que tendrás, Bob, y eres la única solución”. Él estaba en lo correcto.
Eres el único problema que tendrás, y eres la única solución. Cuando entiendas
eso, comenzarás a ver el valor de sentarte y estar agradecido todos los días cada
vez que tengas un pequeño problema. Es una actitud tan fenomenal, y te cambia
la vida.
Simplemente
márchese Otra idea poderosa para cambiar su paradigma tiene que ver con la libertad.
Muchas veces, cuando las personas buscan cambiar algo en sus vidas, es para
volverse más libres. En nuestros seminarios, mi socia, Sandy Gallagher, a veces
dice: “Respétate lo suficiente como para alejarte de cualquier cosa que ya no te
sirva, te ayude a crecer o te haga feliz”.
Somos los únicos que podemos liberarnos. Como dijo Bill Gove: “Si quiero ser libre,
tengo que ser yo mismo. No el yo que creo que tú crees que debería ser, no el yo que
creo que mi esposa cree que debería ser; no el yo que creo que mis hijos creen que
debería ser. Si quiero ser libre, tengo que ser yo. Tengo que saber quién soy yo ”.
Se remonta a estudiarnos a nosotros mismos: comprender de qué se trata realmente
el pensamiento, cómo funciona nuestra mente, cómo funciona el consciente frente al
subconsciente, el papel que juegan nuestros sentidos frente a nuestras facultades superiores.
Cuando realmente empezamos a entender todo esto, creo que disfrutamos de un mayor
grado de libertad.
La libertad de la que disfruto hoy en día está muy alejada de donde estaba cuando
agarré Piense y hágase rico por primera vez en 1961. Tenía veintiséis años. Nunca había
leído un libro en mi vida, y miré este libro y pensé que era muy grueso. Ahora tengo
bibliotecas maravillosas en mi casa y estudio. Me encantan los libros. He llegado a amar
la lectura, y creo que cuanto más leas, más libre te volverás.
La libertad viene de entendernos a nosotros mismos y nuestra relación con nuestro
Dios. La falta de comprensión crea una prisión para uno mismo. Algunas personas viven
en prisiones de su propia creación. En su obra El secreto de la libertad, Archibald MacLeish
hace que un personaje se ponga de pie y diga: “Lo único que tiene un hombre que es un
hombre es su mente. Todo lo demás lo encontrarás en un cerdo o un caballo”. Cuanto
más estudiamos, más libres nos volvemos. Cuanto más conscientes nos volvemos, más
libres nos volvemos.
Libertad financiera
Creo que todo el mundo debería tener el objetivo de ser económicamente libre. Te
sorprenderá cuánto tiempo libre tienes cuando nunca tienes que pensar en el dinero. Si
tienes que pensar cómo vas a pagar la hipoteca, no eres libre; estás en una prisión de tu
propia creación, porque cualquiera puede crear libertad financiera en un período de
tiempo relativamente corto. Para hacer eso, tienen que crear un nuevo paradigma. Deben
acudir a alguien que sepa cómo crear libertad financiera y luego hacer exactamente lo
que esa persona les dice. Formé ese hábito hace mucho tiempo, y funciona muy bien.
Esa es la única forma en que alguna vez experimentarás la libertad.
Aquí hay una cita que Sandy y yo usamos en nuestros seminarios: “Quítense la
máscara de la ilusión, liberen las cadenas de la expectativa, liberen los patrones
arraigados aprendidos, abandonen las historias del pasado, suelten el miedo. Nunca es
demasiado tarde para ser quien realmente eres.”
Cuando se exponen por primera vez a estas ideas, las personas pueden escuchar
una vocecita que dice: “Pero, Bob, tengo otras personas que dependen de mí: mi
cónyuge, mis hijos, mis empleados, y esperan cosas de mí. ¿Cómo puedo simplemente
desatar esas cadenas? ¿Cómo puedo liberarme de los patrones arraigados que me
quedaron grabados durante veinte años? Tuve una crianza abusiva. Durante años, mis
maestros me dijeron que no era inteligente y que nunca llegaría a nada. ¿Cómo puedo
liberar todo eso?
No creo que este proceso se lleve a cabo de la noche a la mañana. Es más un
objetivo a largo plazo por el que todas las personas podrían trabajar. Siento que he
hecho lo que dice la cita anterior, aunque no es fácil. De eso se trata cambiar un
paradigma. Tenemos tantas creencias falsas que permitimos que nos encadenen.
En un gran libro, The Mystic Path to Cosmic Power, Vernon Howard dijo: "No
puedes escapar de una prisión si no sabes que estás en una".
La mayoría de las personas están en una prisión de su propia creación, pero no saben
que lo están. Si una persona analiza esa cita, se dará cuenta de que hay una cierta
cantidad en su vida que es falsa y no tiene ninguna apariencia de verdad. Tenemos que
alejarnos de eso.
Mucha gente se siente responsable de los demás, pero en realidad no somos
responsables de nadie más. Somos responsables de nuestros hijos hasta que llegan a
cierta edad; entonces somos responsables ante ellos pero no por ellos.
Hay una gran diferencia entre ser responsable de y ser responsable de. Muchos padres
lo están pasando fatal porque se sienten responsables de sus hijos, aunque tengan
treinta y cinco o cuarenta años. Los padres no son responsables de ellos en absoluto.
Estuvieron en un tiempo, pero ese tiempo pasó hace bastante tiempo.
Al final, la libertad es un asunto muy personal. No debemos tratar de imponer
nuestros propios pensamientos a otras personas. En el programa de Earl Nightingale,
dice: "No voy a tratar de decirte cómo vivir tu vida". Más bien, te da excelentes
sugerencias y, si las sigues, vivirás una muy buena vida. Al seguirlos lo mejor que pude
durante casi toda mi vida adulta, hoy disfruto de un grado de libertad que no creía
posible cuando comencé a estudiar. Y sigue mejorando.
