Está en la página 1de 8

CENTRO DE ESTUDIOS SUPERIORES EN CIENCIAS

JURÍDICAS Y CRIMINOLÓGICAS

PLANTEL: CHAPULTEPEC

ALUMNO: Héctor Robledo

MATERIA: CONTRATOS Y OBLIGACIONES

TRABAJO:

Contrato de promesa de pago

PROFESOR:

Contrato de compraventa

 Definición:
es el contrato por el cual el vendedor se obliga a transferir la propiedad de
una cosa o de un derecho al comprador quien a su vez se obliga a pagar un
precio cierto y en dinero. (art. 2248 Código Civil CDMX)
 Clasificación:
1. CONTRATO PRINCIPAL: Ya que para su existencia jurídica no se requiere de
la preexistencia de ningún otro contrato.
2. CONTRATO CONSENSUAL: Pues para su existencia no se requiere de
formalidad alguna, es suficiente que las partes se pongan de acuerdo en el
precio y en la cosa para que el contrato exista, aunque el primero no se haya
satisfecho ni la otra entregada.
3. CONTRATO BILATERAL: Porque entraña en esencia obligaciones recíprocas
para ambas partes. El vendedor se obliga a transmitir la propiedad de una
cosa o un derecho y el comprador a pagar un precio cierto y en dinero.
4. CONTRATO ONEROSO: Por la valoración económica de las
contraprestaciones del vendedor y del comprador.
5. CONTRATO INSTANTÁNEO: La compraventa es pura y simple, se realiza en
un solo acto temporal.
6. CONTRATO DE TRACTO SUCESIVO: Cuando las partes convengan en
diferir el cumplimiento de las obligaciones contraídas.
7. CONTRATO FORMAL: Al ser sobre bienes inmuebles requiere de una forma
escrita ya sea escritura pública o documento privado para que tenga plena
validez.
8. CONTRATO CONMUTATIVO: En consecuencia, de que el comprador y el
vendedor desde el momento en que celebran el contrato conocen las ventajas
y desventajas económicas que inciden en su patrimonio.
9. CONTRATO ALEATORIO: Excepcionalmente el contrato de compraventa
puede ser aleatorio cuando las partes expresamente introducen la modalidad
en la que el comprador tome para sí el riesgo de que los frutos lleguen o no a
existir, o bien, que los productos inciertos de un hecho no pueden estimarse en
dinero.

 Elementos personales.
1. Las dos partes que intervienen, que son el comprador y el vendedor,
para celebrar este contrato requieren sólo de la capacidad general
para contratar.
2. Es necesario agregar que el vendedor necesita, además en ella, de
la capacidad para disponer del bien objeto del contrato, pues quien
tiene la capacidad general, es decir, la capacidad natural y legal, por
no hallarse en ninguno en los casos de excepción de incapacidad
natural y legal, tiene la capacidad de disponer.
3. Los menores y los mayores con discapaces no pueden vender, y sus
representantes legales solo pueden vender con autorización judicial
en almoneda pública cuando se trate de inmuebles, de alhajas, de
muebles preciosos o de acciones con valor de más de cinco mil
pesos.
4. Las restricciones de carácter legal, establecidas por el Derecho civil,
en lo tocante a la persona del comprador, tienen su origen
frecuentemente en una falta de legitimación para celebrar el contrato
de compraventa de que se trata, según ya se hizo notar antes.
 Elementos reales:
1. La cosa.
(a) La cosa vendida requiere: que la cosa exista, sea corpórea o
incorpórea, como marcas, conocimientos tecnológicos,
programas de cómputo, derechos de crédito o energías
(electricidad, energía atómica, etc.).
(b) También las cosas futuras pueden ser vendidas con excepción de
los derechos en la sucesión de una persona viva.
(c) Que la cosa sea susceptible de ser vendida, o sea que esté en el
comercio, debiendo entenderse que están fuera del comercio
aquellas cosas a que por su naturaleza no pueden ser poseídas
por algún individuo exclusivamente o que por disposición de la ley
sean irreductibles a propiedad particular.
(d) Que la cosa sea determinada o determinable en cuanto a su
especie y a su cuota o cantidad, debiendo tenerse de nuevo en
cuenta las observaciones hechas a este propósito al estudiar este
requisito general del objeto cosa de los contratos.
(e) Que la cosa no sea ajena, esto es, que el vendedor sea o llegue
después a ser el titular del derecho que vaya a transmitir por
medio de la venta, derecho que no siempre es precisamente la
propiedad sobre una cosa (aunque es el caso más frecuente), ya
que puede ser otro derecho real (servidumbre, copropiedad,
usufructo) o inclusive un derecho personal o de crédito. Sin
embargo, este requisito, se exige para la eficacia real o traslativa
de la compraventa, y no es requisito para la validez de ella, de
acuerdo con la exposición que adelante se dedica a la venta de
cosa ajena.

