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Caplan “Teoría de la crisis” El individuo enfrenta siempre situaciones que requieran la

resolución activa de problemas, pero puede superarlos por medio de reacciones y mecanismos
habituales. En sus relaciones con los otros dentro del sistema social, desempeña roles
complementarios vinculados con su posición en ese sistema, el cual, de modo análogo, está en
equilibrio. Esto no significa que sea estática. El equilibrio se altera cuando el individuo o el
sistema enfrentan una fuerza o situación que modifica su funcionamiento previo. Llamamos a
esto un problema. Ante este problema, se despliegan una variedad de mecanismos habituales
de resolución, uno de los cuales permite superar la situación en un lapso y de una manera
similar a los que caracterizaron el caso en ocasiones previas. En una crisis, este proceso se
amplifica porque el estímulo del problema es mayor, y las fuerzas reequilibradoras ordinarias
no alcanzan a actuar dentro del margen de tiempo común. Características de la crisis:
Desequilibrio entre la dificultad y la importancia del problema y los recursos de los que se
dispone inmediatamente para enfrentarlo. Los mecanismos directos, los dispositivos
homeostáticos comunes son inútiles y el problema es tal que ningún otro método parece
poder usarse. En otras palabras, el individuo enfrenta estímulos que señalan un peligro para la
satisfacción de necesidades fundamentales o provocan una necesidad importante y las
circunstancias son tales que los métodos habituales para resolver problemas resultan
ineficaces dentro del lapso propio de las antiguas expectativas de éxito. Por lo tanto, la tensión
debida a la frustración de la necesidad se eleva y esto en sí mismo involucra problemas de
mantenimiento de la integridad del organismo o grupo y puede estar asociado a sentimientos
de malestar y esfuerzo subjetivos. El individuo está alterado. Esta alteración generalmente se
asocia con sentimientos displacientes como la ansiedad, el miedo, la culpa o la vergüenza,
según la naturaleza de la situación. Existe una sensación de impotencia e ineficacia frente al
problema insoluble, sensación que da lugar a cierta desorganización del funcionamiento, de
manera que la persona es menos efectiva de los que es generalmente.

Cuatro fases características: 1. Elevación inicial de la tensión por el impacto del estímulo pone
en marcha las habituales respuestas homeostáticas de solución de problemas. 2. La falta de
éxito y la prosecución del estímulo determina la elevación de la tensión. Estado de alteración e
inactividad. 3. La tensión sigue en aumento y traspasa un tercer umbral al comenzar a actuar
como poderoso estímulo interno para la movilización de recursos internos y externos. El
individuo recurre a sus reservas de energía y mecanismos de emergencia. Utiliza nuevas
técnicas. De esta manera el sujeto logra definir el problema de una nueva forma, de manera
que entren en la esfera de la experiencia previa. Es posible que se explore mediante técnicas
de ensayo y error, a nivel empírico o especulativo. Como resultado de esta movilización de
esfuerzos y de la redefinición de la situación el problema puede resolverse. La solución
generalmente involucra una alteración del papel del individuo frente a su grupo. 4. Si el
problema continúa, la tensión se eleva hasta un punto de ruptura. Se produce una importante
desorganización en el individuo, con resultados graves. Factores que influyen sobre el
desenlace de la crisis Cada crisis representa una situación nueva que implica nuevas fuerzas,
tanto internas como externas. El desenlace está determinado tanto por elecciones activas de
su parte, como aspectos azarosos de la situación, estado corporal del individuo, disponibilidad
de recursos sociales, sistema de comunicación del medio y la personalidad

Factores personales: 1. Un fracaso previo puede actuar como carga adicional en el presente,
haciendo que se repitan los mecanismos de defensa anteriormente usados. Por otra parte, si
los antiguos problemas revividos fueron correctamente encarados en el pasado, actúan como
guías para la acción presente exitosa. 2. La percepción de la situación como problemática y
penosa depende de la experiencia. También depende de la cultura y la personalidad. Los
detalles de la resolución de la crisis tienen una considerable significación para la futura salud
mental del individuo. Su nuevo equilibrio puede ser mejor o peor que el pasado. La nueva
estructura de superación que el sujeto elabora cuando se encuentra en crisis pasa a ser una
parte integral de su repertorio de respuestas para la resolución de problemas y aumenta la
posibilidad de que enfrente en forma más o menos realista los riesgos que se le presenten en
adelante. Ejemplos de “circunstancias peligrosas”: nacimiento, pubertad, enfermedad o
muerte de un miembro de la familia, ingreso al jardín de infantes, a la escuela, egreso de la
escuela, primer empleo, ,mudanza, etc.

Factores socioculturales sobre la resolución de crisis: A la realidad de su medio y si interacción


con otros individuos, al tratar la resolución de la crisis, también se le asigna mucha
importancia. Por lo general, un hombre no enfrenta solo la crisis sino ayudado o trabado por
quienes lo rodean que actúan por medio de valores y tradiciones introyectados que
proporcionan conocimiento y confianza para resolver problemas de ciertas formas aceptables,
y a través de otros individuos e instituciones que asumen roles complementarios de estímulo y
apoyo. En el análisis de los efectos de una crisis sobre el trastorno mental es bueno no
concentrarse únicamente en el individuo en cuestión al punto de perder de vista las
alteraciones de las otras personas de su red social, cuya salud mental también puede haber
sufrido. Cualquier cambio en el individuo puede afectar su rol y en consecuencia alterar el
sistema social del cual forma parte. Influencia de la familia: Lo importante para el
mantenimiento de la salud mental es que las actividades de la familia tiendan a ayudar a la
persona en crisis, a tratar su problema por medio de alguna forma de actividad más que a
evitarlo o restringir la actividad a mecanismos para aliviar la tensión. La familia puede impedir
la resolución sana de una crisis. Además de aumentar las aflicciones del individuo en crisis, o
de no proporcionarle ayuda en el manejo de mayor tensión, la familia puede interferir
activamente la resolución efectivamente del conflicto propugnando la evitación del mismo. La
familia puede ayudar al sujeto en crisis, interferir de modo negativo para la resolución del
conflicto o, incluso, ayudar para que el conflicto sea evitado y se cree en el sujeto un falso
consuelo.

