Tomando como punto de partida lo visto en la unidad y trabajo N°1, donde se
establece que:
“La educación es el fenómeno por el cual la sociedad humana se perpetúa en
el tiempo. Es la manera en que los seres humanos transmiten sus conocimientos y sus hábitos sociales a las generaciones más jóvenes. Este proceso de socialización permite que se adquiera el lenguaje, las reglas morales, los usos y costumbres, etc, así como también permite la transmisión de la cultura”
Esta definición centra la educación, claramente como un proceso social que
influye de manera directa e indirecta tanto en lo individual como en pequeños grupos de socialización y también en lo macro de una sociedad o civilización. Se puede pensar la socialización como la manera en que los miembros de una colectividad aprenden los modelos culturales de su sociedad, los asimilan, en algunos casos los van modelando o modificando y los convierten en sus propias reglas personales para definir su porvenir y modo de trascender en sus entornos cercanos y más amplios. Quizás por esto la educación ha sido impartida casi siempre en grupos, debido a que el ser humano es un ser social y necesita la interacción de otros para desarrollarse. A su vez, es fundamental considerar que estos procesos ocurren en la escuela, donde se da, en gran medida, la transmisión cultural aunque también se destaca (según Angel Perez Gomez) la función de preparar a las nuevas generaciones para su porvenir, lo que ha generado hasta hoy, una gran controversia sobre el cómo promover sistemas educativos accesibes, igualitarios, que aseguren el cumplimiento de todos los derechos.
Gran parte de esta función se da gracias a la transmisión, el intercambio de
saberes, las interacciones sociales, que ocurren en cada aula, en cada clase, con cada grupo y en cada momento histórico.