Nacemos libres, pero luego no lo somos. Nacemos con todas las herramientas
para crear la libertad, pero también hemos heredado muchas creencias y
paradigmas falsos. Alguien más los originó hace muchas, muchas lunas. Ahora
depende de nosotros reconocer con qué creencias estamos operando que son
falsas y deshacernos de ellas. Ese es realmente el truco de la vida. He pasado
muchos años, y pasaré el resto de mi vida, haciendo eso.
Capítulo Ocho
Los beneficios de cambiar tu paradigma
En este capítulo, quiero ver los efectos que verás en tu vida a partir de
cambiando su paradigma.
Cambiar su percepción Lo primero
es la percepción. Provocas tu cambio de paradigma cambiando tu percepción. Tome
la capacidad de ganar dinero. Hoy, sin ninguna dificultad, puedo ganar más dinero en
una hora de lo que ganaba en todo un año cuando acepté Piense y hágase rico por
primera vez. Entonces tenía la capacidad de hacer eso, tenía todo el talento dentro,
pero no era consciente de ello. Mi percepción de la vida me mantuvo atascado donde
estaba. Pensé que esto era normal para mí. No era nada normal, pero lo acepté,
porque realmente no creía que pudiera cambiarlo.
Cambié mi sistema de creencias, pero un cambio en la percepción precede al
cambio en la creencia. Puedes cerrar los ojos y cambiar tu percepción.
La percepción es una facultad mental que te permite cambiar la forma en que ves las
cosas. Te permite ser consciente del poder y el potencial que tienes pero del que ni
siquiera eras consciente.
La percepción es una herramienta mental. Es para la mente lo que el oído o la
vista son para el cuerpo. Nuestros sentidos físicos nos permiten comunicarnos con el
mundo material. Nuestras facultades superiores nos permiten comunicarnos con el
mundo invisible, con el mundo que nunca hemos visto, del que ni siquiera somos
conscientes.
Nuestras facultades creativas nos permiten crear el tipo de mundo que queremos.
Lo primero que tienes que hacer es verlo en tu mente. Tienes que cambiar cómo
miras las cosas. Cuando cambias la percepción que tienes de ti mismo y de lo que
eres capaz de hacer, el mundo comienza a girar de forma totalmente diferente para ti.
Dominar el tiempo
Otra área de la vida que cambiará como resultado del cambio de paradigma es el
uso del tiempo. Todo el mundo recibe exactamente la misma cantidad de tiempo, por
lo que es lo que hacemos con nuestro tiempo lo que marca la diferencia. Desde la
perspectiva del servicio, logro más ahora en un día de lo que hubiera hecho en un
año antes de estudiar algo de esto.
Supongamos que un vendedor hace una llamada adicional al día. Cuando
terminan, dicen: “Haré una llamada más”, y lo hacen cinco veces a la semana.
Supongamos que este no es un muy buen vendedor, que cierra una de cada cinco
presentaciones de ventas. Estarían haciendo cincuenta ventas al año que de otro
modo no habrían hecho. Supongamos que están ganando $100 por venta: eso es
$5,000 al año extra.
Earl Nightingale hizo más en un corto período de tiempo que nadie que haya
conocido. Nunca vi al hombre apresurarse a ninguna parte. Lo observé durante cinco
años de trabajar con él. Logró más en un corto período de tiempo que cualquier otra
persona que haya conocido.
Un día asistí a una charla con Earl en el centro de Chicago. Nunca había tenido
la oportunidad de estar con él a solas, así que aproveché la oportunidad. Cuando
estábamos desayunando antes del compromiso, le pregunté: "Earl, ¿cómo aprendiste
a dominar la gestión del tiempo?"
Me miró y dijo: “¿De qué diablos estás hablando? Nunca he dominado la gestión
del tiempo; nadie lo hace. El tiempo no se puede administrar. Simplemente gestiono
actividades”. Sacó una tarjeta de su bolsillo y dijo: “Simplemente escribo por la noche
lo que voy a hacer al día siguiente. Al día siguiente me despierto y hago esas cosas.
Está todo decidido.
Una vez desarrollé un seminario llamado “Un sentido de urgencia”. Veo un
sentido de urgencia en una persona que puede hacer mucho en un corto período de
tiempo de una manera tranquila y segura. Si una persona no tiene un sentido de
urgencia y tiene mucho que hacer, probablemente genere confusión y pánico en
todas las personas con las que entre en contacto. Con un sentido de urgencia, haces
mucho en poco tiempo, de una manera tranquila y segura.
Mucho de lo que estamos haciendo, no tenemos que hacerlo en absoluto, por lo que
puede ahorrar mucho tiempo allí. Algunas de las cosas que pensamos que tenemos que
hacer se harán por negligencia. No tienen que hacerse en absoluto.
También hay que delegar. Una vez, mi esposa estaba abrumada con un montón de
trabajo en su escritorio. Ella preguntó: "¿Me ayudarás?"
“Está bien”, le dije, “pero tienes que hacer lo que te digo”.
"Lo haré", dijo ella.
Tenía todo tipo de cosas apiladas sobre el escritorio. Cogí uno a la vez y dije: “¿Qué es
esto? ¿Esto tiene que hacerse?”
"Sí", dijo ella.
"Bueno, entonces, ¿tienes que hacerlo?"
"Realmente no lo hago". Tenía una asistente llamada Helen.
Al final mi mujer no tenía mucho que hacer, aunque ahora Helen sí.
Ella preguntó: "¿Cómo va a hacer eso?"
“Ese es problema de Helen. No es tuyo." Dije: “Si Helen no puede hacerlo todo, tendrá
que contratar a un asistente, pero tiene que contratar al asistente, no usted. Si contrata al
asistente, el asistente trabajará para usted, no para Helen”.