Influencia de los miembros claves de la comunidad: es característico de las crisis que, cuando
la tensión llega a cierto punto, el individuo comienza a movilizar no sólo sus propios recursos,
sino también a solicitar ayuda de otros. Los signos de la tensión en aumento parecen tener un
efecto significativo sobre las demás personas, estimulándolas a ayudarle. Durante el
desequilibrio de la crisis el individuo es más susceptible a la influencia de los otros que en
épocas de funcionamiento estable. Además de los miembros primarios, hay agentes dedicados
al cuidado de la salud física y moral de la comunidad como sacerdotes, médicos, enfermeras,
etc, sobre los cuales no existe control y quienes por lo general no tienen preparaciones para
guiar. Entonces, la crisis es un período relativamente corto de desequilibrio psicológico en
personas que enfrentan circunstancias peligrosas; esas circunstancias constituyen para el
sujeto un problema importante que no puede por el momento ni evitar ni resolver con los
recursos acostumbrados. Durante el trastorno, el individuo elabora una nueva forma de
manejar el conflicto, descubriendo nuevas fuentes de energía, en sí mismo y en su medio
ambiente. Luego el trastorno disminuye y vuelve el equilibrio psicológico y la conducta
coherente. La nueva situación mental estable puede ser más o menos sana que la estructura
precrítica. El estado menos sano puede implicar un trastorno mental manifiesto o una mayor
vulnerabilidad a la alteración mental, debido a que la nueva pauta para resolver problemas
desarrollada no se basa en la realidad, incluye mecanismo de defensa irracionales o significa
un retraimiento de la vida real. Si el individuo no modificó el problema externo ni se adaptó a
él, sino que simplemente se evadió, el conflicto continuará ejerciendo presión. Cada crisis
representa tanto la oportunidad de un desarrollo como el peligro de un deterioro psicológico

Etapas en el proceso terapéutico de las crisis (etapas de duración variable): - Momento de


confusión desestructurante: inicio de la crisis, cuando el impacto masivo produce una invasión
violenta con efectos desestructurantes. Es el tiempo del caos, en el cual falla la eficacia de los
mecanismos defensivos que mantenían un equilibrio. La ansiedad tiene características
confusionales, no se entiende que ha pasado, no se puede creer y no puede ser pensado. Caen
las certezas y se derrumban los enunciados identificatorios que conllevan una pérdida de
sentido de pertenencia. Los modos de intervención se refieren a ayudar a contener. En esta
etapa es necesario contar con una evaluación de la serie grupal y familiar, para el caso que se
requirieran redes de contención grupal. Puede ser necesario, también, prestar nuestra
capacidad de pensamiento para organizar junto con el paciente, algunas decisiones. - Etapa de
enfrentamiento paranoide: luego de la desorganización comienzan a esbozarse las primeras
formas de organización, que suelen manifestarse bajo un tinte paranoide. Predomina la
ansiedad persecutoria y la situación comienza a configurarse rudimentariamente, con una
primera manifestación que consiste en ubicar un enemigo. Esto permite un primer modo de
organización de sentido y establecer nuevamente un afuera y un adentro y a su vez reunir
fuerzas para atacar al enemigo. La rabia y el dolor por lo vivido se hace más tolerable si se
deposita en el afuera, y así el sujeto recupera defensas que le permiten lograr un modo de
organización más tolerable. - Trabajo de duelo: Solo a partir de cierta organización lograda en
la etapa anterior se puede comenzar el trabajo de duelo. En toda situación de crisis en algún
momento se realiza un trabajo de duelo. El duelo es un trabajo interno que produce un dolor
diferente, acompañado de tristeza y depresión, y que comienza por restablecer cierta
preocupación por uno mismo y también por el otro. En el trabajo de duelo el yo acepta el
juicio de realidad, reconoce que algo se ha perdido. Tenemos el inicio de una organización
temporal, donde se puede comenzar a pensar y organizar la historia, darle algún sentido a lo
que pasó y anticipar mejor las actividades de corto plazo. Comienza a restablecerse la
temporalidad. También se reorganiza la imagen de sí mismo. - Adaptación al cambio: comienza
a aparecer una resignación constructiva. Hay un cambio en la posición subjetiva. Al
metabolizar de algún modo lo vivido, hay un sentimiento de aceptación del cambio que ha
devenido que permite el investimiento de metas y nuevos objetivos. Se ha reacomodado el
ideal y hay posibilidades de que se invista gradualmente el futuro. En este periodo suele darse
una experiencia de descubrimiento de capacidades nuevas, de recursos y posibilidades del
propio sujeto para enfrentar problemas.

Pelento “catástrofe social. Consecuencia e intervenciones” La autora (argentina, año 2003)


plantea que el contexto social actual es el de devastación, en el que hubo destrucción de
referentes sociales, lo que produce desolación. Además, distingue entre tres conceptos: - Caos:
significa ausencia de orden - Crisis de la cultura: modificación de los parámetros propios de
una época. Movimiento y cambio de categorías pensadas antes como estables. Los factores
que incidieron a esta crisis de la cultura son: la revolución informática, la globalización, la
explosión demográfica, entre otros. En nuestra realidad actual crisis de la cultura designa
cambio de los tres pilares constitutivos de la subjetividad: el estado, la familia y la escuela. -
Catástrofe social: destrucción de un cierto orden establecido. Plantea que hay incertidumbre
que provoca malestar y perplejidad. En cuanto a lo que se observa en nuestra práctica plantea
que hay una caída de lo privado, del mundo personal. Las vivencias de desamparo,
desesperanza, inseguridad, requieren un continente que las reciba y no las reduzca
inmediatamente a conflictos intrapsíquicos o familiares. Pero además, requieren
intervenciones que las discriminen. Uno de los efectos de la catástrofe social actual es el
borramiento de las diferencias entre lo privado y lo público. La pérdida de los referentes
sociales es la pérdida de la delimitación entre lo privado y lo público. Sin embargo, la
devastación social toca a cada persona de un modo diferente. En una situación de devastación
social es el encuentro analítio una de las instancias encargadas de habilitar y acreditar la
existencia social del otro

