LA NOCHES DEL ALMA

El camino de cada uno es único y algunos toman los pasos en un orden diferente y, a
veces, simultáneamente, estancarse o avanzar muy rápido. 

Algunos experimentan visiones, éxtasis, voces, éxtasis y otras experiencias místicas y

psíquicas, mientras que la mayoría recorre un camino menos exuberante pero que, sin
embargo, llega al mismo destino: la unión con Dios e incluso más allá de esa unión. 

No debemos intentar encajar o forzar nuestra experiencia en el modelo de otra persona

o invalidar nuestros descubrimientos porque no se ajustan a los modelos establecidos. 

Muchos de los desafíos en el camino vuelven una y otra vez de forma cíclica hasta que
se completa el viaje. 

Lo que se requiere de nosotros es emprender un camino desconocido con una fe que

aumenta con la experiencia. Sin embargo, dejando de lado esta advertencia, los
consejos de los que ya han andado el camino pueden ser de gran utilidad en nuestro
camino de regreso a casa.

Las cuatro noches por las que pasa el alma

- mapa del camino contemplativo de San Juan de la Cruz -
Activo significa lo que podemos hacer,
pasivo significa lo que solo Dios puede hacer.

1. Noche activa de los sentidos: desprendiéndonos de las imperfecciones

y distracciones mundanas para unirnos a Dios. (Bernadette Roberts)

Fallos de principiantes: vanidad, alardear de logros espirituales, críticos con el camino

de otros, tristeza cuando otro progresan por delante de ellos, sentirse especial, sentirse
sabio, querer ser santos en un día, exagerar las prácticas espirtituales descuidando los
deberes, creen que se pueden autoguiar en el camino espiritual porque saben más que
los demás, falta de obediencia y pereza hacia el guía espiritual, dudas hacia el guía
espiritual, desear un método más claro espiritual (San juan de la Cruz)

2. Noche pasiva de los sentidos: periódicamente Dios parece retirar su

presencia y así nos sentimos espiritualmente vacíos, secos o áridos. Este es en realidad
el comienzo de la contemplación infundida o la presencia de Dios en un nivel más
profundo, que todavía tenemos que apreciar. (Bernadette Roberts)

Desmantelar nuestros planes egoístas para la felicidad lo que marca el final de las
consolaciones ("golosinas espirituales") ; El final de la luna de miel con Dios y sentirse
“bien, en calma” en el camino espiritual sin hacer nada ; Vaciamiento de lo que no hace
falta ya en tu vida, la honestidad con uno mismo se hace presente y su consiguiente
dolor; Aceptación también de lo bello y nuevo que aparece en tu vida, aunque no te lo
esperes, aceptar con humildad lo bello y lo feo.
 Las 3 señales de esta noche:

1 – Aridez: sequedad, disminución de la satisfacción espiritual.

2 - Miedo a volver a caer en el camino como Dios parece haberlos dejado. Miedo de
haber ofendido a Dios y ahora estamos siendo castigados. Sin embargo, Dios ahora
ofrece una relación más íntima y madura con él. El bebé está siendo destetado de las
"bondades espirituales" y está aprendiendo una fe más sustancial.

3 - Incapacidad para practicar la meditación discursiva (reflexiva)

Incapacidad para reflexionar sobre el significado de la enseñanza y el ejemplo de guías
espirituales.

Trampas que pueden surgir:

Las tentaciones sexuales suelen ser una reacción a la aridez. La necesidad de escapar

al placer, de sentir algo. También puede resultar en comer en exceso o en
entretenimiento sin fin.

La ira como reacción a la pérdida de control. Ver todos los planes espirituales de uno

llegar a la nada. Deseo de culpar a Dios

Confusión como reacción a perder nuestro sentido de seguridad. El viaje espiritual es

un movimiento hacia lo desconocido que intentamos controlar. ¡Pero Dios tiene otros
planes!
"El camino espiritual consiste en hacer las cosas de Dios" Thomas Keating

Mirar atrás y volver al camino anterior, no aceptando y resistiendo.

3. Noche activa del Espíritu: desprendiéndonos de las bondades

espirituales (consuelos)
y el esfuerzo por ser más pasivos ante la presencia de Dios; el reconocimiento de que la
presencia permanente de Dios está por debajo o más allá de todo pensamiento y
sentimiento. (Bernadette Roberts)
La voluntad de profundizar nuestra fe sin depender de recibir experiencias espirituales.