Mi esposa aprendió mucho ese día. Se volvió mucho más productiva, porque aprendió
que muchas de las cosas que estaba haciendo, no tenía que hacerlas en absoluto.
Utilizar la creatividad
La tercera área de la vida influenciada por nuestro paradigma es la creatividad. Puedo
usarme a mí mismo como un buen ejemplo. Cuando terminé el octavo grado, mi maestro me
preguntó: "Bob, ¿a dónde vas a ir a la escuela secundaria?"
"Voy a ir a Malvern Collegiate".
“Oh, Bob, no vayas allí. Nunca te irá bien en los negocios. Vaya a Danforth Tech y
obtenga un intercambio”.
¿Qué sabía? Mi maestro era como Dios, así que fui a Danforth Tech.
Solo estuve allí un mes. Metí el pulgar en una sierra de cinta y le corté el extremo. Lo
volvieron a coser. Años y años después, todavía duele cuando hace frío.
soy muy creativo Creo todo tipo de programas maravillosos y he escrito algunos libros.
Soy una persona muy derecha. Personas con el cerebro derecho
son muy creativos. Mi maestro no sabía eso; tampoco las personas que estaban
ayudando a criarme.
Algunas personas parecen ser más expertas en creatividad que otras, pero nadie es
más creativo que nadie. Todos somos creativos; es solo que algunos utilizan más sus
habilidades creativas. Todos somos verdaderamente expresiones de Dios. Nuestras
facultades superiores son las facultades creativas de percepción, voluntad, razón,
imaginación y memoria. Tenemos que aprender para qué sirven y cómo utilizarlos;
entonces nos volvemos muy creativos. Hay una mejor manera de hacer todo, y podemos
encontrarla si la estamos buscando.
Un socio mío dijo una vez que nunca había conocido a otra persona como yo. Ella
dijo: "Te has recreado más a menudo que Madonna". Siempre me estoy recreando a mí
mismo, pero lo veo como encontrar una mejor manera de ayudar a las personas a
comprender lo que tienen a su favor.
Hay un poder claro y puro que fluye hacia ya través de nosotros. Se puede fotografiar
saliendo de tu cuerpo. Semyon Kirlian, el fotógrafo ruso, perfeccionó una técnica para
hacer eso en 1934. Cuando ese poder fluye hacia nuestra conciencia, no tiene forma. Le
damos forma.
Ahí es donde comienza la creación. En verdad, nada se crea ni se destruye, por lo que
estamos tomando una forma de energía y haciendo que se mueva a una forma de
energía diferente, lo que nunca hubiera sucedido si no hubiéramos estado allí y la
hubiéramos movido. Jugamos un papel muy importante en la vida.
Productividad y eficacia La productividad
y la eficacia son la cuarta área principal de la vida que está influenciada por nuestro
paradigma. La productividad y la eficacia son como el huevo y la gallina: uno afecta al
otro. A medida que nos volvemos más efectivos en lo que hacemos, automáticamente
nos volvemos más productivos.
Podemos llegar a ser mucho más productivos. Tenemos que buscar mejores formas
de hacer lo que estamos haciendo. Para mí, 1980 parece un período de tiempo
relativamente corto. El fax estaba entrando en juego entonces. Ahora parece tan
anticuado. Puedo tomar una foto en mi teléfono y presionar "enviar", y la tienes
inmediatamente. Todo esto es una forma de productividad: utilizar nuestras facultades
creativas de una manera más efectiva. Es averiguar cómo hacer lo que estamos haciendo
mejor de lo que lo estábamos haciendo, más rápido, con menos costo y menos esfuerzo.
Soy de la opinión de que si estás luchando, lo estás haciendo mal. Si está
trabajando en armonía con la ley, será un flujo libre. Tenemos las facultades
mentales para hacer que estas energías creativas fluyan hacia cualquier estado o
forma que queramos. Tenemos increíbles poderes encerrados dentro de nosotros
con los que realmente no estamos familiarizados. Algunas personas no son
conscientes de ellos en absoluto.
Independientemente de lo mucho que esté luchando en este momento o de lo
difíciles que sean las cosas, puede volverse mucho más eficaz. Cuando lo hagas,
serás recompensado por ello.
Lógica versus ilógica La
quinta área que se verá afectada por un cambio de paradigma es nuestro uso de la
lógica. La lógica es como un precedente: es como siempre se ha hecho; es el límite
de lo que hacemos. Si alguien dice: "Eso no es lógico", probablemente me inspirará
a ir y hacerlo.
No me interesa si algo es lógico o ilógico. La pregunta es, ¿lo quieres? ¿Lo
quieres hacer? ¿Quieres que suceda? Entonces olvida la lógica; solo ve y hazlo
Hay una historia de que Thomas Edison fue enviado a casa desde el tercer grado
con una nota en un sobre sellado que le decía a su madre: “Por favor, no lo envíes
de regreso a la escuela. Simplemente no tenía lo que se necesitaba para hacer lo
que estaban haciendo”. Su madre volvió a poner la nota en el sobre y le dijo que no
volvería a la escuela porque ya sabía más de lo que enseñaban. Ella comenzaría a
enseñarle en casa.
Tenemos que darnos cuenta de una mejor manera de hacer todo. No queremos
que nada nos frene. Si tenemos una imagen de ello en nuestra mente, podemos
hacerlo. Si puedes verlo en tu cabeza, puedes sostenerlo en tu mano. Luego tienes
que masajearlo, trabajar con él, si quieres que se convierta en forma. Solo verlo en
tu mente no es suficiente, aunque es una indicación de que puedes hacerlo.