Irigoyen, Minotto y Pérez Lloveras “Crisis- tópica de lo traumático” Trauma: es el efecto de


un acontecimiento que se caracteriza por ser intento y por superar las posibilidades del sujeto
para elaborar una respuesta adecuada. Crisis: mutación considerable en un proceso, para
mejorar o empeorar. Situación de un proceso en el que se duda de su continuidad. Situación
dificultosa y complicada. La situación de crisis implica un desborde del yo que lo impulsa a una
cierta transformación interna, una reorganización mediante la cual se desarrollan nuevos
recursos para superar el estancamiento. Aparato psíquico y acontecimiento traumático: en
condiciones normales el aparato psíquico liga la energía que ingresa a representaciones
psíquicas para impedir su libre circulación y buscar una descarga adecuada. Este proceso es lo
que llamamos trabajo de elaboración psíquica de las excitaciones. Llamamos proceso primario
a la tarea de fijar estas excitaciones a representaciones de deseo y de asociarlas entre sí, a
través de los mecanismos de condensación y desplazamiento. Y llamamos proceso secundario
a la tarea de armonizar la descarga con la realidad. Las representaciones penosas que retornan
de lo reprimido, son contrainvestidas por el yo, en un trabajo de elaboración que alcanza
distintos niveles de complejidad, que van desde el afecto hasta las representaciones y grupos
de representaciones. Este funcionamiento está regulado por el principio de constancia, según
el cual el aparato psíquico busca mantener como constante un bajo nivel de energía contenida
en su interior. Esto se logra gracias a las descargas graduales en el proceso de simbolización y
seleccionando la cantidad de energía que ingresa al aparato. Pero lo que pasa en las crisis
desencadenadas por situaciones traumáticas es que el aparato psíquico es invadido por
magnitudes de energía para las que no está preparado, se produce entonces una ruptura y un
desborde del yo. Las excitaciones que irrumpen masivamente se manifiestan como angustia
automática. Se produce una desorganización psíquica. El acontecimiento traumático,
entonces, configura un cuerpo extraño que no se integra al yo y amenaza sus límites, ya que
aporta un exceso de excitaciones superior a su capacidad para simbolizarlos. En consecuencia,
el psiquismo busca su rápida descarga a través de la actuación. Lo que hace traumática al
acontecimiento es, entonces, la magnitud de energía, la intensa excitación. Entonces, las
excitaciones sin ligar se inscriben como representaciones traumáticas que desencadenan
angustia automática y atacan al yo desde las representaciones internas. El yo en la situación de
crisis: La instancia yoica es el lugar donde impacta el trauma y donde se genera la reacción. El
yo procura recuperar la homeostasis y para ello recurre a su repertorio de defensas más
drásticas: la escisión y la proyección, posibilitando la descarga masiva del afecto a través de los
actos sintomáticos. Mientras que para las representaciones penosas al aparato le basta con
acudir a la represión, frente a las representaciones traumáticas recurre a mecanismos más
primitivos. Los actos sintomáticos incluyen descargas a través de la acción o a través del
cuerpo. Cuanto más grande es la irrupción traumática en excitación en el AP, más es el
desequilibrio narcisista y más arcaicos los mecanismos defensivos que el yo implementa.
Ahora bien, esta fractura del equilibrio narcisista, sumada a los efectos de las defensas
arcaicas, produce un conflicto identificatorio que el yo deberá resolver. La tarea básica
habitual del yo es la construcción de un proyecto identificatorio con el cual sostener su
cohesividad actual y continuidad futura. Así, toda vez que las representaciones identificatorias
vacilen surgirá la angustia, que será señal y motor para este trabajo de coherentización. Pero
en las crisis, la angustia traumática, al demandar al yo medidas drásticas obstaculiza esta tarea
fundamental del yo: - Se produce una fractura en la continuidad del saber que el yo tiene
sobre sí mismo y en la percepción de sí mismo como una historización con cierta coherencia. -
Esto es vivido como una experiencia de paralización del tiempo, donde la historia se
discontinua y el yo ya no espera ningún por-venir. La resolución de las situaciones de crisis
dependerá, entonces, de la posibilidad del yo de realizar una transformación para reelaborar
las representaciones del sí mismo. Esta reestructuración presupone siempre un doloroso
proceso de duelo durante el cual algo del yo se pierde y algo se crea. Se pierden las
identificaciones que sostenían el equilibrio anterior y se construyen nuevos referentes
identificatorios. Esta resolución de las crisis puede tener un sentido progresivo o un sentido
regresivo. Las salidas regresivas dan lugar a procesos de desorganización yoica o
sobreadaptación y formación del falso self. La salida progresiva es una reestructuración del yo
que implica un trabajo de historización, de dotar sentido al conflicto elaborado y a restablecer
la continuidad entre pasado y futuro. Se recupera la temporalidad y se permite interpretar lo
vivenciado. Manifestaciones clínicas y abordaje terapéutico: el sujeto experimenta un gran
aumento de ansiedad, sentimientos de confusión, desconfianza e inseguridad, malestar
consigo mismo y con los demás. Incertidumbre frente a la acción, con incremento de la duda y
las inhibiciones. Alteraciones en ciertas funciones ligadas a la autoconservación (alimentación,
sueño, cuidado personal). Sentimiento de impotencia que despiertan necesidades de
dependencia. El sujeto en crisis se torna más receptivo a la ayuda terapéutica, la presencia de
otro en función de escucha opera como continente y regulador de la ansiedad y posibilidad en
un primer momento la descarga catártica, con el consiguiente alivio de la angustia.

Stordeur “Crisis y resiliencia” En las crisis el yo no puede responder a la pregunta de quién


soy. Se quiebra la continuidad, la historicidad del sujeto, la posibilidad de echar una línea
identificatoria en el tiempo se discontinua. Resiliencia: es la capacidad humana para enfrentar,
sobreponerse y ser fortalecido o transformado por las experiencias de adversidad. Resiliencia
no significa protegerse de una situación adversa, sino vivirla. La aparición o no de resiliencia en
los sujetos va a depender de la interacción de la persona y su entorno humano. La resiliencia
no es algo con lo que se nace, ni algo que se mantiene parejo a lo largo de la vida, sino que uno
puede ser más o menos resiliente según el momento. En las crisis, a partir del impacto
traumático, quedan magnitudes pulsionales sin ligar, esto constituye lo irrepresentable. En las
crisis, el AP, al estar invadido por este quantum energético, lo irrepresentable va a generar
emociones intolerables. Si lo irrepresentable se inscribe (se le otorga una significación),
estamos en presencia de una creación como nueva significación, nueva subjetividad. En este
sentido, reformulamos el concepto de resiliencia, que implicaría entonces, una capacidad del
psiquismo de capturar lo traumático, gracias a un soporte vincular, creando condiciones
psíquicas nuevas.
DSM -5 Hay dos enfoques. Uno categoriales (método tradicional) que procura establecer
categorías precisas a propiedades definidas, de manera que intenta determinar la ausencia o
presencia de una. Por otro lado, el dimensional que trata de medir las diferencias cuantitativas
de un mismo substrato, intentando ordenar los síntomas según los diferentes grados de
intensidad. Las versiones del DSM anterior al DSM-5 se hallan marcadas por un enfoque
categórico. Recién con la quinta edición del DSM nos encontramos con un enfoque
dimensional. El DSM-5 está organizado en 3 secciones: Sección I: conceptos básicos del DSM-5
Sección II: Criterios y códigos diagnósticos Sección III: recoge medidas dimensionales para la
evaluación de los síntomas.

