Fundamentos de la enseñanza cristiana.

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Semana 3- Filosofía bíblica del ministerio.

La iglesia evangélica en el mundo contemporáneo:

 Diagnóstico lamentable.
 Ideas humanas infiltradas.
 Políticamente correctos.
 Importa más ser relevantes.
 Pastorado femenino.
 Homosexualismo.
 Tolerancia del error.
 Falta discernimiento.
 Mala hermenéutica.
 Superficialidad bíblica y doctrinal.
 Mucha distracción.
 Modas evangélicas.
 Culto tradicional desaparecido.
 Nuevos cultos.

Resumen: La iglesia evangélica hoy no se asemeja mucho a la iglesia primitiva y ha desdeñado

el valor de las escrituras como autoridad para determinar la función y desenvolvimiento de la
iglesia, estamos repletos de la influencia del mundo y nos guiamos por parámetros populares y
políticamente correctos impuestos por la sociedad en los que se presupone que los principios
eternos del creador deben reemplazarse por una adaptación a la actualidad y su ritmo
acelerado, presentando el evangelio como un producto que se modifica para hacerlo más
deseable y con ello, sacrificando la verdad de Dios, permitiendo así prácticas pecaminosas
como el homosexualismo o una interpretación pobre y desviada de la intención original del
autor de las escrituras.

Definición de una filosofía bíblica de ministerio:

Definición: Cuando se hable de filosofía bíblica del ministerio, se debe enfocar en parámetros que
establecen o impulsan todo lo que hacemos en la iglesia, con la función de presentar elementos
esenciales de las escrituras de una filosofía del ministerio eficaz que hable de nuestra orientación y
desempeño con respecto a la ejecución de un ministerio bíblicamente correcto.

 ¿Cómo desarrollar un ministerio que sea bíblicamente exitoso?

 General: ¿por qué hacemos lo que hacemos?
 Específica: principios bíblicos no negociables.
 Enseñanza explícita.
 Métodos implícitos.
Beneficios de una filosofía bíblica de ministerio:

 Unidad: fundamento bíblico.

No producto de ingenio humano, sino que está sustentado en las escrituras.
 Unidad: dirección.
El ministerio es coherente y está conformado de una manera sustentable.
 Evaluación periódica.
Nos es necesario comprobar continuamente que nuestro ministerio está correctamente
guiado y conforme a nuestra filosofía fiel a las escrituras.
 Determinación de objetivos.
Nos planteamos qué queremos lograr conforme a la voluntad de Dios manifestada en las
escrituras.

¿Cómo desarrollar una filosofía bíblica de ministerio?

 Enfoque inapropiado.
Comenzar con programas imitando a otros ministerios, Dios en su soberanía y la amplitud
y diversidad de su voluntad no necesariamente desea que todos tengamos iglesias con
muchas ovejas, sino la que se adecúan a sus deseos y las que él designa según su
entendimiento.

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¿Cómo desarrollar una filosofía bíblica de ministerio?

1. Enfoque inapropiado.

a. Imitar a un modelo de moda.

Las tendencias no determinarán el camino correcto a seguir con respecto al desempeño
de un ministerio sino precisamente la voluntad de Dios.
b. Seguir como siempre.
No es correcto repetir y perpetuar un mismo modelo sino adecuarse conforme a cada
situación a lo que Dios desea aplicar.

2. Enfoque en la gente.

a. Preguntar a la gente qué necesitan.

Muchos de los miembros en general no sabrán qué necesitan, es nuestra responsabilidad

como guías el orientar a dirigir de acuerdo a las necesidades esenciales.

b. buscar agradar a la gente.

Nuestro enfoque debe estar dirigido en agradar a Dios y no a las personas como prioridad.
3. Establecer metas.
No necesariamente está mal establecer metas mientras respondan a prioridades bíblicas y
estén acordes a la voluntad de Dios para con la iglesia.
a. Metas para el éxito.
Es un error basar nuestras metas de ministerio en el éxito, puesto a que los siervos de Dios
aspiramos a virtudes y logros que no necesariamente están asociados a un éxito efímero y
mundano.
b. Metas con base en evaluaciones incorrectas de la congregación.
No debemos “rascar donde no pica” sino atinar bíblicamente en las auténticas y reales
necesidades de los creyentes.

 Enfoque apropiado: ¿qué elementos constituyen la estructura de un ministerio bíblico?

1. Concepto alto de Dios.

Es de Dios y es para Dios la gloria, es necesaria la firme identidad de la iglesia que vive
para glorificar a Dios.
a. Él tiene el primer lugar en todo, es supremo.
A través de este entendimiento nos es posible vivir para Él, puesto a que él es el centro de
todo y no ser una iglesia que se enfoque en sí misma.
b. Dios y sus propósitos deben ser supremos en la iglesia.
Según mi teología será mi práctica y mi adoración, siempre está vinculado.
c. Esto debe llevarnos a una conducta coherente con su revelación de sí mismo.

2. Autoridad absoluta de la escritura.

La biblia es inspirada por Dios y si tenemos un alto concepto de Dios por ende
respetaremos y tendremos a las escrituras como máxima autoridad.
a. Inspirada.
Theopneustos, palabras de la boca de Dios que nos sustentan y ostentan poder y
autoridad.
“Hebreos 1 Reina-Valera 1960
Dios ha hablado por su Hijo
1  Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres
por los profetas,
2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo,
y por quien asimismo hizo el universo;”

b. Infalible.
c. Autoritativa.
d. Suficiente.
e. Relevante.
3. Antropología correcta.
La escritura muestra al hombre como una criatura depravada y así debe percibirse, como
que el hombre esta muerto en delitos y pecados y a través de eso adquiere sentido la
necesidad e un salvador.

a. Humanidad totalmente depravada

La condición en la que nace el hombre es muerto en sus pecados y todo su ser fue
contaminado por tal condición.
b. Hombre busca glorificarse a sí mismo.
Originalmente el hombre fue creado con la función de glorificar a Dios, pero el pecado y la
desviación de su conducta le hizo buscar su propia satisfacción.