Cambie su paradigma de dinero La
sexta área principal de la vida afectada por un cambio de paradigma tiene que ver
con el dinero. Su paradigma puede establecer límites sobre cuánto dinero puede
ganar y, al cambiar su paradigma, puede cambiar radicalmente esos límites.
límites. Su paradigma no le impedirá ganar menos, pero le impedirá ganar más.
El dinero no se gana con el trabajo, sino con la prestación de un servicio. Cuanto
más creativo sea, más servicio podrá prestar. Gano dinero las veinticuatro horas del
día, aunque duermo buena parte, y cualquiera puede hacerlo. Enseñamos a la gente
cómo hacer eso. Enseñamos a las personas a configurar múltiples fuentes de
ingresos.
No hay límite para lo que puedes ganar, aunque la gente piensa que sí.
Una de las primeras cosas que le pregunto a un cliente cuando empiezo a trabajar
con él es, ¿cuánto es lo máximo que has ganado en un año? Realmente no me
importa cuál es la respuesta, pero me dirá dónde se establece su paradigma. El
dinero es un buen criterio para los paradigmas, porque el dinero se puede medir
hasta el último centavo. La salud no puede. Puedes ir a un médico y el médico dirá
que estás en perfecto estado de salud, entonces podrías salir y caer muerto. Eso ha
pasado muchas veces.
En mis seminarios, enseño a la gente cómo ganar dinero. Una editorial dijo que
yo era el maestro de prosperidad más grande de Estados Unidos, porque realmente
me enfoco en eso. Me he centrado en ello porque creo que tiene un gran impacto en
la vida de las personas. Puedes hacer tanto bien con el dinero que no puedes hacer
si no lo tienes.
El dinero no te hará una mejor persona, pero te hará más de lo que ya eres. Si
no eres una buena persona, te volverás despreciable. Si eres una buena persona, te
volverás mucho más amable.
El dinero es una lupa. No hay límite para lo que puede ganar, pero para ganarlo,
debe brindar servicio. Eso no significa que tengas que trabajar, sino que tienes que
dar servicio.
¿Cuántos millones de dólares gana la cantante Taylor Swift en un año? Y ella
realmente no trabaja tan duro, aunque probablemente tiene momentos en los que le
da mucha energía a su música. Cada vez que se reproduce una de sus grabaciones,
gana algo de dinero y, por supuesto, millones de personas escuchan sus grabaciones.
Ella los está entreteniendo, merece ser recompensada por eso, y lo es.
El dinero es una recompensa que recibimos por el servicio prestado. Como ya
he enfatizado, la cantidad de dinero que gana está en relación directa con la
necesidad de lo que hace, su capacidad para hacerlo y la dificultad que hay para
reemplazarlo.
Hace años, en un lugar donde yo trabajaba, subí y le pedí al presidente
lo que tenía que hacer para ganar más dinero.
"¿Quieres un aumento?" preguntó.
"No. No quiero un aumento —dije. “Solo quiero saber qué tengo que hacer para ganar
más dinero”.
"¿Cuánto quieres ganar?"
Creo que fue en la década de 1970. Dije: “No sé, $100,000”.
“No podrías ganar $ 100,000”.
"¿Por qué no?"
“Dije que no podías. Eso es todo al respecto." Sabía que mis diez años allí pronto
llegarían a su fin, porque alguien más estaba decidiendo cuánto podía ganar.
Nunca dejes que nadie decida lo que vas a ganar. Eso es algo que tienes que decidir. Si
dejas que otra persona decida, y no estás contento con eso, ya sabes lo que tienes que hacer:
tienes que salir de ahí e ir por tu cuenta.
El emprendimiento es increíble. Personalmente, creo que el mercadeo en red es una de
las mejores ideas que jamás se hayan presentado. No estoy en el mercadeo en red, soy
demasiado maduro para ir y trabajar en otro campo, pero es un lugar donde configura
automáticamente múltiples fuentes de ingresos.
Históricamente, las personas ricas han tenido múltiples fuentes de ingresos.
La capacidad de ganar dinero es definitivamente una cuestión de tu paradigma. Si estoy
trabajando con personas, esa es una de las primeras cosas que cambio. Siempre trato de que
nuestros vendedores establezcan metas de ingresos más altas, y lo hacen. Algunas personas
en nuestra empresa ganan más de $1 millón al año. Un tipo podría llegar a alrededor de $ 4
millones o $ 5 millones este año.
No hay límite a lo que podemos ganar, y tenemos que entender eso.
Tenemos que entender la ley que rige la obtención de dinero, y luego tenemos que ocuparnos
de hacerlo. Como mencioné, comenzamos una empresa, o más bien una división de nuestra
empresa: MSI Connect. MSI significa múltiples fuentes de ingresos. Te conectas con otras
personas que están configurando múltiples fuentes de ingresos. Miles de personas en todo el
mundo pertenecen a MSI Connect y están trabajando juntas y ayudándose unas a otras. Es
una gran manera de ganar dinero. Pueden entrar y vender algo y alguien más puede venir y
comprarlo. Tenemos un gran mercado. Tratamos con mucha gente.
Vender es la profesión mejor pagada del mundo. Un vendedor a comisión es la
persona mejor pagada del mundo. Nadie puede ganar la cantidad de dinero que
puede ganar un vendedor. Nadie puede acercarse.
Tenemos que darnos cuenta de que todo lo que podríamos desear ya está aquí.
Tenemos que estar en armonía con eso. Cuando pensamos en un bien que nos
gustaría tener y que no tenemos, no estamos en armonía con él. La pregunta es,
¿cómo me pongo en armonía con él? ¿Cómo elevo mi propio nivel de conciencia?
El estudio es el único camino. No puedo hacerlo por ti, y tú no puedes hacerlo por
mí. No pude hacerlo por mis hijos, y tú no puedes hacerlo por los tuyos. No puedes
hacerlo por tu esposa, y tu esposa no puede hacerlo por ti.