Trastornos de ansiedad Son los que comparten características de miedo y ansiedad excesivos,
así como alteraciones conductuales asociadas. El miedo es una respuesta emocional a una
amenaza inminente, real o imaginaria, mientras que la ansiedad es una respuesta anticipatoria
a una amenaza futura. Las crisis de pánico se presentan principalmente con los trastornos de
ansiedad como un tipo particular de respuesta al miedo. Las crisis de pánico no se limitan a los
trastornos de ansiedad, sino que también pueden ser observadas en otros trastornos
mentales. Los trastornos de ansiedad se diferencian del miedo o la ansiedad normal propios
del desarrollo por ser excesivos o persistir más allá de los períodos de desarrollo apropiados.
Subtipos: · Trastornos de ansiedad por separación: la persona se encuentra asustada o
ansiosa ante la separación de aquellas personas por la que siente apego en un grado que es
inapropiado. Miedo o ansiedad sobre los posibles daños que puedan sufrir las personas por las
que siente apego, y sobre las situaciones que puedan llevar a la pérdida o separación de estas
personas. Esto surge a menudo en la infancia pero pueden expresarse también en la edad
adulta. · Mutismo selectivo: se caracteriza por una incapacidad para hablar en las situaciones
sociales en que hay expectativa de hablar. · Fobia específica: presentan miedo hacia
situaciones u objetos precisos o los evitan. Se presenta en un grado persistente o
desproporcionado al riesgo real planteado. · Trastorno de ansiedad social (fobia social): la
persona siente miedo o ansiedad ante las interacciones sociales y las situaciones que implican
la posibilidad de ser examinado, o bien las evita. · Trastorno de pánico: la persona
experimenta recurrente e inesperadas crisis de pánico y se encuentra persistentemente
intranquila o preocupada por tener nuevas crisis. Un ataque de pánico es la aparición súbita de
miedo intenso o malestar intenso que alcanza su máxima expresión en minutos y durante este
tiempo se producen cuatro o más de los síntomas siguientes: palpitaciones, sudoración,
dificultad para respirar, dolor en el tórax, sensación de mareo, temblor, miedo a perder el
control o de volverse loco, miedo a morir, entre otras. · Agorafobia: se sienten temerosos o
ansiosos ante dos o más de las siguientes situaciones: uso del transporte público, estar en
espacios abiertos, encontrarse en lugares cerrados, hacer cola o estar en una multitud, y
encontrarse solos fuera de casa, entre otras situaciones. · Trastorno de ansiedad generalizada:
ansiedad persistente y excesiva y una preocupación sobre aspectos que la persona percibe
difíciles de controlar. Además el sujeto experimenta síntomas físicos como: inquietud, fatiga,
dificultad para concentrarse, irritabilidad, alteraciones del sueño, etc. Ansiedad y preocupación
excesiva que se prolongan más de 6 meses. · Trastorno de ansiedad inducido por
sustancias/medicamentos.

‘La terapia psicoanalitica en psiquiatria. (Jimenez) *Psiquiatria y psicoanalisis.

Freud intento la construccion de un modelo mente/cerebri basado en los conocimientos de la


neurologia de la epoca, inento que el mismo desecho como fracasado. Construyo la
metapsicologia, teoria altamente imaginativa, que el mismo denomino como la “bruja” que es
convocada cuandose necesita fundamentar la psicopatologia y la terapeutica. El psicoanalisis
esta cruzado, en el corazon mismo de su formacion teorica, por la fractura que separa el
ambito del significado (hermenautica) del ambito de la causalidad (ciencia natural). No existe,
y probablemente nunca existira, un paradigma que unifique ambos mundos reduciendolo a
uno solo, pues la brecha que existe entre la experiencia subjetiva y los datos que arroja el
estudio cientifico del cerebro es precisamente lo que constituye el llamado “problema dificil”
en estudio en la relacion mente/cerebro. Kandel formula 5 principios del nuevo paradigma,
que permiten integrar factores psicosociales en los mecanismos patogeneticos cerebrales. Con
ellos, Kandelabrio el camio de la epigenetica y de paso, a la investigacion de los mecanismos de
accion molecular de la psicoterapia. Estos principios son: 1. Todos los procesos mentales
derivan de operaciones cerebrales. 2. Los gene y sus proteinas determinan patrones de
interconexiones neuronales y su funcionamiento. Por lo tanto, la genetica contribuye a la
patogenesisi de las enfermedades mentales. 3. Genes alterados no explican por si mismos las
variaciones de una enfermedad mental grave. Factores sociales y ambientales contribuyen de
manera importante, los que a traves de la modificcion de la expresion de los genes cambian el
funcionamiento de las celulas nerviosas. El aprendizaje, tambien el disfuncional, altera la
expresion genetica. 4. Alteraciones en la expresion genetica producidas por aprednizaje,
cambia patrones neuronales y con ello no solo contribuye a la individuacion, sino tambien a la
mantencion de anormalidades conductuales inducidas por el aprendizaje. 5. Si la psicoterapia
es efectiva, lo es en la medida en que genera cambios conductuales a largo plazo y
presumiblemente lo hace a traves de aprendizaje que altera la fuerza de las conexiones
sinapticas y de cambios estructurales que alteran el patron anatomico de interconexiones
entre las celulas del cerebro. Kendler formula un nuevo marco para la investigacion de la
interaccion mente/cerebro, paradigma que el llama del pluralismo explicativo. Segun este,
los postulados que deben orientar la investigacion y la clinica psiquiatria son: 1. Las
disciplinas de la mente estan irrevocablemente fundadas en experiencias mentales en primera
persona 2. El dualismo y epifenomenalismo son falsos. 3. La causalidad es de cerebro a mente,
y de mente a cerebro. 4. Los trastornos psiquiatricos son etiologicamente complejos. 5. El
pluralismo explicativo es preferible a los enfoques monistas, en especial al reduccionismo
biologico. 6. Nos debemos mover de la “batalla de paradigmas” a un enfoque que asuma la
complejidad de los fenomenos mentales. 7. Por el momento hay que aceptar reduccionismo
parciales con la menta de alcanzar integraciones graduales.

Las explicaciones de fenomenos complejos no son lineales, sino que se comportan como red.
Todo fenomeno mental acepta diversos niveles y perspectivas explicativas, desde el nivel
molecular hasta el nivel del significado de la conducta, pasando por distintos niveles
funcionales anatomicos cerebrales. Se trata de tomar en serio la idea psicoanalitica de que la
mente se construye gradualmente a lo largo del desarrollo y que las dimensiones de deficit de
funcionamiento mental pueden orientar las estrategias de intervencion terapeutica.