4. Noche pasiva del espíritu: un golpe permanente e irreversible de Dios

que es el alejamiento del centro del yo o del ego, el encuentro con un vacío terrible en
nosotros mismos, un agujero negro, oscuridad y nada. Donde las experiencias de la
segunda y tercera Noche se superponen, y la primera y la cuarta están claramente
marcadas. (Bernadette Roberts)

Por un tiempo cesan las experiencias místicas y termina el sentimiento de estar

conectado con Dios.
Este período es la transición de la personalidad humana a la realización de nuestra
inmortalidad y divinidad. Un declive del ego con sus habituales distracciones de la
mente, condicionamiento cultural y orgullo espiritual. Sin embargo, el sentido de
egoísmo, el "yo soy" todavía permanece. Un curso intensivo de humildad y purificación
de una secreta satisfacción de ser destinatario de los favores de Dios. En el budismo, el
último grillete que hay que soltar antes de que nos liberemos del ciclo del nacimiento y
la muerte es el orgullo espiritual sutil.

"Hermano mío, eres parte de Dios y parte de mí. Cuando por fin hayas mirado el
fundamento del ego sin encogerte, también habrás mirado el nuestro. Vengo a ti del
Padre para ofrecerte todo de nuevo. No te niegues para mantener oculta una piedra
angular oscura, porque su protección no te salvará. Te doy la lámpara y te acompañaré.
No emprenderás este viaje solo. Te llevaré a tu verdadero Padre, que tiene necesidad de
ti, como yo. ¿No responderás con alegría a la llamada del amor? "
Un curso de milagros T-11.in.4.

Tentaciones que necesitan purificación: (Thomas Keating)

Autoimagen glamorosa, por ejemplo, el profeta, mártir, hacedor de maravillas, víctima,

maestro iluminado, líder carismático. El servicio es el sello distintivo de un verdadero
maestro, no el interés propio o la satisfacción.

"El viaje espiritual es una serie de disminuciones del yo" (Thomas Keating)
"Ser perfectamente pasivo - pertenecer perfectamente a Dios - es el más difícil de los
logros humanos" (Bernadette Roberts)

Los frutos de la Noche del Espíritu:

(de Thomas Keating)

1. Libres de la tentación de los roles glamorosos debido a nuestros dones

espirituales.
2. Libertad del dominio de la emoción.
3. Purificación de nuestras imágenes inmaduras de Dios, de nuestra infancia y grupo
de compañeros.
4. Dios ahora es visto como infinito, inexpresable e inefable. Ahora podemos
permitir que Dios sea Dios sin saber qué es eso.
5. Un anhelo de dejar ir nuestros bloqueos hacia Dios - nuestro egoísmo restante
para que podamos "vivir una vida ordinaria con un amor extraordinario"
6. Preocupación compasiva por todos con desapego
7. No deseo cambiar a la gente
8. Una actitud no posesiva hacia todo.
9. Ver más allá de las apariencias al espíritu de Cristo dentro de todo
10. Trascendiendo el mundo sin dejarlo
11. Vivir nuestras vidas con la convicción invencible de la unión continua con Dios,
viviendo por el "rayo oscuro de la fe pura".

(de Bernadette Roberts)

1. Descubrimiento de una unión existente con Dios hecho posible por la herida
infligida en la Noche Oscura del Espíritu.
2. Total libertad de voluntad - "Ama a Dios y haz lo que quieras" - Abriéndote a
todas las opciones de la vida y aceptando nuestra existencia tal como es.
 3. Nuestro esfuerzo activo por encontrar a Dios es reemplazado por una pasividad
activa, porque solo Dios conoce el camino que debemos seguir hacia Él.

Las 5 fases de la vida unitiva (unión transformadora)

como la vive Bernadette Roberts

"El Padre y yo somos uno" Jesús (Juan 10:30)

1 - Noche oscura del espíritu (pasivo)