Somos los únicos que podemos hacerlo por nosotros mismos, pero tenemos
que involucrarnos, entendiendo que todo es posible. Eso no es solo una buena
declaración religiosa. Eso es un hecho. Creo que soy un excelente ejemplo de eso;
si yo puedo ganar, cualquiera puede. Las probabilidades de que sucediera eran
ridículamente remotas, pero sucedió por una buena razón: leí buenos libros, escuché
buenas grabaciones, fui instruido por personas excelentes. Elegí a mis mentores.
No me mezclo con nadie que no esté trabajando en objetivos, que no esté yendo a
alguna parte en su vida. No quiero juntarme con personas que se quejan. Me
suscribo al principio de Earl Nightingale: no hable sobre su salud a menos que esté
hablando con un médico. Si alguien empieza a quejarse de su salud, le digo que no
soy médico. Es algo en lo que podemos trabajar y podemos hacerlo, podemos
hacerlo bien.
Consigue un buen maestro. Los buenos maestros valen su peso en oro. Si estoy
asesorando a una persona, le costará mucho dinero, pero rápidamente descubren
que valgo mucho dinero. Les enseño cómo llegar a valer mucho dinero.
Todos valen mucho. Es que no todo el mundo se lo cree. Cuando lo hacemos,
todo comienza a cambiar, independientemente de dónde se encuentre la persona.
No importa cuánto puedan estar luchando, pueden cambiarlo. Tienen que sentarse
y escribir lo que quieren. No me importa si crees que puedes hacerlo o no. La
primera meta que me puse fue tener $25,000. Nunca creí que podría tener tanto.
Pero descubrí que si lo leía en voz alta, comenzaba a creerlo. Si lees una mentira
en voz alta, empiezas a creerla. Alcancé esos $ 25,000 tan rápido que me dio
vueltas la cabeza.
Cualquiera que quiera algo que no tiene debe escribir lo que quiere en tiempo
presente. No importa si piensan que es una tontería. Ellos
debe comenzar a leerlo y hablarlo en voz alta una y otra vez.
Algo comenzará a suceder primero en su mente y luego en el mundo exterior, de
adentro hacia afuera.
Capítulo Nueve
Hacer de su paradigma positivo un hábito de
por vida
En este capítulo final, quiero traer todo lo que hemos estado hablando
juntos para mostrar cómo hacer de estas ideas una forma de vida habitual.
Ignorancia versus Conocimiento Hay dos
caminos en la vida. El primero es el camino de la ignorancia. Inevitablemente conduce a la
preocupación, la duda, el miedo, la ansiedad, la depresión y, en última instancia, a la enfermedad
y la desintegración.
La ignorancia es simplemente no saber, pero el conocimiento es omnipresente.
No hay necesidad de que una persona permanezca en la ignorancia. Desafortunadamente,
nuestro sistema educativo está haciendo muy poco para enseñar las materias de las que hemos
estado hablando. La escuela no te enseña cómo tomar el control de tu mente.
La escuela no te enseña cómo responder en lugar de reaccionar. La escuela no te enseña
cómo permanecer en una frecuencia positiva o estudiar las leyes del universo. La escuela no
nos enseña nada sobre paradigmas.
Como la escuela nunca nos enseñó esas cosas, tienes que buscarlas tú mismo. Hay
mucha información hoy en día sobre estos temas. Los libros de autoayuda están en la lista de
los más vendidos en casi todos los países hoy en día. Tenemos que empezar a entender más
sobre nosotros mismos, lo que sucede a nuestro alrededor y cómo respondemos o reaccionamos
ante ello. Cuando nos llegan ideas de otras personas, tenemos la capacidad de aceptarlas o
rechazarlas. Tenemos la misma capacidad con respecto a las ideas que nosotros mismos
originamos. Si tenemos una idea negativa, puede que sea correcta, pero eso no es razón para
insistir en ello. Hay una
lado negativo de todo. Algunas personas prefieren tener razón que ser ricas.
Es un dicho común, y es cierto.
Podemos partir de la ignorancia, la duda y la preocupación a nivel consciente;
luego, en un nivel subconsciente, la duda y la preocupación se convierten en miedo.
La energía del miedo, expresada dentro ya través del cuerpo, establece una
vibración conocida como ansiedad. La ansiedad generalmente se suprime. La
supresión se convierte en depresión. La depresión se convierte en enfermedad, y la
enfermedad en desintegración.
El polo opuesto de la ignorancia es el conocimiento. Ese es el camino positivo.
El conocimiento está aquí y la única forma de llegar a él es estudiando, pero hay
que saber qué estudiar. Las bibliotecas están llenas de conocimiento, pero el
conocimiento en sí mismo no es poder. Si lo fuera, todos los bibliotecarios serían
multimillonarios. La mayoría de ellos no tienen nada; están arruinados. El
conocimiento tiene que ser organizado y dirigido inteligentemente. Durante los
últimos cincuenta años, con el Instituto Proctor Gallagher, he estado organizando y
dirigiendo inteligentemente este conocimiento.
Comprensión y estudio Lo
opuesto a la duda y la preocupación, en la frecuencia positiva, es la comprensión.
Queremos entender las leyes de nuestro ser, queremos entendernos a nosotros
mismos. También queremos entender que hay un poder que fluye hacia nuestra
conciencia que no tiene forma. Vamos a darle forma.
La única manera de desarrollar la comprensión es a través del estudio. Tienes
que estudiar la mente y las leyes del universo. Cuando las personas comiencen a
estudiar lo que hemos reunido, lograrán grandes avances. Entenderán que tienen
que tener una imagen de lo que quieren. Cuando lo internalizan, desarrollan una
emoción llamada fe, que es el polo opuesto del miedo.