El diagnostico cursa por 5 ejes, donde solo el ultimo lo constituye el diagnostico categorial
tipo DSM o CIE. Los otros cuatro ejes se refieren a aspectos decisivos a considerar en la
indicacion de psicoterapia. El Eje I se refiere a la vivencia de la enfermadd y a los prerrequisitos
para el tratamiento. Este eje esta centrado e n captar la disposicion de un paciente para entrar
en tratamiento psicologico, su motivacion, su grado de sufrimiento psiquico, su teoria
subjetiva de la enfermedad y de la curacion, los obstaculos internos y externos, los recursos
personales y sociales. El Eje II se enfoca en el diagnostico de los patrones de realciones
disfuncionales, que son parte central de la mayoria de los motivos de consuta. El Eje III se
dedica al diagnostico de los conflictos inconcientes predominantes en el consultante. Los
conflictos intrapsiquicos internos son colisiones inconcientes entre grupo de motivaciones
distintas. El Eje IV se refiere al diagnostico de la estructura psiquica del consultante, Este eje se
refiere al tejido de las disposiciones psiquicas, que abarca todo lo que en la vivencia y conducta
del individuo se desarrolla de manera regular y repetitiva; la estructura es relativamente
estable a lo largo de la vida. (Bernardi): El eje I alerta sobre el sufrimiento del paciente, cuyo
comportamiento en la entrevista y el relato de sus vinculos se pone de manifiesto en el eje II.
Este pone de manifiesto las dificultades actuales de relacion. En primer lugar se explora en que
medida los problemas del paciente son consecuencias de sus conflictos icc en el marco de un
funcionamiento estable de sus funciones psiquicas basicas (eje III). Al mismo tiempo se
investifa la posibilidad de fallas estructurales en estas funciones y se busca determinar la
severidad de estas fallas (eje IV).

*Estructura y conflicto describen aspectos diferentes del sistema psiquico. El conflicto como
patrón repetitivo, describe aspectos psicodinamicos del significado de los acontecimientos y
por consiguientem tambien de las condiciones para desecadenar los sintomas. La estructura se
refiere a la vulnerabilidad de la personalidad, a la predisposicion a la enfermedad y a la
capacidad para elaborar los conlficto internos y las experiencias estresantes externas.

El grupo OPD distingue cuatro dimensiones de evaluacion estructural: 1. La primera se


refiere a las capacidades cognitivas, de percepcion de si mismo y del objeto. El requisito
central para una percepcion realista del onjeto radica en poder distinguir lo propio de lo ajeno,
diferenciacion que no solo es importante para una percepcion realista del objeto, sino para
una percepcion realista de uno mismo. 2. La segunda dimension se refiere a la capacidad de
autorregulacion y de regulacion del objeto. Aqui se evalua la capacidad de distanciarse de los
impulsos, de dirigirlos y de integrarlos, de distanciarse de los propios afectos y de regularlos y
de distanciarse de las ofensas, regulando la autoestima. 3. La tercera dimension de evaluacion
estructural se refiere a la capacidad emocional de comunicacion hacia adentro y hacia afuera.
Refereido a uno mismo, la comunicacion emcional se refiere a la capacidad de mantener
dialogos internos y de entederse a uno mismo. 4. La cuarta dimension de la estructura se
refiere a la capacidad de establecer vinculos con los objetos internos y externos, a la capacidad
de relacionarse con los otros, tanto intrapsiquicamente como en el contacto interpersonal. La
disponibilidad de estos objetos internos es condicion para poder calmarse a si mismo,
consolarse y protegerse.

Convergencias y divergencias entre los nuevos sistemas de diagnosticos psiquiatrico y


psicoanalitico. (Bernardi) El diagnostico clinico constituye un campo privilegado para el
dialogo entre la psiquiatria y el psicoanalisis, en el que alo largo del tiempo se dieron
convergencias y divergencias de distinta naturaleza. El termino “diagnostico” es utilizado por
multiples disciplinas para designar el proceso analitico que conduce a identificar fenomenos de
acuerdo con un sistema conceptual que es tomado como referencia. El proceso diagnostico no
termina en la primera entrevistam aunque ella puede ser importante, sino que continua a
traves del tiempo y puede incluir diversas perspectivas especializadas. Un sistema diagnostico
deber poseer utilidad clinica, lo que significa que debe abarcar el conjunto de trastornos que
se ven en la practica, facilitar su reconocimiento y ser suficientemente amigable para que
pueda ser utilizado por personas con el entendimiento promedio. El DSM-V propone reducir el
numero de categorias o prototipos principales a los siguientes: 1) trastorno borderline
(fronterizo o limite); 2) antisocial/psicopatico; 3) esquizotipico; 4) evitativo; 5)
obsesivocompulsivo. La reduccion fue decidida sobre la base de estudios que mostraron que
estas cinco categorias eran las que poseian mayor validez y utilidad clinica. Las categorias que
quedan suprimidas sin sustituidas por una evaluacion a traves de la combinacion de rasgos,
sumada al funcionamiento de la personalidad en las áreas del self e interpersonal. Se espera
que la descripcion sobre la base de rasgos permita eliminar comorbilidad del DSM-IV, clarificar
la heterogeneridad de las categorias, incrementar la estabilidad de los diagnósticos, reconocer
la naturaleza continua de los fenomenos y mejorar la validez discriminante y convergente. El
diagnostico consignara: A) El nivel de funcionamiento de la personalidad en una escala que
va de 0 (sin perturbacion) a 4 (perturbacion extrema) B) El grado de concordancia del caso con
cada de uno de los 5 prototipos de personalidad descritos. El grado de concordancia con cada
uno de ellos puede ir de 5 (muy bueno) a 1(inexistente) C) Se consignan los rasgos de la
personalidad que llegan a nivel 3 (extremadamente descriptivo) y 2 (moderadamente
descriptivo) El OPD-2 entiende por foco “aquellos aspectos problematicos que producen o
mantienen el trastorno y sobre los cuales debe construirse el trabajo terapeutico”. En el foco
se ponen de manifiesto las estrategias que le permiten al paciente sobreponerse a sus
conflictos en el marco de sus posibilidades estructurales, de lo que se desprende que los
objetivos terapeuticos deben incluir el lograr modificaciones a nivel de lo que se ha definido
como foco. Cada uno de los ejes diagnosticos contribuyen a la formulacion de los focos. Un
mismo motivo de consulta inicial puede dar orifen a diferentes focos de trabajo terapeutico de
acuerdo con lo que surge el examen de los diversos ejes. La orientacion del trabajo terapeutico
y la reformurlacion del motivo de consulta se estableceran, por lo tanto, en funcion de focos
formulados en funcion de estas perturbaciones. El manual de diagnostico psicodinamico (PDM)
pone el acento en los aspectos diferenciales de cada paciente, buscando comprender el modo
en que cada uno experimenta sus trastornos y la organizacion de su personalidad. Apunta por
tanto a lograr una formulacion mas individualizada y ammplia del funcionamiento psiquico.
Distingue tres ejes: ● El eje P: trastornos y patrones de la personalidad. (Puntos de contacto
con el DSM-V) ● El eje M: funcionamiento mental. (Especial interes para el dialogo entre la
psquiatria y el psa) ● El eje S: experiencia subjetiva de los patrones. (Puntos de contacto con el
OPD-2)

