La ética entendida como un eje central en la formación del futuro profesional, constituye un elemento necesario presente en todos los programas de la Universidad Pontificia Bolivariana y por esta razón cobra sentido la necesidad de procurar formar este aspecto del ser humano tan necesario en la sociedad actual y que hace competente a los egresados de la UPB. El curso de ética general se fundamenta en el modo de ser propio del individuo, el cual debe situarse en un espacio reflexivo en que las exigencias personales le lleven a tomar postura y actitud crítica en las diferentes relaciones establecidas con lo moral, el derecho, la sociología, entre otras. Para esto es imperioso que el estudiante se reconozca en ambiente social y con la necesidad por el respeto consigo mismo, con el otro y con lo otro.
Con el paso del tiempo, la ética se ha visto en la
obligación de actualizar su discurso reflexivo y los aportes que hace a los diferentes saberes, porque la razón de ser de su estructura conceptual se modifica a la par que las sociedades y sus necesidades, motivan a los estudiantes a crear espacios de diálogos constructivos desde sus diversos campos de formación, los cuales interactúan en un mismo encuentro. En un mundo tan globalizado como el nuestro, las relaciones personales han trascendido y avanzado a la par que la tecnología, y es por esta razón que resulta necesario descubrir una ética que vaya más allá de los encuentros interpersonales y que enseñe a los futuros profesionales la importancia de una ética integral sin importar el medio de aplicación. Es por esto que un curso de ética general con la mediación de TIC-digitales puede abarcar de manera apropiada el saber (la ética) en cuanto a los medios digitales, los cuales son cada vez más necesarios para cualquier profesional; en este sentido el curso se ve mediado por recursos tecnológicos que le permitan al estudiante apropiarse de su realidad y hacer de un foro un encuentro en el que el debate se convierte en un ejercicio de dialogo asertivo, los ejercicios de escritura desde la reflexión permiten evidenciar posturas y argumentos que son fundamentales en el discurso de un profesional y la interacción (debidamente registrada) con el contexto próximo permite hacer visible al estudiante como futuro profesional en formación.
En este orden de ideas, la ética como saber enseñable o propio de
discusión en un ambiente de formación profesional, se hace presente y necesaria en todo momento, razón por la cual su discurso entra en una obligada y constante actualización para poder crear un espacio de adaptabilidad a los profesionales sin perder el rigor y la importancia que ha mantenido a lo largo de los años, convirtiéndose en un estandarte personal y profesional que caracteriza la educación humanizadora y transformadora de la universidad; desde la cual se busca que todo ser humano cree lazos entre los diferentes saberes, en un diálogo que se convierta en eje transversal para un cambio social fundamentado en el respeto por el otro. Es necesario, de igual manera, reconocer que este saber resulta fundamental en todas las demás ciencias del hombre, esto a razón de su constate deseo de cambio y avance en relación a la ciencia y a la tecnología, la cual se pone al servicio del mismo al procurar no atravesar las normas básicas del cuidado sí, y es en este punto donde la ética forma a los profesionales para que hagan de su saber, habilidad y práctica un ejercicio de servicio y no de abuso, es decir, plantear la manera en la que no se trasgredan los derechos fundamentales por sobre los intereses particulares o económicos. Este tema es de crucial importancia en nuestra sociedad, ya que los avances van tan a prisa que puede llegar a confundirse el saber que está al servicio del ser humano por el poder que da la ciencia al ser humano para ser aplicada en sí misma y en la naturaleza, generan un desorden y una capacidad de dominio no natural o lógico para la humanidad.
Con esta descripción en prudente y necesario plantear
que este curso está dirigido a todas las personas en formación profesional y que, como todo ser humano, se desenvuelven en un ámbito social, en el que la escucha y el dialogo asertivo hacen parte de las herramientas clave para el respeto del otro, lo otro y de ellos mismos. De igual manera estas personas deben asumir de manera critico reflexiva su actuar en el mundo y la relación que crean con su entorno, teniendo presente la dimensión ética que se lleva consigo por el ser persona, buscando un apoyo en los elementos teóricos que pueden darle fuerza a sus argumentos. Es por esto un requisito que el estudiante tenga capacidad crítica, argumentativa y propositiva para analizar diversas situaciones humanas desde los fundamentos de doctrinas éticas, argumentas su postura con claridad y coherencias, y por ultimo plantear propuestas reales para cambios de impacto que sirvan a un colectivo. Por último y no menos importante es prudente plantear que el trabajo está dividido en tres módulos: 1. Fundamentos de la ética, 2. Estructura del juicio moral y formación de la conciencia y 3. Relación de la ética con otros saberes; los cuales plantean el manejo de conceptos que se van hilando con el transcurrir del curso, algunos de estos son: ética, moral, moralidad, ámbitos normativos, persona, libertad, autonomía, voluntad, conciencia, trascendencia y contingencia, bondad, maldad y felicidad, bioética, democracia, pluralismo, responsabilidad civil, derechos humanos, entre otros.
Curso: Ética general
Docente: María Paulina Bobadilla González Programa académico: Centro de Humanidades