Es algo extraño: con fe y miedo, estás creyendo en algo que no puedes ver. Si
tienes una opción, tiene sentido elegir la fe. La fe es la capacidad de ver lo invisible,
de creer en lo increíble, y eso nos permitirá recibir lo que las masas llaman imposible.
Ves lo invisible; lo ves en tu mente consciente con tu imaginación. Crees en lo
increíble. Si tomas lo que ves en tu imaginación y lo internalizas, dáselo a tu mente
subjetiva, la cual, operando por ley,
inmediatamente comenzará a moverlo en forma. Eso es creer en lo increíble.
Eso tiene que manifestarse a través del cuerpo. Pasamos del conocimiento
al entendimiento a la fe. La fe se expresa en el nivel físico como bienestar, que
es el polo opuesto de la ansiedad. La expresión se convierte en aceleración.
Estás acumulando velocidad, porque estás a gusto. Eso se convierte en creación.
El polo opuesto se convierte en desintegración.
Tus hábitos pueden llevarte en cualquiera de estas dos direcciones: hacia el
refuerzo de lo negativo o hacia el refuerzo de lo positivo. Un hábito es una idea
que está fijada en la mente subconsciente. Un paradigma dice, no estudies. La
otra parte dice, estudio. Estableces tus hábitos y determinas si vas a desarrollar
buenos hábitos.
El hábito de la repetición
Cuando era joven, nunca tuve el hábito de estudiar. Nunca estudié nada, ni en
la escuela ni cuando salí de la escuela. Sin embargo, después de escuchar por
primera vez las grabaciones de Earl Nightingale, no podía dejar de escucharlas.
A través de la repetición de escuchar lo mismo una y otra vez, formé el hábito
positivo de estudiar. Ese hábito cambió mi paradigma y cambió todo acerca de
adónde iba y lo que estaba haciendo. Cualquiera puede hacer eso. Si sigues
estudiando este material, cosas buenas seguirán sucediendo.
Estamos en una era de gratificación instantánea, todo instantáneo, pero este
proceso no ocurre en un instante. Puede, todo es posible, pero eso es raro.
Desarrollar este hábito positivo de estudio va en contra de otra parte de
nuestro paradigma, según el cual lees un libro y luego pasas a algo diferente.
Esa no es la forma en que es aquí. Coges el libro, lo lees y lo lees una y otra
vez. Tengo todos los discos originales que hizo Earl Nightingale y los escucho
con frecuencia. Es un hábito, y ese hábito ha cambiado mi vida. Gano millones
de dólares hoy cuando solía tener dificultades para ganar miles. Tengo trabajo
que hacer en todo el mundo hoy cuando tuve dificultades para encontrar trabajo.
El hábito de estudiar el material adecuado cambiará tu paradigma. He visto
a personas que fueron náufragos en vida convertirse en ciudadanos útiles.
Cuando cambias de paradigma, tu vida cambia, porque los resultados en la vida son un
expresión del paradigma. El paradigma provoca la acción, y la acción provoca una reacción.
A medida que la acción y la reacción se unen, alteran nuestra condición, circunstancias y
entorno. Así es como funciona.
¿Qué quieres realmente?
Si estamos comprometidos a permanecer en este camino del conocimiento y comenzar a
producir resultados sorprendentes en nuestras vidas, es fundamental comenzar en el nivel
básico, con la pregunta, ¿qué es lo que realmente quieres?
El problema con muchas personas es que no creen que puedan tener lo que quieren.
Como niños pequeños, corremos hacia nuestros padres y les decimos: "Mami, papi, quiero,
quiero, quiero". Queremos todo bajo el sol. Dirán: "No puedes tener todo lo que quieres" o
"¿Cómo vas a conseguir eso?" Ningún niño puede responder a esa pregunta. Cuando se
hacen mayores, no puedes tener todo lo que quieres como parte del paradigma. Cuando
podemos comprender que podemos tener cualquier cosa que queramos, no tenemos que
saber cómo conseguirlo; sólo tenemos que saber que lo conseguiremos .
En el momento en que ves algo en tu mente, lo que quieres darte cuenta es hacia
dónde te diriges. Has tomado tu imaginación y has elevado tu nivel de conciencia a una
frecuencia mucho más alta. Ahora solo puedes quedarte allí por unos momentos y luego
volver a donde estás. Si llega allí, quédese allí unos minutos; Masajee ese concepto,
juegue con él, gírelo en su mente, píntelo de manera diferente, póngase en él, vea cómo
sucede, experimente cómo se sentirá. Luego diga: “Puedo hacerlo. No sé cómo, pero
puedo”.
Un Oscar, un Emmy y un Tony Si una
persona se me acerca y me dice: “Esto es lo que quiero”, puedo mostrarle cómo
conseguirlo. Había un productor de cine en Los Ángeles llamado Phil Goldfine. Phil estaba
hablando con otro hombre, Ed Morrissey, y le preguntó a Ed: "¿Leíste este libro Born Rich?"
"Sí, conozco al autor".
Phil dijo: “Tú no lo conoces”.
"Lo conozco."
"Este es un libro increíble."
Ed simplemente se rió y dijo: “Está bien. Lo telefonearé”, así que me telefoneó. Él
dijo: “Bob, aquí hay un tipo que quiere hablar contigo”.
Phil se puso al teléfono y dijo: “Dios, me encantaría sentarme a hablar contigo.
¿Dónde estás ahora?"
Estoy en Las Vegas.
“Estoy en Los Ángeles; ¿Puedo ir a verte?
"Sí si tu quieres."
Vino a verme. Me senté y pregunté: "¿Qué es lo que realmente quieres?"
"Millones de dolares."
"¿Qué estás ganando ahora?"
"Un par de cientos de miles".
"¿A qué te dedicas?"
“Soy productor de cine”.