Aportaciones y limitaciones del DSM-5 desde la Psicologia Clinica. (Echeburua) Los trastornos
mentales son patrones de comportamiento de significacion clinica que aparecen asociados a
un malestar emocional o fisico de la persona, a una discapacidad, al deterioro en el
funcionamiento cotidiano, a la perdida de libertad o incluso a un riesgo significativamente
aumentado de implicarse en conductas contraproducentes o de morir prematuramente. El
DSM-V esta organizado en tres secciones. La seccion I esta dirigida a proporcionar pautas para
el uso clinico y forense del manual. La seccion II incluye los criterios y codigos diagnosticos de
los diferentes trastornos, y por ultimo la seccion III recoge medidas dimensionales para la
evaluacion de sintomas, criterios sobre la formulacion cultural de lo trastornos y una
propuesta alternativa sobre la conceptualizacion de los trastornos de personalidad, asi como
una descripcion de las condiciones clinicas que estan actualmente en estudio. A nivel
estructural y organizativo, los cambios mas destacables en el DSM-5 son la eliminacion del
sistema multiaxial(porque generaba distinciones artificiales y era poco utilizado) y la
reorganizacion de los capitulos. El DSM-5, como las ediciones anteriores a este manual, esta
basado en el modelo categorial, que implica que cada categoria diagnostica es diferente de la
salud y el resto de las categorias diagnosticas. Sin embar, al ser concientes sus autores de las
limitaciones del sistema categorial, incorporaron, hasta cierto punto, un enfoque mas
dimensional que en las ediciones anteriores. Se analiza la severidad mayor o menor de los
sintomas (leve, moderado, y severo) en diversos cuadros clinicos ( el trastorno depresivo
mayor o los trastornos adictivos y relacionados con sustancias). La organizacion global de los
capitulos tiene mas en consideracion el ciclo vital que en las ediciones anteriores del DSM. Asi,
los cuadros clinicos que se manifiestan en las primeras fases evolutivas figuran al principio del
manual; los trastornos que habitualmente aparecen en la adolescencia y en la edad adulta
joven se encuentran descritos en la parte central; y por ultimo los trastornos asociados a la
vejez se hallan al final. En el DSM-V, como en sus ediciones anteriores, se habla de trastornos
mentales, no de enfermedades mentales. El concepto de enfermedad implica una etiologia,
una agrupacion de sintomas, un curso y un pronostico, asi como una determinada respuesta al
tratamiento. En este sentido el DSM-V, como sus antecesores, es mas un diccionario
descriptivo que un manual de psicopatologia. Las insuficiencias del manual derivan del modelo
medico de enfermedad mental. El sufrimiento humano es el resultado de una compleja
combinacion de factores biologicos, psicologicos y sociales, lo que implica la necesidad de la
formulacion psicologica y el necesario conocimiento de las historias de vida de los pacientes,
es decir, de una evaluacion y de un tratamiento psicologico individualizadom fudamentado en
las terapias psicologicas basadas en la evidencia.

El vinculo teraperutico: el rol del entrenamiento en empatia. (Putrino

La empatia es un componente de la cognicion social, que implica la capacidad para


comprender al otro y ponerse en su lugar. En psicoterapia es un concepto que se suele utilizar
en las diferentes formaciones academicas y practicas, pero pocos estudios han logrado realizar
investigaciones dirigidas a conocer las diferencias individuales y a evaluar la importancia e
implicancia en los resultados terapeuticos. Ser empaticos es imprencidible para el
funcionamiento de una sociead, dado que esta en juego en varios comportamientos en que las
personas conviven entre si, como la cooperacion, la compasion y la busqueda del bienestar
general. Se trata de una compleja forma de inferencia psicologica en la que la observacion, la
memoria, el conocimiento, y el razonamiento se combinan para poder comprender los
pensamientos y sentimientos de los demas. Davis propone una definicion multidimensional de
la empatia, considerando que esta capacidad se compone de aspectos congnitivos y afectivos:
a) la empatia cognitiva basada en la capacidad de adoptar la perspectiva del otro, proceso en
el cual las funciones ejecutivas serian relevantes, permitiendo mayor flexibilidad congnitiva y
autorregulacion; b) la empatia emocional o afectiva, que seria la reaccion ante el estado
emocional de otra persona, en la cual seria relevante la percepcion el imitacion de expresiones
emocionales. La respuesta empatica incluye la capacidad para comprender al otro a partir de
lo que se observa, de la informacion verbal y la reaccion afectiva, al compartir ele stado
emocional de la otra persona. Rogers define la empatia terapeutica como la capacidad de
percibir con precision el marco interno de referencia del otro, incluyendo sus componenetes
emocionales y significativos. La empatia en la terapia es fundamental paralacanzar resultados
terapeuticos optimos. Los pacientes que perciben a sus terapeutas como empaticos
experimentan cambios estructurales en sus modelos internos y tratan a si mismos y a otros
menos negativamente al final de la terapia. Comprender lo que piensa y siente el paciente, le
permitira al terapeuta expresar significados sobre la experiencia sunjetiva del consultante,
dado que muchas veces el mismo paciente no es conciente de lo que le sucede o interpreta los
hechos de manera sesgada por sus creencias y/o emociones. Un riesgo que puede correr el
terapeuta es el del distres emocional o la sobre-empatizacion. Esta ocurre cuando el terapeuta
no logra poner la necesaria distancia con su paciente y la emocion lo invade de tal manera que
ovlida que el problema o la situacion conflictiva le “pertenece” al paciente. En la sobre-
empatizacion, la persona pierde temporalmente la capacidad de regular la propia implicacion
emocional y olvida temporalmente que lo que le sucede al otro, es diferente a su perspectiva.
La capacidad para regular y controlar su compromiso emocional es inherente a la concepcion
de la empatia terapeutica. Es vital que los medicos y los psicologos regulen su capacidad de
empatia con sus pacientes para que su reaccion emocional no interfiera con la eficacia de su
tratamiento ni afecte su bienestar.

