El yo desde diferentes perspectivas la hegeliana: el Yo no es vinculado a la actividad de la razón
humana, a la iniciativa, a un propósito de investigación, &c.
Concepto central de numerosos sistemas idealistas que presentan Algunos pensadores burgueses ven en el Yo al “censor” de las el sujeto en calidad de factor primario, activo y ordenador. En inclinaciones animales espontáneamente surgidas, al burócrata que tales sistemas, el “Yo” se entiende como portador, por completo se ha introducido en el hombre y que ha colocado en cualquiera de independiente, de las particularidades anímicas. A partir sus vivencias las etiquetas de “Permitido” y “No permitido”. de Descartes, el concepto de “Yo” estuvo vinculado al problema Desde el punto de vista de algunos filósofos burgueses (por del “principio” en la constitución de los sistemas filosóficos. ejemplo, de ciertos existencialistas) el Yo humano es el más Según Descartes, el principio intuitivo del pensamiento racional, inconsciente dispositivo del individuo. El marxismo considera que el “Yo”, pertenece a la substancia pensante. Hume, que rechazaba la personalidad humana se halla determinada en última instancia toda substancia, reducía el “Yo” a un “haz” de percepciones. por el conjunto de todas las relaciones sociales en tal o cual grado En Kant, el “Yo” puro, contrapuesto a lo empírico individual, de su evolución. Del grado de desarrollo de las relaciones sociales aparece como unidad trascendental de la apercepción y como y principalmente de las relaciones de producción portador del imperativo categórico. Fichte cree que el “Yo” es un materiales dependen no solamente la actividad del hombre sino principio absolutamente creador, el cual se presupone a sí mismo asimismo el grado de evolución de su autoconciencia, el diapasón y presupone también todo lo existente como el no-” de sus actos trazados con antelación, la riqueza del Yo. El Yo”. Hegel, como idealista objetivo, refutó esos intentos de partir concepto de Yo se utiliza también como sinónimo del del “Yo”, pero lo interpretó como unidad pura de la de conciencia. autoconciencia objetiva. Al “Yo” se le asigna un carácter absoluto en las novísimas tendencias idealistas subjetivas (entre otras, Centro espiritual de la personalidad, de la individualidad humana, el empiriocriticismo, el neopositivismo y el existencialismo). La que mantiene una actitud activa hacia el mundo y hacia sí misma. forma extrema de la concepción idealista subjetiva del “Yo” se da El “yo” es propio del hombre que controla él mismo sus actos y es en el solipsismo. Freud biologiza al hombre y lo desintegra en capaz de desarrollar la iniciativa en todos los aspectos. Al “Yo” y “super-Yo”. A la interpretación irracionalista del “Yo”, el interpretar el “yo” como principio ideal, las concepciones marxismo contrapone la concepción materialista de hombre. idealistas no advertían la base activa histórico-concreta del “yo” Viendo la esencia del “Yo” humano exclusivamente en las humano. A menudo, este problema dichas concepciones la relaciones sociales, el marxismo demuestra que el hombre (la planteaban como el problema del punto de partida de la persona) corona, precisamente, el desarrollo de toda la naturaleza construcción de los sistemas filosóficos. Según Descartes, el “yo” porque es el creador único de sus relaciones sociales, de toda la se manifiesta como lo que pertenece a la substancia pensante, cultura material y espiritual. como principio intuitivo del conocimiento racional, afianzando así su propia independencia. El punto de vista del individuo aislado y Concepto filosófico que designa al sujeto de actos previamente la contemplación conducían en el marco del idealismo trazados, es decir, de actos tales en los que el individuo se da su al solipsismo, y en el del materialismo metafísico, a la reducción propia respuesta y por los que asume responsabilidad. del hombre al nivel de objeto pasivo, que se subordina al curso Comparemos estas dos expresiones: “Yo pienso” y “Se me vino a exterior de la historia. La filosofía clásica alemana renunció a la la mente (se me ocurrió) esta idea”. En ambos casos se trata sin interpretación psicólogo-individualista del “yo”, propia duda de algo subjetivo, de algo que tiene lugar en mi cabeza y no del empirismo inglés. Pero separó del hombre social viviente el en el mundo exterior. En la primera expresión, sin embargo, se “yo”, convirtiéndolo en “sujeto transcendental”. Fichte sostiene tiene en cuenta un acto del que el individuo mismo es el iniciador; que tal “yo” es la substancia, principio creador absoluto que no en el segundo, en cambio, se trata de un estado que el individuo supone sólo a sí mismo, sino también a todo lo existente como su experimenta, por el que pasa. Los sistemas filosóficos que “no-yo”. El idealismo objetivo, que desarrollaba la dialéctica, estudian el problema de la actividad de la conciencia conceden interpretaba la esencia social del “yo” humano como fuerza gran atención a la categoría de Yo. Fue esbozada por vez primera enajenada, que está por encima de los hombres concretos, como por Descartes, quien veía en la actividad del pensamiento razón mundial (Hegel). El irracionalismo reprodujo la sensación cognoscente la manifestación superior y más completa del de la personalidad en la sociedad burguesa que tropieza con el individuo, de su libre voluntad. Posteriormente fue desarrollada en hecho de que en ella se niega el “yo”. Pero el punto de vista la filosofía idealista alemana. Según Kant el Yo es el sujeto de irracional sobre el individuo no hace más que perpetuar la actos que pueden ser incriminados al individuo. Partía de que no situación de enajenación. El freudismo expresó la desintegración es posible juzgar al hombre por las acciones que realiza en un de la personalidad bajo el capitalismo y la biologización de sus tribunal moral, de que no se peca contra la conciencia, así sea impulsos como estado de sumersión del “yo” en “ello” (reino de involuntariamente o por desconocimiento. Al examinar los las inclinaciones ciegas), y la percepción desfigurada por el problemas del Yo Hegel fue el primero en tratar de situarse en un individuo de su propia esencia social, como resultado del control terreno histórico, aun cuando, desde su punto de vista, la historia que ejerce el “super-yo”, hostil a él. En las formaciones de clase no es más que el proceso de desarrollo de la idea absoluta. En su antagónicas, la desintegración y la enajenación de la actividad opinión no es posible definir el Yo de manera abstracta, ya que conducen en efecto a que el individuo se despersonifique, pierda depende del grado de la autoconciencia moral, del nivel de su “yo”. Por eso, la base de la supresión de las concepciones falsas evolución de las relaciones espirituales en este o el otro período del “yo” es la lucha real por el afianzamiento del hombre como histórico. En la trayectoria de la historia se va ampliando la esfera artífice de las relaciones sociales y de las normas de vida de la de la responsabilidad del hombre, el círculo de los actos sobre los sociedad. La manifestación más plena y libre en cada hombre, que se tiene conciencia, que se hallan bajo el control de nuestro como sujeto activo, de su “yo” humano se hace posible en la Yo. No podemos juzgar al griego del período homérico por lo que sociedad comunista, en las condiciones del desarrollo integral del se juzgaría a un cristiano o a un hombre que vive en una sociedad individuo. en la que existen relaciones jurídicas desarrolladas. La interpretación de la categoría de Yo en la filosofía burguesa contemporánea representa en esencia un paso atrás con respecto a