Aumento de los casos de femicidio en la cuidad de Guayaquil entre los años

2015-2020

Antecedentes

Entre los años 2015 y 2017 (no existen datos posteriores), la Cepal (Comisión Económica

para América Latina y el Caribe) indica que en el Ecuador se registraron 212 muertes de mujeres,

sin embargo, las estadísticas de femicidios entre los años 2015 y 2019 muestran que 350 féminas

fueron víctimas de esto. Lo anterior arroja una tasa del 4,2 por cada 100 mil habitantes. De su parte,

el Inec (Instituto Ecuatoriano de Estadísticas y Censos) en su ´Atlas de Género´ publica que entre

2015 y 2017 ocurrieron 222 femicidios.

Indistintamente que las cifras entre uno y otro ente no sean concordantes, lo cierto es que te-

nemos una realidad latente en nuestro país, una realidad enmarcada dentro del tema de la violencia

de género. Desde 2014, el Código Orgánico Integral Penal, en su Artículo 141, establece la figura

del «Femicidio».

«La persona que, como resultado de relaciones de poder manifestadas en cualquier tipo de

violencia, dé muerte a una mujer por el hecho de serlo o por su condición de género, será

sancionada con pena privativa de libertad de veintidós a veintiséis años».

Y es que el fenónemo de impacto social que implica esto, surge de la diversidad de proble-

máticas sociales que en el caso de nuestro país, no se resuelven. Pontón (2009) asegura que «los

asesinatos de mujeres por discriminación y violencia de género constituyen un delito que debe ser

tipificado considerando la situación de la víctima en relación con el agresor (...)». (p. 8).
 Planteamiento del problema

En este último lustro, los casos de femicidio en el país han aumentado en casi un 40 por

ciento con respecto a cada año desde el 2015. Eso da cuenta de que la problemática no es aislada y

que las muertes de mujeres son una realidad latete que debería ocupar más atención de todos los

componentes sociales.

Indistintamente de lo anteriormente citado, surge una interrogante válida: ¿Todas las muertes

de mujeres ocurren por el hecho de que lo sean? Esta dicotomía creada se da a razón de lo que el

mismo Artículo 141 reza. Siendo así, cabría el cuestionamiento de si toda mujer que muere en nues-

tro país es incluida dentro de las estadísticas que se citan por la Cepal y el Inec. Pontón (2009) dice

también que para que tal realidad se conciba como tal deben cofluir varios factores.

La discriminación de género, el sexismo y la misoginia son problemas arraigados en el

Ecuador, lo cual se evidencia en los altos índices de violencia contra las mujeres existentes

en el país, aún cuando esta situación no siempre se denuncia. Es lógico que si existe este ti

po de violencia, muchos de los crímenes que se cometen contra las mujeres se deba a la exa

cerbación de esa violencia que culmina con el femi-cidio. (p. 8)