Sobre la tranferencia: Aspectos de fondo (Marrone)

En la teoría psicoanalítica, la transferencia se refería a un proceso por cual los sentimientos,


deseos o expectativas eran desviados de una persona hacia otra. El término fue originalmente
utilizado por Freud y concebido como un falso enlace, ya que los sentimientos, originalmente
asociados a figuras parentales, eran separados de su contexto y de su objeto temprano y eran
revividos en otro lugar con otra persona. En la historia temprana del individuo, el afecto estaba
ligado a una figura parental primaria, pero ahora reaparece desplazado de forma inadecuada a
otra relación con una persona distinta. Freud observó que en la terapia psicoanalítica los
afectos son desplazados de la figura parental temprana hacia la persona del terapeuta. Se
reacciona con respecto a una persona del presente como si fuera una persona del pasado.
Inicialmente Freud pensó la transferencia como un obstáculo en terapia. Sin embargo, más
adelante, reconoció la importancia de la transferencia como una forma de comprender y
analizar al paciente. La transferencia no surge sólo en el análisis; el tratamiento psicoanalítico
no crea transferencia sino que la saca a la luz. Pensar que todas las comunicaciones en la
sesión analítica deberían ser interpretadas como manifestaciones de transferencia es una
visión reduccionista. Creemos que solo ciertas comunicaciones, en su significado específico,
pueden ser consideradas como indicativas de fenómenos transferenciales. Si interpretamos
todo lo que el analizado dice como manifestación de una realidad interna no dejamos espacio
para la expresión de su apreciación acerca de la realidad interpersonal. Por otro lado, pensar
que la transferencia se refiere a la calidad general de los sentimientos que un paciente tiene
hacia su analista, es decir, que la transferencia positiva o negativa proviene del mundo interior
del paciente; es tener una visión reduccionista ya que se pasa por alto la forma en que el
comportamiento del analista puede influir en estas actitudes. No existe relación que sea
independiente de lo que cada parte pone en ella. Kohut y la transferencia: Kohut plantea
que la respuesta empática de la figura primaria de apego es esencial para el funcionamiento
óptimo del self. Dentro de este marco teórico los procesos transferenciales son entendidos
como el resultado de revivir, en una relación actual, la búsqueda de objetos-self y, al mismo
tiempo, el miedo a que esta necesidad se frustre una vez más, como en la infancia. El daño
estructural causado por fracasos en la función de objetos-self requiere defensas específicas
que se muestran en la relación transferencial actual. Kohut estudió principalmente la
transferencia en pacientes dañados narcisisticamente. Lacan rechazó la idea de la
transferencia como un afecto que ocurre dentro del individuo y que luego se externaliza.
Consideraba la transferencia como una relación estructural, donde tiene lugar un intercambio
que cambia la naturaleza de los dos seres presentes. Es decir, la transferencia no es un
fenómeno individual sino el resultado de una relación intersubjetiva. El analizado supone que
el analista es el sujeto supuesto saber, es decir, supone que el analista conoce el significado
secreto de sus palabras. Es importante como el analista maneja esta transferencia, es decir,
que hace para rehusar el poder que se le ha otorgado. El analista no debe contribuir a ser
puesto en la posición de un dios ya que no hay ser humano que pueda ocupar esta posición.
Lacan pensaba que las interpretaciones no debían ser todas sobre la transferencia. Bowlby
pensaba que la manera en que un paciente percibe a su analista está parcialmente influido por
sus modelos operativos internos. El objetivo principal cuando se interpreta la transferencia es
sacar a la luz, examinar y modificar los modelos operativos internos subyacentes.

Apego. (Vernengo)

El comportamiento de apego se define como toda conducta por la cual un individuo mantiene
o buca proximidad con otra persona considerada como mas fuerte. Se caracteriza tambien por
la tendencia a utilizar al cuidador principal como una base segura, desde la cual explorar los
entornos desconocidos, y hacia la cual retornar como refugio en momentos de alarmas. El
apego es claramente observable en la preocupacion intensa cuando se encuentran en
entornos poco familiares. Bowlby, afirma que existe una necesidad humana universal para
formar vinculos afectivos estrechos. El punto central de la teoria esta dado en la postulacion
de una relacion causal entre las experiencias de un individuo con las figuras significativas y su
posterior capacidad para establecer vinculos afectivos. El ser humano no nace con la capacidad
de regular sus reacciones emocionales. Necesita de un sistema regulardor diadico, en el que
las señales del niño sobre sus estados sean entendidas y respondidas por sus figuras
significativas, lo que le permitira alcanzar asi la regulacion de esos estados. En esta teoriam un
concepto clave es el de sistema conductual, el cual supone una organizacion homeoestatica
para asegurar que una determinada medida se mantega dentro de limites adecuados. La
conducta de apego se organiza por medio de un sistema de control, analogo a los sistemas de
control fisiologico que mantienen dentro de ciertos limites las medidas fisiolgicas. El sistema
de control de apego mantiene el equilibrio entre cercania-distancia respecto de la figura de
apego. El sistema de apego, cuyo objetivo es la experiencia de seguridad, es un regulador de la
experiencia emocional. Para bowlby, la presencia de un sistema de control de apego y su
conexion con los modelos operantes del si mismo, modelos de funcionamieno interno, y de las
figuras de apego, constituyen caracteristicas centrales del funcionamiento de la personalidad.
Para Bowlby, los patrones de apego se mantienen a lo largo del tiempo, es decir que los
“modelos de funcionamiento interno” del self y de los otros proveen prototipos para todas las
relaciones ulteriores, siendo relativamente estables a los largo del ciclo vital. Tanto el psa
como la teoria del apego sostienen que la sensibilidad materna desempeña un papel decisivo
en el desarrollo de la psique. Bowlby sostiene la importacia del entorno familiar- extraño. La
teoria del apego subraya el papel del ambiente en el origen de enfermadades mentales.
Encontramos como pieza fundamental el papel desempeñado por los progenitores o
cuidadores. La tendencia a vincularse a otro es primaria, y no una pulsion secundaria,
constituida a partir de la satisfaccion de las necesidades orales. Este autor considera que la
inclusion de modelos representacionales del si mismo y de las figuras de apego, los cuales
implican modelos de funcionamieno interno, semejantes a los postulados por la teoria
psicoanalitica, diferencia claramente esta teoria del conductismo. La clinica desde esta teoria
apunta a que el paciente revise sus experiencias de apego, buscando en primer lugar detectar
el patron tipico de apego del paciente, como se relaciona en general y con el terapeuta. Se
examinan tambien los sucesos importantes de su vida, sobre todo las separaciones y los
encuentros, los duelos. Bowlby clasifica las funciones del analista de la siguiente manera: -
Proporcionar una base segura a partir de la cual el paciente pueda explorarse a si mismo y sus
relaciones, es decir, establecer un vinculo confiable. -Realizar con el paciente las exploraciones
sobre sus relaciones interpersonales. -Señalar la manera en que este tiende a “construir” sus
sentimientos, sus expectativas em los vinculos, predicciones y consecuencias d elas mismas. -
Relacionar sus modos de vincularse, incluso con el terapeuta, con experiencia de la vida real
que tuvo con figuras de apego, y asi arrojar comprension sobre sus relaciones actuales. -En la
practica, todas estas funciones se realizan simultaneamente. Bowlby considera que la actitud
empatica del terapeuta puede producir modificaciones en los modelos de funcionamiento
interno. El objetivo central es ayudar a revisar al paciente los modelos repesentacionales de si
mismo y de sus figuras de apego, los cuales rigen actualmente sus percepcicones, predcciones
y actos. Analizar los patrones de apego va ligado a un analisis de la transferencia ya que los
modelos de apego se reflejaran en esta.