2. El precio.
(a) El precio ha de ser cierto, sea que su monto lo fijen las partes, o
un tercero designado por ellas, o que lo refieran a otra cosa cierta
(el precio corriente en determinada fecha, o bien el precio en el
que se vendió por otra persona.
(b) El precio debe ser en dinero, sea en moneda nacional o en
moneda. Si la mayor parte es una cosa y la otra parte menor es el
dinero se tiene la permuta y no compraventa. Puede pagarse el
precio en una o varias exhibiciones, pero cuando es una cantidad
periódica o pensión referida a la duración de la vida de una
persona, se trata de un contrato diferente, esto es, de una renta
vitalicia.
(c) En cuanto al monto del precio existen restricciones de carácter
legal que son impuestas, o por el Derecho Administrativo, por
ejemplo, la fijación de precios-tope para la venta de artículos de
primera necesidad, o por el Derecho civil, por ejemplo, en la
venta a plazo de semillas o cereales para el consumo del
comprador que no sea comerciante, la prohibición de que el
precio convenido no puede exceder del precio corriente desde la
entrega de esos bienes hasta el fin de la cosecha siguiente.
(d) Acerca del precio justo, es de advertir que sólo en casos
excepcionales puede configurarse la lesión en perjuicio del
vendedor, esto es, cuando el comprador paga un precio
evidentemente desproporcionado al valor de la cosa,
aprovechándose de la suma ignorancia, de la notoria
inexperiencia o de la extrema miseria del vendedor.
(e) Suele mencionarse también que el precio ha de ser real, serio,
sincero, verdadero (verum). El precio, según Pothier, es
verdadero cuando se conviene con la intención de que el
vendedor podrá exigirlo. Si de inmediato se hace remisión por el
vendedor, no habría venta, sino donación.
 Elementos formales:
La venta sobre muebles es consensual, pues nunca requiere formalidad
legal alguna; pero, en cambio, cuando recae sobre bienes inmuebles es
formal: requiere de escritura privada firmada por comprador y vendedor
ante dos testigos, cuyas firmas se ratifiquen ante Notario, Juez competente
o Registro Público de la Propiedad, sí el valor del inmueble en cuestión,
según avalúo, no excede del equivalente a trescientos sesenta y cinco
veces el salario mínimo general diario en el D. F. en el momento de la
operación; y se exige la escritura pública si sobrepasa a dicha cantidad,
debiendo en uno y otro caso inscribirse en el Registro Público de la
Propiedad para que la venta surta efectos contra terceros. Además, en el
primer caso, la escritura privada debe hacerse por duplicado, para que un
tanto quede en poder del comprador y otro para el Registro Público de la
Propiedad, debiendo también en este caso ratificarse las firmas ante el
registrador, ante Juez competente, o ante Notario o Corredor Público para
la inscripción en el Registro Público de la Propiedad.
 Terminación de contrato:
La compraventa puede terminar de dos maneras:
1. En virtud de hechos o circunstancias contemporáneos a la
celebración del contrato, que propiamente frustran la compraventa e
impiden que ésta produzca sus efectos o continúe produciéndolos.
2. La compraventa puede terminar también en virtud de hechos o
circunstancias posteriores a la celebración del contrato, que
extinguen los efectos derivados de la compraventa válidamente
celebrada. Entre estos medios de terminación de la compraventa, es
de mencionarse, ante todo, el agotamiento natural del contrato, a
virtud del cumplimiento o ejecución de las respectivas obligaciones a
cargo de las dos partes.

