Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Con la caída del Imperio Romano, las ciudades se vuelven inseguras y poco atractivas para vivir, la
calidad de vida cae. Con una población diezmada, por el doble y constante ataque de germanos y
musulmanes, la gente comienza elegir una vida más rural, organizada por un sistema feudal. El cual
esencialmente consiste en ciudadelas amuralladas, con un sistema económico interno, de proteccionado
hacia arriba y hacia abajo.
La religión se vuelve algo importante en la vida de las personas, un refugio y respuestas a sus pesares. Y
casi sin darse cuenta una de las pocas cosas que tienen en común los habitantes de la actual Europa.
Con este salvavidas que va a resultar la religión, se va a unificar este mundo fragmentado, con una
situación política inestable y de gran movimiento.
El resurgimiento del cristianismo hace que más gente se una a la iglesia de forma más comprometida, y
así como surgían ciudadelas encabezada por nobles, también surgen órdenes religiosas que fundan
ciudades pero abocadas al servicio de la fé, llamadas Monasterios.
…” los monasterios fueron centros culturales y económicos y, al igual que los castillos feudales dieron
lugar a la formación de nuevos asentamientos”...”los monasterios eran unidades relativamente aisladas,
pero como se basan en los mismos valores fundamentales y en el mismo modo de vida, formaron una red
de lugares análogos.” (Norberg Schultz, C.Arquitectura occidental.pag79)
*****
La primera y de las más importantes órdenes monásticas fue la de los Benedictinos, fundada en el 529,
de hecho “Aunque ciertas comunidades surgieron espontáneamente, la mayoría adoptó la regla de San
Benito de Nursia y basó el proyecto de sus monasterios en el de Monte Cassino..” (Roth,L. Entender la arquitectura-
pag 290).
De hecho el mismísimo Carlomagno se va apoyar en la red de monasterios benedictinos para “gobernar
su territorio y proporcionar una influencia estabilizadora a sus dominios” (Roth,L. Entender la arquitectura-pag 293).
El ideal de esta “Ciudad fortificada de Dios”, se plasma en el diseño encontrado en el Monasterio de Saint-Gall,
uno de los documentos más detallados y antiguos que se conservan de la Edad Media. Y en este se puede ver un
conjunto de edificios organizados alrededor de una gran iglesia orientada oeste- este, claramente longitudinal, con
el ingreso y remate bien marcados , se podría decir que equilibrados. Pegado a esta, formando el centro del
conjunto está el claustro.
También posteriormente con el auge del cristianismo, la aparición de reliquias, las cruzadas a tierra santa
y la aparición de lugares santos, surgen peregrinaciones cada vez más masivas a aquellas iglesias,
abadías, monasterios donde se conservan estos tesoros religiosos. Esto lleva a que se armen rutas de
peregrinación, conectando a todos estos edificios religiosos, aún cuando los monasterios idealmente son
lugares aislados del mundo exterior. Por eso es que se dan una gran proliferación de construcciones que
van a crecer en escala para albergar cada vez más fieles. Y en paralelo se da una cierta estabilidad que
permite el crecimiento del comercio gracias al flujo de gente que peregrina estas rutas. Las mayores rutas
y construcciones se desarrollan en Francia.