"¿Qué más quieres?" Él dijo: “Quiero ganar un Oscar. Quiero ganar un Emmy”.
Le dije: "Puedo mostrarte cómo hacer todas esas cosas, pero tienes que hacer
exactamente lo que te digo.
Él dijo: “Lo haré”.
Eso fue hace unos veintidós o veintitrés años. Solo veintiséis personas han ganado
un Oscar, un Emmy y un Tony. Phil me llamó en 2019 y me dijo: “Voy a ir a la noche de
estreno de Tootsie. ¿Quieres venir a Nueva York?
"Sí."
Volé a Nueva York y lo conocí. Ganó su Tony por su musical Tootsie. Fue la vigésima
séptima persona en ganar un Oscar, un Emmy y un Tony. También ganó medallas de oro
en natación. Ha nadado con medallistas de oro olímpicos. Mientras que el productor
promedio podría hacer dos películas en tres años, creo que Phil está trabajando en
veinticuatro este año. Él te dirá que hace exactamente lo que le digo. Le dije: "No me
importa si lo crees o no, quiero que sigas diciéndote que esto es lo que sucede".
Un día Phil me envió una foto de sí mismo sosteniendo su Oscar, y él
dijo: "Voy a ganar otro".
“Esa no es la foto correcta,” dije. “Sostenga el Oscar en una mano, tome una foto,
luego sostenga el Oscar en la otra mano y tome otra foto. Luego, pídele a alguien que
use Photoshop para convertirlo en una sola imagen”. Horas
Más tarde, recibí una foto de él con él sosteniendo un Oscar en ambas manos.
Phil gana millones de dólares hoy. Me ha dicho que ha ganado hasta un
millón de dólares en cuatro horas. Hace exactamente lo que le digo. No le digo
a qué hora comer ni a qué hora irse a la cama, pero le he dicho: “Cuando te
sientas y piensas en lo que quieres, deja volar tu imaginación. Si puedes verlo,
escríbelo. No hables con nadie más que conmigo al respecto. Porque todos
los demás se reirán de ti, y no necesitas que eso suceda. No te mezcles con
personas que no tienen grandes objetivos. No te mezcles con gente que quiere
hablar de noticias o de tiempos difíciles”.
Phil es un excelente ejemplo. Mi pareja Sandy Gallagher es otra.
Tienes que empezar a creer en cosas que están fuera de tu alcance. Si puedes
verlo, está ahí. Nada se crea ni se destruye. Todo lo que necesitas ya está
aquí. Es cuestión de entrar en sintonía con él. Cuando estés en armonía con
él, lo atraerás.
La ley de la atracción es muy clara: lo único que puedes atraer hacia ti es
lo que está en armonía contigo. Si tienes una imagen de pobreza, nunca
atraerás la prosperidad.
Tienes que verte a ti mismo como próspero. Tienes que verte con el bien
que deseas. Lo primero que tienes que hacer es reconocer de qué se trata.
Ahí es donde te sientas y dejas que tu mente despegue. Pon tu imaginación a
trabajar. Phil dice que la imaginación es la fuerza más maravillosa, milagrosa
e inconcebiblemente poderosa que el mundo jamás haya conocido. El tiene
razón. Es la herramienta mental que nos lleva a otras zonas horarias, a otros
lugares, al espacio exterior, a una frecuencia superior. La imaginación te
llevará a cualquier parte. Esto no es algo para reírse; es algo de lo que estar asombrado.
Ocho principios para vivir
Permítanme concluir este libro enumerando los ocho principios para vivir la
vida que desea vivir, que comparto en mis seminarios.
1. Desarrolla una conciencia de tu potencial infinito. Ese es el comienzo de un
bien mayor en cualquier aspecto de tu vida. Que haya luz. Es triste ver a un
niño que le teme a la oscuridad. Siempre he sentido que es mucho peor ver a
un adulto que le tiene miedo a la luz. Que haya luz. Que haya un mayor
grado de conocimiento consciente. A medida que se vuelva más consciente, comenzará a
mejorar la calidad de su vida, porque ya está aquí; sólo tienes que ser consciente de su
presencia.
2. Actúa sobre lo que quieres. Nuestros deseos provienen de la esencia de quienes somos.
Nuestro ADN espiritual es perfecto; está en nuestro corazón, el corazón de corazones, en
la inteligencia universal. Eres creado a la imagen de Dios, hay perfección dentro de ti, y esa
perfección busca expresión dentro ya través de ti. Siempre es para expresión, expansión y
un bien mayor. Su expresión llega a tu conciencia como querer: “Quiero esto”. Te desvivirás
por lo que quieres. Harás cosas que son anormales para conseguir lo que quieres. Correrás
cuando estés cansado. Estudiarás cuando estés cansado. Nuestros deseos provienen de
la esencia de quienes somos; es la forma en que Dios o el Espíritu dice: "Déjame trabajar a
través de ti para crear un bien mayor". Querer no es conseguir; obtener es un beneficio
secundario de querer. Querer es crecer.
3. Toma una decisión. Todo lo que obtienes, lo obtienes porque estás programado para
obtenerlo. Estás en armonía con eso. No estás en armonía con lo que quieres; por eso no
lo tienes. Cuando vas tras lo que quieres, tienes que cambiar el paradigma.
A menudo has escuchado el dicho, los viejos hábitos tardan en morir. El paradigma no
quiere cambiar; quiere seguir expresándose una y otra vez de la misma manera. Cuando
comienzas a perseguir lo que quieres, el paradigma va a dar una gran pelea. Estarás muy
incómodo.