Trastornos de la personalidad y apego: diagnostico y evolucion. (Etchevers)

*Para ser diagnosticado con TLP se debe reunir cinco de los nueve criterios presentados por el
DSM-IV, y a su vez, los sintomas deben significar un deterioro en la bida del paciente o bien
resultar en angustia La relacion entre el trastorno, sus causas de mantenimiento y
particularmente la relacion entre sus origenes y los tratamientos, adquieren una importancia
mayor dada la evidencia de factores de vulnerabilidad psicosocial, abuso o maltrato y deficits
sufridos en la infacia de estos pacientes. Debido a que el sistema de diagnostico categorial
comienza a mostrar ciertas limiaciones, particular para los clinicos, se integra las propuestas
diagnosticas la perpesctiva dimesional. La misma se basa en un enfoque que asume que os
trastornos mentales no son cualitativamente diferentes de la normalidad o salud mental sino
que representan un extremo por exceso o deficit o gradaciones. Los Trastornos de la
Personalidad serian entonces expresiones disfuncionales del modo de ser de los individuos,
por lo que tambien es necesaria una concepcion dimensional que permita establecer
relaciones entre los rasgos del funcionamiento normal y psicopatologico de la personalidad.
Los pacientes con TLP tienden a puntuar bajo en nivel de agudeza y conciencia, y ato nivel de
neuroticismo que se encuentra asociado con trastornos del estado de animo, ansiedad, y uso
de sustancias, y esta probablemente relacionado a una elevada comorbilidad con el TLP. Se ha
correlacionado el neuroticismo con la angustia y el comportamiento suicida, ambos
prevalentes en el TLP. Los autores señalan de que uno de los tratamientos empirmicamente
apoyados para el TLP es la Terapia Dialectica Conductual. Bowlby plantea cuatro sistemas de
conductas relacionados intimamente entre si, las cuales son consideradas heterogeneas y
dependen de distintos factores contextuales e individuales para su activacion y desactivacion,
su intensidad y morfologia. El primer sistema se basa en las conductas de apego, aquellas que
fomentan la proximidad y el contacto con las figuras de los cuidadores, considerados como
base segura que promuevem la exploracion. En el segundo sistema se encuentran aquellas
conductas de exploracion, las mismas disminuyen al aumentar las conductas de apego. Los dos
sistemas anteriores se ven facilitados por la activacion de un tercer sistema en relacion a las
conductasde miedo a los extraños. Mientras que el cuarto sistema denominado afiliativo,
implica sostener la proximidad y la interaccion con los otros cercanos y con aquellos con los
que aun no hay un vinculo afectivo. El TLP se encuentra clasificado en el DSM-5 dentro del
grupo B de la categoria de trastornos de la personalidad, junto con los subtipos limites,
histrionico y narcisista. Se caracteriza por pensamientos polarizados y dicotomicos, y una
desregulacion emocional que conlleva a la impulsividad y vinculos interpersonasles inestables.
En el TLP se presenta una grave disfuncion en cuatro areas: emocional, conductual,
interpersonal y cognitiva. Entre aquellas caracteristicas que aumentan la vulnerabilidad
temperamental en el TLP se encuentra la agresividad impulsiva, la inestabilidad afectiva y la
vulnerabilidad emocional. Los autores incluyen un nuevo factor como una caracteristica
fundamental en la vulnerabilidad intelectual: la sensibilidad a la ansiedad. Es considerada
como una caracteristica diferencial individual y estable, incluye la propension a la creencia de
que los isntomas relacionados con la ansiedad tendran consecuenias somaticas, congnitivas
y/o sociales negativas. Predomina una inestabilidad emocional, acompañada de una sensacion
de vulnerabilidad casi permanente, una marcada reactividad a factores externos, y una
dificutad para funcionar adptativamente por largos periodos d etiempo. La etiologia del TLP se
encuentra vinculada, entre otros factores, a una alta prevalencia de situaciones de abuso
infantil y que se correlaciona significativamente con la cantidad de intentos de suicidios,
debido a que se considera un factor determinante en el desarrollo de conductas autolesivas. La
alta tasa de intentos de suicidio en pacientes con TLP se encuentra relacionada con las
caracteristicas predominantes del trastorno, tales como la deregulacion emcoional, los
cambios bruscos de humor, los conflictos de identidad, el miedo a la soledad, y la impulsividad,
siendo esta ultima la mas asociada al comportamiento suicida. Los pacientes con TLP
experimentan mayores dificultades para resolver los problemas sociales y perturbaciones en
sus relaciones romanticas. El patron de apego temeroso se encuentra asociado a una dolorosa
intolerancia a la soledad, a una marcada hipersensibilidad a las situaciones sociales, a una
mayor alerta a las respuestas hostiles y a una considerable reduccion de las memorias positivas
de las interacciones diadicas. No pueden imaginar al otro teniendo una construccion de la
realidd diferente de las que ellos experimentan como convincentes, es por esto que sus
esquemas interpersonales son extremadamente rigidos. El TLP esta determinado por distintos
conflictos, entre los cuales se encuentran: problemas agudos en la autoimagen, dificultades en
las rleaciones interpersonales, desregulacion afectiva y conflictos con la indetidad. Estos se
encuentran asociados a niveles altos de impulsividad y agresividad, baja autoestima, miedo al
abandono y a conductas autolesivas e intentos de suicidio. Los sujetos que padecen este
trastorno tienen un tipo de personalidad maladaptativa que se expresa en los
comportamientos recien mencionados y en una disfuncion que afecta lo emocional, lo
conductua y lo interpersonal.

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