Una repentina caída del ego y su autocontrol. Necesita someterse a un poder
superior. Una poderosa destrucción del egoísmo. Un viaje a las profundidades de la nada
hacia Dios.
El yo del ego es reemplazado por "YO SOY"

y lo que somos en este momento. Así, toda la búsqueda intelectual, incluidos los

esfuerzos a menudo agonizantes por determinar la voluntad de Dios, no es más que el
rechazo a aceptar el momento presente y nuestro estado presente. El secreto de la vida
unitiva es la capacidad de la gracia de vivir en este silencio pasivo de voluntades, un
silencio que siempre está aquí y ahora, y siempre es uno con Dios. La verdadera
comunicación con Dios es el silencio absoluto y total; no existe una sola palabra que
pueda transmitir esta comunicación. " El secreto de la vida unitiva es la capacidad de la
gracia de vivir en este silencio pasivo de voluntades, un silencio que siempre está aquí y
ahora, y siempre es uno con Dios. La verdadera comunicación con Dios es el silencio
absoluto y total; no existe una sola palabra que pueda transmitir esta comunicación. " El
secreto de la vida unitiva es la capacidad de la gracia de vivir en este silencio pasivo de
voluntades, un silencio que siempre está aquí y ahora, y siempre es uno con Dios. La
verdadera comunicación con Dios es el silencio absoluto y total; no existe una sola
palabra que pueda transmitir esta comunicación. "

2 - Paz encontrada.
La paz es inicialmente oscura y seca, pero también profunda y reparadora. Un alivio
bienvenido del dolor de la fase 1. Con el tiempo, esta paz se convierte en una puerta de
entrada a Dios y al gozo. Se requiere trabajo para retener esta paz, para volverse pasivo
hasta este punto de quietud, para traer todos los problemas de regreso a esta paz
interior donde se disuelven.

3 - Silencio interior continuo.

Llegando a la cima de la montaña unitiva. Gran fuerza, poder, energía y amor que
conducen a una generosidad desinteresada.

4 - Fase activa - el camino al Calvario

Flujo continuo de pruebas exteriores, pruebas, persecuciones y sufrimientos. El único
refugio es Dios. Camina solo por el camino con Dios. Cese del juicio. Desarrollo de una
mente abierta.

5 - Fin final del egoísmo o del "yo soy" (el ego ya ha cesado).
Un alejamiento del "YO SOY" o sentido del egoísmo. El yo unido a Dios termina. Perfecto
silencio interior con cese de la autoconciencia. Realidad no-yo, no dual. Ninguna persona
se fue y por lo tanto ningún Dios personal. Dios solo lo es.

Las palabras no pueden describir esta realidad no dual. "Decimos 'Dios es' y luego
dejamos de hablar, porque en ese conocimiento las palabras no tienen sentido", de Un
curso de milagros ® Libro de ejercicios p.3l5 / p.323

El camino de la mística
- Santa Teresa de Ávila -
Sus 4 etapas de oración que conducen a niveles cada vez más profundos de absorción
con Dios

1 - Recuerdo infundido
Un despertar misterioso, un soplo de aire fresco, la gracia de Dios, no domina sino que
es como un dulce perfume. Indica el final de la Noche de los Sentidos. La memoria y la
imaginación todavía pueden entrometerse y perturbar.
2 - Oración de silencio
Más absorbente que una con un deseo acompañante de prolongar el estado. Un estado
de silencio interior en el que la voluntad es una con Dios.
3 - Oración de Unión
Una profundización de nivel donde se suspenden la memoria y la imaginación. La
autorreflexión (comentario) todavía está presente.
4-
Cese de la oración de unión plena, memoria e imaginación. La voluntad es absorbida
por Dios. Sin autorreflexión.

“Resultó que santa Teresa nunca arrojó luz sobre mi vida interior, pero entonces ella era
una mística y yo un contemplativo común. A mi modo de ver, nunca se sabe dónde va a
estar la mística al día siguiente; su camino, si es que tienen uno, es difícil de precisar y
ciertamente imposible de seguir ". (Bernadette Roberts, que experimentó las dos noches
pasivas seguidas. Consulte la advertencia sobre mapas espirituales al comienzo de este
artículo).

Mapa tradicional cristiano de 3 etapas

- San Dionisio 500 AD-

1 - Purgante : purificación de las formas más groseras de egoísmo y egoísmo.

2 - Iluminativo - el irrumpir en la persona de mayores percepciones y entendimientos
espirituales
3 - Unitivo - unión con Dios

"Si yo hubiera sido quien trazara el camino contemplativo original, nunca hubiera

pensado en incluir una etapa iluminativa porque, desde el principio para terminar, la vida
interior es una iluminación permanente; como etapa discreta, no la encuentro auténtica
ni necesaria ". (Bernadette Roberts)
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