Todo en ti querrá renunciar. Si realmente no entiende lo que está haciendo, probablemente
dejará de hacerlo. Si entiendes, las probabilidades de que sigas adelante son bastante
buenas. Probablemente menos del 10 por ciento de las personas realmente persiguen
grandes objetivos. La mayoría de las personas no lo hacen porque realmente no entienden
que pueden tenerlo. Una hermosa canción cantada por Nat King Cole hace años dice:
"Pretende, finge que eres feliz cuando estás triste". Obtén la letra de esa canción, léela,
estúdiala, memorízala.
4. Compromiso total. El compromiso separa al profesional del aficionado. Creo que fue el
orador motivacional Ken Blanchard quien dijo que cuando estás interesado en algo, lo
haces si es conveniente; cuando estés comprometido, lo harás a pesar de todo. Lo que
buscas tiene
ser una decisión comprometida; no hay vuelta atrás, y no hay salida.
debe suceder Comprender las leyes lo hace mucho más fácil, mucho más
placentero.
5. Responsabilidad. Earl Nightingale llama a esto “su póliza de seguro de éxito”.
Cuando tiene un socio responsable, está configurando una póliza de seguro que
va a continuar. Si eres mi socio responsable y realmente te respeto, quiero que
realmente me respetes. Si te digo que voy a hacer algo y te pido que me hagas
responsable de ello, cuando me viene a la mente la idea de renunciar,
instantáneamente voy a pensar, ¿qué vas a pensar de mí por hacer eso? ?
Su socio de rendición de cuentas mantiene la nariz en la piedra de afilar. Esta
persona te pondrá en marcha cuando todo quiera que renuncies. Los socios
responsables son invaluables. Sandy Gallagher es mía. Mi hijo Brian y su socia
Peggy McColl son socios responsables. Se ayudan unos a otros con un enorme
fin solo porque son responsables entre sí. Para usted, un socio responsable vale
su peso en oro. Elíjalos sabiamente y luego sea responsable ante ellos.
6. Enfoque. Esto añade energía y aumenta la amplitud de la vibración. También
dirige y aumenta su poder personal. El sentimiento es conocimiento consciente
de la vibración. Si no te sientes bien, estás en una mala vibración. Cuando te
sientes bien, eso indica que estás en una buena vibración.
Si estás en un centro comercial y alguien detrás te está mirando, lo sentirás.
Están enfocados en ti; se están concentrando en ti. Están tomando la energía
que fluye hacia su conciencia y la dirigen hacia ti como un láser. Sus
pensamientos golpean tu cerebro y crean una vibración. Sientes esa energía,
sientes que te miran fijamente, te das la vuelta y, efectivamente, lo están. La
concentración aumenta la amplitud de la vibración. Toma la energía y acelera su
proyección, dándole a la energía un enfoque similar al de un láser. Es por eso
que el enfoque es tan importante.
El enfoque es un acto de voluntad. Puedes desarrollar tu voluntad tomando
una vela en un candelabro y colocándola frente a tu silla favorita. Cuando estés
solo, enciende la vela, siéntate y mira la llama, y sigue mirando la llama hasta
que te vuelvas uno con la llama. Si tu mente divaga, cosa que ocurrirá, tráela de
vuelta a la llama. Cada vez que deambule, tráelo de vuelta; no te sientas mal,
solo tráelo de vuelta. También puedes poner un punto en la pared frente a tu silla
favorita y mirar ese punto. Cuando su mente divague, tráigala de vuelta al punto.
Cuando puedes concentrarte en una cosa, puedes concentrarte en cualquier
cosa, porque has fortalecido tu voluntad. La voluntad es la facultad mental que te
permite mantener una idea en la pantalla de la mente. Como dijo Emerson, lo único
que puede crecer es aquello a lo que le das energía.
Cuando estás concentrado, estás dando más energía a lo que quieres.
7. Disciplina. Le sugiero que se comprometa a leer este libro cada mañana durante
treinta minutos durante sesenta días. También recomiendo involucrar a un socio en
este proyecto. Encuentra un amigo. Si no tienen una copia de este libro, cómpralo y
dáselo. Escribe una pequeña nota en él. Te amarán por ello. Luego diga: “Me
gustaría estudiar este libro contigo todos los días durante treinta minutos.
Hazme responsable y te haré responsable. Al final de los treinta minutos, nos
registramos y discutimos lo que hemos aprendido”. Si se compromete a hacer eso,
obtendrá todos los beneficios sobre los que ha leído en este libro, porque se los
merece; te los habrás ganado.
8. Visualización. Visionear es ejercitar la imaginación para pasar por el logro de lo
que estás buscando. Trae orden a la mente y atrae hacia ti las cosas que necesitas
de forma ordenada. La mente de la persona promedio es un torbellino de ideas
dando vueltas por todas partes. Cuando una persona tiene una visión, está trayendo
un pensamiento a la pantalla de su mente y se enfoca en él. Están empezando a
vivirlo. Han traído orden a su mente. Troward dijo que el orden es la primera ley del
cielo; es algo celestial para visualizar. Es algo maravilloso de hacer. Lo harás muy
bien. Definitivamente mejorarás tus ingresos, tu salud, tus relaciones.
Implementar las ideas de este libro es una cuestión de hacer un compromiso
firme, elegir un socio responsable y comenzar de inmediato.
Comience hoy, no mañana; empezar ahora mismo Comprométete en el momento
en que leas estas palabras. Si vas a dedicar treinta minutos al día, empieza ahora
mismo. Si acabas de pasar treinta minutos, pasa otros treinta. Entonces mañana por
la mañana hazlo de nuevo.
Siga este régimen durante sesenta o noventa días. Earl Nightingale solía
decir que si haces algo durante noventa días, probablemente lo harás por el
resto de tu vida. Me inclino a estar de acuerdo con él, porque lo conviertes en
un hábito.
Estudiar. Las recompensas que obtendrás son astronómicas. estan lejos
más allá de lo que podrías esperar.

Traduccion Change Your Paradigm, Change Your Life

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