LA INTERPELACIÓN

El verbo interpelar tiene su raíz etimológica en el vocablo latino interpellāre.

De acuerdo a lo señalado por la Real Academia Española (RAE) en la
primera acepción del término, el concepto hace referencia a interrogar a
un individuo para que brinde determinadas explicaciones o a compelerlo a
cumplir una obligación. https://definicion.de/interpelar

Entonces, se puede señalar que la INTERPELACIÓN es el acto de interrogar a

un Ministro de Estado, por parte de los miembros del Poder Legislativo
(Diputados al Congreso de la República), con la finalidad de hacer valer la
responsabilidad política en que pudo haber incurridos un Ministro de Estado.
Siendo entonces la interpelación, una de las atribuciones que le confiere la
Constitución Política de la República, de conformidad con lo establecido en
el Artículo 165, inciso j) y un derecho que le asiste a los diputados, de
conformidad con lo normado en el Artículo 139 de la Ley Orgánica del
Organismo Legislativo.

Al momento de que el Ministro de Estado es citado por el Congreso de la

República, para ser interpelado, éste debe de acudir a la citación, siendo
ésta obligatoria, de conformidad con los Artículos 168 y 199 de la
Constitución Política de la República de Guatemala y 139 de la Ley
Orgánica del Organismo Legislativo. Las únicas causas por las cuales puede
excusarse un Ministro de Estado de comparecer a una interpelación, es: a)
Cuando se encuentre con problemas de salud y b) Cuando al momento de
ser citado, se encuentre fuera del país. En tales casos, deberá de
reprogramarse la fecha para llevarse a cabo dicha interpelación. Artículo
140 de la Ley Orgánica del Organismo Legislativo.
El desarrollo de la interpelación, así como los efectos que produce dicha
interpelación, se encuentran regulados en los Artículos 166 y 167 de la
Constitución Política de la República de Guatemala, y los Artículos del 141
al 145 de la Ley Orgánica del Organismo Legislativo.

ESQUEMA DEL PROCESO DE INTERPELACIÓN