Contrato de permuta:

 Definición:
Contrato por el que cada uno de los contratantes se obliga a dar una cosa
por otra (2327).Que el objeto del contrato es un "dare", esto es, la
transmisión recíproca de la propiedad de las dos cosas que se permutan
entre sí. Que, sin embargo, dicha transmisión de propiedad, no
necesariamente debe ser contemporánea a la celebración del contrato, sino
que las partes pueden diferir para un momento posterior ese efecto real.
 Clasificación:
Es un contrato sinalagmático propiamente dicho; oneroso, conmutativo o
aleatorio, según que en este último caso uno de los permutantes transmita
la propiedad de la cosa y tome a su riesgo que la otra cosa que se le va a
enajenar llegue a existir o no; consensual, si recae sobre bienes muebles, y
formal, si versa sobre bienes inmuebles.
 Elementos personales:
Las partes, llamadas ''permutantes", que
intervienen en la celebración de este contrato, requieren sólo de la
capacidad general para contratar (1798), siendo aplicables a las mismas
partes las observaciones y, sobre todo, las restricciones legales o
convencionales que se señalan a propósito de la libertad de vender y de
comprar, ya que a la permuta se aplican las normas de la compra venta.
 Elementos reales:
Son las dos cosas que se permutan, mismas que deben satisfacer los
requisitos de "la cosa" en la compraventa: existir en la naturaleza, estar en
el comercio y no estar prohibida su enajenación, y ser determinada o
determinable en cuanto a su especie y cantidad. La cosa debe ser un bien
corpóreo, sea un cuerpo cierto o un género, o un bien incorpóreo, como un
derecho; pero no un servicio, porque en este último caso se trataría de un
contrato de prestación de servicios profesionales o de otro contrato similar.
Igualmente, si lo que se concede a cambio de la propiedad de una cosa es
el uso o goce de otra, se está en presencia de un arrendamiento.
 Elementos formales:
Es un contrato consensual si versa sobre bienes muebles; pero es un
contrato formal, si recae sobre bienes inmuebles, aunque se trate de una
permuta de un bien raíz por otro bien mueble. Esta formalidad legal para los
bienes inmuebles consiste en la escritura privada que deben firmar los
contratantes ante dos testigos cuyas firmas se ratifiquen ante Notario, Juez
competente o Registro Público de la Propiedad, si el valor del inmueble que
se permuta no excede según avalúo, del valor de 365 veces el salario
mínimo general en el D.F. en el momento de la operación, y en escritura
pública ante Notario, si el valor de tal inmueble sobrepasa dicha cantidad,
debiendo inscribirse en uno y en otro caso la permuta en el Registro Público
de la Propiedad para que surta efectos contra tercero.
 Terminación de contrato:
Los modos de la terminación de la permuta son los mismos ya indicados
para la compraventa, pero con la circunstancia de que como en la permuta
no hay comprador, no se aplican a la misma las normas protectoras del
mismo relativas a la valorización pericial del demérito de la cosa y del uso
de la misma para el caso ele la resolución de la permuta y además, en este
contrato una y otra parte tuvieron en su posesión la respectiva cosa que
deben devolver a la otra parte. Como causa especial ele nulidad podría
volverse a invocar la "reversión" ele uno de los bienes permutados en la
hipótesis antes analizada.